EL ARTE DE LA CONTEMPLACIÓN
La Aventura Aventura de Vivir con Lucidez
Consuelo Martín
PREFACIO
EL ORIGEN DE ESTE LIBRO es la práctica de la contemplación, si es posible hablar de practicar algo tan impersonal creati!o como el contemplar" Se ha reali#ado desde el silencio contemplati!o $%e se e&presó en las in!estigaciones a$%' recopiladas" (or ello no debe e&tra)arnos el modo, ni sistemático ni anal'tico, de s% presentación" El intelecto tiene, sin d%da, s% *%nción en la comprensión de la !erdad $%e cond%ce al silencio, pero c%ando irr%mpe la inspiración directa desde la Inteligencia Inteligencia impersonal, ha de de+arse espacio abierto a %na n%e!a manera de e&presión $%e permita e!ocar $%ello $%e trasciende las limitaciones lógicas" Estar'a bien $%e s%pi-ramos, a%n antes de comen#ar la lect%ra de estas páginas, $%e s% contenido no trata de %n acercamiento a la Realidad trascendente desde la ra#ón, pero tampoco mediante el sentir, tal como se propone en la !'a m'stico.de!ocional, sino $%e es %n acceso inteligente $%e, al atra!esar el intelecto personal, lo desborda" /onsta /onstatar taremo emos, s, $%i#á, $%i#á, $%e $%e es posibl posible e hablar hablar escri escribir bir acerc acerca a de lo ine&p ine&plica licable ble e impens impensabl able, e, tarea tarea algo algo e&tra) e&tra)a a habit% habit%alm alment ente, e, pero pero bella bella go#osa go#osa"" /on*'o /on*'o en $%e $%e tambi-n será %na alegr'a para el lector con !ocación contemplati!a el acercarse al silencio creador desde estas insin%aciones" Do gracias a la Inteligencia sagrada por emp%+ar a mi persona a lle!ar a cabo esta labor d%rante toda mi !ida, agrade#co personalmente a los *amiliares amigos el apoo $%e me han dado en este hacer" En partic%lar, do gracias ahora a mi amigo 0ngel Ro+as, $%e me animó incansablemente a p%blicar libros como -ste" Tambi-n las do a 1orge 2i)es, $%e con s% b%en arte de editor se es*or#ó en trans*ormar %nas in!estigaciones !i!enciales en este libro" 3 por 4ltim 4ltimo, o, pero pero no en 4ltim 4ltimo o l%ga l%garr sino sino en el prim primer ero, o, do gracia graciass a los los comp compa) a)er eros os contemplati!os $%e han estado presentes en los retiros donde nacieron in!estigaciones como -stas" 53 por $%- no ampliar las gracias al *%t%ro6 Lo har- en este momento teniendo en c%enta a los lectores a los $%e este libro anime e inspire en el arte de hacer la mente contemplati!a, por$%e con s% actit%d darán %n sentido l%minoso a esta *orma de e&presión escrita" /ONS7ELO 8RT9N El Escorial :8adrid; +%nio de <==>
PREFACIO
EL ORIGEN DE ESTE LIBRO es la práctica de la contemplación, si es posible hablar de practicar algo tan impersonal creati!o como el contemplar" Se ha reali#ado desde el silencio contemplati!o $%e se e&presó en las in!estigaciones a$%' recopiladas" (or ello no debe e&tra)arnos el modo, ni sistemático ni anal'tico, de s% presentación" El intelecto tiene, sin d%da, s% *%nción en la comprensión de la !erdad $%e cond%ce al silencio, pero c%ando irr%mpe la inspiración directa desde la Inteligencia Inteligencia impersonal, ha de de+arse espacio abierto a %na n%e!a manera de e&presión $%e permita e!ocar $%ello $%e trasciende las limitaciones lógicas" Estar'a bien $%e s%pi-ramos, a%n antes de comen#ar la lect%ra de estas páginas, $%e s% contenido no trata de %n acercamiento a la Realidad trascendente desde la ra#ón, pero tampoco mediante el sentir, tal como se propone en la !'a m'stico.de!ocional, sino $%e es %n acceso inteligente $%e, al atra!esar el intelecto personal, lo desborda" /onsta /onstatar taremo emos, s, $%i#á, $%i#á, $%e $%e es posibl posible e hablar hablar escri escribir bir acerc acerca a de lo ine&p ine&plica licable ble e impens impensabl able, e, tarea tarea algo algo e&tra) e&tra)a a habit% habit%alm alment ente, e, pero pero bella bella go#osa go#osa"" /on*'o /on*'o en $%e $%e tambi-n será %na alegr'a para el lector con !ocación contemplati!a el acercarse al silencio creador desde estas insin%aciones" Do gracias a la Inteligencia sagrada por emp%+ar a mi persona a lle!ar a cabo esta labor d%rante toda mi !ida, agrade#co personalmente a los *amiliares amigos el apoo $%e me han dado en este hacer" En partic%lar, do gracias ahora a mi amigo 0ngel Ro+as, $%e me animó incansablemente a p%blicar libros como -ste" Tambi-n las do a 1orge 2i)es, $%e con s% b%en arte de editor se es*or#ó en trans*ormar %nas in!estigaciones !i!enciales en este libro" 3 por 4ltim 4ltimo, o, pero pero no en 4ltim 4ltimo o l%ga l%garr sino sino en el prim primer ero, o, do gracia graciass a los los comp compa) a)er eros os contemplati!os $%e han estado presentes en los retiros donde nacieron in!estigaciones como -stas" 53 por $%- no ampliar las gracias al *%t%ro6 Lo har- en este momento teniendo en c%enta a los lectores a los $%e este libro anime e inspire en el arte de hacer la mente contemplati!a, por$%e con s% actit%d darán %n sentido l%minoso a esta *orma de e&presión escrita" /ONS7ELO 8RT9N El Escorial :8adrid; +%nio de <==>
Introducción LO MAS SENCILLO ES CONTEMPLAR
La contemplación no es algo separado de la vida; forma parte del vivir. En un momento atemporal de nuestra existencia, descubrimos la contemplación, y con ella descubrimos la vida auténtica y el significado profundo de la vida. No pensemos, por tanto, que la contemplación es ajena a nuestras actividades diarias. En todas las situaciones del vivir se puede contemplar. contemplar. e vive con todo, y as! todo puede ser transformado. "ontemplando descubrimos el porqué de la existencia, por qué sufrimos, por qué amamos. La unidad que se crea al contemplar des#ace todas las dudas que la separación creó, y las preguntas que nos #acemos, todas aquellas que que quedan sin aclarar desde el nivel del pensamiento, encuentran respuesta en la contemplación. $ menudo, escuc#amos que el camino contemplativo es dif!cil. %ientras dicen esto, los seres #umanos se enfrascan en grandes dificultades existenciales por no comprender... &ero contemplar no es dif!cil ni f'cil. Es sencillo, como lo es la verdad. $l contemplar se avan(a directo desde la verdad #asta la verdad. ) cualquier método o intenc intención ión estudi estudiada ada que no deje deje nuest nuestra ra mente mente en estado estado contem contempla plativ tivo o ser' ser' mero mero entretenimiento del pensar o, dic#o de otra manera, provendr' del mundo de los sue*os. Entretenerse en el campo mec'nico de lo conocido, de lo que es #abitual, parece f'cil; pero pero no #ay nada que cree m's dificult dificultade ades s que mantener mantenerse se distra distra!do !do en lo falso, falso, creyendo que es lo verdadero. "ontemplar es acceder a lo natural; por eso #a de ser sencillo, aunque a partir de nuestros #'bitos nos pare(ca complicado. i a un ni*o que sólo sabe avan(ar a gatas por el suelo se le dice que ande erguido, es normal que le pare(ca dif!cil. ólo si, con confian(a y decisión, lo intenta una y otra ve( acabar' descubriendo que estaba en su naturale(a, y ya no usar' m's las manos para asegurarse. "on ello cambiar' su visión. La mente contemplativa est' #ec#a de lucide( sin esfuer(o. "omprobémoslo contemplando. Es la +nica prueba posible. "reemos que comprendemos algo cuando lo anali(amos compar'ndolo con otras cosas. En eso se entretiene el pensamiento. &ero comprender desde la verdad es algo distinto. En la verdadera comprensión se presenta lo real directamente en una simple toma de conciencia. $ eso lo llamamos contemplar. "uan "uando do nos nos move movemo mos s dent dentro ro de la memo memori ria a del del pasa pasado do,, afir afirma mamo mos s y nega negamo mos, s, o aceptamos y rec#a(amos sin salir nunca de la influencia invisible de lo ya sabido, de lo viejo repetido una y mil veces por unos y por otros. La contemplación rompe este proceso mec' mec'ni nico co;; all! all! se vive vive en lo nuev nuevo. o. in in separ eparac ació ión n entr entre e el cont contem empl plad ador or y lo contemplado. "esan las dependencias creadas por los apegos y los rec#a(os. y se descubre lo que siempre estuvo presente el 'mbito sagrado de la unidad total. &ara contemplar #ay que atravesar el silencio. -esde el bullicio del pensar, sentir, desear, temer, no se presentar' la contemplación. &ara contemplar #ay que atravesar el silencio,
amplios 'mbitos de profundo silencio. Es entonces cuando se #ace en la mente un espacio vac!o envuelto en una gran serenidad, en una gran pa(. e des#ace as! lo que cre!a ser y lo que cre!a eran los otros, lo que pensaba eran la vida o el mundo. ) una mente que no se encuentra encadenada en las experiencias del pasado y los proyectos del futuro vive un presente eterno. Estemos atentos a ese instante en el que sobreviene el silencio de lo psicológico, porque en él puede revelarse la verdad por inspiración. "omprenderemos entonces que la vida no se copia, no se repite, no se obedece, no se deduce lógicamente, no se conquista por la fuer(a. La verdad es lo que es m's all' de las apariencias; es lo que soy. ) si la mente se encuentra en equilibrio, silenciosa y serena, porque #a comprendido la lección de las apariencias, #abr' revelación. e revelar' lo siempre nuevo. ) podré vivir a partir de lo verdadero, recién estrenado en cada instante atemporal.
CAPÍTULO 1
Pienso, luego no vivo LA ILUSIÓN DE PENSAR LA REALIDAD El título de esta investigación no es una conclusión, aunque parezca categórico. Hemos de inquirir sobre lo que es pensar y sobre lo que es vivir antes de que las conclusiones broten naturales de nuestra comprensión. Esta investigación es algo intransferible; es el propio pensamiento lo que se va a poner en evidencia mientras nos comunicamos. Y nuestro propio vivir aparecerá mientras aprendemos a distinguir lo falso de lo verdadero. En el proceso del pensar se forma lo que creemos ser. Y aí queda incluido todo lo que llamaremos nuestra vida, las emociones, las convicciones, la manera de actuar, todo eso que nos parece nuestro. !ero mis ideas, mis sentimientos forman parte del proceso de pensar de la umanidad. "os pensamientos pasan de unos a otros en un intercambio repetitivo de actitudes copiadas. #os emos acostumbrado a creer que nuestra vida es esta consecuencia de los pensamientos siempre condicionados unos a otros, siempre mecánicos. Y no aceptaremos que no es así si no observamos una y otra vez asta descubrir qu$ es el pensamiento. !arece que las cosas son como siempre an sido y nada puede acerse al respecto. !ero emos decidido dedicar un tiempo a investigar sobre lo esencial de la vida; podemos observar y ver algo nuevo. !ara ello emos de prescindir de nuestras posturas abituales, las de ser de una determinada manera seg%n lo que los demás piensan. &e'emos a un lado los proyectos pensados acerca de lo que se a de acer para tener $(ito en esto o aquello, y miremos de nuevas lo que el pensamiento es. !uede parecer algo imposible, distraídos como estamos en tantas cosas; pero en un instante l%cido, tal vez sólo un asunto me interese) descubrir la verdad sobre mi vida, ver qu$ la está moviendo y qu$ la está limitando a un movimiento siempre cambiante de pensamientos. *in duda es posible ver esto con todas sus consecuencias. Es por amor a la verdad por lo que se ace una verdadera investigación filosófica, en el sentido que la tradición griega da a esta palabra. &e'aremos las fantasías abituales sobre maestros espirituales y las e(traordinarias e(periencias debidas a su gracia, porque todas esas ideas se an formado en el proceso mecánico del pensar. *e basan en el querer llegar a conseguir algo, lo que no es sino un mal funcionamiento de nuestra mente. #o es fácil prescindir de todo lo creado por la actividad pensante, ya que creemos que es nuestro %nico consuelo. "levamos una vida de luca y de dificultades para conseguir lo que queremos; pero, al menos, nos parece que quienes nos consideramos espirituales tenemos el consuelo de otra vida, de modo que realizamos prácticas para llegar a una meta so+ada que se a denominado realización-. "os esc$pticos, por su parte, tendrán otros consuelos basados en otras fantasías relacionadas con placeres sensoriales o culturales. odo ello forma parte de la ilusión de pensar la realidad; por tanto, no es algo verdaderamente religioso, en el sentido literal del t$rmino de volver a ligarnos a la /ealidad verdadera. #ada de eso nos libera del sufrimiento, pues no sólo no nos unifica con lo /eal sino que nos retiene en la dualidad del pensamiento. !ienso, por e'emplo, que estoy aquí con mis errores, mis fracasos o mis triunfos pasa'eros, pero que puedo
dirigirme a un ser e(celso y supremo mediante el cual puedo llegar a realizar mis deseos. 0 pienso que con voluntad puedo llegar a ser un liberado o un santo. &e este modo, la actitud de la mente no a salido de la trampa de la ambición, del querer ser algo distinto de lo que soy. En otra $poca, esta ambición se a vestido de una determinada manera, adornándola a la usanza del momento. 1lgunas de estas vestimentas nos parecen ya caducas; me refiero a las religiones antiguas, acaso no tan apreciadas actualmente e(cepto por los que tienen el gusto por lo tradicional. 0tras se arreglan seg%n el gusto moderno, percibi$ndose en el ambiente actual una renovación de t$cnicas para obtener los deseos de forma milagrosa. 1sí, tenemos en nuestros días una amplia gama de ofertas que nos prometen adquirir unas u otras energías. En este conte(to no se encuentra la verdad; sólo el autoenga+o del pensamiento colectivo que se vive individualmente. Hemos de verlo bien. Habrá pensamientos que empeoren algunas cosas y otros que las me'oren. !ero siempre andaremos dando vueltas en la misma rueda de inconformismo y de inquietud. 1 pesar de tanto traba'o en la dirección de me'orar lo que conocemos a base de pensar, siempre se mantiene una insatisfacción de fondo. Es inevitable mientras nos mantengamos en el mismo lugar de conciencia. 2uando nos quedamos en silencio, en el vacío que quizá irrumpe instantáneo entre nuestras actividades, notamos que algo está funcionando mal. 3ntuimos que la /ealidad no es eso. 1l quedarnos a solas con nosotros mismos, 4de verdad estamos a solas5, 4no se estará repitiendo una vez más la e(periencia pasada en forma de pensamiento5 Hay una inquietud, una insatisfacción que no sabemos cómo llenar. 1l mismo tiempo oímos ablar de una paz, una gran belleza y un amor sin límites e intuimos que en esa dirección está nuestra realidad. Es entonces cuando, a solas, intentamos parar el movimiento mecánico de la acción y del pensar. 46u$ sucede aí5 Habitualmente no me doy cuenta de la manera en que act%o movido por los pensamientos condicionados por el pasado. !odría ser tambi$n que un pensamiento frene otro. !ero a%n despu$s de aber conseguido el triunfo de controlar el pensamiento, permanece una inquietud constante que proviene de la intuición de que no se está viviendo con autenticidad.
VIDA INAUTÉNTICA Y VIDA AUTÉNTICA Hablaremos de la manera inaut$ntica de vivir para abrirnos a la posibilidad de descubrir lo aut$ntico en la vida, que es lo más simple. *ólo lo inaut$ntico es confuso y rebuscado. Hemos de ver que el proceso de pensar y las consecuencias de actuar ba'o su ipnosis es lo más complicado. #os damos cuenta por lo complicada que a llegado a ser nuestra vida, #i la repetición ni la costumbre pueden ocultar el comple'o y superficial arreglo que oculta la disarmonía interior. *i observamos cómo se fabrica nuestra vida, nos percataremos enseguida de cuántos conflictos ocultan los enga+os que crean los miedos y las ambiciones. 2uando quiero tener amor, no lo tengo en absoluto debido a que mi actitud es egocentrada; y cuando quiero comprender a los demás porque me conviene acerlo, no los comprendo debido a que mi mente está centrada en mis pensamientos interesados, y de esta manera no ay posibilidad de una apertura a lo /eal que se presenta continuamente y en cada situación.
1demás del conflicto que supone no aber comprendido lo que aparece ante mí, superpongo e instalo en mi conciencia algo imaginado) lo que e oído y e pensado que otros acen. Esta situación está muy le'os de ser una vida aut$ntica. #o es vivir de primera mano; es dormir y so+ar que vivimos. 7eamos por qu$ se nos escapa siempre la investigación fundamental cuando analizamos las cosas de nuestra e(istencia. &ecimos que amamos la verdad. *i es así, seremos filósofos en el verdadero sentido de la palabra, es decir, amantes de la sabiduría, el %nico título que puede onrar a un ser umano. *i e(iste esa llamada interior que ninguna e(igencia e(terna puede ocultar, la lucidez se abrirá camino en nuestra conciencia y la sinceridad creará autenticidad en nuestra visión. "o que tengo que lograr, lo que e de conseguir en la vida es evitar las insinuaciones de lo que creo ser. omar por real lo que creo ser es lo que ace que mi vida sea una istoria so+ada, imaginada. En un momento dado, quizás pare un momento el impulso condicionado y me pregunte) 46u$ es todo esto5 4!ara qu$ e vivido y sigo viviendo5 !ero si ya e realizado la investigación fundamental y e descubierto aquello que soy-, y que eso es innombrable y coincide con aquello que es-, entonces no me sucederá esta detención. #o ará falta que suceda porque no estar$ tratando de buscar una finalidad a mi vida distinta al eco mismo de tomar conciencia de ello, que es, precisamente, en lo que consiste vivir. 2uando, como amante de la sabiduría que soy, miro qu$ es la realidad, qu$ es la vida, lo que aparece enseguida son unas proyecciones trazadas sobre los raíles de los ábitos. 7eo entonces que acostumbro a interpretar las sensaciones de la manera en que siempre lo e eco, y que suelo pensar con las connotaciones que todos repiten sin cuestionar. 7eo entonces que es a este con'unto de ábitos a lo que llamo /ealidad. 8e bombardean de información por todos lados repitiendo que se trata de datos nuevos, cuando son las mismas consignas del pasado presentadas seg%n la moda actual. "lamamos vida al conflicto en el que vivimos semiinconscientemente. #o puedo ver lo que es real; no lo puedo ver desde el lugar en que me encuentro, no lo puedo ver pensándolo. !odríamos decir que esa zona del pensamiento, que es la mente condicionada, crea la vida inaut$ntica, tal como siempre lo a manifestado el induismo y tal como lo di'o en nuestra $poca el sabio 9risnamurti. !or el contrario, la 7ida aut$ntica, la 7ida verdadera es e(presión espontánea de la mente incondicionada. y esa capacidad mental libre es pura lucidez. 8ientras la mente permanece dormida, dependiente del pasado en los sue+os que se repiten en ella mecánicamente, no es más que una sombra de esa lucidez que es la verdadera naturaleza mental. 1l mirar desde la dependencia ipnótica del pasado, proyecto más y más sombras sin darme cuenta de ello. Eso es pensar. *e descubre observándolo.
LO QUE PENSAOS NO ES LO QUE SOOS El instrumento pensante en el ser umano es sólo un nivel más entre otros niveles diversos, como son el sensorial o el emocional.
"o que se llama ob'etivamente mundo y sub'etivamente vida no es más que un simple momento del proceso del mundo fenom$nico, el cual se origina en la proyección de la 2onciencia. 1sí, mi pensamiento no es conciencia creadora; es sólo una proyección que se refle'a entre el ver sub'etivo y el plano ob'etivado de lo que denominamos realidad o mundo. 1 la vez. las emociones y los pensamientos están interpenetrados entre sí, y con las sensaciones; los tres forman un circuito cerrado en el mismo nivel que denominamos físico. odo el proceso de las sensaciones y emociones participa del pensamiento ya que toda percepción e(terna o interna es interpretada y entra en ese círculo mecánico que constituye la vida dormida, so+ada. El pensamiento no es l%cido. #o tiene el resplandor de lo nuevo. y el imaginar que no se piensa porque se está sintiendo, no conduce a nada verdadero; pues al identificarse uno con las emociones o sentimientos es cuando, por inconsciencia, más se está completamente dirigido por los pensamientos. Es entonces cuando el pensar condicionado del pasado act%a en nosotros, y es entonces cuando se obedecen consignas sin darse cuenta de nada. En el vivir cotidiano se da la parado'a de que cuanto menos quiere alguien saber de la mente y sus productos pensados, cuando menos quiere alguien ser intelectual sino vital o sentimental, más domina su vida el pensamiento. !orque decir #o quiero pensar- es absurdo. "o inteligente es que el pensamiento sea visto ocupando su lugar; es poder verlo y darme cuenta de que no es esa mi esencia. 1l producirse en mí la desidentificación de la zona del pensamiento, ya sea por madurez, por sabiduría o por comprensión, es decir, al comprender lo que es pensar, entonces el vacío del que surge el movimiento de pensar se vive como plenitud, pues es pura lucidez. Y la luz lo es todo. *i me pregunto qu$ soy, siempre pienso que soy algo. !ero eso que creo ser no lo soy en verdad, pues todo ello se reduce a una proyección pensada. 2reo que soy una persona con unas cualidades, defectos, e(periencias, títulos, costumbres, cultura memorizada..., pero sea cual sea el ob'eto pensado, eso no es lo que soy. 42ómo descubro lo que soy en verdad para poder vivir desde aí5 "a respuesta a esta pregunta no pasa por ning%n conocimiento, m$todo ni consiga adquirida en el pasado. Es la serena lucidez. El amor a la verdad puede mantenernos despiertos natural y espontáneamente, porque no e(iste esa meta que el pensamiento imagina conseguir sin esfuerzo. *e puede concentrar la energía en una u otra dirección, podemos recurrir a la memoria privada o colectiva de la umanidad, y de esa manera podemos llegar, tras reiterados intentos, a ob'etivar resultados conocidos. !ero la lucidez, siempre desconocida y %nica, sólo brotará por sorpresa, como brota la naturaleza en primavera. Y la descubrir$ por amor a la verdad. "o que verdaderamente somos se revela en el mismo acto de estar l%cidos. Esa lucidez, que no es inter$s por algo sino luz totalizadora, es plenitud y se e(presa como belleza, serenidad y armonía. 1 menudo buscamos las manifestaciones e(ternas, pero no nos damos cuenta de que el origen de lo que anelamos es la lucidez que somos y que no reconocemos ser. !or entretenernos con el pensamiento estamos perdiendo la conciencia de lo que somos. "a distracción en que el pensar nos tiene sumidos no nos permite vivir desde lo que somos. #os impide, por tanto, la vida consciente y creativa.
!CÓO SALIR DEL CÍRCULO DEL PENSAIENTO"
1 la verdad no se llega por un camino lineal. El pensamiento va en una sola dirección lógica y lineal. !arte de un lugar para llegar a otro. 7a de lo limitado a lo limitado. 1sí se consigue apenas uno u otro fragmento de la realidad separado de los demás. *e llega, sin duda, a interesantes descubrimientos científicos, filosóficos o psicológicos; pero cuando se trata de ver la totalidad, ver qu$ somos, ver qu$ es la vida, no me servirá ese proceso de caminar de un lugar conocido y, por tanto, limitado, a otro lugar tambi$n limitado. #o sirve la lógica lineal para descubrir una verdad totalizadora. 2on ella sólo se acu+an verdades relativas. :nicamente con la luz que soy puedo descubrir el proceso del pensamiento. Y esa lucidez llega cuando el pensamiento a sido visto y comprendido. Es un círculo cerrado) sólo soy l%cido al eliminar el pensamiento, pero el pensamiento se elimina precisamente al ser l%cido. 4#o ay salida de este círculo5 46u$ acer5 "a investigación verdadera parte del desenga+o completo de que pensando se puede llegar a la /ealidad intuida o presentida. #o ay manera de arribar a lo /eal por la vía conocida, la empleada una y otra vez para adquirir cosas o para resolver problemas. "a plenitud que a+oro está fuera del pensamiento racional, tanto como está fuera de la emoción irracional. #adie, por tanto, puede alcanzar la plenitud pensando o sintiendo. Y sin embargo, es posible el descubrimiento deslumbrante de lo /eal. En un instante en que el pensamiento no intenta nada, cuando desaparecen momentáneamente las creencias y las acostumbradas pautas de conducta, ya sean sociales, políticas o culturales, es posible que sur'a en mí la necesidad de vivir en lo verdadero de'ando de moverme en las direcciones pensadas. "a constante inquietud de desear algo nos mantiene en un movimiento que obstaculiza el paso natural de la luz que somos. Estamos diciendo que al pensar no vivimos desde esa luz, pero ello no significa que nuestra meta consista en de'ar de pensar. "o que se persigue, finalmente, es que de'emos de creer que somos el pensamiento.
EN EL #$ITO DE LA ENTE PENSANTE NO %AY PA& 1quello que pasa por la mente me ipnotiza de tal manera que de inmediato act%o, y vivo a partir de esa reacción. "o que, como pensamiento, pasa por mi mente es simplemente una forma mental. Ya sea que ablemos de mente individual, mente colectiva o mente cósmica, se trata siempre de la %nica mente, y no de mi mente como realidad separada, separación que sólo e(iste en la imaginación. "os pensamientos que se suceden están apareciendo en todas las mentes. Y si veo cómo se crea el pensamiento, me dar$ cuenta de que actuar siguiendo sus consignas es una locura; porque el pensamiento tiene fuerza psicológica precisamente por falta de claridad, es decir, por la obnubilación de esa inteligencia que es nuestra naturaleza real. &e'emos a un lado el pensamiento como instrumento. 2uando se observa el proceso del pensar, se ve y se comprende en qu$ consiste, y esa comprensión le quita su fuerza obnubiladora, su capacidad de ipnotizamos; de esa forma, se mantiene en su lugar. En
su propio espacio limitado, tiene una misión instrumental con capacidad de ordenar los datos que se perciben y de interpretarlos seg%n ese orden. 1l pensar de este modo, organizamos lo percibido para dar forma a alguna situación e(terna. Esto lo sabemos acer muy bien, y asta emos inventado máquinas que nos sustituyen o quizá nos superan en esta tarea. Es un ámbito que conocemos tanto que sobre $l emos depositado las esperanzas de nuestro ver, comprender y ser en la vida, y nos emos quedado atrapados en $l. !or esto, lo que a partir de este momento me interesa es desidentificarme. !orque en ese lugar no sólo me muevo por motivaciones prácticas aciendo lo que es %til a la persona e(terna, sino que se a formado una gran cantidad de energía parasitaria en el ámbito psicológico o interior de la persona, En el pensamiento fermentan esas energías psicológicas parásitas que obstaculizan el poder vivir en libertad) son las necesidades afectivas, la memoria condicionada, la angustiosa sensación de culpabilidad, el temor, la inquietud incomparable de la ambición y tantas otras cosas que ya conocemos. *iempre y en todos los casos, se trata de una energía que depende de una interpretación pensada y repetida por los demás y por mí. Y si nos encontramos en un momento dado enredados en esos lugares, lo %nico inteligente que se puede acer es uir de aí. engamos en cuenta que no ay salida dentro del círculo pensado, es decir, desde lo psicológico. Y si en alguna ocasión nos parece que un problema se a resuelto desde aí, observemos bien asta que descubramos que estábamos mirando sólo apariencias, sólo aspectos superficiales de la situación problemática, y enseguida veremos que la resolución de estos aspectos triviales no toca la raíz del conflicto de nuestro vivir. 4*abemos qu$ es vivir en paz5 Hay toda clase de problemas acecando en cualquier cosa que acemos, a causa de esa raíz conflictiva con la que nos movemos en la e(istencia y que dimana de la mente pensante. En la actualidad, comenzamos a tomar conciencia en alguna medida de que algo ay que acer con los problemas que vivimos en nuestro interior y con los conflictos en relación con los demás. Y cuando nos damos cuenta de ello, tratamos de resolverlos desde el mismo ámbito en que se crearon. El pensamiento intenta dar soluciones a los conflictos que ese mismo pensamiento ocasiona. Es evidente que no es posible resolver nada de este modo; sin embargo, probamos una y mil veces a conseguirlo. *i el eco de estar identificado con el pensamiento crea un sinfín de inquietudes y lucas, 4cómo es que quiero llegar a la paz desde ese mismo error5 "o más que consigo es quitar un obstáculo que me impide vivir en paz mientras aparecen una multitud de nuevos e incomprendidos obstáculos a su alrededor. 1sí, siempre estar$ ocupado en resolver alg%n asunto que luego de'a paso a otro y a otro más, sin tregua.
LA LI$ERTAD DESDE LA LU& #o e(iste ninguna solución pensada. "a %nica salida del error radica en comprender dónde nos emos quedado estancados por inatención. Y comprenderlo no es ablar o escucar ablar acerca de ello. "a vía inteligente que fructifica en sabiduría es la observación de lo que aparece en y desde la propia conciencia. !ara investigar es insuficiente el mero entender las palabras, darles un sentido lingístico y arcivar en un rincón de la mente pensante la información. *i ago una investigación con la sinceridad de quien ve la necesidad de comprender, no la llevar$ a cabo simplemente para recopilar datos y guardarlos con miras a una eventual repetición. "o ar$ para que cambie el lugar de la conciencia desde donde vivo. Y el cambio surgirá espontáneo a partir del inter$s de
contemplar la verdad.
ob'etivados.
!CON QUÉ E IDENTI'ICO DE LA VIDA TOTAL" 1l contemplar lo que ay ba'o el pensamiento, notar$ las carencias físicas y afectivas, o que no tengo salud, que no s$ cómo ganarme la vida, que ay alguien que no me quiere... 4*on esas mis limitaciones5 4&ónde está mi identidad5 4*oy esta persona que aparece por un tiempo5 1quí y aora soy un c%mulo de limitaciones, todas ellas creaciones de la mente. ambi$n el cuerpo aparece aora en el tiempo, entre otras creaciones mentales. &e'emos de vivir desde el pensamiento. 1pliquemos la luz de nuestra conciencia, y así soltaremos esa identificación con los estados limitados y superficiales de la vida. Entonces podremos ver cómo las energías que pasan por ese centro del movimiento universal que llamo mi propio yo, no son sino la misma lucidez de la 7ida incondicionada cuando se e(presa en las condiciones temporales. 1l ritmo constante del movimiento temporal se presenta lo eterno, lo que Es, como algo limitado en la superficie pensada de la ob'etividad. Y ese bello contacto que se produce allí donde se une aquello eterno con lo finito, esa cispa del resplandor de la luz, crea a su alrededor el anelo de amor que sentimos. *i sentimos ese amor, si intuimos que es ilimitado, sabremos que no estamos encerrados en una forma que se desarrolla y se disgrega en el tiempo. *ería deseable que no sólo sinti$ramos el amor sino que, e(pandida la luz en todas las direcciones, nuestra mente quedara iluminada y, con ella, la totalidad de nuestra vida. 1sí, no tendríamos por un lado un bello sentimiento amoroso y por otro unas ideas egocentradas inducidas por la pasada e(periencia personal y la cultura colectiva. 1sí, ya no viviría más como una persona con ciertas capacidades y ciertas barreras, con amigos y enemigos de los que dependo, con triunfos y fracasos que me determinan a una condición de vida que e(perimento como impuesta por otros. *i el amor se amplía en la luz asta el infinito, 4dónde quedará esa persona aislada que creo ser5 Esa persona aislada es parte de la manifestación de aquello no manifestado, pero sólo en cuanto a forma. *i me desidentifico del proceso pensado que constituye la temporalidad que me mantiene dependiente de lo relativo, asistir$ a la e(pansión infinita de mi identidad, esa identidad que yo creía ser, estreca y relativa a un sinfín de causas determinantes. Entonces no abrá ya deseos. 42uántas veces e intentado no tener deseos mientras abito en la zona del pensamiento condicionado y dependiente por naturaleza5 *e trata de una tarea imposible, pues aí creo inevitablemente que me faltan mucas cosas. En realidad, adolezco de todo, porque eco de menos el ser, la 7ida verdadera. !ero cuando descubro que soy más allá de las formas pensadas, no carezco ya de nada. !ensando, me podrán decir que sigo necesitando alimentarme, vestirme, relacionarme con otros, estudiar, via'ar. *í, pero todo eso se vive desde la libertad. Y podr$ comprenderlo de manera natural cuando lo viva. &espertar a una vida nueva es consecuencia de un estado nuevo de conciencia. 42ómo se podría participar de esa vida mientras se está en el sue+o5 y 4cómo se podría comunicar5 *ólo ay una posibilidad, y esa posibilidad %nica nace del eco comprobado de que mucos de nosotros ni estamos totalmente dormidos ni, en nuestra interdependencia vivencial, podemos quedarnos al margen de lo /eal en el ámbito imaginario de los dormidos.
"as mismas cosas suceden una y otra vez, y siempre nos parece que la solución a los problemas consiste en cambiar el argumento de la novela. 8e parece que el estilo de vida que me a caído en suerte es desfavorable; pero si fuera otro, si me sucediera lo que le sucedió a otra persona, entonces todo iría bien. 2reemos que si combinamos unas cuantas ideas, confeccionaremos nuestra vida feliz y rápidamente. 1sí, el pensamiento se dispara en teorías colectivas e individuales para me'orar la situación. !ero el conflicto persiste. *i ya emos intuido la amplitud y la grandeza de la 7erdad que no puede encerrarse en ninguna medida, abandonemos de una vez los intentos de cambiar a partir de ideas pensadas. "a 7ida liberada está eca de lucidez. #o aparece en ella la angustia, la ambición, el deseo, la envidia, el miedo, la tristeza, el aburrimiento. #o aparece nada de aquello a lo que estamos acostumbrados. #o se participa de lo que viven por dentro todas las mentes identificadas con el pensamiento. Esa gama de sentimientos es, en mayor o menor grado y en uno u otro momento, el correlativo inevitable del funcionamiento erróneo de la mente estreca. 4#os emos dado cuenta ya de que, debido a nuestro estado de distracción, se están programando nuestras vidas a partir de ese mal funcionamiento mental5 #uestras situaciones en la vida son refle'o del modo en que nos movemos a partir de nuestros pensamientos; pero mientras no seamos capaces de observarlo directamente, abremos de verlo a trav$s del desenga+o y sufrimiento que van produciendo las e(periencias vividas desde el error. "a puerta a lo infinito está en la lucidez. !ero si me vuelco acia las formas y acia las apariencias, si me sumer'o en los pensamientos que provocan las distintas emociones, me ale'o de la observación. "a observación me libera del pensar, el cual me impide ver la vida tal como es. "a vida que veo proyectada a trav$s de mis pensamientos es irreal, aparece a partir de la distorsión que el pensar ace en mi conciencia. "iberemos la vida. &esde la lucidez que es anterior al pensar, lo que Es se revela. "a propia lucidez es lo /eal. 7ivir desde ella es vivir con autenticidad.
CAPÍTULO 2
Aprender a contemplar ABRIR LOS OJOS Cuando aprendemos a contemplar, aprendemos a mirar por nosotros mismos de una manera nueva. De este modo, es la propia actitud contemplativa de la mente la que va creando la manera de vivir y de hacer. Dentro de la inteligencia de la Vida aparece ahora una situación que posee unas condiciones muy favorables para hacer la mente contemplativa. Esta situación consiste en estas investigaciones que compartimos acerca de la naturaleza de la contemplación. Estemos, pues, atentos para que estas condiciones no sean menospreciadas o estropeadas por los hábitos de nuestra personalidad. abitualmente, creemos que somos una unidad, una persona, una realidad separada, !nica. "odo esto va a ir cayendo en las investigaciones que vamos a realizar a lo largo de este libro. #o somos ninguna unidad, sino un montón de intereses unidos$ somos una variedad de hábitos y de memorias que van saliendo en un momento o en otro. %Cómo puede ponerse orden y armon&a en ese caos' (i alguien pensara que no tiene ning!n caos es porque no ha mirado bien todav&a. Es necesario observar y observar para ir penetrando en el caos. )a tenemos bastantes pel&culas e*ternas para distraernos y creernos que somos esto o lo otro. Cuando hay observación sincera, cuando la mente contemplativa es capaz de ver, o sea, cuando tenemos o+os para ver, tal como se di+o en nuestra tradición, entonces vemos que no somos esto ni aquello, ni lo que mostramos a los demás ni lo que nos gustar&a que los demás creyeran que somos. (implemente, no somos nada, lo cual es lo más e*traordinario y maravilloso que puede sucedemos. ara que la mente se vaya tornando contemplativa, tenemos que pasar por ese ba-o de darnos cuenta de que no somos absolutamente nada de lo que creemos ser. uedo decir /ero yo soy una persona0, /un hombre0, /un hi+o de Dios0, /un europeo0, /un espa-ol0, /un +oven0, /un intelectual0, /un m1dico0, /un esposo0, /una madre0, /una amante0, /una esposa0... ero no soy nada de eso, no soy nada de lo que creo ser. (iguiendo el lengua+e de la tradición perenne de sabidur&a, se podr&a decir que ese ba-o de la verdad es una iniciación. De hecho, 1sa es la verdadera iniciación, y no las pruebas e*teriores para ver cómo reaccionamos. Esas pruebas son sólo constataciones e*ternas. la verdadera iniciación es el descubrimiento de que no soy nada de lo que creo ser. 2ste es el aut1ntico fundamento de la contemplación. Estas investigaciones acerca de la contemplación son una oportunidad, ya que e*isten unas condiciones favorables para que podamos descubrir qu1 es contemplar. (olemos vivir con muchas fantas&as$ por e+emplo, queremos alcanzar una meta, conseguir dinero, etc. ay personas para las cuales el dinero tiene su importancia, aunque lo que en verdad quieren, sobre todo, es realizarse, ser creativos, ser felices, librarse d1l dolor y cosas de esta &ndole. Cuando ven que no hay nada que puedan hacer a este respecto, les brota una actitud nueva. Es entonces cuando empiezan a abrir sus o+os que hasta entonces estaban cerrados. Cuando finalmente vemos, no nos preocupamos ya más por querer ser esto o aquello, o estar de una manera o de otra.
De+emos ya todo ese baga+e de deseos, incluidos los deseos de estar más sereno, más tranquilo, tener más paz, ser más creativo, comprender más a los demás, ser me+or, más inteligente, más libre, realizado, sabio, etc. "odo ese baga+e tiene que ir desapareciendo para que nuestra contemplación sea verdadera. 3ncluso hay que de+ar de lado toda clase de astucias, como es, por e+emplo el afán de conseguir un m1todo para contemplar. 4l investigar, no nos interesa lo que puede conseguir una t1cnica. orque, efectivamente, una t1cnica se puede hacer me+or o peor$ todo depende de cómo est1 colocada la persona. ero dado que lo que verdaderamente importa no es la colocación de la persona sino la colocación de la conciencia, %para qu1 ponerse a hacer t1cnicas que se van a efectuar peor o me+or' Coloqu1monos bien de una vez y nos sobrarán las t1cnicas. Con una t1cnica no nos vamos a colocar bien en la conciencia. Ello sólo será posible al abrir los o+os a la verdad siempre nueva. #o hay ning!n truco para ser lo que somos$ y no lo hay por una razón muy simple porque ya lo somos. 5os m1todos y disciplinas, o tambi1n podemos llamarlos despectivamente /trucos0, son para llegar de un lugar a otro /Estoy aqu& donde soy menos y voy a ir hasta all& donde voy a ser más0. #o es 1ste el camino de la contemplación. 5o que soy está ya aqu&, y siempre lo estuvo. 5o que me impide verlo es sólo un sue-o, una distracción, una atrofia de mi visión. Esas limitaciones, esos obstáculos son los que la contemplación va a ir disolviendo, ya sea poco a poco, ya sea rápidamente o bien en un simple instante$ no importa el tiempo. De hecho, a medida que los errores van cayendo, va apareciendo la libertad$ y un d&a, en un abrir y cerrar de o+os, surge lo eterno. ero los errores no van cayendo porque yo aprenda a hacer algo, a comportarme de otra manera, a hacer ciertos e+ercicios... Eso no hace que caigan los errores$ as& se mantienen iguales, sólo que a-ado un adorno más. De esta manera, a todos los errores que colecciono les a-ado además el error de creer que s1 hacer esto o s1 hacer lo otro, o de creer que cuando me pasa esto puedo evadirme de esta manera o de la otra$ y entonces, en vez de evadirme de la manera habitual 6viendo la televisión, por e+emplo7, me evado haciendo unos e+ercicios. 8ueno, no está mal$ puede que sea una manera me+or de evadirse. ero lo realmente óptimo es no evadirse de ninguna manera para, en cambio, estar aqu&, presente en este instante !nico y maravilloso, en este instante que es sagrado porque es 9eal. SER LO QUE SOMOS 5o me+or es estar aqu&, sin salir con la imaginación a ninguna parte. Entonces la Contemplación viene por s& sola. Es as& que la Contemplación adviene como una gracia, tal como se afirma en nuestra tradición, o llega por inspiración, como dicen los artistas, o irrumpe sin hacer nada, como dicen los hind!es. ) a partir de entonces puedes seguir haciendo cosas, pero ya no act!as para conseguir algo, ya no te mueves por el impulso y la fuerza del deseo. En resumen no tenemos que cambiar nada de lo que hacemos, no vamos a hacer nada diferente$ sencillamente, vamos a ser lo que somos. Eso es aprender a contemplar. 4prender a contemplar es aprender a ver$ y aprender a ver es descubrir lo que somos y, por tanto, es ser. (iendo as&, la Contemplación es algo que se nos escurre de entre las manos, que no se puede coger y decir /Es esto0, /(e define de tal manera0, etc. Es escurridiza para la mente pensante, es escurridiza para nuestra persona, para lo que
creemos ser. Contemplar requiere, simplemente, darnos cuenta de lo que está sucediendo momento a momento. En eso vamos a ocuparnos, para eso serán las investigaciones que vamos a realizar. #o serán para acumular conocimientos$ yo no vengo pertrechada con conocimientos, no vengo provista de un baga+e de conocimientos que ense-ar. De hecho, no s1 lo que va a aparecer en las investigaciones. En las contemplaciones vamos a vivir ese descubrimiento de hecho, contemplaremos cómo se vive desde el descubrimiento de la verdad, cualquiera que 1sta sea. ) durante todo el d&a :porque no podemos pensar que contemplar es solamente hacer un rato de silencio: vamos a estar en silencio. 6#ota del Editor 5os seminarios de Consuelo ;art&n tienen lugar en silencio, interrumpido !nicamente por sus charlas y las correspondientes preguntas y respuestas.7
EMPEZAR RECONOCIENO LA I!NORANCIA 5a palabra /silencio0 tiene muchos niveles de profundidad, como seguramente ya sabemos. ) es muy importante que realicemos la aventura de atravesar los diversos niveles de silencio, que descubramos los sucesivos silencios. )a el primero y más elemental, el silencio simple de estar callado, es positivo$ porque a veces, para no tener que cambiar ni siquiera el hábito de estar todo el tiempo hablando, me digo /"otal, hablar e*teriormente no tiene importancia$ lo que importa es el silencio interno0. De este modo, no soy capaz ni tan siquiera del primer y más elemental nivel de silencio. #adie hace las cosas bien o mal. "odas esas clasificaciones /bien0 o /mal0, /los que saben0 o /los que no saben0, etc., carecen de valor. Empezamos estas investigaciones siempre preguntándonos qu1 es contemplar, a pesar de que la mayor&a de nosotros llevamos muchos a-os contemplando, unos de una manera y otros de otra. (in embargo, siempre comenzamos preguntándonos qu1 es contemplar. ) as& tiene que ser, porque nuestra persona no sabe absolutamente nada$ y no hay sabidur&a sin dar un primer paso que (ócrates e*presó hace muchos a-os. Este primer paso es el reconocimiento de que no s1 nada. 4ntes de este paso puede que se conozcan muchas cosas, pero no hay sabidur&a. 2sa es la diferencia. El primer paso, por tanto, es reconocer que no s1 nada$ entonces puede empezar la sabidur&a. or eso, nosotros empezaremos por reconocer que no sabemos lo que es contemplar. #inguna persona de las que estamos aqu& lo sabe, ni lo sabrá nunca$ porque contemplar no es para la persona. 5a contemplación sucede a pesar de la persona, sucede a espaldas de la persona. Contemplar es algo total, y no cabe dentro de la limitación de una persona. "ampoco cabe en lo que llamamos nuestra mente, que son nuestros pensamientos$ por este motivo, nunca /sabremos0 contemplar. #i siquiera yo lo s1. ;i persona no se ha enterado todav&a,
uiero hacer lo que quiero, pero quiero una cosa y despu1s quiero otra y al mismo tiempo quiero las dos, y no s1 lo
que quiero, y cuando hago lo que quiero, despu1s me sucede lo que no quer&a que me sucediera0, y as& todo el tiempo. 5a persona no sabe lo que es la libertad. 5a persona no sabe lo que es la belleza, porque la busca persiguiendo las formas, y precisamente por ello se le está escapando todo el tiempo$ y dedica much&simo tiempo y much&simo dinero a estar más bella, sobre todo las mu+eres, sin estar nunca conforme. (iempre quiere otra cosa. ) as& sucede con todo. 5a persona está siempre limitada. Está limitada y coartada en su libertad, es pura coacción y limitación. Es limitada en su belleza, es limitada en su amor... y buscando amor no encuentra más que lo opuesto, porque el amor es la felicidad má*ima y en la b!squeda no encuentra más que problemas y sufrimiento. De hecho, en todas las b!squedas hay conflicto. emos de darnos cuenta de esto. ;ientras no lo descubramos, seguiremos buscando cosas. Cuando descubrimos que el propio hecho de buscar crea conflicto, paramos y nos preguntamos /%>u1 estoy buscando'0 8uscamos muchas cosas diferentes, y cada vez que busque tendr1 los conflictos inherentes a toda b!squeda. ero, %cómo podr&amos no buscar' (i somos limitados, si la persona es limitada, si estamos coartados y no tenemos libertad, si no somos lo que anhelamos ser, %cómo puede ser que no busquemos' ?ustavo 4dolfo 81cquer escribió /4nsia perpetua de algo me+or, eso soy yo0. (e hab&a dado cuenta, ya desde muy +oven, de que su vida era un ansia constante de algo me+or. #o importa lo que uno consiga, el ansia siempre está ah&. De modo que 81cquer consiguió ser un gran poeta, como otros pueden conseguir tener much&simo dinero, ser muy esbeltos, muy bellos, reconocidos, tener muchos amigos, tener mucho poder... ero no importa lo que uno consiga, seguimos siendo un /ansia perpetua de algo me+or0 hasta que descubrimos que no somos nada de lo que creemos ser. El ansia perdurará mientras no aprendamos a contemplar. CONTEMPLAR EN EL SILENCIO Contemplar es abrir los o+os para ver por primera vez. emos visto muchas cosas, pero las hemos visto a trav1s de las ilusiones, a trav1s del pensamiento, a trav1s de la hipnosis del sue-o, a trav1s de lo que los demás nos han dicho, de lo que leemos, de lo que hemos estudiado, de lo que nos comentan los compa-eros de traba+o, los amigos, etc. En consecuencia, no nos damos cuenta de lo que las cosas son en s& mismas. Comentamos y hablamos con compa-eros de traba+o, con los amigos, etc., y a menudo adoptamos como criterio las opiniones a+enas. Eso es lo que entonces defendemos, 1sa es para nosotros la verdad$ no nos damos cuenta de que no hemos llegado a esa conclusión a trav1s de nuestro propio discernimiento, sino que se ha grabado en nuestra memoria, de modo que lo que sucede en realidad es que simplemente repetimos verdades a+enas. (in contemplar, no nos daremos cuenta de todas esas cosas. ) eso es grave. odemos e*cusarnos afirmando que nadie se da cuenta de todo esto. (&, es cierto, nadie se da cuenta$ pero miremos las consecuencias, observemos cómo está la humanidad a ra&z de ello. @ podemos pensar que aunque nadie se da cuenta de esto, la gente sigue viviendo. (&, eso es cierto, pero %cómo viven' Viven absolutamente dormidos y llenos de conflictos, tapando los errores y pretendiendo que otros resuelvan sus problemas y enfermedades$ y cada vez que tienen un problema psicológico o f&sico, aspiran a que un profesional se lo solucione con un tratamiento para as& seguir viviendo est!pidamente.
Esto no debe continuar para aquel que ya ha entreabierto los o+os, y todos los que nos encontramos aqu& reunidos estamos en ese caso$ si no, no estar&amos. #unca hubi1ramos sido atra&dos a un retiro como 1ste si no hubi1ramos ya entreabierto los o+os. 3mposible. Estar&amos en otro lugar, disfrutando de unas vacaciones a la manera convencional, como hacen los demás, y no de esta e*tra-a manera. Estos retiros no son vacaciones para nuestra persona, sino una posibilidad de apertura a nuestro verdadero ser. #o puede haber aqu& nadie que no intuya ya algo de lo que se va a investigar. #o es posible, porque la Vida es inteligente y no pone a una persona inadecuada en una condición as&. ) si por alg!n misterio de la vida la pusiera, esa persona no podr&a soportar estas investigaciones y se marchar&a rápidamente. 4lguna vez ha sucedido, aunque muy rara vez. (ólo aquel que ya ha comprendido puede comprender. E*tra-a afirmación %no' (ólo el que ya ha abierto los o+os puede abrirlos. or eso, todo lo que vayamos viendo, todo lo que vaya apareciendo en estas investigaciones, en estas contemplaciones, por un lado será algo nuevo, porque es nuevo totalmente para la personalidad$ y yo dir&a que no sólo nuevo, sino revolucionario y hasta escandaloso para la personalidad. ero al mismo tiempo es algo que ya se sabe en lo profundo$ es algo que se reconoce, que parece que no se escucha por primera vez, porque ya hay algo en nosotros que lo reconoce. Es como cuando algo que se hab&a olvidado se recuerda de repente. %Cuánto tiempo hac&a que lo hab&amos olvidado' "al vez meses, a-os o siglos de la humanidad$ pero cuando lo escuchamos, lo reconocemos reconozco que esto es aquello que hab&a perdido. Esto es lo que irá sucediendo al contemplar. emos dicho que al contemplar iremos profundizando en el silencio. El silencio es important&simo para nuestro traba+o interior. El silencio e*terno, el que parece más fácil, simplemente callar, es ya una gran ayuda para nuestra madurez psicológica. #ecesitamos madurar psicológicamente mientras aprendemos a contemplar, y el silencio nos ayuda a madurar debido a que habitualmente no disfrutamos del silencio de forma voluntaria. ay personas que están en silencio porque no tienen más remedio$ por e+emplo, porque están solas. 3nmediatamente, ponen la televisión o hablan por tel1fono con alg!n amigo con el fin de evitar el silencio, o se ponen a ho+ear una revista o a comer. ero cuando se ven forzadas al silencio, entonces piensan /<>u1 horrible, estoy solo=0 %) por qu1 les parece horrible la soledad' orque no se pueden evadir hacia las formas e*teriores, hacia lo establecido, hacia los hábitos adquiridos$ en definitiva, no se pueden evadir hacia lo conocido. 4s&, al quedarse callados, se ven forzados a ver algo de lo que aflora a nivel psicológico$ por e+emplo, ven que están aburridos, que no saben qu1 hacer, que tienen una inquietud o una angustia que hab&an guardado durante a-os, o que están tristes por no haber comprendido algo, o por haber perdido a una persona, o por su situación económica, etc. 4s&, aun cuando todav&a no tengamos el silencio interior, es decir, el silencio del pensamiento aquietado, el simple hecho de quedarnos en silencio e*terior ya nos hace madurar. 4unque sigamos pensando, en el silencio e*terior los pensamientos van a mostrarnos alguna cosa gracias a que no caemos en la habitual evasión que nos conduce al sue-o profundo. Entonces notar1 alg!n ruido en la máquina psicológica, sentir1 que algo está sucediendo. Cuando se está en soledad uno no tiene más remedio que mantenerse ah&, en esa /terapia0 de ver un poco los pensamientos. 4s&, estar callados voluntariamente nos permite madurar. "odas estas cosas tienen valor cuando se hacen voluntariamente, ya
que si no se hacen voluntariamente nos abocamos rápidamente a evasiones. Cuando voluntariamente hay silencio e*terno, no hay ninguna evasión. 4qu& estoy, callado$ y puesto que veo alg!n pensamiento, ya hay alguna madurez. NO SO" LOS PENSAMIENTOS# NO SO" LAS EMOCIONES ero despu1s se puede profundizar un nivel más. Cuando empiezo a observar los pensamientos, me doy cuenta de que primero los veo y luego me viene la emoción. or e+emplo, ante el pensamiento de tristeza /Estoy triste0, inmediatamente me viene la emoción de tristeza. ero si contemplo este mecanismo con detenimiento, me doy cuenta de que lo que hay originalmente es un pensamiento de tristeza, y me doy cuenta de que eso no soy yo. #o es que yo est1 triste, sino que me ha pasado por la cabeza un pensamiento de tristeza. (i lo veo, entonces ya me he separado un poco del pensamiento y, por tanto, se detiene el mecanismo. Esto va a sucedernos esos d&as cuando estemos paseando por el campo, o por los claustros, o en nuestra habitación, en el comedor o en cualquier situación que estemos. De repente, tenemos un pensamiento y, o bien lo tratamos corno siempre, creyendo que soy el pensamiento, o puedo decir /a pasado un pensamiento por mi mente, pero yo no soy ese pensamiento0. (i hago esto, me ahorro toda la retah&la de emociones que vienen detrás inherentes. De manera que si el, pensamiento es triste, me ahorro la tristeza$ simplemente ha pasado un pensamiento triste, como cuando ha pasado una mosca. (i el pensamiento es esc1ptico, me ahorro las desesperaciones y el malestar del escepticismo. (i el pensamiento es de aburrimiento, me ahorro la sensación de que no s1 que hacer, etc. ) lo mismo sucede con cualquier pensamiento. or e+emplo, %tengo un pensamiento de miedo' 8ueno, pues ha pasado un pensamiento de miedo, pero yo no tengo nada que ver con ese pensamiento. 5o mismo que ha venido se va a ir. #o hace falta demostrar que lo mismo que viene se va, porque ya lo sabemos todos los pensamientos vienen y se van. Entonces, 6%por qu1 me voy a identificar con 1l, quedarme ah& encerrado y empezar a vivir todas esas emociones desagradables' ) es lo mismo con todo el psiquismo, llámese miedo, angustia, tristeza, preocupación, envidia, odio, etc. %) las emociones positivas' Con las positivas hace falta más /tratamiento0 todav&a. orque queremos librarnos de las emociones negativas, pero si no nos libramos de las positivas tampoco nos libramos de las negativas$ 1se es el problema. (olemos rechazar las emociones negativas, pero queremos las positivas. "enemos que ver esto claro, porque sin esta base, %cómo voy a contemplar' 5as emociones me van a estar interrumpiendo todo el tiempo. 4demás, tampoco hay ninguna emoción positiva que sea verdadera. or supuesto que es más agradable una emoción positiva y me siento me+or con ella. ero si pretendo librarme de las emociones, debo abandonarlas todas, tanto las positivas corno las negativas, pues la fuerza que doy a unas está igualmente en las otras. 4ctualmente hay muchas terapias para fortalecer las emociones positivas. or e+emplo, puedo afirmar desde que me levanto por la ma-ana /(oy feliz, soy guap&sima, soy muy inteligente, todo me sale bien, todo el mundo me quiere0, etc. Está bien. El que quiera +ugar a eso puede hacerlo$ y, por supuesto, es me+or +ugar a eso que +ugar a estar triste, que es contagioso y bastante más molesto socialmente. ero ese +uego no tiene nada que ver con la verdad. (i me identifico con las emociones positivas, igualmente me identificar1 con las emociones negativas. De modo que la observación, el contemplar, el aprender a tener una mente contemplativa requiere distanciarse de los pensamientos, cualquiera que
sea su &ndole. #o importa que sean agradables o desagradables, buenos o malos. "odas esas clasificaciones las ha hecho el pensamiento tambi1n. ) las ha hecho para poder mane+arse en el sue-o de la vida, no para descubrir la verdad y vivir desde la verdad. 5a verdad brota en el silencio y es siempre nueva. emos venido para descubrir la verdad$ para eso aprendemos a contemplar. Entonces, todas esas clasificaciones acerca de lo bueno y lo malo, lo !til y lo in!til, lo eficiente y lo ineficiente, lo simpático y lo antipático, lo agradable y lo desagradable, el placer y el dolor, todo esto, todos estos opuestos, no tienen nada que ver conmigo. El verdadero ser está más allá de esos opuestos. Entonces, cuando pasan los pensamientos he de considerarlos algo e*tra-o, porque de hecho lo son. orque esos pensamientos se han grabado ah&, en esa cinta de la memoria que retiene lo que o&, lo que me di+eron o la e*periencia que un d&a tuve y que luego transform1 en pensamiento. "odos esos pensamientos son una grabación que hay en la memoria. #o tienen que ver nada con mi verdadero ser. #o me los voy a llevar cuando me vaya de esta vida$ no me voy a llevar ni un solo pensamiento porque son algo a+eno, y tampoco me voy a llevar las sensaciones. Esto es obvio, porque los pensamientos, al igual que las emociones, tambi1n son aspectos de lo f&sico o de lo mecánico. LAS ILUSIONES "odo cuanto e*iste es la energ&a que funciona en este nivel de formas e*teriores que filosóficamente se denomina /fenom1nico0. 5a palabra /fenómeno0 denota para los filósofos algo similar a lo que describe la palabra /relativo0 que han acu-ado los cient&ficos. "odo es relativo para los cient&ficos, y para los filósofos todo es fenom1nico. 5a sabidur&a de la 3ndia dice /"odo es ilusión0. Aenómeno e ilusión son sinónimos debido a que los fenómenos /aparecen0 ante un espectador que los contempla. 5os griegos ya hablaban tambi1n de los fenómenos en el sentido de lo que aparece, de las apariencias, de aquello que aparece seg!n el tipo de mente que tengo. De hecho, es el instrumento mental quien crea las apariencias$ y lo hace a partir de lo que perciben los sentidos que tengo, ya que construyo las imágenes a partir de todos los mecanismos de percepción que poseo. #o dispongo de otra cosa más que de estos cinco sentidos y del pensamiento, y es a partir de ellos como creo las apariencias, ya se trate de los fenómenos de los filósofos o del mundo relativo de los cient&ficos en el que todo se relaciona, donde todo parece real pero no lo es. 5os hind!es lo han e*presado con insistencia lo que perciben los sentidos es ilusión, es maya. En la medida en que voy dando realidad a las ilusiones, o como quiera que lo llamemos apariencias, fenómenos, lo relativo o incluso sue-os, que es un t1rmino todav&a más fuerte que el de ilusión$ pues bien, en la medida en que doy realidad a los sue-os, en esa medida no soy. En ese caso, soy una especie de fantasma, soy una aparición que emerge en el tiempo. ero si no e*istiera el tiempo y si no e*istiera este instrumento f&sico con sus sentidos, no aparecer&a nada. En la medida en que me identifico con ese fantasma, con esa aparición, con lo que aparece en función de estas condiciones psicof&sicas, es decir, mentales y f&sicas, en la medida en que me identifico con lo que aparece, no soy nada y, por tanto, soy todo lo que sue-o ser más feliz, menos feliz, más querido, menos querido, más elegante, menos elegante, más inteligente, más rico, más pobre... ero todo lo que parece que soy, eso no soy. Estoy de+ando de serlo constantemente, y de ah& el conflicto y la angustia interna. orque cuando se está en lo falso, necesariamente se vive en conflicto, angustiado y preocupado. Entonces, no nos e*tra-emos si estamos preocupados. #os decimos /Deber&a sentirme bien0 :porque todo el mundo quiere
sentirse bien:, /y, sin embargo, estoy preocupado, angustiado, nervioso, etc.0. En definitiva, siento malestar. "odo el mundo quiere quitarse el malestar, pero nadie se percata de que necesariamente tiene que e*istir ese malestar ya que se está viviendo en el error. ;ientras no desaparezca ese error que es la falsa identificación con lo que no es real, el malestar va a permanecer de un modo u otro. or supuesto, lo puedo tapar de mil maneras$ por e+emplo, haciendo e+ercicio f&sico para convertirme en un gran gimnasta y tener un cuerpo esbelto. "ambi1n puedo taparlo de manera sentimental, haciendo obras de caridad, queriendo a todo el mundo para que los demás a su vez me quieran, o bien aturdi1ndome con todo tipo de drogas prohibidas o mediante medicinas aceptadas socialmente. ay infinidad de maneras de tapar ese malestar, pero 1l seguirá ah& y en cualquier momento lo ver1. ) si me acostumbro a taparlo, ya sea a base de alcohol o de cualquier otra forma, deteriorar1 el instrumento, atrofiar1 el cerebro, embotar1 los sentidos, perder1 concentración mental, claridad en la mente, y cada vez estar1 más dormido. ISCERNIMIENTO 4 pesar de que estas actitudes no parecen tener mayor importancia, son graves ya que afectan al instrumento que se me ha dado para descubrir algo verdadero en la vida, hasta que queda inservible. Es lo mismo que si un m!sico que tiene un instrumento para tocar una bella melod&a se dedica a estropearlo sistemáticamente. 4ntes de que empiece a tocar la melod&a ya sabemos que la actuación va a ser un desastre, porque le faltan varias cuerdas y además está desafinado. or eso, si queremos contemplar con la intención de tener una vida me+or, hemos de darnos cuenta, para empezar, de que no hay ning!n truco para tener una vida me+or. #o e*iste una vida me+or y otra vida peor$ eso es ilusorio. 5o !nico real es que los o+os de la conciencia se vayan abriendo, que vayan descubriendo la verdad. 4 partir de ah& se irá construyendo la vida de cada uno espontáneamente, sin ninguna preocupación por parte de quien la está construyendo. Es algo que sucede por s& mismo. 5o que va saliendo al e*terior sucede por s& mismo. or e+emplo, si voy abriendo los o+os, el hecho de cuidar al instrumento será algo natural, pues ning!n m!sico que se precie prepara un concierto entreteni1ndose en estropear las cuerdas del viol&n o desafinando las teclas del piano un poco antes. Eso es absolutamente obvio. ues tan obvio como eso es que, cuando vamos abriendo los o+os, lo que tenemos que hacer en la vida, cosas tan concretas como hacer algo o no hacerlo, lo veremos con toda evidencia. #o habrá necesidad de a+ustarnos a ning!n sistema de esos que dicen qu1 es lo que tenemos que hacer, porque nos resultará obvio. Ver1 con claridad que /esto me va bien0 o /esto me va mal0. (abr1 cuándo algo me permite estar más despierto y, por tanto, estar más vivo, ser más verdadero, más real, y me dar1 cuenta de cuándo algo me atrofia, me adormece, me deteriora y entonces no lo querr1. Esto es discernimiento, es muy sencillo. Es, simplemente, darse cuenta. ero ese darse cuenta es consecuencia de una mente contemplativa$ no se produce antes de contemplar. arece tan simple que podr&amos pensar que todo el mundo lo ve$ sin embargo, no es as&. 8asta con mirar alrededor para advertir que no hay discernimiento. Es decir, nadie ve lo que es verdadero y lo que es falso. 5as cosas que nosotros vemos obvias, otros no las ven. #o hay discernimiento, porque la mente todav&a no es contemplativa$ es decir, no ve desde la verdad, está sumida en el sue-o y funciona a partir de emociones, a partir de las e*periencias que me han pasado, a partir de lo que los demás dicen y desde la necesidad de mantener la situación emocional de un /yo0. Este funcionamiento significa falta de discernimiento.
Cuando aparece el discernimiento, la persona ya no act!a con el fin de, por e+emplo, no quedar mal o no disgustar a los demás, o no se gana la vida de una manera contraria a lo que en realidad le gustar&a hacer. Esa persona no tiene ya toda esa serie de impurezas. 5a mente contemplativa acaba con eso porque aparece el discernimiento, y a trav1s del discernimiento las cosas son tan obvias como en el e+emplo del m!sico. ay que observar, observar y observar$ y para ello, nuestra mente tiene que ser contemplativa, porque si no, los pensamientos y las emociones la obnubilan. (on los mismos pensamientos y emociones de siempre, ya que la memoria es repetitiva. (ucede que las personas con quienes nos comunicamos las refuerzan, pues participan del mismo error. ) entonces me digo /<4h= los demás tambi1n piensan lo mismo$ ha y consenso, hay un montón de gente que dice esto, de modo que sin duda es verdad0. ero seg!n mi e*periencia, cuanta más gente coincide en algo, más fácil es que sea falso. #o creamos en el consenso, no creamos en el voto de la mayor&a y todas esas cosas, ni en el ámbito psicológico ni en el pol&tico ni en ning!n otro. >ue haya un montón de gente que diga una cosa no es garant&a de nada. En todas las 1pocas el error ha sido lo más e*tendido, lo más com!n. #o han sido muchos los que han querido salir del sue-o, es decir, salir del error. De modo que hacer lo que hacen los demás es muy mal s&ntoma. "omar como criterio de veracidad el hecho de que muchas personas lo piensen es terrible. Denota una falta de discernimiento total. odemos creer que si los intelectuales dicen algo, entonces eso tiene que ser verdadero. %5os intelectuales' Estas personas han seguido el mismo proceso de tomar lo que dec&an otros y repetirlo despu1s. "ampoco ellos saben lo que es verdad. Contemplar es mirar de una manera nueva, limpia de emociones y de pensamientos. Cuando miras as&, con la mente contemplativa, puede ser que veas cosas que otros no ven y que digas cosas que e*tra-en a los demás porque no están dentro del conte*to convencional$ o puede ser que hagas cosas diferentes de lo que los demás esperan que hagas. %) qu1' Dices cosas que a los demás les sorprende, haces cosas que no están dentro de lo que esperan los demás, %y qu1 importa' 4l principio, la gente se sorprende, pero luego te aceptan como una cosa rara. "e ponen una etiqueta y siguen su sue-o. El sue-o va a seguir. #o importa que alguien en un momento dado se escandalice o se ponga en contra o piense que tu criterio es absurdo. (eguirá en su sue-o y te de+ará a un lado como algo raro. /5o raro0 quiere decir lo que no está en la norma, en lo establecido. ero lo establecido se ha fi+ado desde el pensamiento, y el pensamiento es algo mecánico, incoherente por naturaleza, que no viene de la verdad. or tanto, no hay que tomar nada de eso en cuenta, pues cada vez que lo tomo en cuenta estoy debilitando mi capacidad de contemplar. or eso es tan importante vigilar. ENCONTRAR LA MIRAA INOCENTE 4 lo largo de estas investigaciones vamos a aprender esta vigilancia. #o se trata de a+ustarnos a una conducta determinada o preestablecida que diferencia pecados de virtudes. 4qu& no hay pecados ni hay virtudes. or el contrario, cada ser humano tiene que ver por s& mismo. ) cada vez que hay una distracción, lo que sucede es que, en lugar de mirar desde la verdad, desde el discernimiento, me de+o llevar por los errores preestablecidos. Entonces se va creando un obstáculo, un error, una limitación en mi manera de ver, y se va atrofiando mi capacidad de contemplar. Es importante darse cuenta de esto. Debo partir del reconocimiento de que estoy predispuesto a aceptar lo e*terno como si eso fuera la realidad, y no lo es. or tanto, si ahora me quiero poner a
contemplar, no me queda otro remedio que hacer un camino. 4hora estamos haciendo ese camino. Esto es ya contemplar. El camino pasa por muchas revoluciones, en el sentido de que es revolucionario debido a que no acepta lo com!nmente aceptado. #o tengo que aceptar lo que estaba aceptando hasta ahora. odr&a pensar /8ueno, no aceptar1 algunas cosas, pero otras cosas s&0. ero no, no hay que aceptar absolutamente nada. ) es en esa nada desde donde puede empezar a aparecer la contemplación. Cuando miro sin dar nada por sentado, mirar1 como si viera por primera vez. "engo que de+ar todo lo que he aprendido, tengo que olvidar todo lo que me han ense-ado, todas las astucias que aprend& en la vida, porque cualquier astucia que mantenga me va a impedir ver. (e ha dicho en algunas tradiciones que la mente debe ser inocente, en otras que ha de ser pura y, en nuestra propia tradición, Besucristo di+o que ten&amos que ser como ni-os, lo cual significa lo mismo metafóricamente hablando. Es decir, la mente ha de partir de una mirada limpia, pura, inocente. Eso quiere decir que para contemplar no vale ning!n conocimiento que tenga archivado en la memoria, ninguna astucia aprendida. Esos conocimientos me sirven t1cnicamente para abrir una puerta, por e+emplo, s1 que tengo que meter la llave, y as& otras muchas cosas. Eso es un conocimiento mecánico que se refiere a otra cosa tambi1n mecánica. ero todos los conocimientos psicológicos que tengo, todas esas astucias están impidiendo que mi mirada sea contemplativa$ me ciegan a la verdad. na persona con mente inocente no es necesariamente boba ni est!pida. or el contrario, una persona con una mente muy astuta, muy informada, con una mente muy fuerte, puede ser est!pida porque su mente es estrecha y limitada. na persona con una mente inocente no es est!pida, pues es una persona que está abierta a la sabidur&a. Encontremos esa inocencia en nosotros, encontr1mosla. #o se busca, se encuentra$ porque somos ya inocencia. %Dónde habr&amos de ir a buscarla si no fuera as&' Contemplar será, para nosotros, encontrar esa mirada inocente.
CAPÍTULO 3
Vivir en contemplación es vivir lo infinito DEJAR DE FAR!CAR "UE#O" Lo real, lo que somos, es infinito, ilimitado. En la vida nos encontramos con cosas relativas y particulares que exigen una respuesta, y que nos demandan actuar de una manera u otra. Hay dolor, eso es un hecho. Pero estamos perpetuando el sufrimiento debido a nuestra preocupación por eliminarlo. Estamos haciendo imposible y frustrante la alegría de vivir por nuestra impaciencia en querer conseguirla y retenerla. odo se est! fabricando en nuestra mente. "reemos que hay una realidad exterior a nosotros que es causa de nuestras dificultades y problemas, pero eso no es m!s que una creencia de nuestra mente. #ing$n ser humano que no haya descubierto un instante totali%ador de silencio podr! aceptar que esto es así, porque esta creencia nos tiene totalmente hipnoti%ados. La mente est! hecha de la materia de los sue&os' es y fabrica sue&os. (ólo descubriremos que lo que tomamos por realidad no son m!s que sue&os cuando descubramos de qu) materia est!n hechos y los veamos como lo que son. "uando investigamos de qu) est!n hechos estos sue&os a los que llamamos *nuestra realidad+, los vemos como una fabricación temporal de la mente, es decir, de la mente total y de todos sus refleos que son las personas, cada una de las cuales percibe desde su propio punto de mira que cree $nico. Pero desde el pensamiento no hay nada $nico' todo es repetición tras repetición. - pesar de que pienso y creo que esos pensamientos brotan de mi interior, que son míos, que son mis ideales, est!n repartidos por todas las mentes, y los medios de comunicación hacen que sea m!s r!pida *la repartición+. (on los mismos pensamientos de siempre que aparecen ataviados con distintos ropaes, pero todos, sin excepción, son creados por los mismos deseos y miedos. Experimentar una realidad externa es estar involucrado emocionalmente en lo que sucede. an pronto veo de qu) material est! hecha mi experiencia, pierde realidad. /u) pasa si pierde realidad' dónde quedo yo0 /u) pasa, si este mundo que percibo no es nada y tampoco lo soy yo0 1eemos que el mundo y la persona no sean nada. -br!monos a lo desconocido, a -quello que no tiene limitación y que no est! pensado. (i ya hemos descubierto tan siquiera un instante de infinitud y eternidad sabemos que, comparado con )l, todo lo que estamos considerando como real es pura imaginación. (i estamos tan distraídos que nos parece que no hemos encontrado nunca un momento de realidad, y ello a pesar de que siempre estamos inmersos en la infinita realidad que somos, entonces nos parece que no sabemos nada de -quello, que sólo podemos fiarnos de lo que nos dicen los pensamientos y sentidos. /u) podemos hacer entonces0 "oamos el hilo de la intuición. (i hemos intuido, aunque no sea m!s que un instante, que Eso es aut)ntico... todo el resto puede ser so&ado, pero si he intuido que -quello es la 2erdad, entonces se me ha dado ya una fuer%a para separarme, desprenderme, desapegarme. Est! claro que no me apego a lo que me disgusta y sí a lo que me gusta, )se es el uego del sue&o' y )sa es la llave que hay que abrir. #os costar! trabao hacerlo, ya que nuestra inclinación es huir de lo desagradable y agarrarnos a lo agradable. El mrar de esa manera indica que no comprendo de qu) est!
hecha esa realidad que estoy dando a las cosas. #o comprendo que lo valioso de una situación es que ahí est! el (er, lo eterno, lo infinito que se est! proyectando levemente en un pensamiento, en unas sensaciones. 3 al no comprender, lo distorsiono todo. "uando comprenda, me desenga&ar). 4ientras no lo haga, no me salvar! el que me lo repitan. (ólo viendo por mí mismo de qu) est! hecho ese sue&o que llamamos realidad podr) desenga&arme. (i no es así, no hay posibilidad. Por tanto, hay que estar despiertos, ser conscientes, darse cuenta de lo que est! pasando. enemos una sensación y creemos ser ella. (in embargo, tenemos que ver que esa sensación es algo aeno a nuestra verdadera identidad. La sensación es algo que aparece biológicamente y normalmente nos identificamos con ella sin darnos cuenta de cu!l es su verdadera procedencia. "!$ CREE$C!A" El vivir aut)ntico es otra cosa, no es lo que creemos. Permitidme que os frustre vuestras creencias para que luego la vida no lo haga de una manera m!s desagradable. "ada creencia errónea nos lleva a una frustración, y mientras no hayamos visto la verdad estaremos enga&ados, habr! sufrimiento. Las creencias son pensamientos en los que hemos puesto emoción' son algo muy querido para mí que mantengo y acepto emocionalmente, y no se me ocurre que pueda haber una realidad m!s all! de eso. Puede que en algunos momentos de soledad me diga5 *Esto no puede ser todo, debe de haber algo m!s+. Pero autom!ticamente lo tapo' surgen mil motivos para ello. 4e he parado a pensar si )sa es la vida que anhelo0 -dem!s, luego vendr! la muerte, y ella va a acabar con esa vida condicionada en la que me he entretenido. Lo inteligente sería que descubriera qu) es la vida antes de que se me acabe en pleno sue&o. Lo inteligente es despertar. antos sentimientos altruistas que mantengo, al no estar fundamentados en la verdad, son en realidad un obst!culo. (i quiero el despertar de los dem!s seres humanos, el primer paso que debo dar es despertar yo. odos somos uno, no existen otros fuera de mí. (olamente existe la conciencia, la cual se expresa en esta diversidad de formas. El amor es algo natural, no es ni un privilegio ni un premio. "uando se reconoce la unidad totalmente, no puede haber separación, no hay odios. "uando el reconocimiento es parcial, es un sentir oscuro, una sospecha. -ntes de ver la unidad puede que haya un sentimiento de amor, pero est! distorsionado por todos los errores de la mente ignorante. Entonces, desde dónde ayudo0 1esde mi propia actitud errónea y limitada0 En nuestra tradición se ha propuesto como ideal el volcarnos hacia los dem!s, sin darnos cuenta de que no hay ning$n otro. (ólo hay el aquí y el ahora' sólo la presencia real' sólo lo divino. (e nos propone que nos dediquemos a los dem!s y no a lo divino. 1esde la verdad, eso no se entiende. /ui)nes son los dem!s0 /ui)n soy yo mismo0 Eso no lo he descubierto todavía. Primero tengo que descubrir de qu) est! hecha toda esta realidad. 1ebo dear de creer lo que afirma la *opinión p$blica+. enemos que abandonar nuestras creencias erróneas ahí donde se est!n originando5 en la mente. #o se trata de hacerlo con el cuerpo, ni es cuestión de tener sentimientos altruistas o sensaciones. Eso son experiencias que una entidad que no cono%co, llamada *yo+, tiene con otras entidades tambi)n imaginadas y que igualmente descono%co de dónde vienen y de qu) est!n hechas. engo, por tanto, que encontrar ese *yo+ ahí donde est!5 en la mente. Hay muchos seres humanos que est!n en el cora%ón' pero )se es un
lugar donde se originan conflictos, porque el cora%ón siente ciegamente. El cora%ón debe colocarse mirando hacia la inteligencia, hasta reconocerse una sola cosa con ella. En realidad, sentir y ver son uno. Esta unidad se hace al contemplar. Esta energía, este motor potente que llamamos cora%ón, tiene que mirar a la verdad. El motor para comen%ar el camino de la contemplación es el amor a lo verdadero, es el amor a 1ios. Eso es lo que impulsa nuestra vida. #uestra tradición dice que amemos a 1ios sobre todas las cosas' sin embargo, no parece que eso se practique. Por qu) no se hace0 Porque es absurdo que alguien que crea que lo 6eal es lo que viene de las personas o de los sentidos se vaya a poner a amar una idea, un concepto, algo que no se ve, una utopía. Hay que explicar, comprender y ver qu) es 1ios y qu) son todas las cosas, y entonces no hay ya necesidad de eercer la voluntad. -l leer los libros que han escrito algunas personas religiosas, a partir de este desconocimiento de lo real, a partir del desconocimiento de lo que es su propio ser, surge una gran compasión al ver cu!nto esfuer%o de voluntad se aplica en una dirección equivocada. 7"u!nto sufrimiento in$til por no comprender8 #o se ha entendido que no hay ning$n mandato externo que nos diga que amemos a 1ios sobre rodas las cosas. Primero tengo que descubrir a 1ios, y entonces el amor surge espont!neo, no por voluntad. Entonces ya no hay necesidad de creer en el amor porque se es amor. "uando un ser humano contempla lo real en el vacío del silencio de su conciencia, descubre la realidad y ve cu!l es el camino de lo divino. 3 no puede evitar amar porque el amor es consustancial a su propia naturale%a. "uando se mantiene ahí y lo va comparando con lo que aparece en la pantalla de la mente y de lo sensorial, se da cuenta de la diferencia y empie%a a discernir. 2e que aquello que aparece en la pantalla mental no es real' y naturalmente, ama lo que es real y eterno de manera espont!nea y serena, en el silencio de la conciencia despierta. #o debemos preocuparnos de lo que vamos a hacer, sino de mantenernos despiertos, es decir, de tener la mente contemplativa. Lo que act$a en el vivir es la vida misma' es la inteligencia de la vida lo que act$a a trav)s de todos estos personaes que aparecen en el tiempo. 3o creo que act$o, pero no es verdad' hay energías por todos lados que me est!n empuando a la acción, y lo hacen de acuerdo con mi visión y mi comprensión m!s o menos limitadas. Pero ese *yo+ que se fabrica en el pensamiento no es el actor de esta vida. La vida se mueve por sí misma' tenemos que observarlo. El personae es so&ado, mientras que la vida es la manifestación en el tiempo de aquello que es eterno. 4e debería preguntar5 1ónde est! mi identidad en todo este uego0 /ui)n est! viviendo0 La vida es la que vive. Lo absoluto, lo inmanifestado, lo eterno, lo que realmente soy se manifiesta en la temporalidad como 2ida. (oy todo, no hay nada separado. El pensamiento establece la separación de acuerdo con las formas que aparecen en el tiempo. #o puedo comprender que puedo vivir desde el infinito, desde la totalidad, no siendo nada en realidad. (er todo es no ser nada. Es ser desde otro lugar y asistir a la manifestación como la representación de eso que soy. (ólo por el amor contemplativo ir) unific!ndolo todo y me quedar) solamente en la verdad que intuyo en cada instante, e ir! desapareciendo la lucha que se produce en la separación. engo que volver a mi origen, volver a hacer silencio en mi conciencia, y desde ahí ver) Lo9que9Es. (er) todo en expansión' pero ese punto misterioso que origina todas las cosas consiste en el darme cuenta aquí y ahora. :se es el punto en el que se
concentra toda la dispersión, todo lo que se había expandido hacia fuera en formas creando realidades en el sue&o. En este punto se concentra todo' y es la entrada a lo infinito porque se abre sin límites. "ada cosa que creo ser, todo aquello que amo, lo crea y lo ama mi ser infinito, lo que realmente soy, Lo9que9Es. *(er+ y *soy+ no son diferentes. Esto el pensamiento no lo entiende. "uando lo vea ser) el verdadero amor en libertad. enemos que descubrirlo por nosotros mismos en ese estado atemporal del aquí y el ahora en el que reside la lucide%. LA V!DA L!ERADA La vida es organi%ada y todo lo organi%a' va poniendo a cada persona las lecciones adecuadas a las preguntas que )sta va haciendo a la vida. "uando el ser humano est! dormido, est! siempre preguntando en una oración permanente. -unque muchos rechacen la palabra *oración+, orar es lo que hacemos constantemente. (eg$n sea nuestra oración, la vida nos proporciona la lección adecuada. Este mecanismo nos permite comprender cu!ndo nuestra petición es errónea. "uando nos llega la lección nos disgustamos. Pues bien, esa lección es lo meor que nos podía pasar. Lo meor para qu)0 Lo meor para comprender. Lo meor no es mantenernos en los h!bitos ordinarios viviendo una vida inaut)ntica' no es vivir so&ando. Lo meor es comprender, a fin de salir del enga&o en el que estamos' y para ello, la vida en cada momento nos est! presentando un reto, una lección, un enigma por aclarar. #o es bueno que nos evadamos de lo que se nos presenta mientras que nos dedicamos a fiarnos en las vidas de otras personas, ya que miramos esas alternativas desde nuestra perspectiva y esos otros lados tienen sus propias lecciones que no vemos. "uando vivimos así, nuestros sue&os se entrela%an de tal manera con los de los dem!s que constituyen un caos de sue&os compartidos. Entonces el amor se ausenta del argumento de la historia. "uando amo desde ahí no tengo m!s que miedos y deseos. (in embargo, solemos fabricar nuestro vivir desde ahí. "ómo es la vida vivida desde el infinito, sin apegos0 La vida liberada no es algo que est! leos de mí, pero hemos volcado nuestra atención hacia afuera a tal grado que nos parece que est! muy leos. -fortunadamente, esa visión de leanía es so&ada e irreal, y aunque nos pare%ca que la realidad y lo verdadero est! leos, est! siempre aquí y ahora' estoy en ello y vivo a partir de ello, aunque no me d) cuenta. 2ivo a partir de ese nivel infinito. 1igamos que 1ios est! aquí y ahora. Lo infinito, lo eterno, lo sagrado, la realidad total est! siempre aquí. 4e he aleado mucho, pero eran sue&os nada m!s. #o me he podido mover de -quello, porque es lo $nico que hay. En un instante se pueden caer las ilusiones. 1epende de la fuer%a de la lucide%. (i pienso que no tengo lucide%, que no soy inteligente, me pongo un título y ahí me quedo. (i no hiciera caso de mis pensamientos, si no me atribuyera ni cualidades ni defectos, estaría simplemente ahí, dispuesto, d!ndome cuenta. En verdad, soy la inteligencia total en manifestación. (oy pura inteligencia. 3 si no me lo creo0 Pero entonces, cómo es que me doy cuenta de trivialidades0 -unque sean cosas limitadas, lo importante no es el obeto, que es una fabricación imaginada' lo importante es que me doy cuenta. -hí est! la inteligencia que soy. Puedo seguirle la pista y decir5 *:ste es mi tesoro, voy a quedarme aquí+. Porque todo lo dem!s es imaginario. Lo $nico verdadero, lo real es esta lucide%. #o puedo decir que no tengo ni inteligencia ni lucide%, porque me doy cuenta de que act$o con lucide% y con inteligencia. El que haga tonterías una y mil veces no significa que no sea inteligente. El proceso de la inteligencia es así5 aunque est) hecho de pura
inteligencia y amor, puedo entretenerme y creerme que soy cualquier cosa y actuar como si lo fuera. Pero si no me sumero en creencias, si silencio el pensar, abierta mi mente a lo infinito, contemplo, y la contemplación misma es ya vida liberada.
CAPÍTULO 4
El camino donde desembocan todos los caminos CONOCERME A MÍ MISMO
Solemos dar por hecho que nos conocemos a nosotros mismos, pero eso no es cierto. No sabemos quiénes somos. Partiendo de la base de que me conozco, quiero conseguir cosas, afirmarme, amar, ser amado. Sin embargo, desconozco mi verdadera identidad. La vida que se está creando en torno a mí, la que vo haciendo, la hago sobre este desconocimiento, sobre esta ignorancia de mi verdadera identidad, así es normal que esté llena de carencias, conflictos, incomprensi!n, dudas toda clase de malestares. "l desconocer mi identidad verdadera, es natural que todo aquello que hago desde una identidad falsa e imaginaria, es decir, todo lo que vo haciendo a partir de lo que o creo que so a partir de lo que o creo que es la realidad, esté trucado, tenga una base falsa, sea ilusorio. #sto creando una vida ilusoria a partir de un o ilusorio, a partir de lo que creo ser. #sto requiere investigar e investigar. $"caso sé lo que so% &reo que so unos recuerdos, e'periencias, títulos, nombres( creo que so pensamientos, sentimientos, emociones. Pero todo ello pasa me de)a una sensaci!n de constante cambio. Si observo mi vida, veo que esto actuando a partir de un desconocimiento de lo que es real, de lo que es mi verdadera naturaleza, ese desconocimiento de mi identidad crea una cantidad de problemas psicol!gicos que in*tilmente quiero resolver con esfuerzo, desarrollándome, comparándome, tratando de conseguir algo+ voluntad, concentraci!n mental todo lo demás. "cepto métodos psicol!gicos, me creo todas las teorías las aplico. Son e'plicaciones de lo aparente, las cuales pueden tener alg*n sentido l!gico o pueden coincidir más o menos con nuestra historia personal. Sin embargo, los psic!logos las aplican siempre, coincidan o no. Piensan que tengo conflictos debido a que en la infancia me pas! una cosa u otra, o me lo creo a pesar de que puedo observar que a otra persona también le pas! aquello mismo no tiene ese conflicto. Si observáramos detenidamente, veríamos hasta qué punto las e'plicaciones psicol!gicas de nuestra vida están creadas por el pensamiento. Son teorías que se han hecho observando una e'periencia aplicando esos mismos moldes a todo el mundo. Puede que alguna vez coincidan los hechos con lo predecible, pero no es cierto que o deba aplicar una teoría como si se tratase de la verdad. No ha teoría para conocerme a mí mismo. Siguiendo unas teorías montadas sobre otras teorías, unas ideas desarrolladas sobre otras ideas, unos conceptos edificados sobre otros conceptos, no vo a conocer lo que verdaderamente so. na e'plicaci!n l!gica no me descubre lo que so. -uizá alguna zona de mi pensamiento se quede tranquila porque le han dado una e'plicaci!n, pero permanecerá un descontento general en la persona( porque. de alguna manera, se siente le)os de su verdadera naturaleza. Las circunstancias de mi vida son triviales, no tiene ninguna importancia el que racionalice o no lo que me sucede. #so no va a cambiar mi verdadera comprensi!n de lo que la vida es.
#l conocerme a mí mismo es otra cosa, es una vivencia directa. Por eso, para llegar a descubrir mi identidad necesito un método que no se parece en nada a los demás métodos( es un método que no es mecánico ni pensado. Para descubrir lo que so no necesito acercarme a nada a)eno o desconocido, s!lo tengo que abandonar el funcionamiento equivocado que ha en mi mente( al deshacerse este funcionamiento, aquello que queda es Loque#s. La sabiduría no es adquirir algo nuevo, sino quitar lo falso. "dquirir informaci!n nunca ha sido sabiduría, aunque por error lo creamos así. Podemos estar mu informados no tener nada de sabiduría( porque vivimos llenos de conflictos, sin comprendernos a nosotros mismos ni a los demás, aunque nos sobre por todas partes informaci!n. No es conocimiento técnico, religioso o psicol!gico lo que requiero para descubrir lo que so. #l camino *nico en el que desembocan todos los demás es el de descubrir mi propia identidad( ello se logra de una manera creativa. "l ser creativa, no ha ahí ning*n molde, lo tengo que ir descubriendo o mismo. $/ c!mo comienza este camino que tengo que hacer o solo% #ste camino comienza cuando nace una fuerte necesidad de descubrir la verdad de todo lo que me rodea de esto que creo ser. #ntretenido entre las cosas, queriendo unas realizando otras, no esto dándome cuenta de c!mo funciona mi mente ni qué es lo que está pasando. #n esta inadvertencia se están acumulando posos que destruen mi visi!n, esto cargándome de pensamientos que luego utilizo como si fueran mi verdadera manera de ser. / luego, es a eso a lo que llamamos 0lo que o so1. "sí, mi carácter, mi personalidad están hechos de retazos de todo lo que he acumulado por inadvertencia, por no darme cuenta del funcionamiento de mi mente.
PASIÓN POR LA VERDAD #l primer punto que necesito es la vocaci!n intensa de vivir la verdad. Si no tengo esa vocaci!n no ha nada que hacer. 2a que intensificar esto, la primera fuerza de arranque( porque si no, huelga todo. #sta llamada, esta necesidad imperiosa, este amor a la verdad es una gran pasi!n, porque el amor a la verdad no es una cosa fr ía, como podría parecer. Por el contrario, es una intensa pasi!n ante la cual todas las demás pasiones conocidas son insignificantes. #sta fuerza, esta pasi!n por la verdad es el arranque, el comienzo mismo del camino. Si está ahí, el camino se irá haciendo( si no, no se puede hacer nada hasta que brote, s!lo tener paciencia. #ste amor a la verdad no tiene que ver con la edad, la profesi!n o la situaci!n econ!mica o social. #s independiente de eso. 3odo ello pertenece a la obra de teatro que esto interpretando, eso no es lo que so. Si considero que son más importantes esas circunstancias que descubrir qué es lo que so, habré cerrado el camino. Las circunstancias son historia la historia está en el tiempo, no hace falta ser profeta para saberlo. &uando quiero retener algo, no lo puedo hacer, está pasando( como todo lo que sucede, pasa. 4i e'istir es transitorio, es pasa)ero en el tiempo. Pero o no so eso, no so lo que está apareciendo en la historia por tanto, no so esa historia( tengo que darme cuenta de ello. Si esto completamente identificado con esa historia, ni siquiera se me podrá pasar por la cabeza el hecho de que pueda ser algo más. Lo que so está por encima, está más allá de mi funci!n de lo que sea que haga. Para tratar de me)orar mi historia podré recurrir a la psicología, a las tradiciones religiosas, a las actividades sociales. Si es así, no debo enga5arme+ nada esto haciendo en el camino de lo esencial, de lo que es auténtico directo+ el descubrir qué es lo real, qué es la realidad.
Para saber qué es la realidad tengo que saber quién es éste que quiere saber. 6ebo descubrir qué es lo que ha de real en mí, qué es lo que so que es previo a todo. 6escubrir mi verdadera identidad es algo enormemente creativo transformador. &onforme vo descubriendo que no so lo que parece, se abren dentro de mí unas posibilidades inmensas de comprensi!n, amor, creatividad, belleza, paz, armonía, claridad, nitidez. 3odo eso está ahí en potencia, eso es lo real, eso es por lo que nos movemos. Nuestra tradici!n dice+ 0en 6ios estamos, en 6ios nos movemos1. "quello por lo que nos movemos, lo que nos está empu)ando, eso que es desconocido para nosotros, eso es lo real. 4iremos con atenci!n cuidado. Porque para poder aceptar en un momento dado que o no so ese persona)e que dura un tiempo que no tiene mucha trascendencia, he de estar atento viéndolo en el funcionamiento de mi vida. Si en un momento dado descubro que eso es verdad, que el persona)e es ciertamente ilusorio, entonces a no se trata de un pensamiento más. La verdad está viva tiene que crecer, tiene que abrirse un espacio para empezar a construir una vida nueva transformar el vivir. "brirse a la verdad no es una actividad más. #stamos arriesgándonos a una revoluci!n, a que se acabe el sue5o( pero también a perder todos los miedos, dependencias, culpabilidades, apegos. 3odo esto va a ocurrir en el camino. $3enemos suficiente amor pasi!n por la verdad para comenzar esta aventura% Si no es así, $qué puedo hacer% Lo que puedo hacer es leer un libro de vez en cuando, escuchar a alguien que haa vivido esa aventura, ir dándome ánimos... poco a poco irá creciendo en mi interior esa necesidad. Si es suave, la escucharé de vez en cuando como una cosa secundaria, pues para mí lo primero será lo material 7dinero, cuerpo, familia, etc.8 s!lo después puede ser que escuche esa peque5a llamada. #sa débil llamada no tendrá todavía fuerza suficiente para abrirme paso a lo nuevo( pero cuando vaa cobrando suficiente intensidad, cuando sea una pasi!n que en todo momento siento, entonces a no será algo personal, porque con ella todas las situaciones personales se terminan, me iré dando cuenta de que esas situaciones no son reales. " medida que vaa viendo una otra vez la irrealidad de lo que pienso sobre mí sobre la vida, esa pasi!n se irá tornando más más poderosa. Puede que nos preguntemos+ $-ué ha de verdad en todo esto%, $qué es esa identidad%, $qué es real%, $ha algo real%, $será que no ha nada que sea real% Pero esta posici!n escéptica no es correcta, porque si no hubiera nada real no habría tampoco apariencias. 9ivimos apariencias porque ha una realidad que las proecta. #stamos limitados porque ha una plenitud, cuando falta esa plenitud se siente la limitaci!n. 3enemos deseos, esos deseos vienen precisamente de esa plenitud que somos, aunque no seamos conscientes de ello. 3odos los anhelos que tenemos nos están diciendo que ha algo más+ el origen de donde ellos provienen. 9erdaderamente, el camino real, el camino auténtico, nos está llamando desde todas partes. Nos parece que no sabemos d!nde encontrarlo, que nos perdemos entre tantas cosas que se nos presentan en la e'istencia. Pero si miramos bien, con la pasi!n de descubrir la verdad en cada cosa, en todas las situaciones de la e'istencia, en los sentimientos, pensamientos, ideas, relaciones con los demás, sufrimientos, alegrías, en todo lo que vivimos, descubrimos que todo nos está llamando. &reemos que nos llama lo e'terno, pero eso se presenta s!lo para recordarnos su limitaci!n, para que veamos que
viene de alg*n lugar. Nos recuerda que ha un foco, una potencia inmensa que lo está proectando. "mo a las personas porque, en el fondo, noto que so amor, noto que esta separaci!n no es real. Noto que lo real no es fragmentado. "mo porque esto amando al ser. 4e entretengo en peque5os amores me quedo atrapado tratando de conseguir esto o aquello. Pero es por amar a la belleza del ser por lo que quiero rodearme de cosas bellas. :usco lo bello porque amo la belleza, que es el refle)o de lo real. Loque#s nos está llamando desde todos los lugares. "sí que solamente ha un camino inteligente+ darme cuenta, sin entretenerme en las formas ni en lo que aparece. 6arme cuenta de d!nde surge mi necesidad de amor, de d!nde surge mi inteligencia, de cuál es el origen de todos mis deseos, es liberador. Pero no es una b*squeda te!rica. Por el contrario, en esta investigaci!n tenemos que estar haciendo el camino. No investigamos para pensarlo, porque pensar no sirve de nada, sino que investigamos para verlo, para darnos cuenta.
LA APARICIÓN DEL DISCERNIMIENTO Podemos descubrir lo que somos en cualquier momento de nuestra vida. $-ué es lo que ahora se manifiesta con este deseo, sufrimiento, tristeza o alegría% $-uién está ahí, detrás de esa e'presi!n% ;bservo una emoci!n, al observarla la veo como algo separado hasta que se disuelve. #s una energía que ha surgido del mismo modo que surgen las olas en el mar. ;bservo la emoci!n puedo mantenerme ahí despierto, dándome cuenta de cuál es su base. $Por qué tengo miedo%, $por qué alegría%, $de d!nde surgen% Siento sufrimiento porque me falta algo, noto alegría porque esto descubriendo algo que me recuerda a "quello, siento la sensaci!n agradable de algo estético porque me está recordando la belleza del Ser. #n un momento dado puedo soltar la identificaci!n con el pensar para s!lo ver lo que ha ahí, más allá de lo que aparece en el tiempo, de la situaci!n, de las formas, de las personas, de lo que esto habituado... ;bservando observando se van caendo los hábitos del pensamiento. 2aciendo esta observaci!n silenciosa, empieza entonces a aparecer algo nuevo en mi conciencia+ el discernimiento. #s algo nuevo, algo que no conocía a que creía que todo se fraguaba en el pensar. Si observo serenamente, me do cuenta de lo que está sucediendo( veo que aparece una capacidad nueva, especial. #s la capacidad de la luz del Ser de iluminar por sí misma, de descubrir por sí misma la verdad. "hora seguramente la estamos descubriendo, la estamos viviendo. #sa capacidad es la capacidad de ver la verdad directamente( no verla porque lo diga una persona, ni por análisis ni razonamiento, sino con una total evidencia, dándome cuenta con total certidumbre de que eso es así. #sto requiere fundamentalmente no estar en el pensamiento, a que en él no e'iste la posibilidad de ver la verdad directamente. #n este momento, esta investigaci!n se hace para aprender a ver la verdad, para tener discernimiento. No tiene por ob)eto recoger informaci!n, guardarla en la memoria aplicarla en un momento dado, que es lo que habitualmente hacemos. #n el traba)o de autoconocimiento las cosas no funcionan de esa manera. #sta investigaci!n tiene como finalidad precisamente el poder ver la verdad directamente. #l ver directamente es algo nuevo. 3odo el mundo cree tener discernimiento, pero no lo tiene casi nadie. &reemos que sabemos lo que es verdad o no, pero eso no es cierto a que nuestras opiniones se basan en repeticiones de la memoria.
La capacidad de ver directamente es algo nuevo precioso. #s una )oa. #n la tradici!n de la
LA LU !UE CONTEMPLA #sto dedicando mi vida a concienciar a las personas de esto, de que son una luz por ellas mismas, de que pueden mirar directamente. No hago otra cosa. No intento persuadir a nadie para que siga una tradici!n, ideología o grupo ni para que haga algo o de)e de hacerlo. Siempre me pareci! e'traordinariamente importante que los seres humanos pudieran ver por sí mismos. "lgunos me dicen que no pueden. 2e observado que cuando uno no puede ver por sí mismo surgen toda clase de problemas. #ntonces se sigue a alguien, se hace lo que aparece en los medios de comunicaci!n o lo que otros dicen que ha que hacer. #n esos casos se act*a de manera moral o inmoral, seg*n las circunstancias( pero eso no es lo esencial. Lo primero esencial es ver la verdad. La actitud correcta adecuada brota entonces inmediatamente de manera espontánea. &uando so una luz por mí mismo, cuando puedo iluminar con la propia luz que so, la vida se va haciendo creativa cada instante del vivir muestra su verdad. No necesito normas morales, porque no se me ocurriría hacer da5o a ning*n ser humano una vez que a me he dado cuenta de que no esto separado de él. #n lo profundo de mi identidad no ha separaci!n entre las personas o entre distintas formas de e'presi!n de la misma realidad. No tendré que esforzarme en amar ser amado, porque el estado de lucidez está acompa5ado siempre de amor( basta con estar despierto mirar la vida con los o)os del discernimiento abiertos. La mente se puede ir tornando contemplativa. &ontemplar implica separarse del pensamiento a fin de ver lo real. #l acto contemplativo es a la vez una iluminaci!n un estado de amor. "mbos no se pueden separar. &uando el sentimiento de amor está separado, entonces es ciego, está cargado de errores cae en actuaciones egocéntricas( es natural que sea así. &uando mediante la contemplaci!n se produce el desprendimiento de mi persona , por tanto, el de las otras personas a la vez, entonces descubro un estado de unidad de conciencia. Solamente ahí brota el "mor. #n cambio, en la separaci!n s!lo e'perimentaré alg*n sentimiento de afinidad o rechazo al moverse las emociones a las que llamo amor pero que no son "mor. #l amor aparece en un estado contemplativo. &uando la mente está iluminada, es decir, cuando me do cuenta, eso es amor. "ntes de vivirlo no me lo creo, porque esto acostumbrado a percibir con el pensamiento, éste es una mera representaci!n, es árido no conoce la plenitud. &uando me do cuenta percibo con todo el ser, desde lo profundo aparece esa luz que me hace ver. #sa percepci!n luminosa está siempre acompa5ada de un estado de serenidad, plenitud, amor. "sí, amo todo aquello de lo que me do cuenta. La situaci!n puede ser agradable o desagradable, pero en ning*n caso
de)aré de amarla. "mo la vida en todas sus manifestaciones( no pierdo la capacidad de )uicio, pero la mirada no está puesta en buscar lo trivial. La mirada verdadera ama todo+ lo agradable lo desagradable, lo bueno lo malo. La mirada verdadera no hace separaciones( pero al mismo tiempo que lo ama todo, está libre, desapegada. Nos cuesta creerlo, porque pensamos que el amor es apego. Pero cuando de verdad ha amor, no se puede retener nada, se ama el movimiento de la vida, el que todo esté cambiando pasando, porque todo se ve como un bello refle)o de "quello que es eterno e inmutable. La contemplaci!n es el camino de todos los caminos, el amor es la consecuencia natural de contemplar.
CAPÍTULO 5
La aventura de vivir con lucidez PENETRAR EN LA LUCIDEZ TRAS LAS PALABRAS Comparada con la belleza del despertar a la lucidez, cualquier aventura palidece hasta diluirse. Es la única vivencia que permanece entre los cambios constantes de la temporalidad. Empezaremos por investigar cómo adentrarnos en este estado lúcido desde el que comenzaremos estas reflexiones. No es algo difícil, por cierto, esta penetración en la lucidez. o complicado, por el contrario, es el mundo que surge a partir de las diferentes maneras de distraernos, ! esto lo hemos aprendido a hacer mu! bien. a vía nueva, la inusual, pero sencilla ! directa, consiste simplemente en de"ar la distracción. #uede ser que nos distraigan las im$genes o las percepciones sensoriales, pero los pensamientos ! hasta las palabras nos distraen aún m$s ! de manera m$s imperceptible. En efecto, si en estos momentos nos limit$semos a entender el significado de las palabras ! a relacionarlo con nuestros pensamientos, no saldríamos del lugar habitual en el que nos encontramos, donde pensamos, comparamos, "uzgamos. % no descubriríamos entonces aquello en que consiste la gran aventura de la existencia& la entrada a la lucidez. 'e pueden entender las palabras ! no estar lúcido( se pueden comprender los conceptos por comparación con otros del pasado ! hasta imaginar nuevas combinaciones de conceptos !, sin embargo, no estar lúcido. #odría ser que estuvi)ramos haciendo un enorme traba"o en esa zona superficial donde se piensa, comparando ideas, acept$ndolas o rechaz$ndolas según unos u otros criterios interpretativos sin que nada hubiera allí de lucidez. En realidad, la claridad luminosa no se adquiere mediante ningún esfuerzo voluntario, pues no se trata de algo que a*adimos a lo que !a conocemos. a lucidez es lo que somos detr$s o deba"o de todo lo que a*adimos al pensar. +antenerse lúcido consiste, por tanto, en soltar todo lo que creemos, lo que nos han ense*ado, lo que oímos a trav)s de los medios de comunicación, lo que estudiamos de nuestra tradición cultural o de otras, etc. 'i prescindimos de todo esto que hemos ido adquiriendo, nos encontramos en el silencio lúcido, en la mera capacidad de darnos cuenta-. Creemos ser todas esas cosas que se han ido instalando en nuestra confusa idea acerca de la realidad. emos dado por hecho que somos un cuerpo con el que tenemos un estrecho contacto a trav)s de las impresiones del sistema nervioso en el cerebro, ! luego unas emociones ! unos pensamientos cambiantes de los que nunca indagamos el origen. /Cu$n impermanente ! confuso es todo lo que imaginamos ser0 a identificación con tantas cosas relativas es causa habitual de frustraciones. No estar lúcido, es decir, estar dormido es precisamente caer en identificaciones imaginarias, no verdaderas. Es so*ar que estamos viviendo, que estamos en la realidad sin estarlo. #or el contrario, ser lúcido es haber vuelto al estado originario en el que simplemente somos la luz que ve. % )sa es nuestra única posibilidad de mantenernos conscientes. #uede ser que a muchos de nosotros nos parezca eso poco. #uede que imaginemos la realización como algo m$s satisfactorio. #ero al avanzar por la lucidez no ha! garantía
previa de que conseguiremos algo. En verdad, sólo se descubre ese luminoso camino al no desear nada. 1ntes de desenga*arse de los deseos no es posible esta penetración en la luz, por el simple hecho de que estaremos demasiado entretenidos en conseguir unos ! otros ob"etos, ! nuestra energía se consumir$ en esa actividad agotadora. a ambición de ganar ! el miedo a perder tendr$n absorbida a la persona por completo. 2o hemos observado !a3 LA ERDAD! ESE ESTADO LU"INOSO En la lucidez nada buscaremos ! nada aceptaremos. 'ólo la verdad. #ero la verdad no es lo que pienso o lo que alguien dice. No es lo que se est$ diciendo ahora tampoco. a verdad es un estado de lucidez que surge en mi conciencia ! por el cual puedo ver todo tal como es. 'i a lo largo de estas investigaciones me encuentro con la verdad, no ser$ mía ni de nadie. Es todavía m$s simple que eso& habr) accedido a un estar lúcido desde donde contemplar) con claridad cualquier situación. o que ahora estamos haciendo es movilizar la mente para que ese estado sur"a del fondo de nosotros mismos, donde permanecía oculto por los pensamientos. a! disputas entre los que mantienen unas u otras verdades. 'e negocia con eso a lo que se ha dado el nombre de verdad- cuando no se trata m$s que de creencias u opiniones. 1quello que se revela por la lucidez es evidente por sí mismo( no necesita demostraciones, ! aquí no las haremos. o que hacemos aquí es movilizar las distintas zonas mentales( las sacudimos de manera inesperada para que se desprendan los errores ! la mente quede en su desnudez, en su pura naturaleza luminosa. 4nvestigamos con el fin de que se produzca un descubrimiento de la verdad en la lucidez. os que hemos investigado a solas o "unto a otros investigadores sabemos que no conseguimos nada en particular con ello. 'e trata de algo completamente distinto. 1l ampliar la conciencia est$ cre$ndose la verdad nueva en cada momento, en cada apertura a la lucidez. 'e deshacen los pre"uicios que est$bamos tomando por realidades, las creencias heredadas ! repetidas sin reflexión, las fantasías que brotaban inconscientes de emociones como los miedos o las ambiciones. 5odo lo relativo, todo lo que es creado por el pensamiento, se deshace en la visión lúcida ! aparece la luz. Esa inteligencia o foco de luz va iluminando realidades según el estado de conciencia del que mira. DOR"IR O DESPERTAR 6amos por hecho que el estado de vigilia en el que nos encontramos al despertar cada ma*ana es la realidad. #ero si observamos con atención, veremos que esa noción de realidad no es consecuencia de la lucidez sino, m$s bien, de la falta de lucidez. En efecto, a lo largo de todo el día nos vemos por completo programados. Estamos programados por los sue*os que recibimos ! comunicamos en las relaciones conscientes e inconscientes de un vivir mec$nico. En verdad, ese estado no se diferencia mucho de las enso*aciones particulares que vivimos en la noche mientras dormimos. 'er lúcido es algo totalmente diferente a lo que solemos llamar estar despierto- o a lo que acostumbramos denominar estar atentos a algo- o estar concentrados en algo-. 'i me distraigo en una cosa que no es el traba"o, me recrimino a fin de concentrarme en lo que se supone que debo hacer. #ero puedo estar concentrado en el traba"o ! no estar lúcido. 7uiz$ est), por el contrario, repitiendo mec$nicamente lo que siempre hice.
#uede que sea mu! eficiente, incluso puedo ser un adicto a la eficiencia en el traba"o, porque me he habituado a la actividad incansable ! a buscar la obra perfecta. % ello est$ bien con relación a lo que hago para los dem$s, es decir, a mi aportación social. No obstante, todo eso puede hacerse sin estar lúcido en absoluto. o comprobar) cuando un día acabe con una tensión crónica o si en un momento dado tomo conciencia de no sentirme en paz conmigo mismo, sereno, realizado ! feliz, sino lanzado en carrera imparable al exterior, alienado de mi ser real. os dem$s quiz$ no reconozcan mis esfuerzos por ser eficaz ! puede que me invada el des$nimo. En síntesis, no consigo las metas que me había propuesto en el mundo imaginario de lo pensado ! por las que me esforzaba. #or tanto, me frustro o me deprimo. uego no estaba lúcido, sino dormido( estaba eficiente ! esforzadamente dormido. +uchos dormidos siguen a otros dormidos. o vemos a menudo. +uchas personas en el sue*o adquieren la habilidad de manipular a otras dormidas tambi)n. Ni el que manipula ni el que es manipulado est$n lúcidos. a persona con lucidez no necesita manipular, est$ libre de todo ello. No requiere tampoco que las cosas sean de una manera o de otra, o que las personas respondan a sus expectativas. En verdad, la persona lúcida no necesita nada. 1l escuchar esto, es probable que digamos enseguida que necesitamos comida, un techo, afecto ! muchas cosas m$s, ! no sólo pan ! agua como se servía a los esclavos de galeras en otros tiempos. 1lgunos partidarios de la austeridad piensan que es sabiduría limitarse a esos límites mínimos para subsistir, pero esto no es así. El con"unto psicofísico que denominamos persona tiene muchas necesidades. En un momento de la vida ser$n afecto o amistad( en otro, un via"e o un refugio material donde protegerse, ! no sólo de la lluvia sino de la sociedad, que arrastra con sus costumbres ! roba la intimidad. Cada nivel de este microcosmos que es el ser humano tiene unas demandas adecuadas que varían según la pureza ! la claridad de la mente. 1l afirmar que la persona lúcida no tiene necesidades no esto! diciendo que ha de vivir siempre en completa austeridad. 'e ha idealizado ese aspecto, que es sólo uno m$s de los muchos a los que la vida nos somete en nuestro aprendiza"e. 7uiz$ alguien pase por un periodo de austeridad durante un tiempo, o quiz$ no. a imagen de una persona austera como una persona bondadosa no es m$s que una imagen. 'i alguien quiere adaptarse a una de esas im$genes ! busca amoldar su vida a ella, puede hacerlo. #ero que no se enga*e cre!endo que eso es sabiduría. a lucidez no consiste en seguir una forma de ser ! quedarse atado a ella, sino en estar libre de toda forma particular. 7uien se amolda a una idea tiene que estar pendiente de responder a ella en las variadas situaciones que le presente la vida, forzando ! distorsionando los hechos. % eso es esclavitud, no la libertad de la sabiduría. a persona despierta no se siente impelida a seguir ninguna idea o imagen preconcebida. #or eso decimos que no ha! en ella necesidades. LA IDA ES UN "OI"IENTO INTELI#ENTE a vida, que es inteligencia en acción, se ocupa de que cada persona tenga cubiertas las necesidades adecuadas a lo que est$ aprendiendo en cada momento. No se me escapa que esto le parecer$ fantasioso al pensamiento, el cual est$ condicionado a la lucha por la existencia. 'in embargo, est$ escrito en los Evangelios, los cuales se supone que fueron
o son la inspiración de tantos cristianos. #ero no parece que muchos ha!an creído lo que se lee allí. #or e"emplo, aquella comparación con los lirios del campo ataviados con bellos vestidos sin necesitar preocuparse por ellos mismos. /Cu$nto m$s el ser humano ser$ cuidado por la inteligencia de la vida0 o que sucede es que las cosas no son como el pensamiento las imagina. 1costumbrado a luchar por conseguir lo que necesito, me imagino que, si no me preocupara, daría rienda suelta a los deseos de no traba"ar ! de pasar el tiempo en diversiones. Nada m$s le"ano a eso que la lucidez. o que en la lucidez sobrevendr$ ser$ una actitud en la que no tendr) el deseo o la ambición de actuar( pero no por eso de"ar) de hacerlo. 1ctuar) movido por la inteligencia de la vida, ! no por mis deseos o miedos. % sólo entonces comprender) cu$n inteligente ! luminoso es ese movimiento de la vida que me impulsa a mí mismo ! a todo cuanto est$ apareciendo en la existencia temporal. 'i me identifico con esa forma que se mueve en el tiempo ! que aparenta ser una realidad separada, me preocupar) por hacer esto o lo otro hasta el extremo de que mi vivir contendr$ una permanente inquietud ! angustia. 5ratar) de no decir lo que pueda per"udicarme ! de hacer lo que creo que me reportar$ los efectos deseados según mis planes, ! así estar) siempre pensando ! calculando. 6esde luego, la vida no responder$ a mis c$lculos, porque la dirigen otros motivos, ! así creer) que las cosas a veces me salen bien ! a veces mal. 1l no responder a mis calculadas motivaciones, pensar) que las cosas surgen al azar, sin sospechar que las mueven otras causas que se me escapan. #ero desde la lucidez de mi mirada puedo darme cuenta de que aquello que est$ sucediendo lo est$ moviendo la inteligencia de la vida total. Esa inteligencia es lo que en verdad so!. 1sí, estar lúcido es ser( es, simplemente, ser lo que en verdad somos, mientras que distraernos es ponernos disfraces de lo que no somos. Creemos que somos lo que aparece, ! luego nos entristecemos, nos deprimimos o angustiamos porque aquello que aparece es cambiante. as capas con las que me estaba recubriendo no son permanentes. Creí que era importante debido a que ocurrió algún motivo accidental( pasó el motivo ! !a no lo so!. Creí ser una madre mu! querida, ! pasaron los a*os ! los hi"os se despreocuparon de mí. Creí ser alguien imprescindible en el traba"o cuando muchos dependían de mí, pero cambió la situación ! de") de ser valorado. legu) a creer con obstinación que era un cuerpo, ! en un momento dado el cuerpo se desintegró. ! si aún no he visto esta impermanencia en mí, al menos lo compruebo en otros. 5ambi)n me parecía que !o era mis pensamientos, ! al observar vi que fueron cambiando en las distintas )pocas( las circunstancias me han ido empu"ando a ello. +e identificaba con un grupo religioso, político, cultural o económico, ! despu)s comprob) que aquello no era m$s que un con"unto de ideas para conseguir unos deseos. 6e todo aquello con lo que me identifique tendr) que desenga*arme. a vida me va presentando oportunidades para aprender que no so! lo que parece, pero si mi desenga*o no es aún definitivo, me siento frustrado en mi s esperanzas ! mis deseos. Ni la sociedad ni las dem$s personas tienen la culpa de esta frustración, aunque una ! otra vez quiera creerlo así. +i falta de lucidez ha ocasionado ese estado negativo de tristeza, de agresividad, de inquietud en el que me encuentro a veces. #or no estar despierto sucedió todo lo que me ha ido sobreviniendo. % seguir$ siendo así, si no despierto. os dem$s intentan conseguir lo que les parece me"or, igual que lo hago !o. 6e modo que nadie arruina mi vida. Ninguna persona tiene capacidad para estropear la vida de otro, ni tampoco para arreglarla.
6e"emos esas fantasías. 'ólo la toma de conciencia de lo 8eal librar$ a una persona de los sufrimientos que los errores ocasionan. No deduzcamos de esto que a una persona despierta !a no le pasa nada malo. Caemos en la ilusión de esperar que todo nos ir$ bien según nuestras perspectivas imaginadas, ! para conseguirlo hacemos terapias o practicamos raras t)cnicas cuando creo que so! desgraciado, o las cosas me van mal, ! so! feliz si las cosas me van bien. No es así la realidad. Ninguna cosa exterior puede crear la felicidad ni deshacerla. 2#or qu) insisto en "ugar ese "uego3 2#or qu) no trato de comprender cu$l es el movimiento inteligente en que consiste el existir3 EL PENSA"IENTO "EC$NICO CORTA EL PASO A LA LUCIDEZ Es posible mantenerse sereno en la paz ! en la alegría profunda que proviene de ser independiente de los cambios externos. 'in duda puedo lograr esa independencia ! esa serenidad. #ero para ello no es suficiente con propon)rmelo ni con programar mi mente pensante( de modo que todos esos m)todos que consisten en cambiar los pensamientos tienen mu! poco alcance, si es que tienen alguno. Esa serenidad brota solamente de la verdadera comprensión. e de haber comprendido lo que la realidad es. % para ello he de ver el proceso que se est$ dando en mi pensamiento( entonces de"ar) de darle realidad. 6e lo contrario, ser$n para mí reales todos los pensamientos que esto! pro!ectando en los datos sensoriales compartidos, ! así permanecer) atrapado en mi imaginación. 5engo que darme cuenta en cada momento. a lucidez cortar$ la sucesión mec$nica de pensamientos en sus causas ! efectos, acciones ! reacciones. +ientras crea que todo consiste en ese vivir arrastrado por un pensar repetido, esto! perdi)ndome esa gran aventura de la vida que es el vivir lúcido. +ientras me crea tan astuto en ese nivel superficial, mientras me crea capaz de cambiar las situaciones ! dirigir a las personas con teorías ! trucos psicológicos o chanta"es afectivos, esto! en un nivel mu! grave de inmadurez, tenga la edad que tenga mi cuerpo. +e falta lucidez, ! por eso desconozco por completo qu) es real ! qu) es irreal en la vida. 'uelo estar tan ocupado en tratar de conseguir algo para ser feliz que difícilmente hallo una parada para ver cu$l es el anhelo verdadero de plenitud que ha! en mi conciencia. 27u) es lo que no me permite cesar de buscar la felicidad desde una inquietud constante3 'i mirara ese anhelo de plenitud, de paz que produce en mí la sensación de carencia, si alguna vez puedo mirarlo al desocuparme de tantos quehaceres adquiridos ! quedarme en la contemplación, podr) descubrir su origen. Contemplar) ese anhelo de plenitud ! ver) que se origina en lo real, en lo que es m$s all$ de las apariencias, en aquello donde habita la plenitud. 9rota de mi propio ser, de allí donde la felicidad es naturaleza, porque en el ser no ha! carencias. a conciencia es lo único real. 1 eso lo llamamos 'er, o:que:Es( es lo que est$ ahí sin espacio ! sin tiempo. 1ceptar esto podría convertirse en una teoría pensada m$s, pero es posible verlo directamente gracias a la creciente lucidez. ! eso es lo que importa( porque en el momento en que descubrimos lo verdadero, vivimos desde la verdad. En un estado de lucidez la verdad es una evidencia por sí misma. No tiene sentido ni cabe dudar desde ahí. o que cuenta es si he descubierto la verdad o no la he descubierto. 'i aún aparecen pensamientos de duda ! los escucho, eso significa que tendr) que seguir investigando con sinceridad. En el camino, podría adherirme a cualquier teoría o seguir ideas, pero eso cortaría el paso a la lucidez en mi mente. o m$s sano es no aceptar nada de lo que no tenga evidencia directa o, al menos, una clara intuición.
a! quien dice que es necesario caminar con a!uda de ideas a"enas o siguiendo doctrinas a las que la gente concede autoridad. 'e considera que )sta es la manera de que no se pierdan las personas que todavía no han comprendido. #ero la persona que sigue ! repite algo sin comprenderlo !a est$ perdida en la oscuridad. Cuando ha! una cierta intuición de que la realidad no es como parece ! brota una vocación sincera por descubrir lo real, aun cuando sea d)bil todavía, eso es suficiente para descubrir el camino del despertar. Esa intuición se abrir$ paso con la luz de nuestra propia comprensión. 1 partir de la intuición, la luz ir$ iluminado nuestra mente ! nuestra vida. #ero se ha de comenzar por no aceptar nada que no vea por mis propios o"os, por los o"os de la inteligencia que so!, los de la mente contemplativa. CONTE"PLAR ES LA #RAN AENTURA a aventura maravillosa del vivir no depende de lo que me suceda o de lo que suceda a los dem$s. Es algo así como ver el argumento de una película mientras esto! en la sala de cine. 1l salir sigo siendo la misma persona que antes& #uedo haber pasado por un fuego ! no me he quemado( puede haberse producido un terremoto ! no me ha afectado. 6e esa misma manera, cuando la propia identidad no est$ apegada a los sentidos ! a los ob"etos sensoriales, !a que ha! lucidez, cualquier cosa que suceda en el argumento no me incumbe. 1l ser !o la luz que ve, ! no los ob"etos iluminados por ella, me mantengo fuera de la representación temporal. ;eo entonces que todo lo que est$ pasando sucede en la relatividad de la temporalidad. 'i aludimos a lo eterno como un estado de lucidez que no queda afectado por el tiempo, nos estamos refiriendo a lo real. #ero cuando creemos que el tiempo es real ! que la realidad es esa continuidad de pro!ecciones, nos equivocamos. as formas est$n siempre en cambio incesante, se hacen ! se deshacen( no son, sino que est$n apareciendo. 4gual que se pro!ectan im$genes en una pantalla, la luz de la vida est$ pro!ectando argumentos en la pantalla de la conciencia ob"etivada. % como el cambio es constante, me frustra la desaparición de algo siempre que me aferro a ello como real e imagino que continuar$. 1hí aparecen las tragedias. a aventura de vivir lúcido pasa por descubrir que es posible ser libre de lo que sucede en el existir. 6arme cuenta tiene m$s importancia de lo que creo. #arece que darme cuenta es a*adir algo a lo real( sin embargo, toda suposición existencial o incluso cualquier teoría filosófica que se base en esta suposición est$ en un error. 2Cómo es posible que la realidad sea algo que est$ ahí fuera ! que el darme cuenta de ella sea algo que a*ado3 2Cómo es posible imaginar que el que conoce copia exactamente en su mente una realidad exterior3 Esto no tiene ninguna consistencia ni lógica ni metafísica. 'in embargo, pocos han sido los seres humanos que se han aventurado a investigar la realidad apart$ndose de ese pueril supuesto. acerlo implica, desde luego, contradecir el pensamiento habitual que interpreta las sensaciones en la forma en que convencionalmente lo hace casi toda la gente. 1sí es cómo se ve la realidad cuando no se observa serena ! lúcidamente. ! pocas veces se observa así, porque nos parece que nos falta tiempo. Excepto para ocuparse de su negocio, su familia ! sus diversiones, nadie tiene tiempo para dedicarlo a descubrir qu) es la realidad. % mientras, se van creando actitudes ! situaciones irreales una tras otra. las consecuencias siempre son angustia, tensión, miedo o malestar en general. 'in duda, estaría bien que en un momento dado nos di")ramos& No vo! a ir tras de
ninguna cosa, no ambiciono nada, no esto! interesado en ganar algo. 'implemente quiero quiero mantenerme lúcido para ver qu) es todo esto. #orque !a s) que cuando cuando gano, pierdo( que cuando me ilusiono, luego me desilusiono( que cuando me quieren en un aspecto, no me quieren en otro, ! así todo lo dem$s-. 'i aún no he llegado a comprender estas cosas, habr) de pasar una ! otra vez por reiteradas experiencias hasta verlo. Nunca se sabe cu$ntas experiencias har$n falta para comprender. #odrían llegar incesantemente una tras otra !, sin embargo, al ser interpretadas con las ideas del pasado, poco aprender). En realidad, es la lucidez, es el detenerme a ver lo que sucede, lo que me aclarar$. 'in una mente lúcida, contemplativa, mi mirada estar$ confusa al enfrentarme a los riesgos del vivir. %&U' ES LO BUENO ( LO "ALO DE LA AENTURA)
a persona lúcida actúa desde la claridad de su visión. 1l ser esa persona espont$nea ! creativa, la vida surge ante ella sin motivación particular ni deseo( confiada a sí misma ! a la vida, esa persona vive en libertad. os dem$s a*oran esa libertad sin saber lo que es realmente ser libre, !a que se mantienen erróneamente dependientes de que las cosas sean de una manera o de que las dem$s personas respondan de un cierto modo. 'ólo la lucidez lucidez descubre la libertad, libertad, porque sólo ella nos desapega desapega,, nos desidentific desidentifica a de las cosas que erróneamente creemos reales. 5an libres podemos llegar a ser que hasta de"emos de depender del !o, es decir, del su"eto que se piensa libre. 'i alguien se cree libre, pronto temer$ de"ar de serlo. 'i alguien se cree diferente de los dem$s, nunca podr$ ser libre del todo, pues tendr$ carencias que colmar ! enemigos con los que pelear. a claridad total de la sabiduría coincide con la libertad sin un su"eto que experimente ambas. No habr$ alguien, habr$ libertad. Eso mismo podemos decir de quien se siente feliz o sabio. 27ui)n es feliz3 27ui)n sabio3
CAPÍTULO 6
Esperar en la puerta LA PUERTA SE ABRE DESDE DENTRO El título de esta investigación es un tanto extraño pero muy significativo, como veremos. En los lamasterios de la antigüedad, cuando algún joven tenía vocación de ser lama o monje y llegaba allí con esas intenciones, le dejaban que estuviera en la puerta en posición meditativa, en la postura de loto, inmóvil, quieto no durante !oras, sino durante días. E inmóvil permanecía !asta que al fin se abría la puerta y podía entrar al lamasterio. "uando me enter# de esto, me pareció un acto cruel que no lo dejaran entrar de inmediato pero despu#s !e ido comprendiendo lo adecuado que era el ejercicio, porque lo mismo sucede en el camino interior, cuando una persona va !acia el descubrimiento del $er. %ui&' si alguien no es capa& de permanecer en la puerta un tiempo, tampoco podr' mantenerse en la otra puerta que va a encontrar dentro, en lo profundo. ( si lo que ocurre fuera es lo mismo que lo que est' ocurriendo en el interior, tal como vemos cuando lo sabemos mirar bien, )para qu# dejar pasar a una persona que no va a ser capa& de !acer el verdadero camino* +eamos +eamos por tanto qu# es esto de la puerta. n día cada uno de nosotros arriba a una puerta qui&' alguno ya la !aya encontrado. -l profundi&ar en el silencio interior aparece cierta pa&, !asta que llega un momento en que se tropie&a con una puerta. 's tarde o m's temprano !ay algo en nosotros que dice tajantemente/ 01o m's all'2. 3a limitación se !alla en distinto lugar en cada persona. 4ero donde quiera que est# situada, el reto del camino de la sabiduría, de la vía contemplativa es mantenerse a!í, en la puerta, a la espera. 1o intentemos entrar por nosotros mismos, no queramos abrir personalmente la puerta y entrar. 1o pretendamos eso porque la puerta no se abre por ese lado, se abre del lado de dentro. $i a pesar de todo nos esfor&amos en ello, comprobaremos que nos damos golpes contra algo, pues la puerta no se puede abrir de este modo su apertura escapa a nuestra voluntad personal, condicionada y egóica. 5or&ar su apertura, es decir, intentar contemplar con todo ese bagaje de esfuer&o personal, no tiene ningún sentido. 's bien retrasaremos el momento de apertura de la puerta. 6ecordemos aquellas palabras de 7esús según los Evangelios/ 03lamad y se os abrir'2. 1o nos aconseja abrir por nosotros mismos. 3lamar es tener la actitud adecuada, y no se consigue de repente ni puede llegar en una situación egocentrada. 4or eso se requiere gran paciencia. -lgunos místicos, como 8eresa 8eresa de 9vila, !an !ablado de lo necesaria que es la paciencia. y la m'xima paciencia sobreviene al darnos cuenta de que nuestra persona no tiene nada que !acer en el proceso de la sabiduría, que ello es algo que se produce en lo profundo de la conciencia y de lo cual la persona no se entera. Es entonces cuando aprendemos a esperar sin proponernos nada. 1o creamos que la respuesta a la llamada interior viene de alguien extraño a nosotros. 1o
!ay allí ningún portero. 1i $an 4edro, ni un 'ngel, ni :ios. 1o es eso pero tampoco se abre la puerta porque así lo quiera el sujeto, y si así lo creo es porque mi identidad est' atrapada en la persona. 1o es ni lo uno ni lo otro. 3a puerta se abre, en efecto, y no la abro yo, mi persona pero aquello desde donde se abre la puerta es mi verdadera identidad. 1o es cierto, por tanto, que yo estoy 0a la puerta2 estoy dentro ya. ;sa es una misteriosa situación incomprensible para el yo pensante, fundada en la verdad de que no soy lo que creo ser. PENSAR CIERRA LA PUERTA 3o real en mí, lo que en verdad soy, es aquello desconocido para el yo pensado. ( mientras me crea que soy el pensamiento y las emociones que le siguen, no me estar# enterando de nada. En esa limitada condición me entretendr# imaginando toda una epopeya sobre lo que me !acen los dem's, ya sean mis enemigos, mis amigos, :ios, la sociedad, etc. En cambio, cuando me doy cuenta de que no !ay sino uno
-l encontrarnos identificados con el pensar, al creernos que somos sus creaciones, !emos de luc!ar contra la distracción y la distorsión que el pensamiento produce. El pensamiento es una f'brica de dividir/ des!ace todo, lo !ace añicos... 1ada queda a!í de lo 6eal mientras pensamos o creemos esto o lo otro, es decir, mientras soñamos despiertos. $i nos vemos identificados con ese movimiento que des!ace lo 6eal, nuestra intención !a de ser salir de esa dispersión. 4ero luc!ar contra la distracción !abitual es algo muy especial. 1o requiere los esfuer&os a los que estamos acostumbrados de !ec!o, esos esfuer&os condicionados fomentan la distracción. 4ara luc!ar contra ella lo único inteligente y efica& es comprender el acto mismo de pensar. Es tal el !'bito de vivir a partir de lo pensado que no me doy cuenta de que lo !ago sin parar, y así continúo proyectando y proyect'ndome !acia fuera mediante artefactos y situaciones que son continuación de mi pensamiento. 4ero aunque nada !ubiera fuera para distraerme, el conflicto interno emocional y mental es suficiente para obstaculi&ar la atención a lo 6eal. %ueremos distraernos porque tenemos miedo a caer en la nada. -l no saber qu# !acer ni qu# pensar, nos aburrimos. 1os falta sabiduría, nos falta comprensión de la realidad y visión de lo verdadero, y esta carencia fundamental se expresa en la necesidad compulsiva de !acer y de pensar sin parar. -un cuando no !ayamos caído en el extremo de depender de situaciones, personas o m'quinas para vivir distraídos, basta con la necesidad de pensar, basta con esa dependencia interna para cerrar la puerta. Es entonces cuando con gran paciencia !emos de mantenernos allí donde la puerta se cerró, observando cómo se cierra, es decir, observando el pensamiento. LA ATENCIÓN VIGILANTE -l contemplar entramos en diversos espacios de la conciencia, atravesamos silencios, descubrimos nuevas &onas desconocidas !asta entonces. 4ero !ay un momento en que ya no se produce m's profundi&ación, ya no se puede entrar m's all'. -sí lo vivimos.
3legado a ese punto, no intentemos avan&ar. 4or el contrario, manteng'monos esperando en la puerta, porque #se es el mejor intento que podemos !acer para profundi&ar en la conciencia. "onsiste en tener la firme&a suficiente para estar a!í, sin oscilaciones y con plena atención. Es preciso permanecer a!í, en ese lugar nuevo donde soy m's verdad, donde se siente m's realidad, donde se percibe el equilibrio de la mente que da autenticidad a esa vivencia. $i !e descubierto esa serenidad, esa armonía, esa claridad interior o simplemente una pa& desconocida, allí me quedo, esperando sin esperar nada en particular. Encontrar# una intensa atención envuelta en gran lucide&, pues la atención, disponible siempre, no se est' empleando en pensar y en sentir emociones. Existe una inmensa energía en esa atención, una energía que no va encaminada en ninguna dirección, una energía en la meditación. 4ero cuando la mente se concentra para buscar algo, la actitud no es correcta. 3a concentración debe producirse espont'nea por el inter#s mismo de contemplar. 4or amor a la verdad contemplada, por amor a la 6ealidad sagrada, la mente recoge las energías dispersas en un foco de lu&. EL DESENGAÑO DE LO ILUSORIO "uando se valora por encima de todas la cosas la presencia de lo sagrado, sobreviene la actitud contemplativa de la mente. 4ero para poder desengañarse de la fascinación por las formas cambiantes y perecederas antes se !a de ver claramente la diferencia entre lo que aparece y 3o
son inv'lidos desde el punte de vista de la verdad. "uando el desengaño brota de la verdadera comprensión. de la visión directa de lo falso y lo verdadero, entonces, y sólo entonces, florece la libertad. Es a!ora cuando se produce el giro de la mente !acia la claridad, !acia la lu&. -!í !e de mantenerme vigilante, pero sin estar a la expectativa de nada en particular. Eso significa que !ay que cortar la consciencia de algo, desactivar en la mente los objetos de la conciencia, a fin de quedarme en la sola "onciencia. 3a filosofía occidental considera, !asta el momento, que sólo existe 0conciencia de algo2. $e cree, por tanto, que no es posible cortar esa relación dual del conocer. 4ero en la tradición advaita de la ?ndia se afirma, por el contrario, que cuando !ay dualidad no aparece lo 6eal sino meras relaciones ilusorias. 4ara ir m's all' de esas ilusiones o proyecciones de la mente, tiene que terminar la dualidad, tiene que cesar la conciencia de algo y dejar paso a una identificación con la "onciencia pura. -l permanecer a!í, en la pura "onciencia, estoy en contacto ya con lo 6eal, la puerta ya est' abierta al infinito. Es la puerta de lo desconocido, de lo innombrable. -l !ablar de consciencia concebimos lo opuesto/ la inconsciencia. 4ero -quello que nos es desconocido no tiene opuesto. 3a lu& tiene su opuesto para nosotros en la oscuridad, pero al profundi&ar en lo luminoso se va comprendiendo que lo opuesto, las tinieblas, no existen se trata, simplemente, del nombre con que denominamos la falta de claridad, son las limitaciones que la mente pone a la lu&. $ólo -quello desconocido puede denominarse sagrado con propiedad, no las formas que el pensamiento proyecta como objetos sagrados, personas sagradas, libros o lugares sagrados. $i nos preguntamos/ -l despertar de este sueño, )con qu# nos encontraremos*, la respuesta es/ "on nada. 0El 1irvana2 fue la respuesta del @uda, la nada. ?ncluso podemos añadir/ 1ada de lo pensado. %ueremos traer la realidad al pensamiento, interpretarla como se !ace !abitualmente, clasificarla o tenerla programada en el ordenador donde podremos controlarla. 4ero no es posible !acer esto. -l creer que la realidad pensante en la que me muevo es omnipotente, al pensar que cualquier cosa puede ser entendida desde el pensamiento, no salgo de una parte ínfima de la conciencia. 3o que denominamos 0la realidad2 se interpreta a trav#s del pensamiento a partir de datos sensoriales, es decir, no es m's que el movimiento limitado de la energía biológica y pensante. 3a realidad que se crea con la energía biológica que incluye el pensar es un recinto muy limitado de conciencia. $in embargo, tengo la arrogancia de creer que es la única realidad que existe y trato de incluir en ella cualquier otra dimensión de la que oigo !ablar. Entiendo la realidad según pautas predeterminadas y la demuestro a partir de premisas convencionales. -sí, la creencia de que todo lo posible est' incluido en el pensamiento aleja tanto de lo 6eal que ni siquiera se !ace el menor intento de salir de la ilusión del
conocer. "uando se intenta sacar un poco la cabe&a fuera de este estado de !ipnosis y se nota que !ay otra realidad, no se debe cometer el error de volver y dejarse otra ve& engañar como si nada se !ubiera visto. $i !emos vislumbrado algo nuevo, manteng'monos a!í. $i !emos notado ya la brisa de lo 6eal, ese vislumbre debe revolucionar nuestra vida. 1uestra actitud debe afian&arse en la evidencia y en la confian&a de que vamos en la dirección verdadera. Aanteng'monos en el punto m'ximo de nuestro descubrimientoB ;sa es nuestra puerta. 1os parece difícil porque sentimos que vamos contracorriente y no sólo de lo que los dem's !acen y de las modas de nuestro tiempo, sino tambi#n contra la corriente del !'bito interno, del surco que se !a ido !aciendo en nuestra mente durante la rutina mec'nica dirigida por el pensar. En el proceso denominado 0involución2 la mente va discurriendo por un camino m's y m's denso !asta alcan&ar el nivel físico. -l irse densificando la lu& en la mente, #sta crea formas que son distorsionadas por la limitación de la mirada. "uando en un ser !umano la mirada no distorsiona porque la mente est' despierta, el proceso involutivo no distorsiona ya la realidad. ;sta se ve entonces como la manifestación, el reflejo y la creación de la lu&. Cay que comprender que quien permanece dormido se encuentra en el movimiento de densificación de la energía. En el momento en que alguien se da cuenta de este suceso inconsciente, )qu# sucede* $ucede que, de repente, existe un punto de consciencia en el ser !umano y entonces el proceso se invierte, se produce un giro y se comien&a a mirar en dirección a la lu&, en ve& de a su sombra. 4ara que este giro se produ&ca no es preciso esperar a convertirse en un cuerpo
Es f'cil darse cuenta de que, según sea mi desengaño, mayor o menor ser' mi firme&a para mantenerme alerta esperando en la puerta. $i es evidente para mí que detr's encontrar# algo maravilloso, que tras ella se encuentra la realidad añorada, llamar# en la entrada y aguardar#, tal como se nos aconseja en los Evangelios/ 03lamad y se os abrir'2. ( la llamada es la atención, la quietud lúcida. LA ATENCIÓN ABRE LA PUERTA 3a atención aumenta con la firme&a de la mente. El quedarme fijo, sin distracción, ya aumenta la atención. -l mover la mirada, al distraerme, comien&a imperceptiblemente el decaimiento y el sueño. 4or eso, cuando mantengo la atención a!í, en ese punto inespacial, y la lucide& va aumentando, estoy llamando a la puerta y en un momento dado la puerta se abrir'. $e abrir' a un estado de pa&, a un 'mbito de libertad desconocido !asta entonces, a un estado de claridad y evidencia imposible de concebir por el pensamiento. :esde allí, si sigo el impulso de adentrarme en lo desconocido, la vuelta a lo 6eal se produce con la lu& encendida. -l pasar por cada campo existencial, todos reciben -quello. Esa comprensión, ese estado de amor incondicionado, esa alegría y libertad de ser, se refleja en todos los niveles de la existencia, y la persona y quienes la rodean lo perciben. 3a persona no es quien !a llegado a conseguir algo, sólo recibe su reflejo. 3a persona no puede ser ni libre ni feli& ni sabia porque no es nada en sí. 1o es m's que una acumulación temporal de energía. -sí sucede, así siempre sucedió y suceder'. En nuestra #poca, con sus peculiaridades, este !ec!o no es distinto de #pocas anteriores ni de las que vendr'n. 3o que sucede en el tiempo es ilusorio, y lo 6eal se descubre al ir contracorriente, al caminar !acia la lu&. ( ese descubrimiento no est' en el tiempo, es una escapada de #l. $i me identifico con la persona y con las dem's formas temporales, vivir# las consecuencias inevitables de la impermanencia, las carencias y las limitaciones, y me debatir# entre los vaivenes que las circunstancias impongan a esas formas. 4ero si me desidentifico, sabr# lo que es la libertad porque no depender# de las leyes que mueven a esas formas. Ellas se ir'n moviendo mientras mi identidad lo contempla en libertad. $i contacto con un punto de lo desconocido, cuando regrese no ser# la misma persona, mi identidad estar' en un 'mbito no
ya es suficiente para ver la lu& del día. :e la misma manera, y aún con mayor evidencia, reconocer# la lu& interior. 4asar'n los años, pero mi firme&a en mantenerme en la lu& que vislumbro, que contemplo, no menguar'. El cuerpo estar' m's sano o m's enfermo, m's fuerte o m's d#bil, pero la decisión y la firme&a no siguen al cuerpo sino a la lucide&, a la atención. LO MS IMPORTANTE !UE PODEMOS "ACER En oriente, las tradiciones india y c!ina !an considerado a los ancianos como los m's dignos de respeto. 6espetaban en ellos la sabiduría. -!ora, en la situación en que nos encontramos socialmente, limitada extremadamente a lo físico, sucede al rev#s/ las personas, conforme van envejeciendo en su energía, empeoran en su estrec!a mente pensante, la única que !an desarrollado. 1o brilla así la sabiduría en los mayores y, por tanto, no pueden aconsejar a los jóvenes. Es muy llamativo el desorden de la mayoría de los jóvenes, pero nos pasa desapercibido el lugar anquilosado y superficial desde el cual dan ejemplo los maduros y los mayores. $in salir del pensamiento, a cualquier edad se est' perdido. Es m's pat#tico, sin embargo, ver cómo llega el final de una vida sin que el individuo !aya comprendido lo esencial del vivir. Cay que darse cuenta de que, desde el nivel del pensamiento, todo lo que se !ace para ayudar a la !umanidad cae en los errores de la limitación del pensar. -l pensar se vive una actividad rutinaria, no se est' viviendo lo nuevo, lo vivo del instante presente. "uando tengamos un despertar y nos demos cuenta de ello en nuestra acción cotidiana, mantengamos esa atención, por pequeña que nos pare&ca. Duard#mosla como lo m's valioso, y aumentar' al quedarnos centrados en ella. Es lo m's importante que podemos !acer/ descubrir la distracción, ser conscientes de nuestro sueño. 1o !ay disculpa para dejar de !acerlo, como puede ser el exceso de trabajo, etc. e puedo mantener despierto en cualquier circunstancia que me encuentre. En silencio, en conversación, trabajando, jugando, triste o alegre puedo constatar lo que est' sucediendo, lo que le sucede a la persona con la que me estaba identificando. 1o soy una persona que a veces est' contenta y a veces preocupada o aburrida soy la atención que se da cuenta. 8anto si las energías psicofísicas est'n equilibradas como si se encuentran desequilibradas, en un momento dado puedo darme cuenta y permanecer entonces en esa lucide&. Evitar# así todo el sufrimiento originado por la carga interpretativa del pensamiento. $i !ay dolor, soy aquello que se da cuenta de que !a aparecido un dolor si !ay alegría, lo mismo. 8anto lo favorable como lo desfavorable son impermanentes y pasar'n igualmente, pero la atención que los contempla permanecer' inconmovible. LA VERDADERA META EN LA VIDA En la puerta de lo 6eal, a la cual se llega gracias a la atención, podr# observar cómo las cosas buenas o malas vienen y se van, cómo los vientos soplan a favor o en contra de lo que me !abía propuesto en la vida. +er# entonces que mi meta en la vida no consiste en lograr que las circunstancias se coloquen de cierta manera que estimo adecuada, ya sea
en las relaciones con los dem's, en el trabajo o en la salud. i verdadera meta, el propósito de mi vida es mantenerme despierto, equilibrado en la atención, de manera que pueda !acerse el camino a contracorriente de la involución al que nos referimos antes/ el camino que mira a la lu&. "ualquiera que sea el nivel de atención, de lucide& descubierto en un instante, me parar# a!í, me quedar# a la puerta esperando, mientras la lu& ilumina el espacio infinito de la "onciencia.
CAPÍTULO 7
Investigar y contemplar UN NUEVO PROPÓITO Vamos a dedicar este espacio a ver en qué consiste investigar y qué es contemplar, porque aprender a contemplar es un camino largo y profundo. Y, por supuesto, ya sé que lo que todos queremos es aprender a vivir, pero resulta que aprender a contemplar y aprender a vivir es simultáneo y, de hecho, es lo mismo. Porque aprender a vivir a base de fórmulas, de trucos, de arreglar algo por un lado para después desengañarme por otro no es verdadero aprendia!e. Para aprender a vivir hemos de contemplar, porque hemos de comprender primero lo que la vida es antes de poder llegar a vivirla, antes de querer hacer nada. Ya sé que nuestra mentalidad, sobre todo la occidental y, en general, la mentalidad del ser humano en esta época, está orientada a querer actuar, a hacer algo. "ntes de comprender se quiere ya actuar, y pretendemos realiar as# la acción correcta y adecuada y hacer lo que conviene, lo que es bueno, lo que es perfecto, etc. $so es obviamente una fantas#a. %oda actuación que no derive de una comprensión será limitada, inarmónica, desequilibrada, conflictiva, y podr#amos seguir poniendo calificativos negativos y no acabar#amos. Y as# es como vivimos. &emos dicho que el camino de la contemplación es un camino profundo, sin fondo. $s un poo sin fondo y una v#a que llega al infinito, que no tiene meta. $ntonces, tanto los que ya llevamos un tiempo contemplando, ya sean años o vidas, como los que empeamos ahora a enterarnos de que es posible hacer algo con nuestra mente, todos tenemos much#simo que aprender. 'e supone que el interés, el propósito que nos mueve a aprender a contemplar, es serio y auténtico, ya que (quién querr#a aprender a contemplar por frivolidad) $so no tiene ning*n sentido. (+uién va a ir en contra de lo establecido, contracorriente, solamente por distraerse) Ya sé que los seres humanos buscan cosas raras y eóticas, pero en cuanto ven que la cosa se pone seria, rápidamente se van a algo más fácil, es decir, más superficial. $l propósito de aprender a contemplar y a investigar -vamos a ir viendo cuán relacionada está una cosa con la otra- pasa por aprender a vivir en silencio. $l silencio tiene muchos estadios, muchos niveles. $l más sencillo es callar, sencillamente callar. $s el nivel más sencillo, pero no es algo de lo cual se deba prescindir. 'i bien es cierto que se puede hablar estando al mismo tiempo en un estado interior de silencio profundo, ello ocurre cuando ya se vive desde ese silencio profundo. 'in embargo, cuando todav#a se está aprendiendo a contemplar, el hecho de estar en silencio, de vivir en silencio es muy beneficioso y siempre se ha establecido como una gran ayuda no una pequeña, sino una gran ayuda. Por supuesto, hay muchos silencios interiores a los que podremos tener acceso pero dado que son grandes las dificultades para profundiar en la mente e ir poniéndola contemplativa, debemos facilitar al máimo este proceso.
$stamos haciendo ahora, en este tiempo que nos ha regalado la vida, un ensayo equivalente al que realian los cient#ficos que se encierran en un laboratorio para descubrir algo muy importante. $n nuestro caso, la finalidad es descubrir lo más importante de todo/ qué es la 0ealidad, qué es la verdad de todo lo que vivimos. Podremos as# responder todas esas preguntas que parece que no tienen respuesta. Pero antes de haberlas respondido, (qué sentido tiene nuestro vivir) 1a respuesta que buscamos no es intelectual no basta con tener información. 1a respuesta es algo real, es algo que se vive, que se vivencia por eso hay que buscarla a través de nuestra conciencia, tenemos que profundiar en la conciencia misma, en nuestra propia conciencia. Parece que nuestra conciencia no es nada. %enemos la ilusión de que la realidad está afuera y que nuestra conciencia no es nada más que un darnos cuenta, a!eno a ella, una entidad misteriosa y etraña que está como fuera de la realidad y que es algo fantástico, metaf#sicamente inconcebible, que está dándose cuenta de la realidad que está fuera. 'on fantas#as con las que vivimos, y no nos percatamos de ello. 2uando empeamos a investigar, vemos que la creencia de que hay una conciencia separada y aparte de la realidad no tiene ning*n sentido. 1o cierto es que esta mente que percibe, con sus limitaciones y sus capacidades muy puntuales e instrumentales, está creando la realidad que percibe, está marcando, está dando forma a aquello que llama 3realidad4, al mismo tiempo que forma parte de la 0ealidad total. 'i solamente formara parte de la 3realidad4, (cómo podr#a verla, dado que solamente se puede ver una cosa cuando uno se separa de ella) Pero si nosotros somos un cuerpo-mente que está separado de la realidad, (cómo podr#amos entonces ver la 0ealidad absoluta a través de nuestras limitadas y estrechas percepciones) 1o que sucede, en verdad, es que construimos en nuestra mente una representación de la 0ealidad, y ello constituye lo que denominamos 3realidad4, la cual, a su ve, forma parte de la 0ealidad también. %odo parte del gran error de creernos separados. 1a separación es la base de todos nuestros errores, que empiean por ser metaf#sicos y luego acaban por ser conflictos en la vida, en general, y en nuestra propia vida, en particular porque cuando no está la verdad brillando en nuestra mente, entonces todo se realia a partir del error y, por tanto, todo resulta conflictivo, contradictorio, equivocado y, además, produce sufrimiento. $so s# nos importa/ que produce sufrimiento. Podemos decir que lo que nos interesa no es entender la vida, sino ser felices pero es precisamente por no comprender la vida por lo que estoy dándome golpes de un lado para otro y no puedo ser feli. $sos golpes nos hacen daño. Para ilustrar este proceso suelo recurrir a la metáfora de aquel individuo que está encerrado en una caverna o en una habitación oscura y dice/ 3'olamente quiero vivir bien, estar alegre y feli4 pero como no ve nada de lo que haya su alrededor, se da golpes con todo cada ve que se mueve. "s#, un d#a se hace una herida porque se ha dado contra la pared, otro d#a tropiea y se cae, etc. &asta que no se ponga lu ah#, hasta que no haya lu, (puede haber 3calidad de vida4) 5mposible. Por eso, lo primero de todo es que 3la lu se haga4, tal como afirma nuestra tradición. Primero la lu. Porque es originaria, es el origen de todo y la causa suprema sin la cual no hay comprensión y, por tanto, no hay vida verdadera. $l silencio es propicio para que descubramos que lo que necesitamos es la lu y para que abramos puertas y ventanas para que la lu penetre. Por eso vamos a tratar de vivir de un modo diferente al que estamos acostumbrados, un modo que será favorable para que ello
ocurra. 'i hiciéramos lo que siempre estamos haciendo, si además de los pensamientos que nos pasan por la cabea estuviésemos todo el d#a hablando, estar#amos completamente volcados y entretenidos en los pensamientos, como un niño que está !ugando con los !uguetes y ni se entera de que es la hora de ir al colegio. "s#, generalmente estamos todo el d#a entretenidos con los pensamientos que pasan, o intercambiando pensamientos al igual que los niños intercambian !uguetes o cromos. "s# vivimos. Pues bien, estos d#as no vamos a hacer eso. Vamos a crear ya desde fuera una vida más favorable a la contemplación. Por cierto que, necesariamente, esa vida favorable a la contemplación coincide en esencia, aunque no en detalle, con la que tradicionalmente han llevado todos los contemplativos de las distintas tradiciones, tanto orientales como occidentales, ya sean las cristianas, !ud#as, musulmanas, hind*es, budistas, tao#stas, etc. 'iempre, cuando alguien ha tomado conciencia de que ten#a que encender la lu, de que ten#a que llegar a ese lugar donde hay lu, las condiciones de vida que esa persona ha llevado eran las naturales para favorecer eso y, además -éste es un punto importanteesas circunstancias eran las que espontáneamente resultaban más agradables para esa persona. "prender a contemplar no consiste en hacer un sacrifico y aburrirnos no consiste en no pasarlo bien, no ver la televisión, no hablar con todo el mundo, no tomarnos unas copas, o no hacer las mil y una cosas que puede que estemos acostumbrados a hacer. 'i verdaderamente amamos la contemplación, nos dedicaremos a hacer lo que verdaderamente queremos/ vivir una vida que sea la más agradable para una mente que empiea a ser contemplativa. 'i esa vida nos parece muy forada es porque nuestra mente está todav#a le!os de la contemplación si nos parece agradable es porque está más cerca de la contemplación. "h# hay toda una gama de posibilidades pero en cualquier punto en que nos encontremos, lo coherente es que nos agrade una vida sencilla, es decir, silenciosa, con una comida sencilla, con paseos por la naturalea, sin cosas artificiales, sin grandes efectos sensoriales/ sensaciones intensas, eperiencias, drogas, espectáculos para distraer la mente, etc. $n la medida en que nos agrade este tipo de vida, estaremos en soledad aunque nos encontremos entre mucha gente porque estaremos en silencio, en ve de estar entreteniéndonos unos a otros para no aburrirnos. Parecerá que estamos en soledad, pero en verdad estaremos con nuestra conciencia. Porque en la contemplación una gran verdad que se descubre, básica, es que la soledad no eiste es un invento de la mente. $n realidad, no puede haber soledad ni compañ#a ya que solamente hay una realidad y solamente hay una conciencia. "s# que, (compañ#a de quién) ('olo con respecto a qué) 2uando se es la totalidad, (qué soledad hay ah#) 2uando se llega a la 2onciencia, a la cual está absolutamente unida toda la humanidad, todos los seres, todas las realidades relativas, todo lo que tiene un tipo de mente y todo lo que tiene otro tipo de conciencia, es decir, seres humanos, animales, piedras, montañas, nubes, firmamento, planetas y cualesquiera otros seres que pueda haber con cuerpo f#sico o sin cuerpo f#sico, cuando se llega ah#, dec#amos, no hay soledad. %odo lo que se pueda concebir, lo que pueda concebir la inteligencia, todo lo que sea posible crear son realidades que se proyectan. 6e modo que hay mucho más que el campo limitado en el que nos movemos y que acostumbramos a percibir de acuerdo con los sentidos que tenemos en esta etapa de la conciencia que llamamos nuestra vida y que tiene una duración de entre ochenta y cien años, más o menos. &acemos muy mal en limitarnos de esa manera. Primero, nos limitamos a creer que la
realidad es eso que interpreta nuestra mente y que está proyectado hacia fuera después, nos limitamos a lo que nuestro instrumento mental y f#sico puede captar. $n nuestros d#as ampliamos la percepción mediante aparatos, pero eso sigue quedando dentro de la limitación de nuestra mente, de lo que concibe nuestra mente. Para que nuestra mente conciba algo más es necesario ampliar la conciencia algo más. $so no lo hacen los aparatos. 1os aparatos ampl#an dentro de la misma dirección que se percibe en la mente mecánica. 6e esta manera, esa ampliación de la mente mecánica, que llamamos progreso material, consiste simplemente en crear aparatos que funcionan más rápido, que tienen m*ltiples aplicaciones, que mane!an más información, etc. Pero todos esos aparatos se hacen a imagen y medida de lo que nuestra mente concibe seg*n la comprensión de la mayor#a de las personas que crean esos aparatos. $sos aparatos no tienen esencialmente nada nuevo. 7o hay nada nuevo en el progreso. 1o que se llama el progreso humano no aporta nada realmente nuevo. $sto puede escandaliarnos, pero es as#. 7ada, por muchos inventos que haya, nada es nuevo. %odo eso no es mas que un dar vueltas sobre lo vie!o. "s# como nuestro pensamiento funciona, as# funciona un ordenador/ se le meten unos datos que remueve y unifica y, posteriormente, saca otra información que es el con!unto de unos datos con otros la memoria guarda esos datos, los saca en un momento dado, los vuelve a guardar, los vuelve a sacar de nuevo..., eactamente igual a como lo hace el pensamiento/ acumula información, datos repetidos que la memoria graba y que vuelve a sacar como una grabadora, etc. 6e esa manera funcionan la mente o las computadoras. Por eso no hay nada nuevo en el progreso humano y todas las demás ciencias que han culminado en este progreso técnico tienen el mismo origen radical. $l origen de toda esta confusión es que el ser humano no ha colocado su mente de manera contemplativa. %iene la mente alienada hacia fuera, etrovertida y all# es donde se produce lo que se ha llamado la dualidad/ creer que la realidad está básicamente separada en yo y lo otro. 2onsidero 3la realidad4 lo otro y, a la ve, yo estoy inmerso en la realidad, no sé ni cómo ni de qué manera porque no tiene ning*n sentido. %odas las teor#as del conocimiento que ha elaborado la filosof#a a partir de este error dual son incoherentes y absurdas. 7o se puede saber cómo el ser humano conoce. %oda mi vida he estado investigando esto. Para investigar la realidad hab#a que investigar la epistemolog#a o teor#a del conocimiento, es decir, investigar cómo conoce la mente. 1a conclusión a la que se llega, no al investigar intelectualmente sino al investigar en la propia conciencia, es que todo lo que se descubre as#, todo lo que se crea as#, son realidades imaginarias, son imágenes, 3una realidad virtual4, representaciones. 1a capacidad de nuestra mente, verdaderamente etraordinaria, consiste en la habilidad de representar imágenes, como lo hace una cinta grabadora, como una pel#cula, como una televisión, etc. 8bservemos hasta qué punto ahora, en lo eterno, se ha llegado a tal paroismo de imágenes que casi ya nadie vive las cosas directamente, sino a partir de las propias imágenes. "bsolutamente se vive en imágenes. 'ólo falta que a la hora de la comida nos baste para alimentarnos con la imagen de nuestro men* mostrado en una pantalla. %odo se comunica a través de imágenes/ con palabras, con conceptos, etc. todo son representaciones en la mente. Pero (qué vivimos directamente) %odav#a nos queda esa parte biológica cada ve más rebuscada y más maltratada a base de drogas y de etrañas manipulaciones qu#micas, la parte biológica de comer, dormir, relaciones seuales, etc. Vemos que está todo muy manipulado y, sin embargo, no nos damos cuenta de que a la mente le pasa lo mismo no nos damos cuenta de que hay una manera de vivir directamente, en ve de a base de representaciones.
$s fácil darse cuenta de que el e!emplo de la comida es absurdo, pues vemos que solamente con sentarse delante del televisor y ver la comida no es suficiente para alimentar el cuerpo. 1o que solemos hacer, entonces, es ver la televisión para informarnos de qué recetas hay para comer, y después las preparamos en la cocina. 'in embargo, en la mente no lo vemos tan fácilmente no vemos la diferencia entre ver directamente la verdad y representarnos imágenes y conceptos. 7os parece que la *nica realidad que tiene el ser humano es la que resulta de representar y representar cosas. Parece imposible vivir directamente, alimentarse directamente de la verdad y no a través de representaciones de lo que otros han dicho, de teor#as, de imágenes de los sentidos o percepciones sensoriales interpretadas seg*n lo convencional. Y como nos creemos que esto es la realidad, nunca vivimos directamente.
VER !IRECTA"ENTE 2uando la mente empiea a vivir directamente, entonces es cuando se puede decir que la mente se está haciendo contemplativa, que empiea ese camino contemplativo. $s lo que Platón llamaba 3noesis4 9nom significa inteligencia:. 1a noesis platónica es el camino de la pura inteligencia. $l 3comprender4, el 3mirar directamente4, seg*n se dec#a en nuestra tradición el mirar no las cosas, sino las esencias de las cosas, aquello por lo que las cosas son. Yo suelo emplear el término 3verdades4 refiriéndome a estas esencias. Platón utilió el término 3ideas4, pero ahora por 3idea4 entendemos cualquier imagen que aparece en el pensamiento. 1a contemplación de las verdades incluye la contemplación de la totalidad de nuestro ser porque cuando nuestra mente se va haciendo contemplativa, de!a el fragmentario instrumento representativo, lo va de!ando como una cosa que funciona espontáneamente, igual que de!amos que funcione la respiración ella sola, que la circulación de la sangre ocurra sola, espontáneamente, sin manipularla... y de la misma manera que eso sucede en lo biológico, que la vida se encarga de que circule bien la sangre si no hay obstáculos, de que la digestión se haga bien si no hay obstáculos, nuestra mente deber#a de!ar de la misma manera que el pensamiento se encargara de formular conceptos y palabras en esta aventura del mundo f#sico en la que estamos, y entonces podr#amos solamente ocuparnos ya de contemplar. 6e ese modo suceder#a aquello que nos recomendó ;es*s y que nadie cree/ contemplar#amos la verdad y lo demás vendr#a por añadidura, espontáneamente. $s lo mismo que recoge el evangelio de san 1ucas, cuando ;es*s estaba con dos hermanas, y mientras una estaba atareada haciendo cosas, la otra estaba simplemente aprendiendo a contemplar. "l que!arse la primera, ;es*s di!o/ 3%u hermana ha elegido la me!or parte4, es decir, contemplar. 91ucas <=, >?-@A, encuentro con Barta y Bar#a/ 3Bar#a ha escogido la me!or parte, que no le será arrebatada4: Porque hay dos maneras de vivir/ volcándose hacia la actividad o contemplando. 1a gente que vive volcada hacia la actividad puede pensar que si la gente contemplara nadie har#a nada, que en el mundo hay mucho que hacer con tantos problemas y sufrimiento, y no se puede uno quedar ah# parado como los hind*es, con las piernas cruadas y de!ando que los demás se las arreglen como puedan. Protestas de este tipo las he o#do much#simas veces, y son muy infantiles. 1as personas que piensan de esta manera no se han dado cuenta de que no hay una realidad que implica actuar en la vida y otra distinta que incluye contemplar, sino que solamente hay una realidad y que si se vive superficialmente, entonces se vive alienado, volcado a la acción antes de haber comprendido. 'i se toma conciencia de lo que la realidad es en verdad, se empiea a poner la mente
contemplativa, se aprende a contemplar, se empiea a comprender la vida, y la vida fluye entonces espontáneamente a partir de esa contemplación, con lo cual la actividad surge creativa, armoniosa, adecuada y, por supuesto, brota a partir de las verdades eternas, es decir, brota a partir de la verdad, brota a partir de la bellea, a partir del amor, a partir de la !usticia, de la armon#a, de la pa, de la alegr#a, etc. $sto parece un programa demasiado optimista para ser verdadero. 'iempre será simplemente un ideal o una ilusión para el que no haya profundiado en su mente, pero no as# para quien profundice en su mente mediante el movimiento minucioso y cuidadoso del contemplar. $s algo que se ha de realiar cuidadosamente, porque no se puede hacer rápidamente, tal como estamos acostumbrados a actuar no se puede realiar de cualquier manera, ni utiliando una fórmula que instantáneamente nos clarifique qué hay que hacer para contemplar. &ace poco tiempo una persona que ten#a la mente completamente etrovertida, hacia fuera, me preguntó qué pod#a hacer para poner su mente contemplativa ya, en aquel mismo momento. $sa visión de que se puede aprender a contemplar rápidamente con una fórmula me de!a perple!a. %antas cosas habr#a que hacer... &abr#a que empear por descubrir cuántas cosas falsas se mantienen en la mente y a través de las cuales se vive, y eso requiere investigar con mucha paciencia y cuidado, investigar para que vaya cayendo lo falso. $sto es !ustamente lo que estamos haciendo ahora. Y la investigación requiere ya de la contemplación. 2uando investigamos de verdad, como ahora, ya estamos hablando de contemplar, ya estamos poniendo la mente contemplativa sin habérnoslo propuesto porque si no, no podr#amos contemplar la verdad. 'i estamos en el lugar habitual y convencional del pensamiento, no se puede descubrir la verdad. 1a verdad es algo misterioso, etraño y rar#simo que nadie aceptar#a desde el pensamiento. 6e hecho, no se puede aceptar desde el pensamiento. $l pensamiento ya tiene fabricada su realidad virtual, con la cual está !ugando y entreteniéndose todo el d#a. 7o se le puede hablar de la verdad absoluta. 6e manera que, cuando hacemos una investigación como ésta, estamos ya colocando la mente de una manera contemplativa sin que nos lo hayamos propuesto. Y si por alg*n motivo no queremos contemplar, si hay alguna rebeld#a en nosotros, entonces no podemos investigar y decimos/ 3$sto no es para m#4. Pero si decimos/ 3'#, esto es lo que yo he estado anhelando, esto es lo que yo necesito4, es porque estamos poniendo la mente en estado contemplativo. $so significa que ya está en otro lugar. 7o nos creamos que todo el mundo está en el pensamiento y que ése es el sitio cumbre del ser humano y que no hay nada más. $n la mente hay muchos lugares. Cásicamente, la mente que usamos en la actualidad tiene un lugar mecánico que yo suelo llamar 3el pensamiento4 y que es la ona donde normalmente estamos, la cual tiene varias onas a su ve, varios lugares/ la mente lógica, la mente sensorial, etc. Pero toda esa mente es mecánica/ recibe datos e imágenes y los manipula tal como lo hace un ordenador.
LA "ENTE ILU"INA!A 1a tradición de la 5ndia llama 3mente iluminada4 a la mente intuitiva. Be gusta esta manera de referirse a ella. +ue a mente esté iluminada no quiere decir que sea ella misma la que produce la lu, sino que es un instrumento creado por la lu. $so tiene una importancia enorme a la hora de contemplar. Porque si me creo que todo lo voy a hacer con la mente, que todo se puede manipular con la mente, que en la mente está todo,
como algunas veces se oye, entonces estoy perdido porque quiero dar un protagonismo a un instrumento que básicamente tiene que ponerse en actitud receptiva hacia l a lu. Por eso, la posición correcta de la mente es la posición de la Virgen Bar#a/ 3&ágase en m# seg*n tu palabra4. $s decir, un vac#o de lo conocido y una rendición a lo 0eal. Pero vamos a eplicarlo me!or, más filosóficamente/ se trata de hacer un vac#o de lo conocido para que pueda revelarse lo desconocido. Dsa es la mente iluminada. 1a mente mecánica no puede estar iluminada está entretenida manipulando datos. Ya lo sabemos, (no) $stá volcada hacia lo sensorial, interpretando los datos sensoriales y creando imágenes interpretativas. 7o es necesario eplicar demasiado qué pasa cuando estamos identificados en ese lugar, porque es una eperiencia com*n de todos nosotros, pero lo recordaremos brevemente. 1o que sucede cuando estamos ah# es que estamos confusos, lanados a la acción sin comprensión, y entonces tenemos conflictos, se contradicen unas cosas con otras, no sabemos qué hacer, tenemos dudas, a veces llegamos a la angustia, al no comprender la vida... 1o he resumido muy rápido ya que sabemos de sobra de lo que estamos hablando, as# que no hace falta dedicarle mucho tiempo. 2uando empeamos a abrir las puertas a la mente iluminada, (qué actitud es la adecuada) 7o es preciso aniquilar la mente mecánica la conservamos ah# como un instrumento más, lo mismo que si me preguntara si al hacer un dibu!o estoy dibu!ando con la mano o con la inteligencia. 'i di!era que dibu!o con la mano, (qué voy a dibu!ar) 'i digo que dibu!o sólo con la inteligencia, (me cortaré entonces la mano para poder dibu!ar con la inteligencia sin que la mano me distraiga) $so ya no ser#a un dibu!o en esta manifestación. 1o mismo sucede con la mente/ no tengo que cortar ninguna ona no tengo que acallar foradamente el pensamiento ni nada de eso, como tampoco me tengo que cortar una mano para no hacer nada malo con ella. $l actuar bien o mal está en otro lugar, la mano es inocente. 5gualmente, el pensamiento es sólo un instrumento. 7o tengo que eliminar el pensamiento, sino que tengo que de!ar de estar apegado a él, tengo que de!ar de identificarme con ese pensamiento como si fuera yo mismo. 6ebo soltar esa relación que mantengo con el pensamiento que llega al etremo de haberme cre#do que soy yo mismo, y entonces de!o simplemente que el pensamiento funcione a su aire. "s#, funcionará de acuerdo con los datos de fuera y con los de dentro, siendo los de dentro la inspiración que viene de la verdad y los de fuera los datos sensoriales aportados a través del instrumento f#sico, la comunicación con los demás en el pensamiento, etc. "s# se hace una adecuación de dentro a fuera. Pero yo no tengo que estar ah#, identificado. 1a 2onciencia, por s# misma, incluye todas sus formas, todos sus instrumentos, as# que mi identificación huelga. 6ebo simplemente estar en ese lugar de mente iluminada donde estoy receptivo, en ve de estar activo manipulando la realidad para cambiarla, para hacer las cosas bien, para me!orar, para hacer lo que los demás esperan, para lograr éito... $sa actitud activa es la que crea ambición, estrés, angustia, malestar, culpabilidad, miedo y todas esas cosas que conocemos ya muy bien. %odas las anteriores sensaciones y sentimientos negativos suceden por el lugar en que me encuentro en la conciencia, no porque tenga el sistema nervioso mal y deba ir al neurólogo, ni porque soy malo y no aprendo a ser virtuoso y a a!ustarme a unas normas de ética. 7o es nada de eso. 6e!emos todas las ciencias, las f#sicas, las éticas, etc. %odo ese sufrimiento sucede por distracción, sucede porque me he identificado y me he dormido en esa ona, volcado hacia la manifestación eterior, hacia la representación es como si me hubiera quedado pegado a la pantalla del televisor o del ordenador y ya no
percibiera ninguna realidad más, como si estuviera ah# en la pantalla y mi *nica realidad fuera la pantalla y lo que sale en ella. 2asi, casi nos sucede as#. Veámoslo, porque eso es lo que sucede en nuestra mente. 7os hemos quedado pegados a esa pantalla. 7os creemos que todo lo que pasa por ella somos nosotros, que ésa es nuestra vida. &ay que salir de ah#. Dsa no es la realidad. Pero no basta que nos lo digan. 7os lo han dicho en todas las épocas todos los seres humanos que han tenido sabidur#a, y hemos deso#do. Pensamos que eran personas etraordinarias que ten#an unas ideas muy interesantes, que eran buenos y ten#an una actitud adecuada hacia los demás... Pero sus afirmaciones nos parecen algo a!eno, algo que no tiene que ver con nosotros, como si nosotros estuviéramos hechos de otra cosa. 7o. %odos los seres humanos/ los sabios, los que se consideran mediocres, los del montón, los intelectuales, los que no tienen preparación, los modernos, los que están anticuados... todos los seres humanos, se coloquen donde se coloquen seg*n las interpretaciones de valoración que hace la mente pensante, todos los seres humanos tenemos la posibilidad de descubrir nuestro origen. " veces esa capacidad está tan tapada que parece imposible lograrlo, otras veces empu!a tanto esa necesidad que parece que vamos a llegar a lo 0eal de inmediato pero eso no quiere decir que haya diferencias entre los seres humanos. 1os seres humanos son siempre una manifestación de la 5nteligencia. 'i la 5nteligencia está más cerca, si el ser humano ha de!ado un espacio, un vac#o, y esa inteligencia o esa lu penetra más, entonces decimos que hay sabidur#a. 'i el ser humano está cerrado soñando en su pantalla de televisión privada, envuelto en sus pensamientos, entonces no puede entrar la lu, no puede haber sabidur#a. $so es todo. %enemos que de!ar de identificarnos con la pantalla, si es que se puede. Porque a veces nos parece que no se puede, pero el que se pueda o no se pueda es el gran misterio que cada uno tiene que descubrir dentro. 7o podemos ir a un profesional a que nos diga las posibilidades que tenemos de liberarnos en esta vida, de descubrir la 0ealidad y la Verdad, y de unirnos a 6ios. 7o, no es as#. "unque, 3por sus s#ntomas o por sus hechos lo conoceréis4, tal como epresa nuestra tradición. 8curre como con la fruta/ por sus signos eternos se ve si está madura o no, de manera obvia. 'i una fruta, una manana por e!emplo, está ya un poco ro!ita y tiene buen color, es muy fácil que esté madura. 'i está verde, todav#a no ha madurado. Pero es en su interior donde se va realiando la madure. 7ing*n profesional va a acelerar eso. 1a maduración sólo se realia desde el interior. 1a capacidad contemplativa de nuestra mente la hemos de ir descubriendo y haciendo nosotros. 2ada uno de nosotros. 7adie lo puede hacer por nosotros. $stas investigaciones las estamos haciendo cada uno de nosotros. 1o importante es lo que cada uno comprende. 1o importante de esta investigación es lo que cada uno de nosotros ha comprendido, y el significado que tiene esa comprensión como disposición de apertura hacia la mente iluminada.
ALIR !E LA REPREENTACIÓN " medida que la mente va tornándose iluminada se comiena a vivir por inspiración. 1a 5nteligencia va traspasándonos, y entonces se hace realidad aquello que dice nuestra tradición acerca de 3vivir en gracia4, o que el despertar es una 3gracia divina4, etc. $s decir, se revela la verdad, y el amor se epresa a través de nosotros, as# como la bellea, y as# la persona es simplemente un instrumento de manifestación en este plano de densidad cósmica que llamamos el mundo f#sico. " la ve, la persona está aqu#, en el tiempo, haciéndose y deshaciéndose momento a momento/ las células están en constante
cambio, la mente está en movimiento si hay una vocación de aprender, la mente está constantemente descubriendo y aprendiendo algo nuevo, etc. 1a persona es algo que está haciéndose y deshaciéndose. $l 3deshacerse4 de la persona es ir haciéndose más receptiva, más transparente a la verdad y a la lu. Y el ir 3haciéndose4 significa hacerse instrumento de esa 5nteligencia, de esa lu, de esa Verdad, de ese "mor de la Enidad. $ntonces, a partir de ese punto de descubrir que la realidad no es lo que nos parec#a desde la mente pensante, a partir de esa apertura a lo que denominamos 3poner la mente contemplativa4, en ese darse la vuelta, en ese girar empiean a verse todas las cosas de una manera nueva, y una vida nueva brota de esa nueva visión contemplativa. 7o puede brotar de otro lugar. 7o se trata de ninguna fórmula pensada porque cualquier fórmula pensada, sea antigua, moderna, ingeniosa, repetitiva, social, antisocial, de una tradición, de otra, o cualquiera que sea el ámbito de donde la co!amos, siempre será una mera representación, siempre será una realidad virtual, no una realidad viva. 2abe destacar que la 0ealidad viva de la que hablamos no es una realidad cualquiera. &ay muchas realidades que no son vivas, pues no son más que representaciones o imágenes. &ay muchas realidades virtuales, pero sólo hay una 0ealidad viva. Dse es otro gran misterio para la mente pensante. Porque la mente pensante piensa que se pueden hacer muchas representaciones de la 0ealidad y, por supuesto, dentro de ese nivel interpretativo hay much#simas posibilidades y habrá representaciones más iluminadas o menos, seg*n en qué lugar esté mi identidad. Bi representación del vivir puede ser más adecuada, más armoniosa o más bella si he abierto ya el hueco a la lu y esa lu va epresándose en todo lo que va apareciendo en la temporalidad. Pero todo lo que aparece en la temporalidad, por muy bello, armonioso, verdadero o adecuado que pareca, nunca es lo 0eal. $s siempre aparición en el tiempo, en la 0ealidad es algo impermanente que viene y se va. (7o lo hemos visto ya) Podr#amos preguntarnos por qué estamos tan apegados al tiempo, aunque si as# lo hacemos significa que estamos en el pensamiento, y el pensamiento es ya temporalidad. $n la temporalidad nace el pensamiento, y nos creemos que el tiempo es real porque creemos que el pensamiento es lo 0eal. 7o concebimos que haya algo sin tiempo. Pues bien. cuando aprendemos a contemplar, aprendemos a vivir fuera del tiempo, a vivir sin tiempo desde un lugar iluminado. $ntonces se ve que todos los demás lugares funcionan en la temporalidad, aunque vivimos sustentados en un impulso verdadero, en un impulso iluminado o con una inspiración de lo 0eal o de lo 6ivino o de lo 'agrado, como lo queramos llamar. 6esde ese lugar vivimos con inspiración, o también podr#a decirse que vivimos seg*n la voluntad de 6ios, tal como lo epresa el lengua!e religioso. 3$s la voluntad de 6ios4 se dice en nuestra tradición. $sa voluntad de 6ios de la que hablamos no consiste en una serie de normas que debemos seguir ésa es la representación que ha hecho el pensamiento de la voluntad divina. 1as maneras humanas de decir estas cosas se deben a que la religión ha querido adaptar lo 0eal con el fin de que pudiera ser entendido por todas las mentes, pero es evidente que no ha producido mucho efecto dado que de todas maneras no se entiende. 2ada ser humano busca la verdad seg*n su vocación, pero no se consigue nada intentando eplicarla mediante conceptos simplistas, como por e!emplo representar a 6ios como una persona y cosas de esa Fndole. 6igamos las cosas tal como son, hagamos una penetración más filosófica, más cercana a la sabidur#a. Porque si seguimos la inclinación antropomórfica de concebir todo a imagen de lo humano, nos quedamos encerrados en la creencia de que la obra de teatro que se está representando aqu#, en este lugar pensante, es la 0ealidad, la cual incluye un persona!e especial que es 6ios, con todos sus santos,
con todas sus revelaciones, sus mandamientos y sus sacramentos, incluyendo todo en la misma obra de teatro. $s necesario salir ya de esa representación y de!ar de abonar la imagen de un 6ios !usticiero que premia a los buenos y castiga a los malos. Para empear, habr#a que ver qué es eso de lo bueno y lo malo. 2on estas ideas sólo nos mantenemos dentro de la obra de teatro con el mismo argumento/ los que son buenos, los que son malos, el fingir ser virtuoso, la hipocres#a de adaptarse, de pretender actuar de acuerdo a las normas, la culpa, el miedo a ser castigado, etc. %odo eso forma parte del argumento de esa obra de teatro y aunque pasa el tiempo, algunos siguen anclados ah#, pasan los años y ese argumento sigue imperando en nuestra vida, con todos esos aneos escatológicos de lo que pasará después en la muerte, de cómo se castigará a los malos y se premiará a los buenos. y aun cuando haya una ona escéptica en la mente y el pensamiento diga/ 37o, todo eso no me lo creo4, la representación sigue a pesar de todo. Y esas fueras que no se han proyectado en una religión se proyectan en fueras materiales/ conseguir más poder o energ#a para poder manipular a los demás... $l caso es que, cuando estamos 3ilusionados4, estamos en la ilusión, cualquiera que sea nuestro ilusionamiento. 7o importa a qué persona!es imaginarios hayamos recurrido para que nos den un poder u otro, son imaginarios pero aun as#, tienen su fuera dentro del mundo ilusorio. 7o son reales, pero tampoco las personas somos reales. 'in embargo, dentro de este plano f#sico en el que habitamos, si una persona me da un golpe, yo recibo el golpe en el cuerpo y me resulta desagradable. $s decir, todos esos ámbitos tienen sus efectos, aunque sea sólo dentro del mundo ilusorio en que vivimos. 'i no queremos salir de él o pensamos que no tenemos la fuera necesaria para salir de ese mundo de sueños ilusorio, entonces nos ponemos a la tarea de me!orarlo seg*n las ideas que tengamos, o bien tratamos de ayudar a los demás porque hay mucho sufrimiento o, por el contrario, tratamos de ser más astutos que nadie, de buscar algunas fórmulas de magia para conseguir nuestros deseos, etc. "s#, cada cual actuará seg*n lo que más fuertemente impresione a su persona!e dentro del espectáculo de la obra de teatro. $n consecuencia, nos dedicaremos a cambiar la sociedad o a aprender a tener poderes parapsicológicos, o puede que nos adecuemos a las normas de una religión y las sigamos fielmente desde la creencia de que 6ios ayuda a los que hacen eso, etc. $fectivamente, cada uno tiene la ayuda y los desengaños adecuados al tipo de error que elige. "l final, todos se fundamentan en el mismo error básico/ me creo un ser separado e indefenso en consecuencia, tengo que recurrir a otros seres para que me den poder, ya sea pidiéndoselo por las buenas e bien manipulándolos, o bien engañar o ser hipócrita, fingir o encontrar alg*n truco, sea el que fuere, o rogar, o pedir a los que considero superiores porque tienen autoridad en este mundo o en otros mundos, etc. " esto se han limitado las religiones y todas las ciencias/ a conseguir manipular unas energ#as u otras, unos niveles u otros desde un lugar u otro. Y no es que eso no tenga sus efectos. %iene efectos. %odo lo que eli!amos tiene efectos dentro del mundo soñado. "s#, transformamos el sueño de una manera o de otra. 2uando estamos en el pensamiento, estamos cambiando de lugar las cosas todo el tiempo, constantemente estamos tratando de me!orar el sueño. Pero hasta ah#, todo es ilusorio. 1a verdad comiena cuando quiero ya salir de ese sueño, y entonces la mente empiea a tornarse contemplativa. Para salir del sueño no tengo que recurrir a ning*n profesional de ninguna ciencia, ni de las llamadas cient#ficas ni de las llamadas human#sticas o sociales o tradicionales o religiosas ninguna. $s necesario profundiar en la conciencia.
VIVIR EL CA"INO CONTE"PLATIVO "fortunadamente, todo ser humano está hecho de esa conciencia, de modo que se trata de profundiar en uno mismo. 8bviamente, no hay que ir muy le!os para hacerlo, pero s# hay que ir muy le!os en el sentido de ale!arse de las convenciones, ale!arse de las creencias, ale!arse de lo que uno pensaba que era la realidad, ale!arse de lo que todo el mundo dice. %engo que ale!arme de todo eso, y ello ocurre solamente cuando he comprendido 1o-que-$s. Por tanto, es necesario que se aclare nuestra visión, profundiar en nuestra conciencia, ver lo verdadero, que es simultáneo a de!ar caer lo falso o, lo que es lo mismo/ purificarnos, sensibiliarnos. $mpear a vivir con una mirada nueva es el punto de arranque de una vida nueva. Pero no lo haremos proyectando anhelos en el futuro, porque eso ser#a ya una representación pensada, sino viviendo el instante presente, el ahora en el que estamos conscientes y despiertos, viviéndolo intensamente. 35ntensamente4 no es tener muchas eperiencias sensoriales. Vivir intensamente es vivir desde un lugar profundo, y para profundiar no hay que hacer ning*n esfuero ni f#sico ni mental, sino solamente utiliar, usar lo que ya está siempre ah#, que es la capacidad de darme cuenta. Casta, pues, con usar la inteligencia. 'eguramente que en esta investigación nos hemos percatado de algunas cosas. Por e!emplo, que darse cuenta no es aceptar una teor#a u otra, no es estar de acuerdo o en desacuerdo no, no es eso. 7o tiene nada que ver con pensar ni con comparar unos pensamientos con otros. &emos dicho que eso corresponde al aparato pensante. Por el contrario, darse cuenta es una comprensión directa e inmediata de la realidad que no requiere de la mediación mental. " partir del darse cuenta empiea un estado de equilibrio mental al que tradicionalmente en nuestra tradición se ha llamado 3la v#a contemplativa4. Ya se utiliaba el término contemplar en la tradición griega desde Pitágoras, dentro de cuya escuela se hablaba del acto de contemplar. " su ve, Pitágoras lo hab#a aprendido de los egipcios e hind*es. Dse ha sido el camino contemplativo filosófico. Posteriormente se habló del camino contemplativo dentro de la tradición cristiana por parte de algunos religiosos 9los m#sticos cristianos: que hab#an descubierto una v#a directa para vivir de verdad, a la que ellos calificaban de 3unión con 6ios4. 6e este modo, además de los filósofos, también los m#sticos de las diversas religiones 9que no sólo la cristiana: descubrieron el camino contemplativo, teniendo mayor o menor repercusión en la religión que los sosten#a. Pues bien, ahora de!aremos las representaciones, tanto de nuestra tradición como las de las tradiciones orientales u otras, y utiliaremos lo esencial para contemplar/ la vida sencilla y la investigación desde la verdad. 6escubriremos as# que lo falso cae por su propio peso. $ste enfoque no obliga a aceptar una teor#a o una doctrina desde dentro, desde la mente, o a tomar un concepto en contraposición con otro concepto, sino que se afina el instrumento, se va afinando la mente hasta que se encuentra tan pulida que refle!a plenamente la lu de la 5nteligencia, y entonces se manifiesta la capacidad de darnos cuenta. &ay quien cree que ver la verdad es conseguir algo muy interesante, como una fórmula o una información. Ver la verdad no es eso, no consiste en tener una información nueva. Ver la verdad se parece más a desengañarse de lo falso. Ver la verdad es vivir la verdad, y vivir la verdad es ser la Verdad, lo cual es incomprensible para el pensamiento. $n consecuencia, no hay una teor#a por un lado y luego una práctica por otro. 1a
contemplación y la vida coinciden, son una misma cosa. 1a mente contemplativa crea la vida contemplativa, y cuando la verdad es contemplada se hace uno mismo la Verdad. 1a Verdad constituye la propia naturalea del que la contempla por tanto, ya no se profesa una religión, ni se forma parte de un grupo, ni se siguen normas. 7o hay ninguna norma. 1a verdad se tiene que epresar, y se epresa, en la mera felicidad de epresarse. 1a vida verdadera, armoniosa, auténtica, impregnada de amor y de bellea brota de la verdad, y es gooso vivirla. 'e quiere vivir aquello que es epresión de la verdad. 'i uno tiene el conflicto de, por una parte, tener el ideal de ser bueno pero, en verdad, gustarle más lo otro, lo que llaman ser malo, ese conflicto implica enfermedad mental, esa mente está enferma, es decir, está distorsionada, está alienada hacia las representaciones, se está creyendo muchas cosas falsas esto es lo que significa ese conflicto. 'in embargo, cuando la verdad empiea a iluminar la mente, nos vamos abriendo a esa dimensión, y el vivirlo es un acto gooso. 2ontemplar es, en todos los sentidos, la cosa más maravillosa que podemos hacer. $s regresar a nuestra verdadera naturalea, a ser lo que somos. 7o es cuestión de a!ustarse a un molde que por una parte nos gusta pero que por otra está en conflicto con nuestros hábitos e inclinaciones. $sos hábitos equivocados no se van a quitar a golpes. 'ólo la comprensión los arranca de ra# de verdad. 'i trato de quitarlos a golpes, queda la ra#, y la planta vuelve a crecer una ve y otra sucede entonces que se quiere hacer una cosa, pero luego se hace otra bien distinta porque aparecen toda clase de 3tentaciones4. 1os hábitos que nos destruyen debido a que van en dirección opuesta a nuestra naturalea, no hay que taparlos eso es una hipocres#a que crea un gran malestar en nuestro interior. %ambién es absurdo tratar de eliminarlos violentamente, porque vuelven una y otra ve, y as# nuestra vida es una guerra constante. 'ólo comprender arranca la ra# y lo hace por una sencilla raón/ porque lo falso no es verdadero, no es real. 2uando estamos en lo 0eal se disuelven los conflictos v los hábitos destructivos, pues no son reales. 1a irrealidad de nuestra posición mental ha creado una irrealidad en la vida/ crea falsedad, conflicto. $l vivir desde lo 0eal deshace esa irrealidad, es as# de simple. Pero tenemos que irlo viendo cada uno de nosotros poco a poco, en nuestra propia conciencia y en nuestra vida.
CAPÍTULO 8
¿Es posible trascender el pensamiento? CÓMO INE!TI"A# Si lo que intentamos es hacer una verdadera investigación filosófica, indagaremos por amor (fileo) y será una investigación en la propia conciencia ( vichara). De otra manera no tendríamos acceso a una verdad vivencial. La mente que investiga ha de estar en contemplación para trascender las opiniones pensadas. si no lo hici!semos así, nunca comprenderíamos la profunda sa"iduría que nos legaron aquellos investigadores hind#es, ni tampoco la más cercana de alg#n filósofo griego. $nvestigaremos ahora movidos por el mismo amor a la verdad desconocida, y puede que nos encontremos unidos en una contemplación l#cida y espontánea. La verdadera investigación filosófica ha sido y es, ante todo, contemplación de la verdad. la verdad, si no es simple relación lógica entre conceptos, apunta a un adentrarse en la conciencia más allá del pensamiento, un adentrarse en la conciencia que somos y en la conciencia que es% apunta a nuestra verdadera identidad. &o e'iste un contemplar privado, egocentrado, aunque así lo pareca cuando se piensa. no es posi"le tampoco un investigar creativo que se limite al simple captar, interpretar y repetir conceptos. uien lo intentara así, estaría le*os del amor por la verdad que movió a los sa"ios orientales y occidentales. +n una investigación como !sta hemos de superar el campo de las computadoras, sin limitarnos a reci"ir información, compararla y repetirla% y así, en la conciencia, en lo #nico real, podrá traarse un movimiento de aprendia*e directo que producirá una evidencia inmediata, no racional e impulsada siempre por el amor a lo verdadero. +l movimiento de aprender, al que se refería a menudo rishnamurti, es un ampliar la conciencia en la lucide de la que está constituida, no una acumulación de datos para construir teorías y contrateorías. -asta aquí hemos venido poniendo unas "ases sencillas, pero esenciales, para poder acceder a una investigación de la verdad en la propia conciencia. Si nos sorprende lo hasta aquí comentado es porque lo que es #til en el ám"ito de lo conocido, en el de lo t!cnico o funcional, siempre mecánico, no lo es cuando lo que se pretende es un inquirir en lo esencial, como es el caso de proponernos comprender el acceso a lo eal no pensado. &os situaremos, por tanto, en actitud de auto/o"servación% daremos un giro al mirar, contemplaremos para descu"rir de primera mano lo que hay, y así estaremos en una situación previa al acto de manipular los datos mediante el pensamiento. La relación de separatividad entre el que ense0a o muestra la verdad de algo y el que aprende es sólo aparente aquí, en este lugar donde realiamos la investigación. +l que ense0a y el que aprende, como el que pregunta y el que responde, surgen am"os simultáneamente en el mismo movimiento dial!ctico de la conciencia que somos. Si tenemos esto presente desde el principio de la investigación, evitaremos caer en las ilusiones de separatividad que aparecen a menudo cuando aprendemos *untos. De*ándonos llevar, sin más, por la dial!ctica espontánea que el amor a la verdad traa en
la conciencia, surge la pregunta y, simultáneamente, la respuesta que ella misma lleva consigo.
LA P#E"UNTA PO# LO IMPEN!A$O 1sí como una piedra, al caer en la superficie del agua, imprime una vi"ración que repercute en círculos conc!ntricos, así suele caer una pregunta en nuestra conciencia. 2ero la pregunta3 45+s posi"le ir más allá de los círculos de la temporalidad pensada67, la encontramos ya en un punto entre el pensar y el intuir. Si instalados en el pensar no hu"iera ninguna intuición, no se plantearía la cuestión. 2orque así como el pe se mueve en el agua y no inquiere so"re lo que hay fuera de ella, así el pensamiento no puede preguntarse por lo que hay más allá del mismo pensamiento. La pregunta planteada surge, pues, como un sinsentido para el pensamiento. Si tiene sentido será a su pesar y desde una capacidad diferente de conocer. +stamos ha"ituados a *ugar y a sacar conclusiones so"re toda clase de cosas, a com"inar relaciones. a esta forma de conocimiento secuencial le damos la autoridad que conviene en cada caso. 2ero en estos momentos nuestra posición es diferente. 1l hacer esta clase de preguntas que des"ordan al pensamiento, no vamos detrás de un conocimiento relativo, sino de una visión glo"al que incluya y so"repase toda relación diferenciada. 1l preguntarnos por la trascendencia del pensar no nos referimos a eliminar, parar o anular el pensamiento, como es costum"re en los m!todos, t!cnicas, o podríamos decir tam"i!n 4trucos7, conce"idos para tener e'periencias inusuales meditando. +l trascender algo no es huir de ello ni de*arlo a un lado. 8rascender el pensamiento es a"rirnos a un lugar allende el pensar, desde el cual el proceso pensante se ve tal como es. 5 despu!s6 Despu!s nada, todo permanecerá en su sitio y no ha"rá especulación ya que retenga las dispersas energías. Se ha"rá traspasado aquella atmósfera rarificada. 9"servemos la diferencia. &o tratemos de hacer ninguna presión o supresión de algo. &ada se forará ni controlará. :e pregunto qui!n fue el que difundió la consigna de que el pensamiento ha de ser controlado o aniquilado. 51 qui!n se le pudo ocurrir seme*ante cosa, sino al pensamiento mismo6 ;uando lo o"servamos atentamente, nos damos cuenta enseguida de que es el pensamiento el que piensa que no tiene que pensar más. &unca a la inteligencia, que es lucide, se le ocurre eliminar algo. La lucide comprende, integra todo en la armonía de la lu. De la claridad de la inteligencia "rota la comprensión del pensamiento, "rota la visión de Lo/que/+s, que no cam"ia nada de lugar% mientras que del propio pensamiento, confuso ante las contradicciones inevita"les en su ám"ito, surge el deseo de eliminar lo no comprendido o de huir de ello. 1l ver esto con claridad, quedamos li"res de un c#mulo de m!todos y sistemas forados para aca"ar con el pensamiento y meditar (difíciles de realiar y, por otra parte, "astante frustrantes), y comprendemos lo que tratan de decirnos quienes han a"ierto un camino en la lucide. 58endrán !'ito intentos a"surdos y desequili"rados6 1 veces sí, lo que es triste, porque entonces la mente queda inutiliada. uedarse sin pesar no es un estado de inteligencia, a no ser que ya est! ahí la lucide inspiradora en el pensar mismo. ;uando por repetición de pala"ras u otras 4astucias7 se em"ota la mente del o"ediente seguidor, de manera que se queda en "lanco, no se ha dado allí un avance en la realiación humana, más "ien se ha producido un deterioro lamenta"le. :ir!moslo con
cuidado, aun cuando estemos "a*o la influencia de costum"res y tradiciones religiosas orientales y occidentales. ;eremonias, oraciones, gestos repetitivos se intensifican hasta de*ar en ocasiones a la mente en un estado de aturdimiento so0oliento por el que algunos creen vivir ese silencio mental del que han oído ha"lar.
CÓMO EMO! CAE# LA! %O&A! $E LO! '#(OLE! 1"riremos aquí un camino nuevo. &o tendremos en cuenta nada de lo que ya nos es conocido, lo que tiene que ver con condicionamientos ensalados por la moda actual o respaldados por tradiciones antiguas. 2orque las erróneas interpretaciones de los te'tos antiguos son tan comunes como la perea del investigador para o"servar por sí mismo. Los aforismos de yoga de 2atan*ali tienen una definición muy famosa de lo que es el yoga (la unión con lo eal), que se suele enunciar así3 4oga es la cesación de las modificaciones de la mente7 ( citta vritti nirodbab ) (&ota del +ditor3 La concepción más amplia de 4modificaciones mentales7 incluye a los pensamientos pero tam"i!n a todas las demás modificaciones, como son las emociones, los sentimientos o cualquier otra so"reimposición de la mente so"re lo eal. La e'presión sánscrita tam"i!n se traduce como 4aquietamiento de las fluctuaciones mentales7, pero parece que la primera traducción es más precisa . Sea como fuere, am"as e'presiones aluden, en esencia, a la quietud o al silencio mental propio de la contemplación.) 2atan*ali intentó decir algo distinto de lo que entendemos por control. 2odría ser poner orden, equili"rar o dirigir el pensamiento en la mente. 2ero eso no es meta en sí, sino más "ien efecto. 1l proponerme desde el pensamiento poner orden o armoniar el mismo pensamiento, 5qu! !'ito puedo tener en esa empresa6 Si desde allí, con un pensamiento más, quisiera comprender lo que el mismo pensar es y crear por esta comprensión la armonía, estaría intentando lo imposi"le. ;uando pienso que de"o poner orden en el pensar, y es un pensamiento quien lo piensa, lo que estoy creando es conflicto, lucha entre los pensamientos que veo desordenados y el control que quiero e*ercer so"re ellos, imponi!ndoles una manera de pensar ideal. ;ontrolar los pensamientos pensando no hace sino crear un pro"lema adicional, además del que ya vivía en medio de la contradicción pensada. 2atan*ali, que sin duda tendría e'periencia directa de lo que e'presa"a, no querría decir eso. +sta"a descri"iendo los efectos que se producen cuando la mente se encuentra en equili"rio, es decir, cuando desde la comprensión reina la claridad. 1ntes de caer en la identificación con el pensar, en la mente hay orden y armonía. Si entonces aparecen pensamientos en la superficie de la conciencia, se ven como tales y no se produce identificación o errónea interpretación, y la ausencia de identificación evita actuar por compulsión. ;ómo vemos caer las ho*as de los ár"oles o la lluvia que cala la tierra, cómo miramos pasar las nu"es en el cielo, así podemos ver pasar los pensamientos por la superficie de la conciencia infinita. a sean recuerdos u opiniones escuchadas, así comtemplados no compelen a la acción ni crean emociones de temor, tristea o am"ición. +l pensamiento, en sí mismo, no tiene por qu! crear ninguna emoción, como tampoco la crean las ho*as que caen o el ver pasar las nu"es. +so sólo sucede cuando un pensamiento se convierte en creencia y, a partir de las emociones, compele entonces a la acción. +l pensamiento es, por tanto, la perpetuación mecánica del pasado que impide la creación del presente por miedo de lo que sucederá o por deseo de repetir es pasado y
cómo vivir en !l no es un vivir real sino un sue0o, una representación repetida. Sólo podemos descu"rir lo que la vida es desde la verdad que encontramos allende el pensar. ;on el pensamiento repito el pasado al desear e'perimentar lo placentero y evitar lo desagrada"le. 1sí, los pensamientos son formulaciones que nos hacemos so"re el pasado y el futuro a partir de lo que di*e o me di*eron% son las opiniones que he leído o escuchado, las consignas con las que me han educado y que he guardado por miedo o am"ición. +l pensamiento no se alimenta sino de memoria. 1l igual que una máquina, se manifiesta tal y como ha sido programado% no hay en !l ninguna apertura a lo nuevo. &o está, por tanto, vivo, ya que lo que vive se caracteria por ser nuevo en cada instante. Las conclusiones de lo mecánico, por más información que acumulen, estarán muertas para la creación de la vida. Seguimos aceptando, sin em"argo, que cuanta más información tengamos, más vivos y creativos podremos ser. +so es una quimera. +s fácil ver que nuestras mentes, a"arrotadas de datos, están muertas para la plenitud y la "ellea de la verdad viva. Si no fuera así, no conoceríamos el a"urrimiento, el desánimo, la ansiedad y todos esos síntomas patológicos que, por ser tan comunes, consideramos normales. Sólo la verdad está viva. la verdad es anterior al pensamiento% no es pensada, si "ien es cierto que pueden darse pensamientos de verdades relativas y tam"i!n de intuiciones. Los pensamientos acerca de verdades relativas sólo son e'actos relativamente y sólo son verdaderos en el momento que son formulados, porque la realidad está en constante movimiento y toda relación verdadera, vista en un instante específico, de*a de serlo al momento siguiente. +l pensamiento relacional es apenas un refle*o momentáneo, como un relámpago. Sin em"argo, nuestra mente archiva y acumula las verdades momentáneas, y las guarda listas para ser colocadas de nuevo en cualquier momento. +sta colocación está siempre fuera de tiempo y de lugar, porque el instante verdadero, aun no ha"iendo sido conocido como nuevo por falta de lucide, es #nico e irrepeti"le% es siempre un reci!n nacido, que no sa"e nada del pasado e ignora el porvenir. ;uando aplicamos lo pasado al presente #nico, mantenemos la am"ig
¿PUE$E !E# C#EATIO EL PEN!AMIENTO? Lo que hemos venido afirmando respecto al pensamiento no se aplica al pensamiento en sí mismo, sino a nuestra manera de vivir identificados con el pensar. -emos dicho que puede darse un pensar so"re verdades relativas e intuiciones. +ste pensar es un instrumento alineado con la lucide pues presenta formas adecuadas a las relaciones que se esta"lecen en el vivir cotidiano, ya que las coloca seg#n un orden inteligente, un orden inspirado por lo eal tras el pensar. &o es diferente al tra"a*o que efect#an las máquinas cuando son #tiles, aun sin ser creativas. $ncluso puede tratarse de un pensamiento so"re intuiciones, como la poesía o la filosofía inspiradas, que son intuiciones de aquello que está más allá del pensar y a lo cual el pensamiento da forma. 2ero para que el pensar sea vínculo de creación (aun cuando !l mismo no sea creativo), hemos de morar en aquel lugar creador donde nace la lu% y viviendo en esa li"ertad que
siempre crea lucide, el pensamiento puede entonces dar forma a una inspiración. 1sí es el pensamiento que honra a la humanidad, y que a veces puede ser científico si parte de la e'periencia y se0ala verdades relativas, a veces filosófico si tiene su origen en la intuición de verdades totaliadoras, y a veces po!tico si transporta la verdad sentida o presentida en imágenes "ellas. La actividad creativa no siempre se reduce a una o"ra de arte específica. ;ualquier gesto, actitud, pala"ra o simple mirada, cuando son e'presados desde un estado de lucide, poseen el invisi"le sello de autenticidad que proviene de la inspiración y producen un concepto, una idea o un pensar que son instrumento de la creación de lu. La vida, en esa li"ertad del pensar, es vida espontánea. ;omo función manifestadora de sím"olos, el pensamiento puede entonces quedar integrado en una vida creativa% porque una poesía inspirada, por e*emplo, no pierde su fuera inspiradora cuando es copiada en un ordenador. De la misma manera, el uso del pensamiento no resta autenticidad a la creatividad espontánea del vivir. uede claro que entendemos por 4vivir aut!ntico7 eso mismo que -eidegger insinuó al ha"lar de la e'istencia 4que escucha la llamada del Ser7.
LA O(!E#ACIÓN $EL P#OCE!O $EL PEN!A# a ha"remos visto que el pensamiento es un o"stáculo para la plenitud de la vida de"ido a que identificamos pensar e inteligencia. La realidad, sin em"argo, es que el hecho de pensar no es más que una forma de presentar la lucide de un modo particular, que será tanto más adecuado a la situación cuanto más fuerte sea la claridad de visión. +sta adecuación no depende del pensar mismo, al contrario de lo que solemos creer, pero es por creerlo así por lo que llenamos la mente con pensamientos de otros, con la intención de aprender a pensar me*or. &o o"stante, todo ese pensar so0ando lleva inevita"lemente a la frustración. +l camino no es tratar de ser o de pensar me*or. Lo que he de aprender es a darme cuenta del pensamiento que, por distracción, identifico conmigo mismo. 2ocas veces se ha planteado esto entre los muchos caminos que se ense0an para meditar% por el contrario, se suele creer que todo ese mundo conceptual es conflictivo y difícil de controlar, motivo por el cual los practicantes prefieren de*arlo y dedicarse en cam"io a la o"servación de las sensaciones corporales, que resulta un quehacer más cómodo. 1demás, en lo sensorial se encuentran efectos rápidos de rela*ación y energía vital. 5:e conformar! con ellos6 Si lo hago, nada esencial descu"rir!% no comprender! el pensar, que se mantendrá en el mismo desorden ha"itual, aunque por momentos logre que su discurrir sea algo más lento, y fácilmente compro"ar! que al volver de los e*ercicios mi mente sigue en conflicto. :e preguntar!, quiá3 5u! hacer cuando se presenten los retos del vivir que no he comprendido6 52odr! sentir entonces la pa de la rela*ación6 Si me centro en las sensaciones 5podr! responder con inteligencia a esos retos6 2rofundiando desde el nivel sensorial, llegar! a un "ienestar vital, pero la mente pensante mantendrá ocultos sus secretos para mí. Se da la curiosa parado*a de que *usto los maestros o discípulos que desaconse*an el permanecer en la mente, porque consideran lo intelectual o"stáculo del espíritu, son los más encerrados en el pensamiento, los que más compulsión tienen con las ideas en las que creen. Lo he o"servado con sorpresa a lo largo de la vida. 2recisamente, quien huye de lo mental está dominado sin darse cuenta por ello, pues le falta el auto/conocimiento
que produce la o"servación del pensar. uiá quienes no se hayan planteado este dilema est!n tra"a*ando con la mente de alguna manera. 2ero los que ya se han determinado a no hacer nada mental son dominados por el pensamiento a nivel inconsciente, ya que aqu!l les impulsa aunque no se den cuenta, entretenidos como se encuentran con las emociones que sus ideas y creencias les han producido. 2odemos hacer innumera"les cosas mientras nos sensi"iliamos, como pasear por la naturalea o seguir t!cnicas milenarias orientales. 2ero no creamos que !sa es la vía directa hacia la verdad li"eradora. 8odo el tiempo que vivamos sin ha"er comprendido el pensar seremos marionetas de esos fantasmas pensados. &uestra vida será una vida imaginada, no real, y esto sucederá a pesar de ha"ernos sensi"iliado y de e'perimentar elevados sentimientos. ;uando el pensamiento no ha sido trascendido, tiene una gran fuera% no por sí mismo, pues hemos visto cómo es un instrumento formativo de lo concreto, sino por la identidad proyectada en !l. +s la fuera de lo que yo creo ser, de aquello que soy pero que ena*eno. Lo eal es potencia pura% y cuando sale de sí, se proyecta distorsionado en lo que creo que soy.
LA! C#EENCIA! =na creencia es un pensamiento que tiene la fuera de la identificación con lo que creo ser, y que erróneamente mantenemos de"ido a la inatención. 5;ómo se han ido formando esas creencias6 5;ómo es que los pensamientos se han petrificado hasta el e'tremo de parecer realidades6 5;ómo hemos llegado a creer que somos sólo eso que creemos6 De hecho, nos defendemos haciendo apología de nuestras creencias. :uchos de los ám"itos llamados espirituales no se diferencian nada en esto de los llamados científicos, culturales o sociopolíticos. +n cada grupo, sea religioso, científico o social se enar"olan unas creencias que son intoca"les porque se viven con gran intensidad, se viven como si fueran lo eal. Si damos a la pala"ra 4sagrado7 su valor de intuición de lo infinito más allá del pensamiento, veremos que nunca algo limitado que se opone a algo limitado puede ser considerado sagrado. Lo sagrado no ca"e en una ley nacida en la e'periencia sensorial ni en una consigna nacida de una revelación novelada. Lo sagrado no admite fórmulas% por eso no hay te'tos sagrados, ni ideas, ni teorías espirituales que sean totalmente válidos. 8ampoco hay actividades ni t!cnicas de ninguna clase que tengan ese sa"or sagrado que sólo conoce quien, trascendiendo el pensamiento, descu"re la infinitud de lo eal. si intuimos ya que somos lo sagrado, 5qu! hacemos entretenidos en la "#squeda de lo prefa"ricado por el pensamiento de otros6 5Dónde "uscamos la verdad6 52retendemos encontrarla entre los restos de pensamientos construidos a partir de limitadas interpretaciones6 Lo que ha sido clasificado por el pensar no es aquello a"soluto que intuimos como verdadero o sagrado. La verdad no se mantiene rígida% sólo el pensamiento puede conservarse en la memoria. La verdad que nació en un instante, en ese mismo instante termina como verdad temporal. :uere con cada pulsación del coraón, porque no es del tiempo. &o puede, por eso, introducirse en el cauce de los pensamientos que corre en la temporalidad. La verdad pertenece a lo atemporal.
Si en un instante un ser humano tiene una inspiración, de ahí no pueden deducirse series de verdades pensadas. 2ara comprender la e'istencia, he de sorprenderla en un latido vivo de mi conciencia l#cida. De ahí la necesidad de contemplar por mí mismo, a fin de superar toda clase de creencias y de vivir en el estado siempre nuevo de lo impensado. 5;oncluiremos entonces que la verdad que aparece al investigar termina o se escapa de inmediato6 Si estamos en el carril del pensamiento, la verdad no durará nada. Sólo una mentira puede continuar creando argumentos imaginados. :i identidad, el o"*etivo #ltimo de toda aut!ntica investigación 4 vichara7, no está en lo que aparece y desaparece, como se afirma una y otra ve en los te'tos de sa"iduría hind#. Sólo en un instante intuyo y vivo lo verdadero, y desde allí puedo ser movido hacia lo atemporal mediante el contemplar. =na planta, al florecer en toda su "ellea para enseguida desaparecer, nos incita a preguntarnos3 5De dónde ha surgido, a dónde ha ido6 1quello que no es sím"olo pensado, 1quello que el pensar no toca, sorprende como un rayo no esperado. $lumina y vuelve a lo eterno, y sólo desde el silencio del pensamiento es posi"le ver la dirección de su vuelo.
PEN!AMIENTO ) LI(E#TA$ 52uedo o"servar dónde me encuentro ahora6 51nalio conceptos6 9rdenar datos seg#n un modo inteligente es tarea mecánica del instrumento pensante, mientras que la inteligencia misma, que es su origen, es pura lucide. Si analio, estoy en el pensamiento% y si analio los conflictos del pensamiento, como ha hecho el psicoanálisis, lo hago con el pensamiento mismo, el cual crea conflicto porque no es l#cido. La contradicción se perpet#a así. ;onocemos, sin duda, interesantes teorías psicológicas% pero la conciencia de los seres humanos no se li"ra del error aplicando una teoría científica o no científica. De*emos, por tanto, el análisis del pensamiento, esa capacidad mecánica de com"inar datos. +l analiar promete una li"ertad imposi"le al pensar condicionado. &o intentemos aclarar con el pensamiento la inmensidad de la vida humana, tan intensa en sus anhelos como en sus frustraciones. >eamos si podemos contemplar en directo más allá del pensar. Los sistemas teóricos me*or estructurados han demostrado ser castillos de arena e'puestos al viento de la verdad, las ideas se disuelven en el vacío de los moldes pensados. 1sí, al o"servar la formulación y desaparición de los pensamientos seg#n las !pocas, nos independiamos de la concepción cultural. 1unque con discernimiento podamos ver las intuiciones que laten en tanto pensamiento contradictorio, lo eal ha de ser descu"ierto en el instante por nosotros mismos% y para descu"rirlo ha"remos de ver lo que el proceso del pensar nos oculta. &i la autoridad o el prestigio que las emociones egocentradas han dado a las ideas, ni el temor disimulado tras la adhesión a ideologías dogmáticas, esc!pticas o agnósticas tienen fuera de persuasión para quien ha desvelado ese misterio. 5uedará alguna afirmación con autoridad despu!s de descu"rir lo que es el pensamiento6 &ada limita la li"ertad que produce el descu"rir lo verdadero. Seremos li"res en la verdad, como tantas veces hemos oído decir en las tradiciones filosófico/religiosas de 9riente y 9ccidente% y no se referían a la li"ertad condicionada que deseamos pensando, la que
sue0a con mane*ar a otros o pasar e'periencias imaginadas, ni a la li"ertad que surge del vacío de lo eal y que conduce a un vacío cada ve mayor. La verdadera li"ertad pasa por la comprensión del pensamiento. comprender el pensamiento y trascenderlo es un mismo acto. 2or ello, no hay ning#n esfuero que hacer, como venimos viendo. Ser conscientes de lo que se está creando al pensar es suficiente para quedar li"re de sus efectos. 2ero al menor parpadeo caemos en lo convencionalmente esta"lecido como normal y que no es más que la pauta del vivir alienado en la rutina. 8endríamos que estar despiertos, mucho más despiertos de lo que acostum"ramos en esa vigilia cotidiana que, ante la lucide, no es más que un simple dormitar so0ando. 5 de dónde o"tendremos esa capacidad6 ;reemos no tenerla de"ido a que vivimos con la poca energía que de*an pasar nuestros pensamientos o creencias. 2ero, 5sa"emos algo del potencial que se encuentra detrás o antes de lo pensado6 +n el campo del pensamiento y en el físico (am"os forman3 un mismo ám"ito relacional), hay diferencias entre las personas a partir de su mayor o menor facilidad para computar datos, seg#n las circunstancias "iológicas y sociales, pues las máquinas funcionan de diversas maneras seg#n su construcción y tam"i!n seg#n el uso al que se dediquen. 2ero independientemente de las cualidades "iológicas de la persona y de la utiliación social a la que haya dedicado su cere"ro, y sin tener en cuenta los "aremos que guarda la memoria al pensar, en esencia todos somos inteligencia, lucide no canaliada por condición alguna.
EI$ENCIA +n el momento en que tengamos la necesidad interna de ver, veremos. conforme nos vayamos a"riendo a la verdad intuida por amor a la verdad, el movimiento de darnos cuenta de lo que aparece creará espacios l#cidos a"iertos a lo atemporal y el vivir será e'presión de una conciencia más y más amplia que descu"rirá una mayor li"ertad. De*ando a un lado los datos adquiridos y acumulados en el tiempo que condicionan cuanto toco y hacen de mi actuar una acción pensada, descu"ro una personalidad insólita3 puedo darme cuenta de todo lo que se está moviendo y de las energías que sustentan ese movimiento mientras pienso. &o es sa"er algo, como construir una casa, ha"lar un idioma o hacer una ensalada, ya que el sa"er es información y se agota en su misión t!cnica. &o es esa capacidad pensante que incluye lo cultural. +s una toma de conciencia directa, una evidencia a salvo de cualquier vacilación. 1l darme cuenta (sin dirección a un o"*eto, porque esto sería ya pensar), la lucide ilumina lo que aparece en lo que +s% y eso es inteligencia en su estado puro, es inspiración. &o hay medida en ella, aunque despu!s de ella se puedan pensar todas las medidas imagina"les. 2or inspiración surgen las proporciones adecuadas en una estatua% y despu!s se miden y se toman de modelo, como hicieron los griegos. 2or inspiración se conci"e una poesía y es posi"le luego medir las pala"ras y los ritmos. 2or inspiración aparece una melodía y podemos medir en ella los sonidos y los silencios. 5Dónde tiene su origen esa inspiración6 +n el ám"ito de lo conocido analiamos las diferencias, pero en el estadio anterior o posterior al pensar todo ser humano es lucide ilimitada, y de ahí su inspiración. Desde
ese espacio l#cido puede iluminar lo que sucede "a*o la mente, puede descu"rir su verdadera identidad en la lucide y li"erarse entonces de las apariencias condicionantes. así, por el simple acto de darse cuenta de lo que piensa, estrenaría la li"ertad de Ser como estrenan los campos la lu cada primavera.
CAPÍTULO 9
El arte de contemplar es el arte del ser LA LLAMADA DEL SER Contemplar mientras se investiga es dejar que la mente se movilice con las verdades que van apareciendo, dejando un espacio abierto para que la verdad penetre y para que surja entonces espontánea desde dentro (no desde el pensamiento) la respuesta a la verdad. Esta verdad que aparece espontánea se percibe con evidencia. ¿Y qué es una evidencia Es una serena pa!, el equilibrio de ser lo que somos. "a verdad no se piensa, se es. El arte de contemplar es el arte de ser. El avan!ar en la contemplaci#n es avan!ar en el ser que somos verdaderamente y que se evidencia cuando contemplamos. Esto no se puede comprender desde la idea err#nea que tenemos los $umanos de que una cosa es conocer y otra es ser. Cuando pensamos, siempre lo $acemos desde la dualidad primigenia de la mente que escinde lo %eal en dos& el que mira y lo mirado, el contemplador y lo contemplado. 's no podemos comprender y por eso mismo creemos que el contemplar nos aleja del ser, cuando es realmente lo contrario. Creemos que la verdad está objetivada y que el yo que la contempla está aparte de la realidad, y al pensar de esa manera no es posible que coincida el contemplar con el ser. *ero, ¿y si no +uera as, ¿y si la realidad +uera una y estuviera $ec$a de conciencia, ¿y si todo +uera creaci#n de esa conciencia y, al contemplar, creáramos e $ec$o, eso es lo que sucede& la lu! de la conciencia es la creadora de realidades. "a lu! que ve, al ver crea contemplar es reali!ar. -na vida contemplativa es, as, una vida de reali!aci#n. 'quel que comien!a a tener la mente contemplativa empie!a entonces su reali!aci#n, y no antes. 'ntes de ello, por muc$o que se es+uerce en su realidad proyectada, no descubrirá lo que es el ser. El ser es /er0, lo cual quiere decir que s#lo se puede descubrir siéndolo. *royectando en una pantalla mental nunca llego a ser. /omos una llamada del /er, pero estamos constantemente inmersos en miedos, limitaciones, angustias, de modo que nos $allamos en la ilusi#n de que no somos, de que nos +alta algo. e alguna manera somos conscientes de que creemos que no somos, de que $ay algo que nos +alta, y de a$ surgen los deseos, emociones, etc. /e nos plantea entonces el dilema de tratar de llegar a ser, de modo que proyectamos el an$elo $acia +uera para llegar a continuaci#n a creer que no somos. En este crculo vicioso s#lo $ay un punto verdadero& la llamada del /er. En el tratar de llegar a ser ya e1iste una llamada del /er. El punto básico para comen!ar una va contemplativa dentro de la va $umana de reali!aci#n reside en que intuyo que soy. e $ec$o, ya soy, pero es como si no lo +uera porque no me lo creo pero en eso ya $ay algo real en nosotros, algo que está tapado por imágenes y pensamientos pero que ya está a$. Y $ay un camino sencillo para desvelarlo& contemplar directamente lo que somos. Cuando nos $allamos en un vaco mental esa contemplaci#n nos transporta instantáneamente a lo que somos sin embargo, lo usual es que obstaculicemos el encuentro a través de las realidades que inventamos. *or tanto, lo
tengo que intentar una y otra ve!, ya que tengo muc$as realidades inventadas que me están obstaculi!ando y que se resumen en todo aquello que creo que soy pero que no soy. El camino de nuestra propia tradici#n, desde los plat#nicos $asta los neoplat#nicos, es la ascesis dialéctica y la contemplaci#n de la verdad. Es cierto que $ay caminos magn+icos en 2riente, pero los de 2ccidente $an sido pasados por alto, no se $an entendido como caminos de reali!aci#n. "os estudiosos de +iloso+a conocen la dialéctica plat#nica como una teora, pero nunca se $an planteado aplicarla a s mismos, de modo que se $a olvidado su capacidad reali!adora. /in embargo, es un camino muy directo y adecuado para nosotros. Consiste en no tener en cuenta lo que creemos ser, lo que nos +alta, nuestros de+ectos y cualidades, para en cambio contemplar directamente aquello que an$elamos pro+undamente. Ello nos lleva directamente al lugar de donde proviene nuestro an$elo. Eso es una ascesis contemplativa. *or ella nos ponemos en contacto directo con los valores que vienen directamente del /er& la belle!a, la bondad y la verdad. 3nvestiguemos sobre ese an$elo pro+undo. *odra pensar que no $e encontrado en m de +orma clara ese an$elo pro+undo de amor, belle!a y verdad. /i ya lo $e encontrado, no $ay nada más que $acer s#lo lo contemplo. *ero si no lo veo claro, no importa puedo rastrearlo desde donde me encuentre, pues todos los deseos vienen a partir de ese an$elo. ¿#nde van a iniciarse si no '$ adquieren su +uer!a. 4odos los deseos son llamadas del /er que se $an entretenido en las +ormas, en lo cambiante. 5ui!á no los recono!co todava como llamadas directas, ni tan siquiera como esencia de esos valores primordiales, pero eso es lo que son. 6emos de mirar bien nuestros deseos& el deseo de que me aprecien, de tener más +uer!a, seguridad, equilibrio... 4odo ello lo buscamos +uera. *ero tomando, por ejemplo, el deseo de algo bello, debo mirarlo e ir a donde veo belle!a, y debo ver que esa belle!a es un re+lejo de la belle!a que me está llamando desde el /er. 7unca voy a saciar los deseos en las +ormas, veré pasar +ormas bellas cambiantes y me entusiasmaré o de+raudaré ellas están re+lejando belle!a, pero no son la belle!a. "o que está en lo pro+undo de mi an$elo es la belle!a, en s misma. /i tengo deseo de que me quieran, $ay que mirar cuándo surge, de d#nde viene. ¿8e siento carente de amor Entonces me $e alejado del amor que soy por eso lo busco en los actos de los otros. ebo observar que esos deseos vienen directamente del amor, que es e1presi#n del /er. El /er, es decir, la %ealidad me está llamando a partir de esos deseos. ¿*or qué no escuc$o la llamada y me pongo en contemplaci#n de ese amor que an$elo ¿*or qué no empie!o a contemplar ebo $acerlo insistentemente, todos los das, y preguntarme& ¿por qué necesito amor, ¿cuál es el amor que necesito /i lo necesito es porque sé lo que es, es porque ese amor está en mi conciencia y, por tanto, puedo contemplarlo en cualquier momento. Cuando lo contemplo, le devuelvo la +uer!a que le $aba quitado y que $aba puesto en otras personas o en situaciones e1ternas, etc. 'l contemplar, recojo toda la energa que $aba volcado en las +ormas y la remito a su origen. Contemplar es devolver las cosas a su verdadero lugar. Cuando me percato de mi an$elo, descubro que todo está en m mismo y contemplo entonces directamente aquello que me está llamando desde tantos re+lejos.
' contemplar se aprende contemplando, jamás pensando. En cada momento debemos estar en contemplaci#n de aquello que intuimos y debemos mirarlo desde ese lugar contemplativo. 7o tiene sentido aceptar ideas sobre lo que la contemplaci#n es, ideas que surgen del pensamiento debo aprender a contemplar. e esa manera, no actuaré en la vida diaria de cualquier modo, sino que se $abrá abierto ante m un camino contemplativo y sabré cuál es la direcci#n de mi reali!aci#n, independientemente de los acontecimientos e1teriores. Estaré movido por mi visi#n verdadera, sin condicionamientos e1ternos. LA VERDADERA COMPRENSIÓN 7o se puede actuar en lo $umano sin inteligencia. Es necesario comprender los principios y los +undamentos de la %ealidad. Comprenderlos, que no aprenderlos (en el sentido de abarcar el saber, que no en el de adquirir conocimientos0). Ya $emos visto que comprender y ser no están separados. Cuando comprendo, soy aquello que comprendo no $ay comprensi#n si no llego a ser aquello que $e comprendido. Estamos acostumbrados a creer que cuando se $abla de inteligencia se $abla de in+ormaci#n y conocimientos. *ero no estamos $ablando de eso. "a verdadera inteligencia es comprensi#n. "a comprensi#n es un abarcar total, y eso, en 9ltimo término, es ser. Comprender es contemplar y ser entonces comprendes. "a vida de la persona contemplativa es un comprender constante es ensanc$ar, ampliar nuestra conciencia, descubrir que no tiene lmites. Eso es verdaderamente comprender. Cada ser $umano $ace aquello que comprende, porque no se puede $acer más que aquello que se comprende as, todo el mundo act9a seg9n su visi#n. Cuando la visi#n es estrec$a, lo natural es que $aya caos. Entonces se buscan técnicas y caminos, pero como no $ay claridad de visi#n, lo normal es darse golpes contra todo, pues cuando la mirada es limitada no $ay comprensi#n. ' los que tenemos la vocaci#n de buscar la verdad directamente se nos debe incitar a comprender más, a darnos cuenta0 y, por tanto, a +orjar una mente contemplativa. e la contemplaci#n de la verdad, de la comprensi#n verdadera surge espontáneamente la acci#n adecuada. /in embargo, casi nadie se cree esto, de modo que vamos buscando que otros nos den las respuestas sobre lo que debemos $acer. Cuando $ay con+usi#n en la mente es mejor no actuar, porque entonces los actos serán causa de una con+usi#n a9n mayor. /i estoy con+uso es mejor parar y empe!ar a darme cuenta de lo que sucede, en qué situaci#n está la mente, mirar, observar serenamente qué está pasando. En el momento en que me doy cuenta de lo que sucede, la acci#n surgirá espontánea. Ya no me preocuparé, ni dudaré, ni consultaré con nadie. -na ve! que $aya visto con claridad, actuaré a partir de esa visi#n. Es muy importante comprender esto, porque para actuar bien no es preciso ir a buscar a alguien que nos indique qué debemos $acer. "a conducta espontánea, creativa, reali!adora no resulta de que alguien me diga lo que debo $acer es la que surge espontánea de mi comprensi#n, y es e1presi#n directa de mi propio ser. 7o es posible encontrar la pa! al resolver los problemas e1ternamente, sino que es justamente al revés& cuando encuentro la pa! en mi interior, entonces los problemas se van resolviendo no
como yo pienso, sino a su manera, en su orden justo. /eguirá $abiendo toda la gama de ciclos de altibajos en el e1istir, e1istirá la dualidad e1terna, pero le $abré quitado el veneno de mi apego. /eguirá $abiendo sensorialidad, pero no $abrá esa identi+icaci#n con lo agradable o desagradable que crea apego, rec$a!o, desesperaci#n, manipulaci#n... 4odo eso se acaba. 7o $ay que +or!ar nada para conseguir algo e1teriormente lo que es preciso es ir $acia dentro, buscar el origen, buscar los principios que lo mueven todo. "a mente condicionada proyecta un mundo y una vida, y mientras vivamos en tales errores no podremos cambiar nada. 4odo lo que nos sucede son llamadas del /er, y as es como deberamos mirarlo. 3r al origen es la va. "a tradici#n plat#nica tiene un aspecto muy bello. 7o está tan claro en los te1tos antiguos, pero lo $e ido clari+icando con mi propia vivencia& El camino es contemplar lo verdaderamente real, lo auténtico. *or ejemplo, no debo +ijar mi mirada en lo negativo. e pasada, veré todos los errores que está creando una mente con+usa, pero no $e de concentrarme en anali!ar cualquier cosa que apare!ca distorsionada eso no es real, s#lo es una +alta de algo. *or ejemplo, el odio no es más que la misma energa del amor, s#lo que desordenada la agresividad es la misma energa del amor que, por distorsi#n, se $a dispersado y alienado $asta aparecer irreconocible. ¿C#mo pueden retornar a su origen el odio o la agresividad /implemente, contemplando el amor que an$elo, y entonces esa energa, que se $a mani+estado de esa manera err#nea, se integra en el amor mismo. Cuando contemplo el amor no soy más que amor, y de a$ mi conducta surgirá espontánea desde ese amor que contemplo. 7ada negativo es verdadero, y eso es lo que con+iere belle!a al camino contemplativo. 7o $ay nadie culpable de nada internamente, s#lo $ay una visi#n err#nea. Cuando no nos damos cuenta de ello, actuamos de una manera que crea con+lictos. "o inteligente es empe!ar desde ese momento mismo en que aparece el con+licto& tan pronto veo que me $e equivocado, empie!o a mirar cuál es el verdadero sentido de mi vida, :y lo vaya encontrar en m mismo; e esta manera tan sencilla, partiendo de mis deseos puedo rastrear el origen de los mismos. /i an$elo +uertemente los valores primordiales, me pongo a contemplarlos. /i todava no tienen muc$a +uer!a, qui!á sea porque $ay capas en medio que los $acen irreconocibles. Entonces tengo que mirar bien, tengo que reconocerlos donde quiera que estén. *or ejemplo, si tengo un deseo +uerte de viajar, puede que sea un deseo de libertad. Cuando lo vea debo preguntarme& ¿qué libertad busco "a contemplaré una y otra ve! y me daré cuenta de que esa libertad está en m y que la estoy proyectando en +ormas. Entonces veré que no quiero ser libre, sino que soy libertad. *ro+undi!ar en nuestra conciencia trans+orma lo e1terno pero $emos de $acerlo sin especular mentalmente, porque si especulamos no +unciona. "os adolescentes tienen que ver por ellos mismos, no seguir lo que dicen los padres o educadores. "a mayora de las veces buscan la libertad +uera, y ni siquiera saben lo que es. *ara alcan!arla deben ir directamente a esa libertad que an$elan. 4odos nosotros somos como adolescentes que nos $emos quedado dormidos y nos sentimos +rustrados en nuestro sue
7o es buscando e1periencias como nos reali!amos, sino comprendiendo cualquier cosa que se nos presente. /i vivo desde mi propio ser y vivo su llamada, soy consciente de las situaciones cuando ellas se presentan y las e1perimento sin involucrarme emocionalmente en ellas. Eso no signi+ica que sea apático, sino que mantengo una serena alegra que viene del /er. Como no dependo de las situaciones, no $ay altibajos lo que sucede es que soy consciente de lo que está pasando por la pantalla de mi conciencia. Esto que aparece en la pantalla no lo miro desde el pensamiento, sino que me mantengo en una posici#n contemplativa, que es el lugar verdadero. ebo encontrar ese lugar silencioso, de mente aquietada, porque ese lugar está a$ y es la puerta que conduce a mi verdadero ser. 'l contemplar, voy siendo lo que verdaderamente soy. CONTEMPLANDO LOS VALORES Cuando no vemos los valores primordiales del amor, la bondad y la belle!a debemos con+iar en llegar a tener la intuici#n, aunque sea pequel& el amor, la pa!, la belle!a es lo divino y sus e1presiones. Cuando los msticos nos $ablan de la atenci#n al interior y del recogimiento, no sabemos lo que quieren indicar, porque estamos tan volcados $acia +uera que nos parece que lo interno son los pensamientos. Es un error terrible estar inmerso en un mundo condicionado, ese mundo no es lo originario. "o originario viene de antes y está más allá del pensar y el sentir. El amor a esos valores nos llevará directamente all. 7o es algo técnico ni anali!able. *or amor a la belle!a y a la verdad estoy contemplando esa belle!a y esa verdad. *odra dudar sobre si amo la verdad lo su+iciente pero s, es seguro que la amo, aunque no me dé cuenta y la busque en mi vida all donde no está. ¿C#mo no amar a mi propio ser, ¿c#mo no voy a amar lo %eal, lo divino 7o me doy cuenta, pero lo estoy buscando
constantemente en los re+lejos, en lo e1terno. Estas investigaciones que reali!amos son totali!adoras. /on para ir viendo la verdad en cada instante. 7o son para procesar datos y saber muc$o, sino para que en cada instante se revele la verdad y para situarnos en ella. Contemplar es ser. 'prender a contemplar es aprender a ser. Estamos aprendiendo a ser.
CAPÍTULO 10
Despertar de los sueños ¿QUÉ ES MI VIDA ¿Es posible estar despertando de instante en instante en la vida diaria? Veamos cómo vive aquel que lo está haciendo. En cada instante, en cada momento, sea lo que sea que me esté sucediendo, vigilo lo que pasa en la mente y suelto el pensamiento, no lo tomo en cuenta. Observo la energa reactiva mecánica, dándome cuenta de la situación, de los estmulos que vienen de !uera, de los impulsos que tengo preparados mecánicamente para reaccionar. "e este modo estoy en otro lugar# estoy despierto. $s de simple es aprender a despertar. %o es algo misterioso. &a iluminación es de lo más sencillo, aunque no acertamos con el punto de equilibrio mental en el que sucede. 'uando vivimos sin lu(, so)ando, y caemos en la mecanicidad todo resulta complicado, porque cualquier cosa puede desencadenar una situación llena de problemas, o!ensas... lo mismo que cuando estoy so)ando# se suceden una serie de imágenes. ¿*uién sabe lo que puede pasar? $h soy la vctima# estoy proyectando, y estoy a e+pensas de esas imágenes que se proyectan. 'uando nos levantamos de la cama decimos# -e estado so)ando, pero ya estoy en la realidad. /ero, ¿estamos verdaderamente en la realidad? Esto requiere una investigación y observar0 porque a lo me1or estoy haciendo lo mismo que en el sue)o, aunque con otra base# la base que nos proporcionan nuestros sentidos viglicos. %uestro organismo !sico, como instrumento orgánico, es per!ecto, es muy válido, aunque es limitado0 es un instrumento de la inteligencia, pero con limitaciones. &os sentidos nos o!recen una percepción de la realidad, pero convivimos con otros seres, por e1emplo, los animales, que tienen otros sentidos di!erentes y otras percepciones. %uestros sentidos limitados nos proporcionan una percepción limitada de lo in!inito, de lo 2eal, condicionada al instrumento mediante el cual son percibidos. &a percepción en s es inocente# percibimos colores, sonidos, dolor o armona. /ero, ¿y la interpretación que hacemos de nuestra percepción y con la cual !ormamos nuestro mundo, nuestra realidad, nuestra vida? %o son más que imágenes mentales. &lamamos estado de vigilia a este despertar precario, aunque a lo que realmente nos está despertando es a los sentidos biológicos corporales, que son algo muy limitado, as que solamente nos despierta a ese nivel. "espertar a lo 2eal requiere de una mente despierta0 y sin embargo, la tenemos dormida, de la misma manera que mientras estábamos en la cama proyectando imágenes estábamos creando una vida ilusoria. ¿'on qué proyectamos imágenes? Ocurre igual que durante la noche# las proyectamos mediante recuerdos de la memoria, con e+periencias que no hemos comprendido, con miedos que tenemos de que nos suceda algo, con deseos de lograr !elicidad... 'on todo esto !abricamos nuestra e+istencia, pero eso no es la vida real. &a vida no tiene esos lmites, no es una novela, no se crea a partir de deseos y miedos. Es algo espontáneo, una creación constante de la inteligencia0 es el go(o de la plenitud de ser. %o sabemos cómo es la vida, en!rascados como estamos en vivir los sue)os. &as energas !sicas constituyen un instrumento inocente que !unciona de manera orgánica, pero que tiene sus limitaciones. 3i lo conociéramos, si no dependiéramos de él,
si no le e+igiéramos más de lo que puede dar, sera un buen compa)ero de traba1o en esta e+periencia e+istencial que compartimos. /or desgracia, este buen compa)ero que se nos ha dado, y mediante el cual percibimos la belle(a de la naturale(a, está totalmente dominado por el pensamiento. 3e le e+ige más de lo que puede dar, le creamos adicciones con sustancias qumicas..., en de!initiva, no estamos de1ando que el cuerpo !sico !uncione de manera natural. Esto sucede porque la mente sue)a y tiene delirios de grande(a de querer conseguir en lo limitado una !elicidad que intuye pero que no se encuentra en la limitación. $s, !or(amos y en!ermamos al cuerpo. %o hay otro arreglo para la vida desordenada y sin sentido que vivimos, que despertar. 3o)ando no podemos a1ustar nuestra vida a los valores, ya que proyectamos otros intereses egocéntricos. %ada tiene arreglo desde !uera. 4ratar de arreglar los problemas a!uera sólo crea con!lictos, en!ermedades y malestar. 3iento que hay una gran oportunidad de despertar, como si el desenga)o colectivo !uera inminente. %o sé hasta que punto es e+acta esta percepción, pero me parece que hay muchas personas a punto de desenga)arse o desenga)adas ya del sue)o. 3iento que muchos os habéis cansado ya de so)ar0 y si no os habéis cansado todava, basta con que de1éis pasar un tiempo hasta que se produ(ca el desenga)o. &a vida se encarga de ello. 4odo es muy inteligente. 5 una ve( desenga)ados, ¿a qué esperáis para despertar? "ebéis poneros manos a la obra, u os vais a pasar la vida que1ándoos. 3ólo hay una salida verdadera# la salida a la libertad sin retorno que reside en comprender, en daros cuenta de lo que está sucediendo0 y eso signi!ica ver el pensamiento, saber de lo que está hecho, cómo !unciona, su mecanicidad, cómo se proyecta, cómo os hipnoti(a. Ver y ver, eso es lo que despierta. 4odo lo demás puede ser más o menos agradable, pero pertenece al sue)o. 4odas las cosas del sue)o están en la temporalidad. El tiempo es pensamiento, y al pensar, lo estamos creando continuamente. 4odo lo que está en la temporalidad está moviéndose constantemente, nada permanece inmóvil. ¿*ué hago gastando mis energas en hacer cosas en la temporalidad? El tiempo es sólo un aparecer y desaparecer. ¿*ué hago atrapado en el tiempo? 'uando me doy cuenta de lo que estoy haciendo, no tiene sentido continuar en ello, aunque me he ale1ado tanto de la inteligencia que mi actuar prosigue de manera compulsiva. El ser humano ¿de verdad puede elegir?, ¿tiene libertad? 3i respondemos desde el sue)o, diremos, por supuesto, que s. &o que sucede, en verdad, es que estamos so)ando que tenemos libertad, pero mirémoslo bien y veremos que no es as. 4enemos una conducta reactiva, vivimos esclavos de los miedos y ambiciones, nunca estamos contentos con lo que tenemos... 'onstantemente estamos siendo empu1ados a actuar de una manera determinada, no podemos actuar hacia !uera con libertad. /ero, ¿podré por lo menos estar internamente como quiero? %o. "ependeré de los acontecimientos e+ternos y de las emociones que han ido creando mis errores. &a mecanicidad no es libertad. 6ientras duermo no puedo ser l ibre. $ pesar de que cuando estamos en esa (ona super!icial de la conciencia no actuamos con libertad, sino de una manera compulsiva, hay una salida a todo esto. Es posible una salida. "e hecho, lo que de verdad somos, no lo que so)amos, es libertad. 5 ah está la salida# en lo pro!undo de nuestra misma conciencia. 'uando esa voluntad compulsiva se disuelve por comprensión y empie(a a actuar esa otra voluntad creadora y creativa de la inteligencia divina que somos, llámese la voluntad de "ios o la voluntad divina, entonces no sólo somos libres, sino creadores y creativos. $l ser nosotros mismos la 7nteligencia
que se e+presa en este universo, estamos creando todo el universo. 'uando me identi!ico con la 7nteligencia, la acción es espontánea y libre a la ve(. %o puedo de1ar de hacer lo que hago y, a la ve(, soy absolutamente libre haciéndolo. "esde la 7nteligencia que soy, en cada instante hay una cosa adecuada y per!ecta. 8sa es la creación y la creatividad del momento. 'uando la 7nteligencia traspasa la mente, comien(a un estado espontáneo de pura libertad. El camino del despertar provoca el contacto con la inspiración constante, y todos los actos de mi vida, sean los que !ueren, están as conectados con esa inspiración. Entonces mi vida será inspirada, actuaré en libertad creativa. &a 9nica libertad es la divina, la libertad de la 7nteligencia en acción# &a 'reación. El universo se está creando momento a momento, se crea a partir de la 7nteligencia que Es. 3i nos ponemos en lnea con ella, entonces nuestro vivir es una creación de la 7nteligencia constante, y as vivimos por inspiración y estamos haciendo todo el tiempo una obra de arte en todos los aspectos de nuestra vida, siempre. 8sta es la vida de una persona despierta, esto es despertar. 7ndependiente de lo que suceda, el despierto está siempre en esa actitud contemplativa y recibiendo esa inspiración, y lo demás aparece espontáneamente. 'omo dicen los Evangelios# &o demás se os dará por a)adidura. 3i estoy volcado hacia lo e+terno, calculando, tratando de colocar las cosas bien, me estoy perdiendo la inspiración, eso es obvio. 6ientras sue)o puedo hacer todo tipo de teoras absurdas con el pensamiento, pero la causa de los in!ortunios que tengo en la vida es la propia sugestión de creerme los pensamientos y, por tanto, de creerme el sue)o. $s, me creo lo que no Es. 4engo que despertar, mirar la verdad directamente. &o que realmente soy está más allá de los sue)os. &o 2eal no lo encuentro en lo proyectado, tengo que descubrir la 7nteligencia que soy. ¿*ue estoy condicionado por mis hábitos? /or supuesto, son a)os y a lo me1or, siglos de repetir las mismas cosas. /ero los hábitos los he hecho yo mismo, yo mismo estoy concediendo realidad a lo que no la tiene, as que soy yo mismo quien debe quitar la realidad a lo que no es real y empe(ar a mirar de una manera nueva desde la verdad que voy descubriendo. Entonces es cuando veré que la vida es otra. &a vida no es algo ob1etivo, la vida no es nada, sino la 7nteligencia que se e+presa en la temporalidad, en ese movimiento constante. &o 2eal es esa conciencia, esa lu(. "ebo mirar la lu( para despertar. 3ólo despierta en m lo que ya está despierto desde toda la eternidad. En nuestra tradición se ha dicho# 3ólo sube al cielo el que ba1ó del cielo. 3ólo &o:que:Es llega a ser. 4engo que mirarlo despacio una y otra ve(. ¿/uede haber alg9n ser humano al que no le interese saber &o: que:Es en realidad? 3i no me interesa, es que estaré !abricando realidades !icticias. 4engo que descubrir lo que es la realidad, saber a qué atenerme en la vida, descubrir incluso quién soy yo, qué es esto a lo que llamo mi vida. ¿*ué voy a hacer?, ¿de1arlo a los especialistas? /ara ellos no es más que un traba1o0 incluso los llamados !ilóso!os, si es que queda alguno hoy da. sólo repiten lo que han dicho los demás. /ero no surgió as la !iloso!a en ;recia.
es la de despertar, debo hacerlo aqu, ahora, cuanto antes, ya que cualquier situación que me suceda, le dé importancia o no =por e1emplo, el morir, al que se le suele dar mucha importancia por el apego al cuerpo>, cuando me sorprende esa situación, ese reto, sea cual !uere, si estoy despierto es algo más que constato, que atestiguo desde la 7nteligencia, desde la conciencia que soy, y entonces hay su!iciente libertad para aceptar libremente esa voluntad de la Vida con naturalidad. AL DESPE!TA! $l despertar puedo ver la aparición y desaparición del cuerpo0 ésa es una manera de vivir en libertad# no depender de lo e+terno, es decir, no depender de la identi!icación con un cuerpo. 'on cuerpo o sin él, sigo siendo lo que soy0 esto debo descubrirlo por m mismo. &o importante es que recordemos siempre, ahora, en este instante, que todos los instantes son iguales. "ebemos plantearnos la siguiente pregunta# 3i en este instante estamos despiertos, ¿por qué en otro instante estamos dormidos? ¿$ qué se debe que en un instante dado vea la verdad y mantenga el equilibrio? En ese instante estamos en un lugar verdadero, pues la verdad no se puede ver más que desde la verdad0 si no, no la veramos. En ese instante estamos abriéndonos a la mente iluminada, estamos en ese lugar desde donde se recibe la lu(. "esde ah empie(a el despertar del ser humano. "esde la visión de la verdad hay un despertar. 6antengámonos ah, que esa verdad que hemos descubierto ilumine nuestra vida constantemente. ¿*ué podemos hacer para que ilumine permanentemente nuestra vida? 3olamente mantenernos ah, en ese lugar desde donde hemos visto la verdad. 3i la veo y luego me despisto debido a que vuelvo al pensamiento, observo simplemente ese vaivén. En esa observación se va poniendo en equilibrio mi mente0 todo depende del grado de lucide(, del grado de atención. 6i mente, como todas las mentes, está hecha de inteligencia. 3ólo !alta darme cuenta y veré cómo se va poniendo en equilibrio ella sola. ¿7ntuyo una verdad? &a contemplaré y veré cómo se produce el equilibrio de la mente. 8ste es el estado contemplativo. 3abemos que está ah, mantengámonos en ese estado. ¿*ue nos distraemos? %o importa, volvemos al estado que hemos descubierto0 eso es todo, no hay nada más, eso irá haciendo un camino. &legará un momento en que lo raro será caer en el sue)o y lo normal mantenernos ah, donde llega la lu(. ¿'uándo llegará el momento? %o se sabe. "epende del amor que tengamos a la verdad, del interés con que lo mantengamos... 'on actitud amorosa y decidida, regresemos a la contemplación una y otra ve(, y contemplemos todo desde ah. "escubrir la verdad no es como comprar algo, no es un instrumento para algo0 descubrirla coincide con vivirla, despertar es vivir desde la verdad. 3e requiere, primeramente, vocación por lo auténtico0 después esa autenticidad momentánea se ampla a ser auténticos siempre, a vivir establemente desde la verdad. Esa disciplina nos mantendrá una y otra ve( vigilantes# Ver siempre lo que pasa, darnos cuenta, sin caer en ese dicho castellano# dormirse en los laureles. 3i vivo desde un estado de plenitud, si veo que hay más armona en mi vida. tengo que estar vigilante, dándome cuenta siempre y en toda situación de lo que sucede, con sus limitaciones. /oco a poco voy descubriendo que no soy yo quien mantengo ese estado de lucide(, sino que se mantiene solo, que lo mantiene la lu(. 5o sólo estoy disponible, atento a la lu(, y ella sola se encarga de iluminar. 6e mantendré despierto a la lu( que soy en pro!undidad0 y cuanto más esté en ello y más lo sea, habrá más plenitud, pa(, alegra, espontaneidad, amor sin motivo..., todo eso que a)oramos, todo eso de lo que nos gusta hablar, pero que no es verdadero hasta que despertamos, %o es posible vivirlo antes, desde el lugar donde
vivimos generalmente, porque está lleno de errores. El amor es espontáneo e inevitable a partir de una mirada despierta, porque es una mirada en totalidad que no hace separaciones, enemigos, vengan(as, odios0 nada de eso tiene ya sentido al despertar. %o luchemos contra las emociones, deshagámoslas en la plenitud del amor estando despiertos0 de otra manera estamos gastando nuestras energas estérilmente en un sue)o emocional. 3algamos de las emociones manteniéndonos despiertos. Entonces, el amor, que no es una emoción más sino una atracción a la unidad, estará ah en un estado pro!undo de pa( y belle(a que lo abra(a todo. 3i observo que en mi vida caigo de una emoción en otra, no debo luchar desde ese lugar sino abandonarlo y despertar. 6antendré mi mente en equilibrio desde la verdad y veré cómo las emociones se disuelven en ese estado de serenidad, pa(, claridad, potencia y evidencia que es caracterstico de la sabidura. "ebo abrirme a los espacios de la 7nteligencia. %ada hay que mere(ca más la pena que volver a la lucide( para despertar. "ECESITAMOS EL SILE"CIO %os identi!icamos con la (ona super!icial del pensamiento. Es necesario que hagamos un silencio de lo pensado, de lo sentido, ya que es de la má+ima importancia que cada cual descubra por s la trascendencia del despertar0 no sólo que lo vea de pasada o lo intuya, sino que viva con ello. Es imprescindible hacer esta aventura de adentrarnos en la conciencia. 'uando hablamos de silencio nos re!erimos al silencio de lo sensorial, de las emociones y del pensamiento. ¿3ólo en ese silencio es posible despertar a lo 2eal? 3, solamente. "espués de que hayamos despertado y hayamos aprendido a vivir en silencio, podremos vivir lo 2eal despiertos, l9cidos, incluso con pensamientos y emociones. Esas modi!icaciones mentales no interrumpen ya lo 2eal que somos una ve( lo hemos descubierto y nos hemos a!ian(ado en ello. /ero cuando todava proyectamos como real lo e+terno, lo sensorial, lo pensado es preciso que hagamos silencio y que nos adentremos voluntariamente a investigar en nuestra conciencia para tomar contacto con lo que es nuestra verdadera naturale(a, con aquello que está ah esperándonos# &o:que: Es, lo verdadero. Es necesario el silencio porque, aunque intuyamos la verdad, luego en la vida no vivimos con ella. El alcance que tiene adentrarse en la conciencia es enorme. $l hacerlo, de1amos de dar realidad a lo que no es real y vivimos aquello que es real directamente en nosotros mismos. 7ntuirlo es lo primero0 si no, nada hago. 4engo que intuirlo, verlo, tener una evidencia0 pero además, debo encontrarlo dentro de m mismo. vivir con ello, descubrir qué es lo 2eal a !in de poder actuar con discernimiento y darme cuenta de lo que no son más que# simples sue)os. 4engo que notar en el interior de mi conciencia esa di!erencia de cuándo estoy so)ando o estoy despierto. "ebo conocer lo que es so)ar y lo que es ser. 3i me distraigo y caigo una y otra ve( en la ilusión de que lo 2eal son las apariencias so)adas, es porque todava no tengo el discernimiento para distinguirlo bien0 me !alta reali(ar la capacidad de la inteligencia que soy de distinguir claramente lo 2eal de lo so)ado. 4engo que encontrarla y reali(arla en m mismo0 nadie me la puede dar. -ay una gran cantidad de !antasas sobre los sue)os. 6uchos son smbolo de situaciones reales vividas dentro que se han
e+presado as para que !ueran entendidas, pero a su ve(, han dado pie a mucha con!usión. 6ás que interpretar nuestros sue)os, que de poco sirve, hagamos silencio, un silencio donde todos los sue)os se deshagan. El camino hacia la verdad, lo divino, lo sagrado es algo que el ser humano hace en s mismo, dentro de s. Es adentrarse en la conciencia, de1ando la (ona super!icial donde todo es sue)o e ilusiones. &a verdad la descubro en el silencio pro!undo de mi conciencia0 entonces, y no antes, me libero de lo !also, ya sea terrenal o espiritual. 3e acaban ah toda clase de hipnosis colectivas o privadas0 cesa también la sustitución de unos sue)os =los materiales> por otros =los espirituales>. &os sue)os, sue)os son, como deca 'alderón de la arca, sea cual sea su ndole. 'uando doy !orma a $quello que no tiene !orma, y lo adoro o me apego a ello, me mantengo en un nivel in!antil de la mente llamado idolatra o dependencia, y no se deshace el sue)o de la mente. $l adorar lo e+terno, el sue)o prosigue, aunque se cambien los dolos materiales por los espirituales0 el sue)o sólo se e+tingue adentrándonos en la conciencia. $qu y ahora, en este instante presente, hacemos este e+perimento desprovisto de toda para!ernalia de técnicas, !órmulas, imágenes, sin nada# 3i lo 2eal Es, está aqu y ahora. &o 2eal es pura conciencia, es 7nteligencia, y lo que llamo yo mismo es e+presión de esa inteligencia. 3i soy e+presión de ella, puedo retrotraerme al origen, puedo descubrirlo aqu y ahora. %o soy ning9n persona1e desligado de la conciencia divina, de la inteligencia, no0 lo 9nico que me separa de la realidad, que es lo que soy y lo 9nico que Es, es que mi mente se entretiene imaginando, so)ando. &a realidad 9nica que siento, que intuyo en mi interior, la proyecto a las !ormas e+ternas. Eso es lo que estoy haciendo siempre0 y como he adquirido ese hábito, me encuentro en esa situación de estar volcado hacia las !ormas que son solamente re!le1o de lo 2eal. -e de dar la vuelta, hacer un giro. 6i mente está enviciada por unos hábitos, los mos y los de la humanidad, que me han sido ense)ados, que han sido mi modelo y me mantenan dormido. "e ah, esa importancia de girar la mente. En principio nos parece di!cil y sorprendente, pero debemos mirar bien todo aquello que hemos ido creando. Es normal que nos pare(ca complicado escuchar# "e1a de mirar las !ormas. 6ira hacia dentro, da una vuelta, gira. 49 proyectas esas !ormas con tu lu(0 gira y mira directamente a la lu(. Es habitual que nos sorprenda, que nos pare(ca di!cil, que creamos que no estamos logrando nada. 4odo eso es natural, pero debemos traspasarlo. %o nos de1emos llevar por los pensamientos, los cuales nos mantienen en el mismo lugar en el que estábamos. "ebemos desor esas voces del pensar habitual y mantenernos a la escucha de la verdad. Entonces cada uno de nosotros contemplará, aunque lo hará a su manera peculiar, seg9n el espacio que haga en su mente y seg9n su silencio interno. "e ah la importancia de crear ese espacio silencioso. ¿'uántas veces lo intentaremos? 7n!initas, todas las que sean necesarias, una y otra ve(. El camino se atraviesa en soledad, en silencio. Vivir con la lu( es lo 9nico que cuenta.
CAPÍTULO 11
Contemplar lo real es vía directa a la realización UNA INVETI!ACI"N #EALI$A%O#A Una investigación que sea realizadora no se hace con una zona de la conciencia (la mente pensante) que se limita a acumular datos para relacionarlos; se verifica con la totalidad de la conciencia, sin división entre el que piensa, los datos y la comparación con el recuerdo del pasado. La investigación realizadora lleva a la unidad. Por eso una acción como sta no se limita a escuchar y comprender unas pala!ras escuchadas, ni siquiera a entender y relacionar conceptos a los que las pala!ras se refieren. "i lo hiciramos as#, no traspasar#amos la superficie de la conciencia en la que ha!itualmente nos movemos. $ no se puede ha!lar de realización directa en ese angosto lugar. Propong%monos una investigación total. &n ella no ha!r% separación entre el que e'presa una verdad y quien la reci!e en ese mismo momento. Porque lo nico que e'iste en realidad en una investigación as# es la verdad; no hay lugar para otra cosa. &s una investigación tan amplia que todo queda incluido en ella. ese tipo de investigación es a lo que llamarnos un estado contemplativo. &s un estado nuevo en el que se contempla la verdad, y esa contemplación de la verdad ir% a!riendo un camino de lucidez en nuestra conciencia. La lucidez es lo esencial al investigar. Lo importante, lo verdaderamente realizador es el camino que hace la luz al encontrar la verdad, y no o!*etivar ideas, frases o consignas para recordarlas y ampliarlas. &sto ser% adecuado en el %m!ito de lo tcnico, pero no al tratar con mi propia conciencia. +o ha!laremos, por tanto, de cómo de!e realizarse este camino ni daremos normas o tcnicas para actuar en cada situación. se no es el camino de la realización directa. -ómo nos realizarnos entonces/ +os realizarnos en el instante mismo en que tomarnos conciencia de Lo0que0&s; ah# empieza el proceso de realizarse. &sa irrupción es instant%nea, en el sentido de que la realización es aqu# y ahora, sin acumular datos para m%s adelante. +o hay un despus, cuando la visión de lo verdadero ha horadado la cinta del tiempo. La capacidad de contemplación de la verdad nos realiza desde el interior. $ eso quiere decir que no podremos adquirir la realización como una donación o adquisición. +ada ni nadie puede darnos un contacto con lo 1eal. +o se produce por v#a e'terior. Lo e'terno es interpretación de lo perci!ido por los sentidos, y ninguna interpretación es capaz de tocar lo 1eal. 2escu!riremos la realidad que somos al profundizar en nuestra conciencia. !rir un camino hacia la verdad es a!rirlo hacia nosotros mismos. Lo que e'perimentamos fuera es sólo una circunstancia para que esta toma de conciencia profunda se produzca en nuestro interior. $ si no se produce en nuestro interior, de nada sirve intentarlo con tcnicas o mtodos repetidos en el tiempo. "i no se ha producido el contacto real desde mi conciencia, todos los intentos, austeridades, iniciaciones,
sensi!ilizaciones quedar%n como algo a3adido. $ por ha!er a3adido tantas cosas con el propósito de llegar a ser algo m%s, no nos hemos dado cuenta del hecho simple y !%sico de que ya estamos realizados. +o acumulemos m%s cosas para tapar Lo0que0&s. 4%s !ien, hemos de quitarnos lo que ya nos hemos echado encima si queremos descu!rir lo que somos en verdad. +o a3adamos teor#as so!re la realización humana, con sus sistemas y mtodos caracter#sticos. +o coloquemos m%s capas que ocultan la identidad que siempre fuimos. Lo que hemos de hacer es mantenernos despiertos, vigilantes, con gran seriedad en esta vocación, para que aquella verdad, por tanto tiempo oculta, se nos revele. IN&E#O EN LA #EALI%A% -2e!emos desechar todos los caminos, todos los mtodos tiles para aprender que ha ido encontrando el ser humano/ +o. omprendamos el sentido, aun cuando parezca paradó*ico, de la verdad que armoniza los opuestos. 5odas las e'periencias son realizadoras. 5odo lo vivido aparece para ser comprendido y se da en un movimiento de aprender. La vida entera es un con*unto de maneras diversas de contactar con lo 1eal, armonizadas siempre en la inteligencia. 2e!ido a que todo est% hecho de realidad, todo se realiza; ahora !ien, lo falso es lo imaginado o inventado so!re lo 1eal, que es una so!reimposición de la propia materia consciente. Por e*emplo, una sirena o un dragón no son reales, no tienen realidad sensorial, pero tienen una realidad imaginada constituida por la misma conciencia que constata las realidades sensoriales. s#, nuestro vivir se forma en una interrelación de realidades sensoriales y de evocaciones mentales, ya sean stas razonadas, interpretadas o imaginadas. -5odo ello nos realiza/ "#, aunque no es la realización directa. &mpez%!amos esta investigación ha!lando de una realización instant%nea, o m%s !ien atemporal, la cual llamamos directa. hora estamos viendo que nos encontramos siempre inmersos en la realidad, que en lo 1eal nos movemos y vivimos. +o podr#a ser de otra manera, pues nada puede ha!er fuera de lo 1eal. Lo que no es real es una imaginación que est% sustentada en la realidad. on !ase en lo 1eal fantaseamos, con !ase en lo 1eal nos equivocamos. -u%l es esta !ase de realidad/ &sto es lo que hemos de preguntarnos, porque si nos vamos a realizar como seres humanos ha!remos de hacerlo en contacto con la realidad. 2esde el principio se est% insinuando lo que la 1ealidad es. 6emos que cualquier cosa que aparezca se presenta en mi conciencia y entonces soy consciente de ella, de lo contrario nada aparecer% ante m#. parecer% como o!*eto de los sentidos, como emoción, como idea pensada, es decir, se presentar% en distintos niveles e'istenciales, pero siempre tendr% su razón de e'istir para m#, una razón que radica en el hecho ser consciente de su e'istencia. 2e este modo, soy consciente de una idea verdadera que se adecua a lo e'perimentado o a lo constatado desde el concienciar mismo. &s as# que en este mundo relacional, cualquiera que sea el nivel en que nos hallemos y su grado de relatividad, siempre permanecer% el ser consciente, la lucidez como la realidad de la que est%n hechos todos los o!*etos concienciados. sta es la !ase de la realidad7 la conciencia.
Puedo no darme cuenta de algo, pero la conciencia permanece siempre en la vigilia y en el so3ar, y permanece igualmente en el sue3o profundo sin sue3os donde la conciencia no diferenciada crea una continuidad que se constata al despertar. La dualidad del consciente y del inconsciente tiene como !ase una conciencia unitaria que, siendo anterior y estando m%s all% de la dualidad, es su sostn. Por eso, la realización directa es una toma de conciencia, es un darme cuenta. $ para eso se han hecho tantas filosof#as y religiones7 para que el ser humano despierte del sue3o de la conciencia y se d cuenta de su proyección o!*etiva. -Por qu resulta tan dif#cil esta toma de conciencia si lo 1eal no est% hecho de otra cosa sino de la conciencia misma/ "i todo est% creado por la luz a distintas frecuencias o vi!raciones, -cómo es que se manifiesta oculta la realidad mientras pienso durmiendo o mientras pienso en vigilia/ La creación de la conciencia ha pasado por muchos estados. 8a llegado a crear entidades e hipnotizarse con ellas en el tiempo, como si fuera por siempre. Pero toda esa creación es impermanente. $ si lo o!servamos, no podremos de*ar de descu!rir que todo est% cam!iando y transform%ndose, apareciendo y desapareciendo en el seno de lo nico real. 9uiero realizar mi vida de una cierta manera, pero nada de lo creado por la mente se mantiene y llegar% un momento en que faltar% hasta el cuerpo f#sico con el cual me identifico como imprescindi!le para vivir. "i nada permanece, es que todo eso, aunque est hecho de realidad, no es real en s# mismo. #ELATIVI%A% %E LA #EALI%A% O'(ETIVA%A Las cosas est%n pensadas en el tiempo y en el espacio. :ilósofos y cient#ficos han descu!ierto que todo est% constituido en el espacio y el tiempo. 2e hecho, la realidad aparente es tan relativa de!ido precisamente a que consiste en formas espaciales y temporales de la mente que se relacionan causalmente, relación que es la !ase de todo conocer, comparar y constatar. &l universo conocido est% compuesto por formas y nom!res, como se3aló la tradición filosófica vedanta advaita. &stas estructuras mentales son espacio0temporales y crean la realidad conocida, perci!ida e interpretada. &n la !squeda de los ltimos vestigios de lo 1eal se ha llegado incluso a la comprensión de simples fórmulas matem%ticas que ordenan inteligentemente las realidades relativas y que descri!en relaciones entre situaciones. s#, el o!servador y lo o!servado est%n en una interrelación tal de pregunta y respuesta que se crea un o!*eto conocido en la misma conciencia. &so es todo. La f#sica, al investigar los fenómenos su!atómicos, sa!e ya que es fantasmagórica esa realidad e'terna sólida y permanente que conce!imos antes de investigar. &s una creación que se hace y se deshace en la mente cósmica como en la mente individual. Pero tanto la mente que nos parece personal como la cósmica impersonal est%n am!as hechas de inteligencia, de luz, y esa luz puede ser consciente de s# misma y darse cuenta del movimiento mental que se presenta ante ella. +osotros, en concreto, podemos darnos cuenta del proceso de nuestro pensamiento, podemos ver cómo aparecen y desaparecen los s#m!olos o fonemas que se interpenetran. &s posi!le ver cómo se crean los mundos de realidades relativas mediante el
pensamiento. &s lo que la humanidad ha intentado durante siglos. Pero estamos sumidos en este sue3o hipnótico de los nom!res y formas hasta el e'tremo de que, a pesar de las contradicciones que encontramos en el vivir, a la oposición de creencias que no coinciden con lo que &s y al sufrimiento que ellas conllevan, no nos desenga3amos. "eguimos considerando que la realidad es como se nos aparece en !ase a nuestras interpretaciones y pre*uicios. LA E)PE#IENCIA La solución a nuestra insatisfacción constante se imagina en el logro de un nuevo empleo, otra pare*a, o en vivir en diferente pa#s. $ m%s concreto an7 si aquella persona me valorara, si me quisieran m%s en mi familia, si me o!edecieran, si me comprendieran... , entonces me realizar#a, hallar#a mi plenitud. Pero, -qu sucede/ -caso alguna situación es realizadora/ La vida, movida por la inteligencia, nos va presentando las e'periencias que necesitamos7 sensaciones f#sicas, relaciones afectivas, responsa!ilidades, amistades, potencia para actuar o poder para movilizar a otros... y surge en la vida de cada persona una situación concreta que es s#ntesis de la demanda en ese momento. "in em!argo, hay momentos de soledad en los que seguimos sintiendo que no estamos viviendo la plenitud que anhelamos en lo profundo. "igue ha!iendo en nosotros una llamada hacia algo m%s all% de lo que vivimos. omienza a surgir la sa!idur#a cuando ya no se proyecta esa demanda en las e'periencias e'ternas f#sicas, psicológicas o espirituales, cuando no se !usca m%s esa realidad a3orada en o!*etos de conciencia imaginados, pensados. "in referir ese anhelo de realidad a las formas y significados que pasan por la conciencia, se puede dar un giro a esa necesidad interna y quedarse en contemplación de lo que est% sucediendo y de lo que es origen de aquellos acontecimientos. esto se puede llamar la v#a directa de realización. -$ las indirectas/ "er%n v#as indirectas todas aquellas en las que no se d esta capacidad de discernir entre Lo0que0&s y lo que aparece. ualquier e'istencia humana conlleva una cierta realización, casi siempre inconsciente. &s un enga3arse y un desenga3arse, volver a enga3arse e intentar en otro o!*eto la realización y volver a desenga3arse. +adie puede decir que no conoce esta v#a. #EALI$A#E AL CONTE&PLA# La v#a contemplativa conduce a la realización directa. &n ella no hay nada que cam!iar mediante la voluntad, aunque los cam!ios se sucedan. +ingn esfuerzo f#sico o mental se requiere ah#. vanza sin grandes sacrificios ni pesados estudios. "e trata sólo de una nueva colocación de la mente, para hacerla contemplativa. onsiste en ver con claridad, y en ninguna otra cosa se apoya para sus descu!rimientos. reemos que para llegar a ver se requieren muchos esfuerzos, hasta que o!servamos que al hacer un esfuerzo no vemos nada. 4e esfuerzo por conseguir algo concreto, y en el esfuerzo voy creando formas y situaciones, pensando las cosas que temo o deseo que me sucedan. &s un mundo ilusorio so!re el fondo de la conciencia. $ en esa creación me puedo perder en el tiempo. &l tiempo mismo es ya una creación de la mente. 8a!r de salir de lo temporal para estar li!re de tanta ilusión. Pero, -es posi!le salir del tiempo/ "ólo si me doy cuenta de lo que
soy, de lo que est% m%s all% de la temporalidad, de aquello que no es pensado porque es anterior a toda toma de conciencia. ntes que comience el movimiento del pensar est% lo eterno, como origen y fundamento del pensamiento mismo. +inguna cosa que cam!ia es por s# misma; sólo se mueve en la conciencia. "e ha ha!lado de lo divino, de lo que incluye todo porque es su causa, del creador o de los dioses creadores como potencias varias de la inteligencia nica. l descu!rir una luz en el interior de la conciencia, a menudo se la ha llamado nuestro ser<. partir de ah# se e'plicaron sutiles metaf#sicas. quel esp#ritu, esa chispa luminosa de lo divino que est% en nuestro interior y que es causa de nuestra demanda de realización, esa demanda que no se conforma con nada que no sea lo infinito, coincide con lo total, con lo sagrado, con la divinidad, como afirma insistente la tradición vedanta advaita. on el pensamiento no lo entender#amos nunca. Lo ho=#srico, lo unitotal de lo sagrado es ininteligi!le para una refle'ión lógica, ya lo sa!e la ciencia. 5endremos que vivenciar aquel estado donde no hay separaciones a fin de podernos dar cuenta de que la totalidad de la conciencia inteligente no es algo aparte de mi identidad profunda m%s all% de los l#mites de la persona. $ el pensamiento no lo podr% entender, por m%s que lo intente, porque, como una m%quina, funciona de manera dual, !ivalente, por contraste de opuestos. -ómo un ordenador de respuestas programadas en el *uego de la dualidad podr#a imaginar lo indiviso/ =ntuimos la Unidad porque hemos sentido alguna vez el amor. Lo pensamos, sin em!argo, como cierta poes#a a3adida a la realidad. +o captamos hasta qu punto esa intuición nos conducir#a a lo 1eal, si la siguiramos en contemplación. >uiados por los condicionamientos mentales, casi siempre nos hemos quedado en los s#m!olos. $ como stos no son reales por s# mismos, su simple mane*o hace al intelectual m%s escptico con cada lectura. ?rgullosos de su escepticismo, por ser consecuencia de tanto estudio comparativo en el %m!ito conceptual, no caen en la cuenta de que su mente padece una enfermedad que la encierra en s# misma y la incapacita para a!rirse a la verdad de lo 1eal. Las consecuencias de esta actitud e'istencial son negativas. La depresión y el a!urrimiento por falta de sentido en su vivir acompa3ar#a siempre a estas personas, si no estuvieran, por momentos, sostenidos por el placer sensorial que la estructura f#sica aporta. "#, el escepticismo es una terri!le enfermedad, tan grave como el fanatismo que se produce al identificarse con cualquier creencia o doctrina relativa negando las dem%s. &l escepticismo no se aca!a pensando o estudiando unas u otras teor#as. @nicamente concluye, y ello de manera espont%nea e instant%nea, al descu!rirse un estado de conciencia no dual que no depende del pensar y es anterior a l. +o se trata de un estado e'tra3o. "i soy consciente, la luz con la que soy consciente est% ah# antes de ser pensada; as#, puedo soltar aquello de lo que soy consciente, los o!*etos e'teriores y quedarme en la luz. ll# donde no se encuentra escisión alguna, desaparecer% el conflicto. La separación entre el contemplador y aquello que contempla se disuelve en el silencio mental del estado contemplativo. 2esem!ocamos entonces de manera natural en lo 1eal. +adie en particular desem!oca; es la conciencia misma la que, en un insólito despertar, se descu!re sumida en la unidad de origen. &sta vivencia es lo nico que nos aportar% la plenitud que anhelamos.
&n nuestra naturaleza esencial no hay separación. &ncerrados en una ha!itación oscura clamamos por la realización que nos dar% la plenitud que intuimos. 9ueremos ser felices, pero nuestra felicidad implica descu!rir que podemos romper las paredes de la ha!itación. l hacerlo, encontraremos la luz que nos rodea. &sto es posi!le sólo desde la luz misma que la oscuridad oculta. "i no fuera posi!le, no e'istir#a en nuestro interior la demanda de su descu!rimiento. "i no intuyramos ya que somos la luz infinita, no nos sentir#amos mal con las limitaciones en que vivimos. Las criaturas limitadas se encuentran !ien en la limitación. 5odas las formas est%n !ien como formas relativas, incluyendo la forma de nuestro cuerpo f#sico. -9u podr#an anhelar m%s all% de su naturaleza/ -9u sucede, sin em!argo, con el ser humano que no se conforma con sus limitaciones aparentes/ "in duda, intuye lo ilimitado, y no tendr#a que parar de investigar hasta encontrarlo. sa es la nica v#a directa para realizarnos. l descu!rir lo que intuimos como incierto y misterioso, podemos encontrarnos con algo inesperado7 ya estamos realizados desde siempre, porque somos la realidad nica que incluye esa plenitud !uscada. +o somos los persona*es que aparec#an en sue3os. +o somos lo que cre#amos ser mientras dorm#amos en el sue3o de la vida relativa. on toda la fuerza que produce el darnos cuenta de la verdad, con esa inmensa capacidad de inteligencia que somos, podemos a!rirnos a la luz. La inteligencia no es una especialización en unos u otros o!*etivos, es la potencia de todo; y aunque est canalizada en una u otra dirección, esa inteligencia potencial est% siempre en el fondo de toda mente humana. +o podr#a ser de otra manera, porque esa inteligencia que a veces creo que me falta por identificarla con sus o!*etos, es simplemente lo que ya soy en esencia. 1ecogido en mi interior, al reunir lo que ha!#a quedado disperso por la inatención, contemplar la luz. Una vez recogida la conciencia, antes esparcida en ideas, e'periencias y creaciones mentales pensadas, ser% sencillo el arte de contemplar. 5endr entonces esa capacidad, esa gran energ#a que cre#a no poseer. Podr contemplar. La sa!idur#a, la comprensión de la verdad hace por s# misma el tra!a*o de separar lo 1eal de lo irreal, de armonizar la energ#a que se encontra!a dispersa y de contemplar la verdad. La realización se produce en el movimiento inmóvil del contemplar en li!ertad. Las circunstancias e'ternas en nosotros se a*ustan a otras circunstancias en la interrelación incesante del mundo relacional. Pero lo que soy en esencia es li!ertad, y realizarme es ser li!re en una instant%nea y eterna contemplación.
CAPÍTULO 12
Contemplar es romper límites LA CREACIÓN DEL PENSAMIENTO Las creencias crean los límites. Los verbos «creer» y «crear» parece que tienen una misma raíz. Cada cosa que acepto como real en mi mente me está creando a mí y está creando mi vida; es como un juego de magia. ¿or qu!" orque todo lo #ace la mente$ la mente crea imaginativamente% todo es imaginaci&n. '#a(espeare dijo$ «)odo está #ec#o de la materia de los sue*os» +,ota$ orque estamos #ec#os de la misma materia con que tejen los sue*os% palabras de rosper en La tempestad.- Ciertos sue*os los vivimos en la cama y no les damos importancia; muc#os otros los vivimos en estado de vigilia y les damos muc#a importancia. ero todo lo que percibimos mentalmente% ya sea en sue*os o en vigilia% está #ec#o con la mente% con lo que se cree; no es Loque/s. ara descubrir esto debo salir de esa zona; no #ay otra vía. 0ando vueltas al pensamiento no voy a conseguir descubrir la verdad. Con la mente pensante seguir! 1abricando ilusiones y creencias% y cambiar! algunos aspectos del sue*o. Los sue*os no s&lo son agradables% tambi!n son desagradables. /n los agradables no nos importa permanecer% pero cuando son desagradables se convierten en tragedias% y entonces queremos salir de ellos. 2#í se #alla la demanda de la mayoría de nosotros$ deseamos salir de lo desagradable. 3eamos #asta qu! punto es inevitable que aparezca lo desagradable en lo so*ado. La carrera de evitar lo doloroso y buscar lo placentero es una manera muy in1antil de ver la vida% pero es la manera más usual. '&lo un cambio de estado de ser permite salir de a#í% y es a eso a lo que los sabios #acen alusi&n. /n esta !poca% muc#os buscan mejorar de vida porque #ay muc#o malestar% desenga*o% descontento. Cuantas más e4periencias% más desenga*os. 'in embargo% buscamos en la super1icie c&mo mejorar con 1&rmulas% sin ir nunca al origen de por qu! está sucediendo esto. /l origen es que esta realidad que se está creando por arte de magia en nuestras mentes es un mundo pensado% y el pensamiento es limitado; y al ser limitado es insu1iciente para el ser #umano. La 5ealidad es total; no es una parte sino un todo indivisible. /n la limitaci&n% inevitablemente #ay inquietud% angustia% sensaci&n de 1alta de plenitud% incon1ormismo. /n la realidad que el pensamiento crea% necesariamente #ay esta limitaci&n que se traduce en insatis1acci&n constante. uedo taparla% pero ese vacío de realidad no va a desaparecer mientras viva una realidad pensada% imaginada. /stamos mirando cuál es la realidad% c&mo investigarla; no vamos a #acer ning6n análisis intelectual. ,o vamos paso por paso desde lo más elemental a lo superior. 7stas son unas investigaciones #olísticas% en el sentido que la ciencia da a esta palabra$ en cada cosa que tomamos está el todo. /l pensamiento no lo puede entender. ,o es que algo sea un símbolo o un re1lejo del todo% sino que es el todo. ¿or qu!" orque s&lo aparece el análisis y la temporalidad a trav!s de nuestra mente. )iempo y espacio crean un proceso mental% pero en lo 5eal no #ay tal. /stas investigaciones se #acen instantáneamente; eso quiere decir que no se pueden tratar desde el mismo lugar del intelecto en el que nos
encontramos #abitualmente. /l intelecto es una especie de ordenador% pero aquí no vamos a trabajar con la mente pensante; estaremos abiertos directamente a la 8nteligencia. /s otra manera de #acer una investigaci&n$ serenamente se da paso a la verdad% en la cual ni se acepta ni se rec#aza nada; s&lo se ve% y el ver produce discernimiento. Con el cerebro #acemos comparaciones con todas las ideas programadas% incluimos lo actual en lo viejo. 9es6s aconsejaba no poner vino nuevo en odres viejos% porque estaba dando una palabra nueva% viva% directa de su vivencia. ,os con1undimos debido a que tanto la verdad vivida directamente como las apariencias de verdad +los conceptos- se visten de la misma manera. Cuando recibimos palabras con los t!rminos usuales 1ilos&1icos o t!cnicos% recibimos envueltos en ellas unos conceptos trabajados en la mente pensante. /stos conceptos ¿de d&nde vienen"% ¿son repetici&n de otros conceptos o son e4presi&n directa de la lucidez% de la visi&n de la verdad" 7se es el punto que tenemos que ver. /n esta investigaci&n y en todos los momentos y siempre que leamos o escuc#emos una con1erencia% deberíamos #acerlo desde un lugar de lucidez donde el discernimiento% la 1uerza de la luz% act6a directamente% desde ese lugar donde es posible ver directamente lo que es verdadero de primera mano en contraste con lo que es repetici&n de conceptos. 'i escuc#amos desde la lucidez% tendremos discernimiento por nosotros mismos y #abrá evidencia de si aquello es la verdad% si es adecuado seguir manteniendo esa comunicaci&n. ,o necesitaremos preguntar ni 1iarnos de lo que nadie nos diga. La verdad% o se ve por discernimiento o no se ve. 2l desenga*arme de las creencias pensadas entro en un ámbito nuevo de la mente% y allí ya no es preciso agarrarse a nada ni depender de nadie ni preguntar. Cuando. alguien obedece a una tradici&n le catalogan como alguien importante$ de s:ami en la tradici&n #ind6% de santo en la tradici&n cristiana o de lama en la tradici&n tibetana. ero el #ec#o de obedecer a una organizaci&n es absolutamente opuesto al camino de liberaci&n del ser #umano. La obediencia es un obstáculo en el camino de la libertad. LA ISIÓN DIRECTA bservemos que las organizaciones religiosas% políticas o sociales se corrompen más y más con el tiempo% ya que están constituidas por seres #umanos con1usos. 2unque en un principio tuvieran una idea verdadera% no la mantienen viva y% por tanto% se corrompen de igual manera que las aguas estancadas. /l pertenecer a alguna organizaci&n nos aparta del camino. /l #ec#o de obedecer% aunque sea a un maestro% ya es contrario a la liberaci&n. /s preciso romper estructuras para poder avanzar. 'i nos a1erramos a estructuras establecidas no podremos dar un paso más. bedecer signi1ica decir$ «,o investigo más% me dejo llevar por otro% sigo algo sin #aberlo visto». /sto% es obvio% no puede ser el camino de la verdad. 3amos a ponernos en el e4tremo$ ¿< si obedecemos a una persona con sabiduría" /l #ec#o de obedecer es 1unesto; ni tan siquiera a un sabio debemos obedecer. odemos estar con !l o mirar desde donde !l mira. ,o #ay que seguir a ning6n maestro cuali1icado de cualquier religi&n% ni tan siquiera a =uda o a una persona tan libre como >ris#namurti. ,o #ay que seguir a nadie% porque obedecer es ya el obstáculo. 0e #ec#o% ninguna persona con sabiduría incitaría a nadie a que le obedeciese; y si alguien lo #ace% es un síntoma claro de que no es sabio.
La actitud inteligente para #acer la investigaci&n es colocarse en ese lugar donde es posible ver la verdad por uno mismo% sin 1&rmulas. Las ideas que presentamos aquí son tan e4tra*as que no sirven para organizar ninguna doctrina con ellas% no se pueden acu*ar. 'olamente tienen la intenci&n de abrir las mentes de quienes las recibimos con vocaci&n para contemplar. ?na vez que la mente está abierta al contemplar% se abre tambi!n a la 8nteligencia. @acia 1uera s&lo vemos 1ormas e interpretaciones de la mente que nos limitan. Cuando pro1undizamos en la conciencia% rompemos las limitaciones y lo #acemos con valentía% libertad y alegría interior. 7se es el camino de la sabiduría. /n un momento dado tengo tristeza% creo que pierdo algo% me da miedo% quiero retener. /s porque estoy dando realidad a los pensamientos que pasan por mi mente% sin prestar atenci&n a la verdad contemplada. /n la contemplaci&n de la verdad no sobrevendrá ninguna preocupaci&n a la mente% no me preocupar! por los personajes del sue*o. /sto no signi1ica que no sienta amor; al contrario% es precisamente entonces cuando empiezo a sentir amor por lo verdadero y lo aut!ntico de aquellas personas% y no por los sue*os que de ellas tengo. /sto es sutil% pero creo que lo podemos captar. Comprendamos que no se trata de indi1erencia. ,ada importa lo que cada persona sue*e% tal y como no me importa lo que #e so*ado por la noc#e% ya sea ello agradable o desagradable. 2l despertar por la ma*ana% me levanto de nuevo y veo que s&lo #a sido un sue*o. ¿)enemos la evidencia de que esto es un sue*o" 7ste es un punto muy importante% y #emos de mirar y mirar el pensamiento #asta comprobarlo. Cuando contemplamos el pensamiento vemos de qu! está #ec#o% vemos su mecanizaci&n% vemos que no es la 5ealidad. Lo descubrimos por nosotros mismos. /so es lo importante. Creer lo que otro dice no tiene importancia. 8ntuir la verdad cuando alguien nos la dice tambi!n es importante% pero s&lo si se mantiene esa intuici&n% no cuando despu!s de tenerla seguimos con el condicionamiento anterior. La intuici&n es muy importante% tanto que lo demás pierde valor. 'eguirla es vivir todo lo que la vida nos presenta a partir de esa intuici&n. 'i no lo #acemos así es porque no tenemos evidencia total. 'igamos entonces contemplando. /sas verdades tienen que movilizar todo el error% mover todas las 1alsas estructuras. ,o #ace 1alta ning6n es1uerzo% basta s&lo con contemplar. /l contemplar la verdad y mantenerse en ella rompe los límites y abre a la libertad. @ay que recordarla% mantenerla constantemente a#í. Las limitaciones se rompen ellas solas% y las consecuencias de esa ruptura son inmensas. Las limitaciones acarrean su1rimiento. ¿,os interesa acabar con el su1rimiento" /so es indudable% a todos nos interesa. ero no vamos a la raíz de donde viene; generalmente queremos taparlo% disimularlo% distraernos. 2l distraerse% la gente se está alejando de su propio ser% y el #uir del propio ser va a traer su1rimiento. < sin embargo% esto es lo que #acemos... precisamente para no su1rir. /sto nos debe #acer re1le4ionar muy seriamente. 0ebemos mirar esta verdad. Aientras nos sintamos limitados tendremos muc#as carencias% y eso traerá muc#os deseos para tapar esas limitaciones% para intentar llenar ese vacío. /so% indudablemente% nos sucederá; #abrá !pocas en que las limitaciones nos pasarán desapercibidas y otras veces inesperadamente aparecerán y se sentirá el latigazo 1uerte de la limitaci&n% de no comprender la vida$ ¿para qu! vivo"% ¿qui!n soy" Cuando aparece el su1rimiento de no comprender el sentido de la vida no debo correr a taparlo; debo quedarme con !l% con ese malestar% con esa angustia% y debo mirar de d&nde viene% tengo que tener 1uerza para mantenerme a#í. < esa 1uerza me la da la contemplaci&n. 'i estoy completamente absorbido por el pensamiento% no puedo #acerlo%
no puedo soportarlo. 2 medida. que aprenda a ver c&mo todo eso sucede en la super1icie de mi conciencia ir! adquiriendo sabiduría% y ello conllevará la ruptura de las limitaciones que #asta entonces me parecían inevitables en la condici&n #umana. odremos entonces darnos cuenta de que no somos lo que parece ser y seguir #aciendo la obra en conjunto% provistos a#ora de otra paz y creatividad. 'iempre #abrá cambios% pero ya no importarán las trans1ormaciones que aparezcan en esta vida. AMOR SIN LÍMITES /l cambio de vida viene desde dentro% y la labor realizada produce un estado de plenitud cuando es aut!ntica. La ruptura de las limitaciones% que es la libertad% produce autenticidad% no una vida mejor seg6n los criterios convencionales. Lo que la libertad produce no es algo que puede ser aplaudido 1uera; lo. que produce es más y más autenticidad y más creatividad desde dentro. /n una vida creativa #ay plenitud. /llo signi1ica que se #an roto las limitaciones; pero mientras nos creamos una persona no podremos aceptar que no tenemos límites. 'e puede llegar a vivir la plenitud a pesar de que la persona es limitada. ¿or qu!" orque la persona es s&lo lo que aparece% no lo que es. Lo que /s en nosotros es in1inito% sin límites% y no se va a satis1acer más que con lo ilimitado. Lo que aparece es limitado; la persona no es libre% depende de todo$ cuerpo% edad% estudios% educaci&n% las e4periencias que le #an marcado% etc. /n síntesis% tiene unas posibilidades limitadas. Lo que tengo que #acer es descubrir que no soy la persona que creo ser% que esa persona es s&lo un atuendo con el que aparecemos en la temporalidad. 'i estuvi!ramos separados los unos de los otros el amor no sería posible. 0el amor s&lo conocemos un re1lejo% pero intuimos su grandeza. /n las relaciones #umanas #ay negocios psicol&gicos% a1ectos% cari*os% pero el amor es otra cosa. 'i en las relaciones #ay algo de amor es porque intuimos algo de la unidad de conciencia que #ay detrás de la persona. 'i nos enamoramos de verdad% no s&lo de las 1ormas% es porque #emos tenido acceso a algo que trasciende a la persona; y entonces% en un momento privilegiado% decimos que los dos nos sentimos uno. 'in embargo% el amor puede pasar en un momento como una rá1aga que casi no vemos y podemos seguir creyendo que estamos separados. Cuando contemplamos el amor en sí mismo% desde la verdad de no estar separados% nuestro amor es espontáneo e inseparable en nuestra vida. ,o es un amor para algo sino que es en sí mismo. Cualquier 1orma que aparezca desde la unidad de conciencia de lo divino% de lo sagrado% es tratada con comprensi&n y amor. /l amor es #acia toda la mani1estaci&n en todas las 1ormas posibles en las que !sta se mani1iesta; nada queda e4cluido. /n lo personal% esto es di1erente. uedo tener a1ecto a la 1amilia% amigos% etc.% y no es cuesti&n de des#acer lo que #aya a#í de aut!ntico. Lo que sea 1also se des#ará al comprender% lo verdadero quedará integrado en el estado de amor y #abrá libertad en ese verdadero amor. or mantener el amor a las 1ormas estamos perdiendo el verdadero amor. ¿C&mo se busca el amor" ,o se puede buscar% porque no es un objeto de la conciencia sino una atracci&n #acia la unidad. Cuando se contempla la unidad% el amor surge espontáneamente. ,o puede evitarse. 'e e4presará de acuerdo a la personalidad que encuentre% pero no importa c&mo se e4prese. Cuando e4iste el amor% se e4presa en las di1erentes personalidades pero siempre se vive en plenitud% total belleza y total libertad.
/se amor no es algo establecido de antemano% no es algo que #aya que #acer. 2 partir de a#í empezará la libertad. /l 1lorecimiento interior del amor es el 1lorecimiento de la libertad; ambos van juntos. /l amor rompe los límites creados por el pensamiento% pero si no los rompe cae en conveniencias% negocios o arreglos provisionales. ROMPER LOS LÍMITES CON LA ERDAD La vida empieza y acaba en un instante. or eso% cada instante es completo% pleno. Cada instante en una visi&n de la verdad es total% porque la verdad nos abre a la totalidad. 0e instante en instante deberíamos estar abiertos así; entonces todo 1luiría% seríamos lo pleno% la totalidad desde dentro% sin límites. Luego% en la temporalidad% aparecería lo que 1uera adecuado de acuerdo a lo que en el tiempo est! pasando% en concordancia con esa totalidad y plenitud que soy. La plenitud interna es la 1uente y la causa% es donde está mi identidad. ,o soy s&lo bueno% soy la bondad en sí misma% #e roto los límites. /sto #ay que descubrirlo. Cualquier imagen que trate de retener requiere muc#a tensi&n y 1alta de libertad. ,o soy una persona inteligente% soy la 8nteligencia. uedo despreocuparme por la imagen porque me vivo como inteligencia% como bondad. 7sta es la di1erencia. Cuando contemplo% todo se e4presa a trav!s de mí. La vida es inteligencia mani1estada en el tiempo. /sto se puede ver con todos los valores. Bu! descanso supone cuando descubro que soy todo esto. /n la contemplaci&n #ay libertad de la dependencia a las 1ormas; se #an roto los límites. ero es necesario re1le4ionar seriamente% con sinceridad% para que sea una realidad vivida. La sinceridad viene de la verdad. 'i no #ay verdad% nada tiene valor. La pregunta verdadera brota de dentro y% al 1ormularse% deja abierto un camino para que la respuesta lo recorra #asta llegar al lugar desde donde surgi& la pregunta sincera.
CAPÍTULO 13
Sólo comprender despierta ¿QUÉ SIGI!ICA CO"P#$%$#& Para darnos cuenta de lo que significa comprender tenemos primero que remover todo lo que llamamos conocer, saber, entender. El término comprender lo dejaremos para algo diferente, algo que es verdaderamente una revolución dentro de nosotros. Todos pensamos que comprendemos cuando simplemente hemos entendido lo que las palabras significan. Pero no, eso no tiene que ver con comprender; de hecho, podemos entender perfectamente lo que significan las palabras y no haber comprendido. i no, fijémonos, por ejemplo, en lo que hacen los filólogos con los te!tos filosóficos de sabidur"a# entienden perfectamente las palabras pero no comprenden, y cuando uno de ellos lee uno de esos te!tos dice# $%ué sinsentido&. 'o mismo sucede en nuestra vida. (on una )ona superficial de nuestra mente entendemos, es decir, conocemos las palabras, las relacionamos unas con otras; tenemos un archivo de información y con él aquilatamos, comparamos, negamos, afirmamos, opinamos, etc. Entonces decimos# $", ya entiendo&, pero no hemos comprendido nada. Esto sucede una y otra ve) en los seres humanos sin que nos demos cuenta de que nos falta lo esencial en el vivir# comprender. *ivimos sin comprender lo que es la vida. Tenemos emociones y pasiones sin comprender por qué estamos viviendo identificados con esas emociones y esas pasiones. ufrimos sin comprender, nos alegramos sin comprender, va pasando el tiempo sin comprender lo que el tiempo es. Enfermamos, tenemos salud, envejecemos o morimos sin comprender lo que son la vida y la muerte. Es un programa muy desagradable, pero de hecho as" sucede. + decimos en el t"tulo de esta investigación que si no hay comprensión no hay despertar. Es absolutamente as", no tengamos duda, comprobémoslo. i no hay comprensión, no hay despertar. (uando no comprendemos pasamos por la vida dormidos; no nos basta con entender, ni siquiera con entender muchas cosas. Podemos estudiar muchas cosas y no comprender nada. e hecho, es algo habitual en nuestra sociedad encontrar personas con un c-mulo de informaciones que, a pesar de que conocen muchas cosas, no comprenden nada. + soy un poco drstica al decir# $/o comprenden nada&; a lo mejor comprenden algunas cosas. Pero no, eso no funciona as". 0 se comprende desde la totalidad o no se comprende nada. /o puedo comprender una cosa y otra no. Puedo entender de algo espec"fico; por ejemplo, puedo entender de mecnica, puedo entender de f"sica, puedo entender de literatura, puedo entender de una cosa y no de otra. Puedo conocer algo y no conocer otra cosa, pero la comprensión no es algo que se realice de manera parcial, porque para comprender de verdad tengo que comprender desde la totalidad. Por tanto, o comprendo todo o no comprendo nada. Es verdaderamente e!tra1o pero as" es. Puedo tener unos conocimientos y otros no, puedo entender un idioma y no entender otro, pero no puedo decir que comprendo algo cuando no estoy comprendiendo lo dems. Es lo mismo que decir que amo a una persona pero a otra la detesto; eso significa que no he descubierto el amor. Podemos decir# $", yo sé lo que es el amor porque amo a esta persona, aunque a esta otra no&. Pero eso no es amor. 'o mismo pasa con la comprensión. 'a comprensión en nuestro idioma tiene la part"cula $con&, que es muy significativa porque indica $junto con&, pues no es posible comprender una cosa aislada.
'a comprensión llega por inspiración; y cuando sobreviene un estado de comprensión, todo queda comprendido. (uando no hay ese estado de comprensión, de contemplación de la verdad, no se puede comprender aunque se sepan cosas aisladamente, no se enla)an entre ellas, no se puede integrar el rompecabe)as. e conoce muy bien una ficha por todos los lados, pero no se sabe dónde encaja, y por eso una persona puede saber much"simas cosas sin comprender la vida# sabe de pie)as aisladas pero no sabe dónde colocarlas. El mundo en que vivimos es un mundo relativo; esto es algo que hemos o"do muchas veces y ya nos suena como algo aceptado. %ue el universo sea relativo y que la realidad sensorial, interpretada, pensada que conocemos y con la que nos movemos sea relativa, incluyendo nuestras personas, nos parece algo trivial, pero es algo muy significativo porque, si entendemos bien lo que significa $relatividad& y que todo est en relación con todo, al final lo que estamos diciendo al decir que la realidad es relativa es que no hay tal realidad en s" misma, sino que es una serie de relaciones de nada. Tienen ra)ón los budistas# todo esto es nada; y también los cristianos, aunque no lo entiendan as", cuando afirman que ios creó todo esto de la nada. Todo Todo est hecho de nada; sólo son relaciones y relacione relaciones, s, $fórmulas $fórmulas matemticas& matemticas& como dicen los f"sicos. f"sicos. 2órmulas 2órmulas matemticas matemticas quiere decir relaciones mentales, proyecciones de nuestra mente. El mundo no es una realidad en s"; es algo proyectado, algo de lo cual se puede tomar medidas, pero que no se puede ser. 'o 3eal es aquello que puedes ser. escubrir la realidad realidad es ser la 3ealidad. 3ealidad. (uando comprendes comprendes eres aquello aquello que comprend comprendes, es, aunque nos suene e!tra1o. (uando comprendes abres tu conciencia, y la (onciencia abra)a aquello que es comprendido. Esa part"cula $con& implica ese abra)o de todo; y cuando eres aquello, entonces s" comprendes. En lenguaje popular suele decirse que hasta que una persona no vive una cosa no la comp compre rend nde. e. (uan (uando do lo eres eres,, lo comp compre rend ndes es;; cuan cuando do no lo eres eres,, espe especu cula lass sobr sobre e relaciones, relaciones y relaciones# dos ms dos, cuatro; ms dos, seis, etc. 3elaciones; eso es la realidad relativa# algo hecho de la nada, pura proyección. También podemos decir que est hecha de conciencia, ya que no hay nada ms que (onciencia; pero la realidad relativa no es una realidad en s" misma, sino que se compone de proyecciones que se hacen en la (onciencia, y como tales, no son reales en s" mismas. Precisamente por eso es tan importante comprender; porque comprender no es coger una realidad y, envuelto en esa ilusión de que aquello es una realidad en s" misma, desmenu)arla, anali)arla, hablar sobre ella, compararla con otra. Eso no es comprender; eso es pensar sobre ello, tomar mediciones. 'os hind-es dicen que el mundo es maya. En snscrito 4aya significa $medida&, as" que el mundo son sólo medidas. 'os f"sicos dicen que son puras fórmulas matemticas, sólo relaciones, e!actamente relaciones, medidas# de aqu" a all", cinco cent"metros. 5+ qué es el aqu" y el all"6 Es un secreto. 7s" pues, se trata de relaciones 5entre qué6, de medidas 5de qué6 Esas preguntas son inusuales; solamente se las hacen los filósofos. on preguntas impertinentes, dir"amos. Todo el mundo est tomando medidas# $8ay tanta distancia de aqu" a aqu"&, $*amos a comparar esto con lo otro&, etc. Pero nadie se pregunta# 5(omparación de qué con qué6 54edir qué con qué6 53elaciones de qué6 5(ul es la real realid idad ad en s"6 s"6 ola olame ment nte e a part partir ir de esa esa real realid idad ad hay verd verdad ader era a comp compre rens nsió ión; n; comprensión de lo que es nuestra vida. /o pensemos que las disquisiciones metaf"sicas estn alejadas de nuestra vida, porque aunque pare)ca paradójico, son lo ms cercano a nuestra vida. (uando descubrimos esa
verdad metaf"sica, entonces es cuando comprendemos realmente la vida. 4s cercano y ms prctico no se puede ser. ser. in embargo, como lo vemos todo al revés, nos parece que eso no nos interesa. 4e interesa conseguir cosas, que las personas se comporten como a m" me conviene, tener un puesto importante... Presto atención a todo lo provisional, a todo lo que est en el tiempo, a todo lo que cambia; me interesan las imgenes, las apariencias, las opiniones. Todo Todo eso me interesa, pero no me interesa qué es lo 3eal, qué es verdad en mi vida. 7 eso eso no le doy importancia; por eso, -ltimamente a la metaf"sica se la ha dejado bastante de lado. Parece que ese tipo de preguntas sobre la realidad no interesa a las personas, a la mente moderna. 9mporta tener ms producción en el trabajo, ser ms eficiente, conseguir ms cosas, vivir e!periencias que han tenido otras personas, conseguir ms y ms ilusiones..., en definitiva, acumular relaciones, toda esa cantidad de relaciones hechas de nada. Pues bien, si alguien tiene la vocación de comprender :palabra que, como ya hemos visto, denota lo hol"stico, es decir, que no es saber algo de qu"mica o de otra cosa, sino comprender, abarcarlo todo:, si alguien quiere saber lo que la realidad es, no podr hacerlo en el lugar mental habitual donde nos encontramos. 'o digo de una manera categórica. 8ay una evidencia total para m" de ello, por haberlo vivido. /o es posible comprender en el lugar habitual donde el ser humano se encuentra, entretenido como est con sus pensamientos y sus emociones# $5Por qué me ha pasado esto a m"6&, $5%ué haré en tal situación6&, $Tengo que conseguir esto&, $Tengo que convencer a esta persona para que haga esto otro& ... e esa manera, con todas esas preocupaciones e inquietudes, no es posible comprender. + si no comprendo no amo; por tanto, no es posible el amor. 5(u 5(und ndo o es posi posibl ble e la comp compre rens nsió ión6 n6,, y, por por tant tanto, o, 5cu 5cund ndo o brot brota a el amor amor de esa esa comprensión6 Porque sin ese caldo de cultivo de la comprensión no puede brotar el amor. 5(undo de esa comprensión brota el amor6 (uando el ser humano ha trascendido, cuando se ha desapegado de esa especie de ordenador biológico que es el pensamiento, esa mquina de dar interpretaciones, siempre las mismas, pero que nos tiene muy entretenidos. Tal como las computadoras que siempre van manejando los mismos datos, la gente se entretiene manipulando los datos que ofrece el pensamiento de una manera o de otra; pero de ah" no va a salir nada ms que lo que se ha programado. 7dems, 7dems, todo lo que se ha programado est condicionado por las mentes de los que lo han programado. 7s", es preferible que, atravesando mi propia mente, descubra un lugar de verdad. 7l desc descub ubri rirr un luga lugarr verd verdad ader ero o dond donde e es posi posibl ble e cont contem empl plar ar la verd verdad ad surge urge la comprens comprensión. ión. + luego, si en el aparato aparato se ha programado programado una frase que tiene sabidur"a, sabidur"a, puedo tener discernimiento para percibir que all" hay sabidur"a; si leo un libro donde hay sabidur"a, comprendo por qué est dentro de esa contemplación de la verdad aquella e!presión, comprendo que la persona que e!presó eso estaba en ese lugar. Entonces se produce esa comunión, la $comunión de los santos& qui) dir"amos seg-n nuestra tradición, la $comunión de los sabios& se podr"a decir también. Pero si santo es el que ama, habr"a que decir que sin sabidur"a no hay verdadero amor. in sabidur"a, el amor que e!iste es el amor que conocemos, con apegos# amo lo m"o, lo que me gusta, lo que me apoya, etc.; o también el amor biológico, que me produce una satisfacción f"sica; o el amor afectivo, con dependencias psicológicas, o el amor mental# mis ideas, mis opiniones etc., pero no el amor que viene de la comprensión de la unidad. (uando hemos comprendido que no estamos separados, el amor que brota de esa comp compre rens nsió ión n es un amor amor puro puro,, es un amor amor que que no est est cont contam amin inad ado o con con nada nada egocéntrico, al igual que la verdad, contemplada en ese lugar luminoso por donde pasa la
lu), es una verdad pura que no est contaminada de opiniones, que no depende de lo que me han dicho, de lo que he le"do, de lo que la mayor"a de la gente piensa, etc. Tengo que distinguir muy bien lo que significa comprender para no confundirme creyendo que estoy compre comprendi ndiend endo o cuand cuando o simple simplemen mente te entien entiendo do cosas. cosas. Entend Entender er cosas cosas es desci descifra frarr s"mbolos# descifro s"mbolos del lenguaje o descifro s"mbolos matemticos, s"mbolos técnicos u otros. Entonces entiendo. También haya quien le interesa descifrar s"mbolos religiosos. Entonces entiende de eso, de descifrar s"mbolos. Pero eso no es comprensión; comprender es integrar cada una y todas las cosas en una totalidad, y esa totalidad est hecha de lu). SALI# %$ LA ILUSI' 8emos dicho que todas las cosas, toda la creación est hecha de la nada# correcto. Est hecha de nada, lo cual quiere decir que no es por s" misma, que solamente es un reflejo, una proyección, una mala interpretación, digamos, de la lu); una interpretación muy limita limitada, da, al menos, menos, seg-n seg-n los instrume instrumento ntoss que que cada cada uno tiene. tiene. Porque Porque seg-n seg-n mis instrumentos sensoriales, y seg-n las claves de interpretación que se me han dado desde ni1o por la educación que he tenido, as" voy proyectando las cosas. 0tro ser humano en otro ambiente proyectar otra cosa, y otro ser vivo con otros sentidos tiene otra posibilidad de acceso sensorial al mundo; por ejemplo, los animales u otros seres. Entonces, 5cómo creo que a partir de esos instrumentos limitados estoy captando la -nica y la verdadera 3ealidad6, 5cómo creo que a partir de las interpretaciones de mi cultura, de lo que he aprendido, etc., estoy interpretando correctamente, estoy comprendiendo la 3ealidad6 /o es as"; ésta es una manera muy estrecha de vivir. El vivir a partir de las sensaciones de los sentidos es algo limitad"simo. e hecho, ya se ha descubierto con algunos aparatos que hay muchas ms ondas vibratorias y much"simas ms energ"as de las que captan los sentidos. 9ncluso algunos animales captan cosas que no capta el ser humano, al igual que nosotros captamos cosas que no captan los animales. eg-n el instrumento, as" se perciben unas ondas u otras, un nivel u otro de vibración, unas u otras energ"as. Pero las perc percep epci cion ones es posi posibl bles es son son innu innume mera rabl bles es.. 5Ten 5Tendr dr"a "an n que que ser ser innu innume mera rabl bles es los los instrumentos6 /ing-n instrumento est capacitado para captar por completo la 3ealidad. 'a perce percepci pción ón que que nos propor proporcio ciona na cualqu cualquier ier instru instrume mento nto es siempr siempre e limita limitada, da, y el pensamiento que la interpreta lo hace seg-n una terminolog"a, unos s"mbolos o unos valores determinados que se han ido transmitiendo de generación en generación en las diferentes culturas. Todo eso es limitado. i el ser humano tiene la vocación y la demanda de descubrir lo que est ms all de eso, aquello desconocido a lo que qui) algunos aluden con la palabra $ios&, $la 3ealidad absoluta& o $la verdadera 3ealidad&, es necesario que haga un trasvase de su identidad. 5Es posible6 ", es posible; precisamente porque todas las apariciones, es decir, todo lo que va apareciendo en la (onciencia surge a partir de esa lu) que lo proyecta todo. e la misma manera que se proyecta una pel"cula en una pantalla, el ser humano que est en la superficie, en la pantalla, anali)ando su pel"cula particular con la limitación de sus sentidos y de sus interpretaciones pensadas, el ser humano que est ah" en su pel"cula particular, como es esa misma lu), puede retrotraerse hasta el foco luminoso que la proyecta, puede llegar a la lu) misma que est creando todo aquello, y as" empie)a a comprender. comprender. (uando se va acercando a la lu), ese resplandor r esplandor de la lu) es comprensión; y esa comprensión despierta del sue1o de creer que era realidad aquello limitado, con todo lo que que esa esa cree creenc ncia ia conl conlle leva va en form forma a de terr terrib ible less preo preocu cupa paci cion ones es,, de angu angust stia iass insoportables... (uando lo decimos en abstracto no nos damos cuenta de todo lo que supone el estar en la ilusión. i lusión.
'os hind-es de la tradición vedanta advaita, los advaitines, acostumbran poner un ejemplo que es muy significativo, propio de su cultura, aunque podr"amos poner cualquier otro. Este ejemplo t"pico es el de una persona que va caminando y, de repente, se encuentra con una cosa atravesada en el camino. 9nmediatamente piensa# $na serpiente&. 'a persona interpreta su percepción seg-n su limitada visión# $Puede ser una serpiente&, $puede ser venenosa&, $me puede matar&, y aparecen la angustia, la adrenalina, la preocupación en la mente; o puede salir corriendo, o bien quedarse parali)ada. /o sabe qué hacer, lo pasa muy mal, hasta que se fija ms detenidamente; adquiere un poco de serenidad para poder mirar ms, porque si no, no podr"a hacerlo, y entonces descubre que aquello era simplemente un palo retorcido, no una serpiente. En el momento de comprender eso, 5qué sucede6 e acabó la angustia, se acabó el sufrimiento, se acabó la preocupación; se siente libre de seguir paseando, disfrutando del maravilloso d"a, pero no antes de que se produ)ca esa comprensión, porque ah" aparec"a algo amena)ador. Ese ejemplo es caracter"stico precisamente del cambio de comprensión. (uando me creo las apariencias :la apariencia de la serpiente:, cuando me creo que es realidad lo que aparece, entonces acepto el argumento de la pel"cula, el argumento que me dan los medios de comunicación, los amigos, los colegas o jefes en el trabajo, mi familia, etc. + cuando en un momento de serenidad puedo contemplar las cosas tal como son, desde un lugar ms iluminado de la conciencia, entonces se deshace todo aquello. (untas veces me han dicho# $(uando me envuelven las emociones me quedo atrapado en ellas. 5%ué puedo hacer para salir de mis emociones6&. 'as emociones negativas son terribles, acaban con la salud de una persona, destro)an la vida no sólo de quien las tiene sino de todos los que le rodean. 5%ué hacer con las emociones6 ólo comprender; pero hay que saber lo que es comprender. (uando comprendes, despiertas del sue1o de las emociones, despiertas del sue1o de creerte que hay ah" una serpiente venenosa que te puede atacar, despiertas; y cuando despiertas, ya est. (onstantemente estamos buscando trucos pensando que $aquello& es una serpiente, es decir, desde dentro de la ilusión. Estamos buscando much"simas fórmulas, tcticas astutas para enfrentarnos con esa realidad ilusoria; hasta que descubrimos que aquello no era lo que pensbamos, que era pura apariencia, y en ese momento dejamos todos los trucos y dejamos la angustia de, por ejemplo, estar seguros a base de acumular dinero, de tener seguros de accidentes, de estar seguros contra la enfermedad, de tener cerca una cl"nica por si acaso, y todas esas cosas que estn al orden del d"a. Todo el mundo tiene un miedo terrible y busca unas ilusorias seguridades, pero luego la vida sorprende, no tiene en cuenta los seguros que la persona ten"a, y ataca por el lado ms inesperado. Pues bien, una ve) que hemos comprendido, una ve) que se ha comprendido lo ilusorio de todo eso, ya no hay ms esa preocupación que acaba con nuestra energ"a, de cómo me aseguraré, de cómo aseguraré a los m"os, a mi familia, cómo haré para que mi hijo estudie para que luego no se vea sin trabajo... na ve) que comprendo, no quiere decir que me convierta en $un pasota&, que ya no me importe lo que les pase a mis hijos, que no me importe si estoy enfermo o sano; no, no es eso. 'o que sucede es que la persona act-a en cada nivel de una manera adecuada desde la comprensión. e acaban las angustias cuando la persona descubre que no es una serpiente aquello, sino una cuerda, y act-a entonces adecuadamente a la situación; por ejemplo, retira el palo y sigue paseando tranquilamente, adecuadamente. /o es que ya no le importe el paseo; sigue
disfrutando de su paseo, pero no con esa angustia, con ese malestar, con esa preocupación. +a no se obnubila la mente empleando las evasiones que ya conocemos, drogndola con sustancias que la emboten para que no haya sufrimiento o descentrndola con cualquier clase de distracción para evadir la inquietud sobre qué hacer o no hacer. CO"P#$%$# LA (I%A Estamos buscando mejorar la vida con buena voluntad. En la sociedad, cada uno a su manera y seg-n el grupo al que pertene)ca :los ecologistas por un lado, los pol"ticos por otro lado, los religiosos por otro:, cada uno con toda su buena voluntad busca solución a problemas como la drogadicción, la enfermedad, el sufrimiento, etc. 'o hacen con buena voluntad, pero no van al fondo de la cuestión. Podr"amos preguntarnos# $5%ué haré para comprender la vida6&, y entonces la cosa ser"a muy diferente. i preguntara dentro de un conjunto de personas con distintas opiniones $5%ué hago para comprender la vida6&, cada cual ofrecer"a un programa diferente# el católico y el protestante e!pondr"an sus diferentes versiones, el budista dir"a otra cosa distinta, el escéptico ofrecer"a otra interpretación... Todos tendr"an un programa para comprender la vida, pero eso sólo es comprender en el sue1o, es entender teor"as dentro del sue1o, es seguir so1ando. /inguna teor"a :da lo mismo que sea social, religiosa, económica o pol"tica: nos puede decir cómo comprender la vida. e nos ha dicho que esas disciplinas aportan un sentido de la vida, unos ideales, unas ideas; pero peor que no tener ninguna idea es tener unas ideas que se enfrentan contra otras ideas. /o hay pa) entre los que tienen unas ideas y los que tienen otras. 9ncluso algunos llegan a matar por pensar de manera distinta a los otros. 4atan a los que tienen opiniones diferentes. 8asta ese e!tremo se puede llegar. Eso no es comprender la vida, desde luego. Pero dentro del sue1o nos parece que comprender la vida es tener unas ideas y discutir sobre ellas. Para comprender de verdad es necesario que pasemos a un nuevo estado en la conciencia. Entonces sabremos lo que es la sabidur"a. 'a sabidur"a, por supuesto, no es saber mucho. e puede tener sabidur"a sabiendo muy poco o no sabiendo casi nada, sabiendo apenas lo imprescindible. 'a sabidur"a no tiene nada que ver con tener conocimientos. Puedes tener apenas los conocimientos imprescindibles :conocer tu nombre, tu n-mero de identificación fiscal, el nombre de la calle donde vives y cosas de ese tipo: y, sin embargo, tener sabidur"a. + otra persona puede tener grandes conocimientos, incluso muy a la moda, de los -ltimos, sin tener sabidur"a. 'a sabidur"a brota de un estado de comprensión. Es un estado nuevo, no nos enga1emos. /o se fragua en el pensamiento, no se crea all"; es un estado diferente de lo conocido. Poner la mente contemplativa es colocarnos en la posición en la que ese estado nuevo puede aparecer, puede brotar. En realidad, ese estado est siempre ah", presente, de modo que términos como $aparecer& o $brotar& no son realmente adecuados ya que eso es 'o:que:Es. 'a 3ealidad est ya ah". (omo dec"a
distancias; lo 3eal est siempre ah", en su sitio. (uando empie)a a surgir un estado de atención en nosotros, un estado de lucide), notamos que lo 3eal est ah" y que se e!presa en nuestro psiquismo personal como un estado de plenitud sin necesidad de hacer nada. Esto es e!tra1o, porque para sentirnos bien parece que necesitamos tener una persona al lado, tener tantas cosas, etc. in necesidad de nada puede e!istir esa plenitud. /o quiere decir que el cuerpo no necesite cosas. El cuerpo necesitar abrigarse si hace fr"o, comida, etc. + también tiene necesidades seg-n a lo que esté acostumbrado# si est acostumbrado a tantos grados de temperatura y le pones a otros ms bajos, habr problemas. 'os instrumentos necesitan unas condiciones, y el cuerpo hay que cuidarlo del mismo modo que una mquina hay que ponerla en orden y un instrumento musical hay que afinarlo. Pero lo que de verdad somos :porque ni remotamente somos el cuerpo:, lo que realmente somos no necesita nada para vivir en plenitud. + ésta es la satisfacción y la alegr"a de los sabios, algo que resulta incomprensible para aquellos que no han tocado la sabidur"a. 5(ómo un individuo que vive en una cueva y a quien nadie conoce, a quien nadie valora, que no tiene familia, que no tiene nadie que le quiera o que no es importante, cómo puede ser, sin embargo, que tenga esa e!presión de alegr"a y de felicidad durante todo el d"a6 escubramos eso. escubramos cómo es posible que de la comprensión profunda de la sabidur"a brote ese estado de plenitud. Plenitud es ms que alegr"a, es una alegr"a sin objeto. Porque normalmente la alegr"a la condicionamos a algo# estoy contento porque me ha pasado algo bueno, porque mi hijo ha pasado un e!amen, estoy contento porque me han regalado un objeto de mi agrado, estoy contento porque la bolsa ha subido y ten"a intereses en ello, estoy contento por algo. Pero cuando esa alegr"a es condicionada, no es nada, es echar agua en un cacharro lleno de agujeros# se va; rpidamente se va, porque aparece en el tiempo y desaparece en el tiempo. Podemos darnos cuenta de ello, =es tan fuga)> Podemos estar much"simo tiempo, a lo mejor hasta a1os, con un deseo, y cuando por fin lo conseguimos, la alegr"a de conseguirlo no dura nada. Podemos observarlo# 5(unto dura la alegr"a de conseguir el deseo, después de haber estado a1os detrs, con voluntad para conseguirlo6 /ada, ya me he acostumbrado; ya tengo aquel objeto, ya tengo por fin aquel mueble, o ya he conseguido una casa ms grande, o ya he conseguido el puesto de trabajo que quer"a, 5y qué6 Es una lata, todos los d"as tengo que hacer lo mismo... +a he conseguido que todos me respeten, que me llamen $jefe&, que todos me tengan miedo, 5y qué6 igo igual de aburrido, como si nada. Pero aquella persona que no ha conseguido nada de eso, ya sea que todo el mundo la respete, que todo el mundo la admire, tener much"simo dinero o tener objetos valios"simos, puede estar, sin embargo, siempre en un estado de plenitud interior. Plenitud quiere decir que no falta nada. $%uien a ios tiene nada le falta&, se dijo. Por supuesto, tener a ios no es coger al personaje y mantenerlo al lado de uno. Tener a ios no es tener a alguien; es ese estado de presencia de lo 3eal. (uando se ha hablado de la presencia de ios, se habla de la presencia de la 3ealidad, de 'o:que:Es, de 'o:que: omos; es 7quello por lo que todo aparece, pero que no aparece sino que es. + se protesta, cuntas protestas ha habido del tipo# $/adie ha visto a ios&, $Eso de ios es un invento, porque 5dónde est ios6&... 'o 3eal no puede aparecer, porque lo que aparece est hecho de la nada. Ese estado de presencia de lo 3eal, esa 3ealidad no aparece; es. ¿CU)%O %$SP$#TA"OS&
/osotros, en la medida en que nos creemos que somos lo que aparece :nuestro cuerpo f"sico, nuestra altura, nuestra edad, género, condición, etc.:, en la medida en que creemos que somos lo que aparece estamos errando, no damos en el blanco, estamos equivocados; entonces nuestra vida tiene que ser necesariamente insatisfactoria. En la medida en que vamos comprendiendo, despertamos a 'o:que:Es, a lo 3eal; y en esa medida, aparece en nosotros la serenidad, la pa), la alegr"a interior que no depende de nada, el amor como atracción a la unidad de la 3ealidad suprema, que es na. Por tanto, el amor es algo absolutamente necesario. i no hay división, si no hay separación, 5cómo puede haber diferencias, conflictos, luchas6 'o -nico que puede haber es amor. 'a comprensión por tanto, no es algo que est encerrado, no es algo que est limitado al plano intelectual, como normalmente se cree. 'a comprensión inunda absolutamente todo. (omprender es ver desde la totalidad. Para ver desde la totalidad es necesario que yo sea, que lo que ahora creo que soy se disuelva y que mi identidad se ampl"e hasta la totalidad. ?sta es una e!tra1a situación para el pensamiento. 4i identidad tiene que e!pandirse infinitamente, y entonces veo desde esa totalidad, desde esa identidad e!pandida. (uando mi identidad est limitada, estoy creando complicaciones por todos los lados, separaciones, luchas, conflictos debido a esa misma limitación de lo que creo ser. + las luchas y los conflictos que crean los dems e!citan una reacción m"a de la misma clase# acciones y reacciones en cadena surgen de mantenerse en un estado limitado, de creernos que somos lo que aparece. Pero no somos las apariencias, tengmoslo claro; no somos lo que aparece. 'o que aparece no es nada, es una cosa "nfima. Podr"amos decir que es nada, como dicen los budistas, y dir"amos la verdad# es una nada; es una nada coloreada por la (onciencia. En el tiempo parece que esa nada tiene vida; pero el tiempo es creación también de la mente, el pensamiento est ocasionando el tiempo, digamos que el tiempo es un subproducto de este instrumento pensante que es la mente. in pensamiento no hay tal tiempo, sin pensamiento desaparece la historia# la historia de la humanidad, la historia de un pueblo, la historia particular de un individuo, etc. (uando estamos ms all del pensamiento desaparecen todas las historias. 'o:que:Es no le sigue el juego a la memoria, porque la memoria es el recuerdo de lo que aparece, mientras que 'o:que:Es no requiere memoria porque, como est siempre ah" de instante en instante, es eterno. 'o que est en el tiempo requiere un aparato que lo grabe, que es la memoria, porque si no, se est yendo todo el tiempo; y a-n con la memoria se va, porque la memoria se va también, puesto que también es un aspecto temporal. ólo hay una cosa que mantener en nuestra mente; dejemos todo lo dems, sólo una cosa hay que mantener# lo 3eal est aqu" y ahora, es eterno, est fuera del tiempo, y la comprensión brota de vivir desde ah", no de otra manera. Puedo pensar que, si no estoy en ese lugar, no tengo muchas e!pectativas en la vida, no tengo muchas esperan)as. Pero en realidad s" tengo una gran esperan)a# ir a ese lugar. 'as dems esperan)as no cuentan. i no estoy ah", mi propósito de vida, mi sentido de la vida, mi plan, mi amor supremo, mi ideal es traspasar ese nivel y estar en el nivel donde la comprensión se produce, es decir, pasar de las tinieblas a la lu), como se ha dicho de una manera simplificada en una panisad. Pero las tinieblas entretienen much"simo, de ah" la dificultad de aprender a contemplar. Tenemos que intentarlo una y otra ve). 'as tinieblas no solamente entretienen, sino que acaparan de manera muy sutil. Por ejemplo, aparecen pensamientos como# $", puedes ir a otro lugar; pero si lo haces, entonces abandonas esto. 5(ómo ser tu vida si dejas las personas que te rodean y tus proyectos6&. Todos esos pensamientos son nada, son ilusorios. /o es que los proyectos y
los planes y lo que vivamos no sean inteligentes. Todo, dentro de la manifestación est hecho de conciencia y es reflejo de la 9nteligencia; pero cada plano se ocupa de su nivel correspondiente# el nivel f"sico se ocupa del f"sico, y el mental del mental, etc. oltemos esa identificación. (reemos que nada funcionar si no nos identificamos con ello, pero eso no es verdad. Todo funciona mal precisamente por identificarnos con ello, todo funciona mal debido a que tenemos esa angustia del ejemplo anterior, de creer que hay una serpiente cuando lo que hay es una rama. (uando veamos 'o:que:Es realmente, actuaremos de manera adecuada a 'o:que:Es. (uando en una persona hay atención, no act-a de manera inadecuada; act-a de manera adecuada, y con mayor sencille), desde luego, porque es ms sencillo tener delante un palo que tener una serpiente, mucho ms sencillo. Entonces, 5la vida se hace ms sencilla6 ", seguramente se hace ms sencilla, pero sin duda se vuelve adecuada; es adecuada desde otro nivel, desde un nivel de comprensión. Por ejemplo, una persona que est en la atención cumple con sus responsabilidades, llega a la hora que ha prometido llegar, hace lo que se ha comprometido a hacer, act-a sin distorsionar lo que los dems estn haciendo, no perjudica a los dems. na persona que no esté atenta est en sus preocupaciones, est en sus enredos, en sus l"os, no piensa en los dems, no se acuerda, se le pasa la hora a la que hab"a quedado, se olvida de hacer lo que hab"a prometido, etc. 'a atención es una iluminación. Puede suceder que te distraigas de alguna cosa, pero bsicamente la atención es una iluminación. Entonces, bsicamente act-as de una manera adecuada. /o e!ageremos y pensemos que los sabios nunca se olvidan el paraguas, porque s", a veces, los sabios se olvidan mucho de los paraguas; no hay que e!agerar en este sentido. Pero, esencialmente, en lo que se ve como importante, en lo esencial hay una adecuación de todos los niveles. Por ejemplo, el cuidado del cuerpo f"sico. e puede tener cuidado del cuerpo f"sico de una manera compulsiva, como tanto se ve en esta sociedad# con angustia, amargndose uno la vida y amargndosela a los dems porque tengo que pasar anlisis médicos todo el tiempo, por ejemplo. ?sa es la forma de vivir cuando no se comprende lo que es la vida. in embargo, cuando hay comprensión no hay una despreocupación por el cuerpo f"sico, sino una atención en darle lo que es necesario y proveerle de un cuidado ra)onable. y si se ve que en un momento dado hay peligro de enfermedad, se puede utili)ar un producto que ayude, que sea natural, que no tenga efectos peores que los que resuelve. Pero la persona que est angustiada, va a por todas. e puede tomar una droga terrible que le quite el resfriado, por ejemplo, pero que le deje una enfermedad de por vida, y luego seguir con esa enfermedad, tomando cosas que le compliquen otras, etc. 'o que est pasando actualmente con la medicina es muy significativo; es significativo de lo que pasa en todos los mbitos. En el mbito de la pedagog"a, por ejemplo, tampoco se les permite a los ni1os que espontneamente brote de ellos lo que es natural, sino que hay que educarlos de una manera determinada, hay que procurar que desde peque1os desarrollen la inteligencia porque luego hay una competencia enorme, se les ense1a a manejar los ordenadores a partir de los dos a1os, y cosas por el estilo, para que luego no se queden atrs. in embargo, las teor"as siempre se quedan atrs porque la vida es nueva en cada momento y siempre vienen cosas inesperadas. Pero las personas siguen preocupndose por la serpiente, seg-n el ejemplo de la filosof"a advaita, ya sea en medicina, en pedagog"a o en cualquier otra disciplina que elijamos. 'a actitud de la persona con sabidur"a, de la persona que comprende, es una actitud serenamente despierta. 'a persona es serena porque sabe que lo 3eal, que lo verdadero no es en absoluto ni un peligro, ni un conflicto, ni una desaparición, ni una muerte, ni nada
de eso. 'o 3eal est ah", es eterno, es siempre, y esa certe)a produce la -nica confian)a verdadera. /o es que produ)ca $una& confian)a, sino $la -nica& confian)a verdadera. El intuir, el contemplar o el unificarse con lo 3eal son las tres etapas que van produciendo la -nica confian)a verdadera; las otras no son verdaderas# ni el confiar en personas, ni el confiar en la econom"a, ni el confiar en la tradición, ni el confiar en las autoridades cient"ficas o religiosas, ni el confiar en nada. 'a -nica confian)a verdadera, y la -nica libertad verdadera, es la que nace de lo 3eal. e esa comprensión y de esa serena lucide) brota la -nica verdadera libertad. 'as otras cosas son remedos, son caricaturas de la libertad; no es verdadera libertad, sino lo que creemos que es libertad. 8acer lo que quiero en un momento dado suele estar movido por corrientes, energ"as, impulsos, ideas que no veo. Eso es hacer lo que quiero. (uando todo eso se ha comprendido brota la verdadera libertad# la libertad de ser lo que realmente soy en un instante eterno. /ada de lo que aparece es real. En este sentido, ser libre es no estar limitado, no estar condicionado. 'as personas creen que ejercen su libertad cuando siguen condicionamientos, cuando obedecen, cuando siguen pautas, cuando siguen impulsos, ya sean biológicos o sociales; as" entienden que estn ejerciendo su libertad. Pero la libertad es no estar limitado por nada, no estar coaccionado por nada, no tener ning-n condicionante, no repetir. En otras palabras, ser nuevo en cada instante; eso es ser libre. %ue nada del pasado te esté empujando, que nada del pasado te esté impulsando a actuar y a vivir, ni del pasado de hace siglos :tradiciones, etc.: ni del pasado de lo que o"ste ayer. %ue nada del pasado te afecte, que vivas en este instante eterno sin tomar en cuenta lo que oyes alrededor del pasado, ajeno a lo que aparece, a lo que se mueve en el sue1o; porque si empie)as a escuchar esas voces, como le pasó a lises con las sirenas, fcilmente acabas embaucado. Tienes que estar bien atado al mstil, bien centrado en ese foco de lu) que es tu verdadera naturale)a para que no te dejes llevar por esas voces ilusorias del pasado, siempre del pasado. Porque lo eterno no habla de esa manera espectacular, lo eterno no es as", no es un canto que entusiasma, que hipnoti)a. 'o eterno est siempre ah", y es necesario aprender a escucharlo. (oloquemos nuestra identidad en otro lugar distinto para poder escuchar aquello que es eterno, que no pertenece al pasado. 5Estamos despiertos para vivir6 5Estamos l-cidos6 58ay sabidur"a en nuestra vida6
CAPÍTULO 14
Sabiduría en el vivir
SIN TIEMPO
Vamos a realizar una investigación para descubrir lo Real. Aun empleando nuestra razón, nuestro intelecto, no nos quedaremos con los conceptos ni los pensamientos que vayan apareciendo en nuestra mente. Vamos a profundizar en la conciencia. Para ello debemos aflojar todas las tensiones. No ay que barajar ideas, pensamientos, sino investigar, aprender a mantener nuestra mente en un lugar donde e!iste lucidez. "nvestiguemos para descubrir si es posible que en la mente aya un lugar acia la lucidez, acia la inteligencia total, que permita ver la verdad directamente. #i no es posible, no ay nada que acer. #i no podemos ver la verdad directamente, si no sabemos ser una luz para nosotros mismos, si no podemos ser capaces de descubrir directamente lo que es verdadero y separarlo de lo falso, si eso no es posible, estamos perdidos y podemos caer en doctrinas, comparaciones y conflictos que acaban en frustraciones. $uando decimos que vamos a acer una investigación, quiere decir que adoptamos una actitud interna capaz de descubrir un lugar nuevo a partir de nuestra inteligencia abitual, de abrirnos a un espacio de inteligencia ilimitado. No es dif%cil observar que, aunque creemos darnos cuenta, miramos de una manera limitada, parcial. "nvestigaremos lo que es verdadero y falso sobre lo que aparece y no es. &ste es el camino de la sabidur%a, que no est' en el tiempo. (l ser umano puede encontrarse en el camino en cualquier )poca, en cualquier lugar, situación, edad, no importa su cultura ni tradición religiosa. (l camino de la sabidur%a es distinto a lo que se suele pensar que es. *e e dado cuenta de que los seres umanos no saben lo que es el camino, y eso es lo que vamos a investigar. No debemos buscar fórmulas o informaciones. (l camino verdadero no consiste en nada de eso+ as% sólo jugamos con información. (l camino de sabidur%a no discurre por a%, no tiene nada que ver con los juegos de descubrir cosas, conocimientos t)cnicos y dem's. A la sabidur%a no se le puede atribuir ninguna religión o ciencia+ no busquemos de manera tan inmadura. #ólo ay un camino la propia conciencia del que investiga. (s en nosotros mismos el -nico lugar donde podemos allarla. $ompartir, intercambiar, animarnos unos a otros, como lo estamos aciendo aora, es algo que debemos acer cada uno de nosotros. (stamos acostumbrados a pensar que el ser creyentes de una religión basta para salvarnos/, pero eso significa falta de lucidez, pues ser creyente significa aceptar algo que me dicen de fuera, algo que est' establecido con un objetivo para conseguir algo. 0as religiones, sectas o sociedades de cualquier clase son grupos de poder que, no es que no tengan que ver nada en absoluto con la sabidur%a, sino que se forman en torno a unas ideas que se aceptan sin sabidur%a. $uando en el ser umano empieza a despuntar la sabidur%a, )ste comienza a liberarse de todas las dependencias en las que est'n basadas las religiones, las ciencias o las filosof%as, es decir, se libera de todo aquello que aparece en lo relativo para conseguir algo en el 'mbito superficial. 1uiero decir que a% no ay una demanda de profundizar,
sino de aceptar consignas e!teriores. 23e qu) vale eso4 Vale superficialmente, como montones de creencias aprendidas. Pero cuando a una persona le llega el sufrimiento y se derrumba, no le vale para nada tener tantas lecciones aprendidas basadas en teor%as o en leyendas y mitos. 5odo ello se puede comparar con los cuentos que se relatan a los ni6os. Pero cuando somos adultos necesitamos la verdad+ no queremos dormirnos, como los ni6os, sino despertar. 0a sabidur%a comienza cuando queremos despertar, y la llamada a ese despertar debe ser interna, nunca la podemos imponer. #ólo se impone lo que viene de fuera pol%tica religión, etc. (l ser umano se abre desde dentro para despertar y ver entonces las cosas de una manera diferente. $uando alguien vive con sabidur%a es como un e!tra6o. #ólo es bien acogido el que se ajusta a las normas de un grupo. Pero el que vive con sabidur%a, )se es un incomprendido del que nadie sabe nada. Pasa desapercibido, ace cosas que nadie ace, incluso se llega a pensar que est' loco. 3)monos cuenta, sin embargo, de que lo importante no es lo que parece, sino 0o7que7(s. 0a persona que se abre a la sabidur%a descubre realmente lo que es la Realidad. (sto nos espera a todos. 5odo lo dem's, ante esto, son trivialidades importantes en el momento temporal en que las vivimos para conseguir algo, pero que se desvanecen, se acaban, porque est'n en el tiempo. #ólo parecen importantes en la temporalidad. (n cada etapa de la vida nos creemos que lo temporal es la realidad y, sin aber observado cómo pasa el tiempo, queremos atraparlo, pero inmediatamente ya se a pasado. Al recordarlo con la memoria, vemos que aquello ya es otra istoria. 2$ómo puede ser tan importante y, al pasar, dejar de serlo4, 2cómo es esto de la temporalidad4 *e entretengo con lo que va a pasar, pero se va a desvanecer de la misma manera que pasó lo anterior. 0as pró!imas generaciones se reir'n de las costumbres actuales, de lo que nos parece tan importante, del mismo modo que nosotros, por nuestro lado, tambi)n lo emos eco con las anteriores. As% estarnos atravesando la ilusión del tiempo. 8ay sabidur%a cuando podernos ver el paso del tiempo serenamente, cuando podernos verlo tal y corno es. Ver las cosas en su relatividad significa que est'n todas relacionadas y que ninguna es por s% misma. (n mi juventud, por ejemplo, dependo de mi belleza, de la moda, de mi salud, de las opiniones de los dem's, y as% todo, absolutamente todo. 9 eso va a pasar. (ste mundo relativo es una interrelación de cosas que no se sostienen por ellas mismas, que dependen unas de otras, que no tienen soporte en s% mismas. (sto lo an descubierto los cient%ficos. 3esaparecieron las teor%as sobre la materia, est'n todas en desuso. As% se ve asta qu) punto no ay soporte sustancial para lo fenom)nico+ no ay la c)lebre sustancia que propon%an los filósofos ni la materia que inventaron los cient%ficos+ todo son relaciones. 0as matem'ticas y la lógica lo definen muy bien (sto es a aquello como aquello es a lo otro/. 21u) verdad ay a%4 8ay verdades relacionadas, que est' bien poder manejar, pero es triste que nos quedemos encerrados en ellas+ si lo acernos, nos convertiremos en unas computadoras biológicas, unos bio7computer, como dicen los ingleses. 0a -nica diferencia que tendremos entonces con las m'quinas es que las nuestras ser'n unas relaciones biológicas, pero pr'cticamente seremos lo mismo que ellas. (n el fondo del ser umano ay un anelo de ser lo que somos. No nos conformarnos con lo que aparece. (l proponernos metas es muy limitado+ el no traspasar la mente lógica
acarrea estados psicológicos desagradables, como depresiones y angustias. (s lo que estamos manejando de manera abitual. Ponemos entonces el instrumento f%sico y mental en manos de especialistas, que a su vez trabajan de manera limitada. 9a es de dominio p-blico que eso no es una buena solución. 2 Por qu)4 Porque son conocimientos parciales. #i tenemos un problema grave, creemos que necesitamos ponernos en manos de especialistas. Pero, si somos conscientes y nos damos cuenta de que ese camino que casi toda la umanidad sigue no es el verdadero, que no nos conduce a lo que anelamos profundamente en el fondo del corazón, 2por qu) no lo cambiamos4 $uando tenemos ese atisbo debemos ponernos manos a la obra y trabajar directamente para entrar en el camino de la sabidur%a, lo cual significa vivir a partir de mi propia comprensión, una vez que e tenido la demanda interior de ver por m% mismo. $omprender no es entender+ seguir a otros tampoco lo es. 8emos de investigar en libertad. (l camino de la sabidur%a est' eco de libertad. #ólo en un instante en el que somos libres puede aparecer una lucidez o una iluminación en nuestro interior, y esa luz viene del 'mbito de la sabidur%a, no de lo conocido y repetido. #iempre que estemos dependiendo de cosas nos va a parecer que el camino de la sabidur%a es un camino lejano y dif%cil, pero en la medida en que vayamos libr'ndonos de esas dependencias nos daremos cuenta de que entramos naturalmente en el camino. 0ibertad y sabidur%a van de la mano. 0a sabidur%a en el vivir empieza y termina con libertad, no como reacción contra lo establecido. (n libertad no se da ni la acción ni la reacción del que sigue algo, sino visión e!acta de 0o7que7(s. #e act-a en adecuación a lo que se a comprendido, no en contra+ no se act-a siguiendo nada, sino a partir de la comprensión. Aparece moment'nea y espont'neamente, no es algo que se acumula. 0os que ven%s aciendo estas investigaciones desde ace tiempo os ab)is dado cuenta de que no consisten en una acumulación de conocimientos. (n e: momento en que entramos en el 'mbito de la sabidur%a todo es nuevo, todo es -nico, y e: pasado y el futuro no tienen ninguna importancia, ya que son imaginación de nuestra mente+ no son 0o7que7(s. EL MOMENTO PRESENTE
Vamos a llegar a un punto que considero muy importante en la pr'ctica de lo que significa vivir con sabidur%a es e: captar e: instante presente. (l instante presente no es nada, porque cuando nos preguntamos dónde est' ya se a ido. (star en el presente implica captar lo inasible, lo que e: pensamiento no puede captar por ser instant'neo. *antenerse as%, en un punto de equilibrio, en un instante que se escapa, nos parece dif%cil, pero vamos a ponerlo m's dif%cil todav%a mantenernos durante todo e: tiempo a%, asta desacer el tiempo. No ay ninguna dificultad. #ólo es dif%cil para e: pensamiento, que vive en la continuidad de: tiempo, pero es absolutamente natural y espont'neo cuando no se est' en e: pensamiento. (s algo que debemos descubrir cada uno de nosotros. $uando no estoy proyectado ni acia e: pasado ni acia e: futuro, 2dónde estoy4 (sto es lo que tenemos que investigar, esto es abrirnos a una dimensión nueva. #eguro que algunos ya lo emos descubierto, )sta es una primera etapa+ luego viene vivir desde a%, que, pase lo que pase, ninguna sacudida nos lleve al pasado o nos proyecte al futuro donde se crean deseos y miedos.
0a vida, en su inteligencia, nos va poniendo todas las situaciones necesarias para que comprendamos y nos liberemos. 0os que vamos caminando por el camino de la sabidur%a estamos vacunados de crearnos protecciones, porque no e!iste ninguna protección en el mundo relativo. (l mundo relativo de las energ%as f%sicas, el cuerpo f%sico o el pensamiento es algo que est' en movimiento constante, en cambio permanente+ incluso se acen y desacen las formas. #i esto es as%, 2qu) seguridad vamos a conseguir4 Nunca en esa vida relativa voy a alcanzar esa seguridad y firmeza que imagino. ;na vez que lo s), ya no me esfuerzo+ sobre todo porque comprendo que es un camino equivocado. Podr%amos decirnos 2(ste camino conduce a alguna parte4 No. Pues entonces no dar) m's pasos en la dirección que iba/. A% empieza la sabidur%a. $uando )sta acompa6a a un ser umano, la vida se transforma de tal manera que podr%a pasarme oras, d%as, a6os ablando de cómo se transforma. (s algo muy diferente de la vida condicionada que conocemos, y, aunque ablar de ello no es vivirlo, puede decirse que no abr' m's dependencias de personas o situaciones, que jam's nos aburriremos ni estaremos tristes. 2Por qu)4 Porque estar) aprendiendo en cada instante, y ese aprender es una e!pansión en la conciencia completamente nueva. No ay nada m's importante que descubrir lo nuevo en una conciencia plena. (n la apertura a la sabidur%a, cada instante aparece absolutamente nuevo, ya que es creación de la conciencia total. (s como si se abriera una ventana de repente y entrara un resplandor que nos abre a la luz. $ada instante es un estallido del resplandor de la luz. Vivir en el presente es algo que el pensamiento no conoce, y pensamos que es algo aburrido y repetitivo. (l pensamiento es -til cuando ocupa el lugar que le corresponde, pero nos emos identificado con )l y as% emos fabricado una c'rcel. 5ambi)n tengo una mano que me es muy -til y me sirve para mucas cosas, pero si me creyera que soy sólo una mano, qu) vida tan limitada llevar%a. #in embargo, eso no quiere decir que deba cortarme la mano. 8ay seres umanos que al leer sobre estos temas dicen (l pensamiento es el culpable/, y se quedan en emociones y sensaciones vitales. (sto es una limitación improcedente, porque pensar que se puede acer una cosa u otra ya es estar pensando, y si por un momento se consiguiera eliminar por completo el pensamiento, ser%a una cat'strofe, ser%a quedarse dormido. No es sabidur%a el ir contra los instrumentos con los que la vida nos a equipado para vivir esta aventura e!istencial de la vida. No debemos menospreciar ning-n instrumento. Por el contrario, debemos cuidarlos, ya que nos van a ser -tiles en nuestra aventura. (l error no est' en los instrumentos sino en quedarnos atrapados en una zona limitada, y es sabidur%a darnos cuenta de eso. 3esde la limitación no podemos acer nada. #ólo el darnos cuenta parar' todas esas e!igencias de deseos y ambiciones, y nos sacar' de la alienación en la que est' el ser umano. 0a salida m'gica es la siguiente 3e lo condicionado se sale comprendiendo que no soy nada de lo conocido, ya sean pensamientos, deseos, emociones, situaciones, etc. (ntonces salgo de a% y empiezo a vivir con sabidur%a. SÓLO DESPERTAR LIBERA
Antes de la sabidur%a ay mucos problemas que requieren mucas soluciones, una para cada problema. Pueden ser mentales, de relación, materiales, etc. Pero a partir de la sabidur%a no buscamos diferentes soluciones para cada problema+ todos los problemas tienen una -nica solución. (so simplifica muco las cosas. #i damos con esa solución
-nica, se an acabado nuestros problemas. No es que la vida se vaya a acer a la medida de nuestros deseos, sino que ya no tendremos tales deseos. *antenernos simplemente despiertos, d'ndonos cuenta de todo, es la -nica forma de comprender y liberarse. $uando estamos en el pensamiento es cuando tenemos mucas pegas, pero el estar alerta, el darnos cuenta abrir' todas las puertas. &se es el -nico camino. 0a verdadera manera de llamar a la puerta no es invocar a un 3ios misericordioso que me premia o castiga seg-n su umor+ eso es infantil, son istorias. $uando estamos pensando, cuando vivimos en el cascarón, nos falta madurar, observar, mirar, darnos cuenta. $uando se ve una verdad que normalmente no vemos en la vida diaria, 2qu) utilizamos para verla4 #ólo la simple inteligencia+ ella nos basta para darnos cuenta. (n ese darse cuenta/ no ay ya que razonar+ en el estar despierto/ ya no necesitamos los recuerdos, lo que an dico o eco otros. 0a verdad tiene una inmensa fuerza por s% misma, cuando la emos visto. (se lugar desde donde emos visto unas verdades es un lugar distinto del que abitualmente solemos estar. $uando vemos algo como una evidencia, all% no ay pensamientos. (s solamente observar, simplemente darnos cuenta de 0o7que7(s, ver. 3ebo mantenerme a%, pase lo que pase. 0o m's f'cil es quedarnos en los mecanismos viejos, por eso ay que estar atentos, no debemos ni lamentarnos ni culpabilizarnos de nada, sólo despertar. (n el momento en que veo que esa persona a la que trato como yo/ est' reaccionando de la misma manera mec'nica de siempre, simplemente debo darme cuenta+ eso es lo que cura verlo. Normalmente funcionamos con los mecanismos programados de siempre, y la respuesta es autom'tica. $uando esto sucede y no lo veo, es que estoy dormido. (n investigaciones como )sta estamos aprendiendo a darnos cuenta, a ver directamente con la inteligencia. $ualquiera que sea la situación en la que nos encontremos dentro de la mecanicidad, podemos darnos cuenta+ esa posibilidad est' dentro de nosotros, y utiliz'ndola aprenderemos a usar todo el potencial que tenemos. ;samos la inteligencia total que somos del mismo modo en que se abre una ventana dando paso a la luz 0a inteligencia ve lo que pasa. #i ay una reacción mec'nica producto del pasado, solamente la veo, y eso es liberador. #in argumentar ni analizar+ ese darse cuenta no es obra del pensamiento. #e trata de ver, no de pensar. (l ver tiene una fuerza m'!ima, ya que es la inteligencia que mueve todo. 5odo est' eco de luz e inteligencia que mueve todos los universos. 0a fuerza de la luz lo disuelve todo. Recordemos nunca interpretar, sólo mirar. Ver es la solución a todos los problemas. 5odos los problemas surgen de la inatención. (l despertarnos nos deja libres de todo, ya que no somos la persona, sino la luz. 9a no viviremos con angustia ni miedos+ desaparecer'n, y sólo estaremos atentos a lo que vaya surgiendo naturalmente, momento a momento. $uando veo que no soy la apariencia ni dependo de las apariencias, entonces s) lo que es vivir con sabidur%a. 0as personas que viven estos estados y los pueden ense6ar, tienen un estado de serenidad y paz profunda, de amor acia todos sin condiciones, son espont'neas, la vida act-a a trav)s de ellas. #i me mantengo libre y despierto, entonces vivo con sabidur%a. No s) lo que ar), pero vivir) en libertad, desde un amor incondicionado, que es lo que soy la $onciencia
SO EL CAMINO
8emos dico que la sabidur%a no es una cualidad que se tiene, sino que el ser umano tiene la posibilidad de abrirse a la sabidur%a, a lo Real, a su verdadera naturaleza, y que esto no se ace mediante conocimientos o información. (stamos abriendo internamente ese camino, que no tiene ninguna meta. (s ampliar la conciencia sin l%mites. No est' eco de etapas, est' eco de nosotros mismos. Nosotros somos el camino, estamos abri)ndonos a nosotros mismos desde lo profundo de nuestro ser, desde lo que intuimos como lo m's sincero. 3esde otro punto de vista se puede decir que el camino se ace con mayor sinceridad. (s un camino sin calificaciones, sin errores. Nuestros e!trav%os no tienen importancia, tampoco los de los dem's+ ambos se quedan en la superficie pensada. (n este camino siempre estamos empezando aqu% y aora. #omos siempre nuevos. Podemos preguntarnos 2Pero no tenemos un pasado por detr's4/, Pero 2qui)n tiene pasado4 (l pensamiento es el que nos lo recuerda, pero no es nada real. 5enemos que darnos cuenta de que estamos naciendo en cada instante. #abidur%a es tomar conciencia de ello y vivir en consecuencia. No es un ideal, es la verdad de lo que la vida es, el verdadero significado de lo que es vivir+ as% de sencillo. (l sentido de nuestra vida es muy simple descubrir lo que son las apariencias, dejarlas caer y quedarnos con lo Real. (so es para vivirlo totalmente consecuentes con ello. (s saber que no e!iste el tiempo y vivir a partir de a%. (s saber que el pasado lo inventa el pensamiento, por lo que el argumento de la vida se a creado en el tiempo. #i veo que eso es verdad, debo vivir en consecuencia. 3escubrir estas verdades conlleva ser coerentes con ellas y vivir de acuerdo con ellas. 5odo esto es para ser vivido. $uando lo vivo, lo soy. No son opiniones ni teor%as filosóficas, religiosas o psicológicas+ no es nada de eso. (s algo constatable en cada instante de nuestro vivir, es un descubrimiento que se ace en m% mismo. $uando investigamos es para descubrir, vivir y ser esa verdad descubierta. Nos parece muy fuerte, porque solemos tomarlo de una manera superficial, pero no es algo para recibirlo con la mente o con el corazón. $uando se descubre una verdad as%, eso debe transformar completamente nuestra vida+ y la vida efectivamente se transforma cuando vivimos esa verdad. *ente y corazón se unifican en la luz. #i me doy cuenta de que el pensamiento crea el pasado debido a que le doy realidad en lo psicológico, me libero al comprenderlo, mientras que si me doy cuenta de que sigo crey)ndome los pensamientos que pasan en la superficie de mi conciencia, si eso me sucede, ya s) que no estoy viviendo con sabidur%a, que estoy atrapado. Para salir de a% de nada me vale la erudición ni leer libros de personas que vivieron o viven en sabidur%a. 5odo ello tiene el valor de que puede propiciar que lo viva yo tambi)n, pero la sabidur%a es el descubrimiento de la verdad en mi propia conciencia. "nvestigar es un empujón para que nuestra vida se transforme verdaderamente. 3escubrimos la verdad para ser totalmente transformados por ella. 3esacemos lo que nos ataba, lo que nos limitaba una y mil veces en formas establecidas. 3esacemos las formas pensadas al mirarlas con una mirada nueva, diferente, desde la verdad. 5enemos la creencia de que estamos enfrent'ndonos a realidades objetivas, y nos dejamos llevar por todo al acer lo que los dem's acen o dicen. 0o cierto es que somos
nosotros quienes creamos esas realidades con las cuales nos enfrentamos falta de amor, armon%a, ignorancia, tristeza y todo lo dem's que ya conocemos. As% surgen nuestros problemas, y despu)s buscamos in-tilmente una solución para cada uno de ellos. 5odo eso es imaginado+ nada se resuelve fuera, donde buscamos la solución. 3e lo que se trata es de no crear ning-n problema m's. #i mi mente crea m's problemas y trato de buscar soluciones, no vivo, porque lo ago enajenado. 3ebo ir directamente a la causa desacer mi identificación con la memoria psicológica. 0a memoria y el pensamiento son -tiles, aunque son instrumentos limitados. (l problema es que emos creado una realidad psicológica por el eco de identificarnos con ellos, y eso nos suscita emociones. 0o psicológico no es una realidad objetiva sino que es lo que me pasa a m%/. Pero podemos acer un silencio en ese 'mbito+ eso es sabidur%a. LA SABIDURÍA SILENCIA LO PSICOLÓ!ICO
#e a ablado del silencio. 0os sabios, los m%sticos ac%an silencio. Nosotros mucas veces tratamos de ir aciendo silencio en la mente, pero creemos que acer el silencio es relajarnos, y no+ el silencio es algo m's que eso. 9o lo llamo silencio creador/. 8acer silencio no tiene por meta eliminar tensiones y seguir viviendo la misma vida de siempre. (so lo acen mucos seres umanos buscan el silencio como una solución desesperada a los problemas que causa la identificación con lo irreal. (l verdadero silencio, sin embargo, es silencio del 'mbito de lo psicológico, y aparece cuando se a dado paso al discernimiento. $onsiste en ver las apariencias como apariencias, en contraposición a la visión normal, en que acostumbramos ver las apariencias como realidades. $on discernimiento vemos las apariencias como lo que aparece+ la mente no tiene nada m's que acer que ver las apariencias. 0o Real est' siempre a%, permanece, es lo que queda. $uando no me enga6o con las apariencias, mi verdadera naturaleza, es decir, lo Real es lo que est' a%, no tengo que acer nada m's. Vivir en sabidur%a no es mejorar la vida+ eso no tiene sentido. (l verdadero sentido de avanzar por el camino es librarnos de lo falso. ;na vez que nos emos dado cuenta de que lo que aparece no es 0o7que7(s, 2qui)n perder%a el tiempo en arreglar lo aparente4 #i vemos lo que es irreal, lo inteligente es ir a lo Real. 0a cuestión es despertar, no adquirir cualidades. $uando vamos desaciendo lo irreal, ese lugar que se vac%a lo abita la sabidur%a, la claridad, la lucidez, la serenidad, el amor incondicionado y total que no depende de nada, la belleza sin forma ni objeto, simplemente en s% misma, la paz profunda, la armon%a. $uando se despierta se sustituye el mundo psicológico por el mundo de la sabidur%a. (sto se va aciendo suavemente al ir descubriendo que lo que viv%a eran apariencias, no realidades. (l trasvase se va aciendo solo. A esto se le a llamado la eliminación del =yo=/, y es absolutamente liberador, ya que tras el yo/ est' toda esa serie de cosas tan repetitivas que carecen de sentido. $uando desaparece el yo/ se lleva tras de s% toda la parafernalia psicológica. (sa barrida que ace la sabidur%a es definitiva, y va tan r'pida como sean nuestra contemplación de la verdad y nuestro desenga6o del error. Aquello que se a eliminado por sabidur%a no vuelve m's, se acabó. ;na vez que e visto algo y lo comprendo, nunca m's me atormentar' en la vida. Por eso debemos comprender, por eso debemos tener la mente despierta para esa comprensión nueva.
(s importante que vea cómo est' mi cuerpo7mente y mis 'bitos de vida. No cambiarlo, sino verlo. 3ebo darme cuenta de que todo lo que est' sucediendo en mi vida es consecuencia de mi manera de verla. $uando mi visión cambia, adquiero sabidur%a. (ntonces mi vida se crea de otra manera, pero ello ocurre a partir de lo que e visto y comprendido, nunca con voluntad, que no conduce a nada. *i vida ser' la e!presión de mi comprensión. 5al y como est) situada mi conciencia, mi vida ser' m's o menos armoniosa, ordenada, clara. (so siempre ser' as%, es inevitable. 0a importancia est' en ver lo que est' sucediendo en mi vida, mirar las condiciones de mi mente. 2(stoy correctamente situado, abierto a la luz, a la sabidur%a, para que aquello se vaya e!presando4 o, por el contrario, 2estoy atado a normas, principios o a acer las cosas como me an dico otros4 9a sabemos a lo que estamos atados. #i no lo sabemos, no tenemos m's que mirar y lo veremos. 8emos visto que acer silencio es acer silencio de lo psicológico. #i nos quedamos en una actitud de serena quietud, de lucidez, todo lo que venga de la actitud condicionada o psicológica deber' ser deso%do. Por ejemplo, si viene a la mente un recuerdo del pasado, se retira suavemente. 2$ómo lo acemos4 No ay m's que una manera, y es no tomarlo en cuenta, no darle realidad. 5odo lo dem's que intente ser' un fracaso. #ólo debo ver que no me interesa, y quedarme entonces en silencio serenamente. (s una actitud interna de no dar realidad a nada condicionado. 5odo esto tambi)n vale para los planes de futuro. lo que vale es el instante presente vivido con lucidez. la liberación de lo falso pasa por mantener esa lucidez. *i trabajo consistir', tanto en contemplación silenciosa como en la vida, en no dejarme llevar por ning-n pensamiento. #ólo los pensamientos -tiles de tipo t)cnico deben ser escucados. (l 'mbito de lo psicológico se a creado a espaldas de la sabidur%a por no comprender. As% se a creado mi istorial, que consta de todo lo que no e comprendido. Al acer silencio, ese istorial puede desaparecer. $uando dejo mi mente en silencio, porque e comprendido que estoy viviendo un mundo de apariencias y porque quiero comprender la verdad, esa demanda silenciosa tiene sentido. A% ay seriedad, serenidad y propósito. $uando esto sucede, van apareciendo en la conciencia nuevos 'mbitos desde los que vivir, surge una vida nueva, vivo desde la sabidur%a. #e pueden distinguir dos maneras de acercarnos a este camino de sabidur%a. Aunque son lo mismo, desde fuera se pueden ver como diferentes. ;na manera es acer momentos de silencio para poner la mente contemplativa en soledad, lo cual significa no estar pendientes de las situaciones e!ternas ocasionalmente, con el fin de tornar la mente contemplativa. (sto lo aremos tanto m's cuanto mayor sea nuestra vocación de descubrir la verdad. >tra manera es acer esto mismo en cualquier momento+ a ser posible, siempre. *e coloco entonces permanentemente en esa actitud, en ese silencio de lo psicológico donde no ay nadie que quiera, piense, necesite. (s un vac%o de mi yo psicológico/, y la mente se queda contemplativa. *i actitud contemplativa se ir' ampliando con naturalidad. 3esde a% todo lo que aga ser' la respuesta en la acción, pero yo no ago nada realmente+ veo que viene el reto, veo que es para m% y respondo, sin intermedio de emociones psicológicas. No son diferentes los momentos de meditar y de actuar en interrelación. (s una unidad. 0o importante es ver cómo est' colocada mi mente, a qu) doy o no realidad. $uando lo ago como un e!perimento, en soledad, es sencillo. 0legar' un momento en que esta actitud silenciosa se convertir' en mi naturaleza, y entonces permanecer' como