Tomo Demonologia

CONTENIDO LA BATALLA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 ECHANDO FUERA DEMONIOS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11 R EINO EINO FÍSICO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 29 R EINO EINO R ELIGIOSO ELIGIOSO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 59 ESPÍRITUS SEDUCTORES . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 113

LA BATALLA

Este mensaje del profeta William Marrion Branham ha sido traducido y publicado por la Imprenta “PRODUCCIONES REY DE REYES,” en Puerto Rico. Nosotros (PUBLICACIONES PALABRA HABLADA) sencillamente lo hemos reproducido para ponerlo al alcance de un mayor número de personas; por lo tanto, el Volumen y el Número del folleto folleto es el mismo mismo en que lo ha publicado “PRODUCCIONES REY DE REYES.”

ESPÍRITUS SEDUCTORES

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directo a Cristo ahora, Su Salvador, en una manera silenciosa. Yo quiero que le den las gracias y alabanza, digan: “Señor, yo te doy las gracias por santificar mi alma. Te doy las gracias por todo lo que haz hecho por mí. Deja que Tú Espíritu sea sobre mí a través del día. Señor guíame, dirígeme, bendíceme.” Dios concede esa bendición, bendición, para Ti es mi oración ahora mientras inclinamos nuestros rostros, hermano Neville, despídanos en una Palabra de oración.

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¡Ahora, todos, vengan! Le alabaré, le alabaré alaben al cordero por la muerte de los pecadores; Démosle gloria todos los pueblos, Porque Su Sangre ha lavado cada mancha. (Amén. Maravilloso. ¡Oh!) Ciudad se Perla blanca, Tengo un mansión, una arpa, una corona; Ahora yo estoy vigilando, vigilando y esperando, Por la blanca ciudad que Juan vio descender. (Amén. Maravilloso. ¡Oh!) Ahora, pongámonos de pie, todos. Yo confío que se sientan bien. Acuérdense de los servicios esta noche. Ahora queremos cantar nuestra vieja canción: “Al Nombre de Jesús postrados, cayendo postrado a Sus pies, Rey de reyes en el Cielo le coronan, cuando nuestro viaje sea completado.” Bien todos ahora, juntos ahora. Al Nombre de Jesús postrados, cayendo postrado a Sus pies, Rey de reyes en el Cielo Le coronarán, Cuando nuestro viaje sea completado. Precioso Nombre (Precioso nombre), ¡Oh, cuán dulce! Esperanza de tierra y gozo del Cielo; Precioso Nombre (Precioso Nombre) ¡Oh, cuán dulce! (¡Oh, cuán dulce!) Esperanza de tierra y gozo del Cielo; Qué maravillosa mañana, qué maravilloso tiempo. Vamos a inclinar nuestros rostros ahora por un momento. Todos miren

LA BATALLA 31 de diciembre del 1962 Tabernáculo Branham, Jeffersonville, Indiana, U.S.A.

Efesios, el capítulo 6, verso 12, y por unos momentos ahora, para animarles: “Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espiritual es de maldad en las regiones celestes.”

“Huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.” Y yo desearía extraer de eso un contenido por diez o quince minutos, o texto, mejor dicho, desearía llamarle:La Batalla. La batalla es una prueba de fuerza, y nosotros, donde nosotros tenemos el . . . prueba de fuerza. Solíamos tener. . . El indio solía tener un fuego, y ellos ponían cierta cantidad de hombres al final de la soga, y cierta cantidad en este punto, y el — el “tug-o-war” (contienda de halar la cuerda o soga en donde los contrincantes tiraban de los extremos de la cuerda en direcciones opuestas — TRAD.) La prueba de fuerza halaría al partido que pierde a través del fuego. Y ahora sabemos que hay muchas cosas y podríamos basar esto por unos cuantos minutos, de — de batalla, pero quiero hablar por unos cuantos minutos rápidamente de la batalla más grande que hay, eso es, entre la Iglesia y satanás. Esa gran fuerza de satanás. Y queremos hablar de la gran fuerza de Dios en Su Iglesia. Ahora, esta gran batalla ha estado continuando por muchos años. Empezó en el Cielo, y satanás fue echado de puntapiés a la tierra, y entonces vino a ser el enemigo del pueblo de Dios. Y entonces él ha usado toda su fuerza y su estrategia para tratar de halar al pueblo de Dios a través de los fuegos, o en sus fuegos. Y sabemos quien es El que tiene la mayor fuerza, es Dios. Y Dios, cuando El le dio a Su pueblo lo mejor para que pudiera

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combatir a satanás, fue Su Palabra. Ahora, porque la Palabra es Dios, ¿y quién es más fuerte que Dios? Pues bien, la Palabra es Dios, y la Palabra llega a ser nuestra fuerza. Dios en la Iglesia, llega a ser Su fuerza para halar a satanás a sus mismos fuegos que él ha hecho. Y la contienda sigue. Ahora, Jesús dijo en Marcos 16: “En Mi Nombre echarán fuera demonios.” Ahora, yo sé que eso es un dicho que las personas. . . hay un antiguo dicho que. . . y no es tan antiguo tampoco. La gente no cree en demonios en este día. Pero lo que hay que hacer, en mi opinión, es conocer su enemigo y prepararse para la batalla que usted va a tener cuando se encuentre con él, porque usted se va a encontrar con él. Y conocerle, conocer su, conocer cuál es su fuerza, y entonces prepararse para esta batalla cuando usted se encuentre con él. Porque hay una cosa segura. Ahora, preparándose para la batalla igual como un boxeador. Su— su enemigo que se va a encontrar con él allá en la batalla, para pelear, un buen boxeador casi siempre conoce y estudia a su contrincante. El estudia su forma, él conoce por dónde él pelea, si él se inclina hacia delante, si se resiste, pelea al derecho o izquierdo. El estudia todo esto. Y entonces si él es un buen boxeador, inteligente, él se consigue un ayudante que pelee como su contrincante pelea, porque él conocerá todas sus formas cuando llegue a ese lugar. Y yo pienso que esa es una cosa muy buena para los cristianos hacer. Eso es cierto. Ahora, si usted desea empezar a prepararse, empiece con Juan 3:16, la Regla de Oro. Empiece con eso, eso te pondrá en el piso para empezar. Y entonces prepárese para el— para el golpe que pone fuera de combate, porque los va a tener que usar. Todos saben eso. Usted tiene que prepararse para darle a su enemigo. Y Dios siempre usa Su Palabra. Debemos acordarnos que Dios siempre usa Su Palabra para vencer a su enemigo. Si Dios pudiera pensar o pudiera darle a su pueblo algo mejor para vencer al enemigo, El lo hubiera hecho. Así que como siempre he dicho: “Cuando Dios hace una decisión, esa es la mejor que hay. El nunca tiene que alterar Sus decisiones.” Así que la primera decisión que


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(¡Oh, vaya que maravilloso!) Qué maravilloso tiempo para usted, Qué maravilloso tiempo para mí; Si todos nos preparamos para encontrarnos con Jesús nuestro Rey, Qué maravillosos tiempo será ese. Oh, maravilloso tiempo para usted, Un maravilloso tiempo para mí; Si todos nos preparamos para encontrarnos con Jesús nuestro Rey, Que maravilloso tiempo será ese. ¿Les gusta? ¡Todos, vengan! Oh, maravilloso tiempo para usted, Un maravilloso tiempo para mí; Si todos nos preparamos para encontrarnos con Jesús nuestro Rey, Que maravilloso tiempo será ese. Yo siento como que un viejo-antiguo avivamiento está en la iglesia. ¿Verdad que sí? Sólo una antigua limpieza, purgado, bueno, viejo maravilloso tiempo. ¿No se siente usted bien? ¡Oh! “Le alabaré, le alabaré, alaban al Cordero por la muerte de los pecadores.” Vamos a cantar eso. Todos. ¿Lo sabe usted? Yo lo sé. ¿Cuántos? Usted ayúdeme a dirigirlo, hermano Neville, y todos ustedes juntos ahora, sólo levanten sus manos, canten conmigo ahora ese himno. Alaben al Cordero por la muerte de los pecadores; Démosle gloria todos los pueblos, Porque Su Sangre ha lavado cada mancha.

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maravilloso! Mis hermanos dieron su sangre por sus vidas. Habían más que harían la misma cosa. No se apure, viene bajando a una declaración forzada muy pronto, usted o entrará o saldrá. Todos se están asociando en el concilio de Iglesias y todos entrando, todos se están conglomerando juntos. Y van haber más que darán Su sangre por tu vida, Por este Evangelio del Espíritu Santo y su creciente limpiadora. Está chorreando con sangre, sí, está chorreando, (¡Oh, aleluya!) Este Evangelio del Espíritu Santo está chorreando con sangre. Vaya, yo siento como que el rapto está sobre la Iglesia. Oh, eso me hace sentir bien. Todos los pecados están bajo la Sangre. Vea, el Espíritu Santo ama la Palabra. La Palabra es donde el Espíritu Santo se alimenta, vea usted. ¡Oh, vaya! ESO bajó y se metió entre las personas, limpia sus pecados, le quita sus enfermedades, quita la melancolía, emborráchalos. Tan borracho como yo pueda estar, borracho en el Espíritu, amor saliendo de mi corazón. No importa lo que cualquiera haya hecho, está perdonado. El enemigo más amargo, es terminado, cualquiera que haya hablado o dicho cualquier cosa. Si yo . . . “Oh, yo deseo que se haya perdido.” Todos limpios ahora. Y está chorreando con sangre, está chorreando con sangre. El Evangelio del Espíritu Santo está chorreando con sangre, La sangre de los discípulos que murieron por la Verdad. Este Evangelio del Espíritu Santo está chorreando con sangre.

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Dios le dio a Su pueblo en el Jardín del Edén para combatir al enemigo, fue Su Palabra. Ellos estaban fortificados con Su Palabra. Y ahora el enemigo va a estudiar el. . . nuestra estrategia con la Palabra. Y ahora satanás estudió todo eso tan perfectamente hasta que él vino a Eva, él tenía la— la mejor estrategia que él podía usar sobre ella, y eso fue para razonar con la Palabra. Solamente créalo. NO TRATE DE EXPLICARLO. NO TRATE DE IMAGINARSELO. Ahora, usted no se puede figurar a Dios, así que Dios es la Palabra, y está hecha para creerla. Y esa es nuestra Fortaleza, sólo acepte la Palabra. Y cualquiera sabe que una semilla en el terreno correcto producirá su clase. Y nosotros tomamos la Palabra. Y ahora Eva comenzó a parar para razonar, cuando el. . . ella le citó la Palabra a él: “Dios dijo: Tú no debes comer de él porque el día que de él comieres, ese día moriremos.” Y satanás nunca estuvo en desacuerdo con ella. El dijo: “Ciertamente, eso es correcto.” Pero él dijo: “Tú ves, tú necesitas una nueva Luz.” Algo un poquito diferente de lo que Dios dijo. “Y si tú lo haces, tú vas a ser un poquito inteligente. Tus ojos serán abiertos.” Pero ella dijo: “Bueno, Dios dijo que moriríamos.” El dijo: “Oh, seguramente. . .” Vea, ahí viene un poquito nada más: “Seguramente no morirás.” Pero Dios dijo que sí, y eso pone fin a ello. Y eso rompió esa gran guerra de halones de fuerza (tug-o-war) entonces, y haló a toda la raza humana a muerte, porque Eva escuchó a UN RAZONAMIENTO EN CONTRA LA PALABRA DE DIOS. Ahora, es una vergüenza que ella lo hiciera, pero ha pasado. Pero ahora todavía estamos fortificados, y ese eslabón fue hecho en Cristo Jesús. Sabemos eso. Dios nos dio nuestra mejor defensa. Solamente que confiáramos en Su Palabra. Ustedes saben, y muchos dicen hoy que no hay tal cosa como un diablo. Ellos creen que es un simple pensamiento. Ellos creen eso. Y hay personas que creen que— que— que— que el Espíritu Santo es un buen pensamiento, y que el diablo es un pensamiento malo. Pero si usted nota, cuando la Biblia habla del Espíritu Santo,

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El dijo: “CUANDO EL ESPIRITU SANTO ES VENIDO.” “EL” ES UN PRONOMBRE PERSONAL. ¿VE? ASI QUE EL, EL ES UNA PERSONA. Y EL DIABLO ES UNA PERSONA. Y DEMONIOS SON PERSONAS. Sí, ellos son demonios, y ellos— ellos vienen en muchas maneras. Pero ellos creen que es una idea pasada de moda. Un hombre estaba discutiendo conmigo aquí hace unas cuantas semanas. El dijo: “¿Usted sabe lo que usted hace? Usted solamente pone en las mentes de esas personas a pensar sobre algo cuando le dice eso. Es sólo un cambio de pensamiento.” Yo me encontré con eso en India una vez, cuando aquellos hombres santos allí donde teníamos, y creo que fue la más grande audiencia a la cual le haya hablado, en una audiencia de pie, siendo de medio millón de personas, y yo lo capté por discernimiento del Espíritu. Y ellos verían al Espíritu Santo llamar personas, y llamarlas, afuera en la audiencia, y decir diferentes cosas, y tomando su pensamiento. Los Rajás y los hombres santos, decían: “El les está leyendo sus mentes.” Así que en unos cuantos momentos, como cinco o seis habían pasado a través de la fila de oración, y un hombre ciego vino. Y él estaba totalmente ciego, y sus ojos estaban blancos como mi camisa. Y yo dije: “Ahora aquí está un hombre ciego, cualquiera puede ver que él está ciego.” Y yo dije: “Si yo lo puedo ayudar, lo haré, pero la única manera que lo puedo hacer, seria por un don, tal vez decir algo que él ha hecho; y eso daría a pensar que si Dios conoce lo que ha hecho, El ciertamente conoce lo que va a hacer.” Así que dije: “Ahora, mirándole.” Yo dije: “Ahora, él es un adorador del sol. El ha estado ciego veinte años.” Y cuando el intérprete lo dijo, eso estaba correcto. Yo dije: “El es un hombre casado. El. . . su esposa es bastante pequeña, y él tiene dos hijos, uno como de siete, uno nueve.” Eso fue exactamente correcto. Llamó sus nombres, lo que era. Entonces afuera en la audiencia, en el lugar donde estaban las personas, allí venia aquella honda: “Es mental, es algo en ese orden de— de lectura psíquica de sus mentes.”


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hablada con honestidad. Luego ellos apedrearon a Esteban, él predicó en contra del pecado, El les puso tan enojados, le arrancaron su cabeza; Pero él murió en el Espíritu, él dio el Espíritu, Y fue a unirse con los otros, ese espíritu dador de vida. Sigue chorreando con sangre, sí, está chorreando con sangre, Este Evangelio del Espíritu Santo está chorreando con sangre, La sangre de los discípulos que murieron por la Verdad; ¡Oigan! Hay almas bajo el altar, clamando: “¿Hasta cuándo?” Para que el Señor castigue aquellos que hicieron mal; Pero van a ver más quienes darán su sangre por su vida. Por este Evangelio del Espíritu Santo con su creciente carmesí. Sigue chorreando con sangre, aleluya, está chorreando con sangre, (quiero ser uno de ellos), Evangelio del Espíritu Santo, está chorreando con sangre. La sangre de los discípulos que murieron por la Verdad, Este Evangelio del Espíritu Santo está chorreando con sangre. Yo quiero ir rectamente al púlpito. Amén. ¡Oh, qué

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¿No le hace eso sentirse bien? ¿Cuántos se sienten bien? Solamente levanten sus manos ahora, digan: “Yo me siento muy bien.” El Espíritu Santo lo ha limpiado a usted. ¿Entonces nosotros qué? Caminar en la Luz. No oiga cualquier . . . ¿Qué es la luz? “Tu Palabra es una lámpara.” Pues entonces caminaremos en esta Luz, Es una preciosa Luz, Ven donde las gotas de rocío de misericordia brillan; Brillan a nuestro alrededor día y noche, Jesús la Luz del mundo. Ahora, ¿No es eso maravilloso? Parece como que no queremos terminar. El Espíritu Santo nos está aguantando. ¿No lo siente usted de esa manera? Sólo se siente como que yo estoy en un . . . sólo parece como que usted no puede . . . Evangelio está chorreando con sangre, La sangre de los discípulos que murieron por la Verdad, Este Evangelio del Espíritu Santo está chorreando con sangre. El primero en morir por este plan del Espíritu Santo, Fue Juan el Bautista, pero él murió como un hombre; Luego vino el Señor Jesús, ellos Le crucificaron, El predicó que el Espíritu salvaría al hombre de Pecado. Allí estaban Pedro y Pablo, y Juan el divino, Ellos dieron sus vidas para que este evangelio pudiera brillar; Ellos mezclaron su sangre, como los profetas de la antigüedad. Para que la Verdadera Palabra de Dios pueda ser

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Entonces yo pensé, “Señor, si Tú solamente me puedes ayudar. Yo— yo necesito Tu ayuda, Señor. Estas personas están tratando de clasificar esto como telepatía. Y no lo es, y Tú lo sabes, Señor.” Con todo, le di la Escritura que Jesús dijo que El no hacia nada hasta que el Padre se lo mostrara. Y entonces, volteándome para mirar al hombre de nuevo, yo Le vi por encima de allí en una visión, con tan buenos ojos como los que tengo. Yo pensé: “Ahora es el tiempo.” Yo dije: “Este hombre es un adorador del sol (ahora) y se ha quedado ciego.” Y yo dije: “Ahora, el. . . allí están los sacerdotes de Shiites, Jains, y los diferentes tipos de religión Buda. Ahora, este hombre quiere recibir su vista. Ahora, usted dirá que él— él adoró a la creación en lugar del Creador. Yo creo eso también. Pero aquí estamos sentados esta noche.” Yo dije: “Y hemos estado. . . hoy fue entretenido en el templo de los Jains donde habían diecisiete diferentes religiones para entrevistarme, y cada una de ellas en contra de Cristo, cada una de ellas,” y yo dije: “Ahora, y muchos de ustedes hombres estaban allí. Ahora, si Cristo está tan equivocado, entonces este hombre quiere estar correcto, y seguramente el Dios de la creación que hizo al mundo, será el Unico que le puede dar la vista. Eso es razonable.” Y yo dije: “Ahora, si algunos de ustedes. Los mahometanos aquí son la religión principal, si el Sacerdote Mahometano viniera aquí y le diera la vista, entonces yo seguiré a los mahometanos, o si el sacerdote Buda viniera y le diera la vista. Pero deje que el Dios que le hizo a él, el Dios, el Dios de alguien en alguna parte, porque tiene que haber, no podemos tener una creación sin tener un Creador. Y tomará un Creador para crear vista en estos ojos. El ha estado ciego veinte años de mirar al sol, pensando que iría al cielo si lo hacía. El hombre ignorantemente lo ha hecho.” Yo dije: “¿Qué harían ustedes sacerdotes budas? Usted sólo le cambiará el modo de pensar. Usted dirá que él está equivocado.” Ellos adoran sus antepasados muertos. Y yo dije: “Ahora, usted cree que él estaba, usted diría que él estaba equivocado, pero ¿qué haría usted? Usted

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sólo le cambiaría el modo de pensar.” Y yo dije: “¿Qué harían los mahometanos? Cambiar su modo de pensar. Los Shiites, Jains, y demás, cambiar su modo de pensar.” Yo dije: “Nosotros tenemos la misma cosa en los Estados Unidos. Los metodistas quieren hacer que todos los bautistas sean metodistas, y los pentecostales quieren tomar a todos los metodistas y hacerlos pentecostales. Es sólo un cambio de pensamiento. Pero eso no es de lo que estamos hablando. Estamos hablando de Dios, El Creador.” Y yo dije: “Seguramente que El Creador hablará.” Y ahora, yo no hubiera dicho eso si aquella visión no hubiera estado allí, de ninguna manera. Ahora yo dije: “Ahora, si el Unico, dejemos que El sea Dios, venga y le dé su vista.” Y yo dije: “Ahora yo reto a cualquier sacerdote o príncipe o Rajá u hombre santo o cualquiera que sea, venga y le dé su vista, y yo seguiré tu filosofía, tu has hecho un convertido,” y ese fue el grupo de personas más calladas que yo jamás he oído. ¿Ve? Nadie lo hizo. Y yo dije: “¿Por qué están tan callados?” Yo dije: “La razón por la cual están, es porque no lo pueden hacer, ni yo tampoco. Pero el Dios del Cielo Quien levantó a Su Hijo Jesucristo, Cuyo siervos somos, me ha enseñado una visión que el hombre va a recibir su vista.” ¿Ve? Yo dije: “Ahora, si eso no es cierto, entonces pueden ordenarme salir fuera de India. Pero si es cierto, cada uno de ustedes debe su vida a Jesucristo. Desearía preguntarles, ¿cuántos aquí darían su vida a Cristo si este hombre ciego recibe su vista? Ustedes ven sus sacerdotes, ninguno subió aquí. ¿Porque no vinieron, si le dijeron que su religión es tan grande y tan inmensa? ¿Por qué alguien no viene y dice algo?” Nadie vino. Yo dije: “Entonces ustedes allá afuera, si ustedes ven a este hombre ciego parado aquí. . .” Y ahí subió un doctor para examinar sus ojos. El sacudió su cabeza, él dijo: “Está ciego.” Y así que yo dije: “Ciertamente, él está ciego.” Pero yo dije: “Si— y si Dios le da su vista, ¿cuántos de ustedes le servirán a Jesucristo?” Y tan lejos como yo pude ver, inmensidad de manos


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trayendo dulce liberación, trayendo salvación gratis. Gracias, Señor.” “Te damos las gracias por las ofrendas. Te alabamos porque Tú eres amable. Tú eres Lírio de los valles, la Estrella de la mañana, la Rosa de Sarón, el Todo —en todo. Tú eres el Padre, el Hijo, el Espíritu Santo; el que era, que es y que ha de venir; el gran Alfa, Omega. Tú eres el único maravilloso, el príncipe de paz, la raíz y el Linaje de David ¡Tú eres todo! Y te damos las gracias, Señor, por todo lo que Tú has hecho. Te damos las gracias por Tú Palabra, lo cual es Luz en nuestro camino. Oh, oramos, Señor, que Tú nos dejarás caminar en la Luz. Concédelo, Padre. En el Nombre de Jesucristo. Amén. Bien, mientras nos sentamos un minuto: “Nosotros caminaremos en la Luz.” Caminaremos en la Luz, tan preciosa Luz, Ven donde las gotas de rocío de misericordia brillan; Brillan a nuestro alrededor día y noche, Jesús, la Luz de El . . . ¡Vengan, santos, cantémosle ahora! Caminaremos en la Luz (Pureza, santidad), Preciosa luz, Ven donde las gotas de rocío de misericordia brillan; brillan a nuestro alrededor día y noche, Jesús, la Luz del mundo. Ven, confiésale como Tu Rey, Jesús la Luz del mundo; Entonces las campanas del Cielo sonarán, Jesús la Luz del mundo. ¡Todos! Caminaremos en la Luz (Vigilando mi llamado), preciosa Luz. Ven donde las gotas de rocío de misericordia brillan; Brillan a nuestro alrededor día y noche, Jesús, la Luz del mundo.

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LA PALABRA HABLADA Sobre la otra orilla. Oh, algún día claro yo iré y le veré, Algún día claro yo iré y le veré, Algún día claro yo iré y le veré. Sobre la otra orilla. ¿No le hace eso sentirse bien? ¿Así de bien? Jesús, manténme cerca de la Cruz, Hay una preciosa fuente, Gratis para todos, una corriente de sanidad, Fluya de la Fuente del Calvario. Todos levanten sus manos ahora. En la cruz, en la cruz, Sé mi gloria para siempre; Hasta que mi alma raptada encuentre descanso, Más allá del río. En la cruz, en la cruz, Sé mi gloria para siempre; Oh, hasta que mi alma raptada encuentre descanso, Más allá del río. Yo le amo, yo le amo, porque El a mí me amó, Y me compro mi salvación en el Calvario (Alabado sea Dios.)

Vamos silenciosamente ahora a inclinar nuestros rostros, y en nuestra propia manera amorosa alabémosle con nuestras manos alzadas diciendo: “Gracias, Señor por salvar mi alma. Gracias, Señor, por restaurarme. Gracias, Señor, por todo lo que haz hecho,

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negras. Fui hacia el hombre, y dije: “Señor Jesús, que sea conocido que Tú eres Dios.” El hombre me agarró alrededor del cuello y allí estaba sentado el alcalde de Bombay, lo agarró alrededor del cuello. . . podía mirar como cualquier otro. ¿Qué es eso? ¡Eso— es realmente un poder! ¡Dios es Dios, y satanás es satanás! Si usted no cree en un diablo. . . Cuando yo primeramente empecé, yo— yo me encuentro frente a él cada día. No me diga usted que no hay diablo, porque yo sé mejor que eso. Yo tengo que luchar con él todos los días. Así que yo sé que hay un— hay un diablo. Y usted tiene que estar preparado para cuando se encuentre con él. No prepararse en sicología, no prepararse en educación; pero prepararse por el Espíritu Santo. El poder de Dios es Su Palabra para hacerla manifiesta. Conozca a su enemigo. ¡Oh, qué cosa tan cruel es él! Cómo me gustaría pararme aquí y colocarme en eso, ir a través de la Biblia y enseñarle a un hombre allá atrás que se acercó cara a cara con él. Como en la batalla en contra del enemigo, ellos mismos se fortalecieron por la Palabra de Dios. Noé tuvo una experiencia de esto, y él sabia que Dios le había dicho que iba a llover. Y la batalla estaba entre la ciencia y la Palabra de Dios. La ciencia dice: “No puede suceder.” Dios dice: “Sucederá.” Amén. La misma cosa existe hoy. ¡Y sucederá! ¡Y sucede! Hay diablos. Pero Jesús los echó fuera, y El dio a Su Iglesia autoridad para hacerlo: “Echar fuera demonios en Mi Nombre.” El le echó fuera siete demonios de una preciosa mujer un día. Y El dijo: “Cuando el Espíritu inmundo sale de una persona, anda por lugares secos, regresa de nuevo, trae otros siete diablos con él.” Ahora, eso es para demostrar que si el hombre fue limpio de demonios, había algo en él que había salido. ¡Un demonio había salido! Ahora, cuando el demonio se había movido, que Dios. . . le da a Dios una oportunidad para moverse adentro. Así que cuando él sale, deje que el Espíritu Santo entre. No lo deje ahí. Si usted lo hace, sólo arrepiéntase de sus pecados y continúe hacia adelante, entonces va a estar peor que nunca. Pero coja ese sitio donde satanás una vez vivió y ocupó; llévelo con el Espíritu Santo de Dios, entonces

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tendrá la fuerza de la Palabra de Dios en usted manifestada, y echará fuera demonios. La Batalla está. Las Luces del Atardecer están brillando. El Espíritu de Dios está presente.


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Oh, algún día claro yo iré y Le veré, Algún día claro yo iré y Le veré, Algún día claro yo iré y Le veré, En la otra orilla. Oh, ese día claro puede ser mañana, Ese día claro puede ser mañana, Ese día claro puede ser mañana, En la otra orilla. Yo quiero saber cuántos tienen un Padre en la otra tierra, déjenme ver sus manos. Cuántos tienen una madre en la otra tierra, déjenme ver sus manos. Cuántos tienen un Salvador en la otra tierra, déjenme ver sus manos. Ahora, ¡no será eso una reunión alegre! ¡No será eso una reunión alegre! ¡No será eso una reunión alegre! Sobre la otra orilla. Ahora yo quiero que ustedes hagan algo. Ahora mientras cantamos eso nuevamente, yo quiero que ustedes se den las manos con alguien parado al lado de usted, y diga: “Hermano, hermana, ore por mí, que yo le encuentre en la otra tierra.” No lo haga a menos que usted lo crea. ¿Cuántos se quieren encontrar uno al otro? ¿Cuántos quieren encontrarse con todos los que están aquí, allí? Nosotros seguro que sí. Ahora vamos a darnos las manos uno al otro y decir: “Yo quiero encontrarme con usted, hermano. Yo quiero encontrarme con usted en el otro lado.” Ahora, mientras cantamos esto: “Yo tengo un Salvador más allá.” Bien. Yo tengo un Salvador más allá, Yo tengo un Salvador más allá, Yo tengo un Salvador más allá,

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aquí. Mi diferencia yo la dejaré aquí en el altar.” ¿Y qué de aquí abajo en el final del altar aquí a la derecha, señora? ¿Puede usted dejarla allí? Puede usted dejar esa vieja carga colocada allí, y decir: “Sí, mi fe mira hacia Ti, Tú Cordero del Calvario.” Mientras nosotros todos cantamos juntos ahora. Mi fe mira hacia Ti Tu Cordero del Calvario, Oh, Salvador Divino; Ahora, escúchame mientras oro, Quita toda mi culpa, Oh, déjame desde este día, ¡Ser totalmente tuyo! Vamos a estar parados sobre nuestros pies bien reverentes, todos. Ahora oigan de cerca, todos ahora. Nadie se vaya, sólo... servicio no ha terminado. Yo quiero que capten esto, la santidad, la solemnidad. “¡Mientras la vida obscura de confusión yo camino, y pesares a mi alrededor se aumentan, sé Tú mi Guía. Que la oscuridad se torne en día, limpia las lágrimas del dolor, y dejame desde este día ser totalmente tuyo!” No se lo cante a su vecino ahora, cierre sus ojos y cantémoslo suave mientras levantamos nuestras manos a Dios: Mientras la vida de confusión yo camino, Y pesares alrededor mío se aumentan, Sé Tú mi guía; Propuestas oscuridades cambian a día, Limpia las lágrimas del dolor, Nunca jamás dejes descarriarme de Tú lado. Yo tengo un Padre más allá, Yo tengo un Padre más allá, En la otra orilla.

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con un grupo de chismosos, ahora yo la estoy colocando allí abajo. Yo nunca más la levantaré de nuevo. Santifica mi lengua, Señor. Déjame sentir los Angeles venir a través como Isaías cuando él dijo: “Yo soy de labios inmundos ¡hay de mi!” Y el Angel regresó, tomó las tenazas y fue al altar y cogió los carbones del fuego y los puso sobre sus labios y los santificó. Dios, santifica a cada hablador esta mañana que habla mal y siembra discordia. Concédelo, Señor. Todas las enfermedades que están oprimiendo aquí en este edificio, están con estas personas sabiendo que el diablo ha terminado. Dios, como Tú siervo, yo la reprendo en el Nombre de Jesús, deje que él salga de cada persona enferma y que cada persona inmunda que tienen pensamientos inmundos, vulgares, codicia, hombres y mujeres igualmente, Dios, sácalo de ellos. Todos estos aquí tratando de deshacerse de cigarrillos y pequeñas bebidas sociales y fiestecitas y cosas sucias, Dios, estimula su corazón con el Espíritu Santo de tal manera que esas cosas no sean más deseadas. Ellas no tendrán lugar, usted está tan lleno del Espíritu Santo desde ahora en adelante. Dios, haz esta pequeña iglesia una zarza ardiente, que el Espíritu Santo la ponga en fuego ardiente, que el mundo se tornará para ver la Gloria de Dios. Dios, comienza con este pequeño puñado de personas, de un par de cientos aquí esta mañana. Concédelo, Señor. Purifica cada corazón, cada metodista, cada bautista, cada católico, cada presbiteriano, cada pentecostal. Señor, sácalo de su corazón, y déjalos que vengan a Ti hoy. Concédelo, Padre. Yo te los encomiendo a Ti y Te los deposito a Ti en el Nombre de Jesucristo, para limpieza de sus almas y la sanidad de sus cuerpos. Amén. Yo me pregunto, en el altar, ¿ha dejado usted su carga? ¿Siente usted como que todavía está puesta allí? Si usted siente que todavía está colocada allí, sea usted el juez. Usted es el que está orando. Yo he predicado; usted está orando. ¿Ha dejado usted su carga allí, hermano, hermana? ¿Puede usted verdaderamente dejarla allí? Si usted puede, levante su mano, diga: “Sí, Dios, ahora yo la dejo

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y cárceles. Y —y otros fueron apedreados, acerrados, tentados, todos estos aprobados por testimonio de la fe, no recibieron la promesa; proveyendo Dios alguna cosa para nosotros, para que no fuesen perfeccionados sin nosotros. Por tanto nosotros también, teniendo en derredor nuestro una tan grande nube de testigos, dejando todo el peso del pecado que nos rodea, corramos con paciencia la carrera que nos es propuesta, puestos lo ojos en el Autor y Consumador de la Fe; en Jesús , el cual habiéndole sido propuesto gozo sufrió la Cruz, menospreciando la verguenza, y sentándose a la diestra del Trono de Dios.”

Jesús, en Su oración, dijo: “Padre, santifícame.” Jesús vino a ser santificado para la Iglesia. El se hubiese podido casar, pero El no lo hizo. El viene a ser santificado. El dijo: “Santíficalos, Padre, en Tú verdad. Tu Palabra es Verdad.” Ahora dejando todo el peso. Usted tiene un genio, ¿tiene usted algo de usted que usted habla cuando no debe hablar? ¡Oh Dios! Colócalo allí ahora, colócalo allí. Vigile el Fuego en el altar bajar y quitarlo. Vigile el Amor de Dios lamerlo. Vigile todo ese viejo egoísmo, la manera que usted le ha hablado a su esposa, la manera que usted le ha hablado a su esposo, la manera que usted le ha hablado a su vecino, la manera que usted habla de las personas en la Iglesia, póngalo en el altar esta mañana, y el Fuego de Dios bajará y lo quitará, y el Amor Divino quemará en su lugar. Si usted tiene enfermedades, póngala en el altar, diga: “Señor, aquí está. Crea en mí un espíritu limpio. Crea en mí poder sanador.” Vea lo que Dios hace esta mañana. Nuestro Padre Celestial, nos inclinamos en Tú Presencia, en favor de esos en el altar. Deja que Tú Gracia descanse sobre cada uno de ellos, Padre. Ahora mientras ellos depositan . . .Yo no lo puedo hacer por ellos, ellos mismos lo tienen que hacer. Ningún hombre lo puede hacer por ellos, ellos mismos lo tienen que hacer solos. Deja que sus almas ahora digan dentro de ellos; “Oh Dios, este temperamento, yo lo pongo aquí abajo, Señor. Yo nunca jamás lo recogeré. No importa lo que venga o vaya, yo lo dejaré ir de ahora en adelante. Esta lengua mía que se le hace tan fácil juntarse

ECHANDO FUERA DEMONIOS 26 de agosto del 1951 Tabernáculo Branham Jeffersonville, Indiana, E. U. A.

El dijo: “Tengo que mantener mi Palabra. Usted tiene que morir.” El pobre individuo estaba enfermo. El dijo: “¿Qué puedo hacer yo antes de matarlo a usted?” Dijo: “Un vaso de agua.” Entonces fue y buscó el vaso de agua, y lo estaba sujetando en su mano, y temblando así, no lo podía sujetar. Y él dijo: “Ahora, espere un minuto, enderecese.” El dijo: “Yo no te voy a matar o tomar su vida hasta que se haya bebido el agua.” Y el esclavo la echó al piso. ¿Qué es lo que él va a hacer? Si es tan sólo un hombre, y si él mantiene su palabra, y si él no mantiene su palabra él no es un hombre justo, tiene que dejarlo ir libre. Sin importar lo que las leyes de la tierra dijeran. Y si Jesús dijo: “Cualquier cosa que usted desee, cuando usted ore, crea que lo recibirá,” tiene que mantenerla, El es justo. Sujetémonos del Polo Norte, pero esa es Su Palabra. Un muchacho se fue no hace mucho hacia cierto seminario para aprender de muchas cosas que él no debió aprender. Así que su vieja madre se enfermó. Uno de sus vecinos pertenecía a una iglesia del Evangelio Completo. Ellos trajeron al pastor a su casa. Dijo: “Déjeme traer a su pastor aquí y que ore por usted.” Dijo: “El es un hombre justo y cree en Dios, así que deje que él venga y ore por usted.” Así que ella dijo: “Está bien.” El doctor no podía hacer nada por ella, así que el hombre joven fue allí, el pastor, y oró por la mujer anciana, y puso sus manos sobre ella de acuerdo a Santiago, o de acuerdo a Marcos 16: “Y pondrán sus manos sobre los enfermos, y sanarán.” El subió y puso sus manos sobre la mujer, y en unos cuantos días ella estaba

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levantada y continuando con su trabajo, estaba bien. Cuando el hijo regresó a su casa del colegio, por supuesto, él estaba tan contento, ustedes saben, y él ve que su madre está tan contenta, dijo: “¿Cómo te ha ido todo, madre?” Dijo: “Muy bien.” Dijo: “Oh, hijo, se me había olvidado decirte algo.” Dijo: “mientras tú estabas lejos estos cuatro años,” dijo: “Me enfermé. Y, usted sabe, señora Fulana y Fulano de tal aquí pertenece a la iglesia del Evangelio Completo.” Dijo: “Su pastor vino aquí y puso las manos sobre mí, de acuerdo a Marcos 16, y me puse bien.” Dijo: “Los doctores no pudieron hacer nada por mí cuando me dio la enfermedad de arrobamiento.” Dijo: “Así fue como me puse bien.” El dijo: “Bueno, madre, quiero informarte algo.” Dijo: “Seguro, cuando estaba en el colegio aprendimos esto.” Dijo: “Los últimos nueve versos de Marcos 16 no son inspirados.” Dijo: “Eso fue puesto ahí por el Vaticano.” Dijo: “No hay historia que diga que esa Palabra ahí es inspirada.” Y la mujercita dijo: “¡Gloria a Dios!” El dijo: “¿Qué es lo que te sucede, madre?” Ella dijo: “Si Dios me pudo sanar con Palabras que no eran inspiradas, ¿qué hará El con las que son inspiradas?” ¡Cuando hay seiscientas setenta promesas directas a la Iglesia en los últimos días, que estas cosas tomarán lugar, y Su Poder es el mismo! “Jesucristo es el mismo ayer, hoy, y por todos los siglos. Todas las cosas que tú desees cuando ores, crea que las recibirá. Si vosotros permanecéis en Mí y Mi Palabra, pedid todo lo que quisiereis y os será hecho. Las obras que Yo hago también vosotros las haréis; y mayores que éstas, porque yo voy al Padre. He aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Dondequiera que estuvieran dos o tres congregados en Mi Nombre, y estuviereis de acuerdo en todo y pidiese, lo recibirán.” Olvídese de éso, hermano. Es la voluntad de Dios hacerlo. Sí, es sólo satanás robándole a usted su sanidad. “Y en contra de esperanza, creyó y esperó, que él sería el padre de muchas Naciones, de acuerdo a lo que fue hablado, así será tu


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y en Su seno de descanso? Yo estoy destinado para la tierra prometida, Yo estoy destinado para la tierra prometida; ¿Oh, quién vendrá e irá conmigo? Yo estoy destinado para la tierra prometida. ¿No vendría usted, y seguir adelante? Yo recuerdo cuando cerca de quinientos de nosotros parados allí, cuando yo estaba bautizando ciento veinte, como a este tiempo del año, aquí abajo en la orilla del río, cuando la gran Estrella de la Mañana vino brillando allí en el río. ¡Aleluya! Una Voz de Ella que hablaba, dijo: “Algún día Tú regarás el Evangelio por todo el mundo.” Yo dije: “Un pobre, pequeño, un niño campesino ignorante nunca hará eso. ¡Es la Gracia de Dios!” Amén. ¡Oh, ¿quién irá y vendrá? Deshágase, eche a un lado todo peso ahora. No le ponga atención a esos espíritus seductores. Venga, oiga la Palabra de Dios: ¡ASÍ DICE EL SEÑOR! ¡Bienaventurados son los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados!” Vamos a inclinar nuestros rostros ahora mientras estamos con estos en el altar. Queridos niños, yo quiero que ustedes se acuerden esta mañana aquí, el día que yo les pregunté para que echaran a un lado toda carga. Aquí están ellos, para echar a un lado toda carga y el pecado que tan fácilmente les acosa. Pablo dijo, en Hebreos el capítulo 12: “Por tanto nosotros también, teniendo en derredor nuestro una tan grande nube de testigos, dejando todo el peso del pecado que nos rodea. ¿Y qué más digo? Porque el tiempo me faltará contando de Gedeón, o Barac —de Barac, de Sansón, de Jefté, de David, de Samuel, y de los profetas. Que por fe ganaron reinos, obraron justicia, alcanzaron promesas, taparon las bocas de los leones, apagaron fuegos impetuosos, evitaron filo de espada, sacaron fuerza de debilidad; se hicieron fuertes en batallas, pusieron en fuga ejércitos extranjeros, las mujeres recibieron sus muertos por resurrección; unos fueron estirados, otros experimentaron vituperios y azotes, y a más de esto prisiones

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desordenado con pecado. ¿Está usted todo apegado allá afuera y goza de eso? Cuando ellos ponen ese dinero en esas pequeñas viejas cajas y todas esas viejas cosas sucias salen, ¿goza usted de eso? ¡Vergüenza debe darle! Usted es un descarriado. Usted está apartado de Dios. Usted no conoce a Dios. Si usted conoce a Dios y el perdón de sus pecados, usted nunca pondrá atención a tales cosas como esas, estará muerta para usted. Usted —usted vomita de eso. Usted no lo quiere. Su dieta es mejor; usted ama a Dios. ¿Vendrá usted esta mañana arrodillado aquí abajo con estos confesores esta mañana? Aquí hay hombres y mujeres arrodillados aquí que han sido cristianos por muchos años. Yo no estoy descristianizando, pero lo que estoy tratando de hacer es decirles que el diablo que los está rondando lo está alejando del gozo pleno. El Espíritu Santo es gozo. Bueno, yo me levanto borracho, yo estoy borracho todo el día completo, borracho toda la noche completa. ¡Oh, sí! Yo amo eso. Yo voy de pesca, yo sólo estoy echando, yo no . . . “¿Pueden —puedes tú oír mi humilde clamor?” Yo voy de cacería y cantando las alabanzas de Dios. Yo estoy predicando donde quiera que voy. ¿Quiere usted ser de esta manera? Lleno del Espíritu Santo que lo estimula. ¡Oh, vaya! Oyéndolos cantar esas viejas canciones sucias . . . Usted la puede cantar: Yo estoy destinado para la tierra prometida, Yo estoy destinado para la tierra prometida; ¿Oh, quién vendrá e irá conmigo? Yo estoy destinado para la tierra prometida. Yo estoy destinado para la tierra prometida, Yo estoy destinado para la tierra prometida; ¿Oh, quién vendrá e irá conmigo? Yo estoy destinado para la tierra prometida. ¡Cuando yo llegue a ese descanso bendito, y ser para siempre bendecido! ¿Cuando veré el rostro de mi Padre,


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simiente. Yo no siendo débil en fe, él no consideró su propio cuerpo, ya muerto.” Sin circunstancias. No lo que alguna persona dijera ¿Qué si otra persona muriera cuando usted tiene la misma cosa? No lo considere, vea. Bueno, él era como de cien años de edad. “Ni aún estando la matriz de Sarah muerta.” Ella estaba incluida en ello. Dios nunca le dio la promesa a Sarah; El le dio la promesa a Abraham, pero Sarah estaba incluida. El hizo la promesa en Cristo Jesús, y yo fui incluido en El, usted estaba, también. Vea: “El no titubeó a la promesa de Dios, por medio de incredulidad, pero estaba fuerte en fe, dando gloria a Dios, y estando completamente persuadido que lo que El había prometido, El era capaz de ejecutar. Por esta razón le fue imputado a él por justicia. Eso no fue escrito por su propia causa, no le fue imputado, más hacia él, pero para nosotros también a quienes le será imputado, si creemos en El que levantó a Jesús nuestro Señor de los muertos, Quien fue liberado por nuestros pecados, y fue levantado de nuevo por nuestra justificación.” Oh, hermano, éso sólo — éso sólo pone al diablo en aprieto con eso por trescientos sesenta y cinco días al año. Vea, tú eres un mentiroso; allí está la Palabra: “Yo Soy El.” Si viene alguien y la pone en usted, si alguien por aquí le hiciera algo a usted, y hace que usted se ponga bien, eso no lo inspira a usted. Pero aquí está lo que es, el que cree: “Estoy sano ahora.” Si Dios bajara y me sanara positivo, seguro: “Quiero un milagro,” no sería tan grande como si fuera si yo pudiera ver la Promesa de Dios y llevarla a mi corazón. Parado allí yo puedo decir: “Jesús me está sanando, porque yo he aceptado Su Palabra. Está en mi corazón. El ahora está intercediendo por mí ante el Padre. Yo seré sano.” Allí está lo que Dios ama. Párese allí en Su Palabra y diga: “¡Está correcto! El me está sanando ahora, todos los días.” Esa fue aquella mujer con papera. Yo puedo ver, yo le di algo para que hiciera, entonces se desapareció. No se hubiera adelantado. Pero ella estaba tan contenta. Dijo: “Oh, mira, mira.” Y el próximo día era como de este tamaño. Entonces el próximo

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día era como de este tamaño. Ella lo puso todo junto, dijo: “Eso —éso no puede estar erróneo.” Vea, allí lo tiene. Cuando Elías había cerrado los cielos para que no lloviera por un espacio de tres años, Elías hizo eso, que no lloviera por tres años y seis meses, y cuando él bajó su cabeza entre sus flaquitas rodillas, probablemente si él llegara a su puerta esta mañana, usted lo echaría. Lana por toda su cabeza como que yo-no-sé-qué, un pedacito de piel de oveja alrededor de él así y un frasco de aceite y un garrote, y aquí viene. Eso es todo. Pero siempre que llegaba allí, bajaba su cabeza entre sus rodillas, y él oraba: “Dios, el problema se ha ido ya. Israel se ha arrepentido. Baja, Señor y envíales la lluvia.” Como aquella mujer el otro día, cuando el pecado ha salido, yo dije: “satanás, no la puedes aguantar.” No, señor. Eso es todo. “Baja, Señor. Está bien, el problema se ha ido.” El oró seis veces, vino y bajó. Eso no lo detuvo, él siguió orando. Eso es correcto. Y después de un rato Giezi subió, su siervo, miró, y volvió y dijo: “Oh, yo veo una pequeña nube como el tamaño de una mano de hombre.” Pues, los cielos, y no había llovido por tres años y seis meses. Bronce, bronce habla de juicio Divino, un altar de bronce, juicio sobre la nación que se había olvidado de Dios, cielos bronceados. Desearíamos tener tiempo para entrar en eso. Entonces la incredulidad hubiera escogido eso y lo hubiera lanzado fuera: “¡Bueno, si es todo lo que me puedes mandar!” Sí. Bueno. ¿Qué fue lo que Elías vio cuando vio la primera rueda voltear? ¡Oh, vaya! El dijo: “Yo oigo el sonido de lluvia en abundancia.” Ninguna nube más grande que AQUELLA, ¿qué hacía para suplir agua a una nación? Porque, si la nube es tan . . . Está tan caliente en los espacios que lo hubiera vaporizado, vapor se hubiera ido así. Pero tan pronto como Elías vio la primera señal, el primer pequeño movimiento, él dijo: “Yo oigo el sonido de la lluvia en abundancia,” cuando era sólo una nube así de grande. Hermano, yo creo que ahora en este minuto, que el poder del Espíritu Santo está en este salón para sanar a toda persona que


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viene y comienza a hablar de alguien, usted se une con ellos y, oh, sólo criticándolos. ESO ESTA MAL, HERMANO. NO HAGA ESO. ESO FINALMENTE LO ALEJARA A USTED DE LA TIERRA PROMETIDA. Si usted tiene algunas viejas cosas que usted no debe tener, si el amor de Dios verdaderamente está en su corazón, no serían ustedes damas y caballeros, caminar hacia arriba y decir: “Dios, aquí mismo lo voy a sacar en esta mañana, aquí mismo, yo me iré de este altar una persona diferente.” ¿Vendrá usted? ¿Hay un pecador que nunca a aceptado a Jesús, y usted conoce que es un pecador, usted no lo conoce a El como Su Salvador? Usted dice: “Hermano Branham, Sí, yo pensé que tenía mucho placer. Yo voy a los bailes y fiestas y todas esas cosas. Yo veo los programas incorrectos, y yo —yo leo la incorrecta clase de literatura, yo leo viejos libros que tienen historias vulgares en el. Yo como que me gozo leyéndolo.” Hermano, hay algo mal con usted. Ese es su apetito. Vea, usted déjeme ver lo que el hombre lee, déjeme ver lo que él ve, oír a la música que él oye. El otro día viniendo en un carro una cierta persona alcanzó y sintonizó mi radio, alguna clase de vieja música vulgar. Yo dije: “Apague esa cosa. Yo no deseo oír eso.” Alguna clase de viejo “Boogie-woogie.” Dijo: “Pues, a mi me gusta oírlo.” Yo dije: “Su naturaleza está mal. Usted está mal.” Cuando yo estaba aquí afuera unos cuantos días después de eso, arriba en la falda de una montaña o ladera, pescando, con la persona. Esos pequeños pájaros estaban cantando, las calandrias estaban gritando, el viejo ruiseñor volando en el aire, el ruiseñor cantando las alabanzas, y yo grite al muchacho, yo dije: “Mira muchacho, esa es mi música. Mantén eso puesto. Ese es mi radio. Ningún Elvis Presley aprenderá a cantarme aquí afuera. Eso alivia mi alma.” Mejor que todas esas locas cosas viejas, estos viejos fonógrafos rugiendo, funcionando, usted ni aun puede comer en un lugar público. ¡Es la dieta del diablo! Es el poder del diablo. Todo

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inclinados. ¿Cuán verdaderamente usted lo dice? No ore ahora. Este no es tiempo de jugar. Este es tiempo de recibirlo. Este es un tiempo que usted debe obtenerlo. Venga, vacíelo ahora mismo, ¿lo haría? Venga, déle todo lo que tiene a Dios. Diga: “Yo no tengo mucho. Yo soy una pequeña ama de casa. Yo no puedo hacer mucho, Señor, pero yo —yo puedo leer Tú Biblia, yo puedo orar todos los días. Yo puedo sacar toda la basura que hay en mi mente. Yo puedo echar toda esa cosa fuera. Yo soy culpable de muchas cosas que el predicador dijo esta mañana, así que yo —yo lo estoy vaciando fuera hoy. Yo no lo quiero. Y, Dios, lléname con Amor. Lléname con algo que me haga amar el enemigo más amargo que yo tenga. Yo verdaderamente lo quiero, Señor.” Mientras ella está tocando aquí, no vendría usted y se pararía en el altar sólo en medio de ellos, mientras nos reunimos con una palabra de oración. Si usted verdaderamente pretende eso ahora, si usted verdaderamente está listo para abandonarlo, usted nunca saldrá de este altar hoy con eso en su corazón, si usted viene sincero y dice: “Yo voy hacia arriba aquí solo para pararme un minuto, hermano Branham, hasta que usted tenga una palabra de oración conmigo personalmente. Yo—yo quiero que usted venga y ore.” ¿Puede venir ahora? Con sus rostros inclinados ¿Quién se levantará y vendrá al altar, venga alrededor del altar? No me pases, oh tierno Salvador, Oye mi humilde clamor; Mientras en otros Tú estás llamando, Oh, no me pases por el lado. Salvador, Salvador, Oye mi humilde clamor; Mientras en otros Tú estas llamando, Oh, no me pases por el lado. No importa cuánto tiempo usted haya sido un cristiano, y usted todavía tiene esos pequeños viejos espíritus que le hablan a usted, lo hacen volar suelto, lo hacen hablar de alguien. Cuando alguien


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haya, que usted puede sentir la nube del tamaño de una mano de hombre, sonar y gritar: “Yo oigo el sonido de perfecta sanidad.” Dios . . . Si usted rechaza y dice: “Bueno, no recibí nada.” Entonces ello se morirá, las olas calientes del infierno y duda se lo desaparecerá de su alma. Pero cuando usted consigue este pequeño grano de Simiente, párese en eso. No como la piedra de Gibraltar; como la Roca de la Eternidad. Párese allí y usted sentirá el sonido de la lluvia en abundancia. Usted es un hijo de Dios. Satanás ha puesto esa aflicción sobre usted, y usted sabe, y Cristo ya ha sanado a cada uno de ustedes. Un pecador viene al altar y dice: “Hermano Branham, yo, ó, yo quiero que usted ore por mí. Yo —yo quiero estar bien, pero yo sólo . . . Usted ore por mí,” y regresa a su asiento. La próxima noche dije: “¿Cuántos quieren ser salvos?” He aquí él se puso de pie. “¿Quiere usted ser salvo, joven?” “Sí, señor.” “Bueno, ¿por qué usted no se salva?” “Yo no sé.” Dijo: “Usted es sólo” . . . El diablo está aguantando a ese muchacho. Eso es todo. El quiere hacer el bien, pero hay un espíritu, un poder que no lo deja hacer el bien. Ahora, aleluya, ahí lo tiene. Con razón, si Dios nunca prueba, hombre, que Dios nunca dijo que El podía sanar a alguien. Cristo hizo éso cuando El murió. Yo no puedo salvar a nadie, o nadie puede salvar a nadie, sólo Dios. Y Dios no lo puede salvar a usted, porque El ya lo ha hecho. La única cosa que usted puede hacer es aceptarlo. Ya está hecho. Yo no fuí salvo veinte años atrás, yo fui salvo mil novecientos años atrás, pero veinte años atrás yo lo recibí y lo acepté. Si yo no lo hubiera hecho, el primer pecado que yo hice Dios me hubiera quitado de la faz de la tierra, porque El dijo que lo haría, y tiene que cumplir Su promesa. Yo fui sanado mil novecientos años atrás, pero yo tengo que aceptarlo. Y la única cosa que me aguantó de ser salvo cuando yo tenía

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doce años, porque un espíritu colgaba sobre mí, un diablo diciendo: “Espera un poquito más.” Esa fue la razón que usted no fue salvo cuando llegó a la edad de responsabilidad. Un espíritu, usted se juntó con un grupo y eso colgó sobre usted, y seguía colgando sobre usted. Usted quería hacer lo correcto. No hay un hombre que tenga su mente correcta que sólo quiera hacer lo correcto, pero hay algo que no lo deja a usted hacer lo correcto. ¿Es éso correcto? Eso es el diablo. ¡Aleluya! Cristo pagó su sanidad y su salvación. Ahora, aquí está. Usted prepárese. EL COMISIONO A SU IGLESIA PARA QUE ECHARAN FUERA DEMONIOS. AHI LO TIENE. “En Mi Nombre echarán fuera demonios. Usted no va a sanar a nadie, pero usted le va a echar el demonio fuera de ellos para que ellos puedan aceptar la sanidad que Yo ya he hecho.” Eso es correcto. Predicadores se pararon en la plataforma y predicaron el Evangelio, demonios se desparramaban. El hombre vino al altar bajo condición, dijo: “Yo quiero ser salvo.” El nunca salvó al hombre; él le echó fuera el demonio, eso es correcto, y el hombre fue salvo. El vino, aceptó su salvación. Es la misma cosa sobre la sanidad Divina. Ustedes personas enfermas aquí en esta mañana, crean éso, y que han nacido de nuevo, y son hijos e hijas de Dios. Cristo ya los ha sanado. Lo único que lo aguanta a usted de ser salvo esta mañana es un espíritu colgando sobre usted que no lo deja ir completamente allá afuera y creer la promesa de Dios que El lo ha hecho. Eso es correcto. Ahora, esa es mi comisión. Eso fue lo que Dios me dio, eso fue lo que El le dio a cada predicador del Evangelio que cree, el poder y autoridad para quebrantar ese espíritu. Y yo creo con todo mi corazón que todo poder demoníaco que está aquí, en este minuto está quebrantado. yo lo creo. Yo creo que toda persona enferma aquí ahora mismo se siente mucho mejor. Si eso es correcto, levanten su mano, ustedes que estaban enfermos. Vean allí . . . ¿Qué le sucede? Aquel diablo se ha soltado de usted. El tiene que soltarse. Fe viene por el oír, oír la Palabra. Jesucristo murió por usted. Usted puede ser sano ahora, para cumplir esa comisión.


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responsables por conocer la Verdad y no decirla. Padre, yo oro para que eso sea sacado de cada corazón. En el Nombre de Jesús. Con nuestros rostros inclinados un momento, yo pienso si hay alguien aquí esta mañana que diga: “Hermano Branham, yo estoy enfermo y cansado de estas pequeñas viejas cosas. Yo tengo cosas insignificantes que han estado sobre mí tanto tiempo. Yo —yo siempre estoy hablando fuera de lugar. Yo —yo estoy haciendo cosas que no debo hacer, yo sé que no es propio para un cristiano. Yo no quiero hacer eso; Dios conoce que yo no quiero. Y yo no quiero oír a ese viejo espíritu más. Es la cosa que me ha mantenido abajo toda mi vida, de tener verdadero amor y libertad en Cristo. Yo quiero que ore por mí, hermano Branham, que ellos —eso me dejará este día.” ¿Levantaría usted su mano? Cada rostro inclinado. Dios le bendiga. ¡Oh, vaya, docenas de manos! Pequeñas viejas insignificantes cosas, pequeñas cosas que lo hacen hablar o comenzar alguna pequeña clase de bulla en la iglesia, lo hace tomar lugar con algo u otro de esa manera. Oh, eso es impío. Eso es discordia entre hermanos. Y no lo haga. Usted no quiere eso. Usted no quiere eso y viejas cositas, pequeños viejos temperamentos y todo eso, para mantenerlo presionado. Diga: “Dios, yo no quiero esa cosa jamás. Yo estoy enfermo y cansado de eso. Yo estoy listo hoy para destacarlo. Yo vengo ahora, Señor, y yo quiero apartarme de todo mi egoísmo. Si mi hermano no me trata bien, yo con todo oraré por él. Si mi padre no me trata bien, yo con todo lo amo. Si mi esposa no me trata bien, o mi esposo, yo iré humildemente delante de Dios. Señor, yo miro solamente a Tú Reino. Yo quiero mi corazón lleno de gozo. Yo quiero atender, cuando el problema comienza a zumbar alrededor mío, yo aún quiero mantenerme con las manos arriba y mi corazón puro delante de Ti, Señor, conociendo esto, que algún día yo me encontraré contigo. Yo quiero esa clase de experiencia. Señor, hazme eso desde este día.” Puede usted levantar su mano, alguno que no levantó su mano hace un rato atrás. Dios le bendiga. Dios le bendiga. Hermana, danos una pequeña nota mientras tenemos nuestros rostros

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qué? Usted todavía tiene la enfermedad del pecado. Eso es correcto. Pero yo le diré una cosa, hermano, eso lo inoculará a usted de pecado, eso es, ven a la preciosa Sangre del Señor Jesucristo y sed lleno del Espíritu Santo, y eso lo inoculará de todo pecado y sus deseos serán deseos santos y usted no tendrá tiempo para las cosas del mundo. Oremos. Nuestro Padre Celestial, cuando vemos estos espíritus seductores sobre personas, y conociendo que ellos están despreciando las cosas de Dios, yo oro, Dios, que Tú tomarás cada hombre y mujer aquí hoy. ¡Deja que esto sea un día, Señor, que ellos se den cuenta que sus vidas no están conforme con la Palabra, y ellos han estado oyendo a la cosa errónea, que el diablo ha estado consolándolos con la vieja Verdadera Historia de los magazines, viejas podridas tonterías del mundo, y viejas películas demuestran y televisión inmunda, oh Dios, nos enferma. Tú dijiste que Te enferma hasta vomitar. Tú dices: “Un perro vuelve a su vómito y el —el puerco vuelve a revolcarse.” Un viejo perro vomitará algo. Ver una antigua medio nacida, supuesta a ser . . . persona hipócrita venir al altar, y como que usted va a vomitar el mundo, todavía manteniéndose ahí y regresar y comer la cosa de nuevo. Oh Dios, limpia Tú Casa, Señor. ¡Aleluya! Manda el Espíritu Santo con tal viejo-tiempo de convicción que limpiará el apetito del hombre y limpie su alma y lo limpia y lo hace una criatura atada del Cielo. Dale . . . Renueva su juventud y sus votos como águila, que él pueda montarse y sobrepasar las cosas de este mundo, y remontarse hacia los Cielos allá donde él pueda ver los problemas que vienen a la distancia. Concédelo, Señor. Tú comparaste Tus profetas con ellas, las águilas, que tenían el ojo de un águila, podía subir bien alto y ver cosas mucho tiempo antes de llegar allí. Oh Dios, bendice esta pequeña iglesia. Bendice estas personas que vienen aquí. Bendice los extranjeros en las puertas hoy. Y déjales saber que este Mensaje no fue dirigido a un ser personal, sino dirigido especialmente, Señor, a aquellos que verdaderamente lo necesitan; conociendo que algún día nos pararemos juntos en el juicio de Dios, y conociendo que seremos


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Ustedes que están enfermos aquí en esta mañana, . . . . . . entraron aquí de esa manera mientras ese Espíritu está sobre usted, mientras usted siente el Espíritu de Dios. En vez de: “Oh, lo siento, eso ya pasó.” Todos ustedes que están enfermos, estaban enfermos cuando entraron aquí, yo quiero que ustedes vengan aquí para que yo pueda cumplir mi comisión. Yo estoy bajo el deber de mi Señor, y mis reclamos, cómo un Angel Divino me apreció en mi nacimiento, y me comisionó a los doce años de edad, y me envió aquí hace unos años atrás, y dijo estas cosas y es indisputable alrededor del mundo. Demonios e —e infieles, y escépticos, y agnósticos, y modernistas y comunistas y todos los demás, lo han atacado sobre las maneras de decir que eso era . . . Algunos dijeron: “Espiritismo.” Algunos dijeron: “Son las obras del diablo.” Y el otro dijo: “Es una —es una telepatía mental.” Y cada vez que éso se levantaba, el Dios Todopoderoso se paraba delante de mí y lo conquistaba. Eso es correcto, llévelo adonde usted quiera. En cada nación que yo he entrado, cada ciudad, prácticamente, yo he tenido que pelear con esa cosa. Dicen: “Es telepatía mental.” Yo diría: “Saquen de aquí a todo el que crea que es telepatía mental. Saquen a todo el que sepa algo de mí. Tráiganme los pacientes.” Decían: “Eso es espiritismo.” Dije: “Entonces si yo por espiritismo gano almas para Jesucristo y conquistando demonios, ¿qué está haciendo usted con lo que usted tiene? ‘Juzgue por sus frutos,’ Jesús dijo: “Usted los conocerá.” ¿Ha visto usted a un espiritista echar fuera demonios? Nunca lo verá. Y eso es correcto. Yo dije: “Jesús dijo: “Por sus frutos los conocerán.” Yo dije: “En los últimos años, por la gracia de Dios, yo he ganado 350.000 almas para Cristo. ¿Qué ha hecho usted?” Un hombre me encontró aquí afuera, y dijo que cierta mujer le había dicho que yo era un —yo era un diablo, y que toda mi obra era hecha por el diablo. Ellos se salieron de la iglesia de aquí y consiguieron un grupo que salieron con ellos, ahora lo rechazan. Yo dije: “¿Qué ha hecho usted? Múestreme su fruto.”

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Comenzó allá abajo, y Dios desarraigó, dijo: “Cada rama que su . . . nuestro Padre Celestial no ha sembrado, será desarraigada.” Cuando yo puse aquel Tabernáculo en la esquina, y arrodillados aquí en un montón de yerbajos gipsosos y viejas malezas de yerbajos pontederiáceas aquí, y esto aquí sobre este púlpito esta mañana, cuando era una laguna, Dios dijo: “Yo lo bendeciré.” Y aquí se pararon los falsos profetas por allí: “Yo veía los automóviles moviéndose para adentro y para afuera. Y yo veía las piedras rodando una de las otras.” Eso era veinte años atrás, y hoy todavía se mantiene firme, y seguirá navegando, porque fue construida aquí sobre sudor y lágrimas de oración y promesa de Dios. Y prevalecerá. “Sobre esta roca edificaré Mi Iglesia y las puertas del infierno no prevalecerán en contra de ella.” Ahí lo tiene usted. Sí, señor. No le pongan atención a lo que ellos dicen: Yo he aprendido mi lección al escuchar a personas que no saben de lo que están hablando. Yo escucho a una sola Persona, ese es Dios Todopoderoso. Jesús dijo: “De aquí en adelante pide en Mi Nombre, y pídele al Padre en Mi Nombre, y lo recibirás.” Yo lo creo. Tom Hardin de Tejas, yo . . . nosotros aunque esto . . . yo estaba tratando de soltarme de ello; está ardiendo mi corazón. Ellos llegaron allá, y yo lo tengo en mí, no, está en mi pequeño libro de texto, de una cosa. Dijo que yo era un . . . la FBI estaba allí para exponerme. Que yo era un —un —un diablo. Y unos ministros, un grupo de ellos allí en algún lugar allá sobre Houston. Yo llamo el nombre del lugar en un minuto. Sacó un gran grupo de los caminos y los pasó de esta manera alrededor del auditorio, y dijo que yo era Simón el hechicero, echando fuera demonios como Simón el hechicero, hechicería. Así que aquella noche aquí, había un par de muchachas que habían sido sanadas allí, y ellas hablaron de su sufrir y todo, dijo: “Bueno, usted quiere . . .” Yo dije . . . “Ellas dijeron que iban para su hogar, ellas tenían miedo.” Dijo: “El FBI recogió al Hermano Branham.” Y esta muchacha fue puesta en su mente correcta cuando usted vio aquella visión sobre ella. “Y yo no . . . yo —yo


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empollaron, el pato era la cosa más graciosa que las gallinas jamás habían visto. Así que la gallina cloqueaba a los polluelos y los pequeños polluelos llegarían, pero el pato no conocía ese lenguaje. Así que un día la vieja gallina lo guió por detrás del granero, había un riachuelo abajo detrás del granero. Cuando ese pequeño pato percibió esa agua, él salió hacia el agua tan ligero como él pudo. La vieja gallina dijo: “Cloc, cloc, cloc.” Y el pequeño pato dijo: “Jonk, jonk, jonk,” El iba hacia el agua. ¿Por qué? El era un pato por naturaleza. Cuando él percibió agua, hermano, él no se podía alejar de ella, por cuanto él era un pato. Y yo digo hoy, cualquier persona que verdaderamente quiere encontrar a Dios, ellos no dejarán que ninguna iglesia les dicte las cosas que no puedan vivir . . .?. . . Si usted tiene la naturaleza de Dios en usted, usted se irá a santidad, usted irá a cosas correctas, usted se parará en la cosa correcta, usted pensará la cosa correcta, y usted vivirá la cosa correcta. Si usted es un pato, a usted le gusta el agua. Si usted es un cristiano, usted amará a Cristo. Si usted es un diablo, a usted le gustan las cosas del diablo. Si usted es un buitre, usted come cosas muertas. Si usted es un puerco, usted comerá estiércol. ¿Dónde está usted hoy? Bien. Usted reclama estar AQUI arriba comiendo las cosas del Señor, entonces bajar y juntarse con el diablo, hay algo mal con eso. Deje de oír a esos espíritus, son diablos. No importa si usted tiene que pararse solo. Hombres y mujeres que subieron hacia algo, cercanamente, han sido hombres y mujeres quienes se pararon solos con Dios. Mire a Miqueas cómo se paró allí, no como la roca de Gibraltar, sino la Roca Eterna, él dijo: “Yo no hablaré nada, a mí no me importa lo que diga el seminario, a mí no me importa lo que diga mi congregación, a mí no me importa lo que diga el rey, si me cortan la cabeza yo sólo diré lo que Dios ponga en mí boca para decir.” El estaba correcto. El estaba correcto. Y hoy, hombres y mujeres, no ponen atención a lo que el mundo tiene para usted, qué súplica tiene eso, qué clase de inoculación de bacteria ellos tienen. Ellos reclaman que si usted se une a la iglesia, usted estará bien. Esa es una falsa inoculación. ¿Por

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ello. No importa cuánto estremecer y brinco usted puede hacer con este positivo, usted tiene que tener el cable de tierra para encender la luz. Amén. Ha notado usted que usted al poner un cable de tierra aquí en esto, y cada pedacito regresa aquí abajo a la subestación, directamente hacia la tierra. Y todo el tiempo que el hombre se arraiga y se cimienta en la Palabra de Dios, se arraiga y se cimienta en este Calvario, allá donde el ancla y el poste amarrado de Dios fue traído allí para encender la Luz del Evangelio. Amén. ¿Sabe usted lo que sucede? Personas en estas grandes frías morgues formales, aquí afuera pretendiendo que están predicando el Evangelio. Un pequeño predicador vino a mí ayer, pertenece a una de las grandes denominaciones que hay en la tierra hoy, fuera de los católicos, él dijo: “¡Hermano Branham, yo estoy enfermo y cansado!” Dijo: “Ellos van a hacer que todos nosotros predicadores nos pongamos togas y que nos volteemos nuestros cuellos, y —y predicar ciertas cosas y ellos nos dirán que prediquen cada cuarto.” El dijo: “¡Yo no lo puedo soportar más!” El dijo: “¿Qué debo yo hacer? ¿Debo yo comenzar a predicar el Evangelio?” Yo dije: “Hermano, mientras usted esté con esa denominación, respétela, usted diga sólo lo que les debe decir. Pero camine hacia su presbítero o su superintendente de estado, y diga: “Señor, yo he nacido de nuevo del Espíritu de Dios. Aquí está la Palabra de Dios. Si usted me deja predicar ESO, yo me quedaré en su iglesia. Si no, me iré. Déselo a otra persona.” Esa es la manera de hacerlo. No esté buscándole la vuelta. No sea negativo. Salga y diga lo que es. Bien. El dijo: “Hermano Branham, ¿cree usted que yo tendré una congregación?” Yo dije: “Donde esté el Cuerpo muerto, allí se juntarán las Aguilas.” Eso es correcto, ellos seguirán. Como el hombre una vez que empolló algunos polluelos. Ahora, esto no es un chiste. Yo no lo digo para chiste. Yo lo digo para un punto. El iba a echar sus gallinas, y él no tenía suficientes huevos, él puso un huevo de pato debajo de una. Y cuando todos


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hice mal, probablemente yo causé el problema.” Yo dije: “Oh, usted está espantada.” Yo dije: “Usted ha visto a Dios el Sanador, ¿lo ha visto?” Yo dije: “Vigílelo como un Guerrero. Vigílelo en Batalla, vea que grande es El. ¡Vea qué grande es Dios como Guerrero en batalla!” Aquella noche yo salí caminado, yo dije: “Cada uno en esto aquí, en mi campaña, Mr. Baxter, mi hermano, y las dos muchachas jóvenes que fueron sanadas allí, aquel ministro dijo hoy que usted estaba incluido con ellos, yo quiero que ustedes salgan del edificio.” Ellos salieron del edificio. Yo dije: “Ahora, yo tengo un pedacito de papel aquí lo cual el custodio del auditorio salió y quitó miles de ellos de los automóviles, alquiló a pequeños niños mejicanos para que los consiguieran.” Yo dije: “Yo tengo un pequeño certificado aquí que dice que dice que aquí esta noche, que yo soy Simón el hechicero y voy a ser expuesto por la FBI esta noche.” Yo dije: “Está bien, FBI, yo estoy en la plataforma en el Nombre del Señor Jesucristo, vengan a la plataforma ahora y expónganme. Yo dije: “Si yo estoy haciendo cualquier cosa fuera de la Biblia del Todopoderoso Dios, vengan aquí y muéstrenmelo.” Yo dije: “¿Dónde están ustedes?” Miles estaban sentados allí y todos estaban llorando. Yo dije: “Yo estoy esperando a la FBI. De acuerdo a su papel aquí, ustedes me iban a exponer esta noche.” Luego entonces . . . “Yo esperaré unos cuantos minutos.” Y yo sentí ese Espíritu saliendo. Yo dije: “No era la FBI. Yo no soy un criminal.” Yo dije: “Cada vez que un agente de la FBI venía a mi reunión, ellos eran —ellos eran salvos. Su jefe fue salvo en mi reunión, Capitán Al Ferrar.” Yo dije: “Y, o, y dije: “Ninguno de la FBI hace algo así.” Yo dije: “Lo que es, son dos predicadores que se han vuelto atrás.”Yo miré, colgando allá afuera, y había una cosa grande y negra colgando sobre la audiencia. Yo lo vi moverse hacia arriba de esta manera hacia el segundo balcón. Yo dije: “Allí está sentado uno con un traje blanco, uno con un traje gris.” Ellos se bajaron de esta manera.

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Yo dije: “¡No se bajen! Yo creía que me iban a exponer. Parece como otra persona.” Yo dije: “Ustedes son un par de predicadores que se han vuelto atrás. Ustedes no tienen nada que ver con ello.” Y yo dije: “Ahora, si yo soy Simón el hechicero, y echando fuera demonios con brujería, como ustedes dicen que soy, y ustedes son santos y justos con Dios, vengan a la plataforma. Si yo soy Simón el hechicero, yo caeré muerto. Si ustedes son Simón, y si ustedes son los que están mal, ustedes caerán muertos. Bajen acá ahora, veremos quién está en lo correcto. Pero si usted duda . . .” Ellos bajaron sus cabezas. Yo dije: “No bajen sus cabezas de esa manera.” Yo dije: “Ahora, pueblo, ustedes vean quién está en lo correcto y quién está en lo erróneo. Ellos tienen miedo.” Y allí salieron por encima de allí tan ligero como podían salir. Yo dije: “Oh, yo veo que están partiendo. Posiblemente sea que ellos van a bajar aquí.” Ellos salieron del edificio tan ligero como podían, bajando los escalones. Yo me paré allí y esperé. Yo dije: “Ahora veremos. Deje que vengan a la plataforma. Deje que Dios muestre quién es quién.” Eso es correcto. Yo dije: “Si yo soy falso, entonces Dios lo mostrará falso. Si no lo soy, Dios siempre testificará por lo correcto.” Como fue en Houston cuando aquel predicador bautista dijo que yo era un demonio y así sucesivamente, vea usted lo que sucedió cuando el Angel del Señor bajó. Ahora, ¿sabe usted lo que sucedió? Nosotros nunca le vimos más. Esa noche el Señor mostró una victoria allí en el Hardin que todavía se está hablando. ¿Ve? “Yo el Señor los he plantado. Les echaré agua de día y de noche, no sea que alguien los arrebate de Mi mano.” Vengan ahora, muchachos, ¿iría usted al piano pronto? Deje que las personas enfermas o el que esté enfermo venga alrededor del altar ahora mismo. Nosotros tenemos como diez minutos aquí y los vamos a libertar de cada poder demoníaco que cuelga sobre usted, en el Nombre del Señor Jesús. “Yo les dí Mi Nombre y autoridad.” ——(Parte en blanco en la cinta —Ed.) Al emprender esto, porque yo creo que Dios me ha ordenado


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dicen: “Bueno, ahora, yo creo que un hombre . . . Yo creo en tal cosa como gritar en la Biblia.” Eso es correcto, esa es la Verdad. Ellos hicieron una denominación de ello: “Cuando usted grita, usted lo ha recibido. Pero no lo ha recibido.” El próximo se levanta, dice: “Hablando en lenguas.” Eso es correcto, eso está en la Biblia. “Pero cuando usted habla en lenguas usted lo tiene.” Pero muchos de ellos hablaron en lenguas y no Lo tenían. ¿Ve? Eso no es. No señor. Muchos de ellos dicen: “Bueno, nosotros tenemos profecía.” Mire a estos profetas aquí con cuernos en su cabeza, brincando para arriba y para abajo y profetizando. Y Miqueas dijo: “Ustedes, todos, están mintiendo.” Amén. Bien. Dios no viene así. Dios viene al corazón sincero que viene contrito, espíritu quebrantado. “El que va y siembra con lágrimas, sin duda que regresará regocijado. Trayéndose la preciosa gavilla.” Amén. Capte eso bien amigo. Tanta demonología, demonios obrando en seres humanos. Vigile dónde lleva su fruto. Vigile qué clase de vida la persona vive. Vea de la manera que ellos actúan, vigile la manera cómo ellos actúan, vea cuáles son sus motivos. Es sólo tan imposible . . . Y si yo le mencionara que la única manera, aquí están carros alineados aquí arriba; Cielo está en Charlestown; usted no puede caminar, la única manera que usted puede ir es por automóvil; y cada hombre que cruza la línea tiene que traer cinco galones de gasolina. Aquí está su automóvil, pero si él no tiene gasolina él no lo puede manejar. Bueno, eso es exactamente, perfectamente, de la manera que es en el Cielo. Si usted muere sin Dios, a mi no me importa como usted vivió y cuantos automóviles usted haya construido, si el Amor de Dios no está ahí para llevarlo hacia el Reino de Dios, usted está perdido. Hay un negativo y un positivo. No importa cuánta corriente positiva fluya por aquí, si no tiene un cable de tierra, nunca dará luz. Eso es correcto. Usted tiene que tener raíces, fundado en el amor de Dios. ¡Oh, hermano! Cuando ese negativo y positivo se juntan, usted tendrá una Luz, el buen viejo-antiguo Evangelio de Luz que se extiende de costa a costa. Usted nunca lo obtendrá sin

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y fume su pipa, deje que se tome su licor, deje que tenga su fiesta de barajas. Ese es su placer. No lo culpe. Regresando a su hogar y todo, cansado y agotado, el quiere algún placer. La cosa para usted hacer es vivir tal vida santa que tú le puedas provocar a él que el Evangelio aguanta diez mil veces más que esa diversión. —(Parte en blanco en la cinta. —Editor)— ¡Cualquier otra cosa, y decir que usted tiene que hablar en lenguas antes de recibir el Espíritu Santo!, ¡Sin sentido! . . . ?. . . Saque eso de su sistema y venga a la Palabra de Dios. El dijo: “Arrepentíos cada uno de vosotros y bautícense en el Nombre de Jesucristo para remisión de sus pecados, y recibiréis el don del Espíritu Santo.” Si Dios no cumple Su Palabra El no es Dios. Amén. Echado fuera, sed lleno. Amén ¡Whew! Yo amo eso, esa es Su Palabra. Dios lo dijo. Eso es correcto. Y cuando Dios lo dijo, Dios tomará cuidado de ello. Bien. Todas las preparaciones que usted haga, todas las veces que pueda ir a la iglesia . . . Es como aquí abajo en la fábrica de carros donde ellos fabrican un gran grupo de carga, o un grupo de carros de pasajeros. Yo trabajaba ahí. Y ellos toman y fabrican sus grandes coches y todo, y ponen madera dura, adornan con caoba alrededor y todo tan bonito, puesto allí en la vía, era tan muerto como clavo de muerta. Allí estaba puesto el motor, ningún vapor en él, ella sólo puesta allí. Lo que se necesita hoy es algún fuego en la caldera. Lo que se necesita hoy es algún vapor. Lo que se necesita hoy, la iglesia, hervir . . . La cosa más caliente hirviendo que hay para hervir el pecado de tu vida, es amor. Y si ustedes no se pueden amar uno al otro, ¿cómo van a amar a Dios Quien nunca han visto? Amor cubrirá multitud de pecado. Enamórese de Dios, entonces ustedes se amarán uno al otro, entonces usted amará la iglesia, usted amará la Causa, usted amará todo lo que es santo, y usted se alejará de las cosas del mundo. Espíritus seductores saliendo y diciéndole a las personas ESTO, AQUELLO o lo OTRO. “Ellos tienen que hacer ESTO, ellos tienen que hacer AQUELLO.” Es porque las denominaciones se han levantado, y ellos tienen una pequeña revelación que ellos


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para hacer esto, yo lo creo. Si yo pudiera hacer que las personas lo crean. Entonces si esto no es satisfactorio, entonces yo creo al Señor . . . Yo tengo un vellón delante e El. Yo regresaré sólo recto con la visión, sólo uno o dos o tres o hasta donde yo pueda llegar en una noche. Ustedes han estado en mis reuniones, cada uno de ustedes nunca han visto uno de esos tiempos sino lo que era perfecto. Le diré dónde está su pecado. Eso es lo único que puedo hacer. Sanidad ya es de usted. Lo único que eso es, hay pecado. Quizás algo que usted está haciendo, su vida no está bien, ni tampoco algún —algún demonio se está aguantando de usted, que no lo deja creer. Ahora, usted sabe, si no lo es, Jesús, dijo algo erróneo: “Todas las cosas son posibles para aquél que cree.” ¿Es eso correcto? Entonces éso permanece dentro de usted, no en Dios. Si yo digo aquí, si yo dijera: “Aquí puesto, si usted quiere, necesita un dólar.” Yo creo que yo tengo uno. Ahora bien. Si hay un billete de un dólar que, que ya está provisto para el hombre necesitado. Si lo es, es suyo si lo viene a buscar. Yo no tengo que hacer nada más sobre ello. Yo lo he puesto allí. ¿Es eso correcto? Bueno, Jesús, cuando El murió, El lo sanó a usted. El fue herido por sus transgresiones, con Sus llagas fuimos nosotros sanados. Pretérito. Eso depende de usted ahora. Venga y búsquelo, es suyo. Yo creo. “En Mi Nombre echarán fuera demonios.” Yo creo eso. El me dejará hacerlo delante de ustedes, yo creo que El me dejará hacerlo en esta mañana. Crean ustedes eso. Bien. Sólo deje que los últimos aquí se muevan para atrás de esta manera, yo quiero bajar allí para poder orar, y mientras yo oro y echo fuera el espíritu maligno, para que las personas puedan regresar a sus asientos alrededor de esa pared si lo desean, hermanos. Múevase así de esta manera. Ahora mire aquí, ¿De qué vale estar jugando y creyendo a mitad cualquier cosa? ¿Dónde está la señora que estaba en la silla de ruedas? Usted, señora. Que . . . de qué vale . . . Jesucristo la ha sanado. Ciertamente, El lo ha hecho. Yo le vi conducir a alguna —alguna mujer hace algún rato, yo creo, el hombre sentado aquí,

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guiando quizás a su esposa allí, ella estaba lisiada o algo. Dama, no hay necesidad de usted estar en esa condición. Una dama dijo que ella tenía una pequeña niña aquí, una pequeña niña, que algo andaba mal con ella, y todas clases de enfermedades y cosas, sorda, muda y ciega, lo que sea. No hay necesidad de hacer eso. Inclinemos nuestras cabezas. Yo quiero que usted crea. Oh Dios, nuestro Padre Celestial yo vengo a Ti en esta mañana como tu siervo. Señor, yo he predicado la Palabra. Es Tu Palabra, no es la mía. Yo sé que Tú estás aquí para sanar a las personas, para hacerlas que tengan buena salud. Yo creo que Tú lo harás, amado Dios. Y yo oro a Ti para que tengas misericordia, Señor, notando que estas visiones, lo único que ellas pueden hacer es revelar los pecados de las personas. Pero, Señor Dios, concede que el Espíritu Santo haga eso ahora mismo. Que Tú puedas revelar en cada corazón el obstáculo, si hay algún pecado en sus vidas, entonces que pueda ser perdonado ahora mismo, Señor, yo oro a través del Nombre de Jesucristo. Y que este grupo aquí hoy sea como aquél de la otra noche, que haya una perfecta liberación en cada uno de ellos. Que ellos puedan ser sanados esta mañana, regresen el miércoles por la noche de nuevo, contentos, gritando y regócijandose. Concédelo, Padre. Ahora, sobre toda la autoridad de Tu Palabra, yo voy hacia adelante para echar fuera demonios, para cumplir Tu Palabra, en el Nombre de Jesucristo. Ahora, satanás, yo sé que tú estás sujetando a estas personas, obscuro, tenebroso, espantosa cosa sujetando sobre ellos, diciendo: “Bueno, yo haré un intento.” ¡Pero yo quiero hablar con usted! Yo me paro en el lugar de ellos, entre ellos y Dios esta mañana. Yo me paro como el siervo del —del Todopoderoso Dios. Mis pecados se han ido a través de la Sangre de Jesucristo, por la fe Divina que yo tengo en El como el Hijo de Dios. Y yo reclamo, y la Biblia reclama primero, y yo hablo como la Biblia, y El despojó todo poder que alguna vez usted tuvo, en el Calvario. Y la Biblia reclama que Sus discípulos han de llevar esta comisión que El tenía aquí en la tierra, hasta el fin de la edad. Yo soy Su discípulo, hasta entonces esta mañana yo vengo como un representante, un


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diablo. ¡Vea cómo predicadores caen con tales cosas como esa! Lo que necesitamos es regresar al Libro —Guía, regresar a la Palabra de Dios. Está en la Palabra de Dios, la bendita antigua Biblia. Dice: “Bueno, yo tengo temor de ir allí, hermano Branham. Yo tengo temor de que perderé algo de mi gozo.” ¿Qué le sucede? Usted no sabe lo que es gozo. Y yo dije: “Yo no condeno al borrachón por salir y emborracharse. El está todo de mal humor. El no sabe dónde está. Se levanta por la mañana, el tiene la morriña, algo que lo sobra, sale y se consigue dos o tres botellas de cervezas, y sale y se consigue ron, y toda esa clase de cosa. La pequeña chupadora de cigarrillos se sienta para atrás y fuma, y lo hecha por su nariz como si fuera un tren de carga. Eso es todo. Yo no lo culpo; eso es todo el gozo que él conoce. Eso es de todo lo que él conoce. El es un puerco por naturaleza. Vergüenza le debe dar a usted que profesa ser un cristiano y depender de tales cosas por gozo, cuando el Evangelio del Espíritu Santo es la gran Fuerza motriz de gozo de todos. El Evangelio del Espíritu Santo es la perfecta intoxicación para cada hombre que tiene mal humor. Usted toma un trago del Evangelio de Jesucristo, sed lleno del Espíritu Santo, usted está borracho hasta que deja este mundo; Amén, gozo indecible y lleno de gloria. Ahí está la estimulación constante. Es una intoxicación constante, borracho día y noche. Amén. Esa es la Palabra de Dios. La iglesia vino adelante, adopta todo. Ellos tienen que tener una pequeña fiesta donde todos salen para la playa y tienen recreación. Una fiesta de barajas, se juntan para tener compañerismo. Eso es correcto. Tener un baile algún día en la casa de un miembro, algunas veces en el sótano de una iglesia. Un baile, adoptar, tratando de conseguir algo para satisfacer. ¿Qué es lo que sucede con los grandes grupos de puercos para comenzar? Si ellos alguna vez llegan a tener contacto con Cristo, ellos tendrán tanto gozo, esas cosas serán muertas como la media noche para ellos. Evangelio, borracho en el espíritu, gozo indecible y lleno de gloria. No condene un pecador; ten misericordia de él. Déjelo que siga

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es correcto. Y él fue poseído de un demonio. Un hombre fue poseído de demonio y se desgarró las ropas. No le podían poner ropa a él. ¿Ve usted lo que quiero decir? Son espíritus seductores. Su iglesia lo soporta a usted. Su predicador tiene miedo a decir algo, miedo a que usted no pague más sus diezmos. Esa es la razón. Ese es el problema. ¡Dios mio! ¿Cómo le va usted a predicar a un grupo de halcones a menos que no los haya convertido y enderezado con Dios para comenzar? Ellos están metiendo su nariz en algo muerto todo el tiempo. Lo que usted necesita es un vaciamiento, y un viejo-antiguo avivamiento barriendo de costa a costa y poner hombres y mujeres bien con Dios. ¡Sueltense de las cosas del mundo! Sueltense de ese suave —pedal mezquino de predicación, Amén, y predique el Evangelio. ¡Dios lo dijo! “Si usted ama al mundo o las cosas del mundo, el amor de Dios aún no está en usted.” Personas pueden brincar para arriba y para abajo, y gritar toda una noche y hablar en lenguas como derramando guisantes sobre el cuero de una vaca seca; caminar hacia afuera la próxima mañana con bastante temperamento para luchar con una sierra circular, salir hacia afuera y decir algo en la iglesia que causa a la iglesia entera desbaratarse. ¡No es nada en el mundo sino seductores, espíritus de demonios! Quiera regresar a la Palabra, donde Dios es pureza, santo. Amén. ¡Eso es correcto! ¡Espíritus seductores contra la Palabra de Dios! Aquí estaba un hombre no hace mucho que tomó una mujercita católica . . . ? . . . En el tiempo de su menopausia, le sale en las manos y en la frente. Si un buen predicador del Espíritu Santo . . . Yo pensé. Ese hombre tenía una botella de esa cosa de sus manos, saliendo a ungir personas con eso. ¡Whew! ¡Misericordia! ¡Es anticristo! A mi no me importa si sangre sale de su nariz o de su cabeza o donde quiera, hermano, ninguna sangre tomará el lugar de Jesucristo el Hijo de Dios. Esa es la única Sangre de la cual yo sé algo. Ella hubiese tenido aceite derramándose de una mano y vino de la otra, pero si usted la usa en cualquier forma de religión es un


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representante de Jesucristo, en Sus acciones, yo he sido enviado en Su lugar. Y siempre que yo llame sobre la persona, su poder se romperá, y la persona estará libre y saldrán de aquí y se sanarán. Yo lo reto en el Nombre, en el Nombre de Jesucristo y en Su Sangre yo me paro. Y tú, suelta a cada persona en la cual yo ponga mis manos. No en mi santidad, no en mi nombre, lo cual mi nombre es nada para usted, mi santidad es nada, yo no tengo ninguna. Pero usted no reconocerá mi nombre, pero usted reconocerá a Jesús, y tú vas a salir, y yo te estoy hablando. Yo me voy, y yo reto. Y si tú tratas de sujetar a alguna de estas personas, que la maldición de Dios venga sobre tí. Que tú puedas salir, quita tu mano de estos cristianos. Tu mano sucia y enfermiza, afligida e inválida, y enfermando a estas personas, y dándoles enfermedades, tú, quita tu mano, En el Nombre de Jesucristo. (Parte en blanco en la cinta —Editor.) . . . de Jesucristo el Hijo de Dios, yo le pido que se levante en Su Nombre, regresando a su hogar perfectamente bien, para glorificar a Dios. Levántese, y que las personas puedan levantar sus cabezas. Levanten sus cabezas, amigos. Alabanza. —(El hermano Branham y la congregación gritan y alaban a Dios, —— Parte en blanco en la cinta). Dios Todopoderoso, Autor de Vida Eterna, Dador de cada buen don, envía Tus bendiciones sobre este hombre que está parado aquí, y conociendo que esta es la única oportunidad de su vida para ser un hombre normal otra vez, con sus caderas y miembros todos en esta condición, sobre estas muletas él ha caminado, él quiere volver a su hogar para testificar de la gloria de Dios, él condujo muchas millas para llegar aquí. Y Padre, yo oro que esta sea la hora que él diga en su corazón: “Según otros pueden, yo también puedo. Y Tú moriste por mí, para liberar, igual que hiciste para otros.”Concédelo, Padre. Así que tú, demonio, que has lisiado su cuerpo, yo vengo en el reto de fe contra ti, para retarte en este duelo. Yo te conjuro por Jesús, el Hijo de Dios, salgas del hombre. Sea reverente en todo lugar, eso levanta al hermano. Ahora, un momento, eso es cosa de su . . . Sólo no se impaciente, amigos, la

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Presencia del Señor está cerca. Sólo sean reverentes como posiblemente puedan, adentro y afuera. El pobre hombre ha venido aquí, él nunca jamás andaría sin muletas si Dios ahora no le ayuda. Esto será . . . El vino aquí, él estará peor de lo que jamás estuvo si él no es sanado. Ellos probablemente tengan que despedirlo si él no es sanado, porque satanás hará . . . si él pudiera hallar suficiente poder para derribarlo, él lo echará al suelo si él puede. Pues ahora él tampoco le derribará, o Dios lo libertará, lo hará perfectamente completo. Ahora, todos ¿cuántos de los que están aquí creen que Dios me envió para libertar a este hombre esta noche a través de Su Hijo . . .? Está bien. Ahora seamos bien reverentes, mantengan sus cabezas inclinadas. ¿Lo cree usted con todo su corazón, señor? Cree usted que va a coger estas viejas muletas y echarlas en el automóvil e irse a su casa y llevarlas sobre su hombro mañana y caminar arriba y abajo por las calles de su ciudad, testificando para Dios. Usted no ha . . . La vida que a usted le queda, hermano, entréguela a la gloria de Dios. ¿Le servirá a El? ¿Le servirá a El? Usted ha estado pensando sobre eso recientemente de todos modos, ¿no es así? Ha estado pensando de caminar más cerca. El otro día él dijo: “Si yo . . . Dios sólo me sanará, yo caminaré más cerca a El.” Y eso es correcto, usted dijo eso. Entonces, otra cosa, cuando usted era . . . Yo veo que usted estaba en el automóvil recientemente, y usted estaba hablando con alguien concerniente a aquellas cosas. Había un hombre sentado en el asiento del frente mientras que usted estaba sentado atrás. ¿Es verdad eso? Usted venía calle abajo pasando sobre una pequeña cuesta virando a la derecha cuando usted estaba hablando de ello. Eso es verdad. Yo no estoy leyendo su mente, señor, eso es Dios ahora. Ahora usted comienza a sentir lo que yo estoy hablando. Ahora es la hora de su liberación. Dios Todopoderoso, ahora mientras el poder de Tu Presencia está aquí, parado aquí para libertar a este hombre, oh Dios Eterno, Autor de Vida, envía Tus bendiciones sobre él mientras yo lo bendigo en el Nombre de Tu Hijo. Concédelo, Señor, a través de


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IGLESIAS USTED PERTENEZCA, hasta que su alma no se convierta! Hermano, eso está pasado de moda, pero eso se reducirá y pondrá desespero en su alma. ¡Correcto! Trata de meter su mano, él tiene que tener a alguien que lo dirija cómo meter su brazo. Entonces cuando él mete su brazo en su pequeña chaqueta, él sabe que está bien. Esa es la manera que es con todo cristiano nacido de nuevo. Cuando él verdaderamente entra en Dios, él vela su vida con la Palabra de Dios y él reconoce que está alineado con cada pedacito de Ella. El tiene paciencia, gentileza, quietud, mansedumbre, poder, fe, amor, gozo, paz. El no es abatido como el mar en problemas, él no está procurando de cualquier cosa pequeña. El no está brincando aquí ni para allá como una boza en un mar embravecido. ¡Está preparado! Su corazón es puro, sus pensamientos son puros, sus intenciones son puras, su alternativa es correcta, y él sabe que está alineado con la Palabra de Dios. Y tiene Amor Divino, pureza en su corazón por todo hombre y mujer. El tiene . . . Y las cosas, las cosas del mundo están muertas para él. El no las quiere más. Pues, usted no podría hacer a una muchacha llena del Espíritu Santo ponerse ropas impías y salir allá para nada. No señor. Ahora, no hay necesidad de ir y decirle que ella está mal, porque ella no le creerá a usted, porque eso es todo lo que ella conoce. Ese es su gozo. La mujer que se pone esas pequeñas cositas para salir en la tarde justamente cuando el hombre llega al hogar, me dicen que están cortando la grama en el patio. Así que, ¿y me dices que eso es correcto? Mujer, yo no quiero decir que usted —usted es maligna, yo no quiero decir que usted es inmoral, pero usted no se da cuenta, hermana, que un espíritu inmundo la tiene agarrada a usted. ¿Para qué lo haría usted? Usted tiene suficiente sentido para saber que no es más frío. Es más caliente. Hay un espíritu inmundo. Ud. dice: “¿Yo? ¡Yo, yo fui a la iglesia!” Nabucodonosor era un hombre grande. Pero porque se puso arrogante, Dios le dio el espíritu de un buey y lo dejo comer yerba por siete años, y sus uñas crecieron como algunas de estas mujeres por aquí alrededor. Eso

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puede culpar . . . Un pecador es un pecador no trate de reformarlo, no trate de decirle ESTO, AQUELLO o lo OTRO. El es un pecador para comenzar. El es un puerco para comenzar. El no conoce nada diferente. Si él va al cine, y él va en domingo, y él va a juegos de pelota y él hace todas estas cosas, él es un pecador para comenzar. Su naturaleza es como la de un puerco. El viejo puerco mete su nariz en un cubo de estiércol. y se come todos los granos y todo, bueno, es sólo un puerco. No puede usted culparlo ¡El es un puerco! Y es de la misma manera con los pecadores ¡Pero cuando usted se va y se llama a sí mismo cristiano y mete su nariz con ellos, entonces usted no es mejor que él, pero, usted es peor! ¡Salid de en medio de ellos, suéltense del mundo! ¡Vayanse, y reciban a Dios! ¡Vayanse! ¿Cómo se suelta usted? Tantas personas están preguntando hoy, dicen: “Bueno, hermano Branham, ¿cómo se suelta usted?” Yo se que usted ha oído mucha teología sobre eso. “Sueltese.” Muchas gentes se consumen en sudor tratando de “soltarse.” mucha gente viene y dice: “Voy a irme en un ayuno de cuarenta días para hacer algo.” ¡Usted no necesita un ayuno de cuarenta días! Usted necesita soltarse del mundo y de todas esas cosas diabólicas, y recibir la Palabra de Dios en su corazón. Usted tiene que ser enseñado a como hacer eso. Usted no lo hace con brincar para arriba y para abajo, tampoco lo hace con un ayuno de cuarenta días. Usted lo hace con un corazón rendido al Todopoderoso Dios. Como un pequeño niño. Yo note un pequeño niño allá atrás, su madre tratando de ponerle su pequeña chaqueta esta mañana, él quería meter su pequeño brazo en la manga. El no podía poner su brazo allí, él no sabe como. Usted tiene que guiar su pequeño brazo. El quiere meter su brazo allí, pero él sólo está tocando a su alrededor. El nunca llega a la manga. El sabe que no está en la manga. Y SEPA USTED QUE USTED NO ESTA BIEN CON DIOS, CUANDO AUN USTED ESTA MURMURANDO, MINTIENDO Y HACIENDO OTRAS COSAS. ¡USTED NO PUEDE ESTAR BIEN CON DIOS, A MI NO ME IMPORTA A CUANTAS


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Jesucristo. Tú, demonio, que has lisiado a este hombre, mi hermano, él ha hecho su confesión. Sus secretos han sido dichos. El está aquí ahora para caminar. Tú no lo puedes sujetar más. El quiere glorificar a Dios. Yo vengo a retarte, en el Nombre de Jesucristo, por un don de sanidad ministrado a mí por un Angel, yo te conjuro por Jesús el Hijo de Dios, salgas de él. Allá salió. Mantengan sus rostros inclinados, por todas partes.


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luego usted puede tener todas las emociones que quiera y todos lo creerán. Jesús dijo: “Ustedes son la sal de la tierra. Si la sal ha perdido su sabor, así que no es buena para nada, ser echada fuera y hollada bajo los pies del hombre.” Si usted solamente es sal, no sería bueno; pero si usted tiene el sabor en ello, usted se ha salado y el mundo estará sediento. Usted póngase salado ellos estarán sedientos. ¡Oh, vaya! Espíritus seductores saliendo hacia adelante, demonios disfrazados. Mire, estamos en los últimos días, estamos en el tiempo final. El mundo está casi listo para llegar a su cabeza, como un absceso, algunos eran, que van a explotar unos de estos días y el centro se salió de ello. Ha llegado a ser sucio. No hay ungüento que lo pueda sanar. Ellos han rechazado el —el suero. Ellos han rechazado el tratamiento. Usted encuentra que crece un absceso aquí, y si usted no toma penicilina o algo para desbaratarlo, u otra cosa, seguirá creciendo hasta que revienta. Eso es lo que el mundo ha hecho, empezó no hace mucho, han ido bajando. Ellos empezaron con grande idea, espíritus falsos entraron y comenzaron a decirles a las gentes ESTO, AQUELLO, o lo OTRO. Nos hemos dividido en novecientas y algunas diferentes denominaciones, cada una con diferentes ideas. Ellos dicen: “¡Nosotros creemos ESTO, punto! Eso es todo lo que creemos.” Ellos no pueden dejar entrar el Espíritu Santo. No pueden tener la manera correcta. Dios tenía un grupo de gentes que podían gritar, y entonces todos tenían que gritar. Tenían algunos que podían hablar lenguas, entonces todos tenían que hablar en lenguas. Todos se pusieron así hasta que vino a ser (¿qué?) Absolutamente contaminados con espíritus seductores, seduciendo a las personas para hacer estas emociones cuando no hay ningún Dios en ello. Luego se van y viven cualquier clase de vida que ellos desean, y luego le llaman “cristianos.” Y el mundo se sienta y los mira y dicen: “Bueno, mira para ahí, yo soy tan bueno como lo son ellos.” Como dije yo la otra noche del puerco, del pecador. Usted no

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o predicadores, él estaba tan seguro que estaba correcto, él mismo se hizo un par de cuernos y danzó alrededor, e hizo una gran conmoción, él iba a empujar los otros ejércitos asirios fuera del país. ¡Pero fue una mentira! La Palabra de Dios había dicho diferente. Amén. Vea, usted puede estar muy bien emocionado, si usted tiene la correcta clase de emoción detrás de ello, la correcta clase de emoción moviendo su emoción. David danzó delante del Señor, y su esposa se mofó de él. Y Dios miró abajo desde el Cielo, dijo: “David, tú eres un hombre conforme a Mi Propio corazón.” Pero sus motivos estaban correctos, su vida estaba rectamente detrás de ello. Pues sólo porque podemos ser emocionales no quiere decir que somos salvos. Porque vamos a la iglesia no quiere decir que somos salvos. No crea a esos espíritus seductores. Un verdadero Espíritu de Dios, la Verdadera Palabra de Dios es la Verdad de Dios, lo cual es la Simiente de Dios, producirá a Dios en su vida, sea piadoso, santo, puro. ENTRE MUCHAS PERSONAS ENCONTRAMOS DONDE EMOCIONES Y ASI SUCESIVAMENTE, ALLI LLEGAN A SER CHARLATANES Y MURMURADORES Y TODA CLASE DE COSA IMPIA. HERMANO, ESO ES ACIDO SULFURICO EN LA IGLESIA, ES PODER DEMONIACO. ESPIRITU DE HOMBRES Y MUJERES QUE SE METEN UNOS ENTRE OTROS Y TRATAN DE EMPUJAR AQUELLO ESTO NO ES CORRECTO Y ESTO NO ES CORRECTO, Y AQUELLO NO ES CORRECTO. SI USTED LO SIGUE HACIA ABAJO, NUEVE DE DIEZ VECES ES LA MISMA PERSONA FORMANDO EL ALBOROTO QUE NO ESTA CORRECTO. AMEN. DIOS ABORRECE DISCORDIA ENTRE HERMANOS. Sea reverente, sea santo, ame a Dios, párese al lado de El. Y mientras usted conozca que su vida está profundizándose con la Biblia, con pureza de corazón, pureza de pensamiento, amor hacia tu hermano, tratando lo mejor para construir para el Reino de Dios, y haciendo esas cosas, vistiendo correctamente, viviendo correctamente, hablando correctamente, yendo a lugares correctos,

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predicación del Evangelio del Señor Jesucristo! ¡Si demonios le despojarían sus ropas! Nunca lo hubo sino una persona en la Biblia que alguna vez desgarró sus ropas de ellos, y ese era un hombre que era poseído de demonios. Y él viene en una forma suave hoy, como si él es social, como si él es bueno. Como aquél compañero la otra noche: “Es un tiempo frío, y ellos lo harán a usted tener más frío si te quitaras tus ropas.” Hombre caminando hacia arriba y abajo en el patio, medio desnudo, y mujeres de igual manera. Porque han llegado a eso de no respetarse, que no hay respeto; igual que los perros unos con otros. ¿Qué es lo que sucede? Yo no estoy tratando de herirlos. Yo sólo les estoy tratando de decirles que es posesión de demonios, y ustedes están oyendo a espíritus seductores que les están diciendo: “Eso está bien,” pero eso es una mentira. Un grano de trigo solamente producirá trigo. Si usted es un cristiano, usted no hará eso. Usted no puede hacer eso. Usted no lo podrá hacer. Usted tiene una fe intelectual y dice: “Hermano Branham, yo creo la Biblia.” Su vida dice que usted no lo cree. Amén. Espíritus seductores contra la Palabra de Dios. El sabía donde estaba parado, Miqueas sabía, él tenía la Palabra de Dios. El no era un hombre muy popular. Nadie lo quería porque decía la Verdad, con todo, ellos amaban estos predicadores. Ahora, otra cosa que ha tomado lugar. Yo creo y pienso que cualquier hombre que tiene una experiencia con Dios, o una mujer, está a punto de recibir una pequeña emoción. Yo lo creo. Eso es correcto. ¿Pero sabe usted qué? Ellos han adoptado emocionalismo por el bautismo del Espíritu Santo. Ellos sólo consiguen mucho alboroto, y no hay nada ahí. Usted viva sólo tan santo como usted vive alborotoso, entonces usted estará bien. Emociones es algo que está bien, el ejercicio del cuerpo para poco aprovecha. Pero espíritus seductores se han metido dentro de los grupos de personas santas, y ellos los tienen a ellos para sólo apoyarse de que: “Porque ellos pueden gritar” o “porque ellos pueden danzar, porque ellos pueden hacer emoción.” Ese viejo compañero allá abajo, el jefe de todos esos profetas

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Moisés, a este pensamiento, que él la azotó con un martillo para hacerla tener sentido. Poner en la mente de la iglesia. No importa cuanto usted sustituya, cuán grande congregación usted pueda conseguir, cuán bien usted canta sus canciones, cuán bien su congregación profesa, que tanto usted tiene ESTO, AQUELLO, O LO OTRO, usted puede azotar a cualquiera de ellos, ESO nunca tomará el lugar de Vida hasta que Cristo baje en la forma del Espíritu Santo en la iglesia y darle una nueva experiencia y ser nacidos de nuevo. Eso nunca tomará el lugar de la Palabra de Dios. La Palabra de Dios se mantiene sola. Miqueas tenía la Palabra. El conocía la Palabra. El tenía la Palabra escrita, él la tenía también por su visión. El conocía lo que Dios había dicho en Su Palabra, él conoció lo que Dios había dicho en la visión, ambos se juntaron. El conocía que era la Verdad, por lo tanto él no tenía miedo. Pero estos espíritus seductores, mire lo que han hecho hoy para hacer más miembros de la iglesia para ser mejores miembros de la iglesia, es bajar las barreras de toda la vieja —antigua enseñanza del Espíritu Santo. Le permitió al hombre tener fiestas sociales, uno con el otro, afuera en el sótano, afuera en donde ellos juegan juegos. Eso nunca ayudará a substituir el cuarto de arriba donde ellos estaban orando por el Espíritu Santo. Ellos permitían a las mujeres juntarse y decir chistes y cosas y tener muchas tonterías que no hay nada en ello. Eso nunca tomará el lugar de una reunión de oración. Mujeres, la manera que ellas salen y visten hoy. Es una desgracia. Nuestra observación que el hermano Neville hizo, dijo: “La pobre gente americana,” dijo: “Ellos han mandado todas sus ropas a Ultramar.” Eso es correcto. Ellos están caminando alrededor en sus ropas interiores. Ellos . . . Eso es correcto. Ellos tal vez se las dieron a los misioneros, porque el misionero, la gente y los paganos de otras ciudades la están usando. Estas personas están haciendo sin ellos, parece que les gusta. Bueno, yo le diré: ¡Hay algo que ha sido permitido, y eso es la

REINO FÍSICO Sábado; (Tarde) Junio 6, 1953 Connersville, Indiana, U. S. A

Mi primera Biblia fue la naturaleza. Yo aprendí de Dios a través de la naturaleza. Y yo podía pescar. ¡Vaya! Yo amaba la pesca. ¿Y a ti te gusta pescar, hijito? Si te gusta la pesca, y amas a tu madre, tu vas a llegar a ser un buen muchacho. Y aún mi conversión, no sacó todo de mí. Pero un día me hallaba de pesca en las montañas. Ahora, esto solamente para beneficio de este muchachito, (y yo estaba pescando en las montañas), y para los otros pequeños niños, por supuesto, que están sentados alrededor. Y yo estaba pescando truchas. Y, oh, es tan maravilloso en la primavera. Yo sigo hacia adelante así y siempre. . . hay trucha en la próxima cueva, ustedes saben, así como, y solo alabando al Señor y teniendo un gran tiempo, gritar algunas veces, y tiro mi línea. Yo creo en gritar. Amén, seguro que sí, porque yo. . . Hay muchos osos en el país allá en New Hampshire. Yo tengo un pequeño campamento allí donde yo pesco. Y yo tenía una pequeña y vieja tienda puesta allí, una pequeña y vieja tienda de campaña en la cual yo había estado viviendo. Y el oso negro es el más dañino que hay. Así que una vieja mamá osa y un par de pequeños cachorritos se habían metido allí, y habían hecho estrago de mi tienda de campaña Ahora, ¿qué cree usted que yo debí haber hecho a ese oso, niñita allá atrás del pelo rojo, allá atrás? Yo debí haber ido tras él, ¿no debí? Pero aquí esta lo que ella hizo. Ella entró, ella desgarró mi tienda y ella revolcó todo, y se comió toda la comida que yo tenia allí, y ella lo estaba haciendo bien. Entonces cuando subí, ella se fue. Y ella le gritó a sus cachorros y un pequeño cachorro se fue corriendo con ella. Y el otro no corría, él se sentó allí. Tenía su

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espalda hacia mí, de esta manera, y él estaba haciendo algo. Y yo no tenía nada en mi mano sino una pequeña y vieja hacha de mano con la cual yo estaba picando con unos ancianos allá abajo. Bueno, ella corrió como de aquí para, oh, creo que hasta donde está el poste del teléfono allá afuera, y ella se sentó. Ella le gritó a este pequeño oso, y él no le puso ninguna atención. El se mantuvo sentado. Yo pensé: “¿Qué estará haciendo ese pequeño?” Y yo me le acerqué un poco. Y yo tenía miedo de acercármele, temía que me arañara. Pues —pues yo —yo no podía ver un árbol, y yo sé que ella podía subirlo también; entonces, y yo no quería acercármele mucho porque yo conozco la naturaleza del oso. Pues, yo me le acerqué un poco más. ¿Y saben ustedes lo que sucedió? Ahora, yo amo los “pancakes” —(pankeca) —Editor) ¿A cuántos les gusta la pankeca? ¡Oh, muchacho! Oh, muchos de ustedes también, yo los vi a ellos alzar sus manos. A todos nos gustan las pankecas, y a mí me encantan, y a mí me gusta echarle miel sobre ellos. Siendo un bautista, ustedes saben, eso es lo que nos mantiene derechos, ustedes saben, es la miel, ustedes saben. Así que, y oigan, yo no las rocío, yo ciertamente las bautizo. Yo verdaderamente se la derramo encima donde quedan mucho mejor y espesos. Yo solamente no rocío un poquito aquí y allá. Yo verdaderamente se lo derramo por encima, lograr llenarlos todos con miel. Y entonces, ustedes saben, yo tenía un recipiente de miel allá afuera, un recipiente de medio galón de miel, y los osos son muy amadores de miel. Entonces este pequeño oso se metió allí, y le quitó la cubierta del recipiente de miel, y él estaba sentado así, con este pequeño recipiente de miel debajo de sus garras así. El tenía el . . . y él no sabía comérsela como usted se la comería, ustedes saben, entonces él metió su pata adentro y la lamía de esta manera, y la lamía. Y él se volteó para mirarme, y sus viejos pequeños ojos estaban todos cubiertos, y su pequeña barriga estaba tan resbaladiza como pudiese, con miel. El estaba sentado allí metiendo su mano y lamiendo miel así, tan fuerte como él podía lamer.


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ella, fe lo tiene; UNA FE INTELECTUAL, y LA OTRA ES UNA DIRECTA REVELACION DE DIOS. Nunca tomará lugar. Nosotros estamos tratando, pero estamos haciendo todos estos sustitutos. Nosotros estamos construyendo grandes iglesias en vez de enviar misioneros. Otro sustituto. Jesús nunca ordenó a alguien a construir una iglesia. Eso nunca fue ordenado en la Biblia. Nosotros pusimos seminarios, ellos han dejado que eso tome el lugar de misioneros. Nosotros . . . Jesús nunca nos dijo que construyéramos seminarios. Ellos están bien. Educación, tratando de tomar eso para tomar su lugar. Nunca lo hará. La comisión de Jesús fue: “Vayan a todo el mundo y prediquen el Evangelio a toda criatura,” para el tiempo final. Así que todos esas sustituciones que tenemos, nunca tomará el lugar de lo genuino, donde ellos tendrán una experiencia. ¡Un sustituto! Yo tuve mi primer dolor de muela, tuve que sacarme una muela. Esta mañana yo tenía un diente postizo puesto allí. Yo no puedo casi hablar. Nunca tomará el lugar de uno verdadero. ¡No señor! ¡Oh, vaya! Usted puede tomar un hombre y vestirlo, hacerlo de madera, tiza, lo que usted quiera, y arreglarlo tanto; él no tiene sentidos, ni consciencia, él nunca tomará el lugar de un verdadero hombre. Ni aún tampoco una conversión falsa que viene a usted y dice: “Yo me he unido a la iglesia, yo trataré de hacer mejor.” Eso nunca tomará el lugar del genuino pasado de moda, enviado de Dios, conversión del Espíritu Santo que hace a un hombre diferente en su corazón. Ello no lo puede hacer, porque no hay vida en ello, no hay nada para darle Vida. Aquí no hace mucho tiempo atrás yo vi un gran artista que había traido esto, escultor, yo quiero decir, que hizo esta figura de Moisés. No puedo mencionar su nombre ahora, él es un artista griego. Le costó su vida. Y cuando él lo tuvo donde él pensó que era tan perfecta, él se emocionó tanto de la imagen de Moisés hasta que él le azotó la rodilla de ella, y dijo: “¡Habla, Moisés!” ¡Parecía muy real! Era parecida tan perfecta hasta que se parecía tanto como

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contrario a la Palabra de Dios. Hoy, ministros de sus congregaciones le están permitiendo a sus personas jugar cartas en sus iglesias, muchos de ellos. Ahora, no es solamente los católicos, hay muchos protestantes que hacen eso. Lo que ellos tratan de hacer es una cosa sustituyente. Ellos tratan de adoptar a algún plan nuevo. Ellos tratan de adoptar educación para tomar el lugar del Espíritu Santo. Usted nunca lo podrá hacer, no importa cuán bien su hombre es educado. Yo pienso que es una buena cosa para él que sea educado, pero si él no tiene el Espíritu Santo con eso, su educación no será nada de buena. Educación nunca tomará el lugar del liderato del Espíritu Santo. Amén. Note, ellos, en lugar de ESTO, ellos han tratado de adoptar apretón de manos por la experiencia del viejo tiempo que habíamos tenido. Hoy la Iglesia ha llegado a ser moderna. Ellos caminan hacia arriba y dan su mano derecha de compañerismo, y esa es la manera que ellos más o menos lo hacen. Pero nunca tomará el lugar del pasado-de-moda banco de lamentos donde pecadores eran llamados, arreglaban con Dios. ¡Correcto! Hoy ellos están tratando de tomar el lugar de los diezmos de Dios. Ellos están tratando de adoptar algo, ellos están tratando de hacerlo diferente. Ellos van abajo y tienen juegos de bingo en la iglesia, juegan lotería. Lotería nunca tomará el lugar de los diezmos de Dios. Cenas, vendiendo sábanas, rifas para recoger dinero para pagar diferentes deudas, nunca tomará el lugar Eterno de los diezmos de Dios y ofrendas, eso nunca lo hará. Pero con todo estamos tratando de hacerlo. ¿Qué es? Son espíritus seductores bajando, tratando de sustituir algo por la Palabra de Dios. Dios no tiene sustituto por Su Palabra. Es Eterno y para siempre. Dios no tiene nada para sustituir fe. Fe no tiene sustituto. Esperanza nunca tomará el lugar de fe. Fe es sola, permanece sola. Nuca tomará el . . .Esperanza nunca podrá tomar su lugar. Esperanza es la sustancia de las cosas que se esperan, la evidencia de las cosas que no se ven, o es la fe, mejor dicho. ¿Ve? Esperanza es una cosa, fe es otra; esperanza espera por

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Oh, vaya, yo pensé sobre una buena reunión antigua del Espíritu Santo, cuando tenemos el recipiente abierto, metemos nuestra mano en el jarro y empezamos a lamer. Así continuamos, ustedes saben, solamente lamiendo. ¿Y saben ustedes lo que más gracioso estuvo, no obstante? Después que aquel pequeño oso obtuvo cuanto pudo, él bajó el recipiente, y corrió hacia fuera, ¿y saben ustedes lo que sucedió? La mamá osa y el otro pequeño oso empezaron a lamerle, así, quitándole la miel de encima. Así que, bueno, quizás nuestra reunión sea algo así como en ese orden, yo deseo, para que así podamos contarle a otros, y la Gloria de Dios derramándose sobre nosotros. Muy bien. Estoy tan contento de ver a estos pequeños niños aquí. Me gustaría decirles algo así. Y quizás mañana en la tarde tendremos más tiempo y —y podremos hablar un poquito más. Y estaremos hablando con papá y mamá ahora sobre algo. Y vamos a hablar sobre DEMONOLOGIA. En Salmos 103 del 1 al 3, leemos estos versos. La mayoría de todo ministro y clérigo, o estudiante de la Biblia, los conocen de corazón. Bendice, alma mía, a Jehová, y bendiga todo mi ser su santo nombre. Bendice, alma mía a Jehová. Y no olvides ningunos de sus beneficios. El es quien perdona todas tus iniquidades, el que sana todas tus dolencias.

Yo quiero que ustedes se fijen, allí había un todo: “El es quien perdona todas tus iniquidades, El es quien sana todas tus dolencias.” Ahora podemos inclinar nuestras cabezas por un momento. Ahora, Padre Celestial, te damos gracias en esta tarde, por estar aquí. Te damos gracias por estos pequeños niños que están sentados alrededor, ellos son los hombres de mañana, y mujeres, si hay un mañana, si Jesús se tarda. Y ahora, Padre, nosotros oramos que —que Tú nos bendigas ahora mientras hablamos ahora de Tu Palabra, y del gran enemigo que tenemos: Satanás. Nosotros

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oramos, Dios que Tú nos dejes poner un frente afuera, una unidad mecanizada aquí del poder de Dios, que lo pueda resistir a él esta noche en cada pulgada de su terreno, Señor, y mostrárle que él no tiene de ninguna manera derecho legítimo, que Cristo lo derrotó a él en nuestro lugar allí en el Calvario, cuando El murió, y El despojó principados y quitó a Satanás de todo —todo poder que tenía. Y, Dios, danos sabiduría y entendimiento ahora, para conocer y para explicar a las personas cómo deberían saber cómo ser sanados y derrotar a satanás. En el Nombre de Jesús oramos. Amén. Ahora por unos cuantos minutos vamos ha hablar sobre DEMONOLOGIA. Ustedes oyen tanto sobre demonios. Ahora, mañana por la tarde posiblemente terminaremos. Yo deseaba dos días de esta semana de todas maneras, para predicar sobre esto: Sólo. . . o dos días para servicios por la tarde, para hablar sobre ésto. Ahora, la primera cosa, ¿qué es un demonio? Usted oye tantas personas hablando sobre un demonio. Bueno, ahora “un demonio, diablo,” todo viene de una palabra, y en el inglés es llamado “atormentador.” Alguien que atormenta es un diablo, un maligno. El, digamos. . . Ahora, la Biblia hoy es, para muchos, para muchas personas, es algún libro antiguo de allá que abuelo y abuela leyeron, o algo así, “no hay mucho en cuanto a éso, es para la gente mayores, y así sucesivamente.” Pero éso está mal. Es para todos. Y demonios son atormentadores que nos atormentan. Ahora, hay demonios que entran al alma del hombre y eso es, en la fraseología, eso sería —eso sería en el . . . yo digo esto, aunque el demonio que entra en el alma es algo que atormenta el alma. Muchas veces usted puede ver a una persona tal vez con locura. Ahora, puede ser aún una persona convertida, llena del Espíritu Santo, y aún estar totalmente loco. ¿Ven? Eso es verdad, eso no tiene nada que ver con el alma. Es un atormentador, vea, algo que los atormenta. Ahora, todas las enfermedades, tenemos que encontrar primero


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El dijo: “¡Oigan aquí!” El dijo: “Nosotros somos los siervos de Dios. Nosotros somos cuatrocientos y tú eres uno.” Pero Miqueas dijo: “Yo te diré donde está tú problema.” ¡Amén! Dijo: “Yo vi una visión.” ¡Amén! El dijo: “Y yo vi a Dios sentado en Su Trono. Y yo vi las huestes de los cielos parados alrededor de El. Y nosotros sabemos que la Palabra de Dios ha pronunciado maldiciones sobre este hombre de la manera que él ha hecho.” Tú no puedes bendecir lo que Dios ha maldecido, como tampoco el diablo maldice lo que Dios ha bendecido. Es un asunto individual, no importa qué pobre o qué estúpido, qué ignorante. Lo que Dios ha bendecido, es bendecido, lo que Dios ha maldecido es maldecido, nada más para diferenciar lo que es correcto y lo que es incorrecto. Miqueas conocía bien y correcto que ese no era el Señor que estaba con aquellos predicadores. BUENO, ¿QUE ERA LO QUE LE SUCEDÍA A AQUELLOS PREDICADORES? Note lo que ellos hicieron. Ellos habían estado vestidos lo mejor. Ellos habían sido alimentados lo mejor. Ellos se habían reunido en sus fiestas y así sucesivamente, y sus alianzas, hasta que el lugar de Dios llene . . . donde ellos sólo conocían su teología. Y la Biblia dice que Miqueas, cuando él estaba mirando a la visión, él dijo: “Dios dijo: ¿A quién podemos conseguir para que vaya allá y engañe a Acab?” Y un espíritu mentiroso dijo: “Yo iré allá abajo y tentaré a Acab a través de esos predicadores, para causar que Acab vaya allá, de manera que traigo la Palabra de Dios para cumplirse.” Ahora, ¡hoy tantas personas están oyendo! (Ahora, escuela Dominical, yo le amo). Mire, tantas personas están oyendo a espíritus seductores en vez de tomar la Palabra de Dios. Espíritus seductores en vez de tomar la Palabra de Dios. Espíritus están en el mundo. Ellos son demonios, y ellos salen a lugares y ellos se meten entre hombres, MINISTROS, ellos se meten entre los MIEMBROS DE LA IGLESIA, ellos se meten entre la GENTE BUENA, y ellos le causan a ellos entrar en desilusión; y ellos dicen cosas, y hacen cosas, y enseñan cosas, y practican cosas que es

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comenzaron a llamar. Y ellos dijeron: “Sí, tú vuelve hacia allá en paz. El Señor es contigo.” Y entonces después que casi cuatrocientos habían dado testimonio que ellos deberían ir hacia arriba en paz, con todo, Josafat conociendo . . . ¿Lo entiende usted? Vea, abajo en el corazón de ese hombre justo hay algo que le dijo que había un cadillo en el adobo en algún lugar. Algo estaba mal. Acab dijo: “Ahora tenemos cuatrocientos aquí, y con un acuerdo, cada uno de ellos dicen: “Ve, el Señor es contigo.” Pero Josafat dijo: “¿No tienes otro más?” El dijo: “Bueno, ¿qué necesitamos con otro más, después que tenemos cuatrocientos de los mejores hombres educados en el país?” Todos están diciendo: “¡Vayan!” Eso era intelectual. Pero abajo en el corazón de Josafat él sabía que había algo mal. Ahora, él dijo: “Tenemos otro más, él es Miqueas pero yo le odio.” Dijo: “El siempre está diciendo algo maligno, y dar chasquidos cuando no tiene ningún negocio de ser, y él está degradando las iglesias y todo.” Dijo: “Yo le odio.” Dijo: “Ve búscalo y vamos a ver lo que él dice.” Y cuando Miqueas subió, él dijo . . . Ellos dijeron: “Ahora, mira, tú le dices la misma cosa al resto de ellos.” El dijo —el dijo: “Yo sólo . . .” ¡Oigan esto! “Yo sólo diré lo que Dios dice.” Amén. “No importa lo que su profeta dice y lo que ESTO dice, y lo que tu iglesia dice, y lo que ellos dicen. Yo diré lo que Dios dice. Dios puso en mis labios y yo diré lo que El dice.” Lo que necesitamos hoy es más Miqueas que dirán lo que Dios dice. Note, así que ellos lo llevaron allá, y él dijo: “Dame esta noche.” Así que esa noche el Señor se encontró con él, y él regresó la próxima mañana. Cuando los dos reyes se sentaron en las puertas, él dijo: “Sube allá.” Dijo: “Sube allá,” pero dijo: “Yo vi a Israel como ovejas desparramadas sin pastor.” Así que este predicador, todo vestido, caminó hacia allá y le dio en la boca, y dijo: “¿Para dónde se fue el Espíritu de Dios cuando salió de mí?” Dijo: “Usted sabrá cuando regrese.” ¡Oigánlo!

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que todas las enfermedades vinieron del diablo. Dios no es el autor de las enfermedades. Ninguna enfermedad viene de Dios. Dios algunas veces permite que satanás ponga enfermedad en usted como un látigo para traerte de nuevo a la Casa de Dios, cuando usted le desobedece a El. Pero enfermedades, en su principio, vino del diablo. ¿Una persona creer que Dios nuestro Padre Celestial sea el autor de alguna cosa como enfermedad y muerte? Bueno, no, El no es, nunca ha sido, nunca será. Dios permite la muerte. Como un escritor dijo: “Todo lo que la muerte puede hacer, Dios ató los arneses al carruaje y nos hala a la presencia de Dios, un creyente.” Pero la palabra muerte significa “separación.” Jesús dijo: “El que oye Mi Palabra y cree al que Me envió, tiene Vida Eterna.” Y El dijo: “Yo Soy la resurrección, Vida, el que cree en Mí, aunque esté muerto, vivirá, y todo aquel que vive y cree en Mí, no morirá eternamente.” Y nosotros envolvemos los cuerpos de cada uno sobre la impiedad de nuestro sepulcro. “Pero él nunca morirá.” Ahora, si ustedes vigilan cuando El habló de Lázaro, El dijo: “Lázaro duerme.” Los discípulos, hombres como nosotros, ellos dijeron: “Oh, si él duerme, sanará. El quiso decir tomar un descanso,” lo que ellos pensaron. Pero El vino y le habló a ellos en su lenguaje, El dijo: “El está muerto,” lo que usted cree. Pero dijo: “Yo voy a levantarle, levantarle.” ¿Ve? ¿Ve? Cuando usted. . . Muerte significa “separación.” Ahora, si algunos de ustedes hubiesen, uno de sus familiares muere o algo, él es, si él es convertido, no están muertos. Ellos están muertos de un punto de vista humanístico. Pero ellos solamente están separados de nosotros, pero ellos están en la Presencia de Dios. Ellos no están muertos, y ellos no pueden morir, es imposible para ellos morir. Jesús dijo: “El que oye Mi Palabra, y cree Al que Me envió, tiene Vida Eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.” Entonces él no puede morir. Cualquier cosa que sea inmortal, Eterno, no puede perecer. Es Vida imperecedera. El la

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tiene porque Dios se la ha dado. Y no —no meritorio, es —es —es incondicional, Dios se la da a él. Dios llama. Ningún hombre puede venir a Dios, excepto que Dios le llame. Jesús dijo: “Ningún hombre puede venir a Mí, excepto Mi Padre le llamare, le atraiga.” ¿Es eso verdad? Entonces es Dios en todo. Posiblemente mañana en la tarde entraremos un poquito más en eso, porque yo quiero llenar esto sobre la enfermedad para que ustedes lo puedan ver. Había un tiempo cuando nosotros fuimos germinados en nuestro bisabuelo. Ustedes saben eso. El Doctor lo sabe. Bueno, ustedes también, ustedes lectores de la Biblia. Ustedes saben cuando el germen de vida empezó en tu bisabuelo para llegar a ser un germen, y vino a salir a través de tu abuelo, y luego a través de tu padre, luego en tu mamá y a donde tú estás ahora. Eso es verdad, la Escritura aun enseña eso. Aquí está la Escritura para usted si la quiere. Yo creo que dice que Leví pagó diezmos cuando él estaba en los lomos de Abraham, lo cual era su bisabuelo. ¿Es eso correcto? Pero, vea, el germen vino a ser allá atrás. Pero sus almas fueron hechas desde antes de la fundación del mundo, cuando Dios creó al hombre en Su semejanza; Espíritu de hombre; no al hombre en Su semejanza, pero hombre en Su Propia imagen. ¿Ve? Y entonces él los hizo a ellos varón y hembra antes que El tuviera al hombre en el polvo de la tierra. Desearía que tuvieran una oportunidad esta tarde y tomar nuestro tiempo y volver a lo mismo nuevamente. Solamente vean cómo Dios. . . Ahora, está entre línea, pero cuando usted ve, viene a estar en la línea. ¿Ve? Como Dios allá en el principio, lo que El hizo allá atrás, y cómo El se mudó abajo a la tierra y cómo hizo al hombre a Su imagen , y después Dios se volteó y fue hecho a la imagen de hombre para redimir al hombre. Ahora, cuando Dios hizo al hombre a Su imagen, él era un hombre-espíritu. Y, había sido, no había hombre que labrase la tierra. Entonces El creó al hombre del polvo de la tierra. Ahora, cronologista y así sucesivamente, y estas personas que exploran y consiguen estos huesos y así sucesivamente, y creen en la


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Y ahí es donde está el mundo hoy. Ahí es donde América está parada hoy. Ahí es donde las iglesias están paradas hoy. Nosotros construimos algunas de las mejores iglesias que jamás han sido construidas. Hemos tenido algunos de los escolares mejores pulidos que jamás hayamos tenido. Hemos enseñado algunas de las mejores teologías, y así sucesivamente, y aprendemos a cantar como ángeles, pero todavía hay una flojedad en algún lugar. Hay una flojedad, porque se han ido tras la doctrina del hombre y espíritus seductores en vez de regresar a la Palabra de Dios. Ellos tratan de copiar las cosas como las del mundo. Ellos trataron de ponerle luces brillantes sobre ello, como Hollywood. Aquí el otro día una famosa denominación de los Hombres del Evangelio Completo de Kansas City, oh, suplico su perdón, en Denver, en la convención, están construyendo una iglesia de un millón de dólares. ¡Y miles de misioneros esperando por cincuenta centavos de esa misma denominación, para llevar el Evangelio a los impíos! Lo que necesitamos hoy es un misionero-dispuesto, enviado-de-Dios, un avivamiento nacido-del-Espíritu-Santo, donde tendrá el celo de Dios para propulsarlo allá lejos en las junglas y hacer algo por Dios, en vez de construir grandes finas iglesias y tratar de alumbrar el prójimo. Yo prefería adorar en una misión que haya sido barrida fuera de una cantina y tener la libertad del Espíritu Santo y el amor de Dios quemando en los corazones, que sentarme en la más grande catedral que tengan en el mundo y ser sujetado con los dogmas y doctrinas de hombres. Lo que necesitamos hoy es un avivamiento estremecedor y regresar a la Verdad, regresar a la Palabra de Dios nuevamente. Ahora, cuando ellos salieron allá afuera, después de un rato Josafat como que volvió en sí, él dijo: “Tener que . . . Bueno, vamos a consultar al Señor sobre esto.” El dijo: “Está bien.” Acab lo hizo y él mandó y consiguió cientos, cuatrocientos buenos adiestrados predicadores. Y él los llevó allá arriba y dijo: “Estos son todos profetas.” Y así que ellos entraron en su encantamiento, y ellos

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(Amén) hasta que el canal del Espíritu Santo sea perfectamente uno con Dios, ¡lo que tomaría lugar! ¡Si el hombre y la mujer se pudiesen alinear, donde con la libertad de su corazón, con fe de lo más profundo! Mucha gente vienen al altar para que se ore por ellos, ellos tienen fe intelectual. Ellos confiesan sus pecados y se unen a una iglesia por fe intelectual. Ellos lo creen en su —su mente. ellos lo creen porque la han oído. Ellos lo creen porque ellos conocen que es la mejor política. Pero eso no es a lo que Dios mira. El no mira a tu fe intelectual. El mira en el corazón, donde en el interior Dios . . . Y cuando viene del corazón, las cosas son posibles entonces, su confesión se encuentra con su vida, su vida habla tan fuerte como su confesión. Pero cuando su confesión dice una cosa y su vida vive otra, hay algo mal en algún lugar. Eso es porque usted tiene una fe intelectual, y no una fe de su corazón. Y eso muestra eso afuera, AQUI, es un conocimiento de Dios; pero adentro, AQUI, hay un demonio dudando. “Yo creo en Sanidad Divina pero no es para mí.” ¿Ve? “Ah, puede ser, pero yo no lo creo.” ¿Lo captan? Por fuera, usted dice: “Sí.” Por dentro su consciencia dice: “No.” Esa misma cosa científica probará que eso era correcto, probándolo. Note cuando estos reyes, antes de encaminarse, ellos hubieran . . . Antes que Josafat hubiese hecho una alianza con Acab, él primeramente debió haber dicho: “Vamos a orar y veremos lo que es la voluntad del Señor.” Dame un PREDICADOR, dame un CRISTIANO, dame una AMA DE CASA que sea cristiana, dame un CAMPESINO o un OBRERO DE FABRICA, que pondrá a Dios primero en todo, y te mostraré un hombre que será exitoso a pesar de todo lo que el diablo le pueda poner sobre él. ¡El busca primero a Dios! Tenemos que tener primero . . . ¡Pero ellos no lo hicieron. todos ellos estaban desacreditados porque Acab tenía un gran pulido reino y había hecho muchas cosas, y tenía sus grandes galas, y su oro y su plata, y había sido un gran hombre exitoso, y con todo un incrédulo!

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evolución. . . Yo creo en la verdadera clase de evolución. El hombre se desarrolla de sí mismo, pero no del todo de una célula. No, señor, porque un —un pájaro ha sido un pájaro desde que Dios lo hizo un pájaro, y el mono ha sido mono, hombre ha sido el hombre. Eso es verdad. Ahora, yo estuve hablando a un doctor hace un tiempo atrás en Louisville. El dijo: “¡Pero, Reverendo Branham!” Yo estaba hablando de cómo los nativos de Africa, cómo es que ellos comen, sólo vaya abajo del . . . oh, algunas de las cosas más terribles que usted jamás haya visto, ¡cómo es que ellos comen! Toman cosas que están contaminadas, y con gusanos adentro, sólo voltearlos alrededor, gusanos y todo. No hace ninguna diferencia para él. ¿Ve? Ellos dijeron. . . Toma cualquier cosa, lo que sea no hace ninguna diferencia. El dijo: “Pero, hermano Branham, esas personas no son humanas.” Yo dije: “Oh, sí, ellos son. Seguramente que son humanos.” Yo dije: “Lo más cerca a un ser humano, en la línea de la bestia, es el chimpancé. Y tú has probado por cuatro mil años de hacer que el chimpancé hable, y no lo puede hacer,” Yo dije: “Porque él no puede pensar. El no tiene nada con qué pensar.” Oh, usted puede enseñarle cosas pequeñas como a un caballo, ji y jo —(relinchar —Editor)—, o ponerse los lentes, o fumarse un cigarro, o balancearse en una bicicleta, montar a caballo, o algo de esa manera, pero es igual que ji y jo a un caballo, o a un perro, o algo así. Yo dije: “El es un animal.” “Pero usted déjeme ir a la parte remota de Africa, a la tribu más salvaje que ellos tienen, y esa es la pequeña tribu del campesino.” Y yo dije: “Probablemente su tátara-tátara-tátaraabuelo nunca vio a un hombre blanco o nada. Lo único que él sabe, él ni aún sabe cuál es su derecha y su mano izquierda. Lo único que él sabe es comer, él come lo que pueda conseguir, si es carne humana, cualquier cosa a él no le importa, con tal de que pueda comer. Pero déjame tomarle de cinco años de edad, y a los quince años de edad él hablará buen ingles y tendrá una buena educación. ¿Por qué? El tiene un alma. Dios le hizo a él un ser humano y él

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tiene tanto derecho de oír el Evangelio, aunque sea una vez, según nosotros tenemos el derecho de predicar alrededor de aquí por toda América a las gentes una, y otra vez, y mendigar persuadiendo y todo. Deja que él lo oiga una vez, y vigílelo correr y gritar hacia el altar rápidamente.” ¿Ve? ¡Sí, Señor! Y así es como mi corazón está, hermano, hoy, cuando pienso de Africa, y esas pobres pequeñas manos negras levantándose, diciendo: “¡Hermano Branham, una vez más acerca de Jesús!” ¡Oh, misericordia! Hay algo en mi corazón que cava y quema. Tan pronto como yo pueda reunir bastante dinero, yo iré allá también, eso es lo que yo hago con cada centavo que recibo, todo, Dios lo sabe, aparte de lo que yo puedo comer. Y muchas de las personas me dan la ropa. Y escasamente lo que yo puedo obtener para vivir, o tan cerca como yo pueda, lo pongo todo en un fondo misionero, lo cual el gobierno ha preparado, yo ni aun pago impuesto de esto. Hasta que reúna tres o cuatro, cinco mil dólares, y los llevo allá al otro lado, y predico el Evangelio a las personas que yo sé que en aquel día tendré que dar cuenta. Y yo sé que tendré que dar cuentas. Yo solía, cuando yo entraba a una ciudad y tenía una grande reunión atrás cuando ellos tenían mucho dinero, y ellos tenían grandes campañas y miles de dólares, yo se los daba a la Cruz Roja y así sucesivamente. Ahora, ahora, no es que le esté tirando a ellos, pero viajando por la calle en un carro de cuatro mil dólares, con botones de diamantes puestos, fumando un cigarro, y quinientos dólares a la semana del dinero que las personas enfermas. . . ¡No, señor! ¡No es posible! Y en esto, tan pronto usted sale de la ciudad, ellos dijeron: “Santos rodadores,” y todas esas cosas, y burlándose, y degradando la religión la cual nosotros respaldamos. ¡No, señor! Yo tomo esa responsabilidad, y delante de Dios que es mi Juez, yo lo pongo en la obra del Evangelio allá, y así yo sé que en aquel día. . . cuando tendré que dar cuenta por mi mayordomía, es dado correctamente. Eso es exactamente correcto, porque me doy cuenta que como trato a las personas así trato a Dios. Mi actitud hacia usted es mi actitud hacia Cristo y la actitud hacia mí es la


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pregunta en su mente, déjela quieta, no la haga. Sólo quédese con eso. Cuando usted comienza a hacer cualquier cosa y si es una pregunta, sea correcta o incorrecta, quédese alejado de ella. No entre en ella, entonces usted sabe que está correcto. Ahora, todas las cosas deben ser consideradas orando plenamente primero. “Buscar vosotros primero el Reino de Dios y Su Justicia, y todas éstas otras cosas serán añadidas.” YO ESTOY POSITIVAMENTE SEGURO esta mañana, si hombres y mujeres solamente pudieran entrar en la posición de donde sus almas, sus pensamientos, sus actitudes sean perfectas en la vista de Dios, eso será una de las más poderosas iglesias que jamás haya existido. Vigile sólo unos cuantos momentos en lo físico. Ahora, nosotros tenemos muchos tiempos, tenemos por años, tenemos lo que llamamos un “detector de mentira.” Usted se lo puede poner en su muñeca, ponerlo a través de su —su cabeza, y usted se lo puede poner allí y tratar lo mejor para hacer que una mentira suene como la verdad, y registrará negativo todo el tiempo, porque el humano no fue hecho para mentir. Mentir es un engaño, cosa dura, cosa maligna. Yo prefería tener un borracho conmigo, cualquier día, que a un mentiroso. ¡Vea, un mentiroso! Y su cuerpo no fue hecho para mentir. No importa cuán pecador usted sea, usted todavía es un hijo caído de Dios. La persona más pecadora que hay en esta ciudad, Dios no intentó que seas un pecador, El quiso que usted fuera un hijo o una hija de El. Usted está hecho de Su Propio carácter. Pero el pecado le ha causado a usted eso. Y no importa cuánto usted trate de personificar y trata de hacer una mentira parecerle correcta, ellos tienen un instrumento científico que prueba que está incorrecto. Usted lo puede decir con toda la inocencia que usted quiera, pero aún registrará negativo; porque hay una subconsciencia abajo en el ser humano, y esa subconsciencia sabe lo que es verdad. Y no importa lo que usted esté diciendo aquí afuera, esa subconsciencia sabe que es una mentira, y registrará fuera de la subconsciencia. Por eso, si un hombre o una mujer pudiesen recoger sus pensamientos, y sus testimonios y sus vidas tan envueltas con Dios

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cánceres y —y diferentes enfermedades que están en el cuerpo humano. Sólo recientemente hasta el cáncer ha sido declarado que es una enfermedad de la cuarta dimensión, que está en otra dimensión. Seguro, es demonología. Toda enfermedad es enfermedad de la cuarta dimensión, el principio de ello. Ahora, pero ahora cáncer en el cuerpo o cáncer en el alma, el demonio puede venir en cualquier lugar. Ahora, hay muchos tiempos y muchas personas con buenos pensamientos que . . . y buenas personas tratan muchas veces de —de depender sobre alguna pequeña teología que tienen, o algo que ellos han sido enseñados desde su niñez y aún así encuentra eso muy profundo en su ser, abajo en su alma, que ellos todavía tienen algo que no está correcto. Usted puede estarlo, aquí esta mañana. Sin duda dondequiera que usted encuentre cristianos reunidos juntos, usted encuentra personas que tienen esos espíritus en ellos, que ellos . . . Es indeseable. Ellos no los quieren. Ellos dicen: “¡Oh, si yo sólo pudiera dejar de mentir! ¡Si yo sólo pudiera dejar de codiciar! ¡Si yo sólo pudiera dejar ESTO o AQUELLO!” Ahora, eso es diablos. Y, ahora, ellos vienen en forma de religión muchas veces. (Pero siendo que es escuela Dominical, es un tiempo de enseñanza, así que vamos a mirar en esto). Ahora, muchas veces ellos vienen en forma de religión. Ahora, en la Escritura, una vez había un hombre por el nombre de Josafat, un gran hombre, un hombre religioso. Y él fue a otro rey el cual era el rey de —de Israel. Y él, Josafat, siendo el rey de Judá. Y él fue donde Acab, el rey de Israel, y ellos se prepararon juntos e hicieron una alianza el uno con el otro para ir a pelear allá en Ramot de Galaad. Y ellos lo hicieron sin primero orar. ¡Oh, si las personas solamente se pudieran dar cuenta! Por eso yo vengo esta mañana y le pido que se acuerden de mí mientras voy a Ultramar. ¡En todas las cosas, oren! Alguien vino el otro día y dijo: “Hermano Branham, ¿cree usted que es erróneo hacer cierta cosa?” Yo dije: “¿Porqué están preguntando?” ¿Ve? Si hay una

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misma cosa, eso es correcto, hacia Cristo. Ahora, ver personas de esa manera, y ver cómo un ser humano luego con un alma inmortal ahora, que no puede morir, no puede perecer, no puede hacer nada sino tener Vida Eterna, que Dios en Su Propia Soberanía se la dio a usted. Y ahora, luego, yo ahora ... Déjeme corregir esto un momentito, o decir algo. Alguien va a salir y va a decir: “El hermano Branham es un calvinista.” No, no soy. Yo soy un calvinista siempre y cuando un calvinista esté en la Biblia. Pero cuando un calvinista se sale de la Biblia, entonces soy un arminio, vea. Yo creo en santidad y creo en calvinista también, pero ambos de ellos, uno corrió en una rama y salió por este lugar, y uno corrió en una rama y salió por aquel lugar y uno corrió en una rama y salió por aquel lugar. Si no hubiera sido por el Libro de Efesios para traerte de nuevo y ponerlo en su lugar correcto donde Dios lo hizo, estuviéramos todos mezclados. Pero ambos tienen una doctrina, pero ellos salen a sembrar cada uno, eso es la santidad y los calvinistas, también los armenios. Ahora, los calvinistas tienen algo que es verdad. Yo creo eso que la doctrina de los calvinistas. . . Yo creo esto, en seguridad, yo creo que la Iglesia tiene seguridad Eterna. Cualquier estudiante de la Biblia sabe eso, porque Dios ya ha dicho que aparecería sin mancha ni arruga. ¿Es eso correcto? Entonces ella va a estar allí. ¿Es eso correcto? La —la Iglesia está segura eternamente. ahora, usted está en la iglesia, es la próxima cosa. SI USTED ESTA EN LA IGLESIA, ESTA BIEN, USTED ESTA SEGURO CON LA IGLESIA, PERO ES MEJOR QUE SE QUEDE EN LA IGLESIA. ¿Y cómo entra usted en la Iglesia? ¿Dándose la mano? No. ¿Escribiendo su nombre en el libro? No señor. “Por un Espíritu somos todos bautizados en un Cuerpo.” Y ese Cuerpo Dios lo juzgó en el Calvario, era el Cuerpo de Jesucristo, y somos bautizados en ese Cuerpo por un Espíritu. Nosotros tenemos seguridad Eterna mientras estamos en el cuerpo de Cristo, nada nos puede separar, nada nos puede tocar. Si usted se va, usted se va por su propia voluntad. Pero tan cierto, si usted está en el Cuerpo de Cristo, tan seguro como Jesús se levantó de

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los muertos, usted también se levantará. Dios lo hizo. Usted no puede pecar. Oh, usted . . . yo puedo ser un pecador en su vista, pero si estoy en Cristo, Dios no lo ve, porque sus pecados están expiados, Su Sangre expió por mis pecados allí. ¿Ve? Yo no puedo pecar. “El que es nacido de Dios no puede cometer pecado, porque no puede pecar. La simiente de Dios permanece en él.” ¿Ve? El —él está dispuesto a que si él comete un error, seguro que él está dispuesto a confesarlo. Si él es un verdadero Cristiano, él lo hará. Si él lo retiene, él muestra que no ha tenido nada en él en primer lugar, eso es correcto, él no tiene nada para empezar. Pero si él es un verdadero Cristiano. . . Ahora, aquí, usted siembra un grano de trigo en la tierra, y siempre será un grano de trigo. Cizaña puede estar alrededor de él, y todo eso, pero será un grano de trigo mientras permanezca. ¿Es eso correcto? Si un hombre, verdaderamente es nacido del Espíritu de Dios, él no está adentro y afuera, para atrás y para adelante, y allá afuera en el mundo y aquí. No, señor. No, no. Tú no eres una cizaña un día y un grano de trigo el próximo día. Dios no tiene eso en el campo. Si, señor, si usted es nacido del Espíritu de Dios, usted es un cristiano desde ese tiempo hasta —hasta que usted se vaya, y entonces usted —usted es inmortal con Dios. Eso es verdad, si usted está en la iglesia. Ahora, ahora vamos a hablar del lado de la muerte. Ahora, ¿cómo puede una persona en ese estado, en esa clase de condición, alguna vez estar enfermo? Porque su cuerpo aún todavía no está redimido. Su cuerpo no está redimido. No importa cuánto, cuán bueno sea usted, y cuán santo, y cuán sano, cuánto Espíritu Santo, que está en su alma. Y su alma no está completa aún. Sólo tiene la bendición, la promesa de Dios, lo cual son las arras de nuestra salvación. Pero ahora si no tenemos las arras de nuestra resurrección, no sanidad Divina, entonces no tengo seguridad o nada que me pruebe que hay una resurrección. 43 Igual que si Cristo no viviera en mi corazón, si tuviera que tomarlo de alguna clase de —de algo sicológico allá atrás, tengo que creer en algún sitio como ese, bueno, entonces yo —yo —yo


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representaba la Iglesia. Y un anillo de boda no solía usarse en el dedo, era usada sobre la cabeza, con nueve piezas de plata en ella. Y cuando una mujer llegaba a ser una prostituta, ellos sacaban una pieza de plata y mostraba que ella era una prostituta. Y así que a esta mujer se le había perdido una pieza, no una prostituta. Pero su esposo había salido, y ella estaba avanzando tratando de encontrar esapieza, para ponerla nuevamente en su diadema, porque cuando su esposo llegara, él conocería que ella fue tomada en prostitución, significaría un rompimiento del hogar y así sucesivamente. Y yo apliqué eso por unos cuantos momentos a la Iglesia, la pérdida de las grandes cosas; y es tiempo para que el Padre regrese, así que tenemos que buscarlas. Y ahora conociendo en la Iglesia y nuestro Tabernáculo . . . Y yo —yo quiero hablar sobre: Espíritus Seductores , el cual sería titulado verdaderamente: Demonología. Usted oye tanto sobre demonios, de estos días, pero usted oye tan poco sobre cómo deshacerse de ello. Todos estamos —estamos conscientes que hay diablos, pero la próxima cosa es como deshacerse de esa cosa. Y ahora están teniendo, por la gracia de Dios, mucha oportunidad para tratar con estas cosas llamando demonios, y encontrándome con ellos en la plataforma y en el diario caminar, y por el cual yo quisiera mirar en la Escritura esta mañana y conocer justamente lo que son esas cosas. Ahora, lo hemos aplicado en servicio de sanidad, siempre al lado de sanidad. Cáncer, tumor, catarata, tuberculosis, todas esas cosas no son cosas naturales, ellas son sobrenaturales y son demonios. La escritura plenamente lo vindica. Pero eso es demonios en el cuerpo, con crecimientos como cáncer, tiene vida en eso, y la vida de eso es un demonio. Así que para la catarata, el esparcimiento de tuberculosis y otras enfermedades, son demonios. Eso es en forma física. Ahora, esta mañana vamos a hablar —hablar sobre demonios en forma espiritual en el alma. Ellos están en el alma de la misma manera como están en el cuerpo. Y nosotros estamos sujetos para admitir que los vemos en los cuerpos de personas, tales como

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pregunta si está listo, o si él lo puede hacer o no.” Bien. “ . . . de nosotros que no renuncia a todas las cosas que posee no puede ser mi discípulo.”

Que el Señor añada ahora Sus bendiciones a esta Palabra. Ahora inclinemos nuestras cabezas por un momento. Nuestro Padre Celestial, Tú Quien conoces todas las cosas, y no tengas en consideración la persona del hombre, porque, ¿qué es el hombre para que cuides de él? Tú hiciste al hombre, y él es como la flor de los campos; hoy él es precioso, mañana él es quitado, echado al horno y se marchita. Y yo oro a Ti, Dios, que seas misericordioso con nosotros hoy y que cada uno de nosotros tome inventario hoy. Estamos aquí como en la casa de corrección. Estamos aquí para aprender y conocer cómo vivir y haz que venga hacia delante de Su Palabra hoy. Oh eterno Dios. Muchos de tus hijos están reunidos dentro, y muchos de ellos han sido Tus hijos por años, pero, como eso, todos regresamos a la Casa de Dios para aprender y para conocer. Y yo, Tu siervo, deseo conocer más de Ti. Y yo oro que Tú traigas la inspiración del Evangelio sobre todos nosotros, sobre Tu siervo, y que Tu Presencia e inspirándonos a través del edificio sea tan grande hoy que nosotros dejaremos, en nuestros corazones, deseando ser mejores siervos Tuyos, para que sea beneficioso para nosotros estar aquí. Oh Dios misericordioso, concede estas bendiciones en el Nombre de Jesús, Tu Hijo. Amén. Que el Señor añada ahora Sus bendiciones a la Palabra mientras leemos. Yo quiero tomar un texto esta mañana sobre: ¿Espíritus seductores o la Palabra de Dios? Ahora, un tema bastante extraño, pero siendo que es en el Tabernáculo . . . Y el pasado miércoles por la noche . . . El pasado domingo en la mañana yo estaba hablando de un pequeño jubileo del Evangelio. Y el pasado miércoles por la noche yo estaba predicando sobre la mujer que tenía la —la diadema sobre su cabeza, o la . . . a ella se le perdió una de las monedas, y ella estaba barriendo la casa y tratando de encontrarla antes que su esposo llegara. Y llegó a saber que aquella mujer era una mujer tipo oriental y ella . . . y

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estaría un poquito escéptico de ello y esa es la razón que allá en Africa cuando ellos llegaban, aquí venían los misioneros, trayendo miles de estos nativos, y ellos cargando pequeños viejos ídolos de barro y todo eso, es porque ellos han oído el lado síquico de la Biblia. Eso es verdad. En mi propia iglesia hay bautistas, metodistas, presbiterianos, todos lo que podían ir allí, pero cuando vieron el poder de Dios llegar en demostración, ¡eso quedó establecido! Entonces conocieron que Dios era Dios. Bueno, ahora, ¿qué empieza esta enfermedad? Ahora, la primera cosa, es un espíritu antes de ser una enfermedad, igual como cuando usted era un espíritu antes que era un ser humano. Ahora voy a tomar al hermano Willett aquí como ejemplo. Hermano Willett, había un tiempo cuando usted y yo éramos nada. Y entonces la primera cosa, Dios nos dio vida. Y vamos a tomar, digamos si yo tomara su cuerpo aquí por partes en esta tarde, usted está hecho de un montón de células, sujetas juntas por átomos. Y ahora, algún día esos átomos serán destruidos si Jesús tarda, usted volverá hacia atrás. Ellas serán igual como fueron en el principio, volver atrás al aire. Pero cuando su espíritu retorna, esos átomos se reunirán de nuevo con este Espíritu y traerá de nuevo a otro hermano Willett igual que ése, sólo más joven, cuando él estaba en su mejoría. Cuando un hombre pasa de los veinticinco años de edad, él encuentra unas cuantas arrugas debajo de sus ojos, y algún pelo gris va entrando, va a suceder, porque la muerte está detrás de usted. Y un día de éstos lo tomará. No importa quién sea usted, lo tomará a usted. Pero gradualmente. . . usted se mete en una esquina aquí, y Dios lo sacaría a usted de esa esquina, y se mete en esta esquina aquí, la muerte casi lo tomará a usted, y aquí, pero después de un tiempo lo tomará. Pero entonces, lo que la muerte puede hacer, toma su completo peaje, entonces después de hacer todo lo que va a hacer. . . Cuando Dios te dio esta vida, y usted estaba en su mejoría como a los veintitres, cuando usted llegue a la resurrección usted volverá exactamente como cuando tenía veintitrés años de edad, o veinticinco, antes que la muerte se haya

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asentado. La muerte tomaría todo lo que puede. Se asentó allí, pero volverá a ser como era antes. Ahora, si cada una de sus —sus células en su cuerpo, vamos a tomarlo de esta manera, usted vino a ser célula tras célula, célula tras célula, y vamos a ponerla aquí aparte en la plataforma, después de cada célula en su cuerpo, usted volverá a su pequeño germen de donde empezó, puede ser visto por el ojo natural. Usted tiene que mirar a través de lentes de alcance. Yo he visto el germen de vida bajo un microscopio. Parece un pequeño hilo. Y la primera cosa que empieza es en la espina, es como un nudo pequeño. Esa es la primera pequeña célula que se acumula encima de la célula. Ahora, si yo pudiera tomar esa única y pequeña célula de la cual cada uno de nosotros venimos, una pequeña célula de germen . . . ¿Qué es un germen? Un germen es una pequeñita, la más pequeña de la célula. Bueno, ¿qué hay después de eso? Ahora, le he tomado a usted de cada pedacito de usted, hasta esta pequeña célula, y todavía no le he podido encontrar. Solamente tengo sus células puestas aquí. Bueno, entonces, la próxima cosa, células de sangre y células de carne, y lo que sean, poniéndolas todas aquí, pero todavía no lo tengo a usted. Ahora, voy hacia ese germen ahora. Bueno, voy a tomar a esa pequeña célula para separarla. Ahora, ¿dónde está usted? Su vida. Y la vida hace la primera célula, lo cual era el germen, pues todo después de la naturaleza, perro tras perro, pájaro tras pájaro, hombre tras hombre, desarrollando células, célula sobre célula, célula sobre células, llegan a ser lo que usted es, un ser humano, desarrollo de células. Ahora, eso fue ordenado por Dios para ser así. Pero, ahora, ¿qué del cáncer? Hablemos de él un poquito. Ahora, Dios le dio a usted su vida. Y digamos, aquí está usted hoy, aquí estoy yo, hay —no hay nada en mi mano, pero puede haber cáncer en mi mano en algún tiempo. Bueno, ¿cómo llegó ese cáncer allí? Vamos a ver lo que es el cáncer, vamos a tomarlo y separarlo. Tomémoslo. Ahora, es un grupo de célula también. ¿Sabía usted eso? Tumor, cataratas, cualquiera de ellas son células. Ellos son sin formas. Algunos de ellos se separan, y algunos parecen arañas, y


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Cabecera. Pero los hombres grandes de la tierra todavía cargan esa piedra alrededor cuando el rey ha de ser inaugurado sobre el tope de esta piedra. Sólo una vieja piedra común puesta en un campo. Bethel era sólo un montón de piedras puesta una sobre otra, y vino a ser la Casa de Dios, el lugar de morada. Jacob dijo: “Este no es otro lugar que la Casa de Dios.” Sólo un montón de piedras puestas unas encima de otra. No requiere las cosas grandes elaboradas. Requiere la simplicidad y fe a creer, es lo que requiere. Eso es lo que lo hace. Ahora, conociendo que el tiempo pronto se va, trataremos de no aguantarlos mucho, conociendo que está caliente y la iglesia está llena. Así que le hablaré por unos cuantos momentos en esta mañana, sobre un pequeño texto aquí que pueda ser . . . Yo confío que los podré ayudar. Y ahora yo, antes de salir de mi hogar, yo apunté tres o cuatro cosas pequeñas. Yo dije: “Yo esperaré y veré lo que el Señor quiere que yo hable cuando yo baje allá.” Yo apunté como seis pequeñas cosas aquí, pequeños temas, y yo escribí uno, lo puse en mi bolsillo así. Yo pensé: “Bueno, cuando yo llegué al púlpito quizás El me diga algo para hablar sobre eso.” Ahora yo estoy tan lejos como yo estaba allá arriba. Así que de cualquier modo yo leeré una Escritura aquí, el Señor nos ayude a entenderla. El capítulo 14 de San Lucas, vamos a comenzar como en el treinti . . . verso 31 del capitulo 14 de San Lucas: “¿O cuál rey, habiendo de ir a hacer guerra contra otro rey, sentándose primero no consulta si puede salir al encuentro con diez mil al que viene contra él con veinte mil? De otra manera, cuando aún el otro está lejos, le ruega por la paz, enviándole embajada. Así pues, cualquiera de vosotros . . .”

Ahora, quiero que usted vigile de cerca. Ahora, primero El dijo, es una parábola, El dijo: “Ahora, viene un rey de camino, y él tiene veinte mil soldados; y ESTE rey se va a encontrar con él, y él sólo tiene diez mil soldados. Así que lo primero, él se sienta y

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la gracia de Dios descanse contigo. Y que el Dios de tu padre, el Señor Jesucristo, siempre te bendiga y haga tu vida una bendición para otros. En el Nombre de Jesucristo yo lo bendigo. Amén. —(Parte en blanco en la cinta.) ¿Aman los niñitos? Algo acerca de los pequeñitos es que cada madre quiere que su hijo sea bendecido. Ahora, esa es la manera que nuestro Padre Celestial es a nosotros los adultos esta mañana. El quiere que cada uno de nosotros seamos bendecidos. El nos presenta a nosotros ante cierta cosa, sólo no las entrega a nosotros, como decir: “Aquí, yo quiero que seas bendecido, Mi hijo.” ¿No es El maravilloso? Así que podemos apreciar un buen Padre Celestial así. Ahora, en las bendiciones de estos pequeños bebés, usted sabe, yo estaba leyendo en la Escritura el otro día, en algún lugar aquí, era en el Viejo Testamento, que una gran cosa que yo —yo ciertamente aprecié poder leer. Aquí está. “Y Natanaél dijo a David: Haz todo lo que está en tu corazón, porque Dios está contigo.” Haz lo que está en tu corazón. Y muchas veces que yo —yo he encontrado estos amigos cristianos, que yo he hablado cosas no conociendo lo que yo decía, y encontrar que llegaría a suceder. ¡Lo que dice usted! Fue dicho una vez, Jesús bajó de la montaña y El vio un árbol que no tenía nada, solamente hojas, y no había fruto, y El dijo: “Ningún hombre coma fruto de ti para siempre.” Y el próximo día, pasando, los apóstoles vieron que las hojas se habían secado. El dijo: “He aquí qué rápido el árbol se ha secado.” Jesús dijo: “Tened fe en Dios; porque todo lo que pidieres, cuando ores, creed que lo recibiréis y os vendrá. Y cualquier cosa que usted diga, lo que dijere le será hecho.” ¡Piense en eso! ¡Oh! Y quizás hoy el gran Espíritu Santo de Dios parado aquí en el altar, usted dice . . . Bueno, eso no tiene que ser decorado. No tiene que ser algún gran lugar elaborado. Jacob haló una piedra una vez y recostó su cabeza sobre ella, y todavía es reconocida hoy como una piedra, trono, o piedra de

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algunos parecen . . . hileras, cáncer rojizo, como largas líneas rojas que cruzan. Y luego un cáncer rosado que regularmente aparece en el seno de la mujer, como “pankeca” —(“pancakes —traductor”)— unos sobre otros, y entonces se riegan. Y entonces crecen dondequiera. Algunas veces los tumores son desproporcionados de esta manera, largos, oblongos, y cuanta cosa. Ellos no tienen formas, porque ellos están detrás de un espíritu que no tiene forma. Pero son células desarrollándose, son un grupo de células que, digamos que en usted ahora hay un tumor o un cáncer desarrollando células creciendo, creciendo, creciendo, está comiendo, chupando la vida de usted, viviendo en la corriente sanguínea. La catarata toma la mucosidad del ojo y crece sobre él, le cubre totalmente, y le cierra el ojo. Algunos de ellos llegan y nunca se . . . como tuberculosis, que viene como un pequeño germen. No hay nada al tamaño de él, el mismo tamaño de germen hace un elefante, hace una —una nigua. Vea, nada al tamaño de un germen. Y algunos de ellos toman forma de cuerpo, otros no. Y algunos nunca entran a células. Algunos llegan a ser espíritu, atormentan el alma. Trataremos de llegar a esa parte, dejaré esa parte para mañana por la tarde, si puedo, donde esa alma-espíritu viene, y cómo debajo de aquí se . . . Ahora, amigos, no estoy mencionando esto de alguna clase de sicología, yo he tratado con demonios por años, y usted sabe eso. Si usted sólo supiera la cosa, después que los servicios terminan de noche, lo que sucede algunas veces. Usted no sabe. Acuérdese, si Ud. llega en contra de un espíritu, es mejor que sepa de qué está usted hablando. Sólo no se pare allí y siga adelante, porque no le va a hacer nada de bien. Pero cuando actualmente un demonio le tiene que obedecer a usted él le reconocerá. No es cuán fuerte usted pueda gritar, no es cuánto aceite usted le pueda poner. Es lo que está aquí que él reconocerá, la verdad. Jesús le dijo: “Sal fuera.” ¿Ve? Acuérdese, los discípulos habían estado pateando y torciéndose, y tratando de echarle fuera, y todo. Ellos dijeron:

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“¿Por qué no pudimos echarle fuera?” Dijo: “Por su incredulidad.” Dijo: “Sal de él.” El niño cayó y tuvo el más fuerte ataque que jamás había tenido. ¿Ve? Vea, ellos reconocieron autoridad. Mire aquellos muchachos allá abajo, aquellos vagabundos que vieron a Pablo echar fuera demonios. Ellos dijeron: “Nosotros podemos hacer lo mismo,” algunos hijos de sacerdotes. Entonces ellos bajan y dicen: “Podemos echar fuera demonios.” Hechos 19. Fueron donde un hombre que tenía ataques epilépticos, y dijeron: “Os conjuro por Jesús, salgas de él.” El diablo dijo . . . “Ahora, ¡en el Nombre de Jesús quien Pablo predica!” El diablo dijo: “Ahora, conozco a Jesús y conozco a Pablo, pero ¿quiénes son ustedes?” Ustedes saben lo que sucedió. Brincó en el hombre, desgarró sus ropas, entonces ellos tuvieron arrebatos y salieron corriendo hacia la calle. Esos mismos demonios viven hoy. Cierto que hay mucho fanatismo. Esta es la iglesia en la tarde. Hay mucho fanatismo en la tierra hoy, llamado sanidad Divina, que debe ser callado. Eso es lo que trae reproche sobre la causa verdadera. ¡Por eso es que usted tiene una fuerte lucha! Hay muchas cosas hoy llamada religión que debe ser callada. ¡Nada sino cultos! Eso es lo que hace que la verdadera Iglesia de Dios tenga tan fuerte lucha con eso. Pero nosotros somos América, y esa es la manera que será. Dios dice que el trigo y las trepaderas y zarzas crecen juntos, no trates de arrancarlas, déjalos que crezcan juntos, pero por sus frutos usted los conoce. No hay fruto, porque, no hay vida, no hay nada allí. Ahora, observe esta célula. Digamos, por ejemplo, muchas veces el cáncer rojizo aparece en el viente de la mujer, contusiones femeninas y así sucesivamente. Ahora eso , vamos a tomar éso, ese individuo desde ahora, en sus células, este —este cáncer. Ahora un cáncer . . . Todo en lo natural tipifica lo espiritual. ¿Está usted enterado de eso? Todo en lo natural tipifica lo espiritual, sin importar. Por ejemplo, de esta manera, cuando — cuando nosotros nacimos en el cuerpo de Cristo, hay tres elementos que nos llevan


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agradecidos por ellos, Señor, y ellos los están trayendo aquí arriba al altar esta mañana, en la Casa de Dios, para dedicarlos, ofrecen sus pequeñas vidas a Ti. Que Tú le has dado. Y oramos, Dios, Tú alimentes y bendigas a cada uno de ellos. Guíalos, y que los Angeles guardianes de Dios vigilen sobre cada uno. Dale vidas largas de felicidad y alegría. Que se levanten para ser hombres y mujeres de Dios, del mañana, si hay un mañana. Dios, oramos que Tú levantes predicadores y profetas y maestros de este grupo de bebés que están alrededor del altar esta mañana. Y cuando nosotros estemos viejos y no podamos ir más lejos, alguien nos lleve de lugar a lugar, que nos podamos parar y oír el Evangelio predicado por uno de estos que están aquí hoy. Concédelo, Señor. Y algún día glorioso cuando todo haya terminado, nuestras vidas son terminadas, estos padres alrededor del altar, que seamos como Jacob del antiguo cuando él bendijo todos sus hijos y les dijo que sería su fin en los últimos días. Luego mirando hacia arriba, dijo: “Usted sabe, yo he de estar reunido con mi pueblo.” Y algún día glorioso él y todos de sus descendientes serán reunidos juntos en una mejor tierra. Con razón Balaam dijo: “Deje que mi último final sea como el de él.” Dios, yo oro que Tú les concedas estas bendiciones sobre sus padres. Y ahora mientras vamos a imponer las manos sobre ellos, qué —qué maravilloso y qué humilde que Tú lo has hecho, Señor, que nosotros hombres de esta tierra tenemos el privilegio de bendecir pequeños niños en Tu Nombre, y conociendo ésto, que lo que nosotros pedimos es concedido a nosotros. Mientras vamos a bendecirlos, que Jesús, que la total invisible Persona, el Unico Omnipotente se pare cerca y bendiga cada niño mientras ponemos las manos sobre ellos y los ofrecemos a El. Porque te lo pedimos en Su Nombre. Amén. (El hermano Branham comienza a dedicar los bebés.)—(Parte en blanco en la cinta —Editor.) En un pequeño gabinete allá en la tierra del norte, Tú me prometiste este niño. Padre, que Tus bendiciones descansen sobre él. José, mi niño, yo te entrego a Dios. Y que tu vida sea una bendición. Que tú seas un profeta, José. Que

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Ahora, cómo nosotros amaríamos esta mañana si pudiéramos tener a Jesús sentado aquí en persona en la plataforma, decir: “Señor, ¿puedes Tú bendecir mi niño?”Oh que, para nuestros ojos humanos y nuestros corazones deseando ver eso. Pero El está aquí, de todas maneras, porque El nos dio la comisión para hacerlo, así también El reconoce. Nosotros recibimos a los que El ha enviado, nosotros recibimos El que lo envió a él, vea usted. Así que El está esta mañana. Y si la hermana Gertie puede subir al piano y tocar nuestro viejo cántico que cantábamos hace mucho tiempo atrás, esto: “Traedlos, traed los pequeños a Jesús.” Yo creo que está en el libro allí en algún lugar, yo no estoy seguro. “Traiga los pequeños a Jesús.” Y si usted tiene tiene un bebé, un pequeño pequeño bebé que no ha sido dedicado, si usted lo desea dedicar esta mañana, por supuesto, estamos contentos de hacerlo. Y ¿hay algunos ministros en el edificio, predicadores que quisieran caminar hacia acá arriba y pararse con nosotros mientras dedicamos estos niñitos al Señor. Estaremos contentos de tenerles mientras ustedes vienen. Bien, ¿está en el libro allí? Usted búsquelo, hermano . . .? . . . No está allí. Bien, ¿Cuántos lo saben? Traedlos Traedlos adentro. Bien, vamos a cantarlo ahora. Todos juntos, mientras las madres traen sus bebés. Bien: Traedlos adentro, traedlos adentro, Traedlos adentro de los campos de pecado; Traedlos adentro, traedlos adentro, Traed los descarriados a Jesús. Traedlos adentro, traedlos adentro, Traedlos adentro de los campos de pecado; Traedlos adentro, traedlos adentro, Traed los pequeñitos a Jesús. Inclinaremos nuestros rostros un momento. Nuestro Padre Celestial, parados alrededor del altar esta mañana están paradas algunas madres y padres sujetando sus pequeñitos descendientes en sus brazos, que Tú gratamente le has dado. Ellos están tan

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hacia nuestro nacimiento. Y ésos son los tres elementos que salieron de la vida de Cristo cuando El murió. Allí salió de Su Cuerpo: Agua, Sangre, Espíritu. ¿Es eso correcto? Tres elementos. Y esos son los elementos por el cual pasamos cuando nacimos de nuevo, justificación, santificación, bautismo del Espíritu Santo. Ahora, todo eso puede estar en un acto, pero toma . . . Pero usted puede estar en un estado justificado sin ser santificado. Y puede creer en el Señor Jesucristo y todavía cargar suciedad con usted. Pero usted puede absolutamente vivir en ambos: justificado justificado y una vida santa y limpia, y sin el Espíritu Santo. Vea, la Biblia en 1ra. de Juan 5:7, dice: “Hay tres que dan testimonio en el Cielo, El Padre, Hijo, y el Espíritu Santo . . . Y el Padre, la Palabra, y el Espíritu Santo,” lo cual era el Hijo, “y Estos tres son uno. Y hay tres que dan testimonio en la tierra: el agua, sangre, Espíritu, y ellos concuerdan en uno.” No uno, pero concuerdan en uno. Usted no puede tener al Padre Padre sin tener al Hijo; Hijo; usted usted no puede tener al Hijo Hijo sin tener al Espíritu Santo, porque son inseparables. La trinidad es uno. Yo no lo oigo por este lugar, pero usted lo oye mucho a través de esta Nación, una de las cosas grandes en los grupos pentecostales, en la mezcla en esa pequeña cosita. Y yo he tenido tenido las Cabezas de ellos juntos y probándoles que ambos creen en la misma misma cosa. Es el diablo en medio de ellos, eso es todo. Si esa gran Iglesia Pentecostal pudiera echar abajo esas pequeñas tradiciones y unirse todos juntos en una Iglesia Santa de Dios, el Rapto vendrá. Pero mientras satanás pueda mantenerlos divididos, está bien. Esa es la manera de él hacerlo. Y ellos absolutamente creen la misma cosa. Uno dice: “Bueno, ésto es aquello.” Yo dije: “Bueno, si ésto es aquéllo, entonces aquéllo es ésto.” Ahí lo tiene usted. Así que es todo la misma cosa. Pero ahí lo tiene usted en esa trinidad de Dios, ahora, ahora, Dios en Su Unidad. Dios el Padre, Hijo o Espíritu Santo. Ahora, nosotros no decimos: “nuestro dioses,” como paganos. Es “nuestro Dios.” ¿Ve? Es la triple existencia de Dios. Ahora noten, ahora, satanás está en una trinidad también. Y sus

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poderes están en una trinidad. Ahora, pero entonces note cuando el agua, sangre y Espíritu producen el nuevo nacimiento. ¿Es eso correcto? Ahora, vigile. Eso es lo que representa el nuevo nacimiento. ¿Qué representa el nacimiento natural antes que venga el nuevo nacimiento, sí, ustedes madres? Cuando nace un niño, ¿qué es la primera cosa? Agua. Próximo, sangre. Próximo, vea, éso hace la vida, vea, hace la persona. Agua, sangre, espíritu. Ahora, un cáncer, vamos a tratar con él para nuestro próximo, nos quedan como cinco minutos, yo supongo, casi por los próximos cinco minutos vamos a tratar tratar sobre el cáncer. cáncer. ¿Qué es ese individuo? ¿Qué es lo que él representa? El es un zopilote. El representa al buitre, come cosas muertas. Y el cáncer viene de casi siempre de una magulladura, donde una célula ha sido golpeada y — y se divide en partes. Y una pequeña pequeña célula allí se desliza. Oh, esa es una palabra grande para un bautista, ¿no es así? Está bien, pero se reincide la célula. Yo soy un bautista que creo en la reincidencia. Alguien dijo aquí abajo en una reunión en Arkansas el otro día, dijo: “Hermano Branham,” Branham,” dijo . . . era un compañero nazareno, él había sido sanado. El tenía su . . . andando rectamente por el pueblo con sus muletas en sus hombros. El dijo: “¿Sabe usted algo?” Dijo: “Cuando por primera vez estuve aquí,” dijo: “yo —yo pensé que usted . . . le oí a usted predicar, yo pensé que usted era un nazareno.” El dijo: “Entonces yo vi que la mayoría de las personas eran pentecostales, pentecostales, y alguien alguien me había había dicho que usted era pentecostal. Y ahora usted dice que usted es bautista.” Dijo: “Yo no lo comprendo.” Yo dije: “Oh, eso es fácil.” Yo dije: “Yo soy un pentecostal nazareno bautista.” Eso es correcto. Eso es correcto. Está bien. No, nosotros somos uno en Cristo Jesús, por el Espíritu Santo formándonos uno. Eso es correcto. Ahora, noten, esta pequeña célula resbala cuando es golpeada. Comienza pequeña, otros pequeños gérmenes van hacia adelante para llevarle, llevarle, permanece allí, y así es cómo el pus se convierte en


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haya tenido que ver en ello en una ceremonia, era, El los tomó en Sus brazos y puso Sus manos sobre ellos y los bendijo, y dijo: “Dejad los niños venir a Mí. No se lo impidáis, porque de los tales es el Reino de Dios. ” Ahora, nosotros hemos sido dejados, como podemos entender, para continuar continuar con la obra obra que El vino a —a cumplir. Su muerte muerte en el Calvario, El estaba con nosotros y El salió de —vino de Dios al mundo, volvió a Dios, o del mundo a Dios, y regresó nuevamente en la forma del Espíritu Santo, y está con nosotros, en nosotros, hasta el fin del mundo, llevando a cabo en Su Iglesia la misma obra que El hizo cuando El estaba aquí en la tierra. Y por eso nosotros llevamos llevamos nuestros niños de uno al otro, a los ministros, y ellos oran sobre ellos, ponen sus manos sobre ellos y los dedican a Dios. Sólo una pequeña ceremonia para decir que nosotros apreciamos lo que el Señor ha hecho por nosotros y los pequeños niños. Ahora, si su pequeñito ha sido rociado, o de la manera que sea en su iglesia, entonces nosotros no decimos una cosa en contra de eso, está bien. Pero Escrituralmente encontramos sólo un lugar, es donde Jesús Mismo los bendijo. Eso yo lo leeré, si el Señor lo permite, en la —en —en la Palabra aquí. Encontramos que en San Lucas Lucas en . . . Yo creo que es —es el capitulo 10, y comenzando con el verso 13. “Y le presentaban presentaban niños para que los los tocase; y los discípulos reñían a los que los presentaban. Y viéndolo Jesús, se enojó, y les dijo: Dejad los niños venir a Mí y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios. De cierto os digo que el que no reciba el reino d e Dios como un niño, no entrará en él. Y tomándolos tomándolos en los los brazos, poniendo las manos sobre ellos, los bendecía.” ¿No es eso hermoso? El dijo: “Ahora dejad los niños venir a Mí. No se lo impidáis, porque de los tales, tal como ese pequeño niño, es el Reino de Dios.” Y el los tomó en Sus brazos y los bendijo.

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sabe como arrepentirse. Eso no tiene razón de estar aquí de su propia cuenta, no puede decir decir porqué está aquí. Pero Dios Dios lo envió envió aquí, y la Sangre de Jesucristo lo limpia al mismo momento que viene al mundo. Y es hasta la edad de responsabilidad, entonces él conoce el bien y el mal, y entonces lo que hace, él tiene que arrepentirse por lo que conoce que es hecho mal. Eso es correcto. Así que algunos los rocían, y piensan que ellos no van al Cielo . . . Y hay una enseñanza que dice si el niño nace de unos padres que tienen el Espíritu Santo, bueno, el bebé irá al Cielo, pero si no es, no hay más de ello, el bebé no será más. Eso es estrictamente un error. ¿Qué diferencia hace si son de padres llenos del Espíritu Santo? Todo es deseo sexual, y el bebé es nacido de la misma manera. Así que es todo “nacido en pecado, formado en iniquidad, vino al mundo hablando mentiras.” Eso, esos son los términos Escriturales de eso. Así que, y entonces la Sangre de Jesucristo limpia y hace un pacto para ese niño. Si él muere, él perfectamente irá ante la Presencia de Dios, si fue nacido de los padres más pecaminosos en el mundo. Hasta que sea la edad de responsabilidad donde conoce el bien y el mal. Y entonces lo que hace de ahí en adelante, tiene que ser perdonado por eso. Tiene que pedir su propio arrepentimiento de ahí en adelante. Pero mientras es un bebé . . . Ahora, la manera que nosotros tratamos de seguir aquí en el Tabernáculo es el único lugar en el mundo que yo voy y yo predico Doctrina, es aquí en el Tabernáculo, porque esta es nuestra iglesia. Y nosotros predicamos Doctrina aquí para mantener las personas en línea. Otros hombres, en sus iglesias, ellos predican lo que creen. Y ellos son mis hermanos, y nosotros podemos ser diferente un poquito, pero con todo, somos somos hermanos hermanos justamente justamente igual. Y, pero pero aquí en el Tabernáculo nosotros predicamos lo que creemos que es Doctrina Escritural. Y, y allí vemos para la dedicación de niños, lo que nosotros llamamos una dedicación, el único tiempo en la Biblia que podemos encontrar, o donde en el Nuevo Testamento adonde pequeños niños hayan tenido alguna vez algo que hacer, o Cristo

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una llaga. Esos son pequeñitos soldados batallando por su vida. Ellos corren allí y —y le dan a ese veneno esos poderes de demonios que están tratando —tratando de reunirse allí, y dan sus vidas. Eso es lo que, ese es su . . . un montón de pequeños soldados muertos, ese pus que está en su sangre . . . que está con una —una llaga, que dan su vida para salvar la suya. Ahora, una vez que una pequeña célula rechaza allí y este demonio comienza, él empieza a crecer, él empieza a multiplicar células. El está construyendo un cuerpo exactamente como sus niños empezaron en su vientre, y como usted fue también en su madre. Célula sobre célula, célula sobre célula, célula en cualquier lugar, dondequiera, pues ellas no tienen forma de ninguna clase como un ser humano después de su naturaleza. Es que sólo salen de un espíritu, y apenas crece de cualquier modo. Y comienza célula sobre célula, célula sobre célula. Y ahora, la primera cosa que usted sabe, usted empieza a ponerse débil y sentirse enfermo. Usted va al doctor y él le examinará. Posiblemente él no lo pueda hallar. Si lo encuentra, posiblemente posiblemente lo cortará. Si lo puede cortar completo, está bien, él lo ha sacado. Pero si no lo puede cortar completo, entonces si está en la garganta o en otra parte donde no puede ser cortado completamente, una pequeña manchita seguirá viviendo. Vea, porque no es como cuando a usted le cortan la mano y ponerle ponerle fin, o cualquier cosa, o usted corta . . . Lo que quiero decir, si usted le corta el cuerpo principal y deja su mano allí, ciertamente, no vivirá. Pero —pero, vea, eso no tiene la forma de vida que usted tiene. Es un demonio poderoso moviéndose. Y ahora noten, usted le llama, el doctor le llama, un “cáncer.” Dios le llama un “diablo.” Miren hoy. Ellos sólo lo cogen . . . ¿De dónde vino la palabra cáncer? Viene de —de la palabra Latina que es usada en términos médicos, significando “cangrejo.” “cangre jo.” Un cangrejo que usted ve en la orilla del mar que tiene todas esas patas. Esa es la manera que —que obra, alcanza hacia afuera, se esparce. La palabra cáncer es cangrejo. Y se mete adentro y se mantiene agarrado y chupando sangre y así continúa, como el pulpo o algo.

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Porque, un tumor, catarata, y otras enfermedades, enfermedades, cada una de ellas vienen de un germen. Y ese germen tiene que ser un cuerpo. Y antes de ser un cuerpo, tiene que ser una vida. Antes que pueda crear o —o germinar y hacer más células, tiene que ser una vida. ¿Es eso correcto? Ahora, ¿de dónde vino el cáncer? ¿Quién, de dónde vino eso? No estaba en usted en algún tiempo atrás, pero ahora posiblemente esté en usted. ¿De dónde vino? Es otra vida diferente a tu vida, viniendo en usted. Y es un atormentador, extrae su vida. Esa es la razón que Jesús le llamo “diablo.” Ellos le llaman a la epilepsia hoy, ellos dicen: “epilepsia.” Ciertamente, epilepsia, en la Biblia Jesús le llamó “diablo.” cuando el hombre vino con el muchacho que cayó en tierra, y echando espuma por la boca, y todo, él dijo: “El tiene demonio, y muchas veces cae en el fuego y muchas veces en el agua.” Ahora ellos le han pulido su nombre y le han llamado llam ado epilepsia, pero él es un diablo. Y Jesús dijo: “¡Ahora, demonio, salid del muchacho!” Exactamente. Ahora, epilepsia es casi siempre causado por problema en el riñón. Entraremos en eso dentro de un ratito. ¿Ve? Causa una epilepsia, un urémico. Ahora, noten en esto, entonces esa célula se sienta allí, es un diablo. El está construyendo una vida; él está creciendo, haciéndose más grande y más grande. El tiene un trabajo que hacer, eso, es, tomar su vida. Para eso fue que el diablo lo mandó, para cortar sus días a setenta años. Ahora, yo saludo a todo doctor. Sí, señor. Toda ciencia médica, Dios les bendiga por la ayuda que le han dado a las personas. Eso es correcto. ¿Qué haría usted en e n el mundo hoy sin ello? Yo le doy gracias a Dios por la ciencia médica, le doy gracias a Dios por mi automóvil. Si Dios no hubiera permitido que la ciencia me hiciera un automóvil, se me haría difícil subir aquí. Por la luz eléctrica, y por el jabón para lavar mis manos, y pasta dental con la cual estregar mis dientes, ciertamente. Le doy gracias a El por todo, porque todas las cosas buenas vienen de Dios. Pero déjeme decirle, no hay ni una manchita de medicina que jamás haya curado alguna enfermedad. Y no hay ni un doctor, a


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Macedonia.” Así que el Señor todavía tiene Su Angel, ¿verdad que sí? Si yo sólo pudiera ser tan humilde en mi corazón en eso como era Pablo. Y ahora, esta noche, recuerde los servicios del Evangelio aquí en el Tabernáculo, todos vengan. Ustedes alrededor de Louisville, yo hablaré en la Iglesia de la Puerta Abierta esta noche por unas cuantas horas, lo cual es de siete y media hasta nueve y media, del hermano Cobbles. Yo iba a venir aquí dos veces. Y entonces él es un hombre tan bueno, y él llamó. Y hermano Cobbles, él es un hermano muy gentil. Usted, estoy seguro que están familiarizados, hermano muy bueno. Y casi no lo podía rechazar de esa manera. Y oren. Sobre todas las cosas, oren, y oren para que Dios nos de la — la decisión correcta para hacer. Ahora, antes de comenzar el Mensaje del Evangelio, Evangelio, tenemos una mañana para dedicar pequeñitos. Y yo tengo un pequeño niño aquí para dedicar también al Señor. Ahora, muchas veces en muchas iglesias ...... ¿Pueden ustedes oír bien allá atrás? Si pueden, ¿está bien? Los abanicos aquí, yo sólo, usted no se puede oír. Oh, eso, eso está bien, tengo temor de perecer sin esto. Así que —así que los niñitos, algunas veces ellos los rocían en la iglesia, cuando son bebés pequeñitos. Y por supuesto, eso vino de la Iglesia Católica, por cristianizar a los pequeños niños, o “bautizar” como ellos llaman cuando ellos son pequeños. La Iglesia Metodista lo trajo fuera, de bautismo de infante, y muchos ahora, y yo pienso algunos más. Yo pienso que esa es la diferencia entre los Nazarenos y los anticuados Metodistas, era el bautismo de infante, y entonces las pequeñas separaciones y así sucesivamente. Pero de cualquier manera, eso no, yo no creo que signifique mucho. Porque después de todo, y pienso que el Calvario descifró la cosa exactamente allí, para todos, porque Jesús murió allí para salvar pequeños niños y salvar al mundo. Y el pequeño niño, no importa qué clase de padre tenga, qué pecaminoso, eso no hace ninguna diferencia, diferencia, porque la Sangre de Jesucristo lo limpia, vea usted, y este es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Ese niño no se puede arrepentir. Eso no

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contento de saber que ellos votaron por mí para que vaya allá, y era universal y ciento por ciento. Yo estaba contento de eso, pero yo tengo que ir allá o aquí abajo ahora. Usted ore que el Señor me guíe sólo exactamente al lugar donde más almas sean salvas, y lo mejor será hecho para el Reino de Dios. Ahora, ellos tienen una convención allá, y —y ellos en Suecia, y él dijo que tendríamos veinticinco, treinta y cinco mil personas para comenzar, en la convención, y muchas de esas personas que no son salvas. Y aquí abajo en Alemania, bueno, ellos tienen un estadio que acomoda ochenta mil personas. Por supuesto, nosotros en Suecia, de donde acabamos de salir, ellos —ellos tenían una maravillosa reunión allí, y muchos de ustedes probablemente nunca han oído todavía. El Señor nos bendiga poderosamente, tuvimos cincuenta mil convertidos en cinco noches, en —en —en Zurich, Suecia. Y así que hermano Jack Schuler, muchos de ustedes lo conocen, y conocieron el hijo de este viejo Bob Shuler. Ellos están en Belfast ahora, y ellos dicen que ellos están virando el lugar al revés de allá, para el Evangelio, y aún más grande que lo que Billy Graham tuvo en su reunión. Jack es un buen muchacho joven, lleno de fervor y amor. Y él —él es tan sincero a eso hasta yo creo que es un gran siervo del Señor. Y oren por el hermano Schuler. Y —y era Jack Schuler, y Jack Mac Arthur también está con él. Y el hermano Jack Mac Arthur es un gran predicador también. Y ellos están en una iglesia que dicen que es el más grande avivamiento que jamás allá golpeado Irlanda. Así que nosotros somos . . . Póngase a orar diariamente por esos, por esos hombres. Ellos son hombres jóvenes casi alrededor de cuarenta, yo pienso, o menos, y familias y así sucesivamente, y buenos maestros firmes del Evangelio, y nosotros le amamos. Y ahora, yo —yo oro que ustedes no se olviden de mí, que, y Dios hará la decisión correcta ahora mismo. Hay tiempos en donde usted no sabe por que camino doblar. ¿Se ha metido usted alguna vez en esos lugares? Yo creo que Pablo se metió en ese lugar una vez, ¿no lo hizo? Entre dos estrechos. Y cuando él iba hacia allá, por supuesto, él vio un ángel en una visión que le dijo: “Ven por

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menos que no sea un falso, pero un verdadero doctor le dirá a usted que ellos no reclaman ser sanadores. Aquí en los Hermanos Mayo, muchos de ustedes . . . Yo he sido entrevistado allí dos o tres veces. De pacientes que llegan allí, incurable . . . ¿Leyó usted el “Readers Digest,” la edición de noviembre? ¿Cuántos de ustedes leyeron la edición de noviembre, el artículo mío allí en Readers Digest? ¿Ve? Y me tenían allí para entrevistar aquel bebé que habían desahuciado. Dijo: “No puede ser hecho.” Pero el Espíritu Santo me habló y me dijo cómo iba a ser hecho, y fue hecho. Muy bien. Ahora, me llamaron allí. Y exactamente sobre la puerta estaba Jimmy y ellos, Mayo solía estar allí, hay un gran anuncio que dice: “Nosotros no declaramos ser sanadores. Solamente declaramos en asistir la naturaleza. Hay un Sólo Sanador, ese es Dios.” Ellos son los mejores en el mundo. Ahora, tenemos unos cuantos falsos, sí. Eso es correcto. También tenemos predicadores falsos, también. Bien, eso va para ambos lados. Noten, pero cualquier hombre que reclame ser un sanador, él es un cuentista, porque él no lo puede hacer. Porque la Biblia dice: “Yo Soy el Señor quien perdona todos tus pecados y sana todas tus enfermedades.” Yo he estado estudiando y en mi cuarto, el . . . algunos de los mejores doctores a través de la nación han venido. Usted no conoce el pasado de una vida, amigo, saber lo que ha sido, y cosas que no digo fuera al público. Hombres vienen secretamente, y no cree usted que hay muchos nicodemos en el mundo todavía, seguramente que sí, miles de ellos. Se fijan en eso y vienen a la reunión. Se sientan allí con una camiseta puesta, algo así, con nombres tan pulidos que usted hasta se sorprende, se sientan en la reunión. En unos cuantos días llegan y pasan sin avisar y llaman secretamente, y envían a alguien para una entrevista. Y se sienta allí y dice: “Hermano Branham, yo creo que eso es la verdad.” Ellos son hermanos como nosotros. Seguro, y el deseo de cada hombre, y ellos miran a través de ese velo oscuro más allá que él tendrá que llegar algún día. Pero esos cánceres y cosas son absolutamente demonios que

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se forman en un cuerpo de carne, moviéndose hacia arriba, quitándole su vida. Ahora, si yo hiciera como el doctor, si pudiera cortarlo, y ponerlo en tierra . . . o, digamos por ejemplo, que usted era un cáncer aquí en la tierra. Ahora, aquí está la sanidad Divina. Si yo quisiera deshacerme de usted en la manera que el doctor lo hace, yo sólo tendría que frotar tu cuerpo o algo así hasta que se desapareciera de la tierra. No habría más de ello, así como el doctor te quita el crecimiento. Pero en la forma de sanidad Divina, si tú fueras el cáncer, yo llamaría tu vida fuera de ti, y tú continuarías hacia adelante. tu vida te dejaría, pero tu cuerpo estaría aquí igual como eras. Ahora, ahí es donde la vista y el tiempo es el peor enemigo de Dios en la sanidad Divina. Yo no sé si el hermano Baxter se encuentra con estas cosas en las reuniones. Yo me siento, se lo explicó a él y al hermano Bosworth una y otra vez. Pero aquí está lo que sucedió. Yo dudo que mucha gente lo capte, porque después de un rato encuentras a la gente regresando, diciendo: “Yo he obtenido mi sanidad, hermano Branham, por dos o tres días, pero dejó a manera de . . . me ha dejado.” Y yo lo encuentro, y yo creo que es porque no han establecido la reunión correctamente. la gente no entiende. Yo he tenido a hombres que han venido a la plataforma y han estado totalmente ciegos, con cánceres o cataratas sobre sus ojos, y leen esta Biblia después que han orado por ellos, caminarían hacia abajo, y en tres o cuatro días están tan ciegos como lo estaban en primer lugar. ¿Qué sucedió? Cualquiera sabe que cuando una vida sale de cualquier carne, se encoge por un tiempo. ¿Es eso correcto? ¿Alguien aquí ha notado alguna vez un venado o una vaca, o algo así? Seguro, bien. Usted péselo esta noche, ustedes cazadores aquí, amigos míos. Usted mata un venado y usted lo pone en la balanza, dígale a los muchachos cuánto pesa. ¡Observe! En la mañana será unas cuantas libras más liviano de lo que era. Cuando muere un ser humano, la primera cosa que hace el de la funeraria, le quita la dentadura postiza o un ojo, lo que esté allí, lo saca,

ESPIRITUS SEDUCTORES 24 de julio del 1955 Jeffersonville, Indiana, E.U.A. Domingo en la mañana

Buenos días, amigos. Contento de estar aquí en esta mañana, y sabiendo que viéndolos a todos fuera, creyendo que el Señor está con nosotros hoy, dándonos un poco de sombra para que no sea tan caliente en el Tabernáculo para el servicio de la mañana. Y ahora nosotros. . . Yo creo, hay niños, ¿han sido despedidos los niños a las cuales ellos van? Yo vi algunos pequeñitos. Y yo sólo me imaginaba si ellos habían despedido clases en sus —sus otros lugares, en sus salones de Escuela Dominical. Ahora, oren por mí. Yo tengo una gran decisión que yo estaba supuesto hacer anoche, y yo tengo que hacerla hoy. Y dejen que la iglesia ore. Yo tengo una —yo tengo una reunión que viene próximamente, está exactamente en la línea de la Cortina de Hierro en Alemania, y así que es un poco quisquilloso. Y oren por mí. Y así que es, podemos empezar inmediatamente en el gran estadio de “cricket” en Alemania, que Hitler hizo antes de la guerra, lugar grande y bueno, acomoda ocho mil personas. Y podemos tenerlo por diez noches corridas. Y así que estamos deseando comenzar allí inmediatamente, y entonces al otro lado a La Saloraine, Francia siguiente, entonces a Berlín, regresa . . . Yo quiero decir Berlín entre eso y —y Francia. Entonces regresaremos, el Señor permitiéndolo, en una convención en Chicago. Comienza, yo creo, el cinco, seis, siete, ocho y nueve, es mi parte en Chicago, de una convención en la —la Iglesia Sueca. Y entonces ellos están, Sr. Boze y algunos de ustedes de alrededor de Chicago, ellos tienen una convención que estaba supuesta salir este próximo . . . comenzando el primero de agosto, o primero de septiembre, es en Suecia. Y yo estoy tan

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porque se encoge, se empuja hacia fuera porque el cuerpo humano encoge. Toda otra carne encoge. Cuando la vida sale de la célula comienza a menguar y encoge. Hará eso como por setenta y dos horas. Y después comenzará a hincharse. Deja que atropellen a un perrito aquí en la calle. Dejen que lo ponga allá afuera en el sol como por tres días, y observe lo que sucede, es un perro más grande de lo que era. Se hincha. ¿Es eso cierto? Bueno, eso es lo mismo que sucede cuando un —un demonio es echado fuera de la persona enferma. Los primeros días: “Oh, me siento maravilloso.” Después comienza a decir: “Estoy, estoy más enfermo de lo que —de lo que estaba. He perdido mi sanidad.” Tan seguro como la fe lo sacó, la incredulidad lo resucita. Jesús dijo: “Cuando el espíritu inmundo sale del hombre, camina en lugares secos y él regresa otra vez con siete demonios más. Y si el buen hombre del hogar no está parado allí para proteger esa puerta, él entrará. Y el buen hombre de tu hogar es tu fe, diga: “¡Quédate afuera!” Eso es. Pero ahora observe usted a un paciente que es sanado, un ordinario, a menos que sea un milagro sobresaliente. Lo cual, sanidad Divina y un milagro son dos cosas distintas. Sanidad Divina es una cosa y un milagro es otra cosa. Pero una ordinaria corriente de sanidad Divina, cuando el espíritu inmundo es echado fuera, un diablo canceroso, cuando deja la persona. ¡Oh! Ahora, o digamos que tomaremos algo para que usted lo pueda ver más visible, o digamos la catarata. Qué sucedió cuando aquel hombre . . . si usted nota a una persona ciega. Yo no sé si alguna vez haya tenido uno aquí o no, todavía ojos con cataratas. Los dejo pararse por unos cuantos minutos. ¿Por qué? Para que ese encogimiento comience a tomar lugar. Les digo que regresen, y nos dé un testimonio; ¡oh vaya! Ellos pueden ver maravillosamente. “¡Oh, vaya! ¡Sólo puedo ver las cosas! ¡Sí! Yo . . .” Qué ocurre. Se fue la vida. El cuerpo de la catarata se está encogiendo. Bueno, esto hará por unos cuantos días. Digamos: “Oh, me siento bien.” Y después de un rato comienza a dolerles la cabeza. No se sienten muy bien. Se levantan al día siguiente: “Estoy perdiendo la

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vista otra vez.” Alguien dijo: “Ajá, el sólo estaba excitado.” ¡No creas eso! Esa es una mentira del diablo. Si tú crees eso, volverás a quedar ciego nuevamente. Pero si tú te aguantas, dice: “No, Señor, yo creo.” ¿Entonces qué sucede? Ese cuerpo se hincha por tanto tiempo. Y cubre sobre esa vista de nuevo. Ese cáncer en el cuerpo se hinchará. Usted viene a estar adolorido y lastimado de nuevo. Entonces usted se pone horriblemente enfermo, terriblemente enfermo. ¿Por qué? Ese grande crecimiento de carne muerta en usted está situada allí muerta. Usted vuelve al doctor y le dice: “Oh, eso es tontería. Ahí mismo está el cáncer. Lo puedo ver.” Seguro, está ahí, pero muerto ¡Aleluya! Ahora, la fuente sanguínea tiene que purificar el cuerpo. Cada vez que el corazón late, tira la sangre alrededor del cuerpo, y recoge esa infección. Seguro, que te enfermará. ¿Qué si tuvieras un pedazo de carne colgando en ti en algún lugar, del largo de una serpiente, o algo grande alrededor como tu dedo, y colgando allí, y si estuviese muerto, esa cantidad de carne muerta colgando en usted, y está podrida? Bueno, por supuesto, tu corriente sanguínea tendría que mantener eso puro, mientras late hacia adentro. Pero hay un cuerpo muerto, la cosa colgando allí, porque la vida se ha ido de él. El poder de Dios, a través de fe, lo sacó. El es un demonio, se tiene que ir. Pero la razón, las personas no están instruidas, se van, se dan por vencidos, y el mismo demonio parado allí para tomar posesión de nuevo. Cuando Dios te dice que cualquier cosa aquí en la plataforma, a través de Su Espíritu, bajo inspiración, no dudes éso; o algo peor vendrá sobre ti, El dijo. Porque Jesús dijo: “El estado postrero de aquel hombre era siete veces peor que lo que era en el primer lugar.” ¿Es eso cierto? Cuando el espíritu inmundo ha salido del hombre, él viaja en derredor por lugares secos, vuelve con siete demonios más. ¡Así que no seas incrédulo, permanece creyendo! Creélo de corazón. Diga: “¡No, Señor! ¡No seré movido! No

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importa cuán enfermo me ponga, eso no tiene nada que ver con el asunto.” Entonces, lo primero que usted sabe, estás siendo . . . todo aclarándose. Entonces todo se arreglará. Vea, está muerto. La —la operación del doctor te la hubiese quitado de ti, ese mismo crecimiento que está situado en usted, sin vida en usted. Usted dice: “Vida en éso, hermano Branham ¿tomará mi vida?” No, señor. Esa vida es una vida separada de la suya. Acabo de enseñarle que usted es una vida y se convierte en un ser, y es una vida y se convierte en un ser. Y usted es de Dios, y eso es del diablo. ¿Ven lo que quiero decir? Demonología. Ahora, usted debe ser a lo que éso se asemeja cuando se para y la observa. ¡Oh! Vaya, lo siento, son casi las tres y media. Lo siento. Fíjense, amigos. ¡Oh, lo que necesita este mundo! Yo he estado predicando a través de América como por siete años, teniendo estos servicios de sanidad. Tengo una buena noción para comenzar a través del país enseñando la Biblia y en demonología, cómo las personas pueden entender lo que deben hacer. Y esa es la razón que ellos asisten a estas reuniones muchas veces y compañeros . . . Si usted no entiende, las personas se van y muchas veces . . . Ahora acuérdense de aquel individuo que vino y dijo que tenía un don de sanidad Divina, el don de sanidad Divina estaba en usted si usted fue sanado. Es usted el único. Cualquier don opera por fe. Y no importa cuánto don de sanidad yo tenga, lo creo con todo mi corazón, pero usted se puede parar aquí y, si usted no tiene la misma clase de fe, no le resultará de provecho. Yo puedo orar por usted por horas y semanas y meses. No son los predicadores con sanidad Divina, es usted el que tiene el don de sanidad Divina, que cree en ser sanado, porque es por fe. ¡Por fe! Toda operación de Dios es por fe. Toda la armadura de Dios es por fe. No tenemos ni una cosa natural de este mundo. Todo lo de la Iglesia Cristiana es un hecho de fe. Mire a la armadura de Dios, amor, gozo, paz, longanimidad, bondad, mansedumbre, gentileza, paciencia. ¿Eso es correcto? Todo sobrenatural, nada natural. Así que nosotros no miramos a las cosas naturales, porque operamos en lo sobrenatural. Y la única

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forma en que lo podemos afirmar, es fe, es en lo que Dios ha dicho que es la verdad, y miramos a lo que no se ve. Y llamamos a las cosas que no son como si fuera, como hizo Abraham cuando él . . . ¡Amén! Abraham llamó aquellas cosas que no eran, según lo hizo Dios, como si fueran. Siendo de cien años de edad, no titubeó ante la promesa de Dios por incredulidad. Me puedo imaginar eso, ¿se lo pueden imaginar ustedes? Ver a Sarah levantándose por la mañana. Dios dijo: “¡Abraham!” Dijo: “¡Abraham, vas a tener un hijo!” Sarah se levantó. Dijo: “¿Cómo te siente, Sarah?” Esta es una multitud mixta, pero escuchen. “Ninguna diferencia” "Bueno, ¡gloria a Dios, lo vamos a tener! Consigue las canastillas y los prendedores y todo, prepárate.” Bien, pasó otro mes. “Sarah, ¿cómo te sientes?” “Ninguna diferencia.” Pasó un año. “Sarah, ¿qué al respecto?” “Ninguna diferencia.” Pasaron diez años. “Ninguna diferencia.” Pasaron veinticinco años. “Ninguna diferencia.” Abraham, en vez de ponerse débil, se afirmó más y más sabía que sería más que un milagro todo el tiempo, porque él creyó a Dios, y no titubeó ante la promesa de Dios por incredulidad. El dijo: “¡Lo vamos a tener!” Y una mañana la mujer, Sarah, comenzó a hincharse y nació el pequeño Isaac, porque Abraham creyó a Dios, y miró a las cosas, contó las cosas que no eran como si fueran. No por el sentir, no por vista. Tú no caminas por el sentir o ver. Es por fe. Y cuando Dios ha pronunciado algo, dijo: “Todo lo que pidieres, cuando oras, cree que lo recibirás, y agárrate de ello.” Dios lo dijo, ¡tiene que ser así! Amén. ¡Demonios! “Fe en el Padre, fe en el hijo, fe en el Espíritu Santo, tres en uno. Temblarán los demonios y despertarán los pecadores. “Fe en Jehová cualquier cosa moverá.” Eso es verdad. ¡Oh, vaya! ¡Ciertamente lo es! Tened

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mantenido aquí tanto tiempo. Pero siendo que estamos cerrando estos servicios esta tarde de esta manera, yo quería decírselos, “demonios” y yo he cortado mucho de ello en un lugar, en un sermón, pero quizás ellos lo pueden agarrar aquí y allí y entender lo que quise decir. Tú conoces las intenciones de mi corazón, de traerlo. Haz que las personas salgan de aquí esta tarde, y hombres y mujeres, vigilen cada movimiento que hagan, pero vivan feliz y libre. Haz que ellos sepan que Dios los ha salvado. Y haz que ellos miren a El, que se olviden de los ismos y cosas alrededor de ellos, y vivan en paz y sanos, y en el temor de Dios. Y entonces, Dios, cuando Tú los quieras usar para cualquier cosa, Tú les puedes enviar donde Tú quieras que vayan o lo que Tú quieras que hagan. Haz que las personas sean humildes y encuentren a Cristo en su corazón. Perdónanos, Señor, de nuestras negligencias, cada uno de nosotros. Y conocemos que —que Satanás está andando como león rugiente, por todo lugar, devorando lo que pueda, usando mantos religiosos. Oh Dios, estos pobres niños pequeños, míralos, por todo lugar. Ellos están abiertos y expuestos a las personas. Y yo oro a Ti, Dios, Sé misericordioso con ellos, y salves a todos los perdidos, sana los enfermos. Y, Dios, nos damos cuenta que estos viejos diablos de enfermedades viniendo sobre Tus hijos que Tú tengas un pacto puesto allá para atender de ello. Y todos los demonios que le han hecho pecar. Tú tienes un pacto puesto allá para atender eso. Yo oro que lo concedas en el Nombre de Jesús Amén. Me pregunto . . .

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Puso Su mano en Su lado, sacó Sangre, lo escribió en la parte de arriba, y decía: “Perdonado.” Y lo echó en el mar del olvido para jamás acordarse de ello. ¡Se había ido para siempre! El dijo: “Yo te perdono, pero tú estás condenando.” Eso cambió mi idea. Yo dije: “Señor, ten misericordia.” Después que yo salí de ello, yo caminé y me senté. Yo dije: “¿Cómo está usted señora?” Ella dijo: “¡Hola.!” Y yo dije: “Si usted me perdona.” Yo dije: “Yo soy el Reverendo Branham, un ministro.” 242 Ella dijo: “Oh, excúseme, excúseme, Reverendo Branham.” Yo dije: “Señora,” yo le dije la historia. Yo dije: “Yo estaba parado allí, y la estaba condenando, en pensar qué cosa horrible. Quizás usted tenga hijos.” Ella dijo: “Tengo.” Yo dije: “¿Qué causó la manera de ir mal?” Y ella comenzó a decifrarme la historia que le haría pedazos el corazón de cualquier cosa. Yo dije: “Yo —yo le estaba preguntando a Dios ¿Por qué El no quitaba tal cosa de la tierra? Aquí esta usted con estos dos hombres borrachos, y usted misma está borracha.” Y yo dije: “Algún día esa Sangre que está aguantando la ira de Dios sobre usted, usted va a morir uno de estos días, y entonces usted está . . . Usted es una libre agente moral ahora, usted puede recibir o rechazar.” Y yo dije: “Pero algún día su alma va a ir más allá, donde no habrá más misericordia. Y si usted muere en sus pecados usted ya ha sido juzgada, y usted irá al infierno.” ¿Y sabe usted qué? Aquella mujer se salió de aquel asiento allí en aquel restaurante, y tuvimos una reunión de oración como usted nunca a oído en su vida, y ella vino a Cristo. ¿Qué era? NO LOS CONDENE: HABLALE EL EVANGELIO. Ellos están poseídos de demonios, ellos son mortales en este reino. Ellos están influenciados de aquí. Nuestra influencia viene de arriba. Vamos a ver lo que podemos hacer con nuestros talentos, para ganar a otros para Cristo. Nuestro Padre Celestial, dándote gracias por Tu bondad y misericordia. Perdóname, Señor; quizás las personas, yo los he

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fe en Dios. Miradle a El. No te muevas. Quédate ahí. ¡Dios lo dijo! Y demonios, ¿qué son? son seres espirituales. Ahora, el —el doctor dice: “Tienes cáncer, tienes tuberculosis, tienes cataratas, tienes pleuresía, tienes ésto.” ¡Es un diablo! Es una vida. Y detrás de esa vida hay un espíritu. Cuántos saben y pueden ver que un cáncer, catarata, tiene —tiene . . . Es un espíritu, tiene —tiene vida en sí. Bien, nada puede tener vida sin un espíritu, vea usted, así que tiene que haber una vida para que opere eso, en algún lugar. Aun ese árbol allí tiene vida en sí. Toda la ciencia en el mundo ni podría hacer una hoja de hierba. ¿Sabían ustedes eso? Pueden hacer algo que se asemeja, pero no pueden encontrar la fórmula de vida. Ese es Dios. ¿Ve? Jesús le dijo al árbol: “Estás maldito, tu no tienes fruto, y nunca tendrás ninguno.” Y pasaron por allí. Y eran como las ocho de la mañana. Y pasaron como a las once cuando iban a comer, Pedro dijo: “¡Mira el árbol, está muerto de las raíces para arriba!” ¿Por qué? Jesús reprendió la vida que estaba en aquel árbol, que estaba en las raíces, y todo murió. ¡Aleluya! Ese mismo Cristo puede reprender un cáncer desde sus raíces, y todo el asunto morirá. Aquel árbol permanecía allí igual como horas antes, pero usted encuentra que las hojas comenzaron a caerse, y después ve que la corteza se va descascarando, y comienza a gastarse día tras día y semana tras semana, y después de un tiempo no quedaba ni un pedazo de aquel árbol. ¡Aleluya! Cáncer, tumor, catarata, o cualquier otra cosa, tendrá que irse cuando Cristo habla. El echó fuera demonios. Y El dijo: “En Mi Nombre echaran fuera demonios, hablaran nuevas lenguas, tomarán en las manos serpientes, o si bebieren cosas mortíferas, no les hará daño. Sobre los enfermos pondrán sus manos y sanarán.” ¿Le aman? Perdónenme por haberles retenido aquí por una hora esta tarde, sentados aquí. ¿Aman al Señor? Bueno, ¿qué ha de suceder ahora si —si usted acepta a Cristo como su sanador, y creer en tu corazón que algo ha ocurrido en tí, y que creas que estás sano? ¿Va usted a creer que está sano? No dejes que el diablo encierre otra cosa en ti. Sólo continúe hacia adelante. “Doctor,” cómo — cómo “doctor, ¿cómo se ve?”

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El dijo: “Pero, aún está ahí.” En tu corazón tú sabes, sabes lo que ha ocurrido. Primera cosa, él dirá: “Oye, ¿Qué habrá pasado con aquella cosa?” Entonces dirá: “Fíjese, doctor, yo le voy a decir. Aquí está lo que sucedió. Jesucristo me ha sanado. Eso es cierto. ¡Jesucristo me sanó!” Muy bien, inclinemos nuestras cabezas por un momento. Y hermano Willett, ¿podría usted venir aquí por un minuto, hermano? Ahora, Padre Celestial, te damos gracias por la Sangre de Cristo. Y quizás algunas veces que tu siervo, Señor, no usa la sabiduría, por hablar tan prolongadamente. Pero tal vez me siento como Pablo que predicó toda la noche una noche. Un pequeño amiguito se cayó de la ventana y se mató. Y aquél Apóstol, con la Palabra de Dios en su vida, fue y echó su cuerpo sobre el muchacho, la vida entró a él y vivió nuevamente. Amado Dios, yo me doy cuenta que la puesta del sol de —de esta gran civilización se está ocultando, el camino ya pasado, la mitad del día se ha ido, las sombras del atardecer están cayendo. Gran luz sale hacia adelante del Reino de Dios, para tomar su lugar de esta densa tiniebla que viene sobre la tierra. Dios, me doy cuenta que cada día envejezco más. Déjame ir, Señor, dame fuerzas, ayúdame a contar esta gran Verdad en todo lugar. Ayúdanos mañana por la tarde para que podamos entender más. Y, Amado Dios, bendice esta pequeña audiencia esta tarde. Esta noche, cuando se congreguen para un servicio de sanidad, que cada hombre y cada mujer se reúnan unos con otros y hablen, y digan: “Ahora, aquí, no —no hay más dudas. Entendemos ahora de dónde viene. Sabemos que es un diablo. Sabemos que cuando sale, tiene que venir en mandato de Dios. Tiene que hacerlo. Dios así lo ha dicho. El tiene que irse.”Entonces que ellos puedan salir contentos, regocijándose, reclamando su sanidad. Nada, no dejes que cosa alguna se interponga en nuestro camino. Sólo siga creyendo. Y, Dios, que esta pequeña iglesia aquí, y estas iglesias que cooperan, tengan un avivamiento después de este servicio, Señor,

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estoy contento que Tú te llevaste a Sharon si era Tú voluntad. Tendría mi pequeña Rebecah y pequeña —pequeña Sarah tiene que ser levantada bajo tal cosa como esa?” Cuál, y aquellas personas le llaman . . . cantan en el coro y todo. Y yo pensé: “¿No es eso una vergüenza?” Yo pensé: “Dios, ¿Cómo Tu Santa justicia permanece? Parece como que Tú justa indignación volaría allá fuera y — y explotaría este lugar.” Y yo oí el Angel del Señor, decir: “Vengan a un lado.” Yo caminé allí. Y cuando El terminó conmigo, yo me sentí como una persona diferente. “¿Para qué la estas condenando?” Yo dije: “Mire a eso, la manera que está ella.” Y aquí está lo que El . . . Yo vi una visión. Yo vi al mundo de esta manera, alrededor, otro mundo. Pero este mundo AQUI, tenía un arco iris alrededor, y esa era la Sangre de Cristo que protege la ira de Dios. El no podía mirar sobre eso, El —El destruirá la cosa ahora mismo, porque El dijo: “El día que de él comieras, ese día tú morirás.” Así que El lo haría. Entonces yo pensé de esta manera. Me vi yo mismo. Aunque yo no hice eso, pero yo era un pecador, sin embargo. Y entonces la Sangre de Jesucristo actúa para nosotros como un parachoques. ¿Ve? Que cuando yo peco, mis pecados dan sobre El y sacude Su preciosa cabeza, y yo puedo ver las Lágrimas y Sangre correr hacia abajo. “Perdónalo Padre, él no sabe lo que está haciendo.” Y yo hago otra cosa y le da. “Perdónalo, Padre.” Si alguna vez la pasa de El, yo hubiera sido destruido. Y si yo nunca acepto Su Gracia, y el día que mi alma viaje más allá de eso, ya yo he sido juzgado. Yo he rechazado. No hay nada más que juicio. Juzgado, ya yo he sido juzgado. Dios dijo: “El día que de él comieras, ese día tú morirás.” Usted está siendo juzgado en el asiento de juicio en esta tarde, su actitud hacia Cristo. Y entonces yo pensé: “Sí, eso es correcto.” Y sé que un día yo me arrastre hacia El. Yo y mi viejo libro puesto allí, un pecador, allí estaba todo puesto sobre ello. Y yo vi que mis pecados era lo que estaba haciendo, y yo dije: “Señor, ¿me puedes Tú perdonar?”

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tan corto como un hombre, y todo encrespado; lo que dijo la Biblia, lo cual era una desgracia. Y una mujer, que un hombre . . . La Biblia reclama, si una mujer se corta el cabello, el hombre tiene el derecho de ponerla a un lado en divorcio, porque ella no es honesta con él. Nosotros tenemos que ir y predicar la Biblia aquí alguno de estos días. Dijo: “Si ella se corta su cabello, ella deshonra a su marido.” Si ella es deshonorable ella debería ser puesta a un lado. Usted no se puede casar con otra, pero usted la puede poner a un lado. ¡Whew! Muchacho, eso, va duro, yo lo puedo sentir. Pero esa es la verdad. Oh, solía ser lo que teníamos en los reinos del Espíritu Santo, pero hemos bajado las barreras, nos hemos comprometido con pecado. Hemos bajado las barreras y las ovejas se han salido, ¿pero cómo se metieron los cabros? Usted bajó las barreras. Eso fue la que sucedió, usted bajó las barreras, el mundo y las iglesias mezclados juntos. Igual que los moabitas y así sucesivamente, y Balaam y como él se casó entre ellos, esa es exactamente la misma cosa hoy y la iglesia está toda contaminada, y la edad pentecostal es la edad de Laodicea, la cual se pone tibia y es vomitada de la boca de Dios. Y, fuera de todo el grupo, Dios llama Su remanente, lo lleva a Su Casa, eso es correcto, eso es exactamente a través de la resurrección. Y allí estaba ella, sentada allí, manicura de labio por toda su cara, y estaba todo sobre ello así. Y ella tenía esta cosa negra sobre sus ojos, y ella estaba sudando, y se le estaba corriendo. Y la pobre vieja cosa pudo haber tenido biznietos. Y ella estaba sentada allí con dos hombres viejos, y uno de ellos con un pañuelo grande alrededor de su cuello, y en junio, sentado allí. Y él se levantó, también, y ella estaba mirando alrededor. Yo pensé :“¡Oh Dios! Dios, ¿Por qué Tú no limpias la cosa fuera del mapa? ¿Por qué Tú no lo haces? ¿Tendrá mi pequeña Sharon . . . mi pequeña bebé, mi pequeña Sarah y mi pequeña Rececah tienen que ser levantadas en esta generación, para encararnos a tal cosa como esa?” Yo pensé: “Mire ahí a esos parques y cosas, y lo que sigue.” Yo pensé: “¡Oh Dios! Oh, yo

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que lo lleven hacia adelante, y que cientos de almas sean traídas al Reino de Dios. Concédelo, Padre. Que hombres y mujeres aquí, de a través de las naciones y otros lugares, puedan llevar el Mensaje a sus iglesias, y que tengan un antiguo avivamiento. Concédelo, Señor, Perdona nuestros pecados ahora. Ayúdanos a ser tus siervos. En el Nombre de Jesucristo. Amén. Yo desearía saber, mientras ustedes están sentados aquí, ¿hay algún pecador en el edificio hoy, que diga: “Hermano Branham, acúerdese de mí en la oración?” ¿Puede usted, puede usted levantar su mano? ¿Hay una persona pecadora? Yo no . . . Dios le bendiga, dama- ¿Hay allí? Dios le bendiga señor. Y usted, y usted, y usted, Dios le bendiga. Yo desearía saber si usted . . . Ahora, esto es para usted. Vea, yo no creo en ir atrás a la audiencia. Yo —yo no critico a otros que lo hacen. Yo no creo en ir a la audiencia y tratar de sacar a alguien. ¿Ve? Ningún hombre puede venir a Mí si el Padre no le trajere.¿Ve? Eso es cierto. Usted sólo lo sacará en contra de su voluntad. ¿Ve? Pero si Dios toca en tu corazón, usted es la persona más privilegiada en el mundo. Ustedes no saben a cuántas personas le he hablado.

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religioso. Judas era un hombre muy religioso. Es religión. No es el mundo de afuera, está en los miembros. Vigile eso, ¡demonología! Quizás un poco más tarde yo pueda llegar a ello un poco más, se nos está haciendo tarde. Sin condenar a nadie. Amar a todos. Si usted no puede amar de su corazón, entonces Cristo no está con usted. En Toledo, Ohio, yo fui a un pequeño restaurante. Yo había estado comiendo en un lugar, un pequeño lugar Dunkard, bonito pequeño lugar. Ellos eran tan amables. Aquella tarde ellos habían cerrado, para ir a la escuela dominical. Y, y cuando fueron, yo tenía que ir al cruzar la calle a un pequeño viejo lugar mundano, y yo entré allí. Y yo sé que es ilegal jugar en Ohio. Y aquí estaba parado un Policía del Estado con su brazo alrededor de una joven, su mano puesta allí sobre su pecho, jugando en una máquina de servicio automático. La ley de nuestro estado y nación se ha ido, ¡lástima! Yo confió en Cristo la Roca Sólida, yo me paro, todos los otros terrenos son arena movediza. Nada más falta. Eso es correcto. Yo miré allá atrás, y allí había una hermosa y joven dama, probablemente en su adolescencia, diecinueve, dieciocho, diecinueve años de edad. Y lo que ellos estaban haciendo, aquellos muchachos allá atrás alrededor de la mesa, era horrible. Yo me senté allí. Y ahora para mi sorpresa, sentado aquí donde una dama vino, dijo: “¿Quiere tomar asiento?” Yo dije: “Muchas gracias, yo deseaba desayuno.” Y sentado en una silla, aquí estaba una dama mayor, tan vieja como mi madre, cincuenta y ocho años de edad. Ella tenía un pequeño par de esas pequeñas ropas mundanas que ellas usan. Ellos reclaman que es fresco. Ciencia dice: “Usted está loco.” Ciertamente, no lo es, usted sólo quiere mostrar su ser desnudo. Es una vergüenza, una desgracia. Una dama no se pone eso. Una mujer sí, pero una dama no. Y entonces, así que ellos . . . allí estaba ella, sentada allí. Su pobre piel estaba blanda, ella tenía esa clase de manicura como de orquídea, o lo que usted le llama, en sus labios. Y el pelo cortado

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Y Jesús los guió hacia arriba adentro, o arriba sobre las estrellas, luna, nubes, y llevó cautiva la cautividad, dio dones a los hombres. Jesús se sienta hoy a la mano derecha del Padre, subió allá, se sentó, hasta que todos sus enemigos fueron puestos por estrado de Sus Pies. Y hoy, mis amados amigos cristianos, demonios están obrando por todas partes. Y el Espíritu de Dios se está moviendo afuera, por el otro lugar, para contrarrestarlo todo el tiempo. ¡Aleluya! Ahí lo tiene. Periódicos y “digests” y todo lo demás lo está declarando, lo están vigilando, ellos no pueden ver lo que es. ¿Qué es? Es el anunciar de la gran batalla que está llegando pronto entre Dios y el diablo. Póngase al lado de Dios y esté bien en su corazón. Amén. Aquí no hace mucho tiempo yo estaba allá en Toledo, Ohio, teniendo una reunión. Yo voy a concluir. ¿Ve usted lo que quiero decir sobre demonios? Ellos están obrando. Ellos son muy religiosos, ¡tan religiosos! Oh, ellos van a la iglesia todos los domingos, repiten el Credo de los Apóstoles, y cantan el Gloria Patri. Oh, vaya, tan religiosos como ellos pueden ser. Hermano Branham, ¿quiere usted decir que eso es la verdad? Esa es la clase de espíritu que colgó a Jesucristo en la Cruz. Y Jesús dijo: “Ustedes son de vuestro padre, el diablo.” Ahora algunos de ellos decían: “Oh, Rusia es el anticristo.” ¡Nunca! Rusia no es el anticristo. El anticristo va a ser tan religioso que engañaría a los mismos escogidos si le fuera posible. Recuerde, Dios toma Su hombre, pero nunca su espíritu. Ahora, allí los tiene, allá usted, yo sólo soy responsable por la verdad. ¡Demonios obrando! Ayer yo los tenía en un reino físico; hoy les estoy mostrando el reino espiritual, donde ellos están en un reino religioso, donde están están ahora mismo, llamado cáncer, y ellos llaman ESTO, AQUELLO y lo OTRO. Pero, yo les he probado por la Biblia, ¡ellos son demonios! Ahora, aquí hoy, aquí están otra vez en los reinos religiosos, muy religiosos, muy religioso, muy piadoso. Si usted comienza, hermano, y piensa. Caín, el mismo principio de ello, era un hombre muy religioso. Esaú era un hombre muy

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a la puerta. —(El hermano Branham toca en el púlpito —ED.)— ¡Amén! Oh, yo amo esto. Eso me pone bien, me siento casi religioso ahora. Yo lo puedo ver a El mirando allí, y Oirle decir: “¿Quién está afuera? ¿Quién está allí?” El dijo: “Yo, este es Abraham hablando. ¿Quién es?” “Yo soy la simiente de Abraham.” Amén. Yo puedo ver a Abraham venir a la puerta y abrir la puerta. El dijo: “Yo soy la simiente de Abraham.” Daniel dijo: “¡Mire allí! Allí está la Piedra que yo vi cortada de la montaña.” Yo puedo oír a personas decir: “¡Allí está El! Yo le he visto a El, como polvo debajo de Sus pies las nubes se están moviendo, cuando los corderos . . . batían sus manos, las hojas, y todos ellos gritaron.” Oh, yo puedo ver aquellos diferentes en el Paraíso, esperando por El. Yo le puedo oír a El decir, “¡Vengan! Está saliendo la Luz del día allá en Jerusalem, usted tiene que salir afuera. Nosotros vamos a subir porque tú confiaste en la sangre de los toros y cabros , esperando por el tiempo de Mi Sangre. Pero Mi Sangre ha sido derramada allá en el Calvario, yo soy el Hijo de Dios encarnado. Todas las deudas de pecado están pagos, estamos en la carretera!” ¡Aleluya! ¡Gloria a Dios! Yo puedo ver a Abraham tomar a Sarah por el brazo, y aquí vienen ellos, ¡Afuera! En Mateo 27. Cuando él salió, yo lo puedo oír a él hacer un pequeño pare allí alrededor de Jerusalem. Y la primera cosa que usted sabe, yo puedo ver a Caifás y ellos parados en la calle, diciendo: “Ellos me dicen que ese hombre resucitó. Mira, ¿Quién es ese hombre que va allí? ¿Ese hombre joven, esa damita joven?” No eran más viejos, ese era Abraham y Sarah. Y ellos se desaparecieron. ellos miraron: “Alguien nos está vigilando.” Ellos se podían desaparecer igual como El podía pasar a través de la pared, la misma clase de cuerpo. ¡Aleluya! Eso es correcto. Aquí estaban todos los profetas y ellos caminando alrededor, mirando alrededor de la ciudad.

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por la tarde y se levantó el domingo por la mañana, así que, El sólo estaba muerto un día.” El dijo: “Dentro de aquellos tiempos.” Por lo cual El tenía una Escritura en la Biblia en la cual El se podía parar. Porque David, un hombre que después se descarrió, pero él era salvo, pero un profeta bajo la inspiración de Dios dijo: “No dejaré su alma en el infierno, ni dejaré que Mi Santo vea corrupción.” Y él conocía que tres días y tres noches que el cuerpo comenzaría a corromperse, y Dios le había dicho al profeta: “El no verá corrupción.” Así que . . . —(Parte en blanco en la cinta —ED)— ¡Aleluya! El tomó la Palabra de Dios, El venció a satanás cada vez en Ella. El venció la muerte en la Palabra de Dios. ¡Aleluya! El venció la muerte. Cuando ellos lo mataron a El, El murió un pecador, mis pecados y tus pecados sobre El, El bajó, yo lo puedo ver tocando a la puerta allí. Y aquellas almas perdidas salieron y dijeron: “Bueno, ¿Quién eres Tú?” El dijo: “¿Por qué no escucharon aquellos otros profetas que predicaron?” Ellos estaban condenados. “Yo Soy el Hijo de Dios que una vez vivió. Yo, Mi Sangre ha sido derramada. Yo vengo a decirles, yo he cumplido lo que los profetas dijeron que yo haría.” Hacia abajo le pasó a los demonios, hacia el infierno, tomando las llaves de la muerte e infierno del diablo, se las colgó en Su lado, comenzó a subir. ¡Aleluya! Llegando temprano en la mañana. ¡Aleluya! Vamos a dibujar un pequeño cuadro aquí. Temprano en la mañana, hay otro grupo colocado aquí en el paraíso. ELLOS NO ESTAN ALLI AHORA. Ahora, ustedes grandes amigos católicos que creen en la intercesión de los santos, si ustedes le están hablando a un santo en su iglesia, ese hombre es un pecador, él está en el infierno, o —o esperando allá por su juicio. Y si él era un santo, él está en la gloria de Dios y no puede regresar. Eso es correcto, yo puedo probar eso. La sangre de —sangre de toros no podían quitar el pecado, pero la Sangre de Jesús quitó el pecado. Yo puedo ver a Jesús ir allá donde, Paraíso, allí está el viejo Abraham, Isaac y Jacob, y los demás allí. Yo le puedo oír tocando

REINO RELIGIOSO 7 de junio del 1953 Domingo por la Tarde Cornersville, Indiana, U. S. A

¿Cuántos saben este pequeño himno, mientras yo los saludo con el más cálido compañerismo Cristiano y amor de Cristo hoy, cuántos saben esta cancioncita: El cuida de Ti? ¿Lo saben ustedes? Está bien, vamos a ver si lo podemos obtener. ¿Lo sabe usted, hermana? ¡Sí! Ahora, El cuida de ti, El cuida de ti; A través de claridad o sombra, El cuida de Ti. Oh, eso está bien, vamos a tratarlo nuevamente. El cuida de ti, El cuida de ti; A través de claridad o sombra, El cuida de ti. Nuestro Padre Celestial, —(Parte en blanco en la cinta —ED.)— . . . creemos que Tú cuidas de nosotros y has manifestado Tu amor para con nosotros, de tal modo que Tú enviaste Tu Propio Hijo, el Inocente Hijo de Dios, para tomar el lugar de pecadores culpables. Cómo te damos gracias que Tú has cuidado de nosotros y has sido cuidadoso de nosotros, para hacer esto. Y Te agradecemos tanto, Señor. Estamos contentos de reunirnos aquí esta tarde bajo los pabellones de los cielos, y pido Tus bendiciones sobre este servicio. Concédelo, Señor, que cada hombre, mujer, niño o niña que está aquí, puedan estudiar

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profundamente ahora en las Escrituras. Estamos encarándonos a un mundo controlado por satanás. Y, Padre oramos, mientras estudiamos el poder de demonios y lo que le hacen a las personas, que Tú nos des gran fe, y que muchas señales y maravillas sean obradas. Porque Te lo pedimos en el Nombre de Cristo y para la gloria de Dios. Amén. Estamos estudiando esta tarde, rápidamente entrar a ello, y yo creo que quince minutos más temprano. Todavía estamos en DEMONOLOGIA. Y ahora yo recibí un mensaje hace rato, hermano Beeler, de mis amigos, y yo comienzo en Africa a mitad de julio. Así que eso lo determina, lo tenemos todo arreglado ahora, y hermano Baxter no puede ir en este tiempo. Así que voy a tener que ir a Africa solo. Así que saliendo allí con . . . Conforme a . . .Ustedes tienen que orar por mí ahora, que el Señor me ayude, porque yo verdaderamente lo voy a necesitar allí entre. Yo estoy esperando lo menos doscientas mil personas en esa reunión. Y yo tengo una visión escrita aquí. Yo quiero que ustedes tengan el beneficio de ello. Sucedió en diciembre. Yo estaba en un cuarto una mañana cuando el Angel del Señor entró. Yo . . . Usted vea, cuando yo estaba allá yo desobedecí a Dios y yo cogí amiba. Cualquier hombre sabe —sabe lo que es “amiba,” un parásito que se allega . . . casi lo puede matar. Y porque yo hice algo que Dios me dijo que no lo hiciera. ¿Cuántos han oído la historia de ello? Yo supongo que algunos están aquí. Yo sé que las personas alrededor del Tabernáculo oyeron la historia de lo que sucedió. Dios me dijo que fuera a un lugar y me mantuviera lejos de este lugar, y entonces volver a otro lugar. Y yo dejé que los predicadores me persuadieran a no ir. Ahora, predicadores son formidables, y ellos son mis hermanos, pero usted haga lo que Dios le dice. Eso es correcto. Vea, usted tiene una misión. ¿Cuántos se acuerdan que habían dos profetas en la Biblia? Y uno de ellos, el Señor le habló, dijo: “Vete a cierto lugar y no —no vengas a . . . y regresa por el otro lado,” Y así sucesivamente. Y —y dijo: “No comas o bebas mientras estás allí.”

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de los injustos cuando un hombre muere va a un lugar esperando juicio. Jesús fue y predicó a aquellas almas que estaban en prisión allí. Lo próximo es demonios. Lo próximo es el diablo e infierno. Subiendo, ahora lo primero aquellos allí son espíritus, espíritus de hombres muertos que nunca se arrepintieron. Ellos están esperando el juicio. Lo único que ellos conocen es tonterías y lo que hicieron. Ahora, aquí arriba, estos cristianos están influenciados de arriba. Esta es una parábola. Aquí arriba está otro Santo, el Espíritu Santo, el Espíritu de un hombre, Cristo Jesús. El Espíritu Santo, el Espíritu Santo tiene parte en Su Iglesia en este reino de mortales. El diablo, por ESTOS espíritus, influyen al hombre. Ahora, mire, lo próximo son Angeles. Lo próximo es Dios. Ahora, cada mortal aquí es influenciado por uno de estos mundos. ¿Ve usted lo que quiero decir? Ahora lo que hizo esa mujer, ella pasó a ese reino, y ella está hablando con esos hombres poseídos de demonios quienes estaban empezando, los espíritus de aquellos ángeles caídos que no se arrepintieron allá atrás en el principio, y han permitido sus seres a ser poseídos de ellos, y ellos están esperando el juicio. Y ESTOS aquí están influenciados y nacidos de nuevo por el Espíritu de Dios. Y el diablo tiene sus profetas y Dios tiene los de El. ¿Ve lo que quiero decir? Es influencia, y allí vamos. Pare para separarlo. Jesús, cuando El estaba aquí en la tierra . . . Ahora, hoy El no puede empujarse hacia ese reino y sacar a un hombre justo de ese reino, él no lo podía hacer, esos hombres justos no están allí donde estaban en el Paraíso. No, señor. Paraíso fue concluido cuando la Sangre de Jesús lo quitó. Mire aquí. ¡Vaya! Si yo pudiera pensar de cómo Jesús, cuando El murió El fue y predicó a las almas que estaban en prisión. El murió pecador, no conociendo pecado, y con todo nuestros pecados estaban en El. Y Dios por sus pecados, Le mandó al infierno. La Biblia dice que El fue y predicó a las almas. Algunas personas dicen: “Hermano Branham, yo no lo puedo entender.” Dijo: “Jesús se levantó al tercer día. El murió viernes

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de Jesús, sanidad Divina, poder de Dios, liberación. Mire el valor de ello. Usted no ve adivinos y brujas fuera predicando el Evangelio. ¿Qué es lo que le sucede al pueblo? ¡Vaya! ¡Note! Y la cosa verdadera de hacer, si usted quiere averiguar si es un dólar verdadero o no, si se parece mucho a ello quítele los números de ello y envíelo de nuevo a la casa de moneda. Y si hay números allí que corresponde con eso, hay un dolar de plata esperando por él. ¿Es eso correcto? Bueno, entonces, hermano, tome lo que ella hizo y llévelo atrás a la Biblia, usted encontrará que es la bruja de Endor. Y usted tome lo que está aquí, usted lo encontrará de nuevo, está en el libro aquí en la casa de monedas, Jesucristo es el mismo ayer, hoy, y para siempre. Ciertamente, ¡Su misma obra! El no fue con tontería y disparates a las personas. Era para algún bien, para ayudar a alguien, para guiarlos a Dios. ¡Amén! Yo no estoy diciéndome “Amén” a mí mismo, pero Amén quiere decir “Así sea.” Y yo soy, yo lo creo. Yo sé que es la verdad. Ahora note, aquí está usted. Ahora, rápidamente ahora, porque no los quiero mantener más tiempo. Aquí, vamos a mostrar un pequeño retrato intelectual. Aquí hay una corriente a través de aquí, hacia abajo a través de este camino, llegando abajo a través de vida. Ahora vigile cómo canaliza. Déme su completa atención ahora, para que usted no pierda esto. Hacia abajo de ESTA manera. Ahora, aquí en este pequeño canal moran seres mortales, usted y yo. Ahora, allí, vamos a ver lo que es. Es una masa de tontería y todo lo otro, pero de cuando en cuando usted verá una luz. Usted ve oscuridad y calles, que lascivos y prosiguiendo, diablos tomando las personas. Oh, ellos visten bien, vaya, y ellos son altamente cultos como pueden ser, escolares pulidos, pero todavía es el diablo. Pero hay nacidos de nuevo sentados allí. Ahora, estas personas en este canal son influenciados de dos diferentes lados. Ahora, en ESTE lado yendo por aquí, hay una trinidad. Y en ESTE LADO yendo por aquí, hay una trinidad. Ahora, cuando, ahora el primer lugar, en ESTE lado hay almas

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Y otro verdadero profeta se encontró con él, y dijo: “El Señor se encontró conmigo después que se encontró contigo.” Y dijo: “Ven a mi hogar.” Y el profeta escuchó a lo que el otro dijo, y perdió su vida por eso. Vea, usted haga lo que Dios dice que haga sin importar lo que otros digan. Ahora nosotros estamos en esta visión. Eso . . . me despertó, trece de septiembre, o de diciembre. Y —y mientras yo estaba sentado en el lado de mi cama, y estaba preguntándome qué sería de mi futuro. Cuando yo regresé aquí, ellos estaban listos para echarme en el lazareto, parásitos casi se habían apoderado de mí. Y ellos me hicieron un examen. Y, por la gracia de Dios, ellos me dejaron regresar a mi hogar, porque estaba muy desparramado. Y yo oré, y yo fui a aquellos ministros, yo dije: “El Señor dijo que yo no fuera por ese lugar.” Dijo: “Oh, Dios le habla a alguien además de ti.” Yo dije: “Coré tenía esa idea una vez.” Y así, pero yo fui y conseguí algunas hojas y las puse sobre sus pies, y yo dije: “Acúerdese, en el Nombre del Señor, si vamos en ese viaje allí, va a ser un fracaso, y todos pagaremos por ello.” ¡Y ciertamente lo hicimos! ¡Oh, vaya! Ibamos todos a perecer. Así que regresando . .. Usted tiene tanto que contender en esos países extranjeros. Por ejemplo, una pequeña pulga lo pica a usted, le causará a usted tener fiebre. Y esa pequeña cosa, cuando lo pica, si usted se siente como rascarse, usted no se lo puede rascar. Usted mira, si es un pequeño insecto negro, no se lo arranque de encima. Tiene una pequeña cabeza, barrena la piel hacia adentro, se voltea de esta manera y se agarra. Si usted se la arranca, usted le arrancaría la cabeza de él allí, tiene un virus, y lo paralizará a usted. Así que usted no se rasque o no se lo hale, sólo coja sebo, y él respira a través de su espalda, deje caer sebo en él y saldrá Entonces hay un pequeño mosquito, él no hace ningún ruido, él viene a través del aire, él sólo lo toca, eso es todo, usted tiene malaria. Y —y entonces hay lo que ellos llaman la culebra mumba. Si

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lo pica a usted. Usted sólo vive como dos minutos después que lo haya picado. Y allí está la cobra amarilla, usted vive como quince minutos después de su picada. Y una de ellas estaba bastante cerca de mi hijo, según él pudo haber puesto su mano en su cabeza, listo ya para atacar, antes de disparar, de esa manera. Y entonces hay la cobra negra. ¡Oh, hay de todo! Entonces los montes peligrosos de los animales, por supuesto, leones, tigres, o leopardos, y todo lo demás de contender en la jungla. Y entonces las enfermedades, hay tantas clases de enfermedades allí. Y usted tiene que encararse a todo eso cuando usted va Aparte de eso, y también está el hechicero para retarlo en cada movida, vea, y todas sus supersticiones y cosas. Pero, qué maravillosa cosa es ver a nuestro Señor sólo apartarlo de lado a lado así, y entonces continuar. Y aquel día yo recuerdo parado allí, qué bueno fue lo que sucedió. Yo les diré algún día en otra reunión, porque yo quiero llegar a mi tema en esta tarde, de DEMONOLOGIA. Pero ahora, y en esto yo estaba pensando, sentado allí, ¿qué será el fin? Y regresando a través del mar, yo sé que tuvimos alrededor de cien mil conversiones mientras estuvimos allí. Y el viejo hermano Bosworth vino a mi. Dijo, yo dije: “¿Bueno, hermano Bosworth?” El dijo: “¡Yo estoy tan orgulloso de ti, hermano Branham!” El dijo: “Usted está tan seguro sólo en el principio de vida,” Y él dijo. Yo dije: “Bueno, yo creo que todo está terminado.” Yo dije: “Yo tengo más de cuarenta años, y yo creo que he peleado una buena batalla y he terminado la carrera.” El dijo: “¿Pasado de los cuarenta años?” Dijo: “Yo era de esa edad antes de yo ser convertido.” Dijo: “Yo todavía sigo bien.” El estaba casi llegando a sus ochenta, y sólo . . . Yo pensé: “Bueno, quizás eso sea correcto.” Así que él dijo: “No, usted sólo es un nuevo Branham ahora, usted sí sabe cómo controlar sus reuniones mejor, y todo.” Dijo: “Sólo, si usted alguna vez llega a América en su manera correcta, con la correcta reunión situada donde usted se puede quedar seis

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así. Y ellos dijeron: “El es el jefe de los diablos, el es belzebub, el mejor adivino en el mundo.” Ellos no lo trataron de parar para calcularlo, para ver que ese era el Hijo de Dios. Ellos no eran bastante espiritual para conocerlo. Eso es, ellos leyeron sobre el asunto. Seguro, Jesús estaba supuesto a venir en Jerusalem, montado en una mula, y demás, pero ellos viendo la segunda venida. ¡Y la misma cosa hoy! Ellos están mirando por encima de la cosa verdadera. ¡Aleluya! Eso es correcto. Yo sé que Dios está aquí en esta tarde, y yo sé que les estoy tomando mucho de su tiempo, pero usted tiene que ver esto, amigo. Si yo le llego a ver otra vez, usted tiene que saber lo que son demonios, usted tiene que conocer qué es verdad y qué es error. Y ESTA TAN CERCA, USTED TIENE QUE SEPARAR LA COSA. Ahora acuérdense, ello no va a estar allá afuera, algo bien acá en ESTE lado como los fariseos, algo bien atrás en AQUEL lado. Está aquí arriba en la puerta, recto cerca de ello. Vigílelo. Ahora si yo tomara . . . Vamos a tomar esos dos casos. Si yo cogiera y le diera un dólar, ahora, si yo le doy un dólar falso. Usaremos una parábola para que lo pueda ver. La primera cosa que usted haría, si usted es una persona inteligente, si usted toma un dólar y lo mira, la primera cosa, usted lo notará y verá de qué está hecho. ¿Es eso correcto? Usted mirará de que está hecho. Usted mirará su valor. Un verdadero dólar no es hecho de papel, es parte papel y seda, vea usted. Y la primera cosa, usted tiene que mirar el valor de él. Esa es la primera indicación. Y ahora vamos a llevarla allá en ESTE lado; y tomar al Señor en ESTE lado, que está tratando con nosotros. Ahora mire, la primera cosa que usted tiene que notar, todo . . . Vigile su artículo. En los cincuenta y tantos años de su sortilegio y llamando los espíritus de los muertos, ella ni una vez a mencionado a Dios, Cristo, sanidad Divina, liberación, juicio o nada. No hay nada sino JUEGO y TONTERIA en ello. Pero acá en ESTE lado es constantemente Dios, juicio, venida

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pedazo de estopilla de algodón. Muchas personas personificando espiritistas. Ellos son sólo estos pequeños viejos lectores sentados en el lado de la carretera, lo cual no son espiritistas en el principio. No son nada más que falsos personificadores. Pero hay un verdadero espiritista. Y nosotros personas religiosas, tenemos personificadores demás en ambos lados. Ahora quédese quieto por unos pocos minutos. Ahora note, que la Srta. Pepper es una verdadera espiritista. Y la revista dice: “Aquí hay una cosa que se puede confirmar, que cuando un hombre muere él no está muerto, él está viviendo en alguna parte, porque esa mujer llama a su espíritu de atrás y habla con las personas.” “Ahora, ¿qué es lo que ella hace, hermano Branham? ¿Lo cree usted?” Sí, señor. La Biblia lo dice, esa es la razón que yo lo creo. Y ella es del diablo. Espiritismo es un truco del diablo. Ahora note, ahora vigile esos dos. Y entonces usted hubiera visto las cartas que llegan a mí entonces cuando mí artículo según el de ella. ¿No es extraño que sólo antes del fin del tiempo Dios habló de estas cosas, y el Reader’s Digest es publicado en todo lenguaje debajo del cielo? ¿Ve? Note, ¿No es extraño que ellos siguen uno al otro? Ahora aquí llegaban las cartas, decía: “Hermano Branham, eso prueba que usted es nada más que un espiritista.” Decía: “Eso lo prueba. Mire aquí, usted le dijo a aquella mujer dónde ella iba a encontrar . . . ¿Mire a ESTA mujer?” Yo dije: “Espere un minuto. Yo he mandado una carta oficial,” perdóneme, para mandárselas a las personas.” Yo dije: “Qué poco conocen ustedes de predicadores.” Yo dije: “En vez de bautizar su cuerpo, ustedes necesitan sus cerebros bautizados.” Eso es correcto. “Usted no se detiene para pensar en cosas. Usted no tratará de considerarlo.” Esa es la misma manera que ellos hicieron el otro día ellos vieron a Jesús. Ellos conocieron que El podía, El conocía los secretos de su corazón, El conocía lo que ellos estaban haciendo

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u ocho semanas en un lugar y levantarla y anunciarla, dijo: “Usted puede hacer algo, pero, y para nuestro Señor.” Así que continuamos adelante de esa manera, así que era muy —muy bueno. Entonces después de un rato yo vi una visión de cuando yo estaba en América, y vino a mi, y me llevó de regreso a Africa y me mostró la misma reunión establecida allí al frente de Durban. Y la primera reunión se desvaneció en la historia, partiendo hacia el Oeste. La segunda reunión se levantó y, cuando se levantó, fue aún más grande que lo que fue la primera reunión. Y El . . . Yo oí un grito, y un Angel iba saliendo del Cielo, El tenía una gran Luz. Y el Angel del Señor el cual está parado por nosotros aquí, estaba parado, siempre parado a mi derecha, acá en ESTE lado. Y estaba parado allí, y estaba —y estaba moviéndose alrededor, y yo vi a este hombre parado debajo. El es —El no es . . . Ahora, eso no es visión cuando usted lo ve a El. Es tan real como que usted me está mirando a mí. Por lo cual, usted lo puede oír andar y hablar con usted. Y cuando El . . . Cualquier cosa. El es tan real como . . . no es una visión, el hombre está parado allí igual como usted. Su voz es igual que la mía o igual que la suya sería. Pero una visión, algo que se presenta delante de usted y usted lo ve, así. Pero este hombre sólo camina, y se para allí. Así que él me dijo lo que iba a acontecer. Y él dijo eso. Este Angel bajó, y él me dijo que volteara y mirara hacia ESTE lado . Y miró hacia India, ahora. Y yo no digo que es en India, pero es cerca. Pero ellos eran gente india. Porque los Africanos son grandes y corpulentos, como grandes y gruesas personas. Algunos de ellos casi siete pies de alto, y pesan, oh, doscientas ochenta ó trecientas libras, corpulentos. Los Zulus, ahora, los Shughi y los Bazuda, y, oh, hay tantas diferentes tribus. Habían quince diferentes tribus sentadas allí aquel día, yo les estaba hablando. Yo decía una palabra, como: “Jesucristo, el Hijo de Dios.” Yo iba y me tomaba un vaso de agua antes que pasara a través de todos los intérpretes. Uno decía . . . ¡Y todos esos ruidos! Yo

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pensaba cuando oía gente pentecostales hablando en lenguas, que quizás uno hablando en una clase de sonido y otro hablando otro, ¿cómo es posible eso en el mundo? Pero yo creo que la Biblia es correcta, y sé que es, cuando dijo: “No hay un sonido sin significado.” Algunos de ellos dirían, uno de ellos: “Blrr blrr blrr blrr,” y eso quiso decir: “Jesucristo, el Hijo de Dios.” Otro de ellos diría: “Cluk, cluk, cluk, cluk,” y eso era: “Jesucristo, el Hijo de Dios,” en su lenguaje. Así que no importa qué clase de sonido sea, es un significado en algún lugar. Eso es correcto. No importa qué clase de ruido sea, significa algo para alguien en algún lugar. Y cuando El estaba . . . Ellos compartían eso. Y yo noté que hacia mi izquierda, cuando ese Angel bajó y yo vi como un enjambre, y ellos eran hombres con . . . parecía que ellos tenían un —un paño alrededor de ellos de ESTA manera, y envuelta y amarrada, como alrededor de un pequeño bebé, el paño. Y era. Y yo casi podía ver lo más lejos que podía, no era nada sino gente. Y entonces este Angel se volteó en una gran luz oscilante, y comenzó a inclinarse hacia atrás y hacia adelante de ESTA manera. ¡Y yo nunca había visto tantas personas en mi vida! Y entonces este otro Angel vino bien cerca hacia mi, y El dijo: “Hay trescientos mil de ellos en esa reunión.” Y yo lo tengo escrito aquí. Y usted escríbalo en algún pedazo de papel, como cuando yo dije sobre el pequeño muchacho siendo resucitado en Finlandia. Usted escriba eso en la guarda de su Biblia o algún lugar, que en esta reunión va a haber una reunión, y lo oirá por alguna salida, de trescientas mil personas asistiendo a esa reunión. Ahora, vea si eso no es correcto. Eso será tres veces el tamaño de lo que la otra era. ¿Ve? Trescientas mil personas para atender la reunión. Y yo estoy tan contento de llegar para estar allí, yo no sé qué hacer, porque yo quiero ganar almas para nuestro Señor. Y allí, una vez, viendo —viendo treinta mil ateos inconversos venir a Jesucristo en un llamado del altar, treinta mil ateos inconversos. Ahora vamos a nuestro tema inmediatamente. Ayer estudiamos la técnica de demonios. Yo he estado pensando hoy, cómo Dios

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arriba estaba orando por él, llamado hermano Branham.” Dijo: “El ha hecho una oración por el bebé.” El dijo: “¡Espérese un minuto! Cabello negro usando un abrigo gris.” Y dijo: “Esa es ella.” Dijo: “¿Dónde está ese doctor?” Y le dijo. Lo llevó allá arriba y el doctor realizó la operación, el bebé se sanó. Ahora, eso vino a través del Reader’s Digest, vea usted. Y hermanos Mayo me llamaron para una entrevista sobre eso. Dijeron: “Reverendo Branham, ¿qué le hizo usted a ese bebé?” Yo dije: “Nada, yo nunca lo toqué. Yo sólo dije lo que Dios me dijo que dijera. El hombre le obedeció.” Ahora, la cosa graciosa, de esto, como dos semanas después de eso, o dos semanas antes de eso, o tres en el, Reader’s Digest, quizás un mes después, el artículo de la Srta. Pepper salió. Ahora, ella es una genuina bruja o espiritista. Ahora, ahí hay una que es real, y hay alguien personificando. Ellos han tenido esa mujer desde 1897. Ella tiene sobre cien años ahora y en Nueva York, ambos sordos como un poste. El Reader’s Digest, tomó . . . Yo pienso que vino como dos meses o un mes antes del mio, y usted lo puede encontrar, el otoño temprano. Mr. Baxter lo tenía aquí el otro día. Si yo lo hubiera pensado, yo lo hubiera tenido . . . yo sabía que iba a decir esto, yo —yo lo hubiera tenido conmigo. Y yo se lo puedo conseguir a usted y daba como doce a catorce páginas. Ella era sólo una sencilla ama de casa. Y ella calló en un estado hipnótico un día, mientras sufría y ella comenzó a hablar a los muertos. Y ellos tenían esa mujer alrededor del mundo, por todas partes. Ellos la llevaron a Inglaterra. Aun cambiaron sus ropas, muchas veces, y ver si habían secretos y cosas, y llegó allí y disfrazó a alguien con una mascara en sus rostros, un griego e hizo un papel como si fuera un ingles. Y ella le contó todo. Y él —él quería que llamaran a uno de sus compañeros muertos. Ahora, la única cosa, vea, alrededor del mundo, y aquí está en el Reader’s Digest lo que decía allí, aquí unas cuantas noches atrás o unos cuantos meses atrás, una de esas cosas fue expuesta. Un hombre estaba supuesto a besar la mano del espectro de su madre, y el próximo día fue probado por la policía que él sólo besó un

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corriendo por sus mejillas, necesitaba afeitarse y él —él caminó hacia arriba y aquí está lo que decía el Reader’s Digest. ¿Ve? Y yo no hice preguntas pero miré directamente al rostro del bebe, dijo de dónde era el niño, que había estado en la Clínica Mayo, y de todo lo que le sucedía a él, lo enfermo que había estado, y todo. Y así que el padre comenzó a llorar, y comenzó a marcharse. Y dijo que comenzó a marcharse de la plataforma, y él se volteó, él dijo: “Eso es correcto, señor.” El dijo: “¿Pero vivirá mi bebe?” Yo dije: “Eso yo no se lo puedo decir.” Yo dije: “Sólo un momento.” Yo vi aparecer una visión Yo dije: “Usted no quisiera creer esto porque Mayo y Hopkins ambos dijeron que la operación no podía ser realizada en el cerebro, pero yo te diré qué hacer. Usted, mañana, usted siga adelante con este bebé, durante los próximos tres días usted se va a encontrar con una mujer de cabello negro en la carretera y esa mujer te va a preguntar qué es lo que pasa con el bebé y entonces ella te va a decir de algún doctor de una pequeña ciudad aquí afuera que puede realizar esa operación, y usted no lo va a creer porque en Mayo lo rechazaron y dijeron que era imposible de hacer. Pero esa es la única oportunidad que su bebé tiene, a través del poder de Dios, la misericordia de Dios y esa operación. Ahora, si usted me cree que soy Su profeta vaya y haga como yo le digo.” Como poniendo higos en sequía, y así sucesivamente. El dijo, él se volteó y dijo: “Gracias,” se marchó. Dos días o mas habían pasado y él estaba en la calle un día, y una dama caminó hacia arriba, dijo: “¿Qué es lo que pasa con su bebe?” Dijo: “Tiene una —una enfermedad del cerebro” y él continuaba hablando de esa manera. Y, bueno, ellos —ellos pensaban que era bastante mala, usted sabe. Así que él dijo sólo en unos cuantos minutos algo había acontecido. Ella dijo: “Señor. Yo conozco de alguien que pueda hacer esa operación.” El dijo: “Dama, mire, los hermanos Mayo lo habían desahuciado y dijeron que no podía ser.” Dijo: “Un hombre aquí

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procede. Usted no sabe que la libertad es salir. Ahora, yo no soy un maestro, yo estoy bien lejos de ser un —un expositor de la Biblia. Y yo soy . . . mi educación es limitada a un séptimo grado, así es. Y, aquello. Yo Salí de la escuela hace como veinticinco años, así que eso hace mucho tiempo. Y yo no tengo —tenía mucha educación, pero todo lo que reconozco es lo que he recibido por inspiración. Y si esa inspiración. Y si esa inspiración no compara con la Biblia, entonces está equivocada. ¿Ve? Tiene que ser la Biblia. No importa qué inspiración sea. Tiene que venir, aquí está el fundamento de Dios. No hay otro fundamento puesto sino ESTE. Y lo que ESTE es, si lo que yo pueda decir es contrario a ESTO, usted deje que mis palabras sean mentira, porque ESTA es la verdad. ¿Ve? ¿Ve? Y si un ángel le dice algo a usted que sea diferente de ESTO, Pablo dijo: “Deje que él sea anatema.” ¡Aún un ángel de luz! Ahora, hay muchas grandes cosas. Yo sólo . . . la única . . . Yo escogí dos días, para conseguir este tema para las personas, eso fue ayer y hoy, del servicio de la tarde. Ahora, la razón que yo hice esto, es para darme una pequeña prueba para ver si Dios me ayuda. Hay algo en mi corazón. Y esto es, que después de este gran Mensaje, y después Dios Mismo confirmando que lo que yo he dicho sea la Verdad, en Su Palabra. Por Su Palabra, primero, y después por señales y maravillas. Ahora, yo pienso, con el Evangelio de Verdad a la Iglesia, yo estoy bajo obligación a Dios para traerle esto a la iglesia. Eso es correcto. Ellos están tan separados en tantas diferentes organizaciones y grupos sectarios de ello, hasta que está equivocado. Todos somos hijos de Dios cuando nacimos de nuevo. Aquello, vea. Y la verdad de la cosa es que Dios quiere que nosotros sepamos, que somos Sus hijos. Ahora, recuerde, el templo de Salomón fue cortado de todas partes del mundo. Y aquí venía una roca torcida de ESTA manera, y una roca torcida de AQUELLA manera, y una cortada de AQUELLA manera, pero, cuando se juntó, no había zumbido de sierra o un sonido de martillo, todo fue exactamente a su lugar. Dios fue el instructor de eso.

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Y Dios tiene una iglesia llamada las Asambleas de Dios, y una de ESTA, y una de AQUELLA, para cuando todos nos juntemos, ellos serán un gran grupo de amor fraternal, y Dios la pondrá . . . congregar esa iglesia junta y llévarsela hacia arriba al cielo. Cada cuadro famoso, antes de ser suspendido, pasa a través del pasillo de los críticos primero. El hombre que pintó ese . . . ? . . . Oh perdónenme, yo no puedo llamar su nombre, pintó la Ultima Cena, de cualquier modo, le costó toda la vida. El pintó ese cuadro. Fue cerca de veinte años, o diez años, yo creo, entre pintar a Cristo y Judas. ¿Y usted se dio cuenta, en ese famoso cuadro, ese mismo hombre posó para Cristo, diez años después posó para Judas? Eso es correcto. El lo hizo. Diez años de pecado, de un gran cantante de ópera, para tomar el lugar de Cristo, llegó al lugar de Judas. Usted no tiene que coger diez años, sólo toma diez minutos, hará la misma cosa a usted. Eso cambiará su carácter, en pecado. Pero, de todos modos, aquel cuadro pasó a través de todos los críticos. Y eso es lo que yo pienso de la Iglesia de Dios, el grupo que es llamado. Bueno, yo no quiero decir esto por alguna crítica. Yo he navegado los siete mares, y yo estoy en mi tercer viaje alrededor del mundo, y las personas dicen: “¡Santo rodador, santo rodador!” Y yo he explorado el mundo y todavía no he encontrado un santo rodador. Ese es el nombre que el diablo le ha puesto a las personas. Eso es todo. No hay tal cosa como un santo rodador. Y yo tengo estadísticas de cada seiscientas secenta y ocho diferentes iglesias que hay, y organizadas en el mundo, y no hay ni una de ellas llamada Santo Rodador. Y eso es del Gobierno. No hay una iglesia Santo Rodador que yo conozca. Así que es sólo algo que el diablo llamó. Pero, ahora, en todo esto, todas estas cosas, Dios ha pintado un cuadro. Y una vez estas pequeñas viejas iglesias estaban aquí afuera, algunos de ustedes . . . Yo observo estos hombres canosos. Mi hijo, ayer, yo estaba en el cuarto estudiando, y un ministro vino y dijo: “Quisiera saludar a su papá.” Seguro, mi hijo ha sido criado con el hermano Baxter y ellos quienes sólo: “No,” eso es, rápido. A mí no me gusta eso. ¿Ve? No importa si yo . . . Seguramente, yo no puedo servir al

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vea usted, vea, esos somos nosotros, vea: “¡Somos tan inteligentes! Sabemos todo, usted sabe, y no hay necesidad de decirnos nada. Nosotros lo tenemos todo escrito.” ¿Ve? Así que entonces, así que; “¿Un Divino qué? ¿Vino todo el camino?” Pues, ellos pensaron que eso era horrible. De todas maneras, el periódico cogió un —un carro y lo enviaron allá. Y él dijo, cuando llegaron a la línea. Donde estaba localizado, dijo dos mil setecientas personas estaban esperando para que eso orara por ellos. Pero dijo, cuando ellos vieron aquel deformado, niño pequeño y aquel pobre padre con su gorra puesta, su abrigo rasgado, dijo que todos se echaron hacia un lado y le dieron su lugar. Cuando él llegó a la plataforma . . . Es en contra de las reglas parar una tarjeta de oración. Alguien debe venir a la reunión y conseguir su propia tarjeta. Si ellos son cogidos en la línea, cambiando tarjetas de oración con otras personas, la tarjeta de oración es deshonrada. ¿Ve? Porque usted tiene que venir y oír las instrucciones y conocer cómo recibirla. Eso está en usted. Usted no puede conseguirla para otra persona. Usted mismo tiene que venir y conseguirla. Así que usted oiga. Alguna persona grande dijo: “Sí, bueno yo no creo mucho en esta cosa, pero quizás si él me sana yo . . .” Vea usted, y entonces eso causa una bulla en la plataforma, así que ellos llaman esa cosa fuera antes que llegue allí. Así que cuando el niño comenzó, o el padre comenzó en la plataforma delante de las personas, Billy le preguntó por su tarjeta de oración. El no tenía ninguna. Dijo: “Entonces yo lo siento, señor.” Dijo: “Usted tiene que esperar.” El dijo: “Bien.” Dijo: “Yo esperaré.” Dijo: “Yo tomaré mi turno como los otros entonces.” Dijo: “Yo no sabía que yo tenía que hacer esto.” Y así que yo estaba hablando con alguien, yo me apresuré oirlo. Yo vi ese padre marcharse, y yo dije: “¿Qué es lo que sucede?” El dijo: “El no tenía una tarjeta de oración.” Y algo me dijo: “Tráiganlo nuevamente.” Así que yo dije: “Tráiganlo aquí.” Y el padre subió, y lágrimas

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encogió sus piernas para arriba debajo de ello, y ellos dijeron: “No hay ni una operación o nada que se pueda hacer.” Así que él se lo llevó para Canadá. El dijo: “Yo aún no estoy vencido.” Usted tiene la edición de noviembre del Reader’s Digest, y es llamado el —el —El Milagro de Donny Morton. Y—y entonces él dijo que él, allí adentro, que el —que el hombre dijo: “Yo aún no estoy vencido, porque yo conozco un sanador de fe llamado William Branham que causó que dos de mis amigos que estaban sordos y mudos que hablaran y oyeran.” Y ellos llamaron para tratar de averiguar donde yo estaba en —en América todavía. Y yo estaba al otro lado en Costa Mesa, California. Y si . . . El artículo cuando usted lo leyó, lo hacía a usted llorar. Ello le quebrantará su corazón, como él pasó a través de ventiscas y todo lo demás con el niño. El dijo: “Tenga cuidado, Donny.” Dijo: “Ahora, no estamos vencidos.” Y el pequeño niño no se podía sonreír, casi, él estaba tan afligido. Dijo: “No estamos vencidos, le vamos a pedir a Dios. Iremos al profeta de Dios y le preguntaremos.” Así que entonces ellos vinieron a través de la nieve. Y ellos finalmente llegaron allá abajo, y la mamá venía con ellos, y ellos no tenían suficiente dinero para ir por avión, así que ellos mandaron a la madre de regreso, y el niño y padre habían venido por autobús, y como ellos viajaron todo el camino desde Winnipeg, Canadá, a Costa Mesa, California. Y ellos llegaron allí, sin dinero, y el padre cuenta cómo él tenía que cambiarle los pañales a él, pequeño niño como de siete u ocho años de edad, sólo perfectamente inútil. Y cómo él estaba, no podía tener la oportunidad para comer o nada, y decía que su pequeño niño sólo podía oírle a él hablar y él podía decir cómo sus ojos se veían que él estaba —él trataba de sonreír, ustedes saben y saben que él le decía —le decía de diferentes escenas que él podía ver en el otro lado en América. Y cuando ellos llegaron allí a California, ellos le dijeron al guía de viajes, lo que él vino a ver. El dijo: “¿Vine a ver un Divino qué?” Y un gran signo de interrogación. Seguro, usted podía imaginarse lo que América dijo sobre ello,

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hombre y a Dios, también. Pero yo pienso que debo saludar a mis hermanos. A mí me gusta hacer eso. Hay algo en ello, yo quiero saludar a un —a un ministro. No sólo un ministro, pero cualquier hijo de Dios, yo quiero hacerlo. Yo no sabía de ello hasta que mi esposa me lo dijo un poco más tarde. Bueno, si él le hubiera dicho al ministro: “Espere un minuto, -él está atrás en oración, y —y voy a ver lo qué él dice.” Bueno, aquello, aquello, hubiera sido mucho mejor. Así que yo le di una pequeña corrección en eso, no hacer eso. ¿Ve? Y así que es verdad, usted sólo no puede estar fuera como dijo el hermano hace un ratito. Si usted lo hace, entonces de noche yo — Estoy cansado, vea usted. Las personas comienzan a hablar, y cada una tiene posiblemente una enfermedad, y cuando comienzan a hablar de ello, rápidamente, allí está el Angel del Señor allí mismo para contar de ello. Hay alguien sentado mirándome ahora, conoce que eso es la verdad de hace sólo unos cuantos minutos atrás, o como una hora y media atrás. Una dama sentada aquí, que no sabía lo que era, que el Angel del Señor le habló la otra noche y le dijo algo y ella no lo pudo entender. Pero hoy sucedió, así que ella conoce ahora lo que quiere decir cuando El le estaba hablando. Y yo estaba parado allí hablándole a ella, y el Angel del Señor fue afuera recto hacia atrás y le dijo lo que era el problema de ella, y de qué se trataba todo eso, y lo que ella estaba pensando, y uno de sus queridos, y cómo Dios había hablado y dijo que El lo confirmaría y que iba a tomar lugar. Así que esa es exactamente la manera cómo será. Vea, Dios lo ha dicho. Bueno, ahora, qué de los pocos tiempos que todo . . . y entonces, y cada visión sólo lo debilita mucho más, vea. Y la primera cosa que usted sabe, cuando usted llega a la iglesia por la noche, usted está tan completamente desgastado hasta que usted casi no sabe qué hacer. Y usted ahora ore por mí, vea, porque es de una reunión a otra, a otra. Esa era la única reunión, ello sería diferente, si yo iba ahora de regreso a mi casa y no fuera a hacer nada por unos cuantos meses, salir y coger mi linea de pescar, pero

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yo tengo que ir de una reunión hacia otra, de una hacia otra, vea usted. Eso es lo que lo hace. Y todos ustedes oren, ustedes personas aquí en la audiencia. Ellos me dijeron anoche que yo . . . — (Parte en blanco en la cinta —ED.)— . . . No respondió al llamado. Ahora, eso es bastante peligroso, vea usted. Cuando ellos lo dijeron, bueno, algunas veces hay luces que no brillan, hay una parte oscura en medio de allí. Y yo observo al Angel del Señor cuando El está parado aquí, yo lo puedo sentir. Entonces yo lo siento que se mueve de mí, y yo observo, El me deja y El se va a otro lugar y se para allí un corto tiempo, y yo lo puedo ver. Y resplandece y allí viene una visión. Entonces yo veo una visión. Yo observo qué clase de persona está alrededor de allí. Y yo encuentro a la persona, entonces yo hablo. Eso es lo que toma lugar. Eso es lo que sucede. Usted no le tiene que decir esto a todos, pero eso es, eso es lo que toma lugar, vea usted. Es todo en el reino espiritual. Entonces si esa persona no responde, eso sería como leer la Biblia aquí y decir: “No hay nada a eso,” alejarme de eso. ¿Ve? Así que eso lo hace bastante malo. Así que esté alerta, ponga atención, vigilen. Cuando El habla, conteste. Vea, sólo esté listo para contestar en cualquier momento. Y así que mi esposa, y hermano Beeler y muchos de ellos, esta mañana, me estaban diciendo sobre ello, que estaba llamando a un hombre acerca de su hermano en algún lugar que había algo mal con él, y así sucesivamente, y el hombre no respondió al llamado, así que eso no puede ser ayudado. Eso es entre Dios y el hombre. La visión me dejó, entonces no la podía encontrar más, porque El no contestó. Así que vigile y esté en alerta. Ahora tomando este tema en DEMOLOGIA, y hablando sobre demonios. Ahora, personas, cuando ustedes dicen: “demonios” rápidamente comienzan a pensar: “¡Oh, algún fanatismo o algo!” Pero demonios son tan reales como Angeles, son igualmente real. Y el diablo es tan real un diablo (como Jesucristo es el Hijo de Dios). ¡El es un diablo! El cielo es tan real. Y si no hay tal cosa como infierno, no hay tal cosa como cielo. Y si no hay un Eterno

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mi artículo, o el artículo que ellos escribieron de mí en Reader’s Digest aquí, como en octubre . . . edición de noviembre? Bien. ¿Notaron ustedes cómo fue eso? ¿Notaron ustedes como dos o tres semanas antes de eso, esta gran famosa espiritista aquí que había sido juzgada desde hace mucho tiempo atrás, ella, Srta. Pepper.? ¿Lo notó? ¿Algunos de ustedes han leído eso, el artículo de la Srta. Pepper en el Reader’s Digest? No es eso extraño cómo aquellos dos espiritistas. . . ¿Cuánto tiempo tengo yo? No sino sólo un poquito. Veinte después, sólo tendré que avanzar. Yo sé que ustedes tienen . . . Miren, dispénsenme por un minuto. Usted sabe, hay—hay falso. Hay un verdadero y un falso de todo. Si yo le doy a usted un dólar, y yo digo: “¿Es esto un buen dólar?” Y usted lo mira, tendría que parecerse mucho a un verdadero dólar o usted no lo creería. ¿Es eso correcto? Así que ello tendría que ser una buena imitación. Y si Jesús dijo que los dos espíritus en los últimos días serían tan parecidos que engañaría los mismos escogidos si fuera posible, personas religiosas. Ahora acuérdense. Ahora, no hay nada allá afuera en aquellas frías y formales —frías formales afuera, ellos sólo tienen una forma de piedad, vea usted. PERO ESTOS DOS ESPÍRITUS SON VERDADEROS ESPÍRITUS, SERÍAN TAN IDÉNTICOS QUE ENGAÑARÍAN LOS MISMOS ESCOGIDOS, COMO ESTARÍAN OBRANDO LADO A LADO EN LOS ÚLTIMOS DÍAS. ¿DIJO ESO JESÚS? LO DIJO. Ahora, vigile, amigos, le dibujaremos un pequeño retrato que yo quiero que ustedes miren por un minuto. Y me den su atención completa, porque le voy a dar una parábola y entonces ustedes lo verán. Ahora, en el Reader’s Digest, escribieron allá arriba, yo estaba parado allá afuera, teníamos dos mil setecientas personas esperando para que yo orara por ellos, parados allá afuera. Usted leyó el artículo. Y un hombre vino del Canadá y él tenía un niño pequeño que había estado en Mayo y John Hopkins, una seria enfermedad del cerebro que encogió sus pequeñas manos para adentro. Así, y

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Yo dije: “Amigos, no hay FBI. ¿Qué tiene que ver el FBI con predicar la Biblia?” Yo dije: “Ciertamente que no. No eran dos agentes del FBI para exponerme. Pero, aquí está la exposición, allí ellos están sentados allí arriba, aquellos dos predicadores allí mismo.” Y ellos se bajaron. Yo dije: “¡No se bajen de esa manera!” Y dos de aquellos grandes tejanos iban a ir allá arriba y agarrarlos a ellos. Yo dije: “No, hermanos, esto no es un asunto de carne y sangre, sólo siéntense quietos. Dios se hará cargo de ellos.” Yo dije: “Ahora, hermano, miren, mientras ustedes están allá arriba, miren hacia acá.” Yo dije: “Sí . . . Ustedes dijeron que yo era Simón el hechicero, bajo brujería, yo estaba embrujando a las personas.” Yo dije: “Si yo soy Simón el hechicero, entonces usted es el hombre de Dios. Ahora ustedes bajen aquí a esta plataforma, y si yo soy Simón el hechicero deje que Dios me ataque a muerte. Y si yo soy el profeta de Dios, ustedes bajen y deje que Dios los ataque a muerte. Ahora veremos quien está en la verdad y en el error. Ahora ustedes bajen. Cantaremos un himno.” Fuera del edificio salieron, y desde entonces jamás los hemos visto. ¿Ve? Yo dije: “Vengan. Si yo soy Simón el hechicero, deje que Dios me ataque a muerte. Y si yo soy el profeta de Dios, entonces Dios los atacará cuando vengan a esta plataforma. Si yo soy verdad ante Dios, Dios los dejará morir en esta plataforma.” Ellos conocían mejor. Eso es verdad. Ellos conocían mejor. Ellos habían oído de otros lugares. Eso es correcto. Así que nunca piense sino que Dios todavía es Dios, El contestó. Ahora, esta bruja de Endor, ella llamó al espíritu de Samuel, y Saúl habló con Samuel. Ahora, usted puede pensar como aquello podía ser hecho. ESO NO SE PUEDE HACER HOY. NO, SEÑOR, porque la sangre de los toros y cabros era solamente una espera para el tiempo del cumplimiento. Cuando un hombre moría en aquellos días . . . Predicadores, respáldenme si ustedes piensan que es correcto. Cuando un hombre moría, el moría bajo el pacto de un animal, y su alma iba al paraíso. Y allí se quedaba hasta aquella, para el—para el día de redención. Y su alma estaba allí. Déjeme mostrarles un pequeño retrato aquí. ¿Cuantos leyeron

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bendecido . . . castigo eterno, mejor dicho, no hay eterno bendecido. Si no hay día, no hay noche. ¿Ve? Pero tan seguro que hay día, hay noche. Si tan pronto . . . Tan seguro que hay un cristiano, tiene que haber un hipócrita. Tan seguro que hay alguien que es genuino de Dios, hay alguien para personificar eso. ¿Ve? Es exactamente pro y contra, negro y blanco, hacia abajo a través de la vida en todo, verdadero y falso en todo lugar. Y hay un Evangelio Verdadero. Hay un falso bautismo. Hay un creyente manufacturado y hay uno verdadero. Hay un verdadero dólar americano, hay un falso dólar americano. Hay un genuino cristiano, hay un genuino hipócrita, vea, eso es personificando. Así que usted encuentra eso, todo ello va junto. Ahora, no lo podemos separar, Dios deja que la lluvia caiga. Puedo, déjeme hablar aquí por un corto tiempo. Cuántos predicadores hay aquí, levanten sus manos. Alrededor, predicadores, déjeme ver sus manos. Bueno, Dios les bendiga, hermanos. Ahora, ahora, usted no tome esto ahora por doctrina, pero sólo antes de aproximarnos a este tema esencial yo les diré qué. ¿Cuántas personas pentecostales hay aquí, levanten sus manos. Alrededor por todo lugar, son ustedes pentecostales? Está bien. Yo les voy a decir lo que tenía cuando primeramente yo vine a su reino, rango. Yo estaba aquí arriba en Indiana, en un cierto lugar llamado Mishawaka. El primer grupo de gente pentecostal que yo había visto era llamado las —las asambleas Pentecostales de Jesucristo, yo creo, o algo así, buen grupo de personas. Ahora ellos se han organizado juntos, y se llaman Pentecostales Unidos. Ellos se desligaron del resto de ellos. Por una decisión de bautismo en agua. Eso no lo hace a ellos algunos hipócritas. Hay muchos genuinos, y verdaderos genuinos cristianos nacidos de nuevo del Espíritu Santo en sus rangos. Y Dios le dio el Espíritu Santo por ser bautizados en el “Nombre de Jesús,” y le ha dado a otros el bautismo del Espíritu Santo siendo bautizados en el “Padre, Hijo y Espíritu Santo.” Así que Dios le dio el Espíritu Santo al que Le obedezca, así que quien — quien obtuvo, ¿quién le obedeció? Allí lo tiene usted.

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Si a usted se le olvida, y aquellos que quieren ser de una manera déjelos que sean, y usted siga adelante y sean hermanos. Eso es todo. No . . . Lo que lo hizo, fue, dividir entre ellos, desligamiento, vea, dividir, desbaratar, dividir la hermandad, desordenándose y separándose ustedes mismos. No, señor, nosotros no somos separados, somos uno. Eso es correcto. Pero, cuando yo estaba vigilando a esas personas. Ahora, yo, salí de una pequeña regular vieja iglesia Bautista del Sur, por el cual yo vi esas personas, yo entré allí y ellos batiendo sus manos, gritando: “¡Uno de ellos, uno de ellos, contento por decir yo soy uno de ellos!” Yo pensé: “¡Vaya! ¡Whew! Primera cosa que usted sabe, aquí venía alguien bajando a través de allí, danzando tan fuerte como podían danzar. Yo pensé: “¡Qué modelos de iglesia! ¡Yo nunca había oído tales cosas como esas!” Yo seguí vigilándolos alrededor, deseando saber. “Bueno, ¿qué en el mundo le sucede a estas personas?” Ahora, usted me ha oído decir la historia de mi vida, donde yo señalé esa reunión allí. Pero esta es una cosa que yo nunca he mencionado, nunca antes lo he dicho en público. Así que ellos . . . Ahora, si lo quiere borrar de su grabadora, por lo cual, usted lo puede hacer. Bien. Ahora, en esto yo vigilaba, y ahora yo pensé: “Bueno, esas personas son las personas más contentas que yo he visto en mi vida.” Ellos no estaban avergonzados de su religión. Nosotros bautistas nos avergonzamos un poco de una vez en cuando, usted sabe, vea. Y cuando van a orar usted sabe, se van detrás del abanico, usted sabe, y — y pero nosotros . . . Pero esas personas no lo eran, hermano, ellos — ellos tenían religión por todo adentro, afuera, por todas partes de ellos. Bueno, yo me acuerdo aquella noche cuando yo fui a la plataforma. Dijo: “Todos predicadores en la plataforma.” Era una convención. Ellos tenían que tenerlo aquí en el Norte a cuenta de — a cuenta del problema de color, la ley del Sur de Jim Cron. Así que todos se encontraron allí de todos los lugares. Así que yo estaba sentado allá arriba y él dijo . . .

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alquilé diez niños mejicanos.” Dijo: “Mire aquí, Reverendo Branham para ser expuesto esta noche por la FBI, un fanático religioso,” o algo u otra cosa así. Y dijo: “Está en cada uno de esos automóviles.” Dijo: “Yo alquilé a diez niñitos mejicanos, para que fueran y los arrancaran y los pusieran aquí.” Dijo: “Oh, ¡Yo siento como si yo pudiera agarrar a ese individuo!” Yo dije: “No se apure, Dios lo agarrará a él, vea.” Yo dije: “Solamente déjenlo solo.” Así que yo vine. Y aquella noche cuando entramos, yo nunca olvidaré, caminé hacia el cuarto. Hermano Baxter cantaba “Sólo creed.” El dijo: “Ahora, hermano Branham dice que esta noche nosotros desalojemos el edificio.” Dijo: “Yo me voy a ir hacia la parte de atrás y sentarme.” El dijo: “Ellos lo están arreglando para exponerle esta noche aquí en la plataforma.” Y él dijo: “Yo lo he visto en muchas batallas fuertes y he visto a Dios tomar Su lugar.” Dijo: “Yo—yo sólo me iré hacia atrás a sentarme.” Yo caminé hacia arriba, yo dije: “Yo estaba leyendo un pequeño artículo aquí donde yo estaba supuesto a ser expuesto aquí en la plataforma.” Yo dije: “Yo—yo quiero que los agentes del FBI vengan hacia adelante y me expongan aquí arriba en la plataforma.” Yo dije: “Yo estoy parado aquí en defensa del Evangelio; yo quiero que usted venga y me exponga.” Y yo esperé. Yo dije: “Quizás no estén aquí todavía.” Yo sabía dónde yo estaba. El ya me había mostrado en mi cuarto allá arriba, lo que iba a suceder, antes de yo salir, vea usted. Y yo dije, yo dije: “Quizás yo debo esperar un poquito. ¿Podemos cantar un himno?” Y alguien subió y cantó un sólo. Yo dije: “Mr. agente del FBI, ¿está usted adentro o afuera? Yo estoy esperando para ser expuesto. ¿Puede usted venir hacia adelante?” Nadie vino. Yo me mantuve pensando donde estaban. El Señor me dijo lo que era. Eran dos predicadores descarriados, y yo—yo los estaba vigilando. Yo vi una sombra negra colgando en la esquina. Yo sabía dónde estaba. Yo miré allí, y se movió hacia arriba y subió hacia la galería de esta manera. Un hombre con un traje azul puesto, uno con uno gris.

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Ella dijo: “Bueno, dijo: “Yo siento haber hecho lo que hice.” Yo dije: “Usted nunca ha hecho nada, hermana.” Ella dijo: “Bien, ¿no está—no está usted temeroso de ir allá?” Y yo dije: “No.” Ella dijo: “Bueno, el FBI está allí.” Yo dije: “Bueno, yo los había dejado venir a mi reunión antes y ellos fueron salvos.” Yo dije: “Mr. Al Ferrar.” Capitán Al Ferrar, muchos de ustedes conocen de su conversión allá arriba en Tacoma, Washington, fue salvo en una galería de tiro. Vino a la reunión, él dijo: “Yo he seguido este hombre por dos años. Yo oí sobre las finanzas, y yo lo vigilé, y fue a través de todo lugar.” Y dijo: “Es la verdad, usted no está oyendo a un fanático esta noche, usted está oyendo a la Verdad.” Dijo: “Uno de los hombres en la fuerza policíaca, que yo tuve a un doctor que examina a su hijo y lo envía a través de la línea de oración,” y dijo: “Al niño le fue dicho exactamente lo que estaba mal con él y lo que le sucedió a él. Y él dijo que en ocho días regresaría a la escuela, un caso de polio . . .” Y dijo: “En el octavo día el niño regresó a la escuela.” Dijo: “Yo le he seguido por dos años,” ante diez mil personas. Allí está todo, hay un retrato de ello en la reunión de Seattle, en—en su libro. El dijo: “Yo quiero que ustedes sepan que ustedes no están oyendo a un curandero religioso, ustedes están oyendo la Verdad.” Capitán Al Ferrer. Y el próximo día yo le guié a Dios, y el recibió el bautismo del Espíritu Santo, en una galería de tiro, abajo de un gran lugar allá afuera. Yo dije: “Posiblemente este individuo hará lo mismo.” Así que ella dijo: “¿Tiene usted temor de ir allá?” Yo dije: “¿Temor?” Por supuesto, ¡ciertamente que no! Ciertamente que no. ¿Por qué debo yo tener miedo cuando Dios me mandó a hacerlo? El es el que pelea la batalla, no yo.” Así que yo dije: “Ahora, yo deseo que todos ustedes estén alejados.” Y así que yo . . . Nosotros fuimos a la reunión aquella noche, el lugar estaba lleno. Y el custodio salió afuera, dijo: “Reverendo Branham, yo

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Bueno, ahora allí había . . . yo oí todos los predicadores a través de aquel día y aquella noche, ellos dijeron algún viejo predicador, él era un hombre de color que salió, sólo un poquito de margen de pelo alrededor de su cabeza así, grande viejo y largo, túnico-rabo con chaqueta de predicador, usted sabe, cuello terciopelo, y en tiempo caliente. Pobre viejo individuo salió de esta manera, y él dijo: “Mis queridos hijos.” El dijo: “Yo quiero decirles,” comenzó a testificar. Yo era como el más joven sentado en la plataforma. Así que él dijo: “¡Yo le digo!” El tomó su texto de allí de Job: “¿Dónde estabas cuando yo fundaba la tierra?” Todos estos otros predicadores estaban predicando sobre Cristo, y a lo largo de la carrera regular, yo estuve oyéndolos, me gustó. ¡Pero no a ese viejo muchacho! El fue atrás como diez mil años antes que el mundo fue comenzado. El subió hacia los cielos y bajó directo a través de los cielos, lo que estaba sucediendo. Sobre lo que ellos estaban predicando, lo que estaba sucediendo, mientras tanto él estaba predicando sobre lo que estaba sucediendo en el Cielo. El trajo a Cristo de nuevo en un arco iris horizontal, atrás en algún lugar en la Eternidad. Por la cual, él no había estado predicando cinco minutos hasta que ese viejo individuo, algo lo agarró, él brincó en el aire y sonó sus talones juntos, y gritó: “¡Whoopee!” El tenía el mismo espacio que yo tengo aquí. El dijo: “Usted no tiene suficiente espacio para yo predicar,” y se fue. Bueno, yo pensé: “Si eso le hace eso a un hombre como de ochenta años de edad, ¿qué me hará eso a mi? Esa parte la quiero yo. Eso es lo que yo quiero.” Pero, lo que me aguantó era eso. Ahora, estamos hablando sobre demonios ahora. Lo que me sostuvo, yo vigilaba dos hombres. Uno sentado a un lado y uno al otro. Y cuando el Espíritu descendía, aquellos hombres se levantaban y hablaban en lenguas y gritaban, y tornábanse blanco alrededor de la boca, y yo pensé: “Oh, vaya, si yo sólo pudiera tener eso.” Vea, qué maravilloso. Oh, eso es, yo sólo amo eso. Bueno, yo salí al maizal. Y yo les dije mi historia, usted leálo en el libro. Yo dormí toda la noche, y yo regresé el próximo día. Así que yo pensé que yo probaría, yo tengo

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una manera de hacer las cosas que nadie conoce sino Dios y yo. Así que eso es, yo tomo una parábola y voy a encontrarme con el espíritu del hombre. Usted lo ve aquí mismo en la plataforma. ¿Ve? Y así que yo comencé a hablar con uno de aquellos hombres. Yo los vi a ellos, estaban sentados juntos, y ellos sólo se aguantaban las manos y danzaban y gritaban. Y yo pensé: “¡Oh, vaya, eso me suena real!” Y yo tomé una de sus manos, y yo dije: “¿Cómo está, señor? ” Y él dijo: “cómo está.” Buen hombre, tipo caballeroso. El dijo . . . Yo dije: “¿Es usted un ministro?” El dijo: “No, señor. Yo sólo soy un lego.” Y así que yo comencé a tener una pequeña conversación con él para yo poder captar su espíritu, vea. El no conocía eso, nadie lo conocía. Yo nunca dije nada sobre ello, años después de yo mencionarlo. Así que ellos . . . Sino, cuando yo vengo para hallar, ello sonó ser verdadero tan perfecto como un hombre cristiano, aquel hombre era absolutamente un santo de Dios. Yo pensé: “Hermano, eso está bien.” Pero la parte extraña, cuando yo me encontré al otro hombre era contrario. El aún estaba viviendo con una mujer que no era su esposa. Eso es correcto. Y yo vi que se arrimaba a mí en una visión. Yo pensé: “Oh, vaya, no puede ser.” Y el hombre . . . Yo pensé: “Ahora, ahora, este espíritu sobre esas personas es erróneo, y eso es todo lo que hay de ello.” Así que aquella noche cuando el . . . fuí a la reunión, y las bendiciones estaban cayendo, yo oraba a Dios, y el Espíritu Santo, el Angel del Señor daba testimonio que era el Espíritu Santo. Y el mismo Espíritu que estaba cayendo en este hombre. Y cuando caía el Espíritu, ambos se levantaban, y ambos chillaban y gritaban y alababan al Señor, y hablaban en lenguas y danzaban. Yo dije: “Yo —yo —yo no lo puedo entender, Señor, yo . . . ellos, yo no lo puedo ver en la Biblia donde eso puede estar correcto.” Ahora yo dije: “Quizás yo he sido engañado.” ¿Ve? Yo dije . . . ahora, aquí, yo —yo —soy —soy estrictamente fundamental en la Biblia. Tiene

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siempre que usted pida por dinero de esa manera, ese es el tiempo que usted y yo nos daremos las manos uno al otro como hermanos. Yo iré solo. ¿Ve?” Yo dije: “Usted no haga eso.” Dije: “Dios es dueño del ganado en miles de colinas, y todo pertenece a El. Yo pertenezco a El. El cuidará de mí.” El dijo: “Bien.” Y esa misma noche él dijo: “Hermano Branham, mire aquí. Alguien . . . ¡Mire aquí! Aquí hay un sobre aquí, ningún nombre sobre él, y tiene nueve dólares de cien adentro. Justamente exacto lo que necesitamos para alcanzar.” Y yo dije: “Hermano Baxter.” El dijo: “Perdóneme.” Así que entonces yo conocí que esa niña. Así que entonces —entonces el próximo día, hermano Baxter dijo: “Hermano Branham ellas están allá abajo empaquetando sus ropas, llorando.” Yo dije: “¿Qué le sucede?” Dijo: “Usted vaya allá abajo y véalas.” Yo fui al cuarto donde ellas estaban. Pregunté: “¿En qué cuarto están ellas?”Yo fui allá abajo y toqué la puerta. Yo les oí llorando. Toqué en la puerta, y la joven vino a la puerta, ella dijo: “Oh, hermano Branham, yo lo he sentido.” Ella dijo: “Yo he causado todo este problema.” Yo le dije: “¿Problema? ¿Qué le sucede, hermana?” Ella dijo: “Oh, yo he tenido el FBI tras usted.” Y yo dije: “Oh, ¿es eso correcto?” Dijo: “Sí.” Dijo: “Yo creo que he testificado mucho alrededor del pueblo hoy, y todo.” Yo dije: “No.” Y ella dijo: “Hermano Branham, el FBI está allí, está allí, va a exponerlo esta noche.” Yo dije: “Bueno, si yo —si yo estoy haciendo algo erróneo, yo necesito ser expuesto.” ¿Ve? Yo dije: “Seguro.” Si predicando el Evangelio necesito ser expuesto, bueno, vamos a hacerlo ¿Ve? Y yo dije: “Yo—yo—yo vivo por esta Biblia, y lo que esta Biblia no dice . . . Esta es mi Defensa aquí mismo, vea.” Y yo dije: y el . . .

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Dijo: “¡Hermano Branham!” Yo entonces supe que ellas me conocían. Dijeron: “Nosotras, yo la traje hasta acá.” Dijo: “Ella tiene que ir a una institución demente.” Y la niñita estaba en mi reunión allá en Lubbock, Texas. Y dije: “Yo supe que si alguna vez la lograría traer aquí y usted orara por ella, yo creo que Dios la sanaría.” Bueno, yo pensé: “¡Qué fe!” Y yo dije: “Bueno, ahora, hermana, usted puede traerla . . .” Y justamente entonces yo dije: “Usted vino aquí en un coche amarillo, ¿no es así?” Dijo: “Sí.” Y yo dije: “Tú madre es una inválida.” Ella dijo: “Eso es correcto.” Y yo dije: “Usted pertenece a la Iglesia Metodista.” Ella dijo: “Esa es exactamente la verdad.” Y yo dije: “En la carretera, usted casi se volcó. Usted y esta niña se estaban riendo cuando usted venía donde era mitad concreto y mitad asfalto, y usted estaba virando en una curva.” Ella dijo: “Hermano Branham, esa es la verdad.” Yo dije: “Y ASI DICE EL SEÑOR, la niña es sanada.” El próximo día ella estaba quemando —(alborotando—Ed.) el pueblo, diciéndole a todos, yendo alrededor sobre ello. Claro, ellos no la conocían allí, si ella estaba en esa condición o no. Y entonces aquel día yo . . . Hermano Baxter dijo: “Hermano Branham,” dijo: “Esas jovencitas están allá abajo empaquetando sus maletas.” Y esta es una cosa que él no sabía que yo conocía. Nuestras finanzas habían bajado. Yo nunca lo deje hablar sobre ello. Pero una de esas jovencitas había puesto novecientos dólares en aquella—en aquella ofrenda la noche anterior a esa, y subió esa finanza. Ahora, él no, él no lo conocía hasta este día, pero yo lo supe, vea. Que yo . . . Dios me dijo que estaría bien. Hermano Baxter dijo: “Hermano Branham,” dijo: “mejor es que usted me deje sacar un poco.” dijo: “Ellos habían tenido algunos de estos aquí sanadores Divinos aquí que le han quitado a estas personas.” Yo dije: “Nada. No, señor, usted no lo hará. Hermano Baxter,

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que ser ESTO, vea. Y yo dije: “Señor, tu sabes mi condición, y yo —yo tengo que verlo en Tu Palabra. Y yo —yo no puedo entender cuándo el Espíritu Santo cae en AQUEL hombre, y uno de ellos es un santo y el otro es un hipócrita. Y yo sé que es.” Y yo lo sé sin . . . yo hubiera podido sacar al hombre afuera y probárselo a él, o llamarlo allá afuera y decirle sobre ello. Cómo podía al hombre que estaba sentado aquí anoche, era nada menos que un impostor, si alguno alguna vez había uno sentado allí. Y yo lo hubiera llamado fuera, pero él se hubiera levantado y comenzar una bulla, así que yo sólo lo dejé seguir hacia adelante, considerando la reunión. Pero yo le conozco. Si, señor. Allí hay uno, dos de ellos sentados allí la otra noche, pertenecen a cierta iglesia aquí mismo en la ciudad. ¡Verdaderos críticos! Yo los vi a ellos. Pero, si usted quisiera, usted sólo comenzaría el problema. Yo lo he hecho muchas veces. Yo sólo los dejo quietos, vea. Todo está bien. Dios conoce, El es el Juez. Deje que me llamen una vez y entonces usted verá algo tomar lugar, vea usted, déjelo. Como el demonio, yo nunca hice salir el demonio fuera. El sólo vino a mi y me desafió. Entonces es cuando Dios comenzó a obrar, vea, eso es correcto, y usted vio lo que sucedió. Está bien. Pero yo sólo lo deje ir. Hizo la reunión dura por cual ése espíritu se estaba moviendo dentro de mi todo el tiempo, vea, y entonces yo sólo me mantuve. Pero ahora, estos hombres, yo no lo podía entender. Y era dos años más tarde, o tres, cuando yo estaba allá en Green’s Mills, Indiana, aquí, la reservación de explorador, yo estaba en una cueva vieja a donde iba a orar. Y allí atrás yo dije: “Señor, yo no puedo entender qué ha sido de aquel grupo de personas. Las mejores personas que yo he conocido en mi vida, y yo —yo no puedo entender cómo aquello podía ser el espíritu equivocado, cuando es el . . . entonces. Tú conoces la integridad de mi corazón. Tú conoces como yo Te amo y cómo yo te sirvo. Y el mismo Espíritu que está conmigo estaba sobre aquellas personas. Y, aquí, estaba en aquella persona allí igual.” Así que yo no podía entenderlo. Y el Señor bajó en su misericordia y me lo mostró. He aquí lo

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que era. Ello tiene que ser Escritural, primero. El dijo: “Levante su Biblia.” Y yo levanté mi Biblia. Y yo creo que aguante aquella Biblia por diez minutos sin que nadie . . . más aún llegaba Palabra. Yo sólo esperé unos cuantos minutos. Yo le oí a El decir otra vez: “Diríjase a Hebreos 6 y comience a leer.” Y yo lo hice. Y cuando llegó allí abajo donde decía: “Porque la tierra que embebe el agua que muchas veces vino sobre ella, y produce hierba provechosa a aquellos de los cuales es labrada, recibe bendición de Dios, pero la que produce espino y abrojos es reprobada, está próxima a ser maldita, y su fin es el ser quemada. ”Y yo lo capté allí mismo. Yo pensé: “Allí está. ¡Gracias sea a Dios! Allí está.” ¿Ve? Ahora, Jesús dijo: “Un sembrador salió a sembrar semilla,” ¿No lo hizo El así? Ahora, ustedes todos aquí son cristianos. Todos alzaron sus manos, de cualquier modo, pentecostales, cristianos nacidos de nuevo. Bien, ellos . . . Y El dijo: “Un sembrador salió sembrando semillas, y mientras dormía (su muerte en medio, vea), y mientras dormía, vino su enemigo y sembró cizaña entre el campo de trigo.” ¿Qué es cizaña? Yerba mala, zarza y cosas. Ahora, “Y cuando los siervos del Padre de Familia (el predicador) vio estas cizañas creciendo, dijo: “Déjame ir y arrancarlas.” El dijo: “No, no. Tú arrancarás también el trigo. Dejad que ambos crezcan juntos.” Hay un campo de trigo aquí afuera. Hay trepadoras, ortiga de bola, cizaña hedionda, todo lo demás en ella. ¿Es eso correcto? Pero, ahora, allí dentro hay trigo. Ahora, la tierra que bebe la lluvia que muchas veces cae sobre ella. Ahora, ¿para qué es la lluvia? No para regar la ortiga de bola. Ahora vigile y ponga atención de cerca. No para regar a la trepadora . . . La lluvia es enviada para el trigo, pero la ortiga de bola, y la cizaña están sedientos como está el trigo. Y la misma lluvia que cae sobre el trigo cae sobre la cizaña. Y la pequeña y vieja cizaña se parará bien derecha así, y contenta y regocijándose, así como el pequeño trigo se para y se para él mismo. “Pero por sus frutos los conoceréis.” Ahí lo tiene usted ¿Ve? Ahora, el mismo Espíritu Santo puede bendecir a un hipócrita. Eso golpea a alguno de ustedes arminios, pero esa es la verdad. Esa es

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fuego pintado. Algún individuo congelándose a muerte, dice: “Mire a ese gran fuego que ellos tenían.” Bueno, eso no lo calienta a usted. ¡Lo que ellos hicieron en Pentecostés, lo que ellos tenían en el Antiguo Testamento, nosotros lo tenemos hoy! Y tan pronto como Dios pueda tener la cosa emparejada y la iglesia juntada, el RAPTO vendrá. Pero nosotros ni siquiera podemos obtener fe para sanidad Divina, menos aún para el RAPTO, porque estamos todos torcidos, uno de ESTA manera y uno de la OTRA manera, y “Doctor Fulano-de-tal” dijo que era ESTO. Bueno, mi predicador dijo que El era ESTO.” Hace un rato una mujer dijo: “El sólo es un imitador.” Dijo, mi sacerdote me lo dijo. Yo desearía que su sacerdote viniera aquí solamente una vez, nosotros veremos quién era el imitador. Sí. Nosotros veremos quién es un imitador. Venga y pruébelo. Aquí no hace mucho, en Harlington, Texas, teníamos un servicio allá, y ellos tenían grandes anuncios afuera por sobre los automóviles aquella noche cuando yo fui allá, decían que el FBI estaba allí para exponerme como un engañador. Así que la pequeña niña había sido sanada allá en Texas en algún lugar, ella estaba bien lejos en, y yo creo, alrededor de mil millas, bien lejos alrededor de Panhandle, y esto era bastante abajo en Harlington, abajo en la frontera. Hermano Baxter vino, dijo: “Hermano Branham,” dijo: “Usted nunca ha visto tanta confusión allá abajo, como cuatro o cinco mil personas.” Y dijo: “Y entonces, todo alrededor, la FBI te van a coger en la plataforma esta noche, y exponerte.” Yo dije: “Bueno, yo estoy contento de eso.” Dijo: “¿Usted conoce aquella pequeña niña que fue sanada la otra noche?” Yo regresaba a mi hogar, andando hacia mi cuarto, y yo oí algo en llanto, y yo miré alrededor, yo pensé que quizás fue alguien que había sido atacado. Era una niña . Y yo mire hacia atrás, yo dije, y yo regresé allá, yo dije: “¿Qué te sucede Madam?” Y eran dos pequeñas niñas paradas allí, como de diecisiete, dieciocho años de edad, cada una, sus brazos alrededor de cada una, llorando.

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Belcebú. ¿Cuál estaba correcto, el diablo o el predicador? El diablo lo estaba. Y, hermano, eso no ha cambiado mucho hoy. Ellos no reconocen el poder de Dios. No importa cuanta enseñanza usted tenga, usted puede machacar eso en usted. Dios no está en palabras grandes, Dios está en un corazón honesto. Usted puede cantar o hablar grandes palabras, como yo no sé qué, eso no lo trae a usted cerca a Dios. Usted se puede parar y practicar cómo repetir su sermón y decir estas cosas, eso no lo trae a usted más cerca a Dios. Usted se puede aprender los diccionarios hasta dormir con uno, y aún lo traería más cerca de Dios. UN HUMILDE, UN CORAZÓN SOMETIDO EN LA SIMPLICIDAD, ES LO QUE LO TRAE A USTED A DIOS. Y eso es verdad. ¡Amén! Un corazón humilde Dios ama. Ahora, no importa si usted no conoce sus ABC’s, eso no hace ninguna diferencia. ¡Sólo un corazón humilde!. Dios mora en un corazón humilde; no en educación, no está en las escuelas, no en teología, seminarios, no en estos otros diferentes lugares; no en palabras grandes, o no en lugares clásicos. Dios mora en corazones humanos. Y mientras más bajo usted se pueda desbaratar, lo más simple, usted puede llegar a ser grande en la vista de Dios. Déjenme darles algo. Yo veo que sus campos están llenos de trigo allá afuera. Una cabeza llena de trigo siempre se inclina. Una vieja pequeña ramita se alza hacia arriba y se sacude alrededor como que supiera todo, y no lo tiene en la cabeza. Esa es la manera con muchos de estos individuos que piensan que tienen tanto en sus cabezas y nada en sus corazones. Una santa cabeza se inclinará al Poder, reconocer a Jesucristo como el Hijo de Dios, y creer en Sus obras. “Y El es el mismo, ayer.” Oh, ellos Le reconocen a El, seguro, un punto de vista histórico. Pero no es una cosa de historia. Personas se paran y dicen: “Oh, yo creo Pentecostés, cuando ellos tuvieron el gran derramamiento y cosas como esas,” y pintan un fuego. Un hombre congelándose no puede ser calentado con fuego pintado. Un fuego pintado no calienta. Eso era lo que ellos eran. ¿Qué es hoy, si El es el mismo ayer, hoy y para siempre? Eso es un

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la verdad. Entonces le llaman santidad, por lo cual yo creo en santidad, también. Pero el —el mismo Espíritu, la lluvia cae sobre el justo y el injusto, pero por sus frutos los conocerán.” Si usted mira afuera y sale y busca trigo, yo busco trigo, pero las cizañas están todas atadas. Y ellas viven de la misma lluvia que calló para el trigo .y la lluvia no fue enviada para las cizañas, fue enviada para el Trigo. Pero la lluvia estando en el campo, el trigo . . . cizañas estando en el campo de trigo, le han sacado mucho beneficio a la lluvia como lo han hecho el resto de ellos. Y la misma lluvia que hizo el trigo vivir, hizo a la cizaña vivir. Todas las cosas en lo natural tipifican lo espiritual, como lo estamos enseñando. Allí lo tiene, demonología, demonios personificando cristiandad, aún, con la bendición. Eso no es leche desnatada, hermanos, si lo pueden aceptar, ¿Ve? ¿Ve? Bien. Es —es la verdad. Así que yo no soy salvo hoy porque yo puedo gritar. Yo soy salvo no porque yo siento como que soy salvo. Yo soy salvo porque yo conocí la condición de Dios de esta Biblia. Jesús dijo: “El que oye Mis Palabras y cree en el que El ha enviado, tiene Vida Eterna, y no vendrá a condenación, pero ha pasado de muerte a Vida.” Yo creo eso. Eso es correcto. Y sobre esas condiciones yo soy salvo, porque Dios lo dijo. Si él me dijo que yo soy salvo porque alguien dijo: “Un impetuoso fuerte viento me dio a mí en la cara,” eso es maravilloso, pero yo deseo saber de dónde vino ese impetuoso viento antes de darme en la cara, vea. Ahora, ¿qué clase de vida va a vivir usted después que ese impetuoso fuerte viento le a dado a usted? ¿Ve? Vea, es por su fruto que usted es conocido. Así que, demonios pueden obrar en medio de cristianos. ¿Cree usted eso? Mire a Pablo, Pablo dijo . . . Ahora, aquí es donde la lluvia de nuestros días . . . si hay algunos de ustedes aquí, perdónenme si yo digo algo en contra de ustedes. Yo no diría nada en contra de ustedes que lo que yo diría de las asambleas o cualquiera, y los Bautistas o cualquier otro. Es verdad lo que es verdad. Donde usted se bajó, era esto, ustedes

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están haciendo profetas de esos hombres y cosas que no son profetas. No son puestos en las manos y enviados fuera, profetas son nacidos. ¿Ve? En la Biblia, hay un don de profecía allí es donde estaba su error, entre el don de profecía y un profeta. El don. “Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras habló a los padres a través de profetas, en estos últimos días ha hablado a través de Su Hijo, Cristo Jesús.” Y el Cuerpo de Cristo tiene nueve dones espirituales operando en él. Y puede estar en ESTA mujer esta noche, profecía, puede aun no estar en el resto de su vida. Puede aun estar en esta mujer la próxima noche, puede estar en ESTE hombre la próxima vez, puede aun estar en AQUELLA allá atrás la próxima vez. Eso no lo hace una profeta, no hace a nadie un profeta. Es un don de profecía en usted. Y antes que aquel hombre o aquella profecía pueda ser dada a la iglesia, tiene que ser juzgada ante dos o tres jueces espirituales. ¿Es eso correcto? De acuerdo, ahora, Pablo dijo: “Ustedes todos pueden profetizar, uno por uno.” Si algo ha de ser revelado a ESTE, que AQUEL mantenga el orden. Bueno, eso haría a todo el grupo profetas entonces, de acuerdo a la enseñanza de hoy. No, Iglesia Pentecostal, tenemos cosas todas enredadas. Y esa es la razón por la cual Dios no puede entrar, hasta que enderecemos esta cosa y en la Biblia. Eso es correcto. Usted tiene que conseguir el sendero correcto. ¿Cómo va usted a construir una casa sin mirar el plano? ¿Ve? Usted tiene que comenzar bien. Ahora, allí, un profeta, usted nunca vio a nadie parado ante Isaías, Moisés. Uno sí se paró, Coré, un día y trató de discutir con él, y Dios dijo: “Sepárate, Yo voy a abrir la tierra.” Un profeta es nacido. Dones y llamamiento son sin arrepentimiento. Esa es la preordenación de Dios, desde un bebé hacia arriba. Todo estaba perfectamente recto adelante, exactamente lo que él dijo que era la verdad y vindicada y traída fuera. Es la Palabra de Dios, viene al profeta. Pero un don de profecía está en la iglesia. Ahora usted dijo: “Bueno, los profetas son del Antiguo Testamento.” ¡Oh, no! El Nuevo Testamento tuvo profetas. Agabo era un —era un profeta del Nuevo Testamento. Mire al

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ayúdame. ¿Lo harás?” Cortado, ninguna Luz relampagueó. ENTONCES ÉL ACUDIÓ A UNA BRUJA; baja, degenerada, y él fue a ella y se arrastró allí y él mismo se disfrazó. Y esta bruja sale y llama fuera el espíritu de Samuel. Ahora, yo sé lo que ustedes están pensando, muchos dijeron: “Ese no era Samuel.” Pero la Biblia dijo que era Samuel. ¿Extraño como yo capto eso, verdad? Pero ese era Samuel, la Biblias dijo que era. Y aquella bruja lo podía llamar fuera, y ella llamó a Samuel. Y Samuel estaba en otro lugar, pero estaba consiente de lo que estaba sucediendo, y todavía estaba parado con su manto de profeta en él. ASI QUE HERMANO, CUANDO USTED MUERE, USTED NO ESTÁ MUERTO, USTED ESTÁ VIVIENDO EN ALGÚN LUGAR, ALGÚN OTRO LUGAR. Déjenme parar sólo un minuto para demostrar esta demología sólo un poquito. Ella era un demonio, pero ella estaba cerca en contacto unido con el espíritu del mundo. Ahora, hoy, hay muchos espiritistas que verdaderamente conocen más del mundo espiritual que personas que profesan ser cristianas, aún ella es un demonio. En los tiempos de la Biblia era la misma cosa. Cuando Jesús estaba aquí en la tierra, allí estaban aquellos profesores y escolares y maestros, algunos de los mejores que habían salido de los mejores seminarios que nosotros podemos producir hoy, y santo, hombres de renombre, ellos tenían que ser. Si un levita fuese hallado, él tenía que ser encontrado sin falta, justo en todo camino. Y con todo eso ese hombre no sabía nada más de Dios de lo que un conejo sabía de zapatos de nieve. Cuando vino, el falló en reconocerle a El, y él llamó a Jesús un “diablo.” El dijo: “El es Belcebú, príncipe del diablo.” ¿Es eso correcto? Y aquí venía la más baja clase de demonio, que tenía a un hombre atado allá afuera en las tumbas, y todo, ellos llamaron fuera, el diablo mismo dijo: “Nosotros sabemos Quien eres. Tú eres el Hijo de Dios, el Santo.” ¿Es eso correcto? Brujas y hechiceros, diablos le reconocieron a El, el Hijo de Dios; mientras los educados predicadores de seminarios teológicos le reconocieron a El ser

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Dios habla, y eso es directamente la Voz de Dios, como el Urim Tumim estaba antes que la Biblia fuese escrita. ¡Amén! ¡Aleluya! Yo me siento como religioso ahora mismo. Y no me tomen por fanático, si lo hace. Yo sé, yo sé dónde estoy. Yo no estoy excitado. Eso es correcto. AQUÍ ESTÁ LA VERDAD, ¡PALABRA DE DIOS! A MI NO ME IMPORTA QUE CLASE DE SUEÑO USTED HAYA TENIDO O QUE CLASE PROFECÍA USTED HAYA DADO; SI NO ES LA PALABRA DE DIOS, ES FALSA SI NO COMPARA CON ESA PALABRA. ESE ES EL PROBLEMA HOY, UNO TIENE UN SUEÑO, UNO TIENE VISION, UNO TIENE LENGUA, UNO TIENE REVELACIÓN, TIENE LA COSA ENTERA ENREDADA Y TODO, USTED TIENE DENOMINACIONES Y QUEBRANTÓ TODO. USTED DEBERÍA TRAERLO PARA ATRÁS DE NUEVO A UNA FUNDACIÓN FINAL, Y ESA ES LA PALABRA DE DIOS. ESO ES VERDAD. Iglesias edificarán sobre una, dicen: “Oh, Jesús viene sobre un caballo blanco. Yo lo sé, yo lo vi en una visión,” ellos harán una iglesia de esa clase. “Oh, aleluya, el viene en una nube,” ellos lo hacen de esa forma. Divide y separan, y se llaman una a otra “gallitos” —(fanfarrones —ED.) —“piojos sueltos,” y todo así. Por lo cual, hermano, eso le muestra en el primer lugar, su corazón no está bien con Dios cuando usted hace eso. ESO ES CORRECTO NOS OT ROS SOMOS HE RMANOS. DE BEMOS MANTENERNOS. JUNTOS EL UNO DEL OTRO. Ahora mire, Saúl se desvió, y él sube arriba. Dios había. Volteado Su cara de él, y él subió y él preguntó del profeta. El profeta fue y probó la profecía y Dios cortó, no daba una visión. El profeta salió, dijo: “Yo no puedo, El nunca me mencionó nada sobre usted.” Bueno, entonces él dijo: “Señor dame un sueño.” Noche tras noche no llegaba sueño. Entonces el va dentro del Urim Tumim, y él dijo: “¡Oh, Dios! Yo he tratado los profetas, yo he tratado sueños, ahora Tú

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Espíritu de profecía cayendo allí y contándole a Pablo de ellos. Aquí viene Agabo de Jerusalem, y encontró a Pablo, y se amarró el cinto alrededor de él, y se volteó y dijo: “ASI DICE EL SEÑOR, el varón que usaba esto, será atado en cadenas cuando llegue a Jerusalem.” Agabo, quien se levantó y dijo, predijo lo que sucedería, él era un profeta, no un hombre con un don de profecía. Y el don de sanidad y todos esos dones, mi amigo pentecostal, usted lo tiene enredado. Los dones están en las iglesia, sujetos a cualquier persona que está en la iglesia, cualquiera que está bautizado en el cuerpo. “Por un Espíritu somos todos bautizados.” Y la Biblia dijo . . . “Bueno, yo tengo un don de sanidad.” Bueno, la Biblia dijo: “Confiese su falta el uno al otro y ore uno por el otro.” Cada persona ore por la otra. Nosotros no somos un grupo dividido; somos colectivo, grupo reunido. ¿Ve? Ahora, y así es como demonios algunas veces obran. Ahora, vigile lo que dijo Pablo: “Si uno habla en lenguas y el otro interpreta, y lo que él dijo, que sea juzgado primero antes que la iglesia lo pueda recibir.” Ahora, no es de citar de Escritura o algo diferente de esa manera. Dios no se repite El Mismo. Pero será un aviso a la iglesia. Entonces si buenos jueces dicen: “Vamos a recibir eso. Está bien, eso era el Señor.” El segundo dice: “Vamos a recibirlo.” La boca de dos o tres testigos, deje que cada palabra sea establecida. Entonces la iglesia lo recibe y van y se preparan para ello. Si eso no llega a acontecer, lo que eso dijo, entonces usted tiene un espíritu maligno entre ustedes. Eso es correcto. Y si eso llega a acontecer, entonces dele gracias a Dios, el Espíritu de Dios está entre ustedes. ¿Ve? Ahora, ahí es donde usted tiene que vigilar y ser cuidadoso. Así que, no trate de presionarlo. Yo no podría hacer que tuviese ojos marrón cuando yo tengo azules, vea, yo tengo que ser satisfecho con ojos azules. Ahora, allí es donde demonios obran en el reino espiritual de las personas. Ahora tenemos algo profundo llegando aquí, y yo espero que no sea tan profundo. Ahora allá en I de Samuel 28. Yo deseo leer

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alguna Escritura aquí en este mismo tiempo. Yo quiero que usted oiga detenidamente. Y yo quiero traer, mostrarles cómo “demonios” obra en la misma iglesia, y cómo satanás tiene una imitación de cada verdadero que hay. Ahora usted puede ver, de acuerdo a la Biblia, que demonios vienen sobre cristianos y ellos personifican. Y muchas veces hemos declarado personas ser cristianas cuando han dicho: “Yo creo en Jesucristo.” Sí, los demonios creen la misma cosa, y tiemblan. Esa no es ninguna señal que usted es salvo. Una de estas noches yo quiero llegar a elección, y entonces usted verá lo que significa salvación. ¿Ve? No es nada de lo cual usted tuvo que ver con ello en el primer lugar o el último lugar, o nada de lo que usted pueda hacer. Dios salva al hombre, incondicionalmente. Eso, como que cayó profundo, ¿verdad que sí? Yo prefiero sacar eso de su sistema mientras estamos en ello. Bien. Abraham fue el comienzo de nuestra fe. ¿Es eso correcto? Bien, Abraham tenía la promesa. ¿Y Dios llamó a Abraham porque él era un gran hombre, yo supongo? No, señor. El bajó fuera de Babilonia, en la —en la tierra de los caldeos en la ciudad de Ur, y Dios lo llamó e hizo su pacto con él, incondicionalmente. “Yo te voy a salvar. Y no sólo a ti, Abraham, sino tu simiente,” ¡incondicionalmente! Dios hizo un pacto con el hombre, y el hombre rompe Su pacto todo el tiempo. Hombre nunca mantuvo su pacto con Dios. La ley nunca fue guardada. Ellos no podían guardar la ley. Cristo vino y El Mismo quebrantó la Ley. Porque, Gracia ya había provisto un Salvador, Moisés proveyó una manera de escape, y entonces escapar, mejor dicho; y entonces el pueblo, después de eso, ellos todavía querían hacer algo. Hombre siempre está tratando de hacer algo para salvarse él mismo, cuando usted no lo puede hacer. Es su naturaleza. Tan pronto él supo que estaba desnudo, en el Jardín del Edén, él hizo unos delantales de hojas de higo. ¿Es eso correcto? Pero él encontró que no funcionaba. Nada que el hombre hace lo puede salvar a usted. Dios lo salvó a usted incondicionalmente, todo a través de la edad. Y entonces cuando usted es salvo, usted

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hoy, el que ahora tenemos, era la bruja; o, el adivino allá tomó el lugar del profeta, al lado del diablo. ¿Ve lo que quiero decir? Ahora, entonces el Urim Tumim de hoy es la Biblia. Si alguien a dado una profecía o un sueño y no compara o hace eco con la Biblia de Dios, es falsa, no le crea. Un hombre vino a mí no hace mucho tiempo, de India, donde ellos se estaban preparando para ir, un buen pequeño predicador, él dijo: “Hermano Branham, yo vine aquí.” Dijo: “Una mujer tenía el Espíritu Santo,” y dijo: “Ella era una dulce, buena mujer.” El dijo: “Y ella había estado casada cuatro veces, y estaba viviendo con su cuarto esposo.” Y yo dije: “Bueno ¿cómo puede ser eso, señor?” Y dijo: “Yo fuí a él y dije: ‘¡Oh, Gloria a Dios!’” Dijo: “¡Aleluya! Alabado sea el Señor.” Sólo de esa clase, usted sabe. Dijo: “Aleluya, Alabado sea el Señor.” Dijo: “El Señor me dijo. Aquí te voy a dar un sueño.” Y dijo: “Yo soñé que mi esposa, yo la vi viviendo en adulterio y ella vino a mí y dijo: ‘Oh, ¿Me puedes perdonar?’ Yo no . . . por el cual, yo dije: ‘Seguro yo te perdono y te vuelvo a tomar.’ El dijo: “Ahora, eso fue lo que yo hice, “vea, yo perdoné.” Yo dije: “Víctor, su sueño fue muy amable, pero el diablo te lo dio.” El dijo: “¿Por qué?” Yo dije: “No compara con la Palabra de Dios. Ella está viviendo en adulterio absolutamente. Ella no puede vivir con cuatro hombres. Eso es correcto. Ella deja eso y regresa atrás al primero, ella estará peor de lo que estaba al principio. Ella tiene que vivir soltera por el resto de su vida.” Yo dije: “Usted lo sabe. Eso no compara con la Palabra de Dios, así que ella . . . tu sueño era falso.” Y yo dije: “No compara ESTO.” Y cuando un profeta había hablado y querían ver si esa profecía era verdad, ellos la ponían delante del Urim Tumim. Y si la Voz de Dios tiraba las luces en el Urim Tumim, entonces era absoluto, la Verdad. Y si un hombre daba la interpretación, daba un sueño, daba algo de la Biblia, y, o alguna otra cosa, y no compara con la Biblia de Dios, es falsa. Allí está el Urim Tumim hoy. La Palabra de

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cenando en la Mesa del Señor. Y aún un hombre viviendo con su madrastra, y él le dijo a este hombre en Cristo: “Entréguelo al diablo, para la destrucción de la carne, para que el alma pueda ser salva.” Vea eso es, entrégueselo. La Biblia dice: “Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros; y muchos duermen (se han ido prematuramente), por el pecado. Dios lo ha quitado a usted del medio; una buena señal que usted era un buen cristiano, pero ser quitado.” Así que, ahora note aquí, Saúl era considerado uno de los profetas, o entre los profetas, porque él profetizó. Y ahora él se había descarriado porque él desobedeció a Dios, y su reino fue quitado de sus manos y puesto en las manos de David, quien Dios había ungido por Samuel, con la tinaja de aceite. Note, entonces habían tres maneras que ellos tenían de saber las cosas de Dios; la primera era —era el profeta, segunda era por sueño, y la tercera era el Urim Tumim. Y ellos tampoco contestaban. Ahora, usted sabe lo que es un profeta, y usted sabe lo que es un sueño espiritual, y usted sabe lo que el Urim Tumim era. Usted sabe que, el otro día yo le pregunté a un —un hombre sobre el Urim, y aquel hombre no pudo decirme lo que era, el Urim Tumim. Por supuesto, era Dios contestando. PERO, VEA, Y EL DIABLO HACE UNA IMITACIÓN DE CADA UNO DE ESOS. EL HECHICERO, EL FALSO PROFETA, ADIVINADOR DE BOLA DE CRISTAL. Vea, ahora, el Urim Tumim colgaba aquí en el pecho de Aarón, y el Urim Tumim cubría sobre aquella piedra. Y ellos la colgaban en el templo. Y cuando ellos no estaban seguros, ellos iban delante de Dios, en contestación, y una luz relampagueaba en aquel Urim Tumim, cual, sea que fuera la voluntad de Dios, o no. Ahora, cuando el Urim Tumim no contestaba . . . Ahora, esa era una contestación directa de Dios. Ahora, el Urim Tumim de hoy, el adivino tomó una bola de cristal para imitar ESO, cosa falsa. Dios está en una trinidad, sus poderes están en una trinidad. Ahora, yo lo puedo probar por la Biblia. Y aquél Urim Tumim era solamente la bola de cristal que el diablo usa hoy; y el falso profeta aquí atrás

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es salvo. Mire a Abraham. Allí estaba ese individuo, fue allí, y Dios le dio la tierra de Palestina y le dijo que no saliera de allí. Cualquier judío que saliera de Palestina era descarriado. Dios le dijo que se quedara allí. Si Dios le dice a usted que haga algo u otra cosa, y usted no lo hace, entonces usted es descarriado. ¿Es eso correcto? Bien, vino una sequía, para probar la fe de Abraham. Y en vez de Abraham quedarse allí, él no se podía quedar allí, no, él partió, y tomó a Sarah y fue como trecientas millas (quisiera tener tiempo para entrar en eso) hacia otra tierra. Y cuando llegó allí y entonces el cogió este gran rey allí abajo, Abimelec. El era un individuo joven y él estaba buscando una amante, así que él encontró la esposa de Abraham, Sarah, y se enamoró de ella. Y Abraham dijo: “Ahora, tú le dices que tú eres mi hermana y que yo soy tu hermano.” Así que eso agradó a Abimelec, así que él dijo: “Bien la llevaremos al castillo.” Y yo pienso que las mujeres la arreglaron, y él se iba a casar con ella el próximo día. Y Abimelec era un buen hombre, un hombre justo. Y aquella noche mientras él estaba durmiendo, el Señor le apareció y le dijo: “Tú eres tan bueno como un hombre muerto.” El dijo: “La del hombre es . . . La mujer que tú tienes allá afuera para casarte, es la mujer de otro hombre.” Ahora vigile: “La mujer de otro hombre.” Pues, él dijo: “Señor: Tú conoces la integridad de mi corazón, un hombre santo, justo. Tú conoces la integridad de mi corazón, un hombre santo, justo. Tú conoces la integridad de mi corazón. Ese hombre me dijo que esa era su hermana. ¿Y no me dijo ella que ese era ‘mi hermano’?” El dijo, Dios dijo: “Yo conozco la integridad de tu corazón y esa es la razón que Yo te detuve de pecar contra Mí. ¡Pero ese es Mi Profeta! ¡Aleluya!” ¿Qué era él? Descarriado, y un pequeño, mentiroso picapleitos. ¿Es eso correcto? Oh, no, no hay mentiritas blancas, o son mentiras negras o no son mentiras. El hombre sentado allí diciendo una mentira pino-blanco, diciendo que esa era su “hermana” cuando era

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