Cultura Anarquista en La Argentina a Principios Del Siglo XX

CULTURA ANARQUISTA EN LA ARGENTINA A PRINCIPIOS DEL SIGLO XX Ia á c o v

O v e d 

Universidad de Tel Aviv

La actividad anarquista en la Argentina estaba muy ramificada a comienzos del siglo XX; se centraba principalmente en los sindicatos obreros y a través de ellos llegó a obtener muchos éxitos, la F. O . R . A.  —la  —la m a y o r d e las fe d e ra c io n e s o b r e r a s de la A rg e n t in a en esa épo ca— fue fue fund ad a con su pa rticipac ión y a par tir de 1902 1902 estu estuvo vo dirigi dirigida da por líder líderes es de sindicatos sindicatos an arqu istas. La actividad an arq uis ta se hizo presente en la vida sindical —y como derivación, también en el q ue ha cer p úblico — a fines fines del siglo siglo X I X , sobre el trasfondo de dos procesos importantes: 1) La absorción de grandes olas de inmigrantes de Europa, sobre todo procedentes de España e Italia: 2) El des m oron am iento de las las relaciones laborales en un perío do de rápida urbanización y surgimiento de la industrial local. El lapso entre 1897 y 1905 fue decisivo para la delineación del anarcoc anarcocomunismo omunismo sindical sindicalist istaa en la la A rgentina, una p articu lar com  bin  b in a c ió n del de l a n a r q u is m o d e esos d ía s . P a r a le la m e n te a esta es ta r a m i f i c a da actividad especial, debidamente estudiada y esclarecida, 1se inició también una diversificada actividad anarquista en los dominios de la cultura, el arte y la forma de vida. Esta no ha sido aún lo suficientemente an alizada y el pre sen te artícu lo se se pr op on e suplir su falta. Nos Nos circunscribiremos al período “formativo” en la demarcación del cauce que siguió el anarquismo argentino, es decir, al tiempo que media entre 1897 y 1905. A nuestro entender, se trató también de una fecunda época formativa en todo lo concerniente a la cultura y al arte anarquistas.

1 Véase Véase I. Oved,  E l an arqu ar qu ism is m o y el m o v im ie n to obre ob rero ro en A rg en tin ti n a,   México, Siglo X X I , 1978; Diego Abad de Santillán,  La F O R A .: id e o lo g ía y tra tr a y e ct o ria ri a , Pr oyec oy ec ción , Buenos Aires. 1971; Sebastián Marotta,  E l m o v im i e n to s in d ic a l a rg e n tin ti n o ,   vols. III, Buenos Aires, Calomino, 1970.

La actividad actividad educativa e inte lec tua l — como med io vital pa ra m odelar la imagen del activista del anarquismo, y como elemento im po  p o r t a n t e en la c a m p a ñ a p o r la im a g e n d e la s o c ied ie d a d y su f u tu r o —  ocu pa ba un lug ar destacado en la la vida vida de los an arq uistas . Los g ra n des pensadores del anarquismo le atribuían gran importancia y en sus escritos es factible encontrar pareceres directos al respecto. 2 R e saltaba la necesidad de asignar medios y métodos a la educación li b e r t a r ia , in te g r a l, a la lu c h a e d u c a tiv ti v a c o n tr a las in s titu ti tu c io n e s d e e n señanza religiosoecliesiástica, o laicaestatal responsables de las deformaciones de la educación en boga. La finalidad de la actividad educativa libertaria consistía en capacitar gente que pudiera sobre po  p o n ers er s e a los co n cep ce p tos to s y pre p reju juic icio ioss a rrai rr aig g a d o s d esd es d e h a c ía g en e ra c io nes, arrostrar el conjunto de problemas de la sociedad moderna y allanar el camino para la sociedad del futuro. Los elementos fundam entales en tal tal educación son son la libertad, el el antiau toritaris m o, el ra cionalismo, el desarrollo renovado, la “integralidad” que conjuga conocimientos técnicos e instrucción sociológica y humanista, acentuan do siempre siempre que sem ejante conjugaci conjugación ón no es un sucedáne o de la la emancipación por la vía de la revolución, sino que se entremezcla con ella y configura un prerrequisito irrenunciable para el éxito. A fines del siglo X I X y a comienzos del X X , los activistas anarquistas empezaron las experiencias de materializar tales ideas en la práctica,  po  p o r m e d io d e la h a b ilit il itaa c ió n d e inst in stit itu u cio ci o n es e d u c a tiv ti v a s a n a r q u i s t a s . 3 Los anarquistas siguieron con simpatía, en la Argentina, el surgimiento y el desarrollo de esas experiencias educativas. En uno de los  pr  p r im e ro s n ú m e ro s d e  La  L a P rote ro test sta a H u m a n a   ya se podía encontrar información sobre una iniciativa anarquista francesa, de implantar una escuela libertaria; el periódico saludó esa iniciativa con beneplácito.4 cito. 4 Poco después asomó un a iniciativa iniciativa an álog a ta m bié n en Buenos Buenos Aires, Aires, aun qu e n o tuvo éxito. éxito. Nos enteram os de ello ello al leer leer  La  L a P rote ro tess ta Humana   del 13.2. 13. 2. 1898, que inserta en un lugar destacado el 2 M. Ba kou nine, Oeuvres P. V. Stock 1912. “L'Education Oeuvres C ompletes,   tome V. Paris. P.V. inte gra le” , pp . 1356 1356:: 150155, 150155, 165158. 165158. P. P. K ro p o tk in , Fields, Factories and WorkLondres, Ed. T . Nelson, Nelson, p p .369406. shops Londres, 3 J. M aitron, aitron, "Les "Les Anarchistes Anarchistes et l'ensei l'enseignem gnem ent", p p .328339. Sobre la “escuela moderna" de Ferrer Woodcock,  A n a r c h is m ,   p p . 348350. G. Brenan, The Spanish 165. D. A . de Santillán. "El Movimiento ana   pp. 165168170.  L a b y r i n t h ,   p. 165. rquista"  r quista"  pp. 4  La 27. 6, 1897, "La Educación Libertaria" .  L a P rote ro testa sta H u m a n a ,   27.6,

 pr  p r o g r a m a p e d a g ó g ico ic o p a r a la es cu ela el a li b e r t a r i a , e la b o r a d o p o r u n  jove  jo ven n e s tu d i a n t e d e n o m b r e J u lio li o M o lin li n a y V e d ia . E n el m ism is m o n ú mero se habla de la participación de este promotor en una asamblea de la Asociación de Escritores, a fin de lograr apoyo material para la empresa. El periódico recibió efusivamente la iniciativa de crear la escuela libertaria, en la que veía un medio valioso para fomentar la idea idea an arqu ista en la la Arg entin a. Pero el el llamad o no tuvo tuvo repercusión y poco después después J. M olina y Vedia anun ció que re tirab a su sugerencia. 5 Pese al revés de la primera iniciativa, el tema no se esfumó de los círc círcul ulos os anarquistas de la la A rgentina. Al año, la prensa anarq uista del del país rea nu dó las noticias sobre el el propósito propósito d e in au gu rar escuela escuelass libertarias. El primer intento de esta índole se hizo en Rosario, donde el Cen tro O bre ro de Estudios Social Sociales es creó, en 1899 1899,, un a escuela ele mental libertaria en uno de los suburbios obreros. 6 Pero no ten em os información sobre sobre la sue rte corrida p or la em presa, ni cu án to tiempo  pe  p e r d u r ó . La primera experiencia sería de crear una escuela libertaria —que se sostuvo po r cierto t ie m p o — la hizo en B ueno s Aires Aires a fines de 1899, 899, el grup o an arcoco m unista ‘‘ ‘‘G rupo de Prop ag an da L ibertaria de Los Corrales”. Este grupo fue fundado en noviembre de 1899, con el objeto declarado de consagrarse antes que nada a ese fin. Al momento de su fundación lanzó un llamado a todos los círculos anarquistas quistas de de Buenos Buenos Aire Aires, s, p ar a qu e ap oya ran su su em pres a. 7 La in ic ia tiva se recibió positivamente en un comienzo, al parecer, por parte de los círculos anarquistas de la capital, y pronto fue acogida con beneplácito y entusiasmo por el renombrado periodista anarquista P. Paraire, en el artículo teórico que publicó  La  L a P r o test te sta a H u m a n a en enero de 1900. En el que se lee: Hemos entrado ya por el buen camino, y la formación de círculos de estudios sociales, el establecimiento de escuelas libertarias; estos son... intereses creados para la gran revolución... Extiéndase en toda la República estos círculos sociales, manténgase una relación 5  L a P rote 13. 2. 1898, "Escuela Libertaria"  Ib . 2. 1898 ro testa sta H u m a n a ,   13.2.  I b í d .,   2 0 .2. "Qu ímica a narq uista".  Ib  I b íd ., 6 . 3. 1893, "Escuela libertaria". 6  L a P ro test  11. 6 . 1899, 1899, “M ovimiento social”. te sta a H u m a n a ,  11.6  L a P rote ro test sta a H u m a n a ,   2 4 . 12. 1899.  L 'A v v en ir e,   2 4 . 12. 7  E l R e b e ld e ,   2 1 . 12. 1899.  La 1899. 8  L a P ro test te sta a H u m a n a , 7 . 1. 1900.

activa entre todos, establezcan cuantas escuelas libertarias sea posible... ” .8 Cabe señalar que el grupo que fundó la escuela libertaria  pe  p e r te n e c í a , es esos tie ti e m p o s , a los c írc ír c u los lo s a n a r c o  c o m u n is ta s “ a n t i orga nizado res” del del periódico periódico  El  E l R e b e l d e , y la cir  cunstancia de que P. Parraire, ideólogo del grupo, se apresurara a encomiarla, prueba que el apoyo a la escuel escuelaa lib erta ria incluía a todas las las corriente s rivales. es. Pero la la rivalidad inte rna den tro del anarqu ism o hizo hizo qu e  La  L a P r o testa Humana   redujera en mucho la información sobre la actividad de la escuela libertaria en 1900, y el grueso de las noticias en torno a ella ella deb e ser extraído de los los números de  E l R e b e l d e .  Según dichos informes, en julio de 1900 concurrían a esas escuelas 79 niños, que “se educan sin prejuicios religiosos ni patrióticos”. 9 La esc uela fun cion ó regularmente, según parece, todo el año 1900, y a comienzos de 1901 se apuntaba que la concurrencia era de 70 alumnos; también se añadía que de haber más aulas podrían estudiar hasta 200. 10 A c e r c a del funcionamiento de esa escuela se insertaron también noticias en la prensa ge ne ral. En  L a Pren Pr ensa sa   —en la sección Movimiento Obrero leemos leemos:: “El “El Club Literario ha establecido establecido una escuela escuela libre libre pa ra t ra  ba  b a ja d o r e s d e am b o s sexo se xos, s, p a r a a d u lto lt o s y n iño iñ o s , a c u o ta voluntaria”. 11 Pero en los días en que se publicó la noticia, los azotes financieros  po  p o n ía n e n p e lig li g ro la e m p r e s a . El g r u p o d e p r o m o to re s lan la n z ó p o r ello ell o un llamado a los partidarios de la educación libertaria, pidiéndoles contribuir a los fondos de la escuela para evitar su clausura.  El  E l R e belde   puso sus números al servicio de esa campaña, a la vez reprod ucía artícul artículos os a favor de de la la educación libe rtaria . 12 A mediados de 1901 entre los lectores de  E l R e b e ld e   se notó la anuencia a prestar ayuda a la escuela libertaria. P. Gori, adversario acérrimo de esos círculos, pronunció una disertación en una fiesta de  pro  p roy y e cc ion io n e s, cuyo cu yoss b e n efic ef icio ioss se d e s tin ti n a r o n a la e s c u e la . 13 A ccio cc ion nes de esa índole ayudaron por cierto a la institución, pero no bastaron  p a r a s a c a r l a d e l c re c ien ie n te a p re m io fin fi n a n c ie ro en q u e se h a l l a b a . A f i nes de 1901 1901 a las dificultades finan cieras se se sum aro n las trab as pues  E l R e b e l d e ,   15.7. 9  El 15. 7. 1900, "Las escuelas libertarias”. 10  El R e b e ld e ,   1 9 .1. . 1. 1901, "Grupo Libertario de los Corrales". 11  La  L a P re ns a,   3 1 . 3. 1901, "Movimiento obrero”. 12  El R e b e l d e ,   2 4 . 3. 1901.  I b í d . ,   19.5. 19. 5. 1901, "A los libertarios”. 13  El  E l R e b e l d e ,   2 6 . 5. 1901. 14  La  L a P ro te s ta H u m a n a , 9 . 11. 1901, “El Consejo Escolar y la escuela libertaria”.

tas por el Consejo Escolar del suburbio de “Los Corrales”. Se publicó entonces un manifiesto contra esa política y se llamó a todos los anarquistas de Buenos Aires a reunirse para discutir el posible modo de salvar la existencia de la escuela. El manifiesto se publicó en  L a P r o te s ta H um an a. 14 El apoyo d e los los círculo s an arq uis tas a la escuela e v itó su cierre, pero su existencia, sobre todo en el renglón financiero, siguió siendo endeble. En 1902 aparecieron varias noticias sobre el  ba  b a la n c e m o n e ta r io n e g a tiv ti v o d e la e s cu ela el a , así as í c o m o s o b re el d é f ic it que se acumulaba. 15 Esta Esta difícil situació n fin an ciera mo tivó tivó al gr u po a pu blica r la la no ticia ticia del del próxim o cierre de la la escu ela. 16 La ins tituc ión no cerró en 1902, como se preveía pero llevó una existencia tan deplorable que dejó de cumplir las esperanzas cifradas en ella y quedó relegada apenas a un rincón. En el ínterin ínterin asom aron nuevas iniciativas, iniciativas, esta vez vez de adictos de  La  L a Protesta Humana.   Ya en mayo de 1901 se anunció la inauguración de una escuela diurna y vespertina para niños y adultos en el club “Los Caballeros de! Ideal”. 17 Sin em ba rg o el pro yec to no pro sp eró y no se sabe por tanto qué suerte corrió dicha experiencia. Empero el tema de las escuelas libertarias ya no se apartó de las páginas de  La  L a Protesta Humana. En la segu nd a m ita d de 1901 se inse rtaro n varios artículos y com entarios al respecto, en tre los los cuales sob resalió a lió una n o ta del pensador anarquista español R. Mella, en la que juzgaba de modo positivo el nexo que hay, en el anarquismo, entre la ideología revolucionaria, revolucionaria, por un lado, como un a visi visión qu e orienta h acia el el fu turo, y la dedicación dedicación co tidiana al trab ajo educativo y de ilustración, ilustración,  po  p o r el o tro tr o . Esta Es ta a c tiv ti v id a d , q u e se c u m p le e n p a r a je s d isti is tin n to s del de l m und o, —d ec ía— ejerce ejerce un a influencia acum ulativa, un a especi especiee de gutta cavat lapidem   que en el el mom ento oportuno oportuno de rribará lo lo s m u ros del régimen existente. 18 Luego ap are cie ro n o tros a rtículo s sobre la ed uca ción , red actad os , p or los los an arq uis tas locales, locales, J. Calvo y Elam Ravel, quienes exhortaron a aprovechar el número creciente de intelectuales que se plebagan a las filas del anarquismo en la Argentina y a em plearlos como maestros de las las diversas diversas asignatu ras, pues po d rían 15  La 22. 2. 1901; 26.7. 26.7. 1902; 23.8. 23.8. 1902.  L a P ro test te sta a H u m a n a ,   22.2. 16  E l R e b e l d e , 8 . 3. 1901, "Avisos y comunicaciones”. 17  La . 7. 1901, “La gota de agua".  L a P ro test te sta a H u m a n a ,   2 0 .7. 18  La 27. 7. 1901, "Comunicaciones"  Ib 10. 8, 1901, "Por la Ins L a Pr otes ot es ta H u m a n a ,   27.7.  I b í d ,   10.8, trucción". 19  L a P ro test 28. 6. 1902. te sta a H u m a n a ,   28.6. 20  La 146. 1902, "Am igos de la la ense ñan za libre” .  L a P rote ro test sta a H u m a n a , 146.

 b r in d a r c o n o c im ie n to s g e n era er a les le s y ele el e v a r el nive ni vell de la c o n c ien ie n cia ci a ideológica.1 ideológica. 19 En jun io d e 1902 1902 se se supo de dos dos intentos sindicales sindicales de h ab ilitar escuelas libertarias en Buenos Aires. Una en Almagro, dirigida por el  pe  p e r io d ista is ta J u lio li o C a m b a 20 (a u n q u e p a r e c e q u e sin si n éx ito it o ) y o t r a e n el suburbio obrero de La Boca, por iniciativa de un grupo de estibadores res de no m ina do s “Amigos de la la Enseñanza Lib re". Este Este gru po se co n sagró con energía y constancia a la tarea, y logró frutos. En la primera informacón se anunciaba la fecha de inauguración de la escuela  —lo  —l o . d e j u l i o — y el p r o g r a m a d e estu es tudi dios os.. “Primer grado —primera sección: Rudimentos de lectura, id. id . de escritura. Deletrear y silabear. Paleografía, etcétera lecturas, primeras nociones de escritura. “Segunda sección. Las mismas asignaturas en más adelante. “Segundo grado  Primera sección: Lecturas corrientes, escritura sencilla, aritmética (rudimentos), gramática ( i d .), . ),  principios de di bu  b u jo. jo . “Segunda sección. Lecturas varias (manuscrito), escritura (ensayos de dictado), aritmética, sistema decimal, gramático en grado medio. Dibujo lineal. “Tercer y cuarto grados: Lectura corriente y manuscrita, caligrafía. A ritmética: sist sistema ema decimal. G eom etría: etría: d ibujo lineal lineal,, de adorno, de figura (en copia y en modelo). Nociones generales de geología, astronomía, anatomía, química y física. Sociología, trato social, histo ria, g eog rafía, política y eco no m ía” 21 El gru po cu m plió su promesa y a comienzos de julio se se ina ina ug uró la escuela. Se inició como escuela escuela p rim aria , pero se pro m etió q ue con el el tiempo se abrirían nuevos grados y se ampliaría la esfera de la docencia. La actividad en La Boca en torno a la escuela, repercutió sobremanera en la prensa general. En la sección Asociaciones y Gremios de  L a P rens re nsa a  se anunciaban espectáculos y fiestas artísticas con muchos participantes, cuyos ingresos se destinarían a la escuela; 22 al  p a r e c e r d ich ic h o s es p e c tá c u lo s , tu v iero ie ro n c o n s id e r a b le é x ito it o . P o r su p a r te la tesorería de los organizadores tuvo un desempeño eficaz, y, como resultado, ya en los primeros meses, los balances arrojaban superávits. rávits. Sin em ba rg o, circunstanc ias extern as (relativas (relativas a lo los confl conflict ictos os que azotaron al barrio obrero) constriñeron el el ímp etu de la ob ra. De21  L a P rens 17. 6. 1902; 23.6 23. 6 1902, re ns a,   17.6. 22  L a P ro te sta 25. 7. 1902. st a H u m a n a , 6 . 9. 1902.  L a O rg a n iza iz a c ió n O b r e r a ,   25.7.

 be ten te n e rs e en c u e n ta q u e la in a u g u r a c ió n d e la e scu sc u ela el a (y sus p r i m e ros meses de vida) coincidieron con un período difícil para la clase trabajadora de Buenos Aires; el foco de los problemas se encontraba en La Boca y el sindicato de estibadores que promovía y mantenía la escuela, estaba directamente inmiscuido en ellos. No sorprendió entonce toncess qu e la escuela escuela y lo q ue se hacía po r ell ellaa in co m od ara n a lo los ele mentos que vigilaban incesantemente el curso de los acontecimientos en ese sub urb io que, según rumo res, d ebía con vertirse en cen tro de la revolución social. Cuando en los días de las luchas obreras un ágil corresponsal del diario Tribuna   (de los círculos gubernamentales), descubrió la existencia de una escuela anarquista en La Boca, esa "revelación” suscitó una tormenta en los medios de difusión. T h e Standard,   diario en lengua inglesa de los conservadores, replicó a la noticia de Tribuna   con las siguientes palabras: The description of an Anarchist School at the Boca with its hundred pupils and staff of teachers given by Tribuna   Yesterday, was read with blank astonischment by many people. No wonder that crime increases in the city. The question is why do not authorities close such a pestilent and subversive establishment. 23 El periódico anarquista  L ' Avven Avv enir ire, e,   en su número del 15 de noviembre de 1902 juzgó la nota de Tribuna   como instigadora a una “cruzada” contra la escuela de La Boca y contra la actividad anarquista en ese barrio obrero, y previno contra el peligro de un ataque inminente por p arte de la las autoridades de la la ciud ad . 24 Pocos Poc os días d ías d e s  pué  p ués, s, p o r c ie rto rt o , a u n q u e p o r caus ca usas as d is tin ti n ta s a las p rev re v ista is tass p o r  L ’A v venire,   el suburbio se convirtió en escenario de confrontaciones violentas, sin precedentes en la Argentina, entre las clase trabajadora y las fuerzas del gobierno, durante la huelga general del 23 de noviembre de 1902. Esta huelga, que terminó con la paralización total de la actividad de los sindicatos obreros y anarquistas en la capital, llevó también a la supresión de la escuela anarquista de La Boca. En 1903, al reanudarse las actividades obreras y anarquistas, revivió también la labor educativa y de ilustración. Primero sólo en el 25 The Standard   (Buenos Aires) Aires) 8 . 11. 11. 1902, 1902, “Ed itor's T a b le ” . 24  L ’A v ve n ir e ,   1 5 .11, . 11, 1902, “L’Anarchismo alla Boca". 25  La 1902. “Las dos escuelas”  Ib íd .   20.9. 20. 9. 1903, “La Educación”,  Ib íd .  L a P rote ro test sta, a, 4 . 4. 1902. 10.10 10. 10.. 1903, “Hacia la edu cación in tegra l".  Ib 17. 10. 1903, "Hacía la educación in I b í d .   17.10. tegral".

dominio periodístico, pero pronto hubo asimismo intentos concretos de ina ina ug ura r escue escuela lass a narqu istas.2 istas. 25 Ese año añ o la F . O . R . A. se tornó en un factor de estímulo a los sindicatos obreros en el campo de la educación; en el III Congreso (6 al 9 de junio de 1903) se aprobó la siguiente resolución: “El tercer congreso de la F. O . A. considera de u rge nte n ecesidad la fundación de escuelas libres donde, excluyendo cualquier educación sectaria, se exponga al niño la mayor suma de conocimientos evitando así la deformación cerebral y preparando criterios amplios, capaces de comentar y comparar más tarde todo género de doctrinas. El lema de estas escuelas será la libertad por la educación, y la instrucción estética y el aprendizaje manual deberán unirse a la enseñanza científica, teniendo como punto de mira el desenvolvimiento integral de todas las facultades”. 26 Esta tendencia de la F. O . A. pudo materializarse poco después del congreso, cuando un compañero informó que estaba dispuesto a contribuir con 5 000 pesos para fundar una “escuela libertaria integral”, en una colonia infantil, donde se impartiera educación según los principios formulados por Kropotkin en su libro Campos,  fá b r ic a s , tall ta llee r es .   Pero planteó un prerrequisito: que a su contribución se sumara la suma de 15 000 pesos del sindicato obrero. En caso contrario, indicaba, llevaría su contribución a España. 27 L a Prote Pr otesta sta  H u m a n a   respaldó la iniciativa del donante anónimo y exhortó a los sindicatos obreros a apoyarlo. En un artículo editorial se pidió a los sindicatos obreros que usaran los fondos de huelgas para ese fin. Al  pa  p a r e c e r h a b ía g r a n d e s s u m as de d in e ro e n esos fo n d o s , y se p r e s e n ta  ba u n a o p o r t u n i d a d p a r a d a rle rl e s u n d es tin ti n o e fic fi c a z , q u e se a ju s ta b a a los objetivos de los sindic ato s.2 s. 28 La ause ncia d e in for m ac ión adicional sobre la suerte de la iniciativa es prueba de que no se materializó. 26  L a P ro te sta 14. 6, 30.6, 30. 6, 1903, “ El T erce r Co ngres o” D. A. de Sa ntillá n,  M o v im ie n st a ,   14.6, to anarquista, p . 168.  L a P ro te sta st a ,   2 5 . 7. 1903, “A las sociedades obreras". 27  La 28  L a P ro te s ta ,   2 2 .8. . 8. 1903, “Hay dinero para todo, habiendo buena voluntad". 29  La . 12. 1902, “Cosas Viarias”.  L a P ro te sta, st a,   1 9 .12. 30  L a P ro te sta 11.5 1904; 27.9. 27.9. 1904; 1904; 7 . 10. 1904 La Organización Obre st a ,   2 6 . 3. 1904: 11.5 . 9. 1904, "Adelante”. ra,  2 5 .9. 31 Un testim onio d e su existencia y actividad actividad pu ede h allarse tam bién en las de libera ciones del congreso Argentino, en las palabras del diputado Roldán. Véase:  Diari  Di ario o de Sesiones,   Cámara de Diputados (1904), p.557. p. 557.

Tampoco tenemos datos para explicar el por qué de la anulación. Sea Sea como fuere, el interés po r la la activida d ed uc ativa no desap arec ió y a fi fines nes de año se se supo de un nuevo grup o en La Boca, Boca, fo rm ado p ar a fom entar la enseñanz enseñanzaa p or escrito escrito a los los trab ajad ore s y p ara establecer una escuela destinada a los niños. 29 Tras esfuerzos y preparativos que duraron un año (en cuyo transcurso se sumaron otros grupos a la tarea), 30 se ha b ilitó de nuevo nue vo u n a escuela anarquista en La Boca. 31 La reanu dación de la la labor ed uc ativa anarquista en La Boca se destacó en un artículo editorial de  L a Protesta Humana,   que la saludó con beneplácito, y la llamó “una iniciativa feliz”; también elogió los principios educativos. La redacción ción veí veíaa en esa esa escue escuela la la satisfacción satisfacción de u na nece sidad “que se im  po  p o n e a los lu c h a d o re s d e b u e n a y sa s a n a v o lu n ta d , p a r a q u ie n e s la p r e  pa  p a ra c ió n del de l p o rv e n ir no p u e d e ser se r la o b r a d el a c a s o ’’.3 ’. 32 Esta Esta escuela escuela (como (como su pred eces ora, de 1902 1902)) fue efím era; la c a m  pa  p a ñ a d e pers pe rsec ecu u sion si on es c o n t r a los d ir ig e n te s o b r e r o s y a n a r q u i s t a s , a raíz de la revolución radical de febrero de 1905, la dañó mucho. Esta vez, igual que anteriormente, se reanudaron las actividades por la rehabilitación de la escuela liberaría, y en el mes de junio se publicó en Buenos Aires un llamado a todos los grupos anarquistas y a los representantes de las Sociedades de Resistencia para que se reunieran a debatir el plan de acción respectivo. 33 A los los activista s en la ed u c a ción ción e ilustración se añad ió en esos esos días un gr up o d e jóvenes estu d ia n tes, encabezados por Alejandro Sux (quien se convertiría en uno de los anarq uista s más activos activos y destacad os en el el perio dism o, sobre tod o en la secci sección ón literaria). literaria). Este Este gru po empezó a im p a rtir ense ñan za a los los trabajadores, dictando clases vespertinas y pronunciando series de conferencias populares. 34 EL V Congreso de la F.O F. O . A. siguió con la tradición de los anteriores y consagró debates y resoluciones a la educación y la ilustración. Recomendó a los sindicatos adheridos la asignación de una suma de sus fondos para la creación y el fortalecimiento de escuelas li be  b e r ta r ia s , com co m o p a r te i n te g r a l de la a c tiv ti v id a d e d u c a tiv ti v a , d e i l u s tr a ción y propagandística en el seno de la clase trabajadora. La actividad actividad educativa, p or cierto, cierto, a com pañó a la actividad de los los 32  La P ro test te sta, a, 5 . 11. 33  La Pr otes . 6. ot es ta, ta ,   2 7 .6. 34  La P rote 15. 8. ro test sta, a,   15.8. 35 D A. de Santillán,

1904, "Las escuelas libertarias" 1905, “Escuelas libres". 1905, "La iniciativa de los estudiantes". op. cit.   pp. 169170.

grupos anarquistas y de los sindicatos obreros anarquistas a todo lo largo de la época analizada. Sus logros no fueron muchos, pero la constancia demuestra que formaba parte integral de la acción anarquista. Esta actividad no cesó en los años subsiguientes. 35 En síntesis: la lista de intentos incesantes de establecer escuelas li b e r t a r i a s ( a u n q u e no se lo g r a r o n éxit éx itos os p a r tic ti c u la r e s ) p e r m ite it e in d ic a r la importancia que los anarquistas de la Argentina atribuían a esta actividad. La labor prosiguió también después de 1905. En el  pe  p e r ío d o e n tr e 1905 190 5 y 1914 19 14 se h a b il i t a r o n escu es cuel elas as,, L igas ig as d e E d u c a ción Racionalista, y se editaron diversas publicaciones que aborda ba  b a n el tó p ico ic o d e la e d u c a c ió n , t a n to en Buen Bu enos os A ires ire s co m o e n el i n t e rior (Mendoza, Rosario y Mar del Plata).

Mo

r a l

y Es

t il o

d e

V id

a

 No  N o s e ría rí a c o m p r e n s ib le la c o n s a g ra c ió n c o n s ta n te a las la s ac tiv ti v idad id ad e s educativas, si no se la liga a la labor propagandística corriente, si no se toma en cuenta el papel principal del ideal moral entre los anarquistas conscientes. El ideal moral era, entre ellos, un principio normativo que guiaba el estilo de vida, y determinaba la “realización person a l , ” es dec ir la b úsq ued a afano sa de un estil estilo o de vida que se ajustara a los ideales morales, así como la certeza de que era necesaria una educ ación personal como prerrequisito para e du ca r al al prójimo3 5a Este Este enfoque m oral, básico, (que era com partido p or las las corri corriente entess  pr  p r in c ip a le s del de l a n a r q u is m o en la A r g e n tin ti n a d e esa es a é p o c a ), no h a  bía  b ía sid si d o a p r o b a d o a ú n e n t r e 1890 189 0 y 1897. 189 7. E n la p r e n s a a n a r q u is ta de eso esoss años p ue de n leerse leerse enfoqu es amo rales, form ulado s sobre todo  p o r los círc cí rcu u lo s a n a r c o  in d iv id u a lis li s ta s y u n a p a r te de los an a rco rc o  comunistas extremos extremos qu e, en nom bre de la la “Libertad individual” a b soluta, desd eña ban cualquier m oral hu m ana y justificaba justificaba n cualquier cualquier delito o deformación como “antítesis de la moral burguesa”. El vocero de tales enfoques era el periódico  La  L a A n a r q u ía   de La Plata, y la cam pañ a en su contra fue fue.. librada por  E l O p r im id o ,   que dirigía I. Creaghe. En uno de los primeros números del periódico, el director  35a  L a P ro te sta . 2. 1904, “Nuestro ideal". st a ,   2 0 .2. 36  E l O p r im id o , 1 . 8. 1895 (2), “La Moral". 37  E l O p r im id o , 6 . 2. 1897, “El robo y la moral anarquista"  I b i d , 14.3. 14. 3. 1897. "La moral”  Ib 14. 3. 1897, “El antimoralismo”.  I b id .   14.3.

I. Creaghe, consagra un artículo editorial al tema y ataca acerbamente a los amorales, diciendo. Hay compañeros que se han distinguido por su empeño en hacerse  pa  p a s a r p o r t a n a d e la n t a d o s y t a n b u e n o s a n a r q u i s t a s q u e h a n r e chazado chazado cualquier m o ra l... l... R echazar toda m ora l equiv equival alee a rech azar toda razón... Tenemos nuestra moral anarquista, la que nos enseña y manda respetar nuestro Dios: la Razón”. 36 La discusión con los amorales debe haber sido aguda v prolongada, y sus ecos asoman en los números de  E l O p r im id o   hasta el año 1897, cuando dejó de aparecer. 37 La publicación de  La  L a P r o tes te s ta H u m a n a ,   en 1897 —que inició una época nueva en la la historia historia del an arqu ism o en la la A rg en tin a— motivó también la eliminación de los criterios amorales. Desde sus primeros números,  La  L a Prot Pr otes esta ta H u m a n a   expresó un enfoque “moralista” inequívoco que demostraba una “moral anarquista”. Este enfoque se expresó en dos dominios principales: 1) en el dominio teórico conceptual, al apoyarse en los escritos de los pensadores más descollantes collantes del ana rquism o; 2) en el dom inio period ístico local, local, al r e currir a expresiones variadas de los activistas del lugar: artículos, notas breves, cartas a la redacción y extractos de literatura o poesía. Desde Desde lo los primero s nú m ero s de  L a P rote ro test sta a H u m a n a  y durante to da la época estudiada, se dedicaron muchas columnas del periódico a artículos teóricos sobre la moral anarquista, escritos por célebres  pen  p en s a d o re s d el a n a r q u is m o : P; K r o p o tk in , J . G re a v e , S. F a u r e , R . Mella; así como capítulos del filósofo Gtuyau, cuyos criterios morales  juzg  ju zg ó K ro p o tk in com co m o d ig n o s de f u n d a m e n t a r los p rin ri n c ip io s m o ra les le s anarquistas. Esos artículos cumplieron un papel educativo y orientador en el movimiento argentino y estimularon a muchos periodistas del país a tomar en cuenta el tema. Debido al interés especial en las actividades anarquistas en la Argentina, consagraremos la parte  pr  p r in c ip a l del de l e stu st u d io re la tiv ti v o a es te tem te m a a la p r e s e n t a c i ó n d e las líneas de pensamiento que resaltaron en las notas de los comentaristas locales, pero nos abstendremos de analizar las teorías tomadas de los grandes pensadores, pues ello no corresponde a nuestro trabajo. Cabe señalar que en cuanto a las cuestiones de moral y estilo de vida en el período que media entre 1897 y 1905, se puede encontrar un denominador común entre los adictos a la organización y sus adversarios; comentarios animados por un espíritu parecido se publicaron  L a P rote ro test sta a H u m a n a , L ’A vv vven en ir e y E l R e b e l d e . en  La

Entre los asuntos principales que se publican en esas notas, señalaremos en primer término el llamado a la educación personal, a la concreción de un estilo de vida anarquista que se ajuste a los ideales. “No basta que yo me llame anarquista para serlo, es necesario que mis ideas, mis procedimientos, mis acciones públicas y privadas, mi conducta, en fin, justifique mis aspiraciones, sin lo cual será vano cuan to yo yo diga ac erca de mi an arqu ism o... p ar a ser real y verd adera mente anarquista hay que poseer una mentalidad y una elevación moral, una honestidad de conducta, y un amor a las ideas de emancipación cipación ob rera , y un espírit espíritu u amplio y se re n o ... ”38 La imagen ideal del anarquista es la del activista, el propagandista, el que procura sin tregua ilustrarse, ampliar los horizontes afianzar más su concepción del mundo, atento a las problemáticas de la sociedad sociedad y que re accion a a el ellas las con un anhelo p rofun do de m aterializar rializar un a vida de justicia social social.. El ana rq uis ta es un tipo estudi estudioso oso,, reflexivo, consciente del medio en que se mueve. El anarquista, aun de limitados conocimientos, es un tipo culto, digno de ser ser com o dice qu e es, es, de proc eder como dice que p ien sa... ” .39 “El “El an arq uista, ro ba nd o ho ras al al reposo, reposo, tr ata de apren der y procura ens eñ ar... La vida del ob rero anarq uista es es dob lem ente activa que la de cualquier trabajador sin ideales. Después de la tarea diaria del taller, viene la tarea de enseñar y propagar... El afán de proselitismo, el espíritu de sacrificio en la lucha obrera, el desprecio a los peligros, el espíritu de sacrificio en la lucha obrera, el desprecio a los  pelig  pe lig ros, ro s, el e s p í r i tu d e r e b e lió li ó n y d e lu c h a , la a c tiv ti v id a d y u n r a d i c a lismo absoluto y constante, son parte de la conducta anarquista”. 40 El enfoque del valor decisivo en la existencia de un estilo de vida según los principios ideológicos, deparó también derivaciones en la determinación de normas de conducta en el quehacer cotidiano. Los anarquistas fueron llamados a llevar un estilo de vida modesto y se38  La  L a P rote ro test sta, a, 6 . 2.   1904, “Nuestro Ideal”. 39  La 19. 1. 1901, “La propaganda por la conducta”.  L a P rote ro test sta a H u m a n a ,  19.1. 40  La P rote . 3. 3. 1904, 1904, "N ue stro Idea l” , ro testa sta , 6 . 2. 1904, “Nuestro Ideal”,  Ib íd .   2 5 .3. . 3. 1904, 1904, "N ue stro Id ea l”. Sobre Sobre eso esoss motivos en la cond uc ta an arq uista , véas véasee  Ib íd .   2 6 .3 también:  La 10. 6. 1900, "Carta de Nadie a Todo el Mundo”.  El  L a P ro te sta st a H u m a n a ,   10.6.  R e b e ld e ,   3 0 . 12. 1901, “Los anarquistas”.  I b í d . 3 . 9. 1899, “El espíritu de rebeldía” los d e  L a Protesta, 1 . 8. 1903, "Redímete tú mismo”  I b í d . 1 . 1. 1904, “N osotros y todos los  I b í d . 8 . 10. 1904, más”.  I b í d , 5 . 3. 1904, “N uestro ideal ideal  De la co nd uc ta ana rq uis ta" ,  Ib "Pa lestra ”. 41  La Prot . 7. 1901, 1901, “El “El alco ho lism o y la clase ob re ra ” La Pr otes esta ta H u m a n a ,   2 0 .7.  L a Or ganiz ga niza a . 7. 1902, “Los vicios”  Ib . 8. 1904, 1904, “El ju eg o” . ción Obrera,   2 5 .7.  I b í d .  2 5 .8.

rio, rio, abstenerse de la la be b id a, alejarse de las las can tina s (no de los cafés, donde los anarquistas pasaron muchas horas de discusión), evitar el despilfarro despilfarro de dinero en juegos de azar y apuestas, ap artars e d e los los vicios que perjudican la vida normal y modesta. “La embriaguez y el sensu sensual alis ismo mo no son son vi vicios an arq uista s, al co ntrario , m ucho s qu e era n víctimas de esos vicios lograron independizarse de ellos al iniciarse en la nueva doctrina... Conozco muchos anarquistas que al serlo, dejaron de fumar y jugar... Todo individuo anárquicamente consciente, es un equilibrado, física, moral e intelectualmente hablando... ” .41 Al parecer, las aspiraciones y esperanzas en este dominio rebasa ba  b a n lo q u e se p o d ía s u p o n e r e n tr e las m asas as as d e a d h e r e n te s q u e ll e g a ron al anarquismo de las más distintas maneras, y de trasfondos sociales y nacionales dispares. El ideal del estilo de vida anarquista fue ma teriali terializado zado sólo sólo por mu y pocos, pocos, m ientras que la m ayoría siguió siguió viviendo según la corriente en el medio ambiente no anarquista. Un testimonio del desnivel entre los ideales y la realidad, se puede encontrar en un número de artículos, comentarios y cartas de lectores,4 lectores, 42 y sobre todo en u n a no ta ex tensa de Lyd ia Pelea, qu e ex a mina las transgresiones abundantes a las normas de vida anarquista, y censura a lo los cient cientos os de a dh ere nte s de Buenos Aires Aires que se lla m a  ba  b a n a n a r q u is ta s y no c u m p l í a n co n u n estil es tilo o d e v id a a ju s ta d o a sus su s  pr  p r in c ip io s . 43Sea 3Sea como como fuere, cabe suponer que a un qu e hu bo m uchas transgresiones, entre los anarquistas había dificultades para llegar a normas de conducta obligatorias, pues se aplicaban sanciones, sin que eso socavara los principios de la libertad personal, el hecho mismo de que se se diera diera pu blicid ad a es eso se se convirt convirtió ió en u n fac tor ed u ca tivo tal que promovía un estilo de vida basado en la “moral anarquista”. 44

C o l o n i a s A n a r c o -C o m u n i s t a s

En los primeros años de la década de 1890 el anhelo de vivir según  I b í d  7 . 1. 1900, “Pregunta”  L a P ro test te sta, a, 42  E l R e b e ld e ,   12.8. 12. 8. 1900, “Comunicado”  Ib 6 . 6. 1903, “Servilismo popular”  I b í d . 4 . 5. 1904; 8.5. 8.5. 1904, “De la conducta anarquista”.  I b í d , 28.4. 28.4. 1904, “De tu libertad”.  Ib 15. 10. 1904, “Palestra”.  I b í d . 4 . 2. 1905,  I b íd   15.10. “Carnaval”. 43  E l R e b e ld e ,   2 0 .2. . 2. 1902, “Hablemos claro, Lydia pelea”. 44 J. Maitron, op. cit.,   pp. 359379. El Cap. IV (“Milieux Libres”) está consagrado  p o r e n te r o a es te te m a .

los principios anarquistas más íntegros, empujó a un número de anarquistas, en dive divers rsos os recodos recodos del del m und o, a tra ta r de constituir comunidades comunales donde se llevara un estilo de vida anarco comunista. Varias experiencias de esta índole se hicieron en Francia. 44 Pero un o de los po blad os an arq uis tas má s conocidos se fund ó lejos ejos de las las fro nte ras francesas y más cerca de la A rgen tina. EsEste fue la “Colonia Cecilia”, en el sur del Brasil, fundada en 1890 por ana rqu istas italiano italiano s, y qu e se se m antu vo ha sta 1894 1894.. En 1891 la localilocalida d lleg llegó ó a estar p ob lad a po r 200 m iemb ros y las las noticias noticias sobre su su d esarrollo se difundieron entre los movimientos anarquistas en todo el mundo. En 1896, después de su disolución, se publicó en la Argentin a u n follet folleto o sob re la vida en Cecilia, Cecilia, escrito escrito p o r Ju a n Rossi Rossi,, uno de los activistas más destacados de la colonia. En el folleto, editado por la publicación mensual  L a Q u es tio ti o n Soci So cial ale, e,  el autor señalaba, entre otras cosas, las causas de la disolución: “... la colonia Cecilia no cayó porque fuera comunista y mucho menos porque fuese anarquista, cayó porque fue pobre, y fue  po  p o b r e p o r q u e p r in c i p ió c o n p o q u ísim ís im o s re c u rs o s , c o n p e rso rs o n a s i n capaces capaces pa ra los traba jos agrícola agrícolas, s, y po rque se enco ntra ba sol sola en en el m undo, que le era económ icamente ex tran jero ... ... Gozábamos Gozábamos de libertad en nue stras relaciones relaciones internas, pero nos falta ba el bienesbienestar material. Nuestro pequeño mundo anarquista era demasiado  pe  p e q u e ñ o ... Si el m u n d o e n te r o se h u b i e r a h e c h o c icil ic ilia ian n o , soste so stengo ngo que aún su bsistiría... S egún mi parecer, la “Cecilia” “Cecilia” no ha sido sido un fraca fracaso. so. H a sido sido un exp erim ento que pasará a la la historia, que duró lo suficiente para que la idea orgánica de la anarquía pudiese ser  pu  p u e s ta a p r u e b a ” . 45 Los comentarios sobre los intentos de fundar comunidades comunal nales en en dist distint intos os parajes parajes del m und o, ocupa ron u n lug ar nad a desdeñable en las publicaciones de los círculos anarquistas de la Argentina.  La  L a Prot Pr otes esta ta H u m a n a ,   en sus primeros años, evidenció mucho interé teréss en ello ello y lo enca ró co n sim patía. Se pu blica ron notas info rm ativas ya en sus primeros números. En diciembre de 1897 se comenza45 Juan Rossi, Un episodio de amor en la colonia Cecilia, Buenos Aires, Ed. Biblioteca "La Q uestion e Sociale” , 1896, 1896, pp . 2728. 2728. Sobre la Colonia Cecilia, Cecilia, ver: ver: El   Per  P er se gu id o, 2 9 . 1. 1893, Brasil, Colonia socialista Cecilia.  L a P ro test te sta a H u m a n a , 2 6 . 12. 1897, "Una colonia anarquista en Inglaterra”  Ib  I b íd . 46  La 2 . 1. 1898.  I b íd . 9 . 1. 1898.  I b í d . 1 6 . 1. 1898.

ron a insertar cartas de Inglaterra, copiadas del periódico anarquista  par  p aris isin ino o  Les  L es T e m p s N o u v e a u x ,   que se referían a la fundación y desarrollo de un poblado comunal pequeño, Forest Hall, en la zona de  New  N ew cast ca stle le on T a n e. El p o b la d o se f u n d ó en 1895 18 95,, p o r in ic iati ia tiv va de una anarquista de origen checoslovaco, que reunió a 30 anarquistas ingleses para establecer una colonia que funcionaba según principios comunales. Las cartas describían detalladamente las etapas de consolidación y la lucha por la existencia en el primer año. A comienzos de 1898 se suspendió la publicación de las cartas, y no se explicó la suerte corrida por la experiencia comunal. 46 V ario s meses mes es des pués pu és el periódico volvió a describir poblados comunales y se refirió con amplitud a una comunidad colectivista en la isla de Bomis, en el Océano Pacífico, integrado por miembros de diversas nacionalidades, (ingleses, franceses, españoles, italianos, escandinavos). El artículo presenta esa comunidad como ejemplar de un estilo de vida anarquista, y como una prueba de que el anarquismo no es una utopía irrealizable. 47 Pu ed e decirse, en líneas ge ne rale s, qu e  La  L a P r o test esta Hu m an a  se  se mostró mostró p ar tida ria siempre de las las com unas , en todas  pa  p a rte rt e s del de l m u n d o . En sus n ú m e r o s p u e d e n e n c o n tr a r s e c o m e n ta r io s apro batorio s sobre po blados com unales en C an ad á49 á49 y sobre intentos de la misma índole en Holanda y Estados Unidos. 50 En  El Sol, So l,   otro periódico anarquista, el criterio e rio prevaleciente es otro. En 1901 se publicó un extenso artículo del pensador anarquista Eliseo Reclus, quien hacía una censura acérrima a las teorías utópicas cas de Cabet y F o u ri e r. Al respect respecto o Reclus Reclus form ula la siguiente siguiente p re gunta retórica: “¿Crearán los anarquistas falanges para su uso particular en el mundo burgués? burgué s?”” Y se contesta: “¡Ni lo creo ni lo deseo! ” Luego señala el fracaso de todos los intentos de comuna emprendidos por los anarquistas: “Nada nos cuesta reconocer que, hasta el presente, casi todos los intentos formales de establecimiento de colonias anarquistas en Francia, Rusia, Estados Unidos, México, Brasil, etcétera, han fracasado...” 47  La  L a P rote ro test sta a 48  La  L a P ro test te sta a 49  La  L a P rote ro test sta a mo agrario”.  L a Pr otes ot es ta 50  La

29. 5. 1898, “En la anarquía” H u m a n a ,   29.5. 12. 3. 1902, "Colonia anarquista”. H u m a n a , 4 . 9. 1898.  Ib íd .   12.3. 19. 12. 1903, “Los Dukhobors”  Ib íd .   12.3. 12. 3. 1904, “ComunisH u m a n a ,   19.12. H u m a n a ,   19.12. 19. 12. 1903, “El comunismo práctico”.

En las las circunstancias circunstancias existentes —alega alega el a u to r— no p od ía darse otra cosa que el fracaso. La consecuencia que Eliseo Reclus extrae, es: es: “... p “... po o r n in g ú n p rete re tex x to ni inte in teré réss d e n in g ú n g é n e r o d e b e m o s e n cerrarnos, es preciso permanecer en el amplio mundo para recibir de él todos los impulsos... Retirarse unos cuantos amigos al campo para  pa  p a se arse ar se y h a b l a r de las cosa co sass e x te rn a s a la m a n e r a d e los disc di scíp ípul ulos os de Aristóteles, es abandonar la lucha... ” .51 Cabe subrayar que pese a la relación positiva con las comunas por  pa  p a r te del de l p r in c ip a l p e rió ri ó d ico ic o a n a r q u is ta ,  La  L a P rote ro test sta a H u m a n a ,  los anarqu istas en la la Argentina Argentina n o m ateriali aterializaron zaron n ingún inten to de cre ar una comuna duradera. Hubo varios comienzos, pero sin resultados efectivos. En 1900  El  E l R e b e ld e   publicó una noticia sobre la iniciativa ciativa de un grupo de anarq uis tas argentinos, argentinos, deseo deseoso soss de f un da r un  po  p o b lad la d o c o m u n a l “ ...p a r a p r a c t i c a r el co c o m u n ism is m o a n a r q u i s t a , h a s ta donde lo permita una sociedad como la presente, presente, tan c arg ad a de vivicios... ” .52 O tras noticias noticias sob re esta iniciativa iniciativa se se pu bl ica ro n tam bién en  La  L a Prot Pr otes esta ta H u m a n a , da nd o cuenta de de que el grupo formab a un fondo para financiar la colonización y buscar un paraje adecuado en la provincia de San Ju an . 53 Esas notic ias emp ero se su sp en die ron y c a  be s u p o n e r q u e el inte in te n to f r acasó. c asó. En 1901 se supo de otro intento de crear un pob lado comunal, p or iniciat iniciativa iva de un g rup o de anarqu istas argentinos. Ese grupo colonizador, “Tierra y Libertad”, se fundó el 15 de septiembre de 1901 y una declaración formulada a  L a Prot Pr otes esta ta  H u m a n a ,   señalaba que “Se propone fundar una colonia agrícola industrial en la forma más anárquica que prácticamente permita el ambiente burgués”.5 burgués”. 54 Al pare ce r eso esoss grupos tuvie ron éxito éxito el el prim er año y en 1902 1902 se su  po d e la c o m p r a d e 500 h e c tá re a s de tie ti e rra rr a , d o n d e se le v a n ta r ía un  po  p o b la d o a n a r q u is ta . El g r u p o p r o m o to r e x h o rtó rt ó a los c o m p a ñ e ro s a adherirse.5 adherirse. 55 Pero después n o volvieron a ap arec ar ec er no ticias , po r lo lo que

51  El So l,   16.12. 16. 12. 1900, “Las colonias anarquistas". 52  El R e b e ld e ,   10.6. 10. 6. 190 1900, “Co lonia A na rqu ista” ro test sta a H u m a n a , 3 . 11. 1900, “Colonia Libertaria". 53  La P rote 54  La Pr otes 28. 9. 1901, 1901, "Grupo colonizador colonizador T ierra y L ibertad ". Porm eot esta ta H u m a n a ,   28.9. nores nores sobre est estee gru po se pu blica ron tam bién en:  El R e b e ld e , 1 1 . 11. 1901, “Grupo Tierra y Libertad". Pr ote sta H u m a n a .   22.2. 55  La Prote 22. 2. 1902, 1902, “El “El Grupo Co lonizador T ierra y Libe rtad".  El  R e b e ld e , 20.2. 20.2. 1902, "Grupo Colonizador Tierra y libertad".

es de suponerse que el grupo corrió la misma suerte que los anteriores. Entre 1902 y 1905, la época tormentosa en las luchas obreras, no se tuvo ningún indicio de actividad anarquista para formar gru pos d e co lon lo n iza iz a c ión ió n c o m u n a l en la A r g e n tin ti n a .

Co o p e r a t iv a s

En cuanto a las cooperativas, había una controversia en el movimiento anarquista mundial. El tema iba a ser debatido en el Congreso Anarquista de París que se celebraría en septiembre de 1900. 56 P e ro ese congreso, como se sabe, no se llevó a cabo, y en la reunión secreta de los anarquistas activos, en París, cuando se supo de la anulación del congreso, el tema no se trató. La cuestión siguió pendiente de las vacilaciones y los debates en el movimiento anarquista del mundo, y no se logró una concordancia de ideas. 57 En la Argentina, el tema de las cooperativas se planteó entre los anarquistas, en momentos de consustanciamiento con las luchas obreras y al acentuarse el apego a las mismas. A comienzos de 1901  La P rote ro test sta a H u m a n a   informó sobre la tendencia a crear una cooperativa rativa de som brereros, brereros, como m edio pa ra ayu dar a lo los trab ajad ore s de esa rama, sumergidos en esos días en una huelga prolongada. 58 En la segunda mitad de 1901 se informó en  La  L a P rote ro test sta a H u m a n a   sobre la creación de una cooperativa de obreros de cigarrillos: la Unión de Trabajadores Unidos. El periódico saludó la idea expresando: “Deseamos seamos que esta iniciativa iniciativa siga a d e la n te ... ". 59 A fines de 1901 y comienzos de 1902 surgieron cooperativas de obreros panaderos, en su mayoría afiliados al sindicato anarquista. Esas cooperativas cumplieron un papel importante en la gran huelga de obreros panaderos, en 1902. 60 En el II C ong reso d e la F . O . A., des pués  pu és d e q u e los soci so cial alis ista tass a b a n d o n a r o n la f e d e r a c ió n y é s ta q u e d ó sujeta a la influencia de los anarquistas activos, se aprobó una resolución explícita sobre las cooperativas: “El Congreso considera que las cooperativas de producción sólo 56  La P rote ro testa sta H u m a n a ,   2 4 . 11. 1900, "El Congreso Internacional". L. Maitron, op. cit.,  pp. 339345.  El R eb e ld e,   16.2. 16.2. 1901, “Organización, iniciativa”. 58  La 1901,, “La h uelga de som brereros”.  L a P ro test te sta a H u m a n a ,   2 6 . 1. 1901  L a P rote ro test sta a H u m a n a ,   3 0 . 11. 59  La 11. 1901, 1901, “Mov imiento social”. 60  La P rotes 9. 8; 28.10. 28. 10. 1902. ro tes ta H u m a n a , 2 . 8; 9.8;

 pu  p u e d e n a c e p ta r s e como co mo m e d io a c c id e n ta l d e d efen ef en sa y re r e c o m ie n d a la creación creación de cooperativas cooperativas de consumo que p ued an em anciparse de los intermediarios que nos explotan y nos envenenan”. 61 La redacción reticente de esta cláusula, pone de manifiesto las vacilaciones ideológicas. Su expresión literal no tardó en oírse. El 30 de mayo de 1902  L a Prote Pr otesta sta H u m a n a  pu blicó blicó una carta del del compañero Gallardo, recalcando su disgusto por la resolución equívoca del congreso de la F. O . A. respecto a las cooperativas, y alegando que se las debía re fu tar sin miramientos. En su respuest respuesta, a, la redacción seña laba que se debía distinguir entre un congreso anarquista y uno de obreros. En un congreso obrero no era posible velar por un criterio anarquista anarquista ín tegro . 62 En cu an to a qu é se entien de p or “criterio a n a rqu ista” en el el cooperativismo de prod uc ción o consum o, no se se dio dio una respuesta clara. El tema siguió inquietando a los círculos anarquistas de todas las tendencias y corrientes ideológicas, y desde septiembre de 1902 pasó a ocupar lugar destacado también en la prensa anarquista. En uno de los números de  E l R e b e ld e  se insert insertó ó una can tidad de pre gu ntas de lecto lectores, res, entre ellas: ellas: “¿S “¿Se deb en a pr ob ar las las co op era tivas?”. tivas?”. El interesado en saber —R. Cantos, un anarquista del interior — señaló que lo im pu lsab a la expresión positi positiva va que advertía en la prensa anarquista. 63 La res pu esta de la red acció ac ció n no se se dio en ese núme ro, pero en un extenso extenso artículo firma do p or Galil Galileo eo (que ad quirió renombre meses después en ese periódico) se repudió totalmen te a las las cooperativas, cooperativas, por considerarlas un elem ento dañ ino y d eformador del espíritu revolucionario. 64 En octubre de 1902  La  L a P rote ro test sta a H u m a n a   permitió también la dilucidación teórica del tópico relativo relativo a las las cooperativas y pu blicó un a serie de artículos de pensadores anarquistas. El primer artículo fue de P. Kropotkin y la redacción, en un prólogo, recalcaba que su transcripción se debía al gran interés que entre lectores había suscitado el tema. El artículo de Kropotkin empieza analizando el desarrollo del cooperativismo de consumo y de producción en Gran Bretaña, y señala la formación de una mentalidad conservadora  bu  b u rg u e s a e n tr e los m ie m b ro s d e las co o p e ra tiv ti v a s p ro c e d e n te s d e la clase trabajadora. En su opinión, el capitalismo aprovechaba los logros del cooperativismo y fortalecía por su intermedio el régimen 61 Véase el C ap . IV sobre las de libera cion es del congreso I de la F .O . R . A. ot es ta H u m a n a ,   30.5. 62  La Pr otes 30. 5. 1902. 63  El R e b e ld e ,   13.9. 13. 9. 1902.

existent existentee y la exp lotación de los trab ajad ore s. R ep rue ba las las teorías de los socialistas, quienes alegaban que el cooperativismo prepararía a los obreros para la cooperación. Kropotkin apuntaba que las cooperati rativa vass se se basab an en elementos elementos egoísta egoístas, s, que no fo m enta rían la te n dencia dencia a la la vida en en com una . En cuan to a la ac titud an arq uista al res pect  pe cto, o, dice: di ce: "Nosotros sabemos que... la asociación de consumidores y de los  pro  p ro d u c to re s , s e r á u n a d e las fo rm a s d e la s o c ied ie d a d n a c ie n te . P ero er o no queremos saber nada de esta asociación que tiene por objeto meter en caja su plu svalor sv alor o su ben eficio " . 64 Los titubeos teóricos en torno al tópico se expresaron igualmente en las páginas de  La  L a O r g a n iza iz a ció ci ó n O b re ra ,  de la F.O F. O . A. Considerando la realidad, con ideas diferentes, la redacción inició una sección llamada “Tr ibu n a Lib re”, do nde los los com pañeros pub licarían sus sus  pu  p u n tos to s d e vist vi sta. a. El p r im e r a r tí c u lo fu e de Pelli Pe llico co (P e llic ll ic e r P a r a ir e ) , en el que el autor expresó una idea similar a la de Kropotkin, repudió las cooperativas y las vio como un camino hacia el aburguesamiento del obrero, hacia el aletargamiento de su lucidez revolucionaria. 65 En 1902 no se celebró el debate teórico sobre el tema, pues estallaron campañas obreras (las de noviembre de 1902) y luego sobrevino la paralización resultante del estado de sitio. AI reanudarse la actividad anarquista en 1903, volvió a plantearse la cuestión de las cooperativas y se entrelazó por en tero en las las ca m p añas obreras en que participaron los anarquistas; el tema adquirió expresión teórica en los debates de los congresos.

An t i m i l it a r i s m o

Los pareceres a ntim ilitarist ilitaristas as h ab ían sido sido comu nes a todos todos lo los m o vimientos anarquistas, prescindiendo de sus tendencias. Se diferenciaban por la forma de actuar, por su intensidad, por los objetivos y formas de lucha, pero no en el repudio sustancial del militarismo y

 E l R e b e ld e ,   2 3 . 11. 1902, “Las cooperativas”.  La Pr otes ot es ta H u m a n a ,   2 5 . 10. 1902, 64  El “Co operación y socialismo" socialismo" Sob re este este tema se pu blicaron artículos en  L a P rote ro testa sta (1.11. 1902, 1902, 8 . 11.  H u m a n a ,   R. Mella, “El Cooperativismo ante las escuelas sociales" (1.11. 1902, 15.11. 15.11. 1902.) 1902.)  La or ga ni za ci ó n ob re ra ,   2 5 . 10. 1902, "Las cooperativas obreras”.

del patriotismo estatal. 66 No e x tra ñ a ento nce s qu e esos esos enfo ques qu es se se arraigaran también en el anarquismo argentino desde sus primeros  pasos  pas os y q u e c r e c ie r a n a com co m ienz ie nzos os del de l siglo sig lo X X , cuando aumentó su actividad en el país.  La  L a P rote ro test sta a H u m a n a   asumió una posición enérgicamente antimilitarista desde sus primeros números; además de los artículos antimilitaristas copiados de la prensa anarquista francesa, española, etcétera, se centró en la propaganda contra la guardia nacional. El tema se abordó en los artículos antimilitaristas publicados en 1897 y 1898.6 1898. 67 C ua nd o se pro m ulg ó la ley ley del servicio servicio m ilita r ob ligatorio en la Argentina, en 1901, la prensa anarquista se lanzó a una campaña enérgica en su contra.  La  L a Pro Pr o test te sta a H u m a n a   publicó notas de censura a esa ley ley y co ntr a su perniciosa in flue nc ia sobre los jóvenes jóvenes y diversos aspectos de la vida. La propaganda antimilitarista y la resistencia a la conscripción obligatoria se intensificaron en 1902 y se expresaron también en resoluciones del II Congreso de la F. O . A .68  La Prot Pr otes esta ta H u m a n a   insertó en sus números de ese año varios artículos de repudio enérgico a la conscripción militar. En uno de ellos, dirigido directamente a los candidatos al enrolamiento, el ejército fue descrito como el escudo de la propiedad privada, de la ley y del régimen capitalistas, y como un instrumento de los ricos y fuertes  pa  p a r a o p rim ri m ir a los p o b re s . N o se e s c a tim ti m a r o n p a l a b r a s de c ríti rí tica ca : “El “El ejército, cons criptos, es, es, en fin , el vam piro mo nstruo so que os os chupa la sangre, que os estruja, que os retuerce y que os arroja des pués  pu és inút in útile iless e im p o te n te s , lejos, m u y lejos, lejos , d o n d e no p o d a is t u r b a r sus festines criminales. Y ahora, soldados, meditad y obrad como mejor os plazca. Id a engrosar las filas del ejército abdicando de vuestra personalidad para prostituiros en el cuartel y descargar los fusiles homicidas contra vuestros hermanos, o ponéos al lado de estos  pa  p a r a e c h a r p o r t i e r r a el ed ific if icio io g ig a n te d e la in ju s tic ti c ia s o c ial” ia l” . 69 66 Sobre el antim ilitarism ilitarism o y el an tipatriotism o en F ran cia, véase. J. M aitron, op. cit.  pp  p p . 34 635 6 35 4, C a p . “ Le s A n a rc h is te s e t L ’A n ti m il it a ri s m e ”. 67  La Pr otes 15. 9. 1897, “la Guardia Nacional”  I b í d .  12. 6. 1898, “La ot esta ta H u m a n a ,   15.9.  p a tr ia y el m il it a ri s m o ” . 68  La P rote 17. 5. 1902 Véase Véase tam bié n el el ca pi tulo sobre el II congreso ro testa sta H u m a n a ,   17.5. de la F.O F. O . A. ot esta ta H u m a n a ,   2 5 . 10 1902, “Para los conscriptos de la República Argenti69  La Pr otes ro testa sta H u m a n a , 7 . 12. 1901, “Nota al na”. Otros artículos sobre el mismo tema:  L a P rote día”  I b í d .  14.12. 14. 12. 1901.  Ib 1. 6.  I b í d . 8 . 11. 1902, “Crímenes del militarismo".  El  E l Sol, So l, 1.6. 1901.  I b í d .  24.12. 24. 12. 1901; 1.5. 1.5. 1902; 1.7. 1.7. 1902.  E L R e b e ld e ,   2 3 . 9. 1900, “El servicio servicio m ilitar”; 18.3. 18. 3. 1901, “A los soldados”.

La propaganda antimilitarista enérgica, y el llamado a negarse a la conscripción obligatoria, así como la invitación a la deserción de las filas filas del ejérc ito  en artícu los pu blica do s en 1902— co n co rd a ban  b an con co n las te n d e n c ia s d e v ario ar ioss m o v im ien ie n to s a n a r q u i s ta s del de l m u n d o y en especial de Francia por esa época. 70 La  L a Prote Pr otesta sta H u m a n a ,  en un artículo titulado “Por buen camino”, informa del fortalecimiento de la corriente antimilitarista en Francia, la encomia con beneplácito y transcribe el manifiesto a los soldados que apareció en el periódico anarquista francés “Le Libertaire”. 71 La pro pa ga nd a an tim ilitarista en la Argentina no tuvo impulso y el estado de sitio la apagó, igual que toda la actividad anarquista, en noviembre de 1902. Un argumento adicional para la propaganda antimilitarista entre 1898 898 y 1902 1902 fue la tensión tensión arg en tino ch ilen a en torn o a las fro nte ras andinas entre los dos países. Cada vez que se intensificaba la tensión en la Argentina, la prensa anarquista atacaba con energía lo que llam aba “histeri “histeriaa bélic bélicaa antich ilena ” . El tema fue abord ado co nsiderablemente por  La  L a Pro Pr o test te sta a H u m a n a   en 18981901.7 18981901. 72 C ierta ier ta a m b iv alencia en el enfoque antimilitarista, se reveló en los enfoques de  La  L a Protesta Humana   sobre la guerra hispanonorteamericana en Cuba, en 1898. En un artículo se analiza la concatenación de los acontecimientos que llevaron al estallido de la guerra, y expresa simpatía por los soldados cubanos revolucionarios, aunque con reticencias en cuanto a las metas limitadas que se fijaron en la lucha por la libertad. Al fin fin de cuentas —dice el el au to r— “somos somos neutrales en est estaa co ntienda”. 73 A comienzos de 1903, al abolirse el estado de sitio y reanudarse la activi actividad dad a narq uista legal legal,, vol volvió vió tam bién la pro pa gan da an tim ilitailitarist ristaa en la prensa. La empezó Ju an Creaghe, en ese ese entonces la im agen cen tral en tre los activist activistas as del del m ovim iento, con un artíc ulo en  La  L a Protesta Humana.   En el estilo de las notas redactadas en 1902, exhortó a no enrolarse y a desertar del ejército. 74 En la la pro pag and a antimilitarista de 1903 se renovó también el apego al movimiento antimilitarista francés, y la prensa anarquista de la Argentina reprodu70 J. M aitro n. op. cit..   p. 348. ot es ta H u m a n a ,   11.10 71  L a Pr otes 11. 10,, 1902 1902,, "Por buen cam ino” . 72  La 13. 2. 1898, 1898, “Q uiere n ustedes callarse". callarse".  I b í d . 18.3. 18. 3. 1898,  L a P ro test te sta a H u m a n a ,   13.2. “El rein ado d el sable" .  Ib 1898, "En tusiasmo nefasto".  I b í d . 1 . 5.1898, 5. 1898, “Obse I b í d . 1 .4. 1898, sión patriótica”.  I b í d  9 . 10. 1898, “La cuestión de límites”.  Ib  I b íd . 1 . 10. 1899, ‘‘Guerra al militarismo”.  I b í d .  2 4 . 12. 1899, “Guerra al militarismo”. 73  La 15. 5. 1898, 1898, “La gu guerra hispano norteam ericana" .  L a P ro test te sta a H u m a n a ,   15.5 74  La 28. 3. 1903, “El militarismo”.  L a Pr otes ot es ta H u m a n a ,   28.3.

 jo los m an ifie if iest stos os p r o c e d e n te s d e F r a n c ia . 75 Ese Ese año a ño a b u n d a ro n los los artículos teóricos y notas de réplicas actuales, a fines de año  La  L a P ro testa Humana   empezó a publicar, en capítulos, el libro del anarquista activo Elam Ravel:  El  E l m ilit il ita a r is m o en la A r g e n t i n a . 76 U na evidenci evidenciaa de la inten sida d de la la prop ag an da antim ilitarista de  L a P rote ro test sta a Hu 1903 puede encontrarse en el artículo editorial de  La mana,  a comienzos de 1904; en una reseña de lo acaecido en el año que había terminado, señ alab a que una de la las expresi expresiones ones anarquistas tas descol descollan lantes tes de 190 1903 ha b ía sido sido “que la pr o pa g an d a an timilitarista empieza a acentuarse entre nosotros”. 77 En los dos d os añ a ñ os siguie sig uientes ntes siguió siguió con fuerza fuerza la la activid ad antim ilitarista, y se convirtió en uno de los frentes más tempestuosos. La p rensa insertó insertó mu chos artículos (en (en  p a r t e tra tr a d u c c io n e s d e los p e rió ri ó d ico ic o s a n a r q u is ta s del de l e x te r io r y en p a r te fruto de la pluma de anarquistas activos locales, volcados con entusiasmo a la campaña). Desde octubre de 1904  La  L a P r o te s ta H u m a n a habilitó habilitó una sec secci ción ón pe rm an en te para la prop aga nd a a ntimilitarist ntimilitarista, a, donde se daban noticias sobre revelaciones negativas en los cuarteles del ejército, sobre los individuos que se resistían a la conscripción, y sobre lo los éxi éxito toss de la la pro pa g an d a an timilitarista e ntre los soldados. 78 Esas Esas acci acciones ones asum ieron u n ca rác ter org anizad o y se volvieron volvieron muy eficaces al crearse el Consejo Antimilitarista, encargado de dirigir la campaña de propaganda y de concentrar las actividades. El Consejo organizó asambleas de esclarecimiento y recurrió a los servicios dinámicos de los militantes de la F. O . A.: Hucha, Béjar, Jaquet, etcétera. 79 En es esos años, años, la cam pa ña an timilitarista se se enga rzó en la cam pañ a general de la F. O . R . A., y en todos los congresos que celebró, la cláusula an timilitarist timilitaristaa se vol volvió vió respetable y p er m an en te. 80

A n t ic l e r ic a l is m o

En las postrimerías del siglo X I X , se operaron modificaciones e n las relaciones entre la Iglesia y el Estado en Argentina. En la época 75  La  L a Pr otes ot esta ta H u m a n a , 4 . 4. 1903, “Antimilitarismo". 76  L a P rote 19. 12. 1903, “El militarismo en la Argentina". ro test sta, a,   19.12. ro test sta, a, 1 . 1. 1904, “Nuestro Año". 77  L a P rote 78  La  L a P rote ro test sta, a,   2 7 . 10. 1904, “Las infamias del cuartel”. 79  La . 9. 1904, “Campaña antimilitarista".  L a Pr otes ot es ta, ta ,   2 1 .9. 80 V éase los los ca pítulo s que tr at an sob re el el IV y el V Co ngre so de la F .O . R . A.

de la presiden cia del Gral. Julio A. Roca, se se pr od ujo un a cri crisis sis en las las mismas, que finalizó al iniciarse la segunda presidencia. 81 El año 1899 1899 señ ala los los comienzos del del me jor am ien to de las las relacione s con el Vaticano y la actividad católica en la República se intensificó notablemente. El número de sacerdotes y emisarios del Vaticano creció en grado sum o y con m uc ha rapide z. Se levantaro n nuevas nuevas igle iglesi sias as y se ampliaron las escuelas religiosas. También adquirieron considerable ím petu los organismos organismos de trabajad ores católicos católicos que existían existían en el país desde 1892 y que, además de su labor principal en el campo de la ayuda mutua, consideraban su función servir de freno a la influencia socialista y anarquista. 82 El d es p e rta r ge ne ral d e los círculos católicos en la República, en todos los dominios, inquietó a los grupos liberales y de izquierda, tanto socialistas como anarquistas. En 1899 se se notó en la la prensa a narq uista u na preocu pación creciente por la actividad eclesiástica en la Argentina, sobre todo en lo relativo tivo a la la enseñanza religio religiosa; sa; m uchos com entarios entarios repu diaro n e né rgicamente el el peligro peligro que entra ña ba la formación formación de la la imag imag en de la la j u ventud y del carácter de la sociedad. 83 En 1900 la opinión pública se estremeció al revelarse los crueles métodos métodos punitivos punitivos que aplicab a el el pa dr e P ertran a en la la cárcel cárcel de m enores.  La  L a P r o tes te s ta H u m a n a   insertó un artículo donde se describían los procedimientos, con base en la información suministrada por el  juez  ju ez G alle al lego gos; s; e n t r e o tra tr a s cosa co sas, s, se d io a co n o c er u n a list li staa d e jóve jó vene ness flagelados, de 30 a 100 veces, en los últimos meses. 84 L a pren p ren sa g e n e ral también escribió sobre el tema. La opinión creó un movimiento de protesta contra el predominio de los los clérigos clérigos en los los ins ins tituto s de jóvene s, y ab ar có a diversos diversos círculos círculos anticlericales. Se empezaron a preparar asambleas públicas de protesta. En una reunión preparatoria, el 22 de diciembre de 1900, participaron representantes de 30 grupos políticos y sociales variados: desde republicanos masones, hasta socialistas y anarquistas. En la reunión se resolvió la realización de una manifestación de protesta  pa  p a r a el m ism is m o d ía y se r e d a c tó u n m a n ifie if iess to d e p r o te s ta a n tic ti c le ric ri c a l. 81 M ab rag añ a, op. cit.,   p. 2. 82 H. Sp ald ing , op. cit., p. 499-503, y 523. 17. 9. 1899, “Desastre na cio na l".  I b í d . 1 . 4. 1900. 1900. “Invasión “Invasión ultram on 83 E l Re be lde ,   17.9. tan a” .  I b í d .  2 2 .4. . 4. 1900, "Avances de la reacción”.  I b í d . 4 . 11. 1900, “Basta de religión”.  La . 6, 1900, "Convicto y confeso”.  L a P ro te sta st a H u m a n a ,   2 4 .6, 84  L a P rote 1900, “La o br a de curas” El ro testa sta H u m a n a , 8 . 12. 1900,  E l So l, 1 . 12. 1900, “El atentado”

Firmaron el manifiesto los representantes de todos los grupos partici pan  pa n tes te s en la r e u n i ó n , 85 y con ello ello pusie ron de re lieve u na coop co op eració era ción n excepcional y especialísima. La manifestación de protesta no se llevó a cabo en la fecha prevista, pues la policía la prohibió. La prohibición también despertó la ira de círculos no involucrados. Una prueba de ello la constituyó  La  L a Prensa .86 Según u na n ot a ap are cid a en  La  L a P r o tes te s ta H u m a n a   a comienzos de enero, se comprueba que, pese a la prohibición policial, se congregaron 15 000 personas. La policía las dispersó por la fuerza,  pero  pe ro el p ú b lic li c o hizo hi zo m a n ife if e s ta c io n e s e n g r u p o s p e q u e ñ o s e n d isti is tin n tos to s lugares de la capital. 87 Los círculos círculos org an izad or es no c lau dic aro n ni renunciaron al derecho de manifestarse. Tras una lucha pública consiguier siguieron on permiso permiso p ar a hac erlo en una fecha po sterio r, el 13 13 de enero de 1901, en que se realizó una asamblea pública y hablaron los socialistas A. Patroni y N. Repetto, y el anarquista Arturo Montesano.8 Montesano. 88 Despu Después és de esa esa manifestación, no hu bo coo perac ión en tre lo los an a rquistas quistas y otros círculos en la activida d a nti cle ric al. En ju n io de 1901 901 se trató otra vez de formar una comisión pública para una protesta anticlerical. Los anarquistas invitados a participar abandonaron en segui seguida da la la comisi comisión ón prepa ratoria, pues se ne ga ba n a presen tar una p e85 Círculo L ibertario d e Estudios Estudios Socia Sociale les, s, Centro Socialista O brero A rgen tino, Gran Oriente Argentino (Masonería Nacional A.), A. ), Grupo y Periódico L'Avvenire, Club Giordano Bruno, Asociación Obrera de Socorros Mutuos, Grupo, S.A. S.A. "La Antorcha”, Asociación Anticlerical, Círculo Socialista Norte, Comité E. del Partido Social Socialis ista ta Arg entino, Logia Masón ica "Figli "Figli D ’lta lia ” (Bo ca), G .O . A. Logia Masónica “G. Garibaldi” (Boca), G.O G. O . A. Logia Masónica “Estrella del Oriente”, G.O G.O . A. Vecinos de Villa Ballester (partido de San Martín), Logia Masónica “Unión Italiana Primera”, G.O G. O . A. So ciedad de Obrero s Pintores, Id. M arm oleros, Id. Yesero Yeseros, s, Id. Artes Artes Gráficas, Id. Curtidores, Id. Hojalateros, Id. Cepilleros, Id. Unión Obreros Ebanistas, Id. Obreros Obreros P anade ros. Un grupo de constructores constructores de carru ajes y carros, carros, S ociedad de ro testa sta Resistencia Obreros Mecánicos y anexos, Diario  E l T i e m p o ,   Periódicos:  L a P rote  H u m a n a , El O b re ro P an ad er o, E l R e b e ld e , L a V a n g u a rd ia , A B C d e l S o ci a lism li sm o, esta circular Progreso de la Boca,   revista  M a só n ic a ,   revista  E l S o l. La co pia original de esta se encu entra en el Archivo IISG IISG en la colecci colección ón privada Max N ettlau, Legajo Arge ntina 1900, Amsterdam. 86  La Pren Pr ensa sa,,   3 1 . 12. 1900, “El derecho de reunión”. Cabe señalar que, en la nota  p u b lic li c a d a p o r L a P re n s a , n o se m e n c io n ó a los g ru p o s a n a r q u i s t a s ac tiv ti v o s e n la o r g a n ila te ,   presentó a zación de la manifestación. En cambio, el diario  R e v ie w o f t h e R iv e r P late la manifestación manifestación como u na "m anifestación anifestación an arq uista ”.  R e v ie w o f th e R iv e r P late, lat e, 5 . 1. 1901, 1901, "T he A narc hist". 87  La  L a Pr otes ot esta ta H u m a n a , 5 . 1. 1901, “El mitin anticlerical”  El  E l R e b e ld e , 6 . 1. 1901, "Movimiento Social”.  E l Sol, Sol , 8 . 1. 1901.  L a P rote ro testa sta H u m a n a ,   19.1. 88  La 19. 1. 1901, “El mitin infernal”.

tición tición al al gobierno. “No es es el camino —ale g ab an — al peligro, peligro, negro oponer el peligro rojo”. 89 Y en reac ción a la m anifes an ifestació tació n anticlerica an ticlerica l realizada sin los anarquistas —que terminó con una petición al gob ierno — escribió escribió con sarcasm o el periódico del sindicato de obreros  pa  p a n a d e ro s , d e te n d e n c ia a n a r q u is ta : “O tr a p e t ic i ó n ... .. . al h u m o ” . 90 La cooperación espontánea en la manifestación de protesta anticlerical ticlerical se registró en octu br e 1901 1901,, en cu an to las organizaciones de los trabajadores católicos, encabezados por el padre Grotté, organizaron una peregrinación a Luján, cruzando las calles de Buenos Aires. Multitudes de obreros —anarquistas y socialistas, así como un  pú  p ú b lic li c o a n tic ti c le r ic a l host ho stil— il— se s e a p o s ta r o n en las v e re d a s y se b u r l a r o n de la la procesión, causánd ole molestia molestias. s. La policía actuó con con energía co ntra los prom otores del des orden y detuvo a dece nas de ello elloss (in clu sive a anarquistas, socialistas y masones libres). 91 En los años subsecuentes, la actividad anticlerical de los anarquistas se centró en la campaña contra los organismos de obreros católicos, que se agudizó al crecer la agitación obrera en la Argentina, a comienzos del siglo X X . Los organismos católicos, que se fijaron por meta la lucha contra los sindicatos obreros anarquistas y socialistas, socavaban y debilitaban a la clase trabajadora, y de su seno  pr  p r o v e n ía n la m a y o r ía d e los ro m p e h u e lg a s q u e d a ñ a b a n los p a ro s  pr  p r o c la m a d o s p o r los s in d ic a to s o b re ro s . E n tre tr e 1899 18 99 y 1902 el n ú m e r o de sus miembros creció de 6 762 a 13 115, y la cantidad de sus círculos au m en tó de 33 33 a 50 50 expan diénd ose en el interio r. En 1902, 1902, el reglamento de los Círculos de Obreros Católicos fue aprobado en las instituciones u ciones de la Iglesia católica en la Argentina. El 24 de noviembre de 1902 (en los días de la gran huelga general), el arzobispo de Buenos Aires publicó una Pastoral  de encomio a los Círculos y exhortando a todos los creyentes a apoyarlos. 92 E n tr e 1902 190 2 y 1905 se ahondó el odio entre anarquistas y los Círculos Obreros Católicos, llegando a suscit suscitars arsee incidentes sangrientos sangrientos du ra n te las las gran des h ue lgas de los panaderos y trabajadores portuarios.

89  La . 6. 1901, “C “C on tra el el vici vicio o de p e d ir” .  L a P ro te sta st a H u m a n a ,   2 2 .6.  E l O br er o,   2 2 .9, 90  El . 9, 1901, “El Meeting liberal". st a H u m a n a , 5 . 10. 1901, “Guerra a la Reacción. Arbitrariedad policial” 91  L a P ro te sta Otra versión sobre el incidente, The Review Revie w o f the R Riiver ver P Plate late,, 5 . 10. 1901, “General Summary”. 92 H. Spalding, op. cit.,   p. 512, 513 y 524.

En las publicaciones anarquistas de la Argentina, desde sus albores, se puede encontrar mucho espacio dedicado a repudiar la institución de la familia en el régimen existente, su sujeción a los princ pios  pio s d e la p r o p ie d a d p r iv a d a y a la in flu fl u e n c ia d e la Ig lesi le siaa . Los d a r dos de la crítica se orientaron sobre todo contra el carácter autoritario rio del del hom bre en la familia, así así com o a la la inf erio rid ad de la mujer y su subyugación a moldes coercitivos. En artículos sobre el tema, se  pla  p la n te ó la n e c e s id a d de c o n ju g a r la lib li b e r a c ió n d e la h u m a n i d a d de las cadenas de la las instit instituciones uciones auto ritarias, d e la p ro pie da d privada, privada, del Estado Estado y de la Iglesi Iglesia, a, con la liquid liquid ación d e la in stituc ión familiar  p a t r ia r c a l y con co n la lib li b e r a c ió n d e la m u je r. E n este es te c o n j u n to asom as omó ó también la ideal del “amor libre”, como esfera apropiada y no coercitiva para las relaciones de los dos sexos, y para la creación de una célula lula familiar basada en la iguald ad y la libre libre vo lun tad, sin sin ningún ti po  p o d e esfe es fera ra c o e r c itiv it iv a . 93 E n tre 1895 1895 y 1897 1897,, se ad v irti ó u n d espe es pe rtar espec especia iall de la la actividad actividad al respecto. respecto. El grupo an ar qu ista qu e editaba el periódico  La  L a Q u esti es tio o n e Soci So cial ale, e,   comenzó a publicar una serie de folletos titulada “Propaganda anarquista entre las mujeres”, que se consagraba a los temas: familia, liberación de la mujer, problemas de la la mu jer traba jado ra, educ ación de las las jóvenes p ar a llevar llevar una vivida de trab ajo y queh acer social.9 social. 94 El afam ad o p erio dista an arq uista , E . Z. Arana, abordó con amplitud el tema en sus conferencias, y el grupo anarquista rosarino “El Grupo de Propaganda Anárquica Ciencia y Progreso” editó sus disertaciones en un folleto especial, en dos ediciones de 1500 ejemplares cada una. 95 La actividad más notable e interesante en lo concerniente a la emancipación de la mujer, fue llevada a cabo por mujeres anarquistas que organizaron un grupo feminista anarcocomunista, que  L a Voz de la M u j e r .  Este periódico  pu  p u b lic li c a b a u n p e rió ri ó d ico ic o p r o p io :  La empezó a apa rece r a princip io de 1896 896 , y se pu blic ó h asta 1897 1897.. En el el

gu ido, o,   2 9 . 11. 1891, "Sobre el amor libre”  Ib  I b í d .  1 3 .12. 93  El Pe rse guid . 12. 1891, “La mujer y la

familia”. 94 Propaganda anarquista entre las mujeres. Ed. Biblioteca de "La Questione Sociale" Publicación No. 1.  A las hija hi jass d el p u e b lo ,   Ana María Mazzone, Buenos Aires 1895. Publicación No. 2. A las muchachas que estudian,   B uen os Aires, 1895. Publicación No. 5. Un episodio de amor en la colonia Cecilia,   Buenos Aires, 1896. 95 Dr. E.Z. E.Z. Arana,  La  L a m u je r y la fa m i l i a ,   Rosario de Santa Fe, 1897.

artículo editorial del primer número se presentaron las metas del periódico y, entre otras cosas, se decía: “Hastiadas ya de tanto llanto y m iser ia... hastiadas de p ed ir y suplicar, de ser el jugu ete, el objeto objeto de los placeres de nuestros infames explotadores o de viles esposos, hemos decidido levantar nuestra voz en el concierto social y exigir nuestra pa rte de placer placeres es en el el ban qu ete de la la vida... C om prendimos que teníamos un enemigo poderoso en la sociedad actual, y fue entonces también que mirando a nuestro alrededor vimos muchos de nuestros compañ eros luchan do con tra tal sociedad. sociedad.... Decidimos Decidimos ir con ello ello en con tra del enemigo com ún, más como no queríam os depende r de nadie, alzamos nosotras también un jirón del rojo estandarte... ”96 La aparición de ese periódico suscitó pronto una tempestad entre los anarquistas, cuando los dardos de sus crítica apuntaron también contra la hipocresía existente entre los anarquistas varones, que no eran capaces de liberarse de la actitud de jactancia delante de las mujeres y que, en la vida familiar, no llevaban a la práctica un estilo adecuado al anarquismo. 97 El pe riódic rió dic o, qu e so bresalía bre salía po r su estilo  po  p o lé m ico ic o a g u d o , fue fu e u n e le m e n to d e a g ita it a c ió n e n el c a m p o a n a r q u i s ta y despertó una actitud enérgica en cuanto a la posición de la mujer en la familia y a la campaña por derechos iguales para las mujeres en todos todos los los dom inios de la la sociedad . Una de las las colab ora do ras p rin ci pal  p ales es del de l p e rió ri ó d ic o fue fu e P e p ita it a G u e r r a . El p e rió ri ó d ic o dejó de jó d e p u b l i c a r se al al em peza r el el año de 1897 1897 y cabe su pon er qu e en ese ese entonc es ta m  bién  bi én se disol dis olvi vió ó el g r u p o f e m in is ta , p e ro el te m a no d e s a p a r e c ió d e l orden del día; en 1897 los círculos anarquistas siguieron consagrando su interés a la liberación de la mujer.  La  L a P rote ro test sta a H u m a n a , qu e empezó a publicarse en el año arrib a señalado, insertó en su primer número un extenso artículo, “La Mujer y la F am ilia”, critican do a la familia que en el ord en existente m a n tiene tiene a tad a a la la m ujer, y hace un llam ado a liberarla de sus sus cadenas. Empero por otra parte, el artículo destacaba el gran potencial de valore loress solitar solitarios, ios, ayud a m utu a y conexión interperson al. El texto texto re p u diaba la estabilidad coercitiva, a la vez que aprobaba las relaciones libres y voluntarias, sin marcos permanentes y obligatorios. Por último llam ab a a los jóvenes jóvenes a escoger escoger el “am “am or lib re ”, sin sin someterse a la 96  La 8. 1. 1896.  L a Voz Vo z de la M u je r .   (Buenos Aires, Periódico Comunista Anárquico), 8.1. "Nuestros Propósitos”. 97  L a Voz d e la M u je r ,   3 1 . 1. 1896, "Apareció Aquello”.  Ib 20. 2. 1896, “A los los co m  I b íd .   20.2.  p a ñ e r o s ” .

institución de la familia. 98 Co m entarios en el el m ismo esp íritu (au nq ue con matices distintos) se reprodujeron en números posteriores de  La  L a Protesta Humana,  firmados por los colaboradores más desco de sco llantes. llan tes. 99 La prolongada y constante campaña de los círculos anarquistas y sus sus periódico periódicoss en pro de la la liberación d e la m u jer —como p ar te de la cam pañ a po r la liberac ión de la la so cie da d10 d100— atr ajo a varias m ujeres acti activa vass en el queh ace r público, sobre todo a las las trab ajad ora s. La m u  je  j e r m ás d e s ta c a d a e n tre tr e las a n a r q u is ta s acti ac tiv v as e ra V irg ir g in ia B o lte lt e n , que inició su su tra ye cto ria en tre las las mu jere s an a n ar q u ist as de R os ario. 101. Las anarquistas de Rosario centraron su actividad en los sindicatos obreros. obreros. En el info rm e qu e elev elevó ó el m inistro del Inte rior, J. V. G onz ález, sobre la situación de la clase trabajadora en el interior, Bialet Massé se refirió a esa actividad diciendo: “En Santa Fe”, las mujeres que entrar por ese camino (la actividad en los sindicatos obreros: I . O . ) son francamente anarquistas y anarquistas exaltadas, algunas se hacen hacen n otar po r sus sus facultades facultades oratorias. Hay en Rosario Rosario u na joven  pu  p u n ta n a de p a l a b r a m á g ic a y d o m in a n te , q u e a r r a s t r a m u ltit lt itu ud es; más enérgica que Luisa Michel, tiene indudablemente mejores formas qu e esta ” 102 (Estas ú ltim as p ala b ra s de d e B. Massé se ref iere n a V. Bolten, llamada con el tiempo la Luisa Michel argentina: I. O . ). Después que se aplicó la Ley de Residencia, Virginia Bolten pasó a ser una de las figuras más populares entre los propagandistas anarquistas. Su labor se extendió a muchos campos: conferencias, giras de pr op ag an da , actividad en lo los sindicatos ob reros y en el Consejo de la F.O F. O . A., y no se circunscribió al campo feminista. Además, en sus tareas y confere ncias exho rtab a a las las mujeres a integ rarse a la c a m  pa  p a ñ a g e n e ra l, a d e ja r la lu c h a fe m in ista is ta r e s tr in g id a , d e la q u e dijo di jo

98  La 13. 6. 1897, 1897, “La m uje r y la fa m ilia ” .  L a Prote Pr ote sta H u m a n a , 13 99  La 10. 1897, 1897, “Bris “Brisas as de pr im av era ”,  Ib  L a Pr otes ot esta ta H u m a n a   3 1 . 10.  I b í d .   2 0 . 2. 1898, “La familia".  I b í d .  1 5 .10. . 10. 1899, “La mujer y la familia".  I b í d .  2 6 . 11. 1899, “Ataxia femenil".  Ib íd  30.8.  30. 8. 1902, “Am or con am or se pa ga ".  I b íd  6 . 9. 1902 1902,, "Em ancipa ción fem enina”. 100 No faltaron por supuesto críticas a la disparidad s paridad entre las palabras y el estilo de vida de los propios anarquistas, en lo concerniente a sus relaciones familiares. Un artículo de crítica extrema se publicó en:  El 10. 6. 1900, “El “El m atr im o nio y el am or  E l R e b e ld e   10.6. libre". 101  La 1. 4. 1900, “Las pr o leta ria s”  I b í d .  13.7. 13. 7. 1901, “Movimiento  L a Pr otes ot esta ta H u m a n a , 1.4. Social. Las libertades".  Ib íd  8 . 2 1902, 1902, "Mo vim iento Soc ial” .  I b í d . 5 . 3. 1902, "Movi miento Social”. 102 J .   Bialet Massé, op. cit.,   p. 453.

que “no era otra cosa que un paliativo, al fin contraproducente, y que no conduce a ningún resultado práctico”. 103 La trayectoria y las ideas de V. Bolten en ese entonces, respecto a la liberación de la mujer y sus derechos, caracterizaban el cauce de las otras anarquistas activas; la tendencia general era integrarse en la campaña total de los sindicatos obreros. También los sindicatos y el Consejo de la F. O . A. se esforzaban por integrar a las mujeres en sus actividades. En el periódico de la F. O . A. se publicaban artículos exhortando a las trabajadoras a plegarse a los sindicatos como miembros con iguales derechos, o crearse sindicatos propios. En  La  L a Protesta,   periódico anarquista, se creó una sección titulada “Notas Femeninas”, que también se fijaba esos mismos objetivos. 104 Los esfuerzos fuerzos parecen ha be r log rado éx ito y a fin fines es de 1904 1904,, el perió dico de la F.O F. O . A. destacab a que uno de los los hech hechos os más notables du ra n te ese ese año fue “... la entrada de la mujer en las Sociedades de Resistencia y su energía pa ra la la lu c h a ... "Luego Luego añadía: “... “... pu  p u e d e d e c irse ir se q u e h a s ta el el presente eran muy co ntada s las las mujeres mujeres que se dec idieron a a sociarse y este año las hemos visto en las huelgas, más decididas y más rebeldes rebeldes que nosotr nosotros os los los h o m b re s... ” . 105 Detalles Detalles aleccionad ores sobre la la adhe sión de los los trab aja do res jóv enes y adolescentes a las filas del anarquismo, en ese año, pueden hallarse en el libro de memorias de una de las anarquistas activas más de stac ad as —Ju an a R ouc o B ue laq ue —, qu e en 1904 1904,, a los los 15 15 años de ed ad , se afil afilió ió a la la a ctividad en los círculos círculos ana rqu istas y tres años después, en 1907, se contó entre las fundadoras del Centro Femenino Anarquista que funcionaba en las esferas de la F. O . A . 106

Pu b l ic a c i o n e s

Id e o l ó g i c a s , L it e r a t u r a

y

T e a t r o

En la actividad actividad de los los grupos anarq uistas de la A rgentina resaltaba un a tendencia no table a difun dir publicaciones ideoló ideológic gicas: as: follet folletos, os, manifiestos, libros, aparte de los abundantes periódicos a los que nos referimos en párrafos anteriores. Un gran estímulo a esa inclinación 103  L a P ro te sta st a , 5 . 9. 1903, "Conferencias". 104  L a or ga ni za ci ó n ob re ra, 1903, “Com pañe ras obreras"  La . 10. ra ,   2 5 . 9. 1903,  L a P ro te s ta ,   1 5 .10. 1904, “Notas femeninas”. 105  L a O rg a niza 1904,, " La mujer en la luch a” T am bié n en un ni za ci ó n O b re ra ,   2 5 . 12. 1904 artículo editorial”. La Protesta lo recalca”  La  L a P ro te s ta , 8 . 12. 1904, "Acción femenina”. 106 J. Rouco Buela,  H isto is to ria ri a d e u n id e a l vi v id o p o r u n a m u je r ,   (Ed. B.A. 1964).

fue la realidad argentina en una época de prevalencia de la libertad de impren ta que perm itió itió a los ana rqu istas imp rim ir y p u b lica r su su liliteratura sin trabas. Entre 1890 y 1905 se editaron en Buenos Aires y se difundieron en la República (así como en países vecinos) 90 libros y foll follet etos os de autores autores ana rquistas, prin cipalm en te europeo s, y de alg unos activistas locales. De este modo Buenos Aires, a fines del siglo x i x y principios XX, se convirtió en uno de los dos centros principales en el continent continentee americano p ara la difusión difusión de publicaciones publicaciones an arq uistas tas (e (el otro otro era Paterson , en Estados U nido s).1 s). 107 La p ro p a g a n d a esc rita en ese entonces, po r interm ed io de las las pub licaciones , tuvo amp lia difusión; además de la literatura impresa en Buenos Aires, Argentina era un vasto mercado para absorber literatura anarquista euro pea:  pe a: france fran cesa, sa, ita it a lia li a n a y sobr so bree todo to do esp e sp añ o la. la . Los libro lib ros, s, p erió er iód d ico ic o s y folle fo lletos tos de las las editoriales editoriales anarq uistas de Bar celon a y M adrid ad rid lle gaba ga ba n pro nto a Argentina y eran acap arados por un pú blico lector lector nu m ero so . 108 Al exa m inar la lista lista de pub licaciones difun did as en ese ese entonce s en el paí país, s, descuel descuella la de inme diato la la tend tend enc ia ana rco co m un ista. En la nómina de autores resaltan P. Kropotkin, E. Reclus, E. Malatesta, J. Greave, etcétera. La misma tendencia prevalecía también entre los autores locales cuyos trabajos se propagaban. Otra característica se daba en la reducida contribución de los pensadores lugareños. D. Abad de Santillán, en un artículo minucioso sobre la Bibliografía Anarquista Argentina, recalca este detalle: “Los propagandistas de la Argentina, ya sea por su carácter de extranjeros en su mayor número y por lo tanto inestables, bien por el exceso de actividad o por las m odalidades de la la lucha y de la la pro pa ga nd a, no alcan zan un nive nivell intelectual extraordinario... ”. Respecto al rendimiento ideológico de esas sas publicaci publicaciones, ones, r ed actad as por autores loca locales les,, añ ad e D. A bad de Santillán: “Se han divulgado ideas, no se han pensado, el movimiento argentino fue un vehículo vehículo excelente, excelente, pero no h a ofrecido al mu ndo mucho de original”. 109 Esta apreciación de D. Abad de Santillán concuerda con nuestro criterio. También nosotros opinamos que no hay en la literatura ideológica original de la Argentina enfoques novísimos de teoría anartt la u , "Co ntribución bibliográfica 0 17  M a x N e ttla bibliográfica an arqu ista cional de la Protesta   (Bs. As. 1927), p. 17.

Certamen amen Interna en: Cert

108 D . A. de Santillán, op. cit.   p p . 7273. 109 D . A. de Santillán, “Bibliografía anarquista argentina”, en T i m ó n   (Barcelona), septiembre de 1938, p. 182.

quista. La originalidad principal del anarquismo argentino no debe  bus  b usca cars rsee en la te o r ía , sin si n o en la f o r m a de c o n ju g a r la te o r í a con co n la  prá  p rá c tic ti c a . Desde Desde comienzos del siglo siglo pu ede notarse un foco adicion al en la la difu difusi sión ón del del anarqu ism o en la Arg entina p or m edio de publicaciones escri escrita tas: s: la la crea ción liter aria artística . A p ar tir d e esa esa époc a, em  pie  p ieza zan n a p u b lic li c a r s e o b ra s d e a u to re s a rg e n tin ti n o s q u e e r a n a n a r q u is ta s activos o propensos a su influencia ideológica. Este hecho, de por sí, evidencia el arraigo del anarquismo en la recama de la sociedad de la República. D. Abad de Santillán, al examinar la posición del anarquismo argentino en la literatura de la época, escribe: “No hay país donde el el ariarquismo ariarquismo haya tenido ta n ta influencia influencia en la la literatura co mo en la Argentina, si exceptuamos un cierto período en Francia... Se pued e decir qu e la gra n may oría de los jóvenes jóvenes escritores escritores en la la A rgentina se han ensayado desde 1900... como simpatizantes del anarquismo, quismo, como colabo radores de la prens a an arq uista y algunos como como militantes... ” . 110 A nuestro nuestro pa rec er esta esta estimación es exagerad a y D. D. A ba d de Sa ntillán no logra aprobarla en el capítulo que consagra al tema, cuando examinadla actividad literaria de varios autores anarquistas. Pero, sin duda, el anarquismo ejerció influencia sobre un número de autores jóvenes destacados en la primera década del siglo X X . 111 En esos años la bohemia porteña y los círculos anarquistas eran muy próximos entre sí, varios de los cafés más famosos de Buenos Aires, por ser lugar de cita de los bohemios (“Los Inmortales”, “La Brasileña”, “Colón”) eran conocidos también como lugares de reunión de anarquistas quistas activ activos. os. Se cele bra ba n co ntacto s mutuos y fructífero s, co nve rsaciones intensas y discusiones prolongadas hasta muy altas horas de la noche. J. A nto nio Saldías, en sus sus evocaciones evocaciones de esos esos días, lo señala ampliamente en su libro  La  L a in o lvid lv id a b le b o h e m ia p o r t e ñ a . 112 El anarquista más destacado en esos círculos, era Alberto Ghiraldo, quien se sumó al anarquismo en 1900, tras un período de actividad literaria entre los jóvenes poetas que rodeaban a Rubén Darío. 110 D .A. de Santillán, op. cit. p. 121. 121. 111 F. Giusti, "Nosotros",  número aniversario (19071927). Sobre la influencia del rd ero, o, A. ana rqu ism o en los los escritores jóvenes a com ienzos del sig siglo lo X X , véase H . A. Co rder Ghiraldo,   p. 120122. 112 José A. Saldías,  La in o lv id a b le b o h e m ia p o rt e ñ a ,   Buenos Aires, Ed. Freeland, 1968 1968,, pp . 6166. Sobre los los cafés ana rqu istas , véase tam bié n, “ Los cafés, institución institución  p o r te ñ a ” R ev ista ist a Tod o es Historia,   No. 21, 1/1969, pp. 8688).

En esa época escribió dos compilaciones de poesías:  A h í va v a n  (1892) y Fibras   (1895), así como algunos trabajos en prosa: Sangre y Oro (1897), Gesta   (1899). También fundó la publicación literaria artística mensual  E l Sol So l  (1897) que, desde 1901 pasó a ser un periódico anarquista combatiente y se publicó hasta fines de 1903. A comienzo mienzoss de 1904, 1904, poco después que deja ra de ap ar ec er  E l S ol, ol ,  Ghiraldo fundó un nuevo periódico  M a r tín tí n Fier Fi erro ro..  La elección del nombre no fue cas casua uall y qu ería in dica r con con él la la ten den cia a expresa r un a pe go más profundo hacia la realidad y la tradición popular argentina.1 argentina. 113 Las pág ina s del p eriódico sirvieron de t rib u n a a esc ritores, poetas y dramaturgos jóvenes de la República, propensos a! anarquismo, así como a varias figuras descollantes de la literatura y la poesía latinoamericana: Rodó, Ugarte, Payró, Darío, etcétera. El lo. de septiembre de 1904, Ghiraldo asumió la dirección del diario anarquista  La  L a P ro test te sta a   e introdujo todos los días columnas literarias y poéticas. A comienzos de octubre de 1904 convirtió el semanario  M a r tín tí n Fierro Fierr o  en suplemento literario semanas de  La  L a P r o te s ta . 114 En 1904, 904, en medio de su actividad a narq uista, pu blicó un nuevo libro de de  poe  p oesí sías as,,  Mús  M úsic ica a P r o h ib id a ,   donde dio expresión franca a sus enfoques ideológicos. También empezó su labor de dramaturgo, al ofrecer la pieza teatral “Alas”, donde sobresalen los motivos sociales li be  b e r t a r io s .11 .115 La conjugación de la concepción de mundo y las acciones anarquisas quisas de A. A. G hiraldo p or u n lado, y la creación literaria y dram ática  po  p o r el otro ot ro,, era er a el fru fr u to d e u n enfo en foqu quee p rin ri n cipista i pista básico respecto al pa pel  pe l y a la . po  po sici si ció ó n del de l a r tis ti s t a e n la so c ie d a d . A . G h ir a l d o lo expr ex pres esó ó  E l ya en los albores de su trayectoria anarquista, en un artículo en  El Sol,  el 24 de abril de 1901, titulado “Teatro de Ideas”. En algunos  pá  p á r r a f o s exp ex p uso us o su c re d o : “¿El d r a m a p o r el d r a m a ? ” ¡No! El drama  po  p o r la vida! Es d e c ir , El d r a m a p o r la ide id e a. Lo d e m á s e r a sólo só lo asu as u n to de feria, espectáculo de circo, negocio, nada más que negocio, a lo sumo goce infecundo, placer de solitarios. Hay que hacerse hombre  p a r a s a b e r h a b l a r a los h o m b re s . Y n o m a n e j a n d o títe tí te re s c o n m ay o r  113 H . A. Cordero.  A lb e r to G h ira ir a ld o ,   pp. 8688.  L a P rote ro testa sta , 4 . 10 1904, te sta a   inser114  La 1904, "M artín Fierro" A pa rtir del 2 9 .9. 1904,  L a P ro test tó una secc secció ión n perm ane nte de crítica crítica teatral, teatral, "T eatros". A pa rtir del 3 .1. 1905 se insertó una columna de poesía popular. “Romancero Anarquista”, y se publicó diariamente hasta fines de enero de 1905. Luego se insertaba de tanto en tanto. ot esta ta,, 8 . 5. 1904, “Veladas”  I b í d .  11.5 115  L a Pr otes 11. 5. 1904 1904 "T ea tro ”. T am bién se puede ver. ver. H . A. Cordero, op. cit.,   p. 140.

o menor habilidad escenográfica... como se llevará a cabo una obra du rad era . Hay que echarse en la v id a ... ... sin sin ad u lar a m inorías privilegiadas o mayorías si sin criterio, pa ra pod er realizar ob ra de verdadero arte... ”. En cuanto a la conexión del artista con los problemas de la sociedad, dijo: “Qué han de hacer llorar dolores convencionales y añejos, cuando a la vista, tan cerca de nuestros ojos, tenemos tanto dolor fresco, que simboliza pena social, floreciendo en flores rojas y floríficas... ” . Ghiraldo no se conforma con el llamado a estar alerta ante las privaciones vaciones sociale sociales, s, sino sino qu e exh orta a los artista s a que se se acerq uen al anarquismo y reconozcan su valor: “Advertid que tenéis frente a vosotro sotros, s, p ara estu diar de cerca, ejemplares de de héroes como K ropotkin, cuya cuya odisea odisea a través través de E uro pa, pro pag and o el principio de un idea! idea! gigante encierra más poesía que todas las luchas empeñadas por zares y emperadores... Escribid, en dramáticos diálogos, la epopeya de la idea nueva... Creedme: recién entonces habréis realizado el ideal del arte”. Ghiraldono se limitó a formular un llamado a los autores  jóv  jó v en es, es , sino sin o q u e se e sm eró er ó p o r a t r a e r lo s al a n a r q u is m o . P o r ser se r u n a figura destacada en la bohemia porteña —y por dirigir revistas liter ar ias — m an ten ía num erosos contactos con escritor escritores, es, poetas y dra m atur go s jóvenes. jóvenes. En eso esoss vínculos vínculos no se ab sten ía de ob ra r a favor de su acercamiento al anarquismo. Ghiraldo no era el único, por ciert cierto; o; otros otros artistas ana rquistas tam bié n lo ha cía n, pero pero él él sobresal sobresalía ía como el alma viva de la acción. Florencio Florencio Sánchez, uno de los los dram aturg os m ás notables de prin ci pios  pio s d e siglo, sig lo, p e r te n e c ía a u n g r u p o d e a n a r q u i s ta s activ ac tivos os.. N a ció ci ó e n Montevideo y allí inició su labor anarquista, pero debió exiliarse de su p atr ia y la mayor parte de su tarea tarea la cumplió cumplió en Argentina, d onde compuso piezas teatrales que le confirieron un lugar prominente en la dra m atu rgia argentina. Primero ll llegó egó a Rosario donde trabajó co mo periodista periodista en  La  L a R e p ú b li c a ,   a la vez que proseguía su labor anarquista y le dio expresión en sus colaboraciones para la prensa local. En Rosario, en 1902, escribió su pieza “Gente Honesta”, un sainete de costumbres rosarinas. Pero cuando quiso ponerla en escena, la  po  p o licí li cíaa loca lo call lo im p id ió , p u e s c o n o c ía las idea id eass r a d ic a le s d e su a u t o r . Florencio Florencio Sánchez, no se am ilanó y poco después trat ó de rep rese nta r una nueva pieza, “Canillita”, un sainete, apodo de un vendedor de diarios en Rosario, esta vez sin intervención policial. El público aco-

gió gió la pie pieza za con entusiasmo, pero la pren sa lu ga reñ a la ob jetó p or sus sus ideas radicales. En 1903 Florencio Sánchez pasó a Buenos Aires, y siguió su labor de periodista y dramaturgo. La primera pieza que escribió en esta ciud ad fue fue “M ’hijo el do tor", cuyo cuyo éxito éxito fue im pres iona nte, lo qu e le valió al autor la consagración en el teatro rioplatense. En los años siguientes creó otras obras de éxito. éxito. “C édulas de San Ju a n ” (1903), “ La  po  p o b re g e n te ” (190 (1 904) 4),, “ B a r r a n c a a b a j o ” (19 (1 9 04 ), “M a n o S a n t a ” (1905), “En Familia” (1905), “Los Muertos” (1905). En esos años consolidó su posición de dramaturgo venerado en Buenos Aires, creando un nuevo estilo donde el elemento más destacado era el apego por los problemas sociales. Florencio Sánchez, como A. Ghiraldo, conjugó sus ideas anarquistas con las creaciones artísticas; su mayor aporte fueron los vaticinios y mensajes contenidos en su obra, así como su popularidad en la Argentina de aquella época. 116 A ese grupo de anarquistas activos —que desempeñó un papel tan notable en la la vida espiri espiritua tuall de la la A rgentina rgentina — puede añad irse ta m  bién  bi én a Félix Fél ix B a s te rr a , p e rio ri o d ista is ta y d i r e c t o r d e v aria ar iass p u b lic li c a c io n e s anarquistas literarias (El cuento del tío, Nuevos rumbos).   En 1903 editó su libro  E l crep cr ep ú scu sc u lo de los g a u c h o s ,  que desemboz desembozó ó la im agen de la sociedad argentina a comienzos del siglo XX y censuró el aprove cham iento soci social al y la cam pañ a de opresión contra los elem en tos radicales. radicales. El libro libro se se pub licó a raíz de las las dep ortacio nes cau sad as  po  p o r la Ley d e R es ide id e n c ia y vio la luz e n M o n tev te v ideo id eo . La valorización del libro en los círculos literarios argentinos se refleja en un artículo del escritor judeoargentino Alberto Gerchu Id eas, s,  de octubre de 1903 noff, en la revista literaria  Idea 1903.. G erchu noff cr itica en ese comentario a la prensa local que ignoró el libro, pese a su valor valor liter literario, ario, po rque el autor es es an arq uis ta y po rqu e critica al rég imen. Afirma, “... es una obra saludable, hecha con talento y sinceridad... el libro es un trabajo digno de aplauso, ya por su franqueza y  po  p o r su c o n t e n i d o ... .. . L ibro ib ross d e esta es ta clas cl asee h a c e n f a l t a a la A r g e n t in a  p a r a a d q u ir i r el s e n tid ti d o d e la s in ies ie s tra tr a r e a l id a d q u e nos no s a b r u m a . .1 "17 116 D .A. de Santillán, Movimiento anarquista, op cit.,   pp. 124127 Gran Enciclopedia R.F. Giusti, Florencio Sánchez, su vida y su obra,  A r g e n tin ti n a ,   “Florentino Sánchez". R.F. Buenos Aires. 19020. p. 80. 117  La 10. 1903, 1903, “Juicios “Juicios sobre el libro libro de B aste rra".  L a P rote ro testa sta H u m a n a ,   2 4 . 10.

En 1904 Basterra publicó un nuevo libro,  Le  L e y e n d a s de H u m i l d a d , que también manifestó valor literario. 118 B aster as terra ra escri es cribió bió ad em ás artículos sobre los intelectuales de la Argentina y su apego a las luchas obreras y a los problemas sociales. 119 En tre otr otros os intelectuales intelectuales anarq uista s q ue sobresal sobresalier ieron on en la lite ra tura, tura, en la poesía poesía y en el arte, m enciona rem os a José José de M atur an a,  poet  po etaa y a u to r d r a m á t ic o q u e c u m p lió li ó fun fu n cio ci o n es e n la r e d a c c i ó n d e La Protesta,   donde publicó abundantes notas y poesías sobre temas artísticos y políticos. En esos años publicó Cromos,  una colección de sonetos (1901) y Poemas de Color   (1903). A él se deben muchas  piezas  piez as te a tra tr a le s y o b ra s brev br eves es s o b r e te m a s v a ria ri a d o s . S. Locascio —que descolló en esa época en los círculos anarco comunistas comunistas y en sus sus perió dic os — es el au tor de varias creaciones lite rarias:  Rasg  Ra sgos os soci so cial ales es  (1899),  Lo  L o s M á r tir ti r e s de C hica hi cago go   (1904), Gius seppe Giancabilla   (1905). Recordemos también a Más y Pi, cuyas obras se insertaron en todas las compilaciones literarias anarquistas: Otras figuras figuras fuero n J. M olina y V edia y Alfonso Alfonso Grijalvo, Grijalvo, qu e escri bió e n 1904 u n a piez pi ezaa t e a t r a l d o m i n a d a “El c o ra z ó n R e b e l d e ” . Un examen de la prensa anarquista permitiría encontrar otros nom bres, en tre ellos ellos los de escritores y poetas qu e se se ac erc aro n po r un espacio de tiempo al movimiento e nto y luego se alejaron de él, así como algunos algunos que se se m antuv ieron ligados ligados constantem ente Sea como como fuere fuere,, todos todos los mencionado s h asta a ho ra y muchos otros menos p ro minentes en el terreno de las artes (poesía, pintura, representaciones, etcétera) mantuvieron lazos estrechos con los círculos anarquistas y sus periódicos hasta 1905, año en que finaliza nuestra investigación.

 o p. cit. p . 130 118 D . A. de Santillán,  op. 130. So l, 8 . 6. 1901, Más "Varas 119  E l Sol,

Literatura”.

Disciplinarias"

 Ib  I b id , 1 . 12. 1901, "Triste