Sonido en El Rodaje

Trabajo Unidad 1. SPA

E L S O N I D O E N E L RO DA J E

El sonido es uno de los aspectos menos valorados, pero uno de los más importantes de la creación cinematográfica, ya que forma parte esencial del proceso narrativo. A la hora del rodaje, el departamento de sonido, normalmente constituido por un técnico de sonido y un microfonista, registran las voces, ambientes y efectos que constituyen gran parte de la película. La función del microfonista consiste en la preparación y utilización de los diferentes tipos de micrófonos, que varían dependiendo de las condiciones de rodaje, tipología de planos, escenas, localizaciones, etc... e incluso su utilización de forma artística o experimental. Estos registros están coordinados por el jefe de departamento, el técnico de sonido, que maneja el grabador y el mixer. Los cuales hacen de soporte para almacenar las tomas y regular volúmenes de entrada. La relación entre los departamentos es importantísima, ya que facilitará el trabajo respectivo de cada equipo y agilizará el proceso de rodaje. Para el departamento de sonido es crucial, como para los otros departamentos, el contacto con el equipo de dirección, ya que son los que mantienen desde el principio el rumbo de la producción. En el campo práctico trataremos con el equipo de iluminación y de eléctricos, a los que les influirán cada decisión que tomemos a la hora de hacer nuestro trabajo y de los que dependeremos. Igual que también será importante estar en contacto con el equipo de fotografía, que nos indicará los límites del plano. A día de hoy, y por la escasez de presupuesto en la producción de productos audiovisuales, es muy normal que todas las funciones las desarrolle una misma persona, un técnico polifacético que con la pértiga ambas manos y la grabadora colgada, pueda desempeñar la labor de planificación y captación del sonido directo. Se pueden usar técnicas de micrófono más sofisticadas usando una combinación de pértiga y micrófonos lavaliers. Estos se pueden dirigir mendiante un pequeño mezclador al grabador. El sonidista puede también captar

El sonido en el rodaje



pistas de sonidos adicionales (wildtracks) que pueden ser muy valiosas para los editores de sonido. Hay varios puntos importantes a tener en cuenta a la hora de abordar un rodaje; es imprescindible que las voces sean inteligibles, que haya continuidad en el tono y el timbre, y que puedan ser manipuladas fácilmente en la post-producción. Habrá que conseguir, dentro de lo posible, que los fondos sonoros (sonido ambiente) sean lo más bajos posible y eliminar todos los ruidos ajenos que ensucien el sonido que se vaya a captar. Cuanto más nítidas sean las voces y menores los ruido externos, dispondremos de mayor dinámica para poder manipular nuestra grabación en la sala de montaje. Un sonido directo con el ambiente muy alto y muchos ruidos externos exigirá mucho más trabajo de sala, limpiando fondos, eliminando ruido, y si no queda más remedio, teniendo que doblar las voces. Por lo tanto, es necesario explicar el equipo que maneja el microfonista, los tipos de micrófonos y sus usos para evitar errores y tener mayor dinámica en la grabación. El microfonista cuenta con un boom, donde incluye su pértiga, el micrófono con una suspensión o montura, y los posibles antivientos, que variarán dependiendo del tipo de localización.

La pértiga no es más que una barra con tramos desplegables en la que dispondremos una montura para colocar el micrófono en un extremo. Esta suele estar fabricada de un material de poco peso y poco conductor de vibraciones, como la fibra de carbono, para que los golpes y vibraciones provocados contra la pértiga no la transmitan al micrófono. La posición de las manos a la hora de sujetarla depende de las diferentes posturas a la hora de colocarla en el set; como todo, dependerá del plano visual que estemos tratando. Las posiciones más utilizadas para colocar las pértigas son las siguientes:

- Por encima de la cabeza. Es la posición más utilizada, consiste en colocar la pértiga

totalmente perpendicular a nuestro cuerpo, sujetándola con las dos manos por encima de la cabeza.

- Por debajo. Se utiliza sobre todo para los planos con más aire por la parte superior que nos dificulta el acceso del micro por encima. Esta posición es igual a la anterior, pero




la pértiga está a la altura de nuestra cintura, también perpendicular a nuestro cuerpo y con la angulación del micro hacia arriba.

- Sobre el hombro. Es una posición más cómoda para tomas largas; nos permite pasar la pértiga por detrás de la cabeza y apoyarla sobre el hombro.

- Pélvica. Consiste en apoyar la parte de atrás de la pértiga en nuestra zona pélvica,

pudiendo así aguantarla con los brazos extendidos hacia adelante, e incluso con una mano. Es una posición poco utilizada porque puede cruzarse el diagonal con el encuadre.

- A pistola. Esta posición no cuenta con la pértiga, se limita a utilizar la montura del micrófono por su empuñadura y apuntar a la fuente sonora en cuestión. Es muy utilizado para grabar efectos fuera del rodaje, pero también nos sirve para sitios pequeños.

A la hora de poner una pértiga es imprescindible estudiar el plano que se va a rodar y preguntar a los técnicos de realización para que te avisen de dónde debes poner tu límite imaginario para no meterlo en el encuadre. Igual que nos puede pasar con la pértiga, nos puede ocurrir con la sombra; es imprescindible estar pendiente de las decisiones del equipo de iluminación, y consensuar un trato. Lo que hagamos nosotros, les puede afectar a ellos, y viceversa. Otra asunto muy importante es el ángulo de apertura entre la pértiga y el micrófono y, por supuesto, su dirección. La zona idónea para apuntar con el micrófono en la captación de voz es entre la boca y el pecho, suponiendo que estamos a una cierta distancia del individuo. Lo más importante del equipo son los micrófonos, ya que determinan la calidad de captación, la sensibilidad y su direccionalidad. En cine, se suelen utilizar micrófonos muy direccionales, como los micrófonos de cañón, para limitar la zona de captación en el set. Esto varía dependiendo de la localización en la que se va a rodar. Si es un interior, y por lo tanto hay menos sonido ambiente, o si es un exterior en la que hay muchas personas hablando y nos tenemos que centrar en una conversación. Para esto es imprescindible hacer buen uso de cada tipo micrófono.

Micrófonos de interferencia El micrófono esta diseñado como un micrófono cardioide normal, al que se han practicado una serie de ranuras. El sonido que llega procedente de fuera del eje principal a la parte posterior de la membrana (de menor sensibilidad) ha tenido que atravesar las ranuras que




han generado interferencias destructivas, que lo han atenuado aún más. Esta peculiaridad hace que su diagrama polar tenga una peculiar forma de trébol.

- Micrófono de cañón. Son los micrófonos más utilizados tanto para exteriores,

como para interiores amplios, ya que al ser hipercardioides permiten captar la fuente de forma muy concreta. Uno de los más conocidos es el Sennheiser 416, también existen otras marcas como Rode o Schoeps.

-Micrófono de semicañón. Micrófonos normalmente utilizados para interiores o corta distancia a la fuente sonora, ya que tiene menor direccionalidad que el micrófono de cañón.

En interior suele estar protegidos con un zeppelin, este disminuye el ruido del aire en el micrófono al mover la pértiga, en cambio, en el exterior suele estar acompañado de un antivientos para que el aire fuerte no produzca ruido en el micrófono.




Micrófonos lavaliers También conocidos como micrófonos de cobarta, o inalámbricos por su sistema de conexión por radiofrecuencia. Se colocan escondidos en la ropa o en el atrezzo. Estos micrófonos son omnidireccionales, aunque no captan muy bien las acústicas naturales y tienen un rango dinámico limitado. También son muy propicios a los ruidos y al sonido del viento. Este tipo de micrófonos se suelen dejar como última opción en situaciones donde no se pueda colocar la pértiga; como planos generales, espacios complicados, problemas graves con la sombra de la pértiga..., pero aun así se suelen utilizar para reforzar el sonido de la pértiga. Los micrófonos inalámbricos pueden sufrir interferencias eléctricas, y por supuesto dependen de las baterías de reserva.

Mezclador y grabador El nivel de las diferentes señales capturadas por los micrófonos son controlados por un mezclador o mixer para finalmente ser registrados en un grabador. El mezclador puede ser un simple mezclador portátil de doble entrada. Los grabadores utilizados en rodaje deben contar siempre con la posibilidad de ser utilizados con baterías, ya que no siempre se cuenta con alimentación de línea en todas las localizaciones. Los más utilizados hoy en día son los grabadores digitales que almacenan las tomas en tarjetas SD y discos duros internos, grabando incluso una copia de seguridad por si la original se pierde. Por supuesto estos grabadores tienen una construcción de componentes de alta calidad y permiten la grabación máxima de audio PCM sin compresión de 24 bit (con o sin dither) y sampleo 192 kHz. Existen marcas destacadas como Sound Devices o Tascam. Hasta hace no mucho se ha estado grabando en DAT Los cables son de vital importancia para la transmisión de la señal por lo que no debe considerarse la calidad del cableado como una cuestión menor. Es indispensable, además, que en todo su recorrido la señal sea transportada de manera balanceada. El único medio por el cual el microfonista escucha efectivamente la señal que está capturando y registrando son los auriculares. Es muy importante, entonces, el desempeño de estos equipos, ya que es necesario monitorear la señal que se está grabando de la manera más fiel posible. Para poder realizar su trabajo con seguridad, el microfonista debe conocer bien sus auriculares. Jose M. Arteaga Carbajo



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