“EVOLUCIÓN DE LA ELECTRICIDAD EN VENEZUELA”
En el año de 1800 y durante un viaje a los Llanos Venezolanos, el sabio Alemán Alejandro Humboldt estudió las descargas eléctricas del pez llamado Temblador. Y en la ciudad de "Calabozo" se entrevistó con el sabio venezolano Carlos Del Pozo, quien había construido por su cuenta algunos aparatos eléctricos, así como un pararrayos.
También en 1800, el italiano Alejandro Volta, propició un gran paso adelante al inventar la pila eléctrica, la cual llevó su nombre. A los mismos tiempos científicos de varios países estudiaban la electricidad y establecían sus leyes: Ampere, Faraday, Ohm, Joule, Maxwell y otros. Mientras, en Venezuela se habían venido utilizando diversos procedimientos para el alumbrado: del Candil de aceite de Coco al farol de Gas. Y la aplicación práctica de la electricidad la inició el ingeniero español Manuel De
Montufar,
quien
introdujo
el
Telégrafo
eléctrico
de
Morse.
Con el apoyo del gobierno de José Tadeo Monagas, el ingeniero Montufar estableció la primera línea telegráfica entre Caracas y la Guaira, hacia el año 1856. Estos descubrimientos permitieron que se inventasen: La Electrólisis, La Galvanoplastia, El Telégrafo y El Teléfono, entre los años 1800 y 1876. La historia formal de la electricidad en Venezuela comienza en 1888 en la ciudad de Maracaibo, con la instalación de la compañía The Maracaibo Electric Light (transformada a partir de 1940 en energía eléctrica en Venezuela, (ENELVEN),
empresa fundada por Jaime F. Carrillo para iluminar las principales calles de la capital zuliana. El 24 de octubre de ese año de 1888, fecha en la que se celebran los cien años de nacimiento del prócer zuliano Rafael Urdaneta, se inauguró el alumbrado público de Maracaibo, convirtiéndose esta en la primera ciudad de Venezuela que contó con iluminación eléctrica. Posteriormente, en 1889, entro en servicio el sistema eléctrico de valencia, por lo que esta se constituyó en la segunda ciudad del país que tuvo alumbrado eléctrico.
La puesta en funcionamiento de este alumbrado eléctrico fue iniciativa del norteamericano Miguel F. Dooley, quien instalo una planta al vapor cuyo combustible era leña y carbón. Posteriormente dicha planta fue adquirida por el empresario Carlos Palacios, quien transformo a fin de producir hidroelectricidad. Es así como fundó la electricidad de valencia, C.A. Sin embargo, ya en 1873, los caraqueños tuvieron la oportunidad de contemplar por primera vez el alumbrado eléctrico, cuando el científico venezolano Vicente Marcano instaló un pequeño aparato para iluminar algunos sitios públicos el día del onomástico del Libertador (28 de octubre). Algo similar ocurriría diez años después, en 1883, cuando Carlos Palacios instaló una pequeña planta eléctrica, impulsada por vapor de agua, para iluminar durante la noche del 24 de junio, fecha en la que se conmemoraba el centenario del nacimiento de Simón Bolívar, el teatro Guzmán Blanco (hoy teatro municipal), los
bulevares y la calle del comercio. Más tarde, en 1896, volverían a disfrutar momentáneamente, de la luz eléctrica cuando la plaza Bolívar fue iluminada para conmemorar los cien años del nacimiento del Mariscal Antonio José de Sucre. Sin embargo, todos estos intentos de iluminación eléctrica fueron pasajeros, pues en la capital no llegarían a establecerse una planta eléctrica sino a finales del siglo XIX. A Caracas llegaría la electricidad en 1897. El 8 agosto de ese mismo año con la asistencia del entonces presidente de la República, General Joaquín Crespo, se efectuó la inauguración de la primera planta hidroeléctrica de Venezuela, en el lugar conocido como "El Encantado", en el río Guiare, cerca de la población de Santa Lucía, en los valles del Tuy (Estado Miranda).
Esta novedosa planta hidroeléctrica fue ideada por el ingeniero venezolano Ricardo Zuloaga, quien 1895 fundó la Compañía Anónima Electricidad de Caracas, inspirado en las grandes empresas de electricidad que se habían instalado en Estados Unidos y Francia.
Después de la instalación de la planta hidroeléctrica "El Encantado", comenzaron a establecerse pequeñas empresas eléctricas en casi todas las grandes poblaciones del país. Aunque, claro está, éstas sólo podían cubrir el alumbrado de los más concurridos lugares públicos. Posteriormente el uso de la electricidad se fue extendiendo por toda la geografía nacional aumentado su uso en actividades industriales y residenciales.
El 22 de octubre de 1910 se constituye la C.A. La Electricidad de Ciudad Bolívar, empresa que hasta ahora ha surtido de electricidad a la capital del Estado Bolívar. Esta empresa pasa en 1954 a manos de inversionistas holandeses, pero en 1977 vuelve al control de empresarios venezolanos. Así mismo el 20 de julio de 1919 se funda la C.A. Anónima Fuerza y Luz Eléctrica del Yaracuy, con el objetivo de explotar un contrato celebrado en 1916 entre la Municipalidad local y J.C. Prince y Cía. para la electrificación de la ciudad. Detrás de la negociación estaba la compañía extranjera Venezuelan Electric Light Company. Un consorcio canadiense adquiere en el año 1924 las acciones de la empresa pionera de la electricidad en Venezuela, The Maracaibo Electric Light Co. La nueva empresa pasa a denominarse Venezuelan Power Company. Para 1926, la Venezuelan Power inaugura la planta "La Arreaga", actualmente "Ramón Laguna", con dos unidades a vapor de 1.500 KW cada una. El año siguiente entra en funcionamiento una tercera unidad con 3.000 KW. Numerosas poblaciones andinas aprovechan la energía de sus numerosos caudales cordilleranos. La ciudad de Mérida se alumbra con la energía proveniente de las aguas del río Mucujún, mientras que Valera utiliza la energía del Motatán. Con el inicio de la explotación industrial del petróleo en Venezuela, a comienzos de la segunda década de este siglo, el país entra en una dinámica de expansión y urbanización que genera un incremento constante de la demanda de electricidad.
La expansión del sistema eléctrico venezolano se hace fundamentalmente en base al aprovechamiento de la energía hidráulica. En 1933 entran en funcionamiento las plantas hidroeléctricas de Mamo, Caoma y Carapa, con una capacidad conjunta de 7.600 KW. Se inaugura el llamado sistema Guarenas, con las plantas de Curupao e Izcaragua, las cuales tienen una capacidad conjunta de 4.950 KW. Inicia actividades la planta de Naiguatá, con capacidad de 3.200 KW. También entran en servicio algunas plantas diesel, como las de La Guaira y Santa Rosa, con capacidad de 3.065 KW. En el interior del país se experimentaba una expansión en el uso de la electricidad. En la zona de Maracay operan las plantas hidroeléctricas de Uraca, Choroní y Las Delicias, conjuntamente con la planta diesel de Maracay. En Valencia, las familias Branger y Stelling utilizan la energía de las aguas del río Pao, complementándola con una planta diesel para alumbrar la capital carabobeña y áreas vecinas. En 1940 Venezuelan Power se convierte en C.A. Energía Eléctrica de Venezuela (ENELVEN). En 1941 entra en servicio la planta termoeléctrica Ricardo Zuloaga, con una potencia de 27.000 KW. Con la puesta en servicio de esta planta, se rompe la hegemonía hidroeléctrica, ya que la mayoría de las pequeñas centrales que operaban eran de este tipo. Para tener una idea de las proporciones, basta saber que esa central térmica tenía una capacidad casi igual a todas las pequeñas centrales hidroeléctricas en funcionamiento para la época. Todas esas plantas cubrían
fundamentalmente los requerimientos energéticos de Caracas y las poblaciones circunvecinas. El 15 de septiembre de 1942 se funda la C.A. Luz Eléctrica de Venezuela (CALEV), subsidiaria de la American Foreign Power Co., cubriendo parte del mercado del área metropolitana de Caracas. En 1963, la C.A. Electricidad de Caracas compra
el
95%
de
las
acciones
de
CALEV.
Las capacidades instaladas de las centrales aumentan aceleradamente como respuesta a los requerimientos domésticos y económicos. Para 1943, la C.A. Energía Eléctrica de Venezuela (ENELVEN), ya cuenta con 13.500 KW instalados, y las compañías petroleras también empiezan a montar sus plantas para cubrir los requerimientos operacionales y los de los campamentos para su personal. Ya existía en el país en el año 1947 una capacidad instalada total de 174.100 KW, de los cuales 95.310 correspondían a empresas petroleras, cerca de 40.000 KW cubrían los requerimientos de Caracas y sus alrededores y 38.790 KW el resto del país. Habia un promedio de 16,8 W de capacidad instalada por habitante, con una gran
concentración
en
Caracas
y
zonas
aledañas
(69,4
vatios/habitante).
Se activa la Sección de Energía Eléctrica del Ministerio de Fomento, con el Ingeniero David Morales G. a su cabeza y comienza la colaboración con la recién creada Corporación Venezolana de Fomento para emprender un estudio a fondo de las necesidades y potencialidades del sector eléctrico, el cual estaba fraccionado y no planificado. Esto constituye el primer gran esfuerzo para la tecnificación del servicio
eléctrico en el país. Dos años después, esa Sección es adscrita a la CVF. Además se inicia el estudio para la construcción de varias centrales térmicas e hidroeléctricas en distintos lugares del país, se hace un análisis de los sistemas existentes y se comienza a planificar la interconexión de las centrales venezolanas.
Se concreta el primer anteproyecto de desarrollo del salto más bajo del río Caroní en 1949, que eventualmente culmina con la Construcción de Macagua I. En 1950 se inicia el Plan Nacional de Electrificación el cual, entre otras cosas, contempla la adquisición por parte de la CVF de numerosas empresas de suministro de electricidad que operan en muchas partes del país en forma anárquica e ineficiente. En 1953 el Estado Venezolano, en vista de las necesidades energéticas de los proyectos de desarrollo económico previstos para Guayana, resuelve crear una oficina especial (la Comisión de Estudios para la Electrificación del Caroní), con rango de Dirección, dependiente del Ministerio de Fomento, para desarrollar el Potencial energético del río Caroní. Ya para 1955, después de revisar todos los estudios efectuados hasta la fecha sobre el potencial energético del río, dicha Comisión define el primer anteproyecto de una central en el sitio denominado Macagua, cuya construcción comienza en 1956. Se funda CADAFE en 1958, como parte de un esfuerzo de la CVF por racionalizar la administración y la operación de las 15 empresas de electricidad dependientes del Estado que estaban repartidas en todo el país. Ese mismo año, la
Comisión para el Desarrollo del Caroní se convierte en una unidad autónoma de la CVF y dos años después pasa a la recién creada Corporación Venezolana de Guayana, como una gerencia técnica. En 1959 entra en funcionamiento la primera de seis unidades de Macagua I, marcando un hito en la historia hidroeléctrica nacional. Culmina en 1961 la construcción de Macagua I, con una capacidad instalada total de 360 MW. Macagua I tuvo una gran significación en la región de Guayana, pues contribuyó poderosamente a crear un dinamismo industrial que aún no se detiene.
La Comisión de Estudios para la Electrificación del Caroní, gerencia técnica de la CVG en 1963, se convierte en la empresa Electrificación del Caroní C.A. (EDELCA), teniendo a su cargo el aprovechamiento del potencial hidráulico de todos los ríos al sur del Orinoco. En este mismo año concluyen los estudios de desarrollo del Caroní aguas arriba de Macagua y se recomienda la construcción de una presa en el sitio denominado Cañón Necuima. Así comenzó a construirse la primera etapa de Guri. El 5 de enero de 1967 se funda la C.A. La Electricidad de Guarenas - Guatire (ELEGGUA), filial de La C.A. Electricidad de Caracas. Sirve al área de los Distritos Plaza y Zamora del Estado Miranda. En 1968 entra en operaciones la primera de diez unidades de la Central Hidroeléctrica de Guri y continúan aceleradamente los trabajos en esa central. Se firma el Contrato de Interconexión, precedido del cambio de
frecuencia, de 50 a 60 ciclos en el área metropolitana de Caracas, dando origen a la Oficina de Operación de Sistemas Interconectados (OPSIS), cubriendo a los sistemas más importantes de generación de electricidad (CADAFE, E. de C., EDELCA). Además en 1973 entra en funcionamiento la central hidroeléctrica de Santo Domingo, con una capacidad de 240 MW. Y ocurre la nacionalización de ENELVEN y ENELBAR en 1976, cuando el Fondo de Inversiones de Venezuela, de propiedad estatal, adquiere las acciones mayoritarias de las empresas, en manos de la Canadian lnternational Power. Seguidamente en 1978 Concluye la primera etapa de Guri, alcanzando su capacidad máxima de 2.065 MW. Ese mismo año comienza la construcción de la Etapa Final. La conclusión de Guri, hoy Central Hidroeléctrica "Raúl Leoni"; se produce en 1986, constituyéndose en un hecho histórico. Al finalizar la obra, la capacidad instalada de esa central es de 10.000 MW, la más grande del mundo en ese momento. En 1987 arranco la puesta en servicio de la primera fase del sistema Uribante Caparo, con una capacidad de 300 MW de un total final de 1.320 MW, y el inicio de los trabajos en Macagua II que prevé una capacidad instalada final de 2.548 MW. En el campo termoeléctrico, los principales acontecimientos en las últimas tres décadas han sido la ampliación de la central de Tacoa en 1.200 MW (se eleva su capacidad a 1.540 MW), la construcción de Planta Centro en Morón, con capacidad
de 2.000 MW, la ampliación de EN ELVEN en el Zulia a 953 MW y la ampliación de ENELBAR a 105 MW.
En los últimos años ha habido una crisis eléctrica en nuestro país que se ha expresado a través de continuos apagones y temporadas de racionamiento energético como la que tuvimos entre 2009 y 2010. Vale la pena preguntarse si siempre fue así todo. La historia de la electricidad en Venezuela comienza el 24 de octubre de 1888, cuando se instala el servicio de alumbrado eléctrico en las principales calles de Maracaibo, para celebrar el centenario del héroe zuliano Rafael Urdaneta. Desde ese momento se comenzó un lento desarrollo en el sector hasta que el 29 de mayo de 1946 la Junta Revolucionaria de Gobierno, presidida por Rómulo Betancourt, creó la Corporación Venezolana de Fomento (CVF), una de cuyas funciones principales era la expansión del sector eléctrico. En 1947 ese organismo creó el Plan de Electrificación Nacional, el primero del país y sobre esa base se fue creada en 1953 la Comisión de Estudios para la Electrificación del Caroní, presidida por Rafael Alfonzo Ravard. En 1956 se comienza la construcción del embalse Macagua, primero de los propuestos por la referida comisión, el cual empezó su servicio en 1959 y con él se iniciaba la producción de hidroelectricidad en gran escala, ideal por ser una fuente renovable y no contaminante. El 27 de octubre de 1958 se crea la C. A. de Administración y Fomento Eléctrico (CADAFE), que reunió a 15 empresas eléctricas creadas por la CVF, señal de que el Estado venezolano tenía la firme convicción de desarrollar la electricidad nacional. Hasta ese año, cuando se inició la democracia
venezolana, la producción de energía era dominada por el sector privado y estaba constituido por una serie de plantas que producían energía independientemente unas de otras y el 94% funcionaba con combustible (termoelectricidad). A partir de 1960 comienza el proceso de interconexión del Sistema Eléctrico Nacional para prevenir cortes por fallas o mantenimiento de la infraestructura. El 8 de agosto de 1963, a finales del mandato constitucional del presidente Rómulo Betancourt, se firmó el contrato para la ejecución del Embalse Gurí, el más grande y el que produce la mayor parte de la electricidad del país. Esta represa comenzó sus servicios en forma parcial el 8 de noviembre de 1968, en el mandato del presidente Raúl Leoni y fue culminada totalmente el 8 de noviembre de 1986, siendo jefe de estado Jaime Lusinchi. Antes de poner el servicio el Gurí se debió cumplir el cometido de unificar la frecuencia eléctrica, ya que en gran parte de Venezuela los aparatos trabajaban con 50 ciclos y el Gurí funcionaría con 60 ciclos. Para evitar daños a los bienes de los ciudadanos el gobierno creó la C. A. Cambio de Frecuencia (CAFRECA), cuya función era modificar la frecuencia de los aparatos eléctricos de 50 a 60 ciclos sin costo alguno para los usuarios. Ese proceso se llevó a cabo entre 1968 y 1971. En septiembre de 1978, bajo la primera presidencia de Carlos Andrés Pérez, se inauguró Planta Centro, que es una infraestructura termoeléctrica diseñada para apoyar al sistema eléctrico nacional en caso de poca cantidad de lluvias, pues ya que en esa época se había logrado que la mayor parte de la generación fuera hidroeléctrica. El 19 de diciembre de 1982 se produjo la Tragedia de Tacoa, que constituyó una prueba de fuego para el sistema eléctrico nacional; dicha planta sufrió una explosión y quedó imposibilitada
para enviar energía a la capital y, sin embargo, a pesar de los numerosos fallecidos y las pérdidas materiales, existió un punto positivo: Caracas no se quedó sin luz pues la mayor parte de la red de electricidad estaba interconectada y otras plantas pudieron proveer a la ciudad de energía eléctrica. En 1998 el 73% de la electricidad generada tenía origen hidroeléctrico. A partir de 1999 el gobierno nacional no ha logrado tener la misma calidad en la expansión de la capacidad instalada de electricidad y tampoco ha cumplido con el mantenimiento de la infraestructura, dando como resultado las fallas que a diario sufrimos los usuarios de este servicio.