En la edad antigua, diferentes teorías intentaron responder a los interrogantes existenciales sobre el cosmos, el hombre, el origen de todo. Con cada postura se formó una escuela o filósofo importante que le secundaba, y sus discípulos...Ej. Esas que se preguntan: se cita el arché que defendieron o la cuestión básica alrededor de la cual gira su pensamiento. Escuela de Éfeso:
Heráclito (504 a. C.): fuego, reivindicación del devenir. Escuela de Elea:
a) Jenófanes de Colofón (530 a. C.): crítica al antropomorfismo religioso. b) Parménides (540-450 a. C.): defensa del ser como inmutable y eterno. c) Zenón de Elea (450 a. C.): aporías en contra de la multiplicidad y el cambio. Escuela de Éfeso
Para Heráclito de Éfeso (535-470 a.C.) el principio de todas las cosas es que son, pero en continuo cambio, en perpetuo flujo. Es decir, están en continuo devenir, nada permanece igual dos momentos consecutivos, nadie se baña dos veces en un mismo río, ya que el agua no es la misma. Por eso, el principio de todo es esa movilidad y constante transformación que representa el fuego, entendido como el fuego de un alfarero que da el ser a los objetos de barro (analogía artesanal), o como la unidad de las transacciones pues todas las cosas cambian por fuego (analogía comercial), “que se enciende en un orden regular y se apaga según un orden regular”. Es decir, hay una ley, un logos, por el que acontece todo, y ante el que la mayoría de los hombres permanecen dormidos, lo que les impide comprenderse a sí mismos, a los demás y al mundo, o sea, hay dos mundos el de los dormidos y el de los despiertos. Este orden es un orden de contrarios [si no existe el frío no podemos saber qué es calor. Sin contrarios, sin movimiento no hay ser], de lucha, porque la lucha de estos opuestos es lo que forma la unidad, pues como la llama de un fuego todo nace por la muerte de otra cosa, o como en un arco la lucha de los extremos para separarse provocan el movimiento.
Continuando la búsqueda de la sustancia primigenia que iniciaron los jonios, afirmó que ésta es el fuego. Observó que el fuego produce cambios en la materia y anticipó la teoría moderna de la energía. También afirmó que todas las cosas se encuentran en un estado de flujo continuo (panta rei ), que la estabilidad es una ilusión y que sólo el cambio y la ley del cambio (o logos) son reales. La doctrina del logos de Heráclito, que identificaba las leyes de la naturaleza con una mente divina, evolucionó hacia la teología panteísta del estoicismo. Heráclito se detiene con esmero en el examen de las condiciones que hacen posible la filosofía. La primera consiste en que el hombre se observe a sí mismo: "Yo me he investigado a mí mismo". La investigación dirigida al mundo está condicionada por la luz que el hombre pueda lanzar sobre su propio ser. La investigación interior descubre profundidades infinitas: "No encontrarás los confines del alma, su razón es tanto más profunda cuanto más te adentres en ella". La investigación interior abre al hombre sucesivas zonas de profundidad, que nunca se agotan: la razón, la ley última del yo, aparece continuamente más allá, en una profundidad cada vez más lejana y al mismo tiempo cada vez más íntima. Pero esta razón, que es la ley del alma, es además ley universal. La segunda y fundamental condición de la investigación es la comunicación entre los hombres. Heráclito plantea constantemente al hombre la alternativa de estar despierto o dormir; entre el abrirse, mediante la investigación, a la comunicación interhumana, que le descubre la auténtica realidad del mundo objetivo; y el encerrarse en su propio pensar aislado, en un mundo ficticio.
Escuela de Elea
Algunos historiadores atribuyen su fundación a Jenófanes de Colofón, quienparece que fue el primero en concebir la existencia de un principio supremo al que atribuyó rasgos divinos. Esta escuela floreció durante el siglo V a. C. e influyó en el pensamiento posterior, tanto en losfilósofos pluralistas como Empédocles, Anaxágoras y los atomistas, como en el propio Platón. Las tesis fundamentales de esta escuela son las siguientes: el instrumento para llegar al conocimiento del ser es la razón; la razón nos muestra el ser como uno, inmóvil e inmutable; los sentidos nos presentan una realidad lusoria al mostrarnos multiplicidad y cambio. Por su tratamiento abstracto y formal del ser, es habitual considerar a Parménides, más que a los anteriores presocráticos, como el fundador de la ontología, aunque este título no se encuentre en su filosofía.
Zenón demostró las tesis de su maestro Parménides mediante paradojas o aporías que llevaban al absurdo las creencias contrarias a las de Parménides, es decir las creencias en la existencia de multiplicidad y de cambio en el espacio y el tiempo; por ello se le considera el fundador de la dialéctica griega. Es una enseñanza griega de filosofía presocrática, que tuvo su apogeo en los siglos V y IV a. C. El nombre proviene de la ciudad griega de Elea, al sur de Italia, el hogar de Parménides y Zenón, máximos exponentes de la escuela. El pensamiento eleático se opone tanto a la filosofía materialista de los milesios como a la teoría del flujo universal formulada por el filósofo griego Heráclito. Según los eleáticos, el universo es en esencia una unidad inmutable, que, siendo infinita en tiempo y espacio, está más allá de la cognición proporcionada por los sentidos humanos. Sólo a través de la reflexión filosófica, afirmaban, se puede alcanzar la verdad última. Las observaciones sensoriales ofrecen tan solo una visión limitada y distorsionada de la realidad. Los eruditos difieren en si la escuela fue fundada por Jenófanes o Parménides. Muchas de las doctrinas eleáticas se basaron en las enseñanzas de Jenófanes, mientras que Parménides desarrolló sus doctrinas dentro de un sistema de metafísica. Según este último, la apariencia del movimiento y la existencia en el mundo de objetos distintos son mera ilusión: sólo parecen existir. Las ideas de Pitágoras y Parménides en realidad nunca supusieron la base del idealismo que caracterizaría después a la filosofía griega y en particular al sistema metafísico de Platón. Llamada también eleática tuvo como representante más destacado a Parménides, Zenón, meliso de Samos y a Jenófanes de colofón como su fundador por ser el primero en concebir la existencia de un principio supremo al que le atribuyo rasgos divinos. La tesis fundamental de esta escuela: *Identificar ser y pensar. *El instrumento para llegar al conocimiento del ser es la razón. *La razón no muestra al ser como uno, inmóvil e inmutable. *Los sentidos nos presenta una realidad ilusoria al mostrarnos la multiplicidad y los cambios. *No existe el no-ser (la nada) Jenófanes de Colofón.
Su principal preocupación es defender la unidad de Dios contra el politeísmo antropomórfico, este dios que se distingue de los tradicionales dioses griegos está por encima de las cosas humanas y no está limitado por órganos corporales a la manera de los hombre.”DIOS ES LA UNIDAD”. Jenófanes anuncia de forma clara la unidad del ser y pensamiento, unidad que radica
en dios implica o no la existencia de un dios a la manera monoteísta. Parménides. Describe la visita de la diosa de la sabiduría, la cual explica al filosofo los dos caminos que hay en la vida: el camino de la verdad y el camino de la opinión, esto dos caminos son antagónicos entre sí, los sentidos y la razón, por el primero se llega a lo cambiable, lo inseguro en los objetos, por lo tanto, no se llega a un conocimiento confiable, el segundo camino se llega a lo inmutable y universal y por ello a un conocimiento confiable. Parménides tomando el segundo camino concluyo que el fundamento constitutivo era el ser.