Enseñanza de la historia a 3 niveles
Podemos comenzar diciendo a manera de resumen que en el texto de Darío Betancourt se identifican tres grandes momentos en la enseñanza de la historia en Colombia:
El primero es a mediados del siglo XX en donde la historia se eía ! era enseñada desde una isi"n rom#ntica ! patriotera$ el segundo gran momento lo ubica en la d%cada de los sesenta con la entrada de una &historia reisionista' que( como su nombre lo indica( reisaría los marcos tradicionales dentro de los cuales se había moido la inestigaci"n hist"rica( focaliz#ndose en los conflictos sociales ! las frustraciones de las masas$ ! un tercer momento( entre los setentas ! ochentas( de lo que se conoci" como la &)uea *istoria' alimentada en gran parte por historiografía extran+era contempor#nea tales como la escuela de los ,nnales ! la renoada historiografía marxista( entre otros-
Con esta llamada &)uea *istoria' fue que de alg.n modo empezaron a ser debatidas las corrientes positiistas que defendían una ersi"n &oficial' del pasado colombiano( heroico( elitista ! plagado de acontecimientos( generalmente contado ! mane+ado por cl%rigos( rentistas( abogados( +ubilados ! empleados p.blicos( es decir( pr#cticamente por cualquier persona /por tanto de cualquier manera/ que le diera por contar *istoria así no tuiera unos mínimos elementos de rigurosidad para realizarla- Es precisamente en este punto donde( influenciados por la economía ! la sociología( empezaron a formarse historiadores profesionales-
*asta ahí( digamos que resalta el autor los aportes de esta &)uea *istoria'( sin embargo( de+a claro que lo que en realidad hicieron fue pasar de un extremo a otro al conertirse en blanco de un &populismo de izquierda'( como lo categoriza en el texto( haciendo la aclaraci"n de que esta apropiaci"n fue consecuencia de contextos sociales mundiales como las reoluciones cubana ! china ! particulares / locales como la transformaci"n de las guerrillas liberales( surgimiento de nueas organizaciones sociales
! grupos estudiantiles proenientes del Partido Comunista ! de actores políticos como Camilo 0orres-
1eg.n el autor distinguimos entonces dos caminos por los que b#sicamente ha trascurrido la historia oficial de Colombia o me+or( diría !o( en c"mo ha afrontado los tiempos: &2rente al pasado remoto 3Conquista( 4ndependencia( ! construcci"n del Estado5 ha procedido conforme a la m#s pura tradici"n cl#sica reconstru!endo el &hecho social particular'( la tra!ectoria de los &actores protag"nicos' ! principalmente los &procesos' que partiendo desde aba+o( remataron arriba en la construcci"n de un sistema general 3patria( partidos( naci"n( institucionalidad( etc-5$ ! con relaci"n a los tiempos m#s contempor#neos al tiempo que ha ilustrado uno a uno los rasgos funcionales ! paradigm#ticos del sistema ! la sociedad 3presidencialismo( +erarquizaci"n social( empresariado( consolidaci"n del mercado externo( sentido patri"tico nacional( etc-5 ha +uzgado como subersias las acciones de sus opositores 3caudillos de masas( el moimiento popular ! social( el marxismo( la guerrilla( etc-5'678 9o que desemboca en lo que para Betancourt es la gran problem#tica ! es que la gran ma!oría de las personas 3al haber sido formadas en estas formas cl#sicas conseradoras( que hemos enido mencionado( que eían ! enseñaban la historia de forma lineal omitiendo el desenolimiento de una conciencia crítica( social ! moderna5 no se dan cuenta de que sus acciones/ actiidades cotidianas sociales ! políticas constru!en sistema ! sociedad ! por lo tanto se entienden &ahist"ricos' o peor( temen que atenten contra la nacionalidad ! contra el Estado( lo que significaría que pensar diferente o pensar /digo atreidamente/ es pr#cticamente un delito-
Con todo esto ! teniendo en cuenta que en la enseñanza de la historia en Colombia a &predominado el relato descriptio ! narratio ! la sobrealoraci"n del papel +ugado por los aspectos her"ico( cat"lico( partidista ! militar' ! que &puesto que para la elite con la construcci"n del Estado fue agotada la *istoria ! lo que ha enido despu%s de esta primera culminaci"n s"lo ha sido o podría ser hist"rico en la medida en que tribute estabilidad al sistema lo contrario no solo sería regresio sino inolutio/( construir en
el siglo XX un sistema distinto al que rige no sería hist"rico' Betancourt conclu!e diciendo que desafortunadamente no se ha aanzado lo suficiente en la estructuraci"n de una metodología apropiada ! que han fracasado tanto las ersiones &oficiales como las &criticas' diciendo con acierto que no existe una educaci"n neutra ! que por lo tanto es deber de la *istoria &enseñar a las nueas generaciones a comprender( apreciar ! disfrutar todos los estigios del pasado ! no .nicamente ciertos hechos ! obras &monumentales'- Es necesario incentiar la mirada con &o+os hist"ricos'( alorando los restos ! los estigios aparentemente insignificantes desde el punto de ista material( documental( artístico o cultural( puesto que unos ! otros refle+an las condiciones de la ida cotidiana( los anhelos( las frustraciones ! las luchas de una comunidad( de un pueblo o de una naci"n'6;8
Para concluir esta reseña quisiera resaltar un punto importante que toca el autor ! es cuando hace referencia que a la parte m#s necesitada de colombianos ha +ugado una mu! pequeña parte en el proceso de hacer *istoria ! que &el con+unto de marginados conformado por m.ltiples fracciones de clase agrupadas gen%ricamente en la categoría pueblo se encuentra hist"ricamente mu! dispuesto a presionar( m#s que cualquier otro sector( para transformar le sistema' cuando en Colombia pareciera ser al contrario( son precisamente estas partes m#s necesitadas de la poblaci"n /por supuesto no todos( de lo contrario estaría ca!endo en una generalizaci"n inadecuada/ quienes refuerzan ! apo!an el mantenimiento del poder- Digo esto no con el fin de recriminarlos o echarles la culpa de lo que pasa en el país ni mucho menos( sino por el contrario de ubicarlo dentro del contexto desde donde lo estamos abordando( la educaci"n en general ! en concreto la enseñanza de la historia( ! es que son estas ba+as clases sociales precisamente las que en nuestro país tienen la peor educaci"n ! la m#s cl#sica conseradora lo que desemboca en la necesidad mu! arraigada en nuestra cultura/ de alguien( un dios( un presidente( un profesor( que nos diga que es lo que ha! que hacer que nos diga cu#l es la &erdad' todo debido a esta &hist"rica' enseñanza cat"lica( parroquiana impartida desde siempre en Colombia- De ahí la necesidad de lo planteado por el autor de incentiar una mirada con &o+os hist"ricos' ! críticos ante pr#cticamente todo /diría !o/ para crear nuestras propias &erdades'-
/////////////////////// 678 Betancourt Echeerr!( Darío- Enseñanza de la historia a tres nieles- Cooperatio Editorial
- Pp- ;?6;8 4bíd- Pp- ?7-