Colección Clásicos del Pensamiento Direcor Anonio Tryol y Serra
J B Erhar, K Freiherr von Moser, Ch Garve, J B Geich, J G Hamann, J G Herder, Kat, G E. Lessing, M Mendelssohn, A Ri Riem em,, Schill Schiller er,, Ch M. Wielan, J Zllner
¿Qué es Ilustración? Esu p GIO MESR uccn GIO MESRE y JOSE RMGOS
CUARTA EDION
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Disc d ubiera: Joaqín Ggo
1• diión, 1988 4. diión 999 Reimpresin 2002
Rsvdos ods los drehos El ontnido de est ob r esá ptgido p l ey qe stb pns de pisin /o mls demá de las ospondientes indemniiones po dos perjiios pra qiene epdujeren pgiren ditibeen o omuniren públimne n tdo o n pre n o ite ri artsti o ienti o s nsmión intepetión o euión stia fid en ualqie tipo de sopote o omni ada a través d lquie medio sin l peptiv toizin
stdio prelimin � A;\' M 19 © ITOL CNS (GRUPNY S) 2002 n gnio d n 15 - 2027 Mdrid
A Feando Quesada, desde el dieso poltco a la cocorda de la amstad.
IMANUEL KANT (1724-1804)
RESPUESTA A LA EGUNTA: ¿QUE ES LA lLUSRACION?
La Ilustración es la salida del hombe de su autou!pa ble inra de edad 1• La mnoría de edad signfca la n apadad de sevs de s popo entndmno sn a gua de oo. Uno ismo es ulable de esa mnoía d edad ando la asa de ela no sde en la aena d enendimeno, sno en la ala de deisón y valo paa sevse po sí msmo d él sn la gía d oo Sapere aude ¡en valo d sve de popo nndmeno! he aqí el ema d la lsaón La pza y la obada son las casas de q na gan pae de los hombes pmaneza gsosamn en mi oía de edad a lo ago de la da, a psar d e hae ya empo a naralea los lbeó d dcón ajena (na El érmino Unmüdigket s peta a vaias traduccione n cat ln, po od elas hacn rfncia a una cita «nmadrz» de quen prdica tal rmino. Lo mo raducio po mnoía de edad» con ando a egún nutra opnin, toda la carga mánica qu tin l ino amn Sin mbago n oto contxto mo perido l palara dpndencia» o «no-manpacón» Po l cnaio e mio Müdigk1, qe trducmos po mayora de edad» po sguir on a metáo kanana podra taduci n todos o cao por eman
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meterse, bajo juramento, entre sí a un cieto símbolo in mutable para lleva a cabo una interminable y suprema tutela sobre cada uno de sus miembros y, a través de es tos, sobre el pueblo, eteizándola de este modo? Airmo que esto es absolutamente imposible. Un contrato seme jante, que excluiría para siempe toda ulterior Ilustración del género humano, es sin más, nulo y sin efecto, aun que fuea confirmado po el poder supemo, el congreso y los más solemnes tatados de paz. Una época no puede obligarse ni juramentarse para colocar a la siguiente en una situación tal que le sea imposible ampliar sus conoci mientos (sobre todo los muy urgentes), depurarlos de erro res y, en geneal avanzar en la Ilustación Sería un cri men contra la naturaleza humana, cuyo destino primor dial consiste, jusamente, en ese progresar Por tanto, la posteridad está plenamente justiicada paa rechazar aque llos acuerdos, aceptados de forma incompetente y ulta jante La piedra de toque de todo lo que puede decidirse como ley para un pueblo eside en la siguiente pregunta: ¿podría un pueblo imponerse a s mismo semeante ley? Esto sería posible si tuviese la espeana de alcanzar, en corto y determinado iempo, una ley mejor paa introdu cir un nuevo orden que, al mismo tiempo, dejara libre a todo ciudadano, especialmente a los sacerdotes, paa, en cuanto doctos, acer obsevaciones públicamente, es decir, por escrito, aceca de las deiciencias de dicho or den Mientras tanto, el orden establecido tiene que per durar, hasta que la comprensión de la cualidad de estos asuntos se hubiese extendio y conirmado públicamen te de modo que mediante un acuerdo logrdo por votos aunque no de todos) se pudiese elevar al rono una po puesta paa proteger aquellas comunidades que se han uni do para una reorma religiosa, conome a los concepos propios de una compensión más ilusrada sin impedi que los que quieran permanece fieles a la antigua lo ha an así ero es absolutamene ilícito ponerse de acuerdo sobre una constiución religiosa inconmovible que públi camente no debería ser puesta en duda por nadie ni tan siquiera por el plao de duración de una vida humana
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ya que con ello se destruiría un período en la macha de la humanidad hacia su mejoramiento y, con ello lo haría estéri y nocivo. En lo que concierne a su popia pesona, un hombre puede eludi la Ilustración, pero sólo por un cieto iempo en aquellas materias que está obligado a sa ber, pues renunciar a ella, aunque sea en pro de su perso na, y con mayo azón todavía para la posteioridad, sig nifica viola y pisotear los sagados derechos de la huma nidad Peo, si a un pueblo no le está permitido decidir por y para sí mismo, menos aún lo podrá hace un mo narca en nombe de aqué pues su autoidad legisladora descansa, precisamente, en que reúne la voluntad de todo el pueblo en la suya propia. Si no preende otra cosa que no sea que toda rea o presuna mejoa sea compatble con el orden ciudadano, no podá menos que permitir a sus súbditos que actúen po sí mismos en lo que consideran necesario para la salvación de sus almas. Esto no le con ciene al monaca; sí, en cambio el evita que unos y otos se entorpecan violentamene en el trabajo para su po moción y destino según todas sus capacidades. El monar ca agavia su popia majestad si se mecla en estas cosas, en tanto que somee a su inspección gubenamental os escritos con que los súbdios intentan poner en claro sus opiniones a no ser que lo hiciea convencido de que su opinión es supeior, en cuyo caso se epone al reproche Caesar no est supra Grammaticos, o bien que rebaje su poder supremo hasta el puno de que ampare dento de su Estado el despoismo espiritual de algunos tiranos con ta el reso de sus súbditos Si nos preguntamos si vivimos aora en una época lstrada a respuesta es no, pero sí en una época de Ilstra ón. Todavía falta mucho ara que los hombes, tal co mo están las cosas, consideados en su conjunto, puedan ser capaces o esén en situación de servirse bien y con se uridad de su propio entendmieno sin la gua de otro en maea de religión. Sin embargo, es ahora cuando se les ha abierto el espacio para rabajar libremene en este em peño, y percibimos inequívocas señales de que disminu yen coninuamene los obstáculos para una usración ge-
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nera, o paa la salida de la autoculpable minoía de edad Desde este puno de vista nuesta época es e tempo de la Iusracón o e siglo de Federico Un píncpe que no encuenra ndigno de sí mismo de claa que considea como un deber no pescibi nada a os hombes en maeria d eigión sino que les deja en llo pena libead y que incluso echaza el peencioso nombe de tolerancia, es un píncip lustrado y meec que el mundo y la posteidad lo nsalcen con agadeci mino. Po o menos fu el pimeo qu dsde el gobie no sacó al géneo humano de la minoía de edad dejan do a cada uno n lbtad d sevise d su popia azón en odas as cuesions de concncia moal Bao l go bieo dl príncipe dignísimos cléigos -sin pjuicio d sus dbees minisials pueden somee al examen de mundo en su cadad de doctos ibe y públicamene aquellos uicios y opiniones que en citos puntos s ds vían del símbolo acepado; con mucha mayo aón eso lo pueden eva a cabo los q no están limiados po al gún db poesonal Es spitu de libad se expan de también exeomen incluso allí dond debe lucha cona los obsácuos exteos d un gobieo que equi voca su misión ste ejmplo nos aclaa cómo en égi men de libad no hay qu m lo más mínimo po la tanquildad pública y la unidad de sado Los hombes saen gadualmne del esado de sicidad por su p pio abajo simp que no s inen mannelos adr de y de modo aiicial n sa condición He siuado el puno cnal d la lustación a sa la salida del homb de su cupabe minoa de edad pnemen n cusiones eligiosas poqu en o qu atañe a las as y las ciencias nusos domnados no ienen ningún ineés en ejc d utoes sob sus súb dios Además a mnoía d dad en cusions eligio sas s ne odas la ms pjudical y humillan e l modo de pensa d un j de sado qu avoce esa 4 •
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� Cf. infra, artíuo de A. Riem
25 lbetad va odavía más lejos y compende que ncluso en _ l o que se e: ie� a su legislación no es peligoso pe m1 que sus subdtos hagan uso públco de su popia a ón Y expongan públcamene al mundo sus pensamien tos sobe una mjo concepción de aquéla aunque con tenga una anca cítca d la exisente También en sto disponemos d un bllante ejemplo pus ningún mona ca se anicipó al qu nosoos honamos Peo só? quien o ilustado no me a las sombras y tempo dspone de un numeoso y discipinado a! m mo eJec 0 que gaani a los ciudadanos una ranqui dad pubca puede dec lo que ningún stado libe s at ve a eci ¡Razonad odo lo que querás y obre fo que quras pero obedeced! Se muesta aquí un exaño e ins pado cuso d las cosas humanas pues sucede qu s lo onsdemos con dnmieno y en geneal enonces cs odo n él es paadóico n mayo grado de libetad cudadana paec _ se vnajosa paa la libad dl espíi u dl publo y s embago le ija baas inanquea bls n cambo un grdo mno de lbtad le pocua l ámbito ncsaio paa dsaollas con aeglo a to das su acutads na vz qu la nauaza bajo esa dua casca ha desaollado la smilla qu cuida con x tma teu s deci a nclinación y vocación al ib pensa; ste hcho pcu gdualmne sob l sni dl publo (con lo cual és se va hacindo cada ve más capa d la lberad de acua) inalmente hasa llega a in vadi a los pincpios del gobeo que encunta ya posble aa al homb que es algo más que una máqui a conom a su dignidad QU ES IUSTACIO
¿QUE ES ILUTRACON?
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5 Alsión a J O de Lameie y eso L'homm-mchn 1748 6 Al fia de s acl K coloca esta oa: «E el Semn�r d Büshng d 3 de epiembe eo ho [30 de mismo mes) el aucio de a r1sh Mnlshrj oespodee a ese me, qe bia a espesa de seño Medeso a a msma es Todava o ha egado a mis mao; de oo modo hbiee easado mi acal e sa ue aha sóo ede se sdeada como ua pea de as ué puo el auedo de las ideas se debe a a aualdad»
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¿QUE ES ILUSTRACON?
DEL SEUS COMMUNIS, A LA CAPACIDAD DE «JUCIO» Por sensus communis tiene que enenderse la idea de un senido que es común a todos es decir de un «juicio (Beurte1/ung) que en su reflexión toma en cuenta mer ced al pensamiento a priori) el modo de represenación de los ,demás para considerar (aener) su uicio (Ürtei a la razon toal humana y de este modo evitar a iusión qu ;n _1endo su ori � en en condicions privadas subei _ vas fclmente podan ser tomadas por objivas ten dría una influencia perudicial n el uicio. Esto se raza de «coear» (comparar) e pr ?pio juicio con otros uicios n tano real s como más bn meramente posibles po nendonos as en el lugar d odos los otros haciendo só o abstracción de las limitaciones qu dependen de forma casual de nuesro propio uicio el cua a su vez s reai za seprando o más posibe o qu en el stado de repr senacón es materia es decir sensación y aendindo úni camen t a as carac erísticas formals de a propia repr senacon o del propo estado de represenación Quizá pa rezca ser esa operación de a reflexión demasiado arifi cial como para arbuirla a a facultad que amamos sentdo común pero sólo aparece así cuando se la expre sa en f rmuas abstracas sin embargo cuando se busca un _uc0 que deba servir de regla universa nada es en sí más naural que hacer absracción de encan'to y de mo ción. Las máximas sguientes del enndimino común hu mano pueden .. ) servir para aclarar sus principios. So las siguientes: . ª Pensar por sí mismo. . Pensar n l lugar de cada oro. 3 Pensar siempr d acuerdo consi go mismo. La primera se reie a la máxima del modo de pensar libre de prejuiios; la segunda es a máxima de � ensivo la ercer del osecuene. a prim s a má xma de una raón nunca pasva. Por tano la inclina ción a o contrario a la heteronomía de a aón se la ma prejuiio y el mayor d todos consiste en reresen ars la nauraleza como no sometida a las rgas qu
7 entendimiento por su propa ley esencial le pone a a ba se o sea la superstiión a iberación de la superstición se llama lusración poque aunque esa denominación se da también a la liberación de os preuicios en general la supersción puede más que os oros (in sensu eminenti) ser lamada preuicio puesto que la ceguera a a que conduce la superstición y que impone incluso como obli gada da a conocer la necesidad de ser conducdo po otros y por tanto más qu nada el estado de una razón pasi va. Po lo que se refire a la segunda máxima del modo de pensar estamos bien acosumbados a amar lima do (de coras miras o contrario d amplias miras) a aquél cuyos alenos no se apican a ningún uso considerabe (so bre todo intensivo) Pero aquí no se raa de la acultad del conocimiento sino del modo de pensar para hacer de•éste un uso conforme a in aunque sean muy pequ ños el grado y la extnsión dond alcanc el doe natural de hombr muesra sn mbargo un hombre amplio en e modo de pnsa simpre y cuando pueda apartarse d las condiciones privadas subeivas de uicio denro de las cuaes muchos otros están como encerrados y rele xona sobre su propio uicio dsd un punto de vista uniersal que sólo pued sr dtrminado poniéndos en l puno de vista de los demás). La ercra máxima la que s refier al modo de pensar consecuente s la más difícil de alcanzar sóo pued alcanzars a través de la unión d las dos prmras y después d una rcunt aplica ción de as ismas convrtido ya en desra. Pude de cirse la primr de sas máximas s la máxima d nten¿QUE ES /USTRACON?
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1 Se e rápidamente que fuslmción e cosa fcil n the, ero n ypo e arga y dfíci e cumpi; porue no pemaecer paivo co u razó, io iempre er egiado de mimo, e ciertamene coa mu ci paa el hombre ue ólo uiee adecae a u fie eencae y o deea aer lo e e por ecima e u eenmie0. Ma como la endencia hacia eto úlimo apena puede mpedire, y como no f altar oro ue pometan con ga egdad el poder aiacer el deeo de aer tiee e er my diícil coear o etaecer en el modo de pea (re oo, e el plico) o meramente negato e cotU propiamete a Iuació
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dimiento; la segunda, la de juico a tercea, a d a aón. ACERCA DE LA ILUSTRACON Y E LA REVOLUCON Peo, ¿cómo e posibl una hitoia a prioi? Repus ta: si e adivino hace y dispone lo que anunca. Dbe xiti n e géno humano aguna xpeencia qu, como hcho indqu una cea aptitud (Beschfnhel) y una facutad de ee géneo que constuiía a cau sa d su pogo hacia o mejo y (puo qu deb e acto d un s dotado de ibead) auto d mimo Est hecho no conit en impotantes acciones u om ione humanas, a tav d la cuaes lo gand nt o hombes se convt en pqueño o o pquño e vueve gand ( ) Se ta sóo del modo d pensa de un e pctado que, fnte a ugo d a gandes voucions, manifita, a pesa d pigo de o seios inconvnin es qu podían ceale u paciadad, sus pfeenca uni sas y dsnada po lo acto d un paido con ta os d o oto La voución de un pubo no de spitu, qu he mo vto eaias n nutos das, podá tn xio o facasa pud, quiá, eta tan pa d mseia y c dads, qu un hombe binpensante que pudiea espa ponea en macha po gunda v no s dcidia a un expeimnto d as cotos: una volución ta, digo no obstant, ncunta n os ánimos d todo o epcta do -qu no esán o mimo invoucado n ugo una ta patcipación n e deeo qu ayana con e entusiamo incuso i u xteioización uta pgo a a, n uma, que no pued t ota caua qu una dipoición moa de géno humano Sotengo qu puedo pdc a gno humano incu so sin ánimo poftico, que, d acudo con lo ínoma y gno pecuos (nah den Apekten un Vzeihen) d usta poca, acanaá su fin, y a pati de ah u
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pogeo hacia o mejo jamá � tocdá po _compto Un hecho semejane en a toa de a humandad ya no se ovida, pus e ha descubieto en a _ natuaez hmana una dipoición y capacidad paa e ben que gun po ítico hubea podido dduci, a fuea d utia, d a macha y a ibad unida en a especi humana, siguien do os pincipios ineno dl dech podían inicaa, peo aun así d una manea indeeada y congent en cuanto a timpo eo eta pofecía fioófica no pda su fuea, aun cuando e fin a que iende ee acontciminto no fuea acanado a facaa Revoución, o a efoma de a Conitucón d un pubo huba facasado fnamente o bien s depué de un cto timpo tdo vovie a camino ilado pecedne ta y como pdcn ahoa c ta poíticas eto es aí poqu et a ontcimin o demasado impotant está dmasiado igado a o nt ee de a humandad y tin una inuencia demasiado extendida ob oda la pats d mundo como paa que no tnga que se ecodado de nuvo 1 pubo con ocaión popica o n os momento de cs de nuevo inentos de mimo ipo pus sin duda, en un aunto e ana impoancia paa a humanidad, e muy necesao que la constiución póxma acanc finamnte y n un momnto dado ea oide qu a nsñana d xpn cias múltipes no daía de gava n todo o spitus
