UD Somos Un Grupo 1 Ciclo

U.D.: CONOCERNOS ES NUESTRA ALTERNATIVA. ALTERNATIVA. SOMOS UN GRUPO CICLO 1º

MARTÍN PINOS QUÍLEZ

PROYECTO DE INNOVACIÓN EDUCATIVA: UN MUNDO DE ALTERNATIVAS

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U.D.: CONOCERNOS ES NUESTRA ALTERNATIVA. SOMOS UN GRUPO CICLO 1º

SUBUNIDAD DIDÁCTICA: SOMOS UN GRUPO

SESIONES 1- Presentación.

CONTENIDOS

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2- Juegos de contacto y confianza. 3- Jugamos para conocernos.

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4- El Príncipe Aozolo (2º).

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5- Evaluación inicial de E.F.

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Presentación del profesor y de la asignatura. Horarios de clase. Programa de actividades. Juegos de presentación. Juegos de nombres, de confianza, de contacto corporal y de distensión. Juegos de conocimiento, de confianza y contacto corporal. Juegos cooperativos. Cuento motriz. Habilidades motrices básicas y expresivas. Pruebas de evaluación inicial.


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UNIDAD DIDÁCTICA: CONOCERNOS ES NUESTRA CICLO 1º ALTERNATIVA. SOMOS UN GRUPO SESIÓN: Presentación Nº: 1/4 OBJETIVOS: Conocer los nombres de todos y favorecer un clima de trabajo y convivencia positivo. ESPACIO: aula, pabellón SESIONES: 1 MATERIAL: Una pelota blanda. Música relajante. ACTIVIDADES   

Presentación del profesor y de la asignatura. Horarios de clase. Normas básicas: equipamiento deportivo, idas y venidas en orden, regla del silbato (o atender cuando se explica). La idea base en la que insistiremos a lo largo de todo el curso es: NOS CUIDAMOS. Cuidamos las cosas, cuidamos a los compañeros, nos cuidamos nosotros, cuidamos al profesor, que también nos cuida a nosotros (es una idea, una palabra sencilla, directa y bonita que encaja muy bien en este ciclo y que aplica Julián, un colega de Huesca).

JUEGO: NOMBRE Y PASO Corro. A quien se le pasa la pelota debe presentarse diciendo su nombre. Rápidamente pasa la pelota a otra persona para que continúe el juego. Un par de rondas y el juego cambia. Ahora en vez de nuestro nombre hay que decir el de quien nos pasó. Si no lo sabemos preguntamos al grupo. 

JUEGO: CAMBIO DE TRONO En corro, sentados. Inicia el juego el profesor sentado en el trono (pelota gigante) y diciendo a alguien: “Soy el rey Martín (o como se llame), y cambio mi trono con… y quiero que venga…, saltando como una rana”, por ejemplo. El nuevo rey o reina continúa el juego cambiando su trono y mandando hacer otra cosa. Terminamos cuando todos han cambiado de sitio. 

JUEGO: TE REGALO UN MASAJE A partir del lugar que yo ocupo, aprovechando el cambio de sitio de los niños en el juego anterior, formo parejas. Vamos a regalar un masaje al compañero. Al son suave de la música relajante que oyen, masajean el cuello, trapecios y espalda. Quien recibe el masaje va señalando que movimientos le resultan más agradables. 


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UNIDAD DIDÁCTICA: CONOCERNOS ES NUESTRA CICLO 1º ALTERNATIVA. SOMOS UN GRUPO SESIÓN: Juegos de confianza. Nº: 2/4 OBJETIVOS: Conocer los nombres de todos y favorecer un clima de trabajo y convivencia distendido. Fomentar la confianza. ESPACIO: gimnasio SESIONES: 1 MATERIAL: un par de pelotas, colchonetas. ACTIVIDADES JUEGO: STOP CON ABRAZO Se la ligan dos personas identificadas por una pelota o pañuelo. Cuando alguien se pone en “Stop”, lo dice en alto y junta las manos formando con sus brazos un gran aro. Para ser salvado cualquier jugador puede meterse dentro de los brazos y darle un enorme abrazo quedando entonces ambos libres. Mientras estén abrazados no pueden ser pillados. JUEGO: ABRÁZATE Y RUEDA  Desplazamiento libre en carrera por todo el espacio. A la señal de “abrázate y rueda” se juntan con la persona más cercana, se abrazan y ruedan juntos, bien tumbados o bien de pie. Cada vez con una persona distinta. 

JUEGO: BRAZO DE GITANO Una larga cadena iniciada por el profesor que se agarra a la espaldera o similar. Empezando por el último jugador, la cadena va pasando por debajo del brazo extendido del profesor de manera que cada vuelta se enrollan un poco más hasta que toda la clase queda fundida en un gran abrazo en torno a él. Antes de empezar a jugar explicamos qué es el brazo de gitano, un pastel, y cómo se hace. Durante el jugo vamos pidiendo un poco más de nata o de chocolate para animar a los niños a enrollarse. Si el bizcocho no se rompe, o sea, nadie se suelta de las manos y nadie se cae, habremos superado el juego. Dos rondas, empezando la segunda justo por el lado opuesto de la cadena de niños. 

JUEGO: LA HAMBURGUESA Grupos de 6 niños. A cada uno le asignamos un papel: panecillo de abajo, panecillo de arriba, hamburguesa, tomate, pepino y queso. El profesor va diciendo cada una de las partes y los nombrados se tumban boca abajo sobre la bandeja (colchoneta) del equipo, uno sobre otro, para formar la hamburguesa completa. Si lo consiguen hacer sin que se desmorone, el profesor pasa y se la “come”, para lo cual empuja la hamburguesa, con cariño, derribándola sobre su colchoneta. Varias partidas cambiando el orden de las partes de la hamburguesa. 


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UNIDAD DIDÁCTICA: CONOCERNOS ES NUESTRA CICLO 1º ALTERNATIVA. SOMOS UN GRUPO SESIÓN: Jugamos para conocernos Nº: 3/4 OBJETIVOS: Propiciar el contacto corporal jugando con alegría y desinhibición. Favorecer un clima de trabajo y convivencia distendido. Fomentar la confianza. ESPACIO: gimnasio SESIONES: 1 MATERIAL: música rítmica ACTIVIDADES P. INICIAL:  JUEGO: STOP BESO Como Stop abrazo (ver sesión anterior) pero salvamos con un beso en la mejilla. TEMA: JUEGO: TODO EL MUNDO EN ESTA FIESTA...  El profesor dirige el juego cantando: “ Todo el mundo en

esta fiesta se tiene que divertir. Todo aquello que yo mande lo tenéis que repetir. A... saltar; a correr; a mover el culete; a abrazarse; a abrazar a los niños que vayan de rojo, o que tengan gafas, eso sí, con cariño; a reírse; a arrastrarse como lagartijas; a dar un besito a los compañeros que...” etc. Buscar que los niños más rechazados o tímidos reciban más abrazos y besos. Después podemos dejar que sea un niño quien dirija el juego. JUEGO: LOS ABRAZOS MUSICALES Baile libre. Al parar la música se abrazan en parejas. Cuando vuelve a sonar la música se reanuda el baile libre por separado. La siguiente vez que pare se juntarán 3, luego 4... Si llegan al abrazo final de toda la clase sin que nadie se caiga, “superan” el juego. 

JUEGO: EL BAILE DE LOS SALUDOS Corro grande y bien separados. Una pareja baila en el centro cogidos de las manos. Al parar la música se separan e invitan a salir a otras dos personas (del sexo opuesto), sus nuevas parejas. Lo harán con la fórmula: “Fulanito, ¿quieres bailar?”. El juego continúa de esta forma hasta que toda la clase baila en parejas de las manos. 

VUELTA A LA CALMA: JUEGO: EL ABRAZO MOGOLLÓN  Me sitúo en el centro del espacio de juego con los niños alrededor. Cuando miro a alguien fijamente debe ir hacia mí y abrazarme. Se van sumando los niños al abrazo según los voy mirando hasta alcanzar el “abrazo mogollón”. Superaremos el juego si conseguimos hacerlo sin que ningún niño se caiga o se haga daño. Hay que abrazar con cariño y con afecto, sin brusquedades. PROYECTO DE INNOVACIÓN EDUCATIVA: UN MUNDO DE ALTERNATIVAS

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UNIDAD DIDÁCTICA: CONOCERNOS ES NUESTRA CICLO 1º 2º de Primaria ALTERNATIVA. SOMOS UN GRUPO SESIÓN: El Príncipe Aozolo. Cuento motriz. Nº: 4/4 OBJETIVOS: Trabajar de forma globalizada las habilidades motrices básicas de desplazamiento y las habilidades expresivas, a partir de un cuento motriz. Fomentar el gusto por la lectura. ESPACIO: gimnasio. SESIONES: 1 MATERIAL: Ilustraciones del cuento. Picas, conos, colchoneta quitamiedos, bancos suecos. Música de vals. Linterna. ACTIVIDADES P. INICIAL:  Presentación de la sesión:

¿Os gustan los cuentos?... Hoy os voy a contar un cuento…

EL PRÍNCIPE AOZOLO. 

Empezamos con la narración oral del cuento. Los niños sentados en el suelo frente al profesor. Les mostramos la primera ilustración y… “Hace muchos años, en un país

muy lejano, vivía un príncipe llamado Aozolo. El príncipe, como os podéis imaginar, creció feliz y tenía todo cuanto podía desear. El reino era rico, los campos producían ricas lechugas, tomates y sandías; los reinos vecinos eran amigables y convivían en paz. Sin embargo, una mañana, el alegre corazón del príncipe se llenó de tristeza. ¿Sabéis porque estaba tan triste? No os lo vais a creer. Había perdido su corona. Hoy día si un príncipe no lleva corona no pasa nada, pero en aquellos tiempos, un príncipe sin corona era como un árbitro sin pito, corría el riesgo de que nadie le hiciera caso. Sí, la corona que había heredado de su querido padre desapareció como por arte de magia. Preguntó por ella a todo el mundo; a los cortesanos que justo en ese momento bailaban el vals en el gran salón. (Los niños se emparejan y bailan como los cortesanos el vals que pone el profesor; pasamos entre ellos preguntándoles si han visto la corona). También preguntó a los jardineros que trabajaban en los floridos jardines de palacio (imitan el trabajo de los jardineros y el profesor les va preguntando también). Preguntó después a soldados que hacían la guardia o se entrenaban en el patio de armas (hacen el mimo correspondiente). Incluso preguntó al bufón, que siempre decía entre risotadas que él lo sabía todo (a hacer el payaso toca. Pero hay demasiados bufones. Quien lo haga mejor será nombrado Bufón Real). P. PRINCIPAL:

Nadie parecía saber nada de ella. Al día siguiente sumido en la melancolía, el príncipe subió a la más alta de las torres de palacio. Allí solía acudir cuando quería hablar con sus amigos los pájaros. Sí, porque aunque Aozolo no era el más guapo de todos los príncipes, a decir verdad era más bien algo feote (el profesor pone caras raras) poseía PROYECTO DE INNOVACIÓN EDUCATIVA: UN MUNDO DE ALTERNATIVAS

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un don: de bebé, antes incluso de aprender a decir “ma ma”, ya entendía el lenguaje de los animales. Al verle aparecer, varios petirrojos y un verderón, enseguida se le acercaron. (A ver si vosotros sois capaces de moveros y cantar como si fuerais pajarillos).

- ¡Hola pequeños amigos! – les dijo – ¿Sabéis dónde está mi corona? - No, nada sabemos – respondieron los pajarillos – apenas salimos de tus jardines. Quizás el águila que vive en las más altas cumbres, desde donde se divisa todo el reino, la haya visto. Sin pensárselo dos veces se puso en camino. El príncipe anduvo y anduvo hasta la gran montaña (los niños andan, ahora más deprisa que si no, no llegan, a la pata coja para no aburrirnos…); trepó, escaló, se escurrió tres veces (trepan e imitan al príncipe por las espalderas no subiendo más arriba del 5º barrote) y por fin se halló frente a la imponente ave. (Veamos quien sabe moverse como la gran águila). - ¡Saludos! Bella señora de las cumbres. He perdido mi corona. Tú que desde aquí todo lo divisas… ¿no sabrás algo de ella? - Nada puedo contarte buen príncipe. Tengo una vista aguda pero no puedo verlo todo. A menudo, los árboles me impiden ver el suelo. Pero, si tanto interés tienes, busca al gran tigre. Nada sucede en el bosque sin que él lo sepa. Agradeciendo la sugerencia, Aozolo se dirigió a los territorios de caza del señor de los Bosques. (Atravesar el bosque no era fácil, así que al príncipe le tocó gatear, arrastrarse bajo los troncos, trepar por ellos, correr entre los árboles, saltar de roca a roca en el río… Montamos un pequeño circuito para que los niños imiten el recorrido).

No tardó en encontrar al tigre, un viejo amigo suyo, aunque lo cierto es que el felino fue el que le encontró a él. (Atravesamos ahora por el bosque, por el circuito, pero imitando a un enorme tigre).

- Mi joven príncipe… Sé bienvenido a mi selva. ¡Cuánto tiempo sin verte! ¿A que debo esta grata visita? - Saludos amigo Tigre. Una búsqueda me trae aquí. No sé cómo pero he perdido mi corona. Ni los pajarillos de mis jardines, ni el águila en las cumbres la han visto. ¿No sabrás tú algo de ella? - Siento no poder ayudarte. Si estuviera en mis bosques, yo lo sabría. Sin embargo, hay todavía un lugar en donde ni mis ojos ni los de las aves pueden llegar. Busca a los delfines en las aguas que bañan el reino. Tal vez ellos puedan echarte una aleta. Sin reparar en el cansancio, el príncipe emprendió la marcha hacia la costa, escaló, destrepó, se escurrió tres veces y anduvo y anduvo hasta que los ojos se le llenaron de azul. Estaba frente al mar. - ¡Amigos, acudid a mi llamada! – gritó desde el acantilado en el lenguaje de los delfines. No tardaron en aparecer tres delfines saltarines. (lo habéis adivinado, nos toca hacer el delfín). - ¿Quién quiere hablar con nosotros? – preguntaron intrigados.

- Soy el Príncipe Aozolo. No encuentro mi corona por más que la busco. Nadie parece haberla visto en mi reino. ¿Sabéis algo de ella? PROYECTO DE INNOVACIÓN EDUCATIVA: UN MUNDO DE ALTERNATIVAS

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- No – dijo el más pequeño – pero preguntaremos a nuestro anciano maestro. Es el más sabio de todos los delfines. ¡Espera aquí! Acto seguido los tres delfines, con una linda cabriola, desparecieron bajo las aguas. (sobre la colchoneta quitamiedos, los niños ejecutan lindas cabriolas o volteretas hacia delante, como los delfines). Al cabo de un rato regresaron:

- El maestro ha dicho que la bruja Cuchufleta encontró una corona. La hallarás en su cueva, más allá de las montañas, en los Pantanos de La Soledad. Muy agradecido, el príncipe regresó a su castillo. Al día siguiente, tras descansar, partió hacia los pantanos. Con algo de miedo penetró en la cueva de la bruja. (Apagamos la luz de la sala y bajamos las persianas para crear un ambiente más sombrío). Al final de una oscura galería, en una gran sala iluminada por antorchas temblorosas, estaba sentada la bruja con cara de aburrimiento. Alrededor de ella, decenas de estanterías repletas de polvorientos libros, cubrían las paredes. (Iluminando mi cara desde abajo con una linterna, pongo voz de bruja)

- ¡Eh! ¿Quién anda ahí? Hombre o bicho, niño o rana, que dé la cara o le convierto en…, en…, ¡en lo que me de la gana! - Refunfuñó Cuchufleta sobresaltada-. - Soy el príncipe Aozolo. No ha sido mi intención asustarle anciana. Perdí hace unos días mi corona y el sabio delfín me ha dicho que usted encontró una. - Sí, es cierto. ¡Pero es mía y sólo mía! Yo la encontré y “lo que se encuentra no se quita, santa Rita, Rita, Rita”. Además… ¿cómo sé yo que realmente es la tuya? - Fácil. Pruébemela. Si ajusta perfectamente a mi cabeza sabrá que no le engaño. – le contestó el príncipe- A regañadientes, la bruja sacó la corona de un viejo cofre y la depositó con cuidado sobre la cabeza del joven. Ajustaba a la perfección. - Bueno… puede que sea tuya, pero yo la encontré y no estoy dispuesta a quedarme sin ella por las buenas. ¡Para una vez que recibo visita y resulta que es para llevarse algo…! Se lamentó la anciana. - ¿De qué se extraña Cuchufleta? A nadie le gustan los hechizos y maldades de una bruja – intervino el príncipe -. - ¿Qué hechizos y qué maldades? – protestó ella – Conozco mil conjuros malignos y nunca los he empleado contra nadie. Y eso que cada vez que me acerco al pueblo, todos se esconden y me cierran las puertas sin preguntarme siquiera qué es lo que quiero. Me temen, sí, pero por lo que creen que soy, no por lo que hago. Conozco también – prosiguió Cuchufleta – mil hechizos maravillosos y nunca me han dado una oportunidad para regalarlos. Sé hacer crecer trigo en el desierto, puedo hacer que una vaca dé el doble de leche y, además, merengada, sé cómo curar el dolor de muelas, conozco un conjuro que convierte en flores las espadas… y, sin embargo, no encuentro a un amigo que quiera hablar conmigo. - Yo también te juzgué sin conocerte Cuchufleta – dijo Aozolo – Devuélveme mi corona y yo… - La anciana interrumpió al príncipe- ¡Ya,ya! Me propones un trato. Sea. Llévatela y a cambio has de prometer que de vez en cuando harás una visita a esta solitaria vieja. PROYECTO DE INNOVACIÓN EDUCATIVA: UN MUNDO DE ALTERNATIVAS

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- ¡No Cuchufleta! Se me ocurre algo mejor.- Fue la respuesta de Aozolo - Tu corazón es bondadoso aunque la soledad te haya hecho un poco cascarrabias. ¡Vente conmigo a mi castillo! Eres sabia y buena. Sé mi consejera y mi amiga. (Persianas arriba de nuevo o encendemos la luz) El príncipe presentó a la anciana en la corte de palacio como su tía abuela, doña Cuchufleta. Y así fue como Aozolo recuperó su corona y ganó una amiga que, por cierto, se sentía feliz haciendo que las vacas del reino dieran el doble de leche, y además… merengada. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado”. VUELTA A LA CALMA: ¿Os ha gustado el cuento?, ¿Por qué pensáis que Aozolo creía que Cuchufleta era mala? A veces pensamos mal de los demás sólo por su aspecto, por sus ropas, o por lo que otros dicen… ¿Creéis que eso es justo? Aozolo se da cuenta de que la bruja es buena cuando habla con ella y la conoce un poco mejor ¿Qué podríamos hacer nosotros para evitar pensar mal de la gente que no conocemos?


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