El rol del abogado va cambiando para responder a nuevos retos. Los abogados de hoy, no pueden limitarse solamente a litigar a favor favor de un cliente. Con el proceso de globalización el reto más extraordinario para el nuevo abogado, es el aprender como proveer acceso a la justicia a nuestros clientes. Esto no es sólo para asegurarnos que existan servicios gratuitos para las personas indigentes, sino que también las personas que obtengan representación legal, verdaderamente reciban justicia a través de nuestros sistemas judiciales. El ser un abogado competente requiere que actuemos con más profesionalismo que antes. Tenemos que ser especialistas en una materia, asesores eficaces, redactores creativos, caudillos legales, estudiantes del derecho, y sobre todo, abogados persuasivos. persuasivos. En resumen, el abogado es como un matador, cuando cuando representa a sus clientes. Si el caso requiere que se litigue, el abogado promete abogar con vehemencia vehemencia persuasiva a favor de su cliente. El abogado que es como un Matador, también debe de utilizar otras destrezas para abogar en diferentes áreas. Ya sea que aboguemos en los tribunales, agencias administrativas, organismos internacionales, grupos no-gubernamentales, o instituciones comunitarias, el abogado siempre es una flama de la justicia –un instrumento de nuestro sistema legal, cuyo conocimiento y talento aseguran que exista un acceso a la justicia en el proceso jurídico. Por supuesto que ya no es suficiente el sólo ser un un abogado que presenta la mejor defensa defensa para su cliente. El abogado que es verdaderamente globalizado, tiene que representar roles múltiples, y tiene que ser más emprendedor y creativo cuando representa a sus clientes.
1. El abogado tiene que ser un educador. El abogado tiene que que avanzar la relación entre el derecho y el pueblo. Debido a la tremenda ignorancia sobre las leyes, el abogado debe de aprovechar toda oportunidad para informar al público sobre e l estado de las leyes le yes 2. El abogado tiene que utilizar los medios de comunicación como agentes para efectuar cambios en las leyes. Los medios de comunicación son un instrumento muy efectivo de abogacía abogacía a beneficio de nuestros clientes. Esto se lleva a cabo escogiendo los los casos con más mérito, y usándolos para demostrar como como se aplica la ley en determinando caso. Las leyes no operan de manera abstracta. 3. El abogado debe trabajar con la legislatura. Debido a que el Congreso es el responsable de la aprobación de las leyes de inmigración, es el Congreso el que tiene el poder para cambiar las mismas. 4. El Abogado tiene que ser un diseñador del derecho. Al igual que cuando construimos defensas legales, estudiando y analizando cuidadosamente cuidadosam ente precedentes y las leyes, los abogados tienen que aplicar sus energías creativas para diseñar nuevas leyes. 5. El abogado tiene que ser un conciliador. Una habilidad importante que un abogado debe desarrollar, es la de ser un conciliador. Cuando no existe un remedio legal para nuestro nuestro cliente, tenemos que explicarle las malas noticias con sabiduría y comprensión. 6. El abogado tiene que ser un a El abogado tiene que comprender estos varios roles que tiene que desempeñar, y utilizar sus habilidades en forma creativa, ya sea com o educador, como cabildo, sanador, activista en la comunidad, y luchador, con fin de diseñar soluciones para la resolución de los problemas de sus clientes
El abogado tiene que comprender estos varios roles que tiene que desempeñar, y utilizar sus habilidades en forma creativa, ya sea com o educador, como cabildo, sanador, activista en la comunidad, y luchador, con fin de diseñar soluciones para la resolución de los problemas de sus
clientes. Tenemos que comprender el valor del derecho preventivo, vivir la emoción de la abogacía oral, promover el derecho, y asegurar avenidas de acceso a la justicia. A esto es a lo que llamamos la resolución de problemas en forma creativa. Y esto es lo que significa ser una flama de la justicia.
} La excelsa profesión del abogado tiene su génesis con la primera división del trabajo y el surgimiento de normas coercitivas de conducta que requerían de la hermenéutica jurídica. Como abogado se presenta a Jesucristo en el nuevo testamento. La primera escuela de foro abogadil fue Atenas, siendo Pericles su primer abogado profesional. Abogado es la persona legalmente autorizada para defender en juicio los derechos e intereses de los litigantes, también el facultado para dar dictamen sobre las cuestiones de índole legal que les sean consultadas.
El artículo 2 de la Ley de Abogados expresa: “El ejercicio de la abogacía impone dedicación al estudio de las disciplinas que impliquen la defensa del derecho, de la libertad y de la j usticia…” El artículo 2 del Código de Ética Profesional del Abogado Venezolano, establece: “El abogado tendrá como norte de sus actos servir a la justicia, asegurar la liberta d y el ministerio del derecho”. En el segundo aparte del artículo 253, de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, se expresa que los abogados y abogadas autorizados para el ejercicio constituyen, juntos con otros órganos y poderes el sistema de justicia. A 237 años del natalicio del más leal amigo de nuestro Libertador Simón Bolívar, los abogados vemos con gran estupor y preocupación, como se ha ido sustituyendo el Estado de Derecho, que existía en la patria de Don Cristóbal Mendoza, por el Estado de Anomia de hoy. Llegó un ser a Miraflores que no tiene los méritos para sentarse el solio de Bolívar, desprovisto de talante democrático, con un marcado fin personal, perpetuarse en el poder. Por eso, gradualmente ha destruido principios y valores democráticos. Ha instaurado una dictadura a la sombra de las leyes, bajo la apariencia de la legalidad. Los poderes públicos no cumplen con sus atribuciones constitucionales, y acatan dócil y obedientem ente las órdenes, que incluso a través de medios de comunicación les da el autócrata de Sabaneta. En una democracia existen poderes autónomos, soberanos e independientes, en la patria de Simón Bolívar, de Andrés Bello, de Cristóbal Mendoza y de Rómulo Betancourt, no los hay. El presidente interviene en las decisiones que le interesan para sus designios. Los miembros de los otros poderes rinden culto al jefe del ejecutivo. Los dineros públicos o se regalan al extranjero o se pierden en la corrupción, con el hambre de los nacionales y otras veces son arrojados en los causes de la concupiscencia. Este es un país, severamente azotado por la corrupción, en donde existe hambre, miseria, desempleo, niños de la calle, no hay soluciones habitacionales, ni insumos para los hospitales, no hay presupuesto para la educación en ninguno de sus niveles, estamos atrapados en los brazos de la delincuencia, con más de 180 mil muertes violentas en diez años, donde según el Ministro del Interior más del 20% de los crímenes son cometidos por policías. Todo esto ocurre y el tesoro público se malgasta en juergas repugnantes, se lo roban y regalan sin limitación alguna. A quien quiere trabajar, producir y crear empleo, se persigue y se le roban sus
propiedades. Los funcionarios de alto nivel y los representantes de los poderes públicos, violan a su antojo el texto constitucional. No habrá justicia mientras exista un régimen como este que nos avergüenza. Estamos viviendo la página más bochornosa de nuestra historia. Debemos enarbolar la bandera de la justicia contra el dominio de los pigmeos que nos oprimen. Ante esta apesadumbrada y melancólica realidad, los abogados venezolanos no podemos continuar con indiferencia. Debemos participar proactivamente en el rescate del Estado democrático y social de derecho y de justicia que propugna nuestra Carta Magna y en el restablecimiento de los demás principios, derechos y garantías establecidos en nuestro texto constitucional y que han sido conculcados por el régimen. La función insoslayable del derecho, es la garantía de un ordenado desarrollo de la vida social. El derecho no puede contradecir la intrínseca naturaleza espiritual del ser humano, todo orden impuesto equivocadamente por la fuerza es transitorio y efímero. Los Códigos y Leyes dictados contra el espíritu, razón y costumbres de un pueblo estimulan su transgresión y por tanto resultan inviables. Por esto la paz social de un pueblo no se obtiene mientras el Estado y el Derecho a través de un pacto social no logren la genuina expresión de justicia. Los pilares donde descansan las dictaduras y regímenes tiránicos son: El Terror, la represión, e l homicidio del adversario, la persecución, la violación de los Derechos Humanos y la eliminación del derecho de información y libertad de expresión. Los abogados que tenemos como misión la defensa del derecho ajeno y la búsqueda de la justicia, no podemos dejarnos intimidar, debemos ir al debate, a las comunidades, organizar a los venezolanos, solidarizarnos con nuestra valiente colega Perla Jaime, brillante profesional del derecho. Luchar por el rescate de la independencia del Poder Judicial.