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Revista Internacional de
Evaluación y Medición de la Calidad Educativa Contribución de las simulaciones como estrategia metodológica ALBENIS CORTÉS CORTÉS RINCÓN MARCELA CARDONA BEDOYA
SOBRELAEDUCACION.COM
Contribución de las simulaciones como estrategia metodológica Albenis Cortés Rincón, Fundación Universitaria Panamericana, Colombia Marcela Cardona Bedoya, Fundación Universitaria Panamericana, Colombia
Resumen: Este artículo presenta los resultados de un proceso de observación académica enmarcada en un programa
de formación de formadores desarrollada en la Fundación Universitaria Panamericana, Bogotá D.C. (Colombia). La recolección de información se hace a través de la construcción de un documento colaborativo donde los docentes exponen sus puntos de vista de la incorporación de simulaciones como estrategia metodológica en sus prácticas profe sionales. Esta información es relevante puesto que la institución durante los últimos años ha venido promoviendo la incorporación de metodologías activas en el aula pero aún no se validado las contribuciones identificadas por sus docentes. Desde la experiencia empírica apoyada en fuentes teóricas de consulta se identifican tres principales contribuciones: en primer lugar la posibilidad de recrear la realidad; en segundo lugar poner en práctica los conocimientos a través de la experimentación, y por último, la capacidad de promover el aprendizaje colaborativo. La recolección y análisis de información se ha realizado bajo el paradigma cualitativo con una muestra no probabilística, que permite conocer las opiniones propias de los docentes a partir de su experiencia, no tiene como objetivo generalizar sino exponer ideas a partir de casos particulares contribuyendo a la teoría ya existente. Palabras clave: simulación, estrategias metodológicas Abstract: This paper presents the results of a formal observation process framed in a training of trainers program developed at Unipanamericana Fundación Universitaria, Bogotá DC (Colombia). Data collection was done through building a collaborative document where teachers exposed their views incorporating simulations as methodological strategies in their professional practices. This information is relevant because the institution in recent years has been promoting the incorporation of active methodologies in the classroom but they haven´t identified the real contributions in the teachers process. From empirical experience supported by theoretical reference sources, there identified three main contributions: firstly the possibility of recreating reality; secondly implementing knowledge through experimentation, and finally, the ability to promote collaborative learning. The collection and analysis have been conducted under the qualitative paradigm with a nonrandom sample, which identifies teachers' own opinions based on their experience, it not only aims to present ideas to generalize from particular cases, but also to contribute to the existing theory. Keywords: Simulation, Methodological Strategy
Introducción
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a incursión de modelos pedagógicos centrados en el aprendizaje ha surgido de la mano con el desarrollo de metodologías activas que ponen al estudiante en el centro del escenario potenciando el aprendizaje propio y significativo, así como desplazando las clases magistrales poco a poco del desarrollo del proceso de formación. De acuerdo con estos nuevos planteamientos el rol del docente se transforma por uno donde se privilegia el acompañamiento, la guía, la evaluación y el apoyo necesario en el proceso; básicamente se trata de enseñar a aprender contribuyendo a (re)crear estructuras cognitivas o esquemas mentales para manejar la información disponible (Romero & Turpo, 2012). Bajo este panorama el estudiante es considerado eje del proceso de formación, es el responsable de su aprendizaje y debe tener la autonomía para poder organizar sus espacios y generar estrategias que le permitan cumplir con los objetivos propuestos a través de diversas actividades
Revista Internacional de Evaluación y Medición de la Calidad Educativa Volumen 1, Número 1, 2014,
, ISSN 2386-7787 © Common Ground España. Albenis Cortés Rincón, Marcela Cardona Bedoya. Todos los derechos reservados. Permisos: [email protected]
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con un plan de trabajo estructurado (Cortés & Cardona, 2013a). Cuando se hace alusión al tra bajo estructurado es la secuencia lógica propuesta por el docente dentro de la etapa de diseño y desarrollo curricular estructurado a partir de su experiencia y experticia para lograr los objetivos formulados. De esta forma, se pretende generar no solo conocimientos sino que se da prioridad al desarrollo de habilidades relacionadas directamente con la estructura específica de las asignaturas, así como aquellas de tipo transversal. Se puede decir que la incorporación de metodologías activas enriquece el trabajo del docente y el proceso de formación del estudiante, sin desconocer que estas nuevas formas de aprender y de enseñar promueven la actualización profesional puesto que exige conocer las necesidades propias del entorno con el fin de adaptar situaciones y experiencias al proceso de formación. Esta no es una tarea fácil, porque existen paradigmas difíciles de romper, la mayoría de los docentes pertenecen a la antigua generación, en donde se busca replicar metodologías que ya con anterioridad han funcionado. Son docentes convencidos de su trabajo, que plantean afirmaciones tales como si así aprendí yo por qué no pueden aprender los estudiantes de ahora. “La enseñanza tradicional veía el conocimiento como algo independiente del pensamiento que lo genera y lo aplica: la educación moderna sabe que todo conocimiento o contenido es generado, organizado, analizado y sintetizado por el pensamiento” (Blanco, Miranda, & Melero, 1993), es así como al relacionarlo con el concepto de competencia, se puede afirmar que, para ser competente se requiere del conocimiento pero el conocimiento por sí solo no genera la competencia. Frente al anterior panorama se hace evidente la necesidad de generar un cambio a nivel metodológico, pero no solo un cambio relacionado con la integración de nuevos recursos, se requiere un mayor tiempo de planeación por parte de los docentes en el diseño de actividades de aprendizaje que promuevan el desarrollo de competencias específicas y transversales brindando el papel protagónico al estudiante como actor principal de su proceso de formación. Las estrategias metodológicas activas, considerada así por implicación activa del estudiante dentro del proceso, propician el desarrollo de conocimientos y habilidades necesarias en los nuevos contextos a los que la sociedad se ve enfrentada. El presente documento muestra la opinión de docentes en ejercicio que encuentran en las simulaciones como estrategia metodológica contribuciones al proceso de formación. Los mismos exponen como situaciones problema dentro del ejercicio de desarrollo curricular las situaciones descritas a continuación y se plantean nuevos interrogantes: 1. Los estudiantes consideran que la guía académica contiene elementos que son muy históricos y la tendencia hoy en día son casos más prácticos, ¿de qué manera se pueden relacionar estos elementos históricos con casos en el campo laboral? 2. Los resultados indican que los usos que se le dan a las herramientas tecnológicas se enfocan solo en transmitir conocimientos, reforzar aprendizajes y desarrollar destrezas para el manejo del computador y que los estudiantes del curso no están logrando grandes progresos en sus competencias tecnológicas, ¿cómo se fomenta el desarrollo de habilidades y aprendizajes en las clases que incorporan las TIC con distintas estrategias metodológicas? 3. Los estudiantes no cuentan con el manejo básico de la herramienta en simulación financiera, esto hace que se puedan tomar decisiones inapropiadas y generar falsas expectativas ante un proyecto de inversión, ¿es suficiente el uso de simuladores para verificar si los proyectos son viables a corto y largo plazo? 4. Al realizar clases presenciales la gran mayoría de docentes utilizan metodología de clase magistral; la clase depende mucho del docente, y si él tiene empatía y es práctico, el alumno entenderá el tema, de lo contrario, la clase se torna pesada, los alumnos tienden a dispersarse y no logran entender, ¿qué hacer para que la clase magistral se convierta en toda una experiencia de investigación, basándose en metodologías activas?
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En los procesos de enseñanza y aprendizaje del área contable, el estudiante requiere que todos los conceptos sean ejemplarizados o simulados con ejercicios prácticos que permitan un entendimiento casi inmediato de los que significa el débito y el crédito, por ejem plo, para una mejor apreciación de la naturaleza de las cuentas. La mejor manera de entender estas definiciones es desarrollando simulaciones de actividades económicas donde el estudiante juegue con ese imaginario y logre captar cómo se representa contablemente una transacción comercial, ¿cuál es el papel de los ejercicios prácticos o simulaciones de transacciones comerciales en la enseñanza de la contabilidad? Es así, como el presente documento tiene como objetivo identificar la contribución de las simulaciones como estrategia metodológica a partir de la experiencia de los docentes. La metodología utilizada en la recolección de información y posterior análisis es de tipo cualitativo al buscar hacer una aproximación a la realidad que se quiere comprender a partir del estudio de casos. Siendo así, se toman como referencia los aportes individuales que realizan los docentes participantes en el “Diplomado en TIC como herramienta para la implementación de cursos online a partir de metodologías activas” en un ejercicio de construcción colectiva desarrollado en el periodo de II-2011 al I-2013. En él, los docentes exponen las situaciones problema que identifican en el aula y frente a las cuales la incorporación de simulaciones presenta potencialidades en su solución; de igual forma exponen las potencialidades identificadas. Los docentes partici pantes en este periodo suman un total de 119 distribuidos en las cuatro facultades que conforman la IES. La formación de los participantes se encuentra en el nivel profesional 43%, especialización 31% y maestría 26% La distribución por facultad es del 40% en la de Ciencias Empresariales, un 24% de la facultad de Comunicación y un 18 % en las facultades de Ingeniería y Educación respectivamente. La facultad de ciencias empresariales ha sido considerada como muestra por lo tanto es un ejercicio con muestra no probabilística, sin desconocer que las simulaciones presentan un gran potencial como estrategia metodológica independiente de la facultad en la que se quiera implementar. Sin pretender ser un estudio rigoroso, el presente documento presenta opiniones soportadas en la experiencia docente de los participantes en contraste con fuentes académicas, con el fin de contribuir a la discusión sobre el tema.
En relación con las simulaciones: marco de referencia El actual escenario educativo requiere políticas de cambio desde las instituciones que promuevan la incorporación de nuevas estrategias metodológicas por parte de los docentes, poniendo de manifiesto el rol activo que los estudiantes tienen en su proceso de formación. Es así como el proceso de formación requiere un cambio, no se desconoce que las políticas públicas han impactado directamente a las instituciones, pero aún se requiere un mayor trabajo desde el aula y la forma como se estructura el ¿cómo enseñar? (Godoy, 2009) establece cinco características propias de la educación tradicional (tipo conferencia) que apoyan estas razones de cambio: 1. El tiempo de dedicación en una conferencia no es suficiente. 2. Las personas aprenden haciendo y no solo escuchando. 3. La trasmisión de conocimiento “correcto” teórico impide la exploración del conocimiento con “errores”, empírico. 4. Las recompensas del sistema clásico son las notas, el estudiante aprende para obtener buenas notas. 5. La gente aprende mejor cuando hace cosas solo que cuando mira lo que hace un profesor, así sea un profesor excelente. Es necesario reconocer no solo los conocimientos sino que se hace necesario involucrar la experiencia, soportando el conocimiento en la vivencia (Godoy, 2009). Esta idea se refuerza con la tendencia actual que busca propiciar una formación significativa, critica, creativa e inte-
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gral; donde la interacción entre los conocimientos previos y los nuevos debe estar mediado por la práctica (Cortés & Cardona, 2013a). De allí la importancia de propiciar experiencias que acerquen al estudiante al mundo profesional y/o al contexto real; cuando el objetivo es desarrollar habilidades se requieren contextos donde se pueda aprender haciendo. Las instituciones buscan generar mediante las simulaciones aproximaciones a procesos de enseñanza – aprendizaje significativo mediante problemas o realidades actuales. En este proceso se buscan no solo que el estudiante conozca la teoría sino que ponga en práctica sus conocimientos. Según (Caride Gómez, Gradaílle Pernas, & Teijeiro Boo, 2012) “una simulación es adecuada para favorecer la comprensión de ideas y conceptos abstractos, así como para el aprendizaje de estrategias o la adquisición de una visión global de una realidad” (p, 2), teniendo en cuenta esto se busca que el estudiante vaya más allá de lo que conoce y busque interacciones que le ayuden a identificar soluciones diferentes a las que en una primera instancia se identifican, de esta forma se podrá argumentar una situación desde diferentes perspectivas. Caride Gómez et al. (2012) identifican cuatro objetivos que se pretenden alcanzar bajo el manejo de las simulaciones: 1. Promover una visión global de la realidad contribuyendo de esta esta forma al desarrollo de ideas y conceptos según los temas evaluados. 2. Poner en juego las propias decisiones teniendo en cuenta las problemáticas presentes y las diversas situaciones bajo las cuales se pueden evaluar. 3. Circular por el espacio y el tiempo según las necesidades y los tiempos en los cuales se identifican las experiencias. 4. Conocer y experimentar las situaciones. Siendo así, las simulaciones permiten recrear situaciones reales que posiblemente en un entorno no controlado sean difíciles de experimentar. Estos objetivos permiten que el estudiante enriquezca la situación en la cual se encuentra inmerso, no solo mediante lo que se tiene preconcebido sino que identifique otras posibles soluciones y para ello se hacen necesarios nuevos conocimientos, solo que los mismos se desarrollaran dentro de un contexto, no en el vacío. Adicionalmente se fortalece la capacidad de argumentación al tener que dar cuenta del porqué de las decisiones tomadas. Se busca la interacción con otros y promover mecanismos de debate que enriquezcan las situaciones presentadas frente a sus posibles soluciones. El involucrar situaciones simuladas en el aula regular promueve el desarrollo de nuevas prácticas profesionales, por lo tanto es importante considerar algunos consejos en su diseño que a pesar de haber sido propuestas para un ambiente que haga uso de recursos tecnológicos (Godoy, 2009), es propicio para cualquier entorno. Estos son: 1. Para que sea efectiva, la tarea propuesta al participante debe ser creíble. 2. Presentar una situación interesante que el participante pueda intentar resolver porque está dentro de sus capacidades. 3. Permitir que el participante falle. Esto no es trivial y debe ser diseñado para asegurarse que el participante tenga la posibilidad de caer en trampas y pueda salir de ellas. 4. Mostrar ejemplos exitosos que estén relacionados con la situación que se está enfrentando. 5. Permitir que se aproveche el conocimiento adquirido para tratar nuevamente. El docente debe estar en constante experimentación, esto le permitirá abordar las necesidades de formación del estudiante y estar a la vanguardia, brindando nuevas experiencias significativas. Las situaciones de la vida real son muy complejas para que puedan ser inmersas en una simulación académica. Es por esto que esta estrategia metodológica en su diseño abarca múlti ples casos ampliando el panorama de complejidad y complementando el escenario de aprendizaje; “a veces hay que aprender contenidos para los que no existe una experiencia accesible en la vida real, como el aprendizaje de las consecuencias de una explosión nuclear” (Godoy, 2009). Son múltiples los beneficios de incorporar nuevas prácticas en el aula, el diseño de actividades de aprendizaje centradas en casos reales y/o situaciones problemáticas, genera un ambiente de
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indagación e investigación en el estudiante (Cortés & Cardona, 2013c) lo cual redunda en el desarrollo de nuevos conocimientos y habilidades a través de la experiencia. El contexto de la educación es complejo y los docentes se enfrentan a paradigmas tradicionales frente a la relación entre docentes y estudiantes y el proceso de enseñanza – aprendizaje. Aunque se han de generar nuevas metodologías de aprendizaje y un dinamismo diverso en los procesos, aún se están evaluando las estrategias y los nuevos modelos de aprendizaje donde el estudiante es el eje central del proceso. (Gaete Quezada, 2011) plantea los retos que trae consigo estas metodologías relacionadas con la inminente obligatoriedad por desarrollar un mayor esfuerzo en el ejercicio de la docencia y la forma como incide positivamente en la formación de los estudiantes. Estas nuevas estrategias metodológicas permiten un proceso de interacción no solo entre el docente y los estudiantes sino entre los mismos estudiantes con el fin de generar espacios de discusión y debate enriquecedores donde se tome el ejercicio conceptual y se ponga en práctica con el fin de llegar a mejores resultados. Dentro de la categoría de simulaciones se encuentra el concepto de juego de roles. David citado por (Gaete Quezada, 2011) establece que “los juegos promueven o ayudan a promover la participación generalizada, creando situaciones en que se rompen los convencionalismos sociales, promueven dos roles nuevos independientemente del tradicional participante, que son el de coordinador y el de observador” mediante diversas actividades se busca que el estudiante participe en un proceso no solo social sino también identifique situaciones reales y sus posibles soluciones teniendo de esta forma un aprendizaje significativo, el poder adoptar perspectivas diferentes, identificar formas de opinión diversa y generar una reflexión en el proceso de aprendizaje hace que estas metodologías adquieran cada vez más fuerza. Es interesante el sumergirse en estos nuevos entornos de enseñanza-aprendizaje a través de la planeación, implementación, evaluación, retroalimentación y ajuste, desarrollando cada vez mejores estrategias de aprendizaje, dejando de lado la memorización y la clase magistral para pasar a un proceso de aprendizaje significativo. Al desarrollar está estrategia el estudiante genera la capacidad de apoyar el trabajo en equipo, de adaptase fácilmente a las situaciones e identificar mediante las argumentaciones y propuestas de sus compañeros su propia posición frente al tema analizado. En el ejercicio del diseño de una simulación es importante considerar el mayor número de elementos relacionados a continuación y presentes en la propuesta de (Godoy, 2009): a) Determinar las destrezas objetivo, orientadas directamente al futuro desempeño del estudiante. b) Identificar expertos profesionales que colaboren con el diseño de la simulación a partir de la experiencia que ya poseen. c) Desarrollar misiones que requieran el uso de esas destrezas que se han identificado. d) Seleccionar un foco, el cual permite definir la meta de la simulación y el escenario propicio para lograr despertar la atención. e) Crear una historia que incluya la misión y el foco, en ellas el participante se encuentra con personajes simulados que representan distintos intereses o poseen informaciones relevantes para alcanzar la meta. Dentro de la historia, el participante reúne informaciones y toma decisiones. Esto permite navegar dentro del caso en el cual se ha establecido la misión. Para construir historias es necesario haber recolectado muchas historias de la vida real; esto se logra mediante entrevistas a expertos, preguntándoles cosas como ¿Qué es lo más interesante que le ha ocurrido en relación a este tópico? ¿Qué es lo difícil de hacer? ¿Qué problemas difíciles ha enfrentado Ud.? ¿Qué tipo de razonamiento usó? f) Planificar las acciones que permitirán construir la simulación, básicamente reconoce la recolección de información de diversas fuentes y los cálculos necesarios para lograr la simulación.
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g) Construir ambientes de aprendizaje que lleven al estudiante a alcanzar la meta. Es así como la implementación de estrategias metodológicas activas genera cambios estructurales en la tarea del docente asociados principalmente a su rol en relación con modelos tradicionales, funciones, los procesos de implementación las actividades de aprendizaje y la incorporación de nuevos recursos (Cortés & Cardona, 2013a).
Contribución de las simulaciones como estrategia metodológica en el aula: resultados A partir de las opiniones expuestas por los docentes acerca de la contribución de las simulaciones como estrategia metodológica en el aula, se identifican tres principales contribuciones: en primer lugar la posibilidad de recrear la realidad; en segundo lugar, poner en práctica los conocimientos a través de la experimentación y por último, la capacidad de promover el aprendizaje colaborativo. A continuación se describen cada una de ellas:
Posibilidad de recrear la realidad El aporte de las simulaciones como estrategia metodológica son múltiples, pero una reconocida por los docentes es la posibilidad de recrear situaciones reales donde el estudiante pone en práctica y en evidencia los conocimientos adquiridos. Este tipo de metodologías reconocen y validan la importancia de los conocimientos previos resultado de la experiencia personal y empírica, pero que al ser aprovechada por los docentes dentro de su ejercicio de acompañamiento potencia el desarrollo de nuevos conocimientos mucho más estructurados. Estas simulaciones son diseñadas a partir de situaciones problema tomada de casos reales y adaptadas a las necesidades puntuales de la población objetivo, lo cual permite enfrentar los retos que su carrera le impondrá en un futuro y a la vez genera confianza en la puesta en evidencia de los conocimientos adquiridos teniendo aplicabilidad en el mundo laboral. De esta forma se promueve y fortalece el aprendizaje autónomo, la lógica para resolver problemas inmediatos, la creatividad, la persistencia, la responsabilidad y la reflexión sobre el trabajo hecho. El enfrentar a los estudiantes a casos reales que han sido adaptados se ofrecen escenarios complejos que la academia suele separa del campo laboral y que en oportunidades solo son considerados de forma teórica. Las simulaciones permiten estar inmersos en escenarios que en el futuro se convertirá en el campo de acción profesional. El poder utilizar, manipular y reconocer nuevas formas de solucionar problemas desarrolla capacidades como la toma de decisiones y el trabajo en equipo independiente de la temática específica que le brinda el currículo. Apoyados en la tecnología, los entornos multimediales ponen al servicio del docente y del estudiante aplicativos que permiten recrear situaciones, es decir, ya no se requiere contar con un espacio elaborado sino que la realidad ahora puede ser virtual; esto no quiere decir que la simulación como estrategia metodológica requiera en forma obligatoria de un entorno apoyado en las tecnologías, sin embargo, las mismas ponen al servicio escenarios de experimentación y promueven vivencias que conlleven al desarrollo de competencias profesionales en los estudiantes o participantes.
Poner en práctica los conocimientos a través de la experimentación Una de las contribuciones de la simulación es la posibilidad de experimentar con nuevos diseños sin que estos tengan que construirse. La simulación y el aprendizaje son dos conceptos muy unidos en el proceso educativo, y la mayoría de las actividades de aprendizaje están basadas en situaciones simuladas. Estas situaciones ponen a prueba procedimientos, fenómenos y fomenta
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la toma de decisiones frente a situaciones que, por no contar con el escenario real donde suceden puedan parecer desconocidas. La experimentación fortalece: el aprendizaje por descubrimiento, fomentar la creatividad, la enseñanza individualizada, la autoevaluación y ahorra tiempo y dinero; se pueden utilizar en todos los niveles educativos, y son de gran ayuda para explicar y practicar procedimientos. Las simulaciones contribuyen al desarrollo de competencias transversales, la capacidad argumentativa, el fortalecimiento de valores a partir de la concepción de lo correcto e incorrecto y la capacidad para cambiar e interactuar con otros en diversos contextos. Lo que fortalece esta estrategia metodológica es que se convierte en un punto de partida importante para el aprendizaje de los estudiantes, a través de ella y de forma consciente se pueden crear y comprender los fenómenos que existen en el universo, implementar soluciones y sobre todo generar aprendizaje no solo del estudio macro del problema u objeto sino también de su solución y comportamiento. La dinámica en el mundo académico obliga a que los docentes y alumnos estén siempre abiertos a la incorporación de nuevas herramientas didácticas que faciliten el aprendizaje y además estén en sintonía con el desarrollo tecnológico. La experimentación le permite al estudiante probar, manipular y descubrir, logrando la comprensión mediante un proceso de ensayo y error; de esta forma el permitir tener un contacto directo con la experiencia da significancia a la vivencia y enfatiza el sentimiento frente al pensamiento (Villarraga, 1997), es así como se construye conocimiento a través de la experiencia en ese mundo simulado que busca la semejanza más cercana a la experiencia real. Esto suele generar sensaciones de capacidad, confianza e interés por adquirir nuevos conocimientos a partir de nuevos descubrimientos y aplicación de los conocimientos. Por último, esta estrategia exige por parte del estudiante un ejercicio de análisis importante con relación a la situación en la que se participa, sin dejar de lado al docente a quien también motiva para desarrollar sus capacidades investigativas, de acompañamiento y de innovación. El estudiante se ve enfrentado a la necesidad de indagar nuevas fuentes de información para dar solución a las situaciones problema y debe ponerse en el lugar de las personas que se enfrentan a situaciones similares a las descritas con el fin de hallar una solución.
Capacidad de promover el aprendizaje colaborativo Las simulaciones son una alternativa innovadora en el aprendizaje debido a que fomenta la interacción entre los diversos actores del proceso formativo. Los docentes observan una mayor motivación por parte de los estudiantes hacia el logro de sus objetivos de aprendizaje, fortalece la capacidad crítica al trabajar en un modelo donde cada uno de los estudiantes realiza aportes y deben definir con qué se quedan y con qué no; adicionalmente la incorporación de simulaciones en el ámbito académico, favorece el trabajo colaborativo, el compromiso y por ende, el aprendizaje significativo. Los estudiantes son capaces de construir su conocimiento, en lugar de memorizar en forma mecánica y carente de análisis la información que imparte el docente. El organizar equipos de trabajo fomenta valores como la colaboración y la solidaridad, respeto y admisión de los criterios de actuación de sus compañeros, así como por las opiniones de los demás (Pubill, 2008), de esta forma no solo se habla de conocimientos sino que se fortalecen actitudes que promueven el aprendizaje a nivel individual y grupal. Se pueden permitir errores y brindar acompañamiento y/o asesoría para llegar a acuerdos al interior de los equipos de traba jo; de esta forma se potencia el aprendizaje a través de la identificación de posibles fallas. Al ser la simulación la estructuración de casos individuales que generan una mayor com plejidad en el análisis se cumple con características del aprendizaje basado en problemas. Según (Thomas, 1992) un buen problema satisface los siguientes requisitos “se basa en experiencias reales, permite tomar decisiones en puntos críticos, enfatiza el razonamiento profesional, refuerza el conocimiento previo, fomenta el proceso de solución”, es así como el trabajo colabora-
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tivo genera liderazgos que permiten avanzar en el desarrollo de competencias transversales propias de las diferentes disciplinas.
Conclusiones y discusión Dentro de las bondades de incorporar experiencias reales susceptibles de ser analizadas en el aula de clase a través de las simulaciones se encuentra la posibilidad de recrear experiencias que fomenten la creatividad y el pensamiento crítico. Se debe ser capaz de tomar decisiones, eliminando la variable de riesgo que existe en la vida real. El uso de las simulaciones como estrategia metodológica no se puede reducir a una sola modalidad de formación, llámese presencial o a distancia. Sin embargo, el apoyo en la tecnología al interior del aula favorece la comprensión de las situaciones. No toda simulación requiere de tecnología pero escenarios complejos pueden ser recreados allí con mayor facilidad. El factor tiempo es también fundamental dentro de esta experiencia metodológica, puesto que al ser un ejercicio académico se brinda el tiempo necesario para que el estudiante o grupo de estudiantes hagan una pausa, reflexionen, validen las alternativas de solución y continúen en la tarea. De igual forma facilita la revisión de las decisiones tomadas en el pasado, todo dentro de un ejercicio vivencial permitiendo la confusión, la indagación y la búsqueda de posibles soluciones. Dentro de los elementos mencionados por (Godoy, 2009) y que vale la pena considerar en relación con las simulaciones es la capacidad de asombro y fascinación que debe despertar en el estudiante, puesto que las emociones permiten que el estudiante apropie la situación de allí la importancia de su realismo; trabajando por desarrollar nuevos niveles de interés y motivación en el estudiante. No todas las personas aprenden de la misma forma y mucho menos posee los mismos intereses, pero lo que sí es claro es que en el momento que el estudiante se hace partíci pe de la simulación y a través de un trabajo en equipo con sus compañeros afloran las cualidades individuales que aunadas dan solución a la situación problema a la cual se enfrente, por lo tanto se favorece la individualidad y el compromiso personal. En el diseño de las simulaciones es importante considerar diferentes caminos para llegar a la solución de la situación, la no estandarización permite una mayor apropiación por parte de los estudiantes y la socialización de los resultados permite ver las múltiples formas de abordar una misma situación. Por lo tanto, el proceso de diseño es fundamental en el momento de garantizar un impacto significativo en el aprendizaje de los estudiantes. La representación de un papel, y la asimilación de un rol dentro de la situación problema por parte de cada uno de los estudiantes, exige de un alto grado de compromiso y dedicación. Se hace necesario asumir el reto como propio con el fin de buscar nuevas fuentes de información para dar solución a la situación problema. Es allí donde el docente debe generar un proceso de acompañamiento y orientación continua para que el estudiante no se base en supuestos sino que aproveche la potencialidad de la situación. Cada docente debe estar enterado de las necesidades de sus estudiantes, ya que a través de las nuevas tecnologías donde se imparten las clases, cada información que él proporcione es inmediata y da la posibilidad de suplir sus necesidades ofreciéndole material acorde a las falencias que esté presentando en la materia que imparte. El tiempo de calidad con el estudiante es fundamental para crear un mecanismo que apoye las temáticas, se le debe dar también nuevas responsabilidades con el fin de compartir herramientas y temáticas de interés que apoyen el conocimiento que se imparte junto con sus compañeros de clase. A manera de discusión se ponen en consideración para la discusión las siguientes afirmaciones: Las simulaciones proponen un supuesto que presenta un desafío para el estudiante, pero ¿qué sucede si la situación problema que se describe no posee los parámetros adecuados para su nivel? •
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Es importante trazar los caracteres de la actividad para que el estudiante sea consciente de la relevancia de esta tarea más allá de una simple representación que en algunas oportunidades puede terminar en lo teatral. La incorporación de la tecnología dentro de las simulaciones no es garantía de éxito, pero facilita la comprensión de situaciones que por cuestiones logísticas posi blemente es difícil de replicar en el aula regular. Uno de los principales retos en la incorporación de metodologías activas como lo son las simulaciones es el arraigo de algunos docentes hacia metodologías tradicionales dictando contenidos de forma presencial. Con el avance de la tecnología y la creación de las nuevas metodologías para generar programas virtuales, los estudiantes tienen un nuevo rol y es el de generar también contenidos no solo para el docente sino también para sus compañeros y de esta manera, fomentar el aprendizaje colectivo. Los estudiantes deben ser preparados no solo para conocer la teoría sino que deben manejar herramientas prácticas que les permita tener un mejor control de la situación cuando ingresen al campo laboral. Las clases que se realizan de forma presencial deben ser muy atractivas para lograr el aprendizaje del estudiante. La incorporación de escenarios multimediales favorece el interés, sin querer decir que no puede existir una buena simulación sin tecnología.
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SOBRE LAS AUTORAS Albenis Cortés Rincón: Como profesional especializada en Psicología Educativa y Magister en docencia, he participado en la ejecución de programas académicos basados en el modelo pedagógico constructivista con enfoques de pedagogía conceptual, aprendizaje significativo y formación basada en competencias por ciclos propedeuticos. Experiencia en la planificación y desarrollo de planes académicos en las áreas de matemáticas, física, informática y nuevas tecnologías de la información basados en los parámetros establecidos por los estándares y lineamientos curriculares, orientados hacia el desarrollo de las dimensiones psicosociales y competencias laborales. Capacitación para la presentación de pruebas del estado ICFES en las áreas de Matemáticas, Física y Razonamiento Abstracto. En educación superior he sido docente de la Universidad Francisco José de Caldas (2007) y Compensar UniPanamericana Institución Universitaria (2009-2012). Experiencia como directora del Grupo investigación: Educación Digital y Virtual en educación superior. Dirección de proyectos con estudiantes de la facultad de educación. Marcela Cardona Bedoya: Magister en Gestión y Dirección de marketing global y nuevos mercados; Especialista en Gerencia en Publicidad; Profesional en Mercadeo y publicidad. En educación superior ha sido docente en Compensar Unipanamericana Institución Universitaria (2008-2014). Experiencia en la identificación de necesidades y exigencias de empresas vincula-
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das a diferentes sectores económicos y generación de estrategias para hacerlas competitivas en un mercado global. Docente investigadora del Grupo Investigación en Educación Digital y Virtual GIEDV y tutora virtual.
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