Aurora Isabel Hernández Castellanos
PADRES QUE ODIAN
Este libro habla de diferentes casos donde los padres agreden de diferentes formas a sus hijos a modo de introducción se habla como los dioses griegos imponían castigos, no tenían porque mostrarse bondadosos, no tenían porque ser justos ni siquiera tenían que tener un motivo para dicho castigo, podían comportarse de manera totalmente irracional, esto tiene que ver con la relación de los tipos de padres de los que habla en este libro con sus hijos, se supone que en la infancia nuestros padres son perfectos, por lo tanto nos sentimos protegidos. El proceso de separarnos d nuestros padres cuando existe una confrontación ya sea con los valores los gustos y la autoridad de progenitores. Los padres razonables son los que aceptan tales cambios de la familia y aceptan la independencia de los hijos, en cambio los otros padres son los que no pueden sobrellevar tales cosas, y se defienden reforzando la dependencia y el desvalimiento de su hijo. La confrontación con nuestros padres con ánimo de hacernos valer es poco menos que un tabú, el niño está a merced de los padres y como lo antiguos griegos nunca sabe cuando descargara el rayo sobre él. Uno como niño respeta y admira a sus padres ya que creemos que son sabios, que no se equivocan y que están con ellos no nos va a pasar nada; de igual forma les tenemos miedo y respeto ya que son más grandes que nosotros e imponen más cuando uno es vulnerable e inconsciente mente ante el peligro y la ignorancia. El no sabernos defender ante el peligro nos hace débiles e inofensivos, inofens ivos, eso a su vez hace que los padres se aprovechen de uno e impongan lo que les convenga así, nos inculcan ideas acerca de un respeto el cual se transforma en miedo ya que ante una amenaza por parte de ellos como el típico(si no te portas bien, te voy a pegar o castigar),eso genera una impotencia y miedo, que para los padres es respeto hace que uno como niño crezca con esa idea, que de grandes supuestamente se transformara transformara o disfrace en el famoso respeto hacia los adultos o nuestros mayores; sin embargo creo que no se necesita imponerte a un menor miedo para que se obtenga el respeto ya que el amor que uno les puede proporcionar, genera de igual forma una seguridad en el infante que a la larga mantengo estabilidad en cuanto a lo emocional y la fortaleza, que el amor amor pueda transformar. El iniciar con un control de sí mismo como son los esfínteres, puede ser un gran paso para iniciar con la independencia y comenzar a fortalecer la seguridad en uno, que de igual forma seria el dar nuestros primeros pasos sin ayuda de nuestros padres o de una andadera. De igual forma el saber que nuestros padres están están en los momentos de socorro socorro nos conlleva conlleva a desarrollar una dependencia a ellos y el razonar que siempre estarán con nosotros los momentos de obtener su atención para cubrir una necesidad, no sabemos la
Aurora Isabel Hernández Castellanos
frustración y el enojo que les generamos, hace que se desarrolle una fricción entre padre e hijos, de esta manera puede generar un rechazo de padre a hijos que se vuelva en cara de enojo, molestia, por parte de los padres hacia los hijos. La negación es una defensa muy poderosa que de alguna manera nos ayuda a sobrevivir a los peligros que nos enfrentamos, que nos asechan o a evadir las acciones malas que hicimos, hacemos, nos hacen o nos hicieron; pero así como nos ayuda a medio sobrevivir las cosas también nos lastiman y a la larga nos lleva o puede llevar a una tragedia o un derrumbe total con respeto a nuestras emociones y nuestra personalidad. Estas experiencias de los hijos que vienen de los padres quedan como una memoria de la infancia o de la adolescencia que en la edad adulta puede generar dificultades a la persona. Las familias en las que se dan las situaciones más graves o dramáticas son socialmente un reflejo de algo que ocurre a una escala menor en la mayoría de las familias. Las circunstancias que pueden considerarse graves son aquellas en las que los padres abusan físicamente de los hijos, a través de la violencia o sexualmente, o aquellas en las que la conducta de los padres da lugar a un entorno desorganizado en el que es difícil el crecimiento de los hijos, como pueden ser los casos de alcoholismo o drogadicción o las carencias graves a nivel socioeconómico. Los padres son una parte muy importante de nuestras vidas ya que a pesar de todos los contras que tenga son un soporte para nosotros, nos orientan aunque no todos y nos protegen, Forman parte de nuestras vidas. La confrontación con nuestros padres con ánimo de hacernos valer es poco menos que un tabú, el niño está a merced de los padres y como lo antiguos griegos nunca sabe cuando descargara el rayo sobre él. Se plantea como un niño puede llegar a justificar el maltrato de su padre, como creen que los padres son perfectos, se ponen en la posición de que los malos son ellos, hay errores que cometen los hijos, los cuales "estos" padres jamás olvidarán se los echarán en cara siempre, estos hijos suele construir murallas defensivas, con ladrillos psicológicos, el más común de estos la negación. En este libro se hace referencia a las situaciones más extremas, pero sin olvidar la relación que estas vivencias tienen con lo que se considera la normalidad. Se estudian las situaciones de violencia física, psíquica y sexual, las situaciones provocadas por el alcoholismo o las drogas y por la degradación de las condiciones de vida.
