Hora & Losada Clases altas y medias en la Argentina

CLASES ALTAS Y MEDIAS EN LA ARGENTINA, 1880-1930. NOTAS PARA UNA AGENDA DE INVESTIGACIÓN Author(s): ROY HORA and LEANDRO LOSADA Source: Desarrollo Económico, Vol. 50, No. 200 (ENERO-MARZO 2011), pp. 611-630 Published by: Instituto de Desarrollo Económico y Social Stable URL: http://www.jstor.org/stable/41408183 . Accessed: 13/05/2013 16:48 Your use of the JSTOR archive indicates your acceptance of the Terms & Conditions of Use, available at . http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp

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2011) vol.50,№200(enero-marzo Desarrollo Económico,

NOTAS Y COMENTARIOS CLASES EN

LA

NOTAS DE

ALTAS

Y

ARGENTINA, PARA UNA

MEDIAS 1880-1930. AGENDA

INVESTIGACIÓN*

ROY HORA** Y LEANDRO LOSADA*** El alcance y los rasgos más salientes de las grandes transformaciones económicas y sociales experimentadaspor la Argentina(en especial su región pampeana) entre1880 y 1930 son conocidos y han sido abordados en numerosos la estudios históricos.La recomposiciónpoblacional generada por la inmigración, son económicoydemográfico, social, el crecimiento complejizaciónde la estructura algunos de los temas que han concitadomayorinterés,y sobre los que se vertebró de ese entonces1. todo un relatode la Argentina sociales y,más aun,en las convencionesyen las conductas Las transformaciones de las personas que habitaronese mundo,sinembargo,no recibieronuna atención sosteniday continuada,capaz de sentarlas bases de uncorpus de investigaciones la fisonomíade la sociedad de las décadas del que permitaconocer en profundidad los la constituyen pasaje del sigloXIXal XX.Una excepción parciala esta afirmación en de los inserción la en el extranjeros el y proceso inmigratorio trabajoscentrados medio local. A partirdel estudio de un amplioabanico de problemas(las pautas los estudios la sociabilidad,las tensionesy mutacionesidentitarias), matrimoniales, consagrados a analizarunfenómenocuya escala e impactosobre la sociedad nativa notuvoparangónen otrospaíses receptoresde inmigrantes europeos de ese tiempo, han ofrecidoevidencias y claves interpretativas productivaspara pensar los rasgos las investigaciones A su turno, de la sociedad crecidaal calordel aluvióninmigratorio2. su atenciónhacia consagradas a analizarla historiadel mundodel trabajodirigieron de modos los lucha las formasde organizacióny interpelaciónpolítica gremial,y *Losautores deesteensayo. a unaversión deLilaCaimari loscomentarios previa agradecen " Universidad ar Nacional deQuilmes/CONICET. [email protected]. *** ar com. ovia. 'osadal@inf deBuenos Aires/CONICET. delaProvincia Nacional delCentro Universidad 1Ejemplares socialdelaArgentina, Estructura Germani: deGino sonlostrabajos alrespecto ypioneros a la tradicional Delasociedad enunaépocadetransición. Buenos 1955, Aires, ysociedad yPolítica Raigal, Carlos véaseJuan enperspectiva, 1962.Paraunareciente Buenos demasas, sociedad puesta Paidós, Aires, de Balance 1910-2010. Rüssel enRoberto delasociedad "Transformaciones (ed.):Argentina Torre: argentina", 2010. Buenos unSiglo, Taurus, Aires, 2Unasíntesis enlaArgentina, delainmigración Historia Devoto: enFernando sobre estahistoriografía, 2003. Buenos Sudamericana, Aires,


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pero, asimismo,hacia las actividades culturalesy las instanciasde sociabilidad, alumbrandoen consecuencia no sólo la experienciapolíticasinotambiénaspectos de la identidad,los patronesde interacciónsocial y los consumos significativos culturalesde las clases trabajadoras3.Estas últimasdimensiones,además, fueron social yculturaldel cambio de siglo,que objetode trabajospionerossobre la historia delinear mejorel perfilde los sectores populares crecidos en esas permitieron décadas4. Finalmente, otrasáreas historiográficas, como porejemplola dedicada a la historiade la familia, tambiénhancontribuido al conocimientode rasgos cruciales de la sociedad de ese período5. Contodo,las características sectoresde la sociedad ymutacionesde importantes crecidoso transformados en las décadas de cruce de los siglosXIXyXXhanrecibido muyescasa atención.Síntomay consecuencia de ciertapostergaciónde la historia social,son pocos los trabajosque hanfocalizadosu atenciónen las elitesy las clases medias. Los rasgos de estos grupos,sus pautas de consumo,sus modos de vida, siguen presentando puntos oscuros y numerosos interrogantes(el balance, decididamente,es más negativopara el caso de los más elusivossectoresmedios)6. El propósitode este trabajoes, precisamente, esbozar algunas hipótesisacerca de las circulacionesculturalesy las influenciasrecíprocasentrelos estilosde vida y las convencionessociales de los sectoresmediosy los gruposencumbrados.Estas cuestiones, relevantesen sí mismas como objetos de indagación historiográfica, tambiénresultande interéspor cuanto ofrecenuna vía de entrada para explorar cuestionesmás amplias,referidasa las grandes coordenadas de las relacionesde clase de una sociedad en acelerada transformación. En las páginas que siguen,el lectorencontrará, antes que resultadosempíricosnovedosos,reflexiones, preguntas y conjeturassobre las relacionesentrelas elitesy los sectoresmediosen formación, nacidas en granmedida en el curso de una exploraciónque tomaporeje al primero de estos mundos sociales7. Por tanto,este trabajo debe ser entendidocomo un acercamientoiniciala este temaque apunta,más que a ofrecerrespuestasdefinitivas, a motivarla discusiónsobre ejes y problemashasta el momentopoco explorados. 3Véase, Ricardo Falcóni: cuestión étnica social en porejemplo, "Izquierdas, régimen político, ycuestión Universidad Nacional delLitoral, 1890-1912", Ruth Anuario, Rosario, Thompson: Argentina, 1986/7, pp.365-389; "The Limitations ofIdeology intheEarly Labour Movement: Anarchism intheTrade Journal of Argentine Unions", Latin American 16(1984),pp.81-99; DoraBarrancos: Laescenailuminada. Ciencias Studies, paratrabajadores, 1890Buenos PlusUltra, 1996;JoséM.Aricó: Lahipótesis deJusto. 1930, Escritos sobre elsocialismo Aires, en América Buenos Suriano: Latina, Cultura enBuenos Aires, Sudamericana, 1999;Juan Anarquistas. ypolítica Aires Buenos A la conquista Camarero: 1890-1910, de la claseobrera. Aires, Manantial, Los 2001;Hernán comunistas deltrabajo enlaArgentina, 1920Buenos 2007. yelmundo 1935, Aires, XXI, Siglo 4Adolfo Prieto: Eldiscurso criollista enlaformación delaArgentina Buenos moderna, Aires, Sudamericana, Romero Gutiérrez: Sectores 1988;LuisAlberto cultura Buenos Aires enla yLeandro populares, ypolítica. Buenos 2007. Aires, XXI, entreguerra, Siglo 5Susana Torrado: Historia delafamilia enlaArgentina Moderna Buenos Ediciones Aires, (1870-2000), delaFlor; JoséLuisMoreno: Historia delafamilia enelRíodelaPlata, Buenos 2004. Aires, Sudamericana, 6Paraunbalance delosestudios sobre lossectores reciente véaseEnrique Gauguin: "Laformación medios, histórica de laclasemedia enArgentina. Unaaproximación enApuntes de Investigación del bibliográfica", X:11(2006), CECYP, pp.228-239. 7Nospermitimos remitir alrespecto a RoyHora:Losterratenientes delapampa Unahistoria argentina. social Buenos XXI 1860-1945, Losada: Aires, Laaltasociedad ypolítica, en Iberoamericana, 2005;Leandro Siglo la Buenos Aires de la BelleÉpoque. estilos de vidae identidades, Buenos Sociabilidades, Aires, SigloXXI 2008. Iberoamericana,


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I. La alta sociedad En los años que correnentrela llegada de JulioRoca a la presidenciay el Centenario de 1910 la alta sociedad de Buenos Aires experimentóintensas En el curso de esas tresdécadas, el círculode mayorstatusde la transformaciones. sociedad, aquel integrado por familiasque pertenecían a las elites políticas, económicas yculturales,viohondamenterenovadossu estilode vida,su identidady su composiciónsocial. Las mutaciones en el estilo de vida tuvierondos tonos característicos:la europeizaciónde las costumbresy el auge del consumoconspicuo. La importancia causas. Antetodo,las fuerzas estos dos fenómenosreconocedistintas que adquirieron como local nivel a internacional, tanto que crearon que marcarona la propiaépoca, unescenario muyfavorablepara el despliegue de nuevas y más sofisticadaspautas de vida y consumo.La prosperidadagroexportadoraque caracterizóal períodoque correhasta la PrimeraGuerraMundialdotó a los integrantesde los sectores más poderosos del país de fortunase ingresos de una escala desconocida para de unsólido régimenpolíticodelineó generacionesanteriores.A su vez, la formación unescenario de estabilidadinstitucional yeconómica que, salvo en los difícilesaños de la Crisisdel Noventa,resultópropiciono sólo para la acumulaciónde riquezasino de una actitudante la vida más hedonistay más mundana. tambiénpara el triunfo Este período de estabilidad política, expansión económica y sostenido con una crecimientode las fortunasargentinascoincidió,en el plano internacional, distancias las acortó economía ytendió la de mundial,que etapa de veloz integración del lados ambos entre los de través a y económicos trópicos y culturales, puentes, revolución la a la estabilidad económica, la a y Atlántico. y Así,gracias prosperidad en los mediosde transporte y de comunicación,la eliteargentina,hasta entoncesun -mucho más humildeque sus grupode costumbresprovincianasy modestafortuna o chilenas o peruanas- pudo escalar posiciones homologasbrasileñas mexicanas, más prósperasde AméricaLatina, en una de las clases propietarias hastaconvertirse consumos de que hasta entonces habían disfrutar modas, pasatiempos y y permanecidoporfuerade sus posibilidades8. Las clases altasargentinasnoasistieron pasivamenteal desplieguede las fuerzas del sigloXIX de las décadas del tránsito la marcha en globalización gran por puestas consumo el conspicuo arraigaroncomo al XX.La europeizaciónde las costumbresy sus promovieron sociedad la alta en propiosintegrantes nuncaantes porteñaporque activamenteestos fenómenos.Desde ya, la renovadacapacidad de consumode sus estratosmás encumbradoshizo que los incentivospara emulara unas clases altas europeas cuyos patronesculturalesahora aparecían más fácilmentereproducibles conformecrecía la riqueza que brotabade las en nuestromedio se incrementaran los de muchos Ahora aspectos señalados (la estabilidadpolítica,la bien, pampas. de la época, y prosperidadeconómica, la difusióncultural)fueronrasgos generales Rocchi: enFernando 8Síntesis Chimneys deesteperíodo económicas delastransformaciones reciente Press, Stanford Universiy Boom 1870-1930, theExport Years, inArgentina Industrialization during intheDesert. de 1930, a la Crisis De la Conquista de laArgentina. económica Historia Míguez: 2006;Eduardo California, Buenos enelsigloXIX, delaArgentina económica 2008;yRoyHora:Historia Sudamericana, Buenos Aires, 2010. XXI, Aires, Siglo


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europea, en América, portantotambiénimpactaronsobre otraselitesde la periferia Asia y Africa. Una perspectivacomparativasugiere,sin embargo,que la alta sociedad de nuestropaís abrazó la europeizacióny el cambio en las costumbrescon menos ambigüedades y con más decisión que la que contemporáneamenteexhibieron en Asia yAfrica.Para éstas, este proceso en particular muchaselitesde la periferia, altos,pues en esa era en la implicabacostos particularmente muyfrecuentemente de credenciales científicas, se dotaron afirmaron se racistas las y ideologías que tambiénsuponíaaceptardiscursosy practicasque consagraban la superioridaddel hombreblanco y de la civilizacióneuropea, y obligaba a arrojarpor la borda una herenciaculturalque hasta poco antes había sido vista como más antiguay más compleja que la que promovíanlos nuevosdominadoresdel globo9.El caso era más sencillo en las naciones de América Latina,en primerlugar porque sus clases dominantesse reconocíanplenamentecomo herederosde la empresade conquista y colonizaciónque había nacido con el granciclo de expansióneuropea iniciadoen de el sigloXV,y que a comienzosdel sigloXIXse había continuadocon la formación naciones independientes. Dentro de los estados latinoamericanos, la posición de los sectores preponderantesde la Argentinapresentaalgunas peculiaridades, que remitenal lugar que este grupo ocupaba en la sociedad rioplatense. Por una parte, las elites dirigentes argentinas no experimentaron las mismas ansiedades y ambigüedades que afectarona los grupos dirigentesde naciones como Méxicoo Perú, donde la herencia culturaldel pasado indígena aparecía más gloriosa y más vital,o más difícilde ignorar10.Y de modo aún más acusado que en otras sociedades hijas de la conquista española con las que la Argentinacompartíaun mismo legado histórico,desde la revoluciónde independencia había cobrado formauna culturapolítica republicana signada por la movilizaciónpopular y el igualitarismo,que desde el comienzo desterróla posibilidad de que las clases altas encerraranla disputa por el poder en su propio seno. En la Argentina,la participaciónde las clases populares en la vida pública le otorgóa las relaciones políticas y sociales una tonalidad más democrática e igualitariaque la que por entonces imperaba en Chile, Brasil o México11.En la segunda mitaddel siglo, luego de la caída de la república rosista,este fenómenoperdió mucho de su fuerzarevulsiva,pero desde entonces la aceleración del proceso de crecimiento económico que la regiónpampeana venía experimentandodesde la aperturaal librecomercio -en parte porque tuvo lugar en un medio escaso en fuerza de trabajo y muyabierto al talentoinmigrante-contribuyóa una acelerada erosión de las jerarquías sociales heredades de la etapa colonial,y a su reemplazo por otras más propias de una sociedad de mercado. 9C.A.Bayly: TheBirth oftheModern 2004. World, 1780-1914, Blackwell, 10Elcontraste conelcasomexicano verse enMauricio Tenorio-Trillo: attheWorld's Mexico Fairs: puede a Modern ofCalifornia 1996. Nation, Press, Crafting Berkeley, University 11Estascoordenadas hansidoefectivamente resaltadas hanestudiado laselites deesos porquienes Needell: A Tropical BelleEpoque. Elite Culture andSociety inturn-of-the-century Riode países.Cfr. Jeffrey Manuel Vicuña: LaBelle chilena. Alta sociedad de Janeiro, Press, 1987; Cambridge University Époque ymujeres elite enelcambio desiglo, deChile, Nutini: TheMexican An Sudamericana, 2001;Hugo Santiago Aristocracy ofTexas 2004. 1910-2000, Press, Austin, Expressive Ethnography University


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Eneste escenario,dos fenómenoscobraronespecial relieve.A lo largodel siglo cuarto,el país se viohondamenterenovadopor XIX,ycon especial vigoren su último la llegada masiva de inmigrantes europeos. La Argentinase consagró como el país que mayorcantidadde extranjerosrecibióen relacióna su poblacióntotal,bien por como Estados Unidos,Canadá o Australia. encimade otrosdestinosde inmigración las el arribo de oportunidadesde progresoeconómico, extranjerosy Impulsadapor la movilidadsocial se convirtióen una marca indeleble de la nueva sociedad en Ellocontribuyó a acelerarunprocesode complejizaciónde la estructura construcción. social que ya venía cobrandofuerzadesde algunas décadas atrás. El aspecto más estratosde sectores característicode este proceso fuela formaciónde importantes medios,cuya presenciase volviómuyperceptibletantoen la campaña como en las unmotorde renovación ciudades de la regiónlitoral. Así,pues, si la políticaconstituyó de las estructurassociales en las décadas que sucedierona la independencia,en la segunda parte de la centuria el crecimiento económico y el cambio social ydecisivocomo impugnadoresde viejas desempeñaronunpapel no menosprofundo no Estos cambios destruyerona los antiguos grupos jerarquías y prestigios. dominantes,pero sí los obligarona moverseen unescenario en el que, para afirmar su preeminenciasocial, no podían invocarfácilmentesus privilegiospasados, sus serviciosal gobiernode la nacióno a las jerarquíassociales tradicionales. En un medio social de signo más plutocráticoque aristocrático,pues, la preeminenciade la altasociedad local,más que unrasgo inmutabledel ordensocial, debió edificarseen referenciadirectaa los valores de una sociedad republicanay móvil.Acotados de esta maneralos terrenosy los modos en que la clase alta podía del gustoy el consumoconspicuo, además su superioridad,el refinamiento afirmar de motivadospor la búsqueda primerade disfrute y placer,se revelaronespacios o los que aspirabana sumarse la alta de los sociedad, integrantes apropiadospara que a ella,reclamasensu derechoa la eminencia.El cambio en las formasde vida que la en las décadas del cambio de siglono podríaentenderse altasociedad experimentó cabalmentesin situarloen este contexto.Adoptarun estilode vida que expresara cultural (replicandoaficiones poderíoeconómico(a travésdel consumo)yrefinamiento tuvo del las elites de y para reforzar importancia gran ViejoMundo) y gustos propios social una distinguida12. posición legitimar Variasfueronlas dimensionesatravésde las cuales se operóesta transformación. Las mismasexpresan, por lo demás, que la elitenativano fue un simplereceptor inercialde las modas de la época, o un consumidorostentosode aquello que la revoluciónen los medios de transportey el enriquecimiento pusierona su alcance, sino un sujeto activo que generó espacios y aficionespara darse a sí mismoesa pretendidasofisticaciónculturaly un estilode vida que revelaraculturay riqueza al mismotiempo. Entrelas más destacadas sobresalen: el grand toureuropeo; la emergenciade una nuevasociabilidadritmadaporlos rígidoscódigos de la "etiqueta" y alternadaentreclubes como el Jockey(fundadoen 1882) y las mansionesde los barriosque, a comienzos de siglo XX,delinearonel espacio de la clase alta en la ciudad (Retiro,BarrioNorte,y de manera más incipiente,Recoleta); pasatiempos cosmopolitasy refinados,desde el consumo de música lírica(potenciado por el 12Leandro cit. delaBelleÉpoque, Aires enlaBuenos Laaltasociedad Losada:


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atractivodel nuevoTeatroColón inauguradoen 1908) hasta los deportesde armasy de largoplazo, la revalidación los hípicos,estos últimosexpresiónde otromovimiento de todolo referenciado con el espacio rural(durantebuena partedel sigloXIXsinónimo de barbarie)resultante del prestigioalcanzado porla eliteterrateniente pampeana el grupo económicamentepredominantedentrode la alta sociedad- gracias a su del sectoragropecuario13. papel protagónicoen la transformación Sobre estas mutaciones,en consecuencia,cobróformala "aristocracia" porteña de la Belle Époque. Esta noción,clave en las identidadesque dieronformaa la alta sociedad, se entendióentoncesen el sentidoprecisode unestilode vida distinguido, no de un (inexistente)origensocial privilegiado.Con frecuencia,la profundidad de este procesode reconfiguración del gustode eliteha sido menospreciado,al enfatizar la preponderanciade los gestos imitativos, o de ostentaciónvulgar.No obstante,y aunque notoda la alta sociedad se volviósensiblea los consumosculturalestenidos intensas porsofisticados,es claroque las formasde relaciónsocial experimentaron transformaciones. Porúltimo, al compás de la sofisticaciónen el estilode vida,la alta sociedad se volviómás herméticaque en períodosanteriores.Hasta el umbraldel últimocuarto del siglo XIX,las elites nativashabían sido muypermeables a la incorporaciónde "gentenueva".A la alta sociedad se habían integradofamiliasextranjerascon una acomodada (por ejemplo,los comerciantesy profesionales posición relativamente franceseso genoveses que se radicaronen las décadas de 1820 y 1830) británicos, pero también otras fundadas por inmigrantesque escalaron desde posiciones humildes.Así, en el cambio de siglo, encontramosen un mismouniversosocial a apellidoscomo Álzaga, Anchorenay Unzué,poruna parte,yDuggan,Santamarinao Luropor la otra.Mientraslos tresprimerospodían rastrearsus orígenesen la elite hasta el períodocolonial,los últimosrevelanla aperturade la clase alta a los hijos más exitososde la experienciamigratoria de los primeros dos terciosdel sigloXIX.A ellos hay que sumarlesotrosapellidos que tambiénpodríandefinirsecomo gente nueva, pues si bien no lo eran en lo relativoa sus raíces en el país, sí lo fueronen cuanto a su inclusiónen las elites políticas,económicas y sociales porteñas.Nos referimosa algunos linajes del interior, como Roca, Uriburuo Avellaneda, cuyo con las familias emparentamiento porteñastradicionalesse densificóen el cambio de sigloe hizoque la alta sociedad de Buenos Airesdejara de ser uncírculoporteño para adquiriruna estaturamás propiamentenacional14. Hacia el novecientos,este proceso de sucesivas incorporacionesllegóa su fin. La consolidacióndel proceso de organizacióninstitucional del país, la conformación de una elitemás poderosa y refinada,y el gradual cierrede las oportunidadesde ascenso que ofrecíauna economía de frontera en sus fases inicialesdel desarrollo, tornaron más difícilla reediciónde las vertiginosasexperienciasde movilidadsocial que habíansido posiblesalgunasdécadas antes.Desde entonces,una elitepoderosa comenzó a y enriquecida,a la vez que muyconscientede su condiciónprivilegiada, "cerrarel círculo"(para citaruna emblemáticafrasede MiguelCañé) frentea una 13RoyHora:Losterratenientes delapampa cit. argentina, 14Leandro Losada: Historia deiaselites enlaArgentina. Delaconquista alsurgimiento delperonismo, Buenos 2009. Aires, Sudamericana,


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Juntoal cierredel universosocial, la sociedad todavía en profundametamorfosis. propiasde este grupoofrecieron consagraciónde pautas de organizaciónfamiliar formasadicionalesde marcardiferencias, quizá menosdeliberadas peroigualmente contundentes.La familianumerosa,con más de seis hijosya menudosuperandolos entrelos grupos en un ideal a la vez que en una pauta recurrente diez, se convirtió encumbrados,que sostuvieroninclusoen un períodosignado poruna abruptacaída en la mortalidadinfantil. Cualquierafuese su causa última(se ha señalado el peso de la moralcatólica, teniendoen cuenta que semejantecantidad de descendientes a comienzos del siglo XX sugiere una deliberada desatención de las prácticas la granfamiliafueuna marcade identidadque, juntoa unpomposo anticonceptivas), que sirvió yencorsetadoestilode vida,le dio a la alta sociedad unaire"aristocrático" con las clases para marcardiferenciascon el restode la sociedad, y en particular, medias que en las primerasdécadas de siglo comenzaban a cobrarvisibilidady presencia. II. Las clases medias su estilo Mientrasla elitecrecía en podereconómicoyretinabayaristocratizaba de vida, los sectores que se ubicaban por debajo de ella experimentaban transformaciones igualmenteintensas.Resultadifícilhablarde este vasto conjunto en singular. En el curso de unas pocas décadas, el impactode fenómenostales como el crecimientoeconómico, la migración,la urbanización,la diversificación y ampliaciónde los consumos,el avance de la alfabetización,la expansióndel Estado, etc., rápidamentedesdibujaronel perfilde la sociedad criolla,dando paso a una sociedad no sólo de mayorescala, sinotambiénde crecientecomplejidad.Y aunque era sinduda menossimpleymenospolarde la Argentina previaa la graninmigración entrela así llamada gente decente y el división la se lo que habitualmente sugiere, mundopopularconstituíaun rasgo fundantede la organizaciónsocial, a la vez que uno de los ejes a partirde la cual esa sociedad se representabaa sí misma15.Esta clasificaciónbinariase revelainadecuada para describirel nuevomundosocial que impide crecióal calorde los procesos reciénmencionados.Entreotraslimitaciones, captar los nuevos principiosen tornoa los cuales se organizaba la sociedad y,en la relevanciaque en ella estaban adquiriendola movilidadsocial y los particular, estratosmedios. En ese vasto y heterogéneoconjuntoque suele subsumirsebajo el nombrede clases mediasse advierte,más que en cualquierotrogrupo,la presenciainmigratoria. La llegada de europeos signó la historiaargentinadesde sus comienzos. Desde como la mediados del siglo XIX,sin embargo,tantola escala del flujomigratorio crecieronrespectode etapas previas.Para la década de de los extranjeros influencia 1870, los inmigrantes europeos ya habían alcanzado una posicióndominanteentre los titularesde las empresas que producíanbienes y servicios.En las principales 15Pararetratos "Lasociedad Zimmermann: Eduardo estascoordenadas, de lasociedad queretoman Laconfiguración delaNación historia Nueva delaHistoria, Nacional Argentina, 1870y1914",enAcademia entre Scobie: James 2000.También, Buenos Planeta, Aires, tomo c.1914, IV,1810delaRepública independiente, "Lagente Korn: Francis Buenos distinguida", 1977; Solar, a losbarrios, Aires, Delcentro Aires. 1870-1910, Buenos 1983. abril, Aires, decuatro Historia II,Buenos Aires. Buenos Romero: Alberto siglos, enJoséLuisRomero yLuis


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ciudades del litorallos extranjerosrepresentabanmás de dos terceraspartesde los dueños de baresyrestaurants, comercios,talleresyfábricas.La presenciainmigrante, aunque notanabrumadoracomo en la ciudad,tambiénse hacía notaren la campaña en los principalesprotagonistasdel boom lanero donde prontose convirtieron litoral, del tercercuartodel sigloXIXy,poco más tarde,del formidable procesode crecimiento los hizo de la uno de mayoresexportadoresde trigoy maíz Argentina agrícola que del mundo,y gracias a lo cual emergióunvasto estratode sectores medios rurales. Tampoco estuvieronausentes de otras actividades como la navegación fluvial,el la enseñanza y el periodismo.La cultivode frutasyverduras,el transporte terrestre, dioorigena lamentoscomolosde Sarmiento, centralidad económicade los Inmigrantes como una naciónque se movía, que en la década de 1880 describíaa la Argentina al ritmo del trabajoextranjero. Considerandoque para entonces casi exclusivamente, en los distritos económicamentemás dinámicosdel país tresde cada cuatrovarones esta visiónno parece exagerada. adultos habían nacido del otrolado del Atlántico, Para el Centenario,la Argentinase ubicaba en un cómodo primerlugarentrelos tantoporqueningunaotranacióncontaba con una proporción países de Inmigración, tan elevada de extranjeros(e hijosde extranjeros)como porque les había otorgado un lugarprimordial en su vida económica y social16. Desgajados del medio en el que habían adquirido sus primerasy más realizaronimportantes esfuerzos perdurablesexperienciasvitales,los Inmigrantes recrear el universo cultural habían al cruzar el Atlántico. Ello creó que dejado para condicionespropiciaspara la emergencia,juntoa la interacción Informal con paisanos en el lugarde trabajo,o en bares, esquinas y cafés (a veces más ampliay diversa que la ofrecidaporla ciudad o la aldea de la que habían partido),de grancantidad de emprendimientos a los inmigrantes en tantoextranjeros. La vitalidad que interpelaron de la prensaétnica,casi tanabundantecomola escritaen lenguacastellana,ypresente en todos los gruposmigratorios de ciertaimportancia, de pone de relievela intención mantenervivoslos lazos con la culturay la tierrade origen.Los italianos,que hasta el cambio de sigloconstituyeron el primergrupoinmigrante (más de la mitadde todos los arribadoshastafinesde la década de 1880 proveníade la Península),construyeron comunitarias,más numerosasy más prestigiosasque las poderosas instituciones entonces los que por emigradosde la Penínsulaestaban erigiendoen otrosdestinos de Inmigración, como los Estados Unidos. La fortalezade las asociaciones étnicas no fueun patrimonio de este grupomigratorio. En mayoro menormedida,todos los tendieron a desplegarsu vidasocial en unmarcode referencia extranjeros que remitía a la comunidadde origen17. Los universosde sociabilidad comunitariano constituyeron, sin embargo, barrerasque Impidieran el contactocon el entorno.Los Inmigrantes habíancruzado el Atlántico movidosporaspiracionesde mejoraindividual o familiar, yellolos obligaba a establecer relacionescon actoresy escenarios que con frecuenciales resultaban extraños.El mundodel trabajo,el lugarde residencia,la búsqueda de pareja, los impulsaronmás allá de los estrechoscírculosde sus paisanos. De todos modos,el 16Elrelato clásico deesteproceso loofrece Gino Germani ensuEstructura socialde¡aArgentina, cit. 17Fernando Devoto: Historia dela inmigración enlaArgentina, cit.Paraelcasoespañol, cfr. JoséС. Moya: Primos Lainmigración enBuenos 1850Buenos 2004. yExtranjeros. Aires, 1930, española Aires, Emecé,



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del medionativofuerelativamente sobrelos inmigrantes influjo superficial que retornaron a la tierrade origeno los arribadosde primerageneración,cuya sociabilidadorbitòen tornoa los lazos que los ataban a las sociedades de las que habíanemigradoo, en su defecto,a los espacios de sociabilidadétnicaque servíanpara recrearlalocalmente18. Y cuando dirigían su miradahacia la cumbrede la sociedad, muchosde ellospercibían de su comunidadinmigrante a losgruposdirigentes comomás visiblesymás relevantes que a las elitessociales y políticasde la sociedad que los hospedaba de manera similareso superioresa acumularfortunas Inclusoextranjeros que lograron temporaria. los de la clase alta nativa,aun cuando no le volvieronla espalda a los espacios de sociabilidadque nucleaban al segmentomás conspicuo del alto mundoargentino, en la decisivacuestión la sociabilidadétnica.De modosignificativo, tendieron a privilegiar terminaron de la elecciónde pareja,frecuentemente eligiendoa sus propioscongéneres. los Luroo Tales el caso, porejemplo,de los Devoto,perotambiénde los Santamarina, los Duggan,que sólo en la segunda generaciónse incorporaron (sinduda con notable éxito)a la alta sociedad nativa19. Como lo sugierenestos ejemplos,en el medianoplazo la vitalidadde las formas asociativas y la sociabilidad étnica fue opacándose, conformelos hijos de los se abríana nuevas experienciasy perdíaninterésen el mundode sus inmigrantes y la mayores.Para el Centenario,el períodode apogeo del asociacionismoextranjero sociedad pluralcomenzaba a quedar atrás,y su supervivenciadependía cada vez Su de inmigrantes. más de la sangreaportadaporla llegada de nuevoscontingentes ocaso no fue consecuencia sola ni centralmentede las poderosas iniciativas nacionalizadorasimpulsadasporel Estado desde comienzosdel sigloXX,en primer lugara travésdel sistema educativo.Para entonces,por ejemplo,el castellanoya desplazaba al italianoen las conversacionesque teníanlugaren el Club Italiano,en los matrimonios Tambiénganaban terreno cuyossalones se reuníala elitepeninsular20. concertados entremiembrosde distintascomunidades, o entrenativos(y más . En esos mismosaños, o hijosde extranjeros21 frecuentemente nativas)yextranjeros de signo popularentrela poblaciónde origen el vigorosodesarrollode un criollismo el atractivode la idea nacionalsobre los hijosde inmigrantes22. testimonia extranjero Aún quienes manifestaronmenos voluntadde interaccióntambiénfueron paulatinamenteganados por prácticas y costumbresque, aunque relativamente con nuevosestilosde vidaque ejercíaninflujo novedosas,terminaron poridentificarlos entrelos estratosmediosnativos.En el períodoque estamos considerandocomenzó con valoresde impronta identificado unnuevomodelode familia, a difundirse burguesa tales como la respetabilidad,el ahorroy el esfuerzo,y la mejora a través de la como entrenativos. se extendiótantoentreinmigrantes educación, cuya legitimidad 18Cfr. en Lositalianos étnica. e identidad Míguez: Devoto Asociacionismo, Fernando trabajo yEduardo 1992. Buenos CEMLA-CSER-IEHS, enunaperspectiva Latina Aires, América comparada, 19Cfr. delpaísen defamilias Lasalianzas Wortman: VossyMiles Stuart DianaBalmori, ylaformación América FCE,1990, México, Latina, pp.180-251. 20Fernando 2006. Buenos enlaArgentina, delositalianos Aires, Biblos, Historia Devoto: 21Hernán Balances moderna. enla Argentina de inmigrantes e integración y Otero:"Endogamia Población sobre Seminario M.C.(comps.): M.yMercado, enBoleda, desdeunenfoque regional", perspectivas e Integración Históricos Cultural, de Estudios Asociación enAmérica Latina, Argentino-Chilena ySociedad . 2001 deSalta, Nacional Universidad GREDES, 22Adolfo cit. Eldiscurso Prieto: criollista,


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El nuevo modelo promovíala formaciónde hogares a partirde familiasnucleares simples(padre,madre,hijossolteros)que residíanbajo unmismotecho.Este modelo suponía una clara delimitaciónentrelas esferas doméstica y pública, y a la vez establecía una nítidadivisiónde tareas basada en el género.Sobre el varónrecaía la responsabilidadde proveerel sustentomientrasque, gracias a la mejoradel ingreso la mujerpodía retirarse de la esferaproductivapara consagrarseporentero familiar, al cuidado del hogar.Los hijos,porsu parte,extendíansu paso porel sistemaeducativo y postergabansu ingresoal mundodel trabajo,al que ingresabanmás tardepero dotadosde mayorescalificaciones.Auncuando este patróncoexistiócon otrasformas familiaresy residenciales(imposiblesde erradicaren una sociedad marcada una elevadísimatasa de masculinidady una ofertahabitacionalque corríadetrásde la demanda), en las primerasdécadas del siglo el modelo de familiaque se identifica con losvaloresde los sectoresmediosmás acomodados nosólo crecióen importancia sino que tambiénse convirtió en un referente de respetabilidadsocial para grupos más amplios ubicados en los estratosinferiores de este mundo,e inclusoentrelos sectores populares23. III. Dos universos en contacto Tras haber delineado algunos rasgos del mundode las elitesy de las clases medias en formación,podemos dirigirnuestraatenciónhacia el problemade las relacionesentreestos dos universos,con la intención señalada al comienzo:sugerir interrogantesy presentar argumentos orientados a delinear una agenda de investigaciónsobre estos problemas.Las preguntasque funcionancomo puntosde en los siguientestérminos: partidapodríanformularse ¿la clase altanativa,europeizada y aristocrática,cuando no plutocrática,ofrecióun modelo de referenciapara los sus identidadesy sus pautas de incipientessectores medios? ¿Éstos configuraron conductaimitandoo dando la espalda a la elite?Y,en sentidoinverso,¿cuáles fueron los comportamientos de la eliteante la consolidaciónde las clases medias? ¿Cuáles fueronlos momentosde aparicióny los ritmosde unas y otrastendencias? La estructuray composiciónde la familiaofreceun puntode partidaposible se advierte para encararestas preguntas.Allí,más que confluenciao uniformidad, una cierta divergencia, reflejoa su vez de prácticas y valores parcialmente contrapuestos.Como se expuso más arriba,mientrasen los sectores medios de la sociedad litoral se imponíala familianuclearyel patrónde residencianeolocal,entre los integrantes de la elitede las décadas del cambiode siglose advierteunmovimiento inverso:la constitución de familiasde muchoshijosy,en no pocos casos, la residencia bajo un mismotecho de tres generaciones. De hecho, parte considerable de las grandes mansiones de la elitefueronpensadas para albergar no sólo a familias nuclearesnumerosassinotambiéna gruposfamiliares integradosporabuelos, hijos su vigenciaduranteel período (ysus mujeres)ynietos.Estas costumbresmantuvieron de entreguerras, cuando la reduccióndel númerode hijosse volvióperceptibleentre 23Eduardo MIguez: "Familias declasemedia: laformación deunmodelo", enFernando Devoto yMarta Madero Historia delavidaprivada enlaArgentina, Buenos (directores): Liernur: "El Aires, Taurus, 1999; Jorge nidodelatempestad. Laformación delacasamoderna enlaArgentina a través demanuales sobre yartículos economía doméstica enEntrepasados 13,1997. (1870-1910)",



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ampliossegmentosde las clases medias. Vale recordarque a finesde la década de 1930 AlejandroBunge señalaba a las familiascon grancantidadde hijoscomo un rasgo distintivo (y a sus ojos elogiable) de las familiasmás encumbradas,y a la "clase media",como el principalcausante del abruptodescenso de la natalidadque en las grandesciudades litorales) tuvolugaren el país (desde su puntode irradiación a partirdel últimocuartodel siglo XIX24.Cuando Bunge celebraba la existenciade más de 100 familiasde la elitecon más de 8 vástagos, las familiasde clase media porteñaya estaban próximasa una descendencia finalde 3 hijos.De acuerdo a una se correspondíacon "el de la especialista en el tema,este últimocomportamiento pequeña burguesíaascendentede algunospaíses europeos"de ese mismoperíodo25. Ahorabien,la existenciade senderos bifurcadosen lo relativoa la estructura y ¿debería llevara la conclusiónde que el ascendientede la composiciónde la familia, Una respuesta taxativaa esta elitesobre las clase medias fue poco significativo? de este proceso. que unestudioatentoa los ritmos preguntaes quizás menosrelevante familiar nos En rigor, la estructura sugierepara la década ycomposición aquello que de 1930 pone de relieve,quizá, el ocaso de un ascendiente que la elitesí había tenidosobre los incipientessectoresmedios,o al menos,sobreaquellos sectoresde la poblacióncon expectativasy posibilidadesde ascenso social a finesdel sigloXIX y comienzos del XX. Las muestrasde preocupaciónque variosmiembrosde la clase alta plasmaron síntomasde la considerable ante el problemade la exclusividadsocial constituyen e inferiores atracciónque la eliteera capaz de ejercersobre sus círculosperiféricos todavíaen los años de entresiglos. La relevanciaotorgadaa la figuradel advenedizo de la eliteasí parece en algunas obras literariassalidas de la plumade integrantes al inmigrante indicarlo.A travésde esta figura,se retrató prósperoy ambiciosoque cuando el acceso a los Aun la elite vernácula26. filas de en las a aspiraba ingresar exitosos(o más sencillopara inmigrantes círculosde clase alta resultórelativamente frecuentemente, para sus hijos) durantegran partedel siglo XIX(lo que, más que tendióa robusteceral gruposobre el cual se ejercía la presión),hacia el debilitar, cambio de siglolas familiastradicionaleselevaronlas barrerasque los separaban de su fortunasrecientemente adquiridaspara incrementar quienes aspiraban a utilizar reputacióny su prestigio.Y más allá de las alarmas que podía provocarel asedio de de las clases medias la hombresnuevos,lo ciertoes que en ese momentoformativo ineludiblepara la definicióndel buen gusto, alta sociedad constituyóun referente aspecto que en sí mismorevelael lugarexpectable ocupado por la elitesocial. El hechode que ritospúblicosde la vidade la altasociedad como las bodas adquiriesen un carácterliteralmente espectacular,tantopor su fastoy opulencia como por su la atenciónde amplísimossectores de la poblaciónporteña, concitar de capacidad ofreceun notorioindiciode la capacidad de este grupo para funcionarcomo un poderoso polo de atracción social (así, por ejemplo, el casamiento de Matilde Anchorenacon Carlos OrtizBasualdo, realizadoen la Catedralen 1896,fueseguido de porun "gentíosólo comparableal de las más ruidosasceremonias.El movimiento 24Alejandro Buenos ensuUnaNueva delarazablanca", Bunge: Argentina, ydecadencia "Esplendor 1984[primera edición, 1940], pp.43-57. Aires, Hyspamérica, 25Susana enlaArgentina delafamilia Historia Moderna, cit., Torrado: p.363. 26Cfr. 1980. Buenos CEAL, Aires, enlaliteratura Lainmigración Onega: (1880-1910), argentina Gladys


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tramwaysy coches ha sido detenido y hasta la guardia de seguridad ha sido distribuidapara mantenerel orden"27).Convertidaen sinónimode elegancia y distinción,la alta sociedad condensó porvarias décadas todo lo que se asociaba a un statuselevado y una posicióndistinguida.Para 1909, todavía eran frecuentes las visiones que señalaban que el conjuntode familiasde riqueza ruralcuyas mansiones daban su sello característicoal BarrioNorteconstituían"el exponente más altode la culturaciudadana, la cúspide de la pirámidesocial, el puntode mira La publicidady las hacia el cual convergenlas miradasde las capas inferiores."28 marcas de distintos artículos de consumo masivo que evocaban apellidos connotados con el alto mundosocial (Mitre, tradicionaleso nombresfuertemente JockeyClub), constituyenotraevidencia del extendidoprestigiode que gozaban los gruposmás encumbrados.Basta observarlas crónicas sociales aparecidas en la prensa a lo largode este período para comprobarque, una vez traspuestas las de los mundosde sociabilidad étnica,y en lo que a distinciónse refiere, fronteras nada opacaba a la alta sociedad nativani rivalizabacon ella. la atenciónhacia las fuerzas A partirde esta constatación,es necesario dirigir que afectarono atenuaronesta preeminencia,y a su ritmode despliegue. En este sentido,parece plausible afirmar que la importanciade las impugnacionescobró envergaduraen los años que sucedieronal Centenario.Poruna parte,el prestigiode conflictivo la eliteno emergióindemnedel climasocial ypolíticamente que se extendió por los distritoscerealeros de la regiónpampeana luego de la movilizaciónde chacareros iniciada con el Gritode Alcorta,y en las grandes ciudades como consecuencia de los conflictos obrerosde finesde la década de 1910. Estas críticas se vieronpotenciadasporla democratización de la vida políticaposterior a la sanción de la leySáenz Peña, pues ésta abriómayoresespacios para la denunciapúblicade los potentadoslocales29.Símbolode este nuevoescenario en el que la denunciade los poderosos adquiriómayorrelieve,para 1922 el edificiodel JockeyClubfueobjeto de agresión por parte de manifestantesafines a la Unión Cívica Radical, que denunciaronsu carácterde reductoconservadory oligárquico.Y estas muestrasde hostilidadpública hacia la elite provinieron tantode grupos populares como de estudiantesuniversitarios, un grupoen el que la presencia de los sectores medios porentoncesse estaba haciendo cada vez más significativa30. Con todo,la fuerzade la denunciapolíticadel segmentomás conspicuo de la clase alta no debe exagerarse. Una vez que la crisisde posguerraquedó atrás,el conflicto social (sobre todo el que teníalugaren la ciudad) no sólo se revelóde baja intensidadsino que, además, no afectó sino lateralmentea su segmento más encumbrado.En efecto,esa elitede base agrariadependía del ingresogeneradoen el campo,unespacio ubicadofueradel principal escenariode disputade unasociedad que, además, se contaba entrelas más urbanizadasdel mundo.Portanto,las luchas sociales más visiblese impactantesde ese tiempo-las que tuvieronlugarentrelos patronesindustriales ymás en generallos empresariosurbanosy los trabajadoresde 27ElDiario, 28denoviembre de1896. Unmayor desarrollo deestos enLosada: Laaltasociedad, aspectos cit,pp.220-231. 28Boletín delaUnión Industrial XXIII: 491, 15denoviembre de1909, Argentina, p.2. 29RoyHora:Losterratenientes, cit.pp.207-277. 30EIDiario, 9/1/1922, p.3,y11/2/1922, p.3.


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los sectores secundarioy terciariode la economía- sólo tocaronal núcleo de la alta sociedad de manera indirectay marginal.En este contexto,pues, las diferencias entre la elite y los sectores medios e inferioresno terminaronde articularse políticamente, y giraronmás en tornoa valoresque a intereses. Un trabajorecientede Ezequiel Adamovskýafirmaque la idea de clase media comenzó a arraigarseen la década de 1920, como consecuencia de procesos de autoidentificación perotambiénde la exitosainculcaciónde ese conceptoporpartede los sectores dominantes.Según esta perspectiva,la emergenciade esta formade identidadhabríasido funcionala la perduracióndel statuquo, toda vez que tendíaa la constitución dificultar de ampliascoalicionespolíticaspopulares,capaces de favorecer Se trata,como se la identificación entrelos gruposmediosy las clases subalternas31. en medida la dimensión de una enfatiza ve, heterónoma) política(y gran perspectivaque de la identidadde los sectoresmedios.Retomandolo señalado hasta aquí, podemos de avanzaren una explicaciónalternativa que, sin descartarde plano la importancia este elemento,de todos modos asigne mayorrelevanciaanalíticaa las dimensiones de identidadesde clase en el medio sociales yculturalesen los procesosde formación clase un Por a la del lado, porque,aun si el término sigloprevio aparición peronismo. más limitadaque en décadas media tuvoen las décadas de 1910 y 1920 una difusión posteriores,las realidades sociales que evoca este vocablo ya habían adquiridoen tales comoya se ha expuestomás arriba,en terrenos ese períodoformasperceptibles, los patronesde consumo,los estilosde vidayel universo como la organizaciónfamiliar, de valores.En segundo lugar,y retomandolo señalado en el párrafoanterior, porquea anclada en el esfuerzoyel trabajo medidaque los ideales asociados a la respetabilidad las pautasde vidade la altasociedad arraigando, propiosde las clases mediasse fueron en objetode críticase impugnacionesde cuño más moralque político, se convirtieron que solíancondenarel ostentosodesenfrenopropiode los potentadoslocales. Desde de una "culturade clase media",si en sus este puntode vista,pues, la afirmación en el mundode la altasociedad momentosinicialesencontróuna referencia importante (pues le sirviópara tomardistanciadel mundopopulary alentarsus expectativasde contra(o tomando afirmándose terminó ascenso social) en los años de la entreguerra distanciade) él. de este proceso,pausados Desde ya,tambiéndebe contemplarseque los ritmos con el mundode la elite. radical una no ruptura y sinuosos,seguramente supusieron Así, por ejemplo,en semblanzas de la vida social de la primeraposguerray de la década del veintese advierteque un conjuntode lugaresestrechamenteasociados conservandounafuerte con el universode la elitesiguieron presenciaen las referencias de las clases medias. El avance de este grupo sobre el parque de Palermo,que hasta finesdel sigloXIXse había mantenidocomo un paseo aristocrático, sugiereel atractivoque podía poseer unterritorio consagrado porla elite.La popularidadque adquirióMardel Plata como lugarde veraneo en la década de 1920, cada vez más a su carácterde balneario directamente extendidoentregruposajenos a la elite,remite de la alta sociedad32. 31Ezequiel Buenos deunailusión, delaclasemedia Historia Adamovský: ydecadencia Apogeo argentina. 2009. Planeta, Aires, 32Cfr. Buenos enlaArgentina, delturismo historia Breve delasvacaciones. Laconquista ElisaPastoriza: 2011. Edhasa, Aires,


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Cabe preguntarse,sin embargo,si consumos о aficionescomo el veraneo en conductas Mardel Platase tradujeron siempreo necesariamenteen unafánporimitar o acudir a espacios vinculados con la alta sociedad -siguiendo con el ejemplo marplatense,el HotelBristol,el GolfClub o el Ocean Club-. La respuesta a estos de los nuevamente,invitaa evaluarcon cuidado el comportamiento interrogantes, sectores medios. Los mismos fueron construyendo sus propios lugares de esparcimiento, ysus formasde veraneartomarondistanciadel modeloofrecidopor la elite,en el que destacaba el consumoostentoso.De hecho,antes que imitación, los usos del tiempolibrecaracterísticosde los grupos medios parecen ponerde relievecomportamientos deliberadamentemedidos y austeros. Hay indiciosmuy reveladoresal respecto. Ya hacia el Centenario,Caras y Caretas los retratabade esta manera:"Los buenos ytranquilosburgueses acampan lejos del Bristol,en los hotelesde segundo ytercerorden,en las numerosascasas de pensiónyen lugares no muyrumbosos.En su mayoría,son comerciantesde regularcapitalito,rentistas que han hecho tapar todas las goteras de sus cinco o seis casas para arrendar, Madrugan.Gastan profesionalesque se alejan de sus estudiosyde sus consultorios. moderadamente.Entreel carruaje de alquilery el tranvíaa sangre, optan por el de unsegmento boleto."33. Esteejemplopuntualretrata, entonces,el comportamiento social cada vez más confiadoen el valor de su manera de ver el mundoy más seguro de sí mismo,para el cual la alta sociedad podía seguirfuncionandocomo una referenciainsoslayable,peroal que ya no lo movíala aspiraciónde mimetizarse con ella. Por lo tanto,¿en la Argentinade la primeraposguerra,el universode la alta una referencia socio-cultural decisiva para quienes se sociedad siguióconstituyendo ubicaban por debajo de ella? La respuesta a esta preguntadebe considerarque para entoncesse habríaoperado undesplazamientoen las relacionesentrela elitey las clases medias,que alteróel panoramadominanteen el períodoclausuradohacia el Centenario.Muchos integrantesde las clases medias aspiraban a transitar los mismosespacios, a imitar conductas tenían que pordistinguidas, algunas peroya no se veíanmovidosporel deseo de actuarcomo lo hacía la elite,o de integrarse a ella. Este nuevo contexto,pues, sugiereque la figuradel advenedizo cobró una nueva forma.Desde el puntode vistade la elite,el invasordejó de ser concebido como el arribistasolitarioque pretendíaforzarsu ingresoa la alta sociedad. Ahorase trataba de un sujeto colectivoque, gracias a la mejoraen la educación, la ampliacióndel consumoy la mejoradel ingresocaracterísticosde las primerasdécadas del siglo, había vistoincrementado su peso social y su concienciade sí mismo,y que en todo caso reclamaba su derecho a ocupar espacios que antes habían sido patrimonio exclusivode la elite.Perosi este ingresoen el mismoterritorio podía resultarirritante, en rigorsólo daba lugara una interaccióna distancia,que no amenazaba echar por tierralas barrerasque aislaban a las clases altas. Una fórmula apropiada para pensarsemejanteescenario,entonces,puede ser la de coexistenciasin integración. Sus límites, porlo demás, no habríansurgidosólo de la circunspecciónde las clases medias, sino también-y quizá de maneramás decisiva- de la posiciónde la propiaelite.Cada vez más cerrada-como lo expresa 33CarasyCaretas, añoXIII, 19/3/1910. №598,



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de maneramuynotoriasu crecienteendogamia matrimonial y social-, a la vez que acostumbradaa un nivelde consumo que, pese a la mejorasustancialdel ingreso en la entreguerra, al avance que vastossegmentosde la clase mediaexperimentaron del proceso de fragmentaciónde las fortunasrurales producto de la partición hereditaria, y a la desaceleración del ritmode crecimientode la economía agraria, todavía se hallaba muy por encima de la que podían exhibirsectores menos encumbrados. Así,pues, hacia la década del veintecomenzaríaa ponersede relieveuncambio en el modo en que la alta sociedad se vinculacon quienes se ubican pordebajo de de la alta sociedad sobre las clases medias se atenuaba, ella. A la vez que el influjo ambos conjuntospasaron a conceder mayorimportanciaa su propioentornoal valores e identidades.Este proceso se encuentraligado a la momentode perfilar creciente complejidad de la sociedad, que sin duda contribuyóa volver más heterogéneaslas referenciassociales yculturalesen tornoa las cuales se articulaba la identidadde cada grupo(algo que, por ejemplo,Alexisde Tocquevilleya había advertidoen los Estados Unidosde mediados del siglo XIX).Conformela sociedad social de la elite,sindesaparecer del todo,habría se tornabamás compleja,el influjo perdidointensidad,y habríacomenzado a ser opacado porun universode valoresy referenciasmás propiamentemesocrático.Expresionesdel desarrollode la cultura decisivamentea potenciareste de masas como el cine y la prensa concurrieron al hostileso indiferentes nuevos modelos sociales de la difusión de a través proceso, mundode los potentadosy el privilegioheredado,tantocomo de la promociónde valoresque girabanen tornoal ahorroyel trabajo,la honestidady el esfuerzo34.Por a atenuarel de la economíacontribuyeron su parte,el crecimiento yla diversificación las el incrementaron nosólo porque ingresoy posibilidades peso de la elitetradicional, de consumo,sinotambiénporquecrearonnuevosterrenosde actividaden los que la primacíao al menos la incidenciade los sectores más poderosos eran escasas o nulas. Indicadores reveladores de semejante escenario son las innumerables sociales exitosas edificadas al margende la alta sociedad tradicional, trayectorias de su mundosocial y de su universode parentesco,y que con frecuenciatampoco de la Argentina se coronaronen ellos.TorcuatoDi Telia,el mayorempresarioindustrial Julio Natalio Botana del mediados Korn, de entreguerras XX, promotores y y siglo y de grandes iniciativasen el terrenode las industriasculturales,ilustraneste punto con elocuencia. Es importante, también,evaluarel alcance de esta progresivaescisiónentrelos tendenciasde sentido mundosde la elitey de las clases medias. ¿Se desarrollaron a uno y a otrouniversoen distintosplanos de la vida opuesto, que hicieranconfluir social? Esta últimaposibilidadresultaplausible,y su despliegue parece obedecer a la sociedad en el períodode la acción de dos procesos que estaban transformando la propiaelite.Por cambios culturales un los Por lado, experimentó que entreguerras. de las clases medias. Otro,el ya señalado proceso de argentinización 34Cfr. Romero Buenos 2004;LuisAlberto Norma, y delossentimientos, Aires, Beatriz Sarlo:Elimperio Nation: Melodramatic "The В.Karush: cultura cit.;Matthew Sectores Gutiérrez: Leandro ypolítica, populares, 87:2 Review Historical American ofthe1930s", Cinema intheArgentine andPolarization Hispanic Integration (2007), pp.293-326.


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En la posguerra,el estilode vida aristocratizante a las que servíade referencia elites argentinasexperimentóun lento pero inexorableeclipse, en gran medida resultadodel derrumbede la sociedad en la que había crecido y prosperado.La de aquellos aspectos del AntiguoRégimen GranGuerrasupuso el colapso definitivo habían sobrevivido a las conmociones de la RevoluciónFrancesa y se habían que reconstituido o reformado en el mediosigloque precedióa la PrimeraGuerraMundial. Además de derribarcoronas y aristocracias,el conflictobélico golpeó duramentea las grandesfortunas europeas,ya la vez abrióuna era de crecientedemocratización Alcalordel ascenso de la influencia de la vida social ycultural35. socio-cultural de los Estados Unidos, los pasatiempos, bailes, aficiones y consumos de signo aristocratizante que habíanmarcadoel tonodel períodopreviocedieronanteel avance de otrosque, como el jazz o el tango,no teníansus matricesen la alta cultura.En al igual que en otras partes,ello contribuyó a establecer un terrenode Argentina, encuentros entre los universos culturalesde la elite y de las clases medias y populares36.Así,porejemplo,el éxitono sólo artísticosinotambiénsocial de Carlos Gardel-capaz de codearse con aristócratas ymagnatesde ambos lados delAtlánticono se entiendesino en este contexto37. El sentidoen el que circulabanestas novedades era de abajo hacia arribamás más que para reforzar que de arribahacia abajo, porlo que estos procesos sirvieron, el ascendiente culturalde las clases altas, para erosionarloy acotarlo.Al mismo tiempo,la expansióndel mercadoy la apariciónde nuevosbienesde consumomasivo que tuvolugaren la década de 1920 permitieron que consumosque hasta entonces habíanpermanecidocomo patrimonio exclusivode las elitesperdieranel carácterde tales38.El uso del automóvil,la prácticadel deporte,las vacaciones o el week-end, se difundieron en franjascada vez más extensasde las clases medias39.La ampliación social del acceso a usos yconsumoshasta entoncesdistintivos de la eliteconstituye unade las facetasmás destacadas de la vulgarización democráticaque lostestimonios de la época señalan con frecuencia. Estas tendenciasa la uniformización de los patronesde consumomuchasveces resultaron difícilesde percibirdebido al ya señalado hermetismo de la alta sociedad de entreguerras, reunidaen tornoa un mundosocial cerrado,y a un nivelde vida en el que el consumo conspicuo se había tornadosegunda naturaleza.Pese a estas barreras,es plausiblesostenerque en estas décadas las diferenciasque separaban a la elitede los sectores mediosse volvieron más de grado que de carácter,si se las compara con el panorama reinanteen el novecientos.En este nuevo escenario, la ostentaciónmaterial o el refinamiento cultural dejaronde erigirse, preponderantemente, 35Cfr. David Cannadine: TheDecline andFalloftheBritish YaleUniversity New HavenPress, Aristocracy, Cardoza: inBourgeois Aristocrats Londres, 1990; ThePiedmontese Anthony Italy: 1861-1930, Nobility, Cambridge NewYork, 1998. Press, University 36Paraelcasonorteamericano, David E.Kyvig: Life intheUnited States. porejemplo, Daily 1920-1940, R.Dee,Chicago, Ivan 2004. 37Sobre lasrelaciones deesteartista conelaltomundo véaseSimon Collier: Carlos Gardel. social, Su sumúsica, suépoca,Buenos vida, 1987. Aires, Sudamericana, 38Fernando Rocchi: intheDesert, cit. Chimneys 39Sobre iacultura delautomóvil Anahí Ballent: "Kilómetro cero:laconstrucción del ylasclasesmedias, universo simbólico delcamino enlosañostreinta", Boletín delInstituto deHistoria Dr. Argentina yAmericana Emilio 27(2005), fíavignani especialmente, pp.127-31.



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sobre la base de un sobre repertorios culturalesdistintos,y pasaron a constituirse de la clase media. En el común a vastos sectores cultural crecientemente patrimonio seno de la elite,los motivosmás cabalmentearistocráticos ymantuvieron perduraron, social decreció. Más su calidad de símbolosde prestigio.Con todo,su importancia que reflejardistincióno sofisticación,con frecuenciasólo sirvieronpara ponerde relieveun halo de excentricidado de anacronismo,reveladoresde la crecientefalta con lo que «acontecía en el mundo»(la estructura de sintoníade sus propietarios y aludida al comienzode este apartado bienpodríapensarse en composiciónfamiliar este mismosentido). entrelas elitesylas clases medias Puede sugerirse,entonces,que las diferencias culturalescomunes, comenzarona tejerse,cada vez más,sobrela base de repertorios antes que en funciónde un conjuntode aficionesy pasatiempos característicosde A ellohabríancontribuido, cada unode estos universos. porunlado,la democratización culturalque cobró impulsoen el período de entreguerras, que despojó a la elite de novedades en los estilosde vida y social de su papel de granvía de introducción Norte.Y,en segundo de los países del Atlántico de aficionesculturalesprovenientes efectos con sus de la el sostenido avance nacionalización, homogeneizadores lugar, sobre la poblaciónen su conjunto. de fuerteimpactosobre las clases medias de El proceso de argentinización, a los afectó también gruposubicados en la cumbrede la sociedad. origeninmigratorio, tuvolugaruna revalorizaciónde los legados criollosen En los años de entreguerras la alta sociedad, visible en la emergencia de nuevas nociones identitariasque el pasado "gaucho",en la apariciónde una nuevaliteratura que tematizaba recuperaron de refinamiento estas cuestiones,yhastaen el auge de deportesrecubiertos europeo pero ligados a la culturacriolla(como el polo)40.El criollismode la eliteno supuso una recusación del cosmopolitismo,sino una conjugación con él. Por otra parte, muchosde los giroscriollistasque entoncescobraronenvergaduraen el seno de la sirvieron en símbolosde prestigio elitehastaconvertirse para marcaruna precedencia sobre lo que desde la posguerra pasó a convertirseen el núcleo de la tradición nacional(y por lo tanto,en un rasgo de la identidadde la sociedad en su conjunto) un lugarde preeminencia.En este sentido,aun cuando el para, sobre ello,reafirmar avance del criollismono borrólas diferenciasentreel altomundosocial y el restode la sociedad, sí estableció un terrenode encuentroculturalque resaltaba la común pertenenciaa la tradiciónnacional. A su vez, sobre esta elitemás permeablea las nuevas formasdel criollismo, tambiénoperaron,con peso creciente,pautas culturalescaracterísticasde las clases medias. La correspondenciay las memoriasde integrantesdel alto mundosocial atribuidaa valoresque, como el esfuerzo, ponende relievela crecienteimportancia la templanzay la dedicación al trabajo,cuestionabanlas nociones que fundabanla superioridaden alguna formadel privilegioheredado. Estos valores, de clara connotaciónburguesa,estaban presentesinclusoentrelos sectoresmás aristocráticos de Anchorena, de la elite.Así,porejemplo,a finesde la década de 1920, LeonorUriburu boda en la una de un Grande con sus de a una había casado (en España hijas que 40Beatriz Altamirano enCarlos deMartín laaventura Fierro", yBeatriz Sarlo:"Vanguardia ycriollismo: Archetti: Buenos 1997;Eduardo a la vanguardia, Ariel, Aires, De Sarmiento Sarlo:Ensayos argentinos. 2003. Buenos Aires, Masculinidades. Antropofagia, Fútbol, ypoloenlaArgentina, tango


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que el reyde España había oficiadode padrino)denunciaba el gasto desenfrenado que percibíacomo una conductademasiado frecuenteen su mediosocial, e instaba a sus hijosvaronesa ahorrary trabajar41.Seguramente,el significadode estos dos términosno era igualpara esta hijade unpresidentedel ordenoligárquicoque había de la Argentina entroncadocon el mayorclan propietario que para hombresde fortuna sinembargo,no parecenalcanzarpara definir ylinajemás modestos.Las diferencias, dos órdenes de valores opuestos. Sin duda, ese terrenoen común posiblemente resultabapoco perceptibletantopor las conductas aristocratizantes (cuando no decididamenteplutocráticas)desplegadas ante la vistapública por los integrantes de la altasociedad, como porla estructuración mismade la familia yde la sociabilidad de este grupo,que erigíanmurosdifícilesde franquear.Vistas a la distancia,sin embargo,esas diferenciasemergencada vez más como de grado antes que de naturaleza.Y se sitúan,además, sobre una tendenciade largoplazo signada porla homogeneizacióncultural. las coincidenciasentreelitesy Después de todo,en un país como la Argentina, clases medias eranen más de un puntoesperables, e inclusoinexorables.En última instancia,la elitelocal teníauna raíz burguesa similara la de las incipientesclases medias, que precisamenteel estilode vida aristocráticomaduradoen las décadas del cambio de sigloporun momentopareció poderocultar,peroque en definitiva se revelóincapaz de subsumiro eliminar. Todoellose habríavueltomás evidentecuando el poderde irradiación del estilode vida aristocrático comenzóa eclipsarsejuntoa la alta sociedad aristocráticaeuropea que le servíade inspiración. Conformenos internamos en el períodode entreguerras, pues, el universode las clases medias alcanzó la fuerzay la solidez suficientescomo para morigerar el influjoque sobre él ejercía la elite.Más aún, desde entonces los valores de clase media imprimieron su sello más allá de las lábiles e imprecisasfronteras de este tantosobre sectores significativos grupoen veloz expansión,ejerciendoinfluencia de las clases subalternascomo,en alguna medida,tambiénhacia los actoresque se ubicaban en la cúspide de la sociedad. De este modo, adquirióformamaduraun nuevo escenario en el que las clases medias emergieroncomo la fuerzacultural de nuestropaís, relegandoa la altasociedad a unpapel nosólo reactivo predominante sino tambiéncada vez más marginalen la vida argentina. IV. Conclusión Cuando contemplamosel período extendidoentrefinesdel siglo XIXy las postrimeríasde la década de 1930 desde el puntode vista de las relaciones y circulacionesculturalesentrela elitey la clase media, tresmomentosse recortan ante la vistadel observador.Alinicio,y hasta los años del Centenario,el ascendiente de la elitesobre los sectores medios en proceso de expansiónconstituyela fuerza la predominante que da formaa este vínculo.Símbolode sofisticacióny distinción, eliterenovaday europeizada del cambio de siglo ejercióun poderoso influjo sobre quienes se ubicaban pordebajo de ella,consagrándose como el actorde referencia le daban la espalda a los para todos aquellos que, en esa sociedad de inmigrantes, espacios de sociabilidadétnica. 41Leonor Uriburu deAnchorena a Emilio Anchorena Archivo 21/1 Juan deAnchorena. Uriburu, 1/1930,


YMEDIAS CLASES ALTAS ENLAARGENTINA, 1880-1930

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En los años de entreguerrasse delinea un segundo momentoen la relación entre la elite y las clases medias. El mismo se encuentra ritmado por dos uno de escisión yotrode homogeneización. La escisión respondió, movimientos, más que a la dinámica del conflictopolítico, a la creciente vocación de las clases medias por identificarsecon valeres distintos a los que presidían el estilo de vida de una elite social cuya imagen pública experimentóen este período un considerable deterioro.Por su parte,la homogeneización se plasmó sobre todo en el plano de los repertoriosculturales y fue impulsada por la ampliacióndel consumo, los avances educativos de la población, y los cambios en modas, aficiones y pasatiempos. En el mundo de la elite, esto contribuyóal ocaso de las referenciasaristocráticas y al acercamiento a la culturacriolla; a su vez, el avance de la ascendencia culturalnorteamericanaoperó tantosobre la elitecomo sobre los sectores medios, como tambiénlo hizo la argentinización, de fuerteimpacto sobre los sectores de la población de raíces inmigratorias. Algunas de las respuestas de la elite frentea esta homogeneización tuvieron por efecto conducirla hacia un creciente ensimismamiento,atrincherandoa este grupo en tornoa comportamientoscada vez más reñidos con los pilares morales de los sectores medios. Escisión (principalmente moral) y homogeneización (principalmentecultural)fueronasí dos tendencias paralelas aunque de sentido opuesto, que operaron en el marco de una sociedad más compleja (más educada, más próspera, en la que se produjo una ampliación social del acceso al consumo, y en la que la elite, por la dinámica del cambio social, dejó de ser la referenciaexcluyente), y que tuvieronun efecto común: a la declinación de la ascendencia de la alta sociedad sobre las contribuyeron clases medias. El desplazamiento de la elite del centro del escenario social se advierte asimismoen un tercermomento,que se sobreimprimecon el anterior.A travésde él se delinea una extensiónde algunas pautas de comportamiento propias de las clases medias en la elitetradicional.Este proceso, vale subrayar,fue pausado y no logró impactarsensiblementemuchos de los comportamientoso conductas el ejemplode las modalidades de consumo,recordemos de la clase alta (sinreiterar los contrapuntosen la composición y en la estructurafamiliar).Aun así, parece razonable afirmarque hubo un acercamiento mayorque en cualquier momento del pasado entre ambos mundos, trazado sobre una dirección de influencias inversaa la que había imperadohasta el Centenario:de las clases medias hacia las clases altas. En semejantescoordenadas, entonces,las distincionespasaron a descansar cada vez más sobre variaciones en el grado antes que en la naturaleza de en un escenario en el que las clases medias convenciones y comportamientos, a la elitetradicionaldel centrode la inexorablemente desplazaron paulatinaaunque escena. Las peculiaridadesy los ritmosde los procesos delineados en este ensayo, e inclusola mismapertinenciade este esbozo los rasgos precisos de este retrato, sólo podránser establecidoscon precisiónatravés de investigaciones interpretativo, específicas.


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030 RESUMEN

entre la elite esteensayo Esteensayo lasrelaciones de la elite queel ascendiente explora sugiere enelperíodo 1880-1930.social, de granimportancia enel cambio de siglo, socialylasclasesmedias Enparticular, acercade comenzó a menguar haciaelCentenario. Elensayo presenta hipótesis algunas losprocesos el influjo de la lascirculaciones culturales ylasinfluencias recíprocasexplora queafectaron a laemergencia entre losestilos de vidaylasconvenciones sociales elite, deunasociedad ydieron lugar encumbrados.yunacultura de lossectores medios sucentro degravedad en ylosgrupos queposeían deambos deunabreve caracterización Luego grupos, lasclasesmedias.

SUMMARY Thisessayanalyses therelationship between thattheascendancy ofthesocialelitepeakedat thesocialelite andthemiddle classesinArgentinatheturn ofthecentury, andthereafter lostmuch of the1880-1930 Itfocuses ontheway itsformer force. the looks at the during period. Finally, essay way theupper andmiddle intherealm inwhich classinteracted themiddle classesbecamethecentral ofsocialcustoms andlifestyle. Theessayoffers a element ofArgentine culture andsociety, displacing brief ofbothgroups, andthen itsformer dominant description argues theelitefrom position.

REGISTRO BIBLIOGRÁFICO Y Leandro HORA, Roy LOSADA, "Clases altasymedias enlaArgentina, 1880-1930. Notas deinvestigación". DESAparaunaagenda - REVISTA RROLLO ECONÓMICO DECIENCIAS SOCIALES vol.50,№200,enero(Buenos Aires), marzo 2011(pp.611-630). cHistoria de la cultura> 1880-1 930>.


Hora & Losada Clases altas y medias en la Argentina

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