Erick Erikson- Identidad, juventud y crisisMoratoria Psicosocial: La adolescencia, a medida que la distancia entre e l comienzo de la escolaridad y la inserción laboral se amplía, se ha convertido el estilo de vida entre la infancia y la adultez. En este momento se plantean varios problemas para el adolescente:
Articular los roles y habilidades aprendidos tempranamente con los prototipos ideales en el tiempo presente.
La reactivación de las crisis, de los conflictos de la infancia, en pos de la integ ración de los elementos de identidad a los los cuales se adscribían los los diferentes estadios (organizaciones de la libido) de la infancia, en una identidad, adolescente en un principio y adulta al finalizar.
Esta moratoria psicosocial permite la resolución de las crisis y el establecimiento de ídolos e ideales que resguardaran la identidad “final”. La unidad ambiental de la infancia se verá reemplazada en este proceso por un c irculo más amplío de exigencias sociales. Durante este periodo la sociedad será más pe rmisiva con respecto a ciertas conductas condenadas en la adultez, como ciertas práctic as sexuales, el uso de drogas y alcohol y actividades delictivas. La moratoria también implica una responsabilidad del individuo con la sociedad, la de ser un adulto que respete las normas y cumpla un rol eficientemente. Conflictos de la Infancia I nfancia que se Reactivan:
Confianza Vs. Desconfianza: Hay necesidad de confiar en uno mismo y a su vez se buscan ídolos e ideales en los cuales confiar y e n pos de los cuales demostrarse digno de confianza. A su vez tendrá miedo de los compromisos y las altas expectativas, mostrando desconfianza.
Autonomía Vs. Vergüenza y Duda: El adolescente buscará ser definido por aquello que puede desear libremente, pero a su vez requerirá del consentimiento de los otros (duda) con respecto a sus decisiones, tendrá miedo de exponerse al ridículo y preferirá ser desvergonzado ante los mayores a pasar vergüenza ante sus pares.
Iniciativa Vs. Culpa: La orientación a la búsqueda de una ocupación le llevará a experimentar roles, al igual que en el nivel de organización fálica genital, del cual habrá heredado una capacidad de imaginación ilimitada acerca de lo que podría llegar a ser, el solo hecho de ser un ser limitado le provocará violencia, y sentirá culpa por sus exce sivas ambiciones.
Industria Vs. Inferioridad: El haberse iniciado en tareas productivas en la latencia le genera una necesidad de excelencia e n su rol futuro, el cual tendrá que serle atractivo por la posibilidad de desarrollarse que le brinde más allá del e status y remuneración que ostente.
Los adolescentes requerirán de un ámbito imaginativo y de c ierta libertad para poder resolver estos conflictos tan tempranos y salir airosos de e sta crisis, este será un momento pert inente para muchos a la hora de corregir aspectos no resueltos de la niñez, mediante el desarrollo de habilidades que permitan afrontar los problemas. Identidad Vs. Confusión de Identidad: El conflicto c onflicto de la Adolescencia. En la adolescencia se integran los aspectos ya me ncionados cristalizándose en lo que se llama identidad, esta etapa será más pasable si el adolescente sabe captar lo que será necesario en la sociedad, y se adapta a ella identificándose con los roles que propone y su perspectiva ideológica. Si esto no ocurre la mente del adolescente se hará más explícitamente ideológica, es decir buscará una adaptación de la sociedad a él. Buscará inspiración y que le confirmen los otros. En este momento es importante que la sociedad ofre zca a los adolescentes un ambiente liberal que le permita desarrollarse y buscar su camino, su identidad. El adolescente busca tanto su identidad que hasta el amor es una forma de definirse. El extrañamiento es la confusión de identidad, la rebeldía, el aislamiento, la delincuencia, etc. Es importante no rotular a los jóvenes que e stán pasando un momento de extrañamiento y sobre todo el oportuno acceso a la clínica por parte de estos para ayudarles. El origen de estos problemas muchas veces es la falta de habilidad para construir una identidad ocupacional. Los adolescentes pueden sobreidentificarse con sus héroes al punto de perder la individualidad. Hasta el amor en esta etapa e s una forma de definir la identidad propia proyectando sobre el otro la imagen de su yo, reflejándose. En este estadio todavía no se desarrolla el rasgo democrático de la identidad y la angustia que provocan todo tipo de diferencias los lleva desde la segregación y discriminación hasta adoptar ideologías totalitarias, desde la izquierda totalitaria (comunismo) hasta la derecha totalitaria (grupos fascistas y neonazis). En los países democráticos esto plantea un reto, ya que deben ofrecer al adolescente un ambiente que muestre fuerza y tolerancia. En la democracia industrial, según Erikson, esto es muy difícil y no se cumple, en el sistema capitalista del siglo XXI, no sólo ocurre lo mismo sino que se ha agravado, quizás sea este uno de los principales motivos por lo cual el extrañamiento en esta etapa es casi masivo. La ideología tiene la importancia fundamental de guardiana de la identidad, para no provocar el cinismo, el joven debe poder convencerse de que quienes tienen poder asumen el compromiso de ser mejores. La adolescencia es el motor del cambio social. LA identidad psicosocial es un constructo trascendido por el Yo del individuo, cuyas funciones son el conocimiento y la voluntad.
