PARADIGMAS DE LA INVESTIGACIÓN SOCIAL
PARADIGMA
Respecto al concepto de paradigma, existen múltiples definiciones pero coinciden en afirmar que paradigma es un modo de conocer usado como modelo para producir e interpretar interpretar conocimiento conocimiento producido; incluye una concepción del sujeto cognoscente, cognoscente, del mundo en que vive ese sujeto y las relaciones entre ambos. Tal modelo supone entonces un conjunto sistemático de ideas y de prácticas que regulan las interpretaciones que se producen acerca de la naturaleza y actividad humana. De él se derivan modos de conocer a esas personas y el mundo en que viven en un cierto periodo de tiempo. Un paradigma es una manera de hacer ciencia, que supone una forma de interpretar la realidad, una metodología para abordarla y problemas típicos de investigación. La noción de paradigma se entiende como un ámbito compuesto por 3 dimensiones: ontológica, epistemológica y metodológica, pero se ha comprobado que no son únicas, deben ir de la mano con los dos paradigmas propuestos por LatinoAmérica; Ética y Política. Los paradigmas no se superponen uno de otro, por el contrario, se necesitan uno al otro, son un conjunto para entender una realidad y plasmarla de una manera organizada, entendible por la sociedad y respetando todo lo que rodean. Dentro de una investigación es claro encontrar una gran diversidad de situaciones, problemas y fenómenos susceptibles a ser explicados. Y para ello usamos teorías o modelos que nos ayudaran a plantear una posible solución. A continuación se presentan los paradigmas Emergentes de la Investigación Social: PARADIGMAS EMERGENTES DE LA INVESTIGACIÓN SOCIAL 1. ONTOLÓGICO
Se refiere a la naturaleza de los fenómenos sociales y a su grado de estructuración. Plantea la controversia de si la realidad social es algo externo a las personas y se impone desde fuera o, por el contrario, es algo creado desde un punto de vista particular. Guba (1990), considera que un paradigma puede ser estudiado y caracterizado a partir de tres preguntas: La primera, de carácter ontológico se refiere al objeto cognoscible y es: ¿Cuál es la naturaleza de lo cognoscible? O, dicha de otra manera: ¿Cuál es la naturaleza de la realidad?
La ontología o tipología de un sistema, estudia que entidades, relaciones y clases de entidades y relaciones hay en su dominio. Los objetos pueden cambiar en el tiempo: nacer, desarrollarse y morir. Una ontología adecuada puede expresar todo lo relevante de un dominio de forma práctica. El primer aspecto es el ontológico que definido en una pregunta (¿Cuál es la naturaleza de la realidad?) abarca todo lo referente al objeto cognoscible. Por ejemplo la teoría general de sistemas abarca su realidad ontológica como las relaciones y entidades adquiridas por los objetos mostrando así los tipos de procesos originados entre sí (abarcado como un sistema) si bien para esta teoría se aborda de esta manera este aspecto para otras como el paradigma de la construcción y transformación critica se ha centrado tradicionalmente, en el Individuo y su subjetividad, con énfasis en la interacción con los grupos en los cuales se da una comunicación cara a cara, o bien a través de medios diseñados para ello. Pero siempre es claro encontrar esta dimensión dentro de todas las teorías o paradigmas propuestos apuntando directamente al objeto de investigación y a su naturaleza. 2. EPISTEMOLÓGICO
Se refiere a la naturaleza de la producción del conocimiento. Entre la relación sujeto y objeto no hay distancia. No son entidades separadas e independientes. Forman parte de una misma totalidad, en una relación de mutua influencia. Ambos son construidos continuamente en un proceso dinámico en constate movimiento. Esa construcción es social, responde a un espacio y tiempo determinado. La realidad está en el sujeto y a su vez el sujeto está en la realidad, es parte de ella no es posible separarlos. Plantea la forma de adquirir el conocimiento. El investigador ha de contemplar la posibilidad de que el conocimiento sea tan complejo y objetivo que tenga que adoptar la perspectiva de un observador externo, así como métodos propios de las ciencias naturales. O bien, por el contrario, puede considerar que el conocimiento es subjetivo, personal o único, lo que podría requerir un compromiso y una experiencia compartida con las personas implicadas y, por tanto, una menor atención a los métodos físico-naturales. La segunda, referente al aspecto epistemológico es ¿Cuál es la naturaleza de la relación entre quien conoce (quien investiga) y lo conocido o cognoscible? Y la tercera, de orden metodológico, plantea: ¿Cómo hace quien investiga para lograr conocimiento? O como también podríamos decir: ¿Cómo se hace para conocer?
Relacionado con la epistemología de la complejidad se recurre aquí al tratamiento sistémico de la reflexión sobre el modo de observar esa cuestión que se ha intentado analizar desde distintas perspectivas incluyendo la de la ética. De igual manera enmarca la reflexión entre algunos aspectos y dimensiones básicas entre la relación de los constructos en política, economía. Constructo es, en psicología, cualquier entidad hipotética de difícil definición dentro de una teoría científica. Un constructo es algo de lo que se sabe que existe, pero cuya definición es difícil o controvertida. Son constructos la inteligencia, la personalidad y la creatividad, por ejemplo. Aunque para otros autores como Lincoln (1985) dicen no encontrar diferencia o simplemente existe un colapso en la distinción de los dos aspectos tanto el ontológico como el epistemológico puesto que al ver la posibilidad de que el objeto conocido pueda tomar el lugar del objeto cognoscente tanto objeto como sujeto serian uno solo sin diferencia alguna. Es una representación del conocimiento que soporta el pensamiento e indaga sobre la realidad. A partir de ahí, el investigador opina, lee, ve, percibe la realidad y juzga. El modelo epistémico es la base o el soporte para todas las investigaciones. Se construye a partir de ideas-fuerza que precisan el pensamiento, se manifiesta a través de expresiones lingüísticas, los valores para el modelo se expresan por escalas axiológicas según los principios, existe el autor que se vuelve expositor, se expresan en contextos situacionales, estructurales y organizacionales, y para hacer más formal el modelo se usa la semiótica que son los símbolos, códigos y todo lo que lo pueda caracterizar. (Diana Lopera) 3. METODOLÓGICO
Muchos métodos tradicionales siguen en vigencia, los métodos participativos y discursivos son cada vez más variados y populares, un ejemplo es la IAP (Investigación Acción Participativa). El aspecto más importante de esta dimensión es la necesidad de generar métodos que transformen al mismo ritmo que cambian los fenómenos sociales y que puedan producir preguntas y respuestas ante dichas transformaciones y cuya característica fundamental sea la capacidad de cambiar, en una crítica de carácter colectivo. Se trata de construir una metodología dialógica, dinámica, transformadora que lleve a los sujetos a su autoestudio y se logre una forma de intervención que responda a los intereses de la gente. Aborda los problemas que plantea la investigación educativa en relación con los métodos a emplear. Las diversas metodologías que se utilizan en investigación social y
educativa para indagar el mundo social proporcionan el marco de referencia, la justificación lógica para examinar los principios y procedimientos empleados para formular los problemas de investigación, se dan respuestas a los mismos y se evalúan su idoneidad y profundidad. Por otro lado está el aspecto metodológico ¿Cómo se hace para conocer? El cuál es la dimensión que se refiere directamente a la forma, el procedimiento que lleva a la producción de conocimiento. Esta es la dimensión que define el método a seguir a la hora de emprender una investigación. Como una regla general es distinto y varia de un paradigma a otro. Del cual surge una necesidad y es la de crear métodos que vayan en constante cambio a medida que el entorno en el que se desarrolle cambie. 4. ÉTICO
En filosofía es un tema confuso sinónimo de moral, de buen comportamiento, de normas consideradas correctas, estudio de deberes. Es el estudio que tiene por objeto evaluar el juicio concerniente a la distinción entre el bien y el mal. Supone una reflexión genérica de carácter social y relacional, por la cual se deben orientar a las personas en su vida diaria. La definición del otro, su inclusión en la relación de producción de conocimiento basada en su aceptación a partir no solo de su semejanza sino también de su diversidad, constituyen el eje de esta dimensión. Se busca integrar respetando las diferencias individuales. El punto central de la ética reside en la concepción del otro, en su definición, alcances, participación, en su relación con el objeto cognoscente. Se trata de alguien que debe ser tomado en cuenta, es un sujeto que reflexiona la realidad y la construye. Etimológicamente, las palabras ética y moral tienen el mismo significado, en consecuencia, a veces se llama a la ética: filosofía moral. Hoy en día, sin embargo, se suele decir que la moral es uno de los objetos de estudio de la ética. La ética estudia qué es lo moral, cómo se justifica racionalmente un sistema moral, y cómo se ha de aplicar ésta posteriormente a los distintos ámbitos de la vida social. En la vida cotidiana constituye una reflexión sobre el hecho moral, busca las razones que justifican la utilización de un sistema moral u otro. El origen etimológico de la palabra la liga a las costumbres; es decir, a aquellas costumbres consideradas como buenas en un tiempo y lugar determinados. La ética y la otredad, los desarrollos de la episteme de la relación y de la noción de la otredad producidos por la filosofía y la psicología latinoamericanas de la liberación, han sido dos influencias y producto (en el caso de la psicología) muy visibles en este paradigma. La concepción del otro como alguien complementario o vecino al Yo/Uno.
Un examen crítico muestra que también la concepción del otro es naturalizada, es decir, considerada como si perteneciese al orden natural de las cosas en el mundo. Por eso ni se le discute ni se le define, salvo mediante estereotipos que lo reducen al ámbito de los monstruos, los desviantes, los salvajes, los sucios o de los pobrecitos que no pueden hacer nada por sí mismos. 5. POLÍTICO
La política se refiere a la esfera de lo público, al ámbito de la ciudadanía y a como nos relacionamos con otras personas. Se refiere al poder y a sus líneas de acción, esto supone hacer y decir dentro de la sociedad en que vivimos, con generar espacios para el diálogo. La relación dialogal que se propone en este paradigma al generar un espacio de acción transformadora genera al mismo tiempo un espacio de acción ciudadana que permite la expresión y el ejercicio de la democracia. La generación de conocimiento y el respeto a la diversidad tienen consecuencias políticas. La ética reside en el conocimiento del otro en su diferencia, en su aceptación como sujeto cognoscente en igualdad de derechos, en una relación liberadora al reconocer la humanidad del otro. El carácter ético está ligado a lo político. Todo individuo cognoscente es miembro de una relación en la que se produce conocimiento. Los seres humanos separados de la sociedad son individuos pero no humanos. En cada relación se produce conocimiento y el conocimiento solo surge en las relaciones. Todo conocimiento afecta al grupo a la sociedad. Al respetar y admitir la capacidad constructiva de conocimiento, al escuchar a los individuos que la integran, estamos respetando su derecho al espacio público. Y eso es político. La política se refiere a la esfera de lo público, al ámbito de la ciudadanía y a cómo nos relacionamos con otras personas en ella. Igualmente, se refiere al poder y a sus líneas de acción, lo cual constituye su núcleo central. El carácter político de la producción del conocimiento ha sido planteado en la América Latina, en la generación de conocimiento científico, en el campo de la psicología comunitaria; en el movimiento de la anti-psiquiatría que se dio a fines de los 70 e inicios de los 80; en la influencia freiriana y en el campo de la psicología política; es evidente en la corriente de la Psicología social de la Liberación.
6.
LA COMPLEJIDAD
La complejidad es el tejido de eventos, acciones, interacciones retroacciones, determinaciones, azares que constituyen nuestro mundo fenoménico. Es un fenómeno cuantitativo, una cantidad extrema de interacciones e interferencias entre un número muy grande de unidades. Pero la complejidad no comprende solamente cantidades, sino también incertidumbres, indeterminaciones, fenómenos aleatorios, siempre está relacionada con el azar y está presente en la vida cotidiana. Debemos saber que todo lo que sucede en nuestra vida, en la historia mundial es inesperado. Estar alerta nos lo da el pensamiento complejo quien supera al reduccionismo. Un paradigma para América Latina generado desde América Latina: La ética y la política; parte de una concepción compleja de la producción de conocimiento, denominado paradigma de la construcción y transformación crítica, generando una construcción hu mana y social y su carácter cambiante. Pues bien, si se tiene una base de conocimiento como lo es una teoría o como lo es un modelo existe otro más personal que es el modelo epistémico, que es la misma representación del conocimiento pero ya dada desde cada cultura o contexto en el cual se desarrolle la comunidad científica en particular y cada investigador apoya sus investigaciones en un conjunto predeterminado de ideas. Es una representación del conocimiento que soporta el pensamiento e indaga sobre la realidad. A partir de ahí, el investigador opina, lee, ve, percibe la realidad y juzga. El modelo epistémico es la base o el soporte para todas las investigaciones. Aspectos que definen los modelos: Argumentación, logicidad, coherencia, ilación, relaciones, estructura, contexto, expositores y obras, esto lo diferencia en su conjunto de los otros modelos. Características del modelo: Se construye a partir de ideas-fuerza que precisan el pensamiento, se manifiesta a través de expresiones lingüísticas, los valores para el modelo se expresan por escalas axiológicas según los principios, existe el autor que se vuelve expositor, se expresan en contextos situacionales, estructurales y organizacionales, y para hacer más formal el modelo se usa la semiótica que son los símbolos, códigos y todo lo que lo pueda caracterizar. 7. PERSPECTIVA HOLÍSTICA
Freire, (2004): Todos somos seres de relaciones en un mundo de relaciones
Toda nuestra vida transcurre y se mueve en una red de relaciones. Tal concepción responde a la esencia de lo social. Más allá de la relación solo está el mundo de las cosas, que es mundo en tanto de relación. La no- relación es el vacío, la nada. No se puede comprender, interpretar, analizar, describir o tratar a las personas a partir de concepciones fragmentadas de la vida humana construida a través de la sumatoria de individuos aislados. Tampoco se excluye la individualidad, ni la desaparición de la diferencia. Una relación en la cual Uno es con el Otro, es la de la singularidad de donde surge la necesidad de reconocer al otro, es ser autónomo. Esta orientación liberadora se refleja en posiciones psicológicas que han brindado una praxis dirigida a la transformación social. No obstante y a manera de conclusión pudiésemos destacar que el mundo de las ciencias sociales es multi paradigmático (tiene muchos paradigmas). Pero se hace imprescindible mencionar tres de ellos que además de los ya estudiados, se consideran muy importantes:
Empírico-Analítico
Interpretativista
Crítico El primer paradigma Empírico-Analítico, tiende a separar el objeto de estudio y los
métodos a utilizar, tiene un objetivo instrumental, se elige un objeto de estudio, se acota, se explica, se hacen encuestas y finalmente se obtienen resultados. Desde el paradigma empírico analítico se ve el proceso de comunicación de masas como un proceso de persuasión social. Se puede ver cómo los medios de comunicación intentan persuadir a la sociedad, se hace por medio de unos efectos. El segundo paradigma, el interpretativo, se ve la comunicación de masas como un fenómeno de construcción social. Es un tipo de búsqueda que intenta ver cómo los individuos de la sociedad se comunican a través de los medios de comunicación construyendo una realidad. Ejemplo: newsmaking. Trabajos de recepción (como se interpretan los contenidos de los medios de comunicación). El paradigma crítico entiende que el proceso de comunicación de masas es utilizado con la voluntad de dominar. Intentar reconocer cómo las élites sociales intentan transmitir mensajes para dominar, influir en la toma de decisiones, etc. Esquema:
Empírico-analítico: comunicación = persuasión
Interpretativista: comunicación = construcción social Crítico: comunicación = dominación Dentro del campo de las ciencias de la comunicación hay siete ámbitos de búsqueda: 1. Comunicación productiva: estudiar rutinas, perfil de los comunicadores. 2. Discursos: reconocer qué tipo de contenidos transmiten los medios y de qué forma. 3. Tecnologías: afecta a la producción, a los discursos. 4. Audiencias: cómo perfil y preferencias que reciben contenidos. 5. Recepción: para saber qué interpretan y el uso social. 6. Organización: estudios sobre estructuras de la comunicación social. 7. Influencia: estudio de los efectos de los medios de comunicación en las elecciones, religión, etc. http://www.mailxmail.com/curso-metodos-tecnicas-investigacion/paradigmas-investigacion-ciencias-sociales.
Referencias Bibliográficas
Freire, P. (2004). Revista Interuniversitaria de Formación y Profesorado año/vol. 18. Nº 002, Universidad de Zaragoza, España. Guba, E. (1990). Criteria for assesing the truthworthiness of naturalistic inquires. En E. Guba (Ed.). The paradigm dialog. Newbury: Sage Publications. Lincoln, Y. y Guba, E. (1985). Naturalistic Inquiry. Beverly Hills, EE.UU: Sage Masterman, M. (1975). La naturaleza de los paradigmas. En Lakatos, I. Y A. Musgrave (coords.), La crítica y el desarrollo del conocimiento. México: Grijalbo. Montero, M. (1993). Permanencia y cambio de paradigmas en la construcción del conocimiento científico. Interacción social. Munné, F. (1989) El individuo y la sociedad. Barcelona: PPU.