El Chile de la República conservadora (1830-1860) El Crecimiento económico en el peso de la noche.
“La formación de un Estado chileno relativamente fuerte de manera relativamente rápida” (Bértola y Gerchunoff).
Las Instituciones son todas las formas para interactuar entre seres humanos, son construcciones sociales. Estas reproducen las relaciones de poder que les dieron origen. Pero, ¿son tan relevantes para el desarrollo y crecimiento económico de un lugar?, lugar?, ¿lo han sido sido para para el desarr desarroll ollo o económ económico ico chilen chileno?. o?. Las siguie siguiente ntess líneas líneas pretenden llevar a colación la hipótesis que dice relación con que mientras mayor orden, estabilidad, permanencia y centralismo de las instituciones estatales en un país, país, se esper espera a y se consig consigue ue un mayor mayor crec crecimie imiento nto económ económico ico.. Nos fijaremos fijaremos
principalm principalmente ente en el período período que se conoce conoce como República República conservado conservadora, ra, que abarca entre los años 1831 y 1861. Desde 1830 a 1860 1860 se llevó a cabo en Chile un crecimiento económico sin precedentes, tanto Pinto como Encina sostienen que entre 1830 y 1860 el país alcanza un ritmo de crecimiento “que no tiene precedentes ni ha tenido continuación en nuestra historia”. Una Constitución Política (1833) que no sufrió grandes cambios, una Guerra contra Perú y Bolivia Bolivia (1837-1839 (1837-1839)) cuyo triunfo chileno permitió permitió el nacimiento de una cierta cierta identi identidad dad de país, país, dos guerras guerras civile civiless (1851, (1851,185 1859), 9), entre entre grupo gruposs de poder, poder, y distintas medidas adoptadas para ir modernizando el aparato Estatal, entre los ajustes de la institucio institucionalida nalidad d Estatal Estatal encontramo encontramoss la ley sobre moneda, moneda, sobre sobre pesos y medidas medidas (1842) (1842),, ley sobre sobre camino caminos, s, canales canales,, puente puentess y calzada calzadass (1842) (1842),, oficin oficinaa General General de Estadística (1842), ley de sociedades anónimas (1854), código civil (1855), códigos penal penal y de minerí mineríaa (1875) (1875),, ley de bancos bancos (1860), (1860), entre otros. otros. De esta esta manera manera Chile Chile había logrado sufrir de manera más leve la destrucción y desorganización que generaron los prolongados prolongados conflictos conflictos bélicos bélicos externos externos e internos internos en toda América América Latina, Latina, nos demoramos aproximadamente ocho años en saldar la Independencia con España, la anarquía política se resolvió en siete años la Guerra contra la confederación PerúBoliviana duró tres años y Chile salió vencedor, en este sentido estuvo mejor preparado para para enfren enfrentar tar las dificu dificulta ltades des en establ establecer ecer un orden orden políti político co e institu institucio cional nal que favoreciera las inversiones y el crecimiento económico.
Cariola y Sunkel nos dicen del período y su investigación que “este es un momento vital para la comprensión de todo el proceso que sigue, y un periodo apasionante para la investigación, sobre todo, porque no se ha analizado profundamente la interacción de 1os diversos factores indicados. Ello llenaría una laguna en la interpretación de nuestro desarrollo, por cuanto el Estado ha jugado un papel central en la economía chilena, de importancia probablemente similar a la del factor externo”1. Al comenzar la Independencia, Chile era distinto a los demás países latinoamericanos –nos dice Bértola-, “si bien la década del diez está marcada por guerras y agudos conflictos en su territorio, la conquista definitiva de su independencia tras la campaña liderada por San Martín en 1817, le permite alcanzar rápidamente cierta estabilidad y recomenzar un proceso de crecimiento económico temprano, que contrasta fuertemente con los… de la zona andina. El chileno es quizás el único caso de Latinoamérica en esta etapa, en que una economía centrada en la minería conoce una expansión importante, y probablemente la explicación resida centralmente en el azar del descubrimiento de nuevas minas muy productivas en el Norte, aunque la rápida
consolidación del orden político y el control territorial deben haber jugado un papel no menor en ello ”2. Las políticas económicas llevadas a cabo en el proceso de creación del Estado chileno merecen una atención especial, la libertad de comercio instaurada en 1811, mostraron “la urgencia de abrir el país al intercambio mundial” 3. Pero es con el inicio de la república conservadora cuando se comprende la necesidad de establecer una política económica clara. De esta forma las medidas adoptadas por el Ministro de José Joaquín Prieto (1831-1841) Manuel Rengifo 4 y Tocornal nos permite dar ciertas respuestas a nuestras preguntas, el Estado ayudó de un marco legal e institucional al crecimiento
económico de los agentes privados . De esta manera, el Estado desde 1830 desempeñará un papel fundamental para el crecimiento económico de los agentes privados y del país 1
Cariola, Carmen y Sunkel, Osvaldo, La historia económica de Chile entre 1830 y 1930, dos ensayos y una bibliografía. Ediciones Cultura Hispánica del Instituto de Cooperación Ibereamericana, Madrid, España, 1982, p. 26. 2 Bértola, Luis y Gerchunoff, Pablo, Institucionalidad y desarrollo económico en América Latina, CEPAL, Naciones Unidas, 2011, p. 25. 3 Pinto, Anibal, Chile, un caso de desarrollo frustrado, Editorial Universitaria, Santiago de Chile, 1959, p. 21. 4 “Dada la acelerada expansión de la producción, las exportaciones, las importaciones y el comercio que se inicia en 1832, no es de extrañar que el ordenamiento tributario, la simplificación de trámites aduaneros, la organizaci6n y disciplina administrativa y demás medidas tomadas por Rengifo y Tocornal, dieran por resultado un fuerte aumento de las entradas fiscales. Con ello se regularizó el pago de los comprornisos del Fisco, incluyendo la amortizaci6n de deudas heredadas de los periodos anteriores y la obtención de excedentes importantes”. Ibídem, p. 26.
en algún sentido. Pero, ¿a qué se debió el éxito de las políticas adoptadas por el Ministro Portales y el Ministro Rengifo?, podríamos aventurar como respuesta a la unión entre un régimen fuerte y centralizador, junto a políticas económicas de organización de deudas, instauración de aduanas, entre otras, unión idílica para un crecimiento económico, medidas político económicas claras con un orden social fuerte conocido como el peso de la noche. Rengifo “crea un sistema de protección y estimulo que transformó a1 país en la primera potencia marítima del Pacifico y que llevo la bandera nacional a todos los mares” 5, de esta forma “Chile, se figura como la mayor excepción de la región andina y se convierte rápidamente en la potencia del Pacífico” 6. De esta forma “una clave de la reorganización política de 1831 fue el ordenamiento de las cuentas públicas y la definición de una fuente de financiamiento regular: el sector externo. Hasta 1880, los ingresos por concepto de importaciones representaron, en promedio, casi el 60 por ciento del ingreso fiscal total” 7. La tarea primordial que estaba planteada a la comunidad nacional en el momento de independizarse no era otra que la de “crear un Estado; una institucionalidad apropiada; formas políticas y jurídicas que reflejaran o correspondieran a1 substrato económico social existente y que permitieran desenvolverse a1 país dentro de cauces ajustados a las precondiciones”8, lo que hizo Portales -según Aníbal Pinto- fue fijar “un molde o armazón ajustado a los intereses de la clase dominante, la de 1os terratenientes y sus allegados urbanos” 9. Chile en este sentido logró resolver un problema mucho más rápido que el resto de las naciones latinoamericanas, de esta forma “la solución política portaliana fue ventajosa para el desarrollo económico del país” 10. De esta forma el “periodo que media entre 1830, cuando se consolida el armazón político, y el fin del decenio de Manuel Montt, constituye un lapso “que no tiene precedentes ni ha tenido continuación en nuestra historia. Los chilenos no dejaron pasar de largo las incitaciones suscitadas por nuevos mercados, compradores y abastecedores. Las acogieron con una energía y una imaginación tan poderosas que a corto plazo colocaron al país a la cabeza del complejo latinoamericano y en un nivel que en 5
Pinto, Anibal, Chile, un caso de desarrollo frustrado, Editorial Universitaria, Santiago de Chile, 1959, p. 21, 6 Bértola, Luis y Gerchunoff, Pablo, Institucionalidad y desarrollo económico en América Latina, CEPAL, Naciones Unidas, 2011, P. 36. 7 Ibídem, p. 243. 8 Pinto, Anibal, Chile, un caso de desarrollo frustrado, Editorial Universitaria, Santiago de Chile, 1959, p. 20. 9 Ibídem., p. 20. 10 Ibídem., p. 20.
términos relativos nada tenía que envidiar a1 de los emergentes como EE.UU o al de muchas naciones europeas del norte y del centro del viejo continente” 11. De esta manera, “el crecimiento económico del país y su respaldo, la estabilidad política, cimentaron sólidamente el prestigio de Chile en el extranjero” 12. Tal como nos da a conocer Andre Gunder Frank, “sacando partido de su independencia Chile trato de romper el monopolio que, gracias en parte al control de la navegación, había ejercido Lima por tanto tiempo sobre la economía chilena. Las medidas orientadas a estimular la expansión de una marina mercante nacional después de 1835 deberían interpretarse en este contexto”13, y luego agrega, “durante los años 1841-1861 bajo los gobiernos de Bulnes y Montt… se producen diversos sucesos que vigorizan la economía. Desde 1845, más o menos, comienza a explotarse formalmente el carbón… Posteriormente la economía recibe un nuevo impulso a raíz del descubrimiento de los terrenos auríferos de california”14, de esta forma la notable expansión del sistema de producción chileno se explica por “factores humanos e institucionales que en definitiva fueron sus antecedentes y causales decisivos” 15, sin ellos no podemos entender este crecimiento económico, entre ellos una “falange admirable de pioneros”16, los Ossa o los Urmeneta, entre otros, el “otro elemento, de orden, seguramente, mas fundamental, proviene de las condiciones institucionales del periodo”17, distintos historiadores de todas las tendencias han visto el período conservador como oscuro y regresivo, cuyo símbolo negativo habría sido Diego Portales. Sin embargo, al llevar a cabo un análisis mucho más profundo del período nos podemos percatar que ese período oscuro que llamaron una simple copia de la colonia se desvanece, considerando las medidas político-económicas del régimen, lo que permitió un leve crecimiento económico del país, sin embargo, dejamos claro que no de desarrollo igualitario para el resto, algo que ni siquiera fue percibido por nuestra élite comercial. Pero, lo claro es que entre 1830 y 1879 (hasta el comienzo de la Guerra del Pacífico que enfrentaría a Chile contra Perú y Bolivia) Chile vive una expansión clara en todos los sentidos, tal cual nos da a conocer Cariola y Sunkel, crecimos en población, 11
Ibídem., p.16. Ibídem., p. 16. 13 Gunder Frank, Andre, Capitalismo y subdesarrollo en América Latina, Centro de Estudios Miguel Henríquez, Chile, 1965 (2005), p. 54. 14 Ibídem., p. 48. 15 Pinto, Anibal, Chile, un caso de desarrollo frustrado, Op. cit., p. 16. 16 Ibídem. 17 Ibídem. 12
extensión geográfica, ciudades como Valparaíso, Concepción y Santiago crecen en número y nacen muchas otras, transportes y comunicaciones se expanden por todo nuestro territorio, unido a estos se llevó a cabo un “proceso rápido y eficaz de reorganización, consolidación y arraigo de las instituciones estatales, tanto en la administración civil en sus ramas ejecutiva, legislativa y judicial, como en las fuerzas armadas y la policía”18. ¿Fue la política estatal la que permitió esta expansión?, ¿o simplemente actuó como una ayuda allí donde los privados no podía llevar a cabo la tarea completa?.
Una de las características fundamentales de esta “etapa fue la
organización de un Estado de hecho y de derecho de notable estabilidad, eficacia y permanencia”19. En otro apartado, Bértola y Gerchunoff dan a conocer nuevamente las claves del éxito económico chileno de este período, “el descubrimiento de ricas minas de plata y cobre en el norte y la construcción temprana de un régimen político estable que favorece las inversiones. El crecimiento minero ya es notable hasta los años 30 y desde allí es espectacular gracias a nuevos descubrimientos que corren la frontera y favorecen el desarrollo de una minería extensiva muy productiva. Entre los 30‘y los 50‘ la producción de cobre se duplica y junto a la de plata, que crece casi un 50%, permiten crecientes exportaciones y un crecimiento también rápido de las importaciones. Ellas serán la base de las sólidas finanzas chilenas.” 20 Las ideas que provenían de Europa favorecían “la intervención del Estado con el fin de fortalecer, proteger y desarrollar la economía nacional y de mejorar la condición social de los sectores populares” 21, sin embargo será a las primeras ideas a las que se le tomaran mayor atención, lo segundo tendrá que esperar un buen tiempo para cimentarse nuestra historia. Según el profesor Jobet para el período estudiado, “toda esta riqueza se vuelca en la realización de grandes obras publicas: se abren caminos, se construyen ferrocarriles, barcos a vapor recorren las extensas Costas del Pacifico, el telégrafo abrevia las comunicaciones. Y la minería continúa siempre en aumento. E1 progreso económico y técnico transforma las condiciones de vida. El auge de la minería... el desarrollo de las vías férreas, el aumento del comercio produjeron, el enriquecimiento 18
Cariola, Carmen y Sunkel, Osvaldo, La historia económica de Chile entre 1830 y 1930, dos ensayos y una bibliografía. Op. cit., p. 13. 19 Ibídem, p. 21. 20 Bértola, Luis y Gerchunoff, Pablo, Institucionalidad y desarrollo económico en América Latina, CEPAL, Naciones Unidas, 2011, P. 37-38. 21 Ibídem, p. 19.
de numerosas familias que pasaron a constituir una nueva clase social, vigorosa y pujante, distinta de la aristocracia terrateniente”22. Entre las características de la modernización estatal encontramos, “el establecimiento, en 1844, de la Oficina de Estadística y la realización de censos de población”23. Las características de la política económica del Régimen conservador fueron según Cariola y Sunkel “nacionalistas y mercantilistas 24”, “desde el punto de vista político, la organización de un Estado centralizado, autoritario, jerárquico, poderoso y despersonalizado, justamente aquel que concibió y estableció Portales, y que fue plasmado en la Constitución de 1833”25. Pero “el episodio sobresaliente de la política económica de los decenios reside en el titánico esfuerzo de Montt por construir un sistema nacional de comunicaciones ferroviarias, “la riqueza privada formada en el Norte Chico se expreso en obras importantes relacionadas con la minería, como las fundiciones de cobre de Tongoy y Guayacan, en buena medida obras de Urmeneta, y, más tarde, en la construcción del primer ferrocarril chileno, el de Caldera a Copiapó (185l), financiado en parte por las familias antes mencionadas. Pero, este mismo grupo llevo también sus capitales al centro del país. En 1852 aportaron parte del capital necesario para la iniciación de la construcción del ferrocarril de Santiago a Valparaíso. Este fue iniciado por Wheelwright y terminado en 1863 por Meiggs, gracias a la posterior intervención y apoyo del Estado”26. El Estado ayudó allí donde los privados no se aventuraron ni se arriesgaron de manera potente, “contra viento y marea” Manuel Montt (1851-1861) impulso la vía entre Santiago y Valparaíso y el tramo Santiago a Talca. Su propósito central era dar salida a1 mar a la zona agrícola más rica de Chile. Y, que en ese entonces hallaba grandes dificultades para responder adecuadamente a la demanda exterior, que parecía insaciable. La audacia y visión de Montt para emplear los recursos y capacidad administrativa
del
Estado en el desarrollo ferroviario
se puede
apreciarse
justicieramente teniendo en cuenta el “hondo prejuicio que existía contra la intervención estatal y que llevó, como inevitable alternativa, a que casi en todos los países 22
Pinto, Anibal, Chile, un caso de desarrollo frustrado, Op. cit., p. 19. Ibídem, p. 19. 24 “Cabía al Estado la responsabilidad fundamental de estimular y proteger las actividades productivas nacionales y particularmente la manufactura y la marina mercante”. Ibídem, p. 28. 25 Ibídem, p.28. 26 Cariola, Carmen y Sunkel, Osvaldo, La historia económica de Chile entre 1830 y 1930, dos ensayos y una bibliografía. Op. cit., p. 30. 23
latinoamericanos fueran inversionistas extranjeros los que tomaron a su cargo la tarea”27. Va a ser de esta manera que “durante la administración del Presidente Montt se inicia otro período de desarrollo institucional de gran importancia” 28. Unido a esto, este período iba a terminar con la primera gran crisis económica que vivirá el país entrando al sistema económico mundial entre los años 1857 y 1861, la deberá enfrentar el Presidente Manuel Montt (1851-1861), quien intervendrá “con una política expansiva, utilizando parte de los recursos que aun no habían sido utilizados de un empréstito ingles, destinado a la construcción de ferrocarriles, y aprovechando lo acumulado en ejercicios anteriores. Esta fue, probablemente, una de las primeras operaciones de política anticíclica en nuestro país”29. De esta manera, “la marcha ascendente de la economía chilena, apoyada decididamente por la acción del Estado, se reanudó con todo vigor después de la crisis de 1857-61” 30. El apoyo Estatal se fijó en distintos elementos de la economía chilena, “durante el mismo periodo, y como consecuencia del crecimiento de las actividades de la minería, la navegación, los ferrocarriles, las exportaciones de trigo, del auge de la construcción pública y privada, y del proceso de urbanización, se continuaron instalando y desarrollando diversas actividades manufactureras, muchas de ellas impulsadas por medidas de fomento y protección del Estado” 31. Existe una concepción consensuada en la actualidad de mirar con una visión negativa el período pos-independentista, “esa etapa se habría caracterizado más bien por el estancamiento, cuando no por el retroceso en términos absolutos, y sería en este período en que parece haberse producido la principal brecha en el atraso relativo de América Latina en relación a los países más adelantados del planeta” 32. Sin embargo, el análisis del período nos da a conocer una situación mucho más matizada, “el molde, pues, de la expansión y del desenvolvimiento económico proyectó definidamente nuestro sistema productivo “hacia afuera”, asentándolo más que nada sobre las expectativas de las exportaciones primarias de la minería y la agricultura”33. Aníbal Pinto nos da a conocer que “un concierto de factores humanos, materiales e 27
Pinto, Anibal, Chile, un caso de desarrollo frustrado, Op. cit., p. 22. Ibídem, p. 37. 29 Bértola, Luis y Gerchunoff, Pablo, Institucionalidad y desarrollo económico en América Latina, Op.cit., p. 33-34. 30 Ibídem, p. 35. 31 Ibídem, p. 36. 32 Bértola, Luis y Gerchunoff, Pablo, Institucionalidad y desarrollo económico en América Latina, Op. cit., p. 20. 33 Pinto, Anibal, Chile, un caso de desarrollo frustrado, Op. cit., p. 24. 28
institucionales lo arranco de su modorra colonial y lo situó en la corriente del comercio mundial y en un nivel excepcional para el estándar latinoamericano” 34. Pero, ¿cuál será la diferencia de esta experiencia minera exitosa comparándola con las anteriores y posteriores?. Es posible, como lo resalta cierta literatura, que la temprana hegemonía de un grupo de elite y la consolidación de un proyecto político centralista que logra imponer el orden y reglas claras a la mayor parte del nuevo país, formen parte de esa explicación. En efecto, Chile logra especialmente desde 1830 un orden político que pocas naciones americanas lograron hasta bastante más tarde. Ello mismo, y su ubicación estratégica en las rutas del Pacífico, favorecieron la instalación temprana de numerosos comerciantes británicos, que convirtieron a Valparaíso en el primer puerto del Pacífico sudamericano, por delante del Callao, que perdió rápidamente la supremacía. Sin negar la importancia de esos u otros factores, nos parece que la explicación más sencilla y poderosa reside en el descubrimiento de nuevos centros mineros, algunos de una riqueza sin par en el norte del país, que van a permitirle dar un salto productivo enorme desde los años 30. Entre ellas las más importantes fueron Aguas Amargas (1811), Arqueros (1825), Chañarcillo (1832), Las Animas (1833) y Tres Puntas (1848) que llevaron la producción de estos metales adelante y la frontera minera hacia el norte. Además, es importante señalar que el peso creciente de la plata y luego del cobre en reemplazo del oro tiene un efecto fundamental en la promoción de cambios más generales en la economía y sociedad chilena, dado los efectos multiplicadores de esa producción, especialmente del cobre, que requería cuantiosas inversiones, medios técnicos y movilizaba una gran cantidad de factores de producción, favoreciendo también la constitución temprana de una clase obrera numerosa. Sea como sea, es claro que el caso de la minería chilena es excepcional, en un cuadro de decadencia generalizada de las minerías de oro y plata de las ex colonias americanas. Y junto a la crisis de estos sectores, decae un conjunto muy amplio de regiones agrarias o manufactureras, cuya producción mercantil estaba orientada centralmente a abastecer esos grandes mercados mineros.” 35. Es posible que Chile haya tenido un relativamente rápido crecimiento a lo largo de las primeras décadas de la independencia… “Una tasa del 1,8% anual en promedio entre 1830 y 1873 parece algo alta en perspectiva comparada para esa época. Pero 34
Ibídem., p. 24. Bértola, Luis y Gerchunoff, Pablo, Institucionalidad y desarrollo económico en América Latina, CEPAL, Naciones Unidas, 2011, P. 28. 35
admitamos que Chile pudo haber crecido a un ritmo alto… Las exportaciones chilenas crecieron a un ritmo del 4,7% anual y del 3,7% anual per cápita entre 1830 y 1873, lo que llevaría a pensar que el crecimiento de su producción doméstica fue un poco menor al 1,5% anual. El auge exportador chileno estuvo vinculado a la producción minera de cobre y plata, pero también a las exportaciones de trigo. La fiebre del oro californiano y en Australia generó una demanda importante de alimentos que la producción doméstica de esos países no pudo enfrentar. Sin embargo, al poco tiempo de estar en marcha el auge exportador del trigo chileno, las economías domésticas de aquellos países pudieron dar creciente respuesta a sus demandas. Inglaterra apareció como un mercado alternativo, accesible en momentos de altos precios del trigo y caída de los costos del transporte. Esta fue de las primeras veces en que se pudieron amasar fortunas en la producción agraria chilena. A principios de la década de 1870, las exportaciones agrarias chilenas, que en 1846-50 habían respondido por el 17% del total, treparon al 40%. De acuerdo a Braun (2000) el coeficiente de exportaciones de Chile se duplicó entre 1840 e inicios de los 1870” 36. De esta forma, “los resultados en términos de la distribución del ingreso de este crecimiento chileno fueron importantes”37, tal cuál nos dice Bértola y Gerchunofff, Chile fue uno de los pocos en América Latina, “que logró un crecimiento destacado y una conformación político-institucional más estable. Durante estas décadas sacó ventajas frente a sus vecinos, que lo colocaron en una posición de poder que habría de notarse con claridad en la Guerra del Pacífico”38.
Bibliografía
36
Ibídem, p. 242. Ibídem. 38 Ibídem, p. 244. 37
Bauer, Arnold, Expansión económica en una sociedad tradicional: Chile central en el
siglo XIX, Ediciones Historia.
Bértola Luis y Ocampo, José Antonio, Desarrollo, vaivenes y desigualdad. Una
historia económica de América Latina desde la independencia,
Secretaria General
Iberoamericana
Bértola, Luis y Gerchunoff, Pablo, Institucionalidad y desarrollo económico en
América Cariola, Carmen y Sunkel, Osvaldo, La historia económica de Chile entre 1830 y 1930, dos ensayos y una bibliografía. Ediciones Cultura Hispánica del Instituto de Cooperación Ibereamericana, Madrid, España, 1982. Del Mar, María; Yañez, Cesar; Jofré, José; Carreras, Albert El consumo aparente de carbón mineral en América Latina, 1841-2000. Una historia de progreso y frustración, 2010. Gunder Frank, Andre, Capitalismo y subdesarrollo en América Latina, Centro de Estudios Miguel Henríquez, Chile, 1965 (2005).
Herranz Loncán, Alfonso, El impacto directo del ferrocarril sobre el crecimiento
económico Argentino durante la primera globalización , Universidad de Barcelona., Herranz Loncán, Alfonso, The contribution of railways to economic growth in latin america before 1914:the cases of mexico, brazil and argentina. Asociación española de historia económica, Julio 2009. Latina, CEPAL, Naciones Unidas, 2011. Klaus Schmidt-Hebbel, El Crecimiento económico de Chile , Banco Central de Chile, Documentos de trabajo, Nº 365, Junio 2006,. Pinto, Anibal, Chile, un caso de desarrollo frustrado, Editorial Universitaria, Santiago de Chile, 1959.
