Trabajo colaborativo: Prácticas de retroalimentación Modulo 4 . Identificar estrategias de retroalimentación según Rebeca Anijovich, Carol Dweck y el Currículo Nacional de la Educación Básica. I.
Datos generales Patricia María Romero Vera
I.E. “Colegio de la Libertad” – Hz. – Hz.
Eduardo de la Cruz Egidio Jamanca Lic. Magali Mozo Diestra
II. Desarrollo de la actividad. 1. Tabla con la información que brindan Rebeca Anijovich, Carol Dweck y el Currículo Nacional de la Educación Básica.
1. ¿Cuándo, ¿cómo y de qué modo retroalimentamos?
Con un “todavía no” uno entiende que está en proceso de aprendizaje, te abre un camino hacia el futuro, te ayuda a entender que un fracaso, al principio de de una carrera, es un momento de inflexión.
Debe decirse en un lugar y momento oportuno y adecuado, decirlo de buena manera, comentar y compartir con calma lo que uno desea decir.
2. Clima del aula (relaciones personales, interpersonales).
Frente a retos y dificultades algunos estudiantes reaccionan sorprendentemente bien, les gusta los retos, entienden que así pueden desarrollar sus habilidades, tienen una “mentalidad de crecimiento “.
El clima y las relaciones personales e interpersonales entre docentes y estudiantes deben ser de tranquilidad, no debe ser punitivo, y donde el error debe formar parte del proceso de aprendizaje.
La retroalimentación, sea oral o escrita, tiene que ofrecerse con serenidad y respeto, debe entregarse en el momento oportuno y adecuado, contener comentarios específicos y reflexiones, e incluir sugerencias que le ayuden al estudiante a comprender el error y tener claro cómo superarlo para poder mejorar su desempeño. El clima del aula debe ser positivo, donde se facilita el aprendizaje de los niños y niñas, en que los estudiantes perciben apoyo y solidaridad de parte de sus pares y docentes, se sienten respetados en sus diferencias y falencias, así como identificados con el área y su escuela. Además,
3. Expectativa de los estudiantes.
4. Construir criterios con estudiantes.
5. Oportunidades para aprendizaje.
los los
el
6. Focalizar aspectos para la retroalimentación.
Una persona con mentalidad en crecimiento piensa que las habilidades se pueden desarrollar, muestra una gran actividad cerebral, son personas que se involucran, son cerebros que no dejan de pensar en el “todavía”, están comprometidos, procesan el error, aprende de ellos y los corrigen. Se debe elogiar el proceso en el cual la persona se involucra (su esfuerzo, su estrategia, su enfoque, su perseverancia, su proceso). Si se enaltece el proceso se generan personas fuertes y resistentes.
Recompensar el esfuerzo, la estrategia y el progreso, se recompensa las acciones correctas obtenidas ahora, pero recompensando el proceso. Mientras más tiempo dedique la persona a mejorar un proceso, mayor nivel de recompensa. Esto ayuda a potenciar la perseverancia frente a problemas realmente muy difíciles.
Utilizando las palabras “todavía” y “aún no”. En la retroalimentación, estamos proporcionando al estudiante mayor confianza, otro punto
Las expectativas de los estudiantes son los logros de aprendizaje, que deben ser claros los criterios y los estándares, de manera que los estudiantes sepan qué se espera de ellos.
Deben ser compartidos los criterios de sus aprendizajes de los estudiantes con los desempeños de los docentes; porque al construir criterios se va aprendiendo de aquello que se va discutiendo, pensando y analizando. Empoderar a los estudiantes para que ellos mismos identifiquen ¿cómo están yendo?, ¿Cómo les está yendo en el colegio?, ¿Cómo está ejerciendo su rol como estudiante? Ofrecer que los mismos alumnos identifiquen sus problemas, sus fortalezas, sus debilidades, y no decirlo siempre lo que debe hacer o decir. Se debe focalizar en aquellos aspectos que sean más relevantes para el grado correspondiente, tiene
sienten que lo que aprenden es útil y significativo; donde los estudiantes se sienten protegidos, acompañados, seguros y queridos. Lograr autonomía en su aprendizaje a tomar conciencia de sus dificultades, necesidades y fortalezas. Aumentar la confianza para asumir desafíos, errores, comunicar lo que hacen, lo que saben y lo que no. La construcción de los criterios debe basarse en criterios claros y compartidos. Es decir, especificar qué aprendizajes deben demostrar frente a las diferentes situaciones propuestas. Crear oportunidades continuas de aprendizaje para que el estudiante demuestre hasta dónde es capaz de combinar de manera pertinente las diversas capacidades que integran una competencia, antes que verificar la adquisición aislada de contenidos o habilidades o distinguir entre los que aprueban y no aprueban.
La retroalimentación debe ser focalizado en aspectos importantes, positivos y que el estudiante sea capaz de lograrlo, que
de vista del futuro, una mejora de la impertinencia.
que ver con los proyectos que se encara y con los procesos de mejora.
7. Ofrecer ejemplos de trabajos para retroalimentar.
Recompensa salir de la zona de confort. Potencia salir de la zona conocida para fomentar el aprendizaje de cosas nuevas y difíciles, las neuronas crean nuevos vínculos más fuertes, y con el tiempo pueden llegar a ser más inteligentes.
8. Valorar lo positivo y preguntar para generar reflexión.
Educar a los estudiantes en la mentalidad del desarrollo brinda algunos puntos para educar a los niños en la mentalidad del “todavía” o desarrollo, como el dejar de elogiar la inteligencia o el talento ya que esto no ha dado resultado; en cambio, elogiar el proceso de trabajo, su perseverancia, sus estrategias y su enfoque, sin obsesionarse con el resultado final. “Alabando el proceso se crean niños fuertes y resistentes” asegura la psicóloga.
Una manera de retroalimentar es mostrando y ofreciendo ejemplos, modelando cómo se hace algo, porque es bueno mostrar un buen ejemplo; después el alumno lo hará a su propio modo o manera. Mostrar buenos ejemplos es buena manera de retroalimentar. Valorar los aspectos positivos, identificando sus fortalezas, lo que hace bien. No es siempre decir ¿Cómo hay que hacer cosas? Sino hacer una buena pregunta para que él quede pensando o reflexionando y que impacte en su autoestima. El que se siente bien se siente reconocido y tendrá muchas posibilidades de aprender más y mejor.
permite comparar lo que debió hacer y lo que intentó lograr con lo que efectivamente hizo, también que promueva su autonomía. Ofrecer modelos de trabajo o procedimientos para que el estudiante revise o corrija. Para lograr se puede pedir al estudiante que realice una autoevaluación con base en criterios definidos, en el que analice las fortalezas de su desempeño y las áreas específicas en las que necesita mejorar, definiendo estrategias concretas para lograrlo. La valoración del desempeño significa describir lo que es capaz de saber hacer el estudiante a partir del análisis de la evidencia recogida: qué saberes pone en juego para organizar su respuesta, las relaciones que establece, cuáles son los aciertos y los errores principales cometidos y sus razones probables. Las preguntas para reflexionar: ¿Cuál es el error principal?, ¿Cuál es la razón probable para cometer ese error?, ¿Qué necesita saber para no volver a cometer ese error? ¿Cómo puedo guiar al estudiante para que evite el error en un futuro? ¿Cómo pueden aprender los estudiantes de este error?
9. ¿Qué esperamos que el otro haga con la retroalimentación?
10. Redes de conversación: tres preguntas: ¿Adónde voy? ¿Cómo me está yendo? ¿Cómo sigo?
Se espera que los alumnos se involucren a fondo. Sus cerebros no dejen de pensar en el "todavía". Estos estudiantes están muy comprometidos, procesan el error, aprenden de ellos y los corrigen.
Antes, el esfuerzo y la dificultad hacía sentirse estúpido y daban ganas de renunciar. Ahora, el esfuerzo y la dificultad hacen que las neuronas formen nuevas conexiones, lazos más fuertes, las personas se vuelven más inteligentes.
La retroalimentación no debe quedar olvidada. Esperamos que el alumno haga algo con aquello que le pedimos, proponemos, preguntamos, le sugerimos; debemos ser muy claros en ¿Qué queremos que hagan nuestros alumnos con esa retroalimentación? Puede ser utilizar otra estrategia, puede ser aclarar con coherencia las preguntas, volver a escribir el trabajo. Tiene que ver con entender ¿Cuáles son los objetivos?, ¿Por qué estoy yendo para allá? Tiene que ver con: ¿Cómo estoy yendo?, ¿Qué creo que está bien?, ¿Qué debería mejorar?, ¿Qué recursos necesito?, ¿Qué ayuda necesito? Tenemos que pensar en el futuro, tenemos que pensar hasta aquí llegué, ¿Qué más tengo por delante?, ¿Hacia dónde voy? Nuestro deseo es formar estudiantes autónomos, que sean capaces de tomar buenas decisiones y seguir aprendiendo; trabajar conjuntamente docentes, estudiantes, padres de familia y la
Atender las necesidades de aprendizaje identificadas. Brindar oportunidades diferenciadas a los estudiantes. Desarrollar la capacidad de autoevaluar el propio desempeño. Ajustar estrategias de enseñanza, diseñar nuevas situaciones significativas, replantear estrategias metodología, etcétera.
¿A dónde voy? Esto es tener como meta el perfil de egreso, ¿Cómo me está yendo? Saber cuál el punto de partida y conocer los saberes de los estudiantes, conocer lo que los niños y niñas saben. Durante el transcurso se va mejorando la planificación. ¿Cómo sigo? Teniendo como meta el perfil de egreso y las competencias, desarrollando las competencias, capacidades con la utilización de recursos y materiales pertinentes. “Aprender haciendo” y “Enseñar entreteniendo”.
sociedad conjunto.
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2. Ejemplo de ¿Cómo implementarlo en el aula? Aspectos Valorar lo positivo y preguntar para generar reflexión.
Ejemplo de implementación en el aula *Facilita el desarrollo de la autorreflexión y la autorregulación del aprendizaje. Para lograrlo, se debe incidir en que nuestros estudiantes realicen una adecuada autoevaluación en base a criterios definidos, en el que identifique sus fortalezas y sus debilidades con el fin de superarla, definiendo estrategias concretas. También fomentando la retroalimentación.
