TEMA 10: LA LA DICTADUR DICTADURA A FRANQ FRANQUISTA UISTA ENTRE 1959-1975 1959-1975 1. LA ESTABILIZACIÓN Y EL DESARROLLISMO. Los acuerdos firmados por España con Estados Unidos en 1953 y la progresiva aceptación internacional de la dictadura permitieron cierta recuperación económica en la década de los 50 y el comienzo de un proceso proceso de liberalización económica, cuyo resultado fue un súbito crecimiento económico que trajo consigo algunos desajustes como el crecimiento incontrolado de la inflación y el desequilibrio en la balanza de pagos. El intento por corregirlos llevó a la aprobación del Plan Nacional de Estabilización Económica, diseñado por un nuevo grupo de políticos, miembros destacados del Opus Dei, que habían entrado recientemente recientemente en el gobierno y que diseñaron las nuevas nuevas políticas económicas desde sus convicciones tecnócratas. El Plan de Estabilización constó de dos etapas: eta pas: en la primera el gobierno suspendió todo tipo de ayudas para que desaparecieran las empresas ineficaces, para posteriormente posteriormente relanzar la economía economía con las empresas saneadas. Además se trató de corregir la inflación, el déficit público y el déficit défic it en la balanza de pagos. pa gos. El primer resultado de este Plan fue un crecimiento cr ecimiento masivo del desempleo cuyo impacto se vio atenuado por la demanda europea de mano de obra en esos años y por el sistema represivo de la dictadura que redujo la posible conflictividad social asociada al paro. "Estabilizada" la economía, se pusieron en marcha tres planes de desarrollo. El Estado se convertía en el planificador de la economía, seleccionando los sectores estratégicos y los espacios geográficos que debían ser impulsados. El objetivo era generar ciertos niveles de crecimiento económico y de bienestar que garantizasen la perpetuación del régimen. El desarrollo se centró fundamentalmente fundamentalmente en tres t res sectores: - El industrial: Se concentró en los focos tradicionales junto a otros constituidos en "polos de desarrollo". Destacaron la siderurgia, la automoción y la químicofarmacéutica, con fuerte dependencia tecnológica del extranjero. - El financiero: favorecido por la reserva del mercado nacional. - La construcción: impulsada por el crecimiento urbano y por el auge del turismo. El resultado de todo ello fue un fuerte crecimiento económico en los años 60 y principios de los 70, posible gracias a los siguientes factores: - La emigración a Europa Occidental que atenuó la conflictividad social y proporcionó divisas que ayudaron a compensar nuestra balanza de pagos. - El turismo: que supuso otra importante entrada de divisas y un destacado
impulso a la construcción. - La inversión extranjera que llegó gracias a la recuperación económica europea y al aperturismo económico de la dictadura. Las consecuencias de este crecimiento económico fueron diversas: - Se produjo un importante flujo migratorio del campo a las ciudades y de unas zonas de España a otras más beneficiadads por los planes de desarrollo. Esto incrementó los contrastes geográficos y provocó la despoblación de zonas rurales así como importantes dificultades de las zonas receptoras. - El crecimiento económico provocó un boom de la natalidad en los años 60. - El crecimiento económico no se vió acompañado apenas de redistribución de la riqueza. 2.- LA EVOLUCIÓN POLÍTICA DE LA DICTADURA. El aparente aperturismo que se pretendió mostrar en los años 60 no fue realmente sino un intento de consolidación de la dictadura. Franco trató así mismo de institucionalizar la dictadura a través de dos leyes: - La Ley de Principios del Movimiento Nacional, en el que la ideología franquista quedó relegada a un segundo plano y se reconocía la existencia de diferentes familias dentro de la dictadura. - La Ley Orgánica del Estado: que trató de consolidar la imagen aperturista del régimen mediante la separación de la Jefatura del Gobierno y la Jefatura del Estado que sin embargo mantuvo hasta 1973. Aunque la llamada Ley Fraga eliminó la censura previa se impuso la autocensura. La creación del TOP, para perseguir cualquier tipo de disidencia, demuestra de hecho, la escasa apertura real del régimen. 3. LA OPOSICIÓN AL FRANQUISMO. El Concilio Vaticano II supuso un intento de la Iglesia por adaptarse al mundo moderno, que en España se tradujo en una mayor separación entre la Iglesia y la dictadura. En este sentido fue clave la postura crítica de Tarancón al frente de la Conferencia Episcopal. La oposición interna estuvo, sin embargo, protagonizada por el PCE a través de la movilización de las masas. En el mundo obrero destacó la actividad de su sindicato CCOO, cuya participación en las elecciones del sindicato vertical permitieron aumentar los niveles de movilización. También se organizó una oposicion violenta, representada por ETA y por otros
grupos como el FRAP. 4. EL FINAL DE LA DICTADURA. En 1969, el escándalo Matesa supuso un duro golpe para el régimen. Ese año Juan Carlos, cuya formación había estado controlada por el dictador, fue designado como su sucesor. El siguiente paso dado para garantizar el mantenimiento del franquismo a la muerte de Franco fue la designación de Carrero Blanco como Presidente del Gobierno en 1973, pero su asesinato por ETA a finales de ese año supuso un obstaculo para esos planes. En su lugar se designó a Arias Navarro. Frente a los intentos del régimen por garantizar su perpetuación, la oposición trató de aunar fuerzas con la creación de la Junta Democrática con partidos de diversas ideologías en torno al PCE. El declive físico de Franco en 1975 fue aprovechado por Hassan II, rey de Marruecos, para organizar la Marcha Verde por la que miles de marroquíes se dirigieron a la frontera del Sáhara. El miedo a una guerra con Marruecos llevó al abandono del Sáhara por las autoridades españolas. En julio de ese año Juan Carlos asumió la jefatura de Estado de forma interina, hasta la muerte del dictador el 20 de noviembre de 1975.