LOS UNOS Y LOS OTROS -
Aportes sobre las personas y las partes en los conflictos- 1 - Maria Elena Caram -
Dos hermanas discuten en un momento de la mediación cómo organizar el cuidad cuidado o de sus padres padres ancia ancianos nos.. Los recurs recursos os acotad acotados, os, las crecie creciente ntes s responsabilidades sobre un fondo de viejas y profundas diferencias fraternales les vuelve agobiante la tarea de atenderlos. En una reunión previa, hacía tiem tiempo po,, habí habían an conv conven enid ido o cont contra rata tarr una una seño señora ra,, Eric Erica, a, para para cuida uidarr al matrim matrimoni onio. o. osten ostenida ida por ambas hermana hermanas, s, !stas le dan instru instrucci ccione ones s dive diverg rgen ente tes. s. La medi mediad ador ora a la conv convoc oca a para para ayud ayudar ar a las las part partes es en la organización de las tareas de cuidado, intentando "ue puedan compatibilizar sus criterios. Despu!s de trabajar con este tema surge esta conversación #ermana $% Es tan difícil manejar a pap&. 'asi ha perdido la razón, ya ni se cambia de ropa, fíjense "ue duerme con los zapatos puestos, y no hay "uien se los haga sacar( #ermana )% Es lo "ue yo digo, hay "ue cuidarlos m&s por"ue cada vez est&n peor* +ediadora% Erica, cómo ves todo esto Erica% Lo -nico "ue yo "uisiera decir es "ue los "ue m&s me conmueve es el etra etraor ordi dina nario rio amor amor entr entre e esto estos s dos dos viej viejito itos. s. El duer duerme me con con los los zapat apatos os puestos, por"ue dice "ue si le pasa algo a su esposa por la noche, !l podr& salir a pedir ayuda sin perder tiempo, y "uiere estar preparado para eso*
I-Las tres ! Todos conocemos el triángulo propuesto por Lederach 2que resume con clara precis precisión ión los tres tres elemen elementos tos básico básicos s de los conflict conflictos: os: !ersonas-!roceso!roblema Sabemos también que las excesivas simplificaciones pueden hacernos perder matices que detienen enriquecen la mirada! a la ve" que la pueblan de nuevas preguntas! abriendo apasionantes senderos de análisis# $%n as&! el valor pr&ctico de esta esta s&nt s&ntes esis is está está fuer fuera a de toda toda disc discus usió ión! n! sobretodo al ponerla al alcance de quien opera en los conflictos de manera directa! directa! a menudo ba'o ba'o el apremio de una realidad realidad que lo obliga obliga a construir rápidos diagramas acerca de las situaciones que tiene entre manos# (e los tres vértices me concentraré en estas páginas en el primero! el referido a las !ersonas# !ersonas # )llo no significa un 'uicio de valor respecto de la importancia 1
Este trabajo tiene sólo pretende colaborar con sentido didáctico en la formación de los operadores de conflicto. Con ello, me disculpo por los desarrollos que dejo por ahora de lado. Todos Todos los casos que se mencionan son de mi experiencia directa , preservando sus nombres. Mi formación como mediadora me lleva lleva frecu frecuent entem ement entee a ejempl ejemplifi ificar car con casos casos de media mediació ción n trasla trasladar dar los concep conceptos tos relati relativos vos a conflictos en !eneral a casos de mediación. mediación. "odr#an tambi$n transferirse transferirse al!unas consideraciones a otros m$todos de abordaje % &ederach, "aul Chupp Marcos. Conflicto y Violencia- Guía para Facilitadores. Ediciones Clara 'emilla( 'emilla( )o!ota 1**+ p. *%.Tom *%.Tomando ando la su!erenc su!erencia ia de "aul ehr ehr -Conflict -Conflict e!ulation e!ulation// su!iere su!iere la construcción de un mapa del conflicto. 'abemos que/el mapa no es el territorio/, pero s# que su reflejo or!ani0ado puede sernos mu til, si no olvidamos sus limitaciones.
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de un elemento elemento sobre otro! ni tampoco tampoco soslaar soslaar la estrecha estrecha conexión conexión entre ello ellos# s# Lo prim primer ero! o! porq porque ue cada cada uno uno tien tiene e una una rele releva vanc ncia ia deci decisi siva va en la caracteri"ación del conflicto* lo segundo! por la fuerte gravitación de uno sobre otro# )stá claro que dif&cilmente se podr&a afirmar que el !roblema el !roblema de de un conflicto son las percepciones- sobre hechos o cosas- o las relaciones en 'uego en el mismo! mismo! si no se piensa piensa en las !erson !ersonas as construct constructoras oras o sostenedo sostenedoras ras de esas relaciones o percepciones# + mal se podr&a suponer que la secuencia de comunicac comunicación ión las acciones interdepend interdependiente ientes s que constituen constituen el !roceso dinámico del conflicto no son llevadas a cabo por esos mismos su'etos #que encontramo encontramos! s! en este diagrama! diagrama! en otro vértice vértice del famoso triángulo# triángulo# +! +! por cierto cierto!! cómo no visu visuali ali"ar "ar las modif modifica icacio cione nes s del proble problema ma a lo largo largo del proceso# ,recisamente! si ro"amos el tema del dinamismo dinamismo del conflict conflicto! o! es decir decir!! si lo compre comprende ndemos mos como como un proces proceso! o! podemo podemos s observ observar ar los cambio cambios s de los elemen elementos tos ubicad ubicados os en los distin distintos tos vértic vértices! es! a sea intern intername amente nte!! como como operando entre si# Sólo Sólo a mane manera ra de e'em e'empl plo! o! cuan cuando do al comu comuni nica cars rse e dos dos pers person onas as en un conflic conflicto to mencio mencionan nan!! afecta afectan n o compro compromete meten n a otras otras las inclu incluen en en el mismo! no solo están modificando las personas las personas participantes! participantes! sino que también están ampliando el el problema problema ha más cosas en 'uego.! produciendo una escalada en la evolución de la situación proceso/#$ proceso/#$ su ve"! es posible incluir una nueva persona nueva persona!! a%n en un rol de tercero neutral! por e'emplo! un mediador! ello implicará implicará seguramen seguramente te una modificación modificación del curso curso de proceso! proceso! nuevos nuevos pla"os! pla"os! modalida modalidades des convers conversacion aciones! es! a más más de una probable probable redefin redefinición ición del problema del problema!! etc# + muchas variantes más# (e modo que que el aporte anal&tico anal&tico del del tan mencionado mencionado triángu triángulo lo es más %til realist realista a a%n si! además además de la intercone interconeión ión de sus elementos! prevemos la rique"a de su permanente o posible mutación! mutación! tanto dentro de cada elemento en s& mismo! como en su gravitación gravitación sobre los otros del sistema# )llo )llo no es más que que una una apli aplica caci ción ón de la idea idea más más gene genera rall por por la que visual visuali"a i"amos mos los confli conflicto ctos s como como sistemas! sistemas! donde cada vértice guarda una conexi conexión ón con los otros otros donde donde nada nada de lo que suced sucede e en uno de ellos ellos es indiferente respecto respecto de los demás# demás# /e parece que este sentido integrador ensancha la mirada del operador de conflic conflictos tos!! donde donde frecuent frecuenteme emente nte se describe describe a éstos éstos - con exage exagerad rada a simplificación- como una una 0pelea entre 1 e + por tal cosa "# II-"acia el #$rtice Personas : los actores $l anali" anali"ar ar un confli conflicto cto determ determina inado! do! frecue frecuente ntemen mente te nos pregun preguntam tamos os "ui!nes son las personas afectadas# afectadas # 3 para usar las palabras de Lederach 0quienes están implicados en el conflicto# 4 )sto )sto sign signifi ifica ca en alg% alg%n n modo modo adop adopta tarr una una mira mirada da está estátic tica a del del conf confli lict cto# o# 8 56uienes están en la 0foto del conflicto ho7 2
3bid., p.*%. "resupon!o el conocimiento de la visión estática dinámica sobre sobre el mundo, mundo, o el enfoque enfoque sincrónico diacrónio incorporado por 5erdinand 6e 'aussure, todo ello, de permanente vi!encia en nuestro análisis. 7na deliciosa metáfora acerca de la mirada estática la dinámica la provee la pel#cula -&a 5amilia/, que los amantes del cine italiano( particularmente particularmente de 8ittorio 8ittorio 9assman( 9assman( sin duda recordarán. El director, director, Ettore Escola, comien0a el film film con una escena escena donde la familia familia en pleno posa para una foto foto tradicional 4
%
,odemos llamar actores a las personas que advertimos comprometidas en una situación de conflicto# 9rente a estos actores! se nos impone una aclaración para delimitar el universo de este pequeo traba'o# (e'aremos de lado aquellos conflictos internos de estos actores0 es decir 0los que pueden darse entre las instancias del aparato ps&quico intraps&quico.; o 0conflictos consigo mismo <- para centrarnos en los llamados interpersonales- entre dos o más individuos o plasmados en la interacción de dos o más su'etos o 0conflictos con otros- !o los intragrupales0 dentro de un grupo ! organi"ación! institución o nación- * o intergrupales-entre grupos de personas o individuos ! organi"aciones ! instituciones! naciones # = $l igual que soslaar los otros vértices! esta decisión nos produce la sensación de abandonar rumbos interesant&simos# (e'ar de lado los conflictos ps&quicos ! suena a una arbitraria mutilación del campo de observación que no refle'a la realidad# Sin embargo! excede nuestro ámbito de traba'o! de'amos ese análisis a otras disciplinas! sin olvidar la decisiva influencia de éstos en las otras categori"aciones! IIa-Actores in%i#i%&ales y pl&rales o colecti#os /u a primera vista! comprendemos en la expresión 0actores! tanto a los individuos como a los grupos de individuos en general! cualquiera sea su n%mero! su forma de organi"ación o el v&nculo que los une entidades! sociedades! pa&ses! etc.# También hablamos de personas! tanto físicas como colectivas>! o actores individuales y colectivos o plurales 1 ?gualmente! como lo afirma )ntelman@A! cualquiera sea la denominación que utilicemos o la clasificación que hagamos! en todas ellas siempre encontraremos individuos 2o seres humanos/ como su'etos del conflicto## Bale la pena esta afirmación! porque en la medida en que los grupos aparecen más organi"ados! desde formas diversas como las sociedades hasta los estados u asociaciones de estados! más parece distanciarse el elemento personal para dar lugar a la organi"ación# Se dice entonces 0el estado o la sociedad hace o no tal o cual cosa! aun cuando siempre habrá seres humanos por detrás de toda decisión e'ecución#@@ del !rupo familiar con todos sus miembros: la escena si!uiente muestra el corredor de la anti!ua casa, al que conver!en las habitaciones, donde comien0a a enla0arse la secuencia de acontecimientos familiares de las sucesivas !eneraciones hasta el final de esta inolvidable pel#cula. ; istórica. )s. ans Teoría General del erec!o y el "stado. Textos 7niversitarios , M$xico 1*@*, p.##$. *
Entelman Dp. Cit., p.++ ibid p ++ 11 "uede verse en elsen Dp. Cit. ".1%1F el desarrollo relativo a la atribución directa de las acciones a los conjuntos normativos que en su teor#a constituen las personas jur#dicas, sosteniendo que las frases relativas a la atribución de actos a $stas son usos o construcciones del len!uaje pero que en ri!or, solo ha acciones humanas a que las normas no actan. 'oslao tambi$n el análisis que tiene que ver con la 1?
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IIb-Actores principales y sec&n%arios 3tra e'e de clasificación! siempre arbitrario naturalmente! mucho más difuso aun! nos permite distinguir entre actores primarios' principales o prota()nicos ! por un lado! sec&n%arios! por otro# (os aclaraciones: a. Co se intenta formular un 'uicio de valor sobre los actores al categori"arlos en uno u otro con'unto* b. Las l&neas divisorias entre estas clases no son n&tidas @2* la realidad que se intenta ordenar tampoco lo es# Tal ve" frente a las situaciones concretas logremos un esclarecimiento me'or# Llamamos protagonistas a aquellos actores -individuos o grupos-cuas acciones resultan determinantes para el nacimiento desarrollo del conflicto# Domo hemos dicho en el lengua'e de Er son quienes expresan la posición! quienes experimentan intereses o necesidades que los llevan a presentar su posición! divergente con la del otro# )n ellos se instalan sus valores! sus opiniones! sus puntos de vistas que aparentemente no encuentran satisfacción simultánea con los del otro# III-E*plorar el #$rtice Ena primera aproximación de nuestra atención hacia nuestro vértice en un conflicto concreto nos lleva a la pregunta:5entre @4quiénes existe este conflicto7 )l género actores se desdobla! entonces! hacia sus especies: principales+o prota()nicos. sec&n%arios ! por un lado* e in%i#i%&ales colecti#os por otra! Cuestra mirada buscará primeramente! casi con seguridad! dos protagonistas! all& advertiremos si ellos son individuos 2individuales/o grupos2colectivos o plurales/# + digo dos! porque frecuentemente la idea es que los su'etos comprometidos forman una d&ada# $s& lo considera ,ruitt! por entender que el desarrollo de sus observaciones sobre el conflicto están referidas a una d&ada! que es la forma que el conflicto adopta! para él! en %ltima instancia# (e hecho refiere! en su obra! sus afirmaciones a 0Ena ,arte la 03tra@8 + también )ntelman conclue esta misma agrupación cuando esbo"a su idea del 0magnetismo conflictual! que básicamente consiste en advertir que aun cuando encontremos varios actores en una disputa! a menudo! terminan atribución de responsabilidad a los sujetos o a las sociedades que inte!ran por ser un aspecto de #ndole más jur#dica. 1% Go solo porque los l#mites clasificatorios no lo son, sino porque las fronteras que van desde el si!nificado de -rol prota!ónico/ a - rol secundario/ representan un continuo, ejemplo t#pico de va!uedad del len!uaje. >ospers Hohn %ntroducción al Análisis Filosófico& Macchi, )uenos
ubin Heffre Dp.Cit p. @
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agrupándose en dos 0bandos ba'o una suerte de atracción magnética o bipolar @; IIIa-Actores !rota()nicos in%i#i%&ales 56uiénes son estos actores individuales7 $quellas personas que sostienen posiciones encontradas ! para decirlo en lengua'e de 9ischer Er ! es decir! donde ha una que reclama algo que la otra no está dispuesta a darle@
Entelman emo Dp. Cit. p. A@ p. 12@ 5ischer o!er 7r illiam )i de acuerdo . Gorma, )uenos
;
)l pasa'e de esa mera uxtaposición o 0simple pluralidad a un actor colectivo está dado por alg%n nivel de organi"ación entre ellos! en este sentido debemos de'ar abierto cuál es ese grado la forma que adopte ! para poder incluir todas las modalidades de asociación! sociedades o entidades! desde sus estructuras más simples a las más elaboradas# Sin duda es probable que ese grado de organi"ación esté apoado en normas 'ur&dicas! generales la le. o particulares reglamentos o estatutos.! escritas o no! que hagan que aquellas cosas que diga o haga alguien que llamaremos representante o representantes sean consideradas como algo "ue hizo o dijo la sociedad, no ese individuo en particular# La presencia -a nuestros espec&ficos efectos- de un actor plural o colectivo en nuestro conflicto puede implicar : @. ,osibilidad de que este actor- por e'emplo el consorcio! la sociedad- no sea monolitico@>! es decir que haa más de una posición o interés en 'uego# 2. ,osibilidad de que en alg%n momento se requiera que su representación tenga alg%n grado de legitimidad para actuar! conferida por el grupo: un poder! un acta! un estatuto! etc# 4. ,osibilidad! en función de la multiplicidad de individuos que conforman el actor colectivo! de que se den a. situaciones de fragmentación , es decir! la existencia de disensos dentro del mismo grupo! b. + se agreguen situaciones de identidad entre los miembros de un grupo con los del otro# Las especiales relaciones que pueden ponerse en escena a partir de estas tensiones internas de los grupos configuran traectorias diversas de los conflictos no aparecen necesaria %nicamente ligadas a dos actores plurales! sino también a un conflicto entre un actor individual un actor plural# ,ensemos! a manera de e'emplo! este caso: 3n propietario reclama al 'onsorcio de copropietarios del edificio donde vive. La pretensión del primero provoca una discusión interna en el 'onsejo de 4dministración entre los "ue desean mantener el edifico con su aspecto tradicional, teniendo en cuenta "ue ha sido premiado por particulares características ar"uitectónicas. on los llamados 5tradicionales, cl&sicos, conservadores, de la 5primera hora6 , retrógrados, seg-n "uien los califi"ue0 , mientras "ue otros desean renovar algunos aspectos del mismo 0llamados 5reformistas, progresistas, innovadores, reci!n llegados, advenedizos, improvisados6, nuevamente seg-n "uien los mencione $1 También pueden aparecer estas comple'idades si de un lado ha un actor individual del otro varios actores individuales! surgen la"os entre el primero alguno de los segundos ,or e'emplo! supongamos un caso en que se cuestione una intervención médica que se entiende no ha sido lo suficientemente exitosa! para decirlo con alguna ternura# ,or un lado está el paciente supuestamente damnificado! por el otro el médico ciru'ano que intervino por e'emplo en la operación! el anestesista! el cl&nico que derivó! el 1A
aiffa >oIard "l arte y la ciencia de la ne*ociación .5ondo de Cultura Económica, M$xico, 1**1 p.%? &os que trabajamos con conflictos más aun los comparten al cotidianeidad en los consocios saben que esos contextos son propicios para que las personas desarrollen , a veces exa!eradamente, sus vocaciones militantes , a veces no canali0adas en otros aspectos de la vida comunitaria. 1*
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director de la cl&nica! la obra social o el sistema de medicina prepaga! las aseguradoras de cada uno de ellos! etc# Supongamos una divergencia interna por las ra"ones que sean entre estos profesionales! que acercan a alguno de ellos al paciente# )sta afinidad generar&a una suerte de alian"a!2A )stos son meros e'emplos de movimientos internos cuando los actores son m%ltiples! mu interesantes de percibir anali"ar# III-b1-La relaci)n representante- representa%o La situación de que los grupos colectivos apare"can representados por individuos que son quienes deben expresar la voluntad de la organi"ación! lleva a considerar sus relaciones internas# Duantas más personas! más intereses en 'uego! e incorporar un interés más! no siempre coincidente! es una circunstancia a tener en cuenta por el operador: hace más comple'o el conflicto! no necesariamente más dif&cil de resolver# )n las relaciones de representación! siempre la persona que negocia estará sujeta a instrucciones que conforman su mandato a las que debe ceirse! para que su vo" sea la de su representado# ,or ende! su margen de actuación está restringido en maor o menor medida por aquéllas# )sto motiva una diferencia importante en el movimiento del conflicto! porque probablemente lo vuelva menos flexible# ,or e'emplo! es frecuente que al cabo de ciertos intercambios! los actores! uno u otro o ambos! deban requerir instrucciones conversar con sus mandantes! lo que da una dinámica mu distinta si los participantes toman sus decisiones con más autonom&a con el contacto directo con el negociador# La actitud negociadora de quien está presente en el diálogo! puede diferir mucho de quien opina 0 a distancia 0 sobre el curso de la negociación o eval%a la misma# )s fácil decir desde afuera que 0no! que lo discuta más etc! que estar envuelto en las vicisitudes propias de la conversación frente a frente# )l compromiso personal hace la diferencia# ,ude suceder a la inversa! pero mi experiencia me inclina a suponer la primera tendencia# ,or eso los mediadores tratamos de traer los mandantes a la mesa! pesando además otras ra"ones como la posibilidad de que hagan una evaluación distinta de lo que acontece en la negociación# También la b%squeda de ratificación! puede ser utili"ada como una estrategia más# $ la ve"! como hemos dicho! también puede ser que los intereses de representante representado no sean coincidentes#! eso constitue otra barrera para el avance del conflicto# (ebo agregar que# ,or cierto! la relación representante-representado! no es privativa de los actores colectivos! sino también de los individuales! donde se reproducen análogas dificultades! sin per'uicio de que siempre parece más simple configurar la volunta de un individuo mandante con su mandatario! que la de un grupo colectivo# I,-Actores y !artes Duando los actores de un conflicto recurren a una mediación! por e'emplo!o a un arbitra'e! o alg%n otro método! suele ad'udicarse para ellos la expresión 0 partes#
%?
El tema de las alian0as sus elementos caracter#sticos es de sumo inter$s, aunque no será tratado en este trabajo. "uede verse en Entelman emo, Dp. Cit. p.14;.,
+
$ pesar del uso com%n -que también se refiere a las partes de un conflicto-! la palabra no es del todo afortunada! porque éste es! por excelencia! el lengua'e del proceso 'udicial# 9recuentemente a quien pide la mediación se lo suele llamar parte re"uirente, solicitante, o convocante. $quel otro actor que es llamado a participar en la mediación se lo llama parte re"uerida o convocada. )sta es la terminolog&a que adopta la le de mediación2@ sus normas reglamentarias! Los centros comunitarios otros ámbito de m mediación hablan de convocante y convocado )) soslaan la expresión partes# $ veces J no mu a menudo-la iniciativa es de ambos! son los dos los que requieren el servicio de mediación# Duando estas mismas personas van a un proceso 'udicial! pasan a ser las partes en sentido procesal ! 0actor ! demandante o accionante demandado o accionado# Las denominaciones nunca son ingenuas o al menos irrelevantes# ,or e'emplo! es frecuente que los programas de mediación penal hablen de /ediación victima0victimario o victima0ofensor # Cos hemos resistido siempre a esta terminolog&a! aun cuando uno de los protagonistas haa admitido su culpabilidad# Co deseamos que el mediador ingrese con rótulos definidos anticipadamente para los participantes! porque a menudo cuando ha habido relaciones previas! es dif&cil prever tan claramente qué conductas han generado la penosa situación en la que están ho# /uchas veces las explicaciones acerca de los hechos que tienen lugar en el ámbito de la mediación sugieren que las acciones interdependientes se entrela"an! que la categori"ación penal está centrada en el %ltimo eslabón de esta larga secuencia de actitudes# ,or ello hemos preferido las denominaciones 0convocante convocado si el caso no ha ingresado al sistema 'udicial! o en este supuesto! 0denunciante-denunciado 'oncurre 4na al 'entro de +ediación y epone su caso. 7uien la atiende, recibe el caso como 54menazas6. En la primera reunión con la mediadora, 4na narra "ue sus vecinos del piso de arriba la han amenazado varias veces, dici!ndole "ue la har&n echar del edificio. La -ltima vez llamaron a la 8olicía, "ue finalmente dejó las cosas como estaban pero dijo "ue la próima vez intervendr&. Lo cierto es "ue 4na est& atemorizada por lo "ue pueda sucederle. 4l tener la primera reunión con la otra parte, 8edro y su esposa, Luisa, la historia se completa con los puntos de vista de todos. Los vecinos epresan "ue en un comienzo las relaciones eran ecelentes hasta "ue ellos le pidieron prestado un dinero y como no pudieron devolverlo, 4na ha puesto en el ascensor un cartel calumni&ndolos y con epresiones de todo tipo hacia ellos, no cesa de llamarlos por 9E, les ha dejado basura enfrente de la puerta del departamento y les grita por el patio de aire y luz .Los chicos pe"ueños est&n asustados y dicen "ue sólo han ido a pedirle "ue no ponga m&s carteles, y detenga los insultos, los gritos y el tema de la basura ,"ue ellos pronto le %1
&e %4;+2 de Mediación Dbli!atoria 'oslao aqu# la discusión en materia de mediación penal relativa a si es necesario admitir o no la culpabilidad como requisito previo a la mediación. "ara nosotros desde este punto de vista, nuestra mirada esta centrada en el episodio que las partes han compartido, más que en la atribución de responsabilidades. "ara ampliar estos aspectos puede verseJ Caram Maria Elena +acia la mediación penal K 'uplemento de &a &e )uenos
A
pagar&n. 9ambi!n le han dicho "ue si seguía haciendo esto tendrían "ue llamar a la 8olicía* En una segunda oportunidad, como ella los echó violentamente, los vecinos llamaron a la 8olicía*etc. etc* 5(ónde comien"an exactamente las acciones de cada uno en esta narración7 5Duál es la puntuación 24de esta historia para determinar con claridad "ui!n es la víctima qui!n el victimario en este episodio7 $lgo análogo sucede con las relaciones familiares las figuras penales conectadas con éstas# )l padre se atrasó con el pago de la cuota alimentaria! la mamá se fue! si previo aviso! con sus hi'os a la casa de sus padres en la provincia para facilitar la subsistencia# )l padre al no poder ver a sus hi'os presenta una denuncia por impedimento de contacto#5 B&ctimas o victimarios7 6ué poco %til parece esta r&gida categori"ación frente a la comple'idad de los v&nculos con obligaciones rec&procas 28# )n s&ntesis! podr&amos decir de una manera general! que solemos llamar 0actores a quienes están afectados por un conflicto esos actores son 0partes cuando el tratamiento de su conflicto se institucionaliza de alguna manera! a sea en una mediación! un arbitra'e o un 'uicio# Sin embargo! a pesar de toda lo dicho! los lectores encontrarán que la expresión 0parte referida a los actores de un conflicto! o de una negociación! es mu frecuente en el uso com%n## 9rente a la situación concreta! estas distinciones solo incomodarán en ciertos momentos! porque la mirada inicial esta puesta en los protagonistas a quienes intuitivamente se visuali"a enfrentados! uno de cada lado# ,or e'emplo! pensemos si una segunda esposa acompaa a su marido a una mediación de éste con su primera Jho ex Jesposa* qui"á se encuentre con la negativa del mediador o de la otra parte o de su abogado para que intervenga la segunda! ba'o el argumento de que no es parte # Caturalmente esta segunda esposa escapa a la visión clásica de uno sentado frente a otro de cada lado de la mesa# Cadie dudar&a que estas personas0los e esposos0 son las partes! actores individuales protagonistas a la ve"! en el más cabal sentido de nuestra clasificación# )sta segunda dama bien podr&a pensar: 0Ban discutir acerca de los nios que pasan todos los fines de semana con nosotros! hacen los deberes en casa salen de vacaciones con nosotros# En mediador apegado a las normas o u abogado de la otra parte podr&a decirle: 0Si pero usted no es parte en esta mediación! su presencia no es pertinente en esta audiencia# Ci qué decir si la audiencia fuera dentro del marco de un proceso! probablemente ning%n funcionario del Fu"gado le permitir&a presenciar la audiencia#2; %2
at0laIic= "ual otros Teoria de la Comunicación +umana.. >erder, )arcelona ,1*A*p.;@. 'oslao aqu# la discusión en materia de mediación penal relativa a si es necesario admitir o no la culpabilidad como requisito previo a la mediación. "ara nosotros desde este punto de vista, nuestra mirada esta centrada en el episodio que las partes han compartido, más que en la atribución de responsabilidades. "ara ampliar estos aspectos puede verseJ Caram Maria Elena +acia la mediación penal K 'uplemento de &a &e )uenos
%;
%; 7n mediador con visión amplia del conflicto tendr#a otras respuestas, aunque no fueran necesariamente la incorporación a la sala.
*
56ué pasa aqu&7 La noción de actor es más amplia cuando se trata del conflicto en su tránsito a la noción de parte se vuelve crecientemente más restrictiva al avan"ar hacia el proceso 'udicial! pasando por la mediación# )sta aun conserva bastante elasticidad como para permitir el acercamiento a las conversaciones de personas mu vinculadas a los actores! pero en modo alguno estos tendr&an acceso al expediente 'udicial! como no fuera en calidad de testigos! por e'emplo# 3n año despu!s de haberse separado 'arolina de :avier, con una hija, :essica, de ; años, mantenían frecuente contacto entre si y con la niña. 'arolina percibió ciertos cambios en los comentarios de la niña% 5+am& , tengo "ue practicar m&s las cuentas6 o 5, 9en!s "ue pasarme el peine fino m&s seguido6o 5 Las zapatillas est&n sucias y debo adem&s usarlas con medias6. 4 su vez, :avier "ue nunca había hecho comentarios respecto de la escuela, comenzó a opinar acerca de los valores "ue la escuela trasmitía, su enfo"ue confesional, las clases de religión, y "ue la nena no aprendía matem&ticas como debía, ni leía lo suficiente. La preguntas de la mediadora condujeron a evidenciar "ue, en la percepción de 'arolina, la presencia de la actual pareja de :avier estaba influyendo en este cambio, lo "ue, por cierto, aumentaba la irritación de 'arolina, por habituales e imaginables razones, pero tambi!n por"ue la sentía como una mirada crítica puesta sobre su actividad maternal. 4l conversar por separado con :avier, la mediadora advirtió la frase frecuente 5 De "u! valen nuestros esfuerzos durante el fin de semana, si al volver a casa, eso no se contin-a* Kueno no necesitamos decir que esta segunda esposa 'amás seria parte en sentido procesal en ning%n 'uicio! ni siquiera ser&a convocada a la mediación! salvo que informalmente el mediador entendiera la conveniencia de abrir un espacio para ella teniendo en cuenta su fuerte gravitación# )s decir! si atendiera al conflicto más que al enfoque 0procesal de la mediación# /ás allá de convocarla o no aunque no se requiera su presencia directa! es inocultable esta presencia en el escenario actual de estas partes# 5Dómo no incluir en las conversaciones con Darolina la influencia de esta 0segunda mamáque se ha incorporado! cuando es claro el cambio en la militancia actual del padre en ciertas cuestiones que en las que antes no parec&a interesarse7 ,- Actores %e reparto o los otros.)l e'emplo anterior nos lleva a poner el foco en los actores secundarios! o de 0reparto! de acuerdo con la distinción que abrimos en III-
1?
Co es dif&cil visuali"ar a los protagonistas de un conflicto! sobretodo si el desacuerdo es privado#2<,ero no siempre se percibe la importancia de este con'unto más o menos extenso de personas ligadas a los protagonistassiempre más fácilmente individuali"ables -! unidos a ellos por v&nculos diversos# )llos conviven desde lugares mu distintos e integran este sistema que es el conflicto# )stos actores secundarios no aparecen qui"á en roles tan definidos#! su n%mero e intensidad de relación var&an seg%n cada caso! pero pueden tener una importancia nada desdeable en la disputa determinan mucho del recorrido que ésta adopta! influendo definitivamente en los estilos de abordar el mismo en los ciclos de su evolución! como su escalada o desescalada o estancamiento# Ena mirada amplia sobre el caso no puede olvidar estas presencias! que están ah&! a la espera de ser percibidas# Sin embargo! puede observarse que la institucionali"ación de un conflicto desde la realidad emp&rica en que se desarrolla hacia su contexto 'udiciali"ado! va limitando cada ve" más la consideración de esa red, más o menos extensa! generalmente dinámica# ,odr&amos pensar esta descripción con tres c&rculos concéntricos: a.el más grande ser&a el que comprende a todos estos su'etos como parte del sistema del conflicto! b. uno algo más limitado como es la mediación! c. uno más pequeo! el del proceso judicial# ,a-/Tanta (ente0 /"asta %)n%e0 5Duál es la extensión de esta red que enla"a a los individuos con los protagonistas7 Tomemos! siguiendo a Darlos Slusi! las palabras de Hregor Kateson! cuando dice 0que las fronteras de individuo no están limitadas por su piel sino que incluen a todo aquello con lo que el su'eto interact%a# 2= + agrega! más aun! 0todo el con'unto de v&nculos interpersonales del su'eto: familia! amigos! relaciones de traba'o! de estudio! inserción comunitaria prácticas sociales# )s decir! lo que constitue el concepto de 0red social Caturalmente! la pregunta se traslada ahora: 5hasta dónde7 5(ónde está el l&mite de este entorno7 La diversidad de los casos! la particularidades sugieren respuestas diferentes espec&ficas! por lo que es dif&cil una delimitación genérica a la ve" precisa# Tomo la idea de Slu"i: el con'unto de las relaciones se extiende hasta donde el individuo las percibe como significativas o como diferenciadas de la masa anónima de la sociedad#2> (ir&amos que hasta aqu& se extiende la red social personal! que constitue parte del universo relacional de los individuos#
%@
Carpenter 'usan otros Mana*in* ,u(lic isputes Hosse()ass "ublishers 'an 5rancisco 1*AA, p.;
Cuando los conflictos son pblicos, los interesados pueden ser muchos más. Ello, sin perjuicio de la fuer0a ma!n$tica existente en todo conflicto que probablemente llevará a centrali0ar sus posiciones o sus intereses de manera bipolar.
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'lu0=i Carlos E La ed social frontera de la práctica sist/mica, 9edisa, )arcelona, 1**A, p. 2+ 3bid p.4%
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También constituen de manera más difusa este universo vincular! otras relaciones sociales! más generales! más anónimas los primeros responden a un nombre propio conocido para el su'eto. pero cua maor o menor cercanMia con el individuo está dada por su percepción como tal# (entro del primer grupo! incluimos en primer lugar! la familia más nuclear! luego la extensa! los amigos! los la"os laborales otros v&nculos comunitarios! como el vecino próximos! el compaero del club! el asistente a un grupo en la parroquia! etc# (entro del segundo! el barrio! el consorcio! el p%blico! los usuarios! los compatriotas! etc# )n el interior de cada uno de estos con'untos! aparecen también nuevas gradaciones! porque están las personas más intimas! otras intermedias otras más ale'adas! algunas más perdurables o transitorias# ,ara quien construe el mapa del conflicto! ubica su mirada en el rubro personas! podr&a preguntarse frente a cada protagonista: >7ui!n es importante para !l?ella >'on "ui!n conversa este tema 'on "uien no de ellos >7u! opinan estas personas de la situación >7u! le dicen)1 Las respuestas pueden ser m%ltiples a veces imprevisibles# Dos esposos est&n resolviendo aspectos relativos a su divorcio. La mediadora trabaja en dos salas separadas con cada uno de ellos y sus abogados, por"ue la conversación se ha vuelto muy dificultosa. En un momento dado, al volver de la reunión privada con el esposo, encuentra a la e esposa hablando por su celular% ra.% =ueno* bueno*te dejo por"ue viene la mediadora, si, si le digo "ue no..'hau, chau * 2 cierra el tel!fono un poco turbada./ +ediadora% >8asa algo 4na% #ablaba con la señora "ue trabaja en casa, ella lo conoce bien a !l, y me dice "ue no le afloje* En la reunión siguiente el letrado del esposo me cuenta "ue su cliente est& atendido por una psicóloga muy prestigiosa, "uien se ha presto en contacto con el letrado para sugerir las pautas "ue en un posible convenio debiera adoptar. 8ara sorpresa de la mediadora en la próima reunión con la esposa, sus letradas comentan la fuerte influencia de la terapeuta de la señora sobre sus puntos de vista. En ambos casos, los abogados se sintieron incómodos con estas presiones de modo "ue cada uno 0paralelamente @optó por conversar con el terapeuta respectivo para trasladarle su mirada sobre la realidad de este eventual acuerdo. ,or supuesto que estas son situaciones donde la presencia de los otros se ha hecho expl&cita# Co siempre es as&N quien intenta conocer el conflicto debe avan"ar cuidadosa prudentemente# Co todas las personas están dispuestas a abrir sus mundos privados! a veces por propia preservación! por amor propio 0no me dejo influir por nadie6, o 5todas las ideas son mías, mías y mías6 0 no necesito "ue nadie me diga lo "ue debo hacer6 .! otras! porque tampoco advierten por s& el influ'o de estas presencias# ,arece claro pensar que de todos modos más allá de la proximidad! fuer"a o gravitación de los v&nculos con los otros! estos no son 0realmente otros si su palabra o su punto de vista no ha tenido acceso al protagonista! quien de una u otra manera lo incorpora# Los otros no son otros si no son percibidos como %*
3bid. ,p. 4% stes.
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tales por los protagonistas! a sea porque discuten internamente con ellosresistiéndose a una influencia que no es aceptada-*a sea porque ingresaron genuinamente en el pensamiento del actor# 9rente a éste también están no solo los 0otros del protagonista! sino los otros del otro protagonista! ! por si esto fuera poco! para los que cada uno percibe como los otros del otro! lo sean o no# Aaleria y Bustavo est&n resolviendo como parte de la organización de su divorcio la modalidad de atención de los gastos de los niños, "uien se har& cargo de los de educación, salud, vivienda, etc. 4 lo largo de las conversaciones la mediadora advierte "ue Bustavo conoce muchas cosas acerca de los gastos "ue Aaleria ha hecho despu!s de su separación2!l continuó viviendo un tiempo en el etranjero y ella volvió al país con los niños/ 8or ejemplo, una erogación "ue causa mucha susceptibilidad es la de una operación est!tica muy personal decidida por Aaleria dentro de la cobertura de la medicina prepaga provista por Bustavo, sin "ue !ste -ltimo lo sepa ya "ue ha sido durante el período donde ya no convivían. El tiene fuertes sospechas de "ue ella ha iniciado una relación con un amigo de ambos, #ugo, recientemente separado, "uien trabaja en la misma empresa "ue !l. Este amigo le cuenta estas cosas in"uietantes acerca de Aaleria, ciertas intimidades, y la natural sensibilidad "ue esta irritante situación produce lleva a Bustavo a acercarse a la e esposa de #ugo, donde ambos comparten sus desventuras y el resentimiento respecto de sus anteriores parejas. Los cuatro han sido amigos tiempo atr&s, cuando ambos matrimonios atravesaban un mejor momento. 'ada nueva reunión de mediación la mediadora escucha alg-n aporte "ue viene de estas personas, #ugo o su e esposa, en general rumores insidiosos. Aaleria est& en contacto con #ugo, "uien a su vez sigue por razones laborales en contacto con Bustavo, "uien conversa con la e esposa de !ste. 7ue #ugo le comente "ue su esposa se ha operado durante su ausencia y "ue 5C!l lo sabe6 es un revelación fuerte y provocativa. )s inevitable pensar que esta pare'a está negociando en un escenario frente un p-blico interesado en los resultados atento a las concesiones que ellos hagan# )s frecuente que las personas piensen que aparecerán frente a su 0p%blico como débiles! si efect%an concesiones o hacen reconocimientos# ,ensemos en Hustavo tomando a su cargo el pago de la medicina prepaga de su ex esposa! frente a los o'os de su supuesto rival# 5Dómo compatibili"ar esta inflexibilidad que se pretende mostrar frente a los espectadores de la disputa con la aptitud negociadora que requiere el me'or tratamiento de un conflicto7 Gecordemos! por e'emplo! que la mediación tiende a real"ar la grande"a dignidad que pueden encerrar algunas concesiones cómo estas decisiones deben ser vistas a la lu" de la mirada futura! cuando las personas revisen más adelante en sus vidas cómo actuaron! unos otros! en el los dif&ciles momentos culminantes de su conflicto# ,b-No to%os los espas son mal$#olos.
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6e )enedetti Mario -Go todos los esp#as son mal$volos/ poema citado en Caram Maria Elena, Eilbaum 6iana isolia Matilde Mediacion ise0o de una ,ráctica- &ibrer#a >istórica, )uenos
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Ena primera mirada tiende a ubicar a estos persona'es como individuos negativos es decir que audan a la escalada del conflicto# )s dif&cil explicar por qué tendemos a pensar que los otros operan de una manera negativa sobre el conflicto# ,robablemente los vemos atrapados en la brumosa comple'idad de las disputas# La experiencia indica que las presencias de los otros! como dice el poema! pueden ser de una auda important&sima en la superación de los conflictos! no solo por el apoo que puedan proporcionar! por ser escuchas receptivos! personas que audan a esclarecer que desean ! sienten buscan los protagonistas!# sino además con actividades de todo orden! la abuela que se ocupa de buscar los nios! el padre que aconse'a la reconciliación! o sencillamente se abstiene de 'u"gar los acompaa con la incondicionalidad amiga que tanto pide el desasosiego del conflicto N# $lguien que presta el dinero! la casa! su auto# sus contactos! en fin! los recursos de que dispone! etc# Don (iana )ilbaum /atilde Gisolia! hemos llamado a estos persona'es que no est&n pero est&n sentados en la mesa! los 0fantasmas de la mediación#4@ ,or cierto no está pensado el nombre con una connotación misteriosa o atemori"ante! sencillamente que como la mediación es un espacio más acotado que el de la realidad de la vida donde se desarrolla el conflicto J aunque también integra su secuencia-! suelen no están presentes efectivamente en la sala# ,or supuesto que muchas veces la proximidad es mu grande va desde haber tomado un café con alguno de los protagonistas antes de ingresar al centro de mediación o la oficina del mediador! esperarlos en la sala de espera! o aguardarlos en un café cercano! expectantes de la narración de lo acontecido# Los mediadores conocen acerca de esto# ,uede ser de buena práctica considerar la posibilidad de darles vo" a estas personas en la mediación! a que muchas veces prestan una efectiva colaboración! puede ser particularmente beneficioso el efecto legitimador que esto implica# Gecordemos que hablar desde afuera es mu distinto que hablar adentro! los efectos pueden ser eficaces para el avance de la mediación# Co todos los fantasmas pueden de'ar de serloN)l recuerdo de los seres queridos que ho no están! sus conse'os! sus mandatos! a veces grabados intensamente en el interior de las personas! puede operar en el pensamiento de una manera vigorosa incluso más que si estuvieran ho vivos! porque las desavenencias cotidianas a veces ale'an a las personas del lugar ilusorio e ideali"ado en que se perciben los que a no están# Bale la pena ingresar en este mundo interior tan plagado de voces para comprender el porqué del pensamiento actual de los protagonistas porque por lo general corresponden a un pensamiento rigidi"ante! unido a los valores! con la impronta inmodificable que ello conlleva para quien se siente guardián de estos deberes o sencillamente legatario de los mismos# La conversación puede aligerar esta sensación movili"ar el pensamiento# Siempre con cautela respeto# 3tros persona'es secundarios de gran influencia en el pensamiento de las partes son sus terapeutas! los grupos de autoauda! etc# donde las personas vuelcan las dificultades que atraviesan en función de sus disputas 42
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Caram , isolia, Eilbaum Dp Cit p. 2+*. J>e visto con ale!r#a que la denominación se está !enerali0ando 2% 3bid, p.2A1.
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,c-Los ni2os' primero )n el ámbito de los conflictos familiares los nios son protagonistas callados de las disputas entre sus padres# 6ue su rol central sea callado! no los corre del vértice ,ersonas del que forman parte sustancial# )l operador debe poder distinguir cuando la discusión se centra en las cuestiones entre los padres! cuando realmente está referida a los nios# 5 3sted debe saber, mediadora, "ue el señor nos ha sido infiel. F ahora "uiere "ue los chicos la conozcanG los chicos no deben conocerla, es complicar su cabecita cuando apenas est&n superando el abandono. /ás allá de evaluar con serenidad la conveniencia u oportunidad! seg%n el caso! de que uno de los padres presente a los nios su nuevo compaeraOo! esta es una discusión de pare'a más que de padres! más allá de la forma de refor"ar el argumento# Las apelaciones a argumentos como 0lo me'or para los nios a veces son sospechosasN ,ero si el tema es aut!nticamente relativo a los nios! como los encuentros! las discusiones sobre crian"a! educación! formación! salud! vacaciones etc! el tercero puede activar la presencia de los hi'os hablando de ellos con sus padres llevándolos al pensamiento de los mismos a través de sus ellos# )sta se transforma en una intervención inexcusable para dirigir al atención hacia los destinatarios directos de lo que se acuerde# Co ingreso aqu& en cuestiones bien interesantes como las que tienen que ver con la presencia de los nios en la mediación! 44 o su participación en las decisiones que les afectan* sencillamente destaco -dentro del marco de la ubicación de las personas- el valor de hacer expl&cita su presencia en ciertos temas que los afectan! aunque no apare"can de cuerpo presente en el conflicto# También esta inclusión imaginaria refuer"a su integración al vértice ,ersonas que anali"amos# Gecordemos que la realidad del conflicto contin%a funcionado también fuera de la sala de mediación o eventualmente del ámbito del Fu"gado# $ll& los nios presencian diariamente discusiones! silencios! una gestualidad a veces próxima a la violencia! cuando no es violencia misma# )n la realidad son testigos directos! casi protagónicos! de estos sucesos cotidianos! de modo que si intentamos que la mediación se acerque a la realidad del conflicto no los puede obviar! aunque más no sea metafóricamente con la incorporación de su perspectiva! a fin de preservarlos no agotarlos aun más! traéndolos a un espacio extrao a su cotidianeidad# )sta es una auda importante que el tercero neutral puede aportar: enfati"ar la influencia de los protagonistas sobre estos actores inexcusables* a la ve" que preservarlos evitando su rol de testigos persistentes de la dificultad relacional de sus padres! siempre dolorosa e imborrable# )s mu frecuente que los padres digan al mediador# 0
isolia Mar#a Matilde ,articipación de ni0os& ni0as y adolescentes en el proceso de
mediación.Trabajo in$dito
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)ste e'emplo sirve como muchos otros para marcar los dos niveles del conflicto cómo suceden las cosas en el ámbito propio de las partes cómo es tratado cuando ingresa un tercero en su tratamiento# La realidad es mu comple'a! es un torbellino comparado con lo que sucede en la sala donde el tratamiento en el proceso está organizado* la palabra! aunque se privilegie la espontaneidad! está ordenada* los intercambios dif&ciles son despe'ados por el mediador! se prevén reuniones privadas! cuartos intermedios# Gecordemos que se intenta reconstruir la comunicación tan maltrecha! afectada en la sala más a%n fuera de ella# )l operador no puede de'ar de percibir que fuera de su espacio la realidad sigue fluendo! para bien o para mal! en escalada o desescalada de la magnitud del conflicto será cuidadoso con el efecto residual de sus reuniones# )l conflicto no es %nicamente lo que sucede en la sala! aunque lo que pasa all& tan bien es parte de esa secuencia! el conflicto sigue! lo sucedido en la sala está marcando la impronta siguiente# ,%-Los abo(a%os 3tro actor de participación mu activa en un conflicto suele ser el abogado# $ menudo su presencia no está ligada a los or&genes del desacuerdo! sino que! generalmente su incorporación da cuenta de alg%n grado de escalada del conflicto# )n efecto! frecuentemente la consulta con el profesional va ligada a una preocupación acerca de los derechos en 'uego a las consecuencias legales de las acciones que construen el conflicto# Domo no todos los conflictos tienen connotaciones 'ur&dicas preponderantes! al menos en la percepción sub'etiva de las partes! sino que existen otras aristas en 'uego de &ndole emocional comunicacional! etc! los protagonistas buscan la información el conse'o legal! cuando experimentan la situación como más riesgosa o amena"ante este aspecto comien"a a observarse con más cautela# (e pronto comien"an a pedir recibos! retener documentación! recurrir a escribanos! de'ar constancias! acompaarse con testigos! etc# Caturalmente la opinión del abogado puede ser definitoria del giro que adopte la disputa! seg%n la actitud personal profesional que aporte al mismo! tanto en los aspectos técnicos! incluidos los de la negociación! como los humanos# Si desde los comien"os de la disputa el conse'o es adoptar actitudes conciliatorias! la traectoria será diferente de si la actitud es básicamente confrontativa# )s cierto que su conse'o no opera por separado! está su cliente! el protagonista! reclamando una u otra actitud# 9recuentemente el cliente quiere marcar esta nueva presencia como una manera de fortificarse ante el otro! indicar que la incorporación del abogado tiende a colocar la situación en una nueva etapa# ?ncluso suele usarse una fraseNa partir de ahora, enti!ndase con mi abogadoN )l profesional tiene roles important&simos para cumplir puede colaborar con su cliente desde mu distintas formas sin que por ello se debilite la postura del cliente# )n primer lugar! puede intentar actuar conciliadoramente si esta situación no es exitosa puede audar a su cliente a prepararse para negociar racionalmente# 48 ,ara un mediador la presencia de los abogados en la mediación define mucho del desarrollo de un proceso# Co sólo por la impronta que el profesional 24
Cárdenas Eduardo Hose "l Cliente ne*ocia y el a(o*ado lo asesora& &umen, )uenos
1@
imprime o sugiere para la negociación! sino por la evaluación que hace de la situación desde el punto de vista 'ur&dico! tanto legal como 'urisprudencial# )llo no es otra cosa que audar a su cliente con la información respecto de la alternativaH ! tanto de éste como de la otra parte# )ste análisis colaborará! como sabemos! para definir el rumbo más conveniente a seguir! fortaleciendo el énfasis puesto en al negociación o debilitando sus posibilidades# ,uede significar un alivio para una de las partes una amena"a J ser usado como tal- para la otra! o a la inversa#4< Iemos distinguido estas clases de abogados relaciones que pueden aparecer en un conflicto o en un proceso de mediación4= @# Las partes no pensaban concurrir con abogado pero lo hacen por imperativo legal# 2# LaOs partes concurren con su abogado de confian"a# 4# LaOs partes concurren con un familiar abogado# 4. LaOs partes han concurrido en busca de asesoramiento a un patrocinio 'ur&dico gratuito no conocen al letrado que se hace presente en la audiencia para acompaarla#
;# LaOs partes no ten&an intención de promover reclamo alguno! pero su voluntad fue captada por letrados con interés propio! en orden a la percepción de honorarios# <# Ena o más. de las partes es una persona 'ur&dica que es representada en la mediación por el abogado que la asesora habitualmente# +. Ena o más. de las partes es una persona 'ur&dica que cuenta con abogados internos en relación de dependencia que la representan en la mediación#
># Ena o más. de las partes es una persona 'ur&dica que es representada en la mediación por un estudio externo# P# Ena o más. de las partes es una persona 'ur&dica que concurre con su representación orgánica el asesoramiento de abogados internos o externos# 1?. Ena o más. de las partes es una aseguradora citada en garant&a concurreOasiste uno de los muchos abogados apoderados para concurrir a mediaciones#
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Tomamos la expresión en el sentido dado por la Ge!ociación Colaborativa, es decir, como aquellas posibilidades que una parte tiene de satisfacer sus intereses sin la participación del otro. Caram, Eilbaum isol#a,ob cit p.2A@. 'obre este aspecto es interesante tambi$n ver Mnoo=in obert >. otros esol1er conflictos y alcan2ar acuerdos , 9edisa, )s.
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Dada supuesto genera interacciones diferentes# (e estas posibilidades! solo a manera e'emplificativa! pensemos los diferentes perfiles de los letrados sus consecuentes combinaciones con los de su cliente# Luego ampliemos la grilla combinatoria con el estilo negociador del otro protagonista su abogado# (el mismo modo recordemos que no siempre el estilo de negociar coincide con la manera exterior de conducir el mismo# Ka'o un ropa'e a veces inflexible competitivo! nos encontramos finalmente con una modalidad negociadora! a la ve" que a veces nos engaamos con una presentación concesiva! o al menos negociadora! finalmente encontramos un estilo fuertemente competitivo# ,I-3ente 4&e #iene' (ente 4&e #a 3tras observaciones de la práctica cotidiana de los conflictos nos permiten concluir que como hemos dicho al comien"o! el vértice persona no es estático# $ veces! los protagonistas! van sufriendo procesos internos a lo largo de la secuencia del conflicto* a veces los otros! los secundarios en relación con los protagonistas! modifican sus v&nculos a sea porque éstos se debilitan o fortalecen! o simplemente cambian! o porque la reflexión va permitiendo un ordenamiento más autónomo# Las más de las veces una combinación de estas posibles mutaciones# )s importante entonces tener en cuenta esta movilidad# Domo hemos dicho uno puede hacer una observación de un conflicto tra"ar un mapa en un momento dado! solo si entiende bien que la descripción estática no se compadece con el carácter dinámico de la realidad del conflicto# 3na joven madre de dos niños pe"ueños narra el impacto "ue vivió al saber "ue era hija adoptiva% 59oda la vida 2 ahora0al momento de la mediación0 tiene alrededor de H años/ supe "ue algo pasaba*9enía siempre la impresión de una fuerte preferencia de mis padres hacia mi hermana, no lo sabia bien, pero sospechaba "ue no eran mis padres, pero jam&s lo admitieron. #asta hace unos dos años, en "ue alguien me lo dijo. 8rofundamente impactada, se los pregunt! a mis padres por separado, y cada uno me dijo "ue si, "ue no era mi padre*Es decir, mi padre decía "ue era hija de mi madre y no de !l, y mi madre "ue era hija de mi padre, pero no de ellaI 4 pesar de la crueldad siniestra de estas tardías revelaciones donde cada uno dio estas versiones dispares e inconciliables, como si la dureza de la noticia de "ue no era hija de mis padres no bastara, yo me sentí mas tran"uila. Era como si hubiera confirmado lo "ue siempre había sabido. #asta allí yo solía refugiarme en mis padres, aun con el desapego "ue siempre sentí de ellos. 8or ejemplo si yo contaba "ue mi marido me maltrataba, la respuesta era "ue hacia yo para ganarme eso, etc, etc. 'uando supe esto sentí "ue ganaba en autonomía, en libertad personal y con eso una fuerza especial para atender a mis hijos. 4 su vez adopt! la decisión de separarme y no soportar m&s los vej&menes "ue sentía. 2A
8acilo en la narración de este caso bajo la idea compartida con los mediadores de que -los caprichos de la realidad superan los de la ficción/, , en consecuencia, no parecen cre#bles, pero es ri!urosamente cierto lo que o escuch$, casi textual.
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Co todas las transiciones son tan dramáticas como las que acontecen en el marco de la familia! especialmente la que antecede! tan triste por cierto# Sencillamente un vecino se muda! alguien cambia de traba'o! etc#!un administrador intrigante se va del edificio! el vértice cambia! por la modificación de estas circunstancias# :os! es taista y tiene cuatro hijos pe"ueños con 8atricia. Despu!s de su separación hicieron, con mi intervención como mediadora, algunos acuerdos sobre tenencia, visitas y alimentos. 9res años despu!s, :os! viene a buscarme al 'entro de +ediación del +inisterio de :usticia, visiblemente alterado. #a estado siguiendo a 8atricia y descubrió "ue cuando salía de su casa por las tardes, iba a trabajar a una casa de citas. Lo confirmó de una manera brutal% estacionó su tai, bajó, pidió un servicio de los "ue la casa provee y le ofrecieron un &lbum con fotos, y * allí estaba la de ella(. Est& absolutamente conmocionado con el hallazgo0 un tanto por el resultado eitoso de su espionaje, y un tanto por la perplejidad ante la audaz decisión de esta madre de cuatro hijos, menuda, delgada, rubia, de aspecto aniñado0 y "uiere "uitarle los niños, etc. 'onvoco a 8atricia, "uien viene con su suegra, la madre de :os! con "uien vive y es "uien cuida a los niños. La madre de :os! conoce la situación y evita emitir juicio alguno, aun"ue parece defender a su nuera. En reunión privada, 8atricia me confirma su nueva actividad como una manera de 5salir6 de tanta sórdida estrechez*69odo se ha deslizado bien hasta ahora, epresa, 5y he sido muy afortunada con los clientes6, siempre cuidadosos y civilizados en sus re"uerimientos.. e hacen algunos acuerdos de "ue la madre de :os! continuar& con el cuidado de los niños, cosa "ue hace actualmente y hasta ahora ha venido haciendo. 'reo "ue :os! no parece "uerer cambiar nada de lo relativo a los niños, sino "ue est& fuertemente interesado en 8atricia, probablemente en base al provocativo desafío de esta novedad* eis meses despu!s, 8atricia me pide una audiencia donde "uiere conversar con su suegra0 la mam& de :os!, abuela de los niños0 con mi ayuda* 4llí cuenta "ue ha dejado su actividad, por"ue su -ltimo cliente es un señor ligado a una embajada etranjera, "ue le ha ofrecido una nueva vida, y ella ha entablado con !l una flamante relación. Lo "ue desea es poder conversar con su suegra sobre alguna particularidad esta nueva situación. 'ito a la suegra, con "uien siguen viviendo los chicos, adem&s de la mam&, y para mi sorpresa, el planteo de 8atricia es "ue haya cierta cordura y sensatez en las eigencias "ue la ra plantea con relación a este caballero, por ejemplo 5no puede estar llamando para pedirle la plata para los impuestos y servicios de la casa en cual"uier momento por"ue las facturas se vencen, dando por sentado "ue el señor las abonar&, ya "ue la plata no alcanza. 8atricia descarta "ue el señor lo har&, por"ue la ama profundamente, solo pide "ue le dejen manejar esta situación con m&s prudencia y "ue los llamados no provo"uen un efecto contraproducente. De hecho el señor ha invitado a cenar a la ra y a los niños, todos juntos con 8atricia, donde los chicos se portaron espantosamente, y dieron muestras de 5lo maleducados "ue son, correteando por debajo de la mesa del restaurante, desabrochando los zapatos del señor, etc6 .9odo, a criterio de 8atricia, urdido por la ra. en complicidad con los niños.
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La ra. est&, en efecto, resentida por"ue el señor no paga siempre cuando 5debe6, y adem&s, y creo "ue es lo m&s importante, 8atricia, en esta nueva situación, parece avergonzarse un poco de todos ellos. 9iempo despu!s vuelve 8atricia con un abogado particular. 'omo al parecer las cosas han mejorado y la relación sigue viento en popa, 0de hecho ya ha viajado ella acompañ&ndolo en sus tareas diplom&ticas 0, me piden si no puedo intervenir privada mente como mediadora. Eplico "ue el caso es del 'entro y "ue allí continuar! mi tarea. 8ide citar a :os! para "ue le de la autorización para "ue los niños viajen fuera del país. :os! se niega a ello por"ue supone "ue los niños no volver&n 2este es el proyecto oculto "ue se me confiesa en reunión privada, razón "ue me impide continuar la mediación/. 8ero lo m&s sorprendente de la situación, al menos para mis ojos nunca lo suficientemente eperimentados, es la naturalidad con "ue todos viven el6noviazgo6 y las ventajas económicas "ue al grupo familiar este romance le ha aportado. ?nvito a mis pacientes lectores a observar en este caso mutaciones en el vértice 0,ersonas#
las apasionantes
,II-Terceros y terceros )ntelman nos auda a distinguir entre los terceros4P. $dviértase que hasta aqu& he hablado de los 0otros no de los 0terceros! porque entiendo a aquéllos como personas que acompaan a los protagonistas en diferentes roles! pero que en general forman parte de una pequea legión que se mueve alrededor de los mismos! sin quebrar la dualidad bipolar entre las partes# Los terceros! en cambio! no aparecen confundidos con las partes# ?gualmente! pienso que todos! desde un lugar u otro participan del sistema del conflicto# a. )stán los terceros no implicados en la situación de conflicto! convocados a intervenir en los mismos# Ebico en esta categor&a a los mediadores u otro operadores! los 'ueces! árbitros! los facilitadores! etc cualquiera sea la forma de intervención que se busque! seg%n la definición de cada rol en cada método# Los habrá as& meros comunicadores! sin facultades para sugerir propuestas mediadores.! o con éstas conciliadores.! o más aun con facultades para resolver 'ueces árbitros.! con intervención por imperativo legal o por decisión de las partes! etc# ,or supuesto uno no dir&a que estas personas 0están en conflicto porque no están en la misma situación que las partes o sus 0otros! pero si están en el conflicto, porque sus presencias sus intervenciones concretas! eventuales o al menos el pensamiento acerca de ellas! de lo que podr&an ser sus intervenciones! a están operando en el conflicto# Supongamos que una parte ha pedido una mediación! a piensa qué dirá la otra parte! o se lo anuncia! el otro recibe esta información las actitudes no pueden de'ar de ser permeables a todo esto# $mbos comien"an a pensar qué hará o dirá el mediador! cuál es la me'or manera de contar las cosas! prevén una narrativa para ese escenario! etc#
2*
Entelman emo, Dp. Cit. p. 12;.
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b. )stá también el llamado tercero participant e! que si participa en la situación de conflicto cuo rol está destinado a integrar en alg%n momento un campo en la dualidad de la disputa# Tanto internacionalmente! como en una organi"ación! o en la estructura familiar! aparece un estado! una sección o una persona que! a sea por su rol o prestigio o por su sola visuali"ación como protector de un área! define la b%squeda de la solución del conflicto# )stán dentro de este grupo los llamados terceros disuasores!8A es decir! aquéllos que por su mera amena"a de intervenir en la situación de conflicto! provocan la definición del conflicto# Heneralmente este tercero está percibido por las partes con alg%n poder para ingresar en la disputa! ra"ón por la que deciden buscar una salida# )l padre que ordena a sus hi'os que cesen de pelear ba'o la amena"a de tomar cartas en el asunto# Co necesariamente es visuali"ado en un campo determinado de la disputa! sino con poder sobre ambos# También están los terceros persuasores! personas que influen para que las personas cesen en su situación de conflicto! pero sin la posibilidad de que intervengan en el mismo! alineándose con alguna de las partes recordemos el e'emplo de )ntelman! evocando la intervención del ,apa ente la inminencia del conflicto con Dhile por el Danal de Keagle# $unque al Dardenal Samoré suele mencionárselo como un e'emplo de mediador! no me resulta claro si su intervención está encuadrada en el rol de mediador exactamente con los contornos profesionales con los que lo describimos nosotros#.# c. ?ncluo también dentro de la clase de terceros-aunque en roles con intensidades variables- aquellos que proporcionan criterios objetivos en una disputa! como el experto tasador! o el perito en alguna rama espec&fica! cuo aporte es tomado por las partes! se incorpora a su información pesa sobre el conflicto# )ste intervención que tiene regulación procesal cuando se trata del proceso 'udicial pruebas periciales.! es posible también en la mediación! si los participantes la acuerdan! debe ser mane'ada con cautela por el mediador para evitar que sirva más que como un ensanchamiento de la información que aude a una negociación más realista! como un elemento fortificador de las posiciones de los protagonistas! que atrincherándose en esos datos que las favorecen las vuelvan más inflexibles# Domo mediadora suelo ser mu cauta con este tipo de intervenciones! e intento que las partes ubiquen sus negociaciones en un campo donde puedan prescindir de estos datos! porque implican frecuentemente la apertura de nuevos subtemas limitan con el campo de la prueba de una manera inconveniente para la mediación# Caturalmente ha casos en que esta información es inexcusable para avan"ar! por e'emplo es uno entre muchos.si una v&ctima que ha sufrido lesiones en un accidente de tránsito debe ser revisada pro el médico de la compa&a de seguros# Co podrá avan"arse con un eventual ofrecimiento sin este requisito m&nimo# 3na propietaria de un departamento ubicado en el -ltimo piso de un edificio re"uiere en una mediación "ue el 'onsorcio retire el cartel publicitario "ue est& apoyado en la terraza del -ltimo piso, precisamente sobre su unidad, por las fisuras "ue causa en los muros de !ste debido su eagerado0seg-n alega0 peso. El 'onsorcio se resiste por"ue el al"uiler de ese espacio permite aliviar el costo de las epensas. Las partes han recurrido cada una a un eperto para 4?
3bid, p.14? stes. 'i!o a!rade0co su desarrollo en todo este punto.
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"ue se epida sobre la incidencia de este cartel en la unidad afectada, y los resultados de cada una refuerzan los argumentos de cada parte, por lo "ue se resuelve "ue un tercero eperto neutral, independiente de las partes, se epida sobre este punto. 8ara ello es imprescindible "ue las partes convengan previamente los puntos "ue han de ser consultados, mecanismo de lección como se afronta el costo del mismo y "u! valor se dar& a su opinión. 4mbos se resisten a considerar vinculante la opinión, temerosos de "ue no les favorezca,. F una vez "ue se epide el tercero a favor de la unidad, el 'onsorcio cuestiona nuevamente su criterio. El tema se va volviendo finalmente de muy difícil solución bajo este sesgo, finalmente se decide "ue el 'onsorcio har& las reparaciones actuales, sin hacer compromisos hacia el futuro. 8robablemente una respuesta imperfecta o al menos solo transitoria para la situación. +arginalmente es interesante comentar "u! ha pesado en este conflicto. La actual propietaria de la unidad ha recibido este departamento por vía de u legado de su anterior empleadora en función de haber sido "uien la cuidó durante muchos años particularmente los -ltimos de su enfermedad. El desnivel socioeconómico de la nueva propietaria con relación al de los restantes copropietarios de este edificio0 o al menos el "ue pretenden tener0, la ha colocado en una ine"uitativa situación de discriminación evidenciada, al menos en su percepción0negada por la administración del consorcio0en un rechazo a todos sus pedidos, a no poder ser escuchada en las asambleas, con actitudes ofensivas, etc. 3na vez m&s puede observarse cómo por detr&s del reclamo acerca del cartel, se mueven otras situaciones de naturaleza emocional "ue determinan fuertemente el sesgo del conflicto. Jesultó difícil encontrar desde este &mbito una repuesta adecuada para ello. ,III-El tercer la%o en el tercer 5n(&lo Cuestro grupo humano! el que integra el conflicto! ha ido creciendo a lo largo de estas páginas# ,uede decirse que el vértice estalla! desagregado ahora en numerosos su'etos que participan desde los mas variados roles con pesos diversos en el desarrollo del conflicto# /e falta! sin embargo! incluir el llamado tercer lado# 56ué es exactamente el tercer lado7 0)l tercer lado es la gente de la comunidad. que usando un cierto tipo de poder el poder de los pares.! desde una cierta perspectiva una base com%n. en respaldo de un determinado proceso de dialogo de no violencia. apunta a un cierto producto un triple triunfo.8@# Er asigna a través de este concepto enorme valor a la influencia de la comunidad! como la tercera parte constituida por una multitud cuo peso colectivo es superior a del 0dueo del conflicto# )sta comunidad tiene la fuer"a para equilibrar la agresión! la violencia que la disputa dispara genera un control una moderación por su sola presencia# (istingue as& dentro del tercer lado! los de afuera! vecinos! neutrales! observadores! los de adentro! parientes! amigos! etc que integran las partes# #Los de afuera fortalecen a los de adentro! que a su ve" movili"an a los de afuera todos 'untos pueden obtener la transformación del conflicto# )s importante en nuestro esquema incorporar esta presencia qui"ás anónima pero que sin duda tiene un efecto sobre la disputa# $lgo hace que ésta se 41
7r illiam. Alcan2ar la pa2. ."aidos, )s
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mantenga en los cauces institucionali"ados no avance# $demás de su efecto descriptivo! para Er el tercer lado implica una nueva responsabilidad: cada persona! cada organi"ación nación es responsable por los conflictos que tienen lugar a su alrededor# Dada uno tiene la oportunidad de evitar que las peleas a su alrededor alcancen grados destructivos# La red no solo nos significa saber quiénes influen sobre los protagonistas! sino! a su ve"! cada conflicto influe en los restantes miembros de la red! creando nuevas responsabilidades# Co somos aun concientes! dice Er! del potencial del tercer lado# Todav&a se aseme'a a un gigante dormido! capa" de grandes cosas! perdido en el sueo82 I6-C)mo creci) la familia7 /Entran to%os en la foto0 $hora que nombramos a todos o a casi todos!5no se nos cae el triángulo hacia un vértice agobiado por tanto peso7 Tal ve"N Sin embargo! desde el lugar de quien intenta describir un conflicto! a sea como mero observador! o para intervenir más activamente desde alg%n lugar ! una apreciación más sutil o completa de las personas su ubicación en el territorio de la disputa! nos permitirá comprender me'or el caso! qui"á audar a su resolución# Tal ve" no siempre nuestra b%squeda podrá ahondar tanto en la trastienda del caso! donde como he tratado de mostrar suele aparecer mucha rique"a de elementos claves para su comprensión# ,ero aun as&! creo que es ineorable el intento de exploración# ,orque establecer distinciones en el universo de un conflicto! es ensanchar nuestra mirada! abrir una b%squeda siempre persistente necesaria! ba'o la idea simple pero no por eso menos sabia! de que una apreciación más detenida nos dirá mucho más que aquello que nos aparece a primera vista# Sabemos que nuestra tarea como operadores no puede limitarse a lo obvio* eso a lo vieron los protagonistas! no alcan"ó para encontrar una salida# La ampliación del enfoque desde lo aparente hacia lo menos expl&cito! nos dará una comprensión más propicia para nuestro traba'o# 84 6-Al(&nas refle*iones m5s 6a-!ersonas y !roblema /Inte(ra%os o no0 Eno de las pautas sugeridas por nuestros maestros de la Cegociación Dolaborativa!- cuo esquema de traba'o adopta la mediación como una forma de organi"ar el tratamiento del conflicto! ba'o la idea de que la mediación es una negociación asistida-! se apoa en la conveniencia de 0separar las personas del problema#88 5Dómo conciliar esta frase! de enorme utilidad práctica! con los primeros párrafos donde me preocupo por marcar la interconexión de los vértices del triángulo7 4%
3bid, p. ;1
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5ischer o!er 7r illiam, Dp. Cit. p.%%.
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Duando Er 9ischer marcan este postulado enfati"an que ante todo los negociadores son personas! que como tales se eno'an! se deprimen! se frustran se ofenden# Tienen egos amena"ados confunden sus percepciones con la realidadN#8; )sto lleva a malentendidos que enturbian el proceso de la negociación# )s frecuente entonces que no se preste suficiente atención al 8roblema de las personas! se confundan los cuestionamientos al problema con los ataques dirigidos a los actores# Sugiere entonces distinguir lo que los participantes se dicen entre s&! de la discusión sobre el 8roblema! precisamente para cuidar a los primeros- a sea en preservación de los v&nculos o cuanto menos buscando una cierta legitimación básica entre los protagonistas- concentrar el tratamiento en la segunda 0blando con las personas! duro con el problema.# )s decir que presupone a la ve": a. la interconeión en la realidad de ambos elementos! al punto que frecuentemente no son distinguidos por protagonistas son usados indiscriminadamente b. +! como consecuencia! la conveniencia de la distinción entre ambos elementos: ,ersonas ,roblema! para poder cuidar los v&nculos entre las primeras! concentrarnos en la discusión sobre el segundo#8< Lo expuesto no hace más que ratificar la necesidad de anali"ar separadamente los elementos ,ersona-,roblema! frecuentemente confundidos en la secuencia práctica real de la disputa# $lgo as& como que el operador Jnegociador o tercero neutral- separe lo que la realidad ha unido# 6b-La personas y la a(en%a $ su ve"! cuando los mediadores o los facilitadotes! conceptuali"amos las maneras de formular una agenda de traba'o8=! solemos proponer la enumeración de los problemas despersonaliz&ndolos! precisamente para concentrar la atención en el problema a tratar! más que en los actores# )s decir! no hablaremos del pago de la deuda de 1 a +! sino el 0tema o la cuestión de esta suma de dinero! no de las visitas que no cumple Q que le reclama /! sino el tema o la cuestión del contacto con los nios# 5Cos olvidamos! entonces! del vértice ,ersonas! para poner el énfasis en el del ,roblema75 Co es caso que este problema tiene sentido si lo pensamos con respecto a estas personas que son las que en definitiva tendr&an que decidir qué hacer con él7 Co! una ve" más se nos ratifica la necesidad de contar con la aptitud técnica e instrumental para separar ambos vértices! a sabiendas de su profunda conexión en la realidad del conflicto# 6c-Los actores en el espacio %e la me%iaci)n Iaber desagregado a los integrantes del vértice de las personas no tiene por sentido acomodarlos en una pequea estanter&a a la vista del operador! como 4;
3bid, p.%2. 3bid , p. %1 si!uientes. &os autores su!ieren una cantidad de pautas para cuidar la relación a lo lar!o de una ne!ociación (sin descuidar las necesidades en jue!o( no efectuar un intil des!astante traslado de la tensión que la diver!encia produce desde problema !acia las personas. 4+ Caram, Eilbaum, isolia, Dp. Cit. ".1+*. 4@
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si fuera una pequea colección de muequitos 8># La exploración que hemos planteado no termina en una simple enumeración de su'etos en fila india! separados entre s& # Kuscamos su interacción! al menos la de los protagonistas# Eno de los sentidos más poderosos de la mediación es poder dar una respuesta inclusiva a las situaciones de conflicto# ?ncluir al su'eto! significa 0incluir su sub'etividad! también su intersub'etividad# 8P 0Eno de los daos que ##se han infligido a la sociedadN es la desconfian"a como principioNLa confian"a se remite a una condición necesaria para pensarse como su'eto! pensamiento que no es nunca sin otro respecto del cual nos constituimos! a por seme'an"a! a por diferenciaN;A Cuestro aborda'e de los conflictos implica un presupuesto ideológico: la b%squeda es siempre fortalecer los la"os entre todos los actores principales! darles la palabra por igual! integrarlos en un proceso com%n! audándolos a recorrer un camino compartido para que encuentren una respuesta que los contemple a ambos )n ning%n sentido! el vértice se abrirá con más intensidad para uno que para otro! ni excluirá de antemano a uno de su actores! ni pondrá a uno por encima del otroNLos mediadores conforman una l&nea de traba'o en la que permanentemente generan un movimiento que abra"a a todas las partesN donde la b%squeda de la inclusión está presente como un ob'etivo luminoso que alumbra cada decisión del procedimiento;@# Co buscamos proveer un escenario para que cada uno se ubique por si en una parcela inamovible del mismo! se afirme en ella! dueo de sus ra"ones sus decisiones! levantando un muro defensivo! sin escuchar ni albergar un punto de vista que no sea el propio# La admisión de uno en la vida del otro! o al menos algo de su narrativa! en refle'o de una realidad que s& los inclue! 'ustifica el espacio abierto para el traba'o del conflicto! priori"ando fortalecer los la"os desgastados por las circunstancias de la disputa! por el entorno dif&cil! por las premuras de la lucha cotidiana las comple'idades propias de la condición humana# Don relación a los 0otros! es decir! los persona'es secundarios! estará en manos del mediador su acercamiento o no a la sala# (e cualquier manera siempre existe el recurso de traerlos a través de las preguntas circulares! e incorporar su pensamiento! sus puntos de vista para conocer me'or acerca del conflicto! audar a las partes en sus reflexiones# ,ero el operador sabe ahora "ue ellos est&n! que integran esta red que rodea a los persona'es protagónicos que su incorporación -real o ficticia- no debe ser desdeada! cuando la b%squeda es abrir! ensanchar! ampliar la percepción de la realidad que el conflicto probablemente ha mutilado cercado sobre un solo enfoque# Donsideremos estas páginas como una invitación a esta comprensión superior de los conflictos# 6%-El mo%elo transformati#o
4A
&a fi!ura que viene a mi memoria, en libre asociación. es el delicado personaje de -El oo de Cristal/ de Tennesee illiams, la hermana del prota!onista que colecciona pequeNos animalitos de cristal que coloca en una vitrina cuida desde su silenciado mundo interior 4* Corbo 'abatel Eduardo. )o(re prácticas y escenarios en &a Trama de "apel(9alerna , )s
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Ebicados en el campo de la mediación! en esta misma l&nea de pensamiento el modelo trasformativo;2 pone especial acento en el cuidado de la relación entre las partes! por encima de las estrategias posibles para alcan"ar un acuerdo# )l principio sobre el que se desarrolla este modelo es que superadas las dificultades relacionales entre las personas! es decir! me'orados o transformados sus v&nculos! los acuerdos vendrán por aadidura! con maor compromiso de cumplimiento satisfacción de los participantes# ,ara ello el mediador traba'ará fuertemente en la revalorización personal de los participantes en crear las condiciones propicias para su reconocimiento mutuo# Ena ve" más el acento esta intensamente colocado sobre las personas sus v&nculos por encima del problema! ;4 el sentido del modelo apunta al restablecimiento de los mismos! no solo como un medio de transformación personal ! sino en %ltima instancia de la sociedad toda# Bamos viendo cómo se ligan los conceptos que hemos venido desarrollando# 6%-La tra#esa %e los actores +%el conflicto al 8&icio' pasan%o por la me%iaci)n9Los conflictos por su carácter necesario e inevitable son susceptibles de darse en todas las relaciones intersub'etivas! sin distinción# (ebe haber traba'os sociológicos o antropológicos que exploran si ha tipolog&as de conflictos más o menos frecuentes en ciertos ámbitos o fran'as socioeconómicas de una sociedad dada# ,ero la realidad que el operador encuentra son las personas penosamente enla"adas en sus desacuerdos# ,ondré ahora el acento en el pasaje del vértice como se da en el conflicto! hacia las metodolog&as de resolución de los mismos! en el afán de que éste no se angoste al transitar hacia éstas# (icho de la manera más sencilla: 5cuántas de las personas comprometidas en una situación de conflicto logran canali"ar su desacuerdo a través de un método de resolución7 Co todos los métodos de resolución de conflictos son visuali"ados por los protagonistas como aptos para ser recorridos# La 'usticia- su herramienta principal! el litigio- frecuentemente es percibida como ale'ada de las posibilidades de los sectores más depose&dos! a sea considerársela como inalcan"able por ra"ones de costos Jgastos! distancia!etc - como por ser imaginada como un camino hermético cuo recorrido requiere ciertos conocimientos técnicos que no están al alcance de todos# 0)s sabido que nuestro sistema 'ur&dico ha hecho más promesas de las que ha podido cumplir# Ia declarado más derechos de los que ha podido amparar! creando no poca frustración desencanto# )s sabido que esta brecha es especialmente ancha para los más pobres# 6ue para ellos la 'usticia es una instancia más le'ana ;8 La mediación intenta proveer un sistema amplio receptivo! donde las personas puedan acceder con menos exigencias formales! por ser más fl exible! menos costosa donde se privilegie más la palabra de los protagonistas que ;%
)arusch )usch .<. 5ol!er H. La ,romesa de Mediación 9ranica, )s.
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el lengua'e técnico- legal imprescindible para transitar el proceso 'udicial# (e all& que la mediación puede debiera a través de su acertada difusión generar un espacio que sea percibido con más familiaridad como un recurso posible para afrontar los conflictos# )n este sentido! si la mediación permite acceder a las personas a la b%squeda de una posible solución puede fortificar su natural sentido inclusivo, no sólo a en el sentido intersub'etivo conectado con sus protagonistas- que antes mencionamos-! sino también con el acercamiento de individuos hasta ahora marginados de otros procedimientos#;; La intensa abnegada labor desarrollada por los centros comunitarios de mediación da cuenta de los inmensos logros en esta dirección# ;< Los hombres mu'eres que componen en Bértice ,ersonas en los conflictos! encontrarán as& un camino más para abordar sus disputas! en un escenario donde se privilegie su participación directa sus necesidades genuinas! se acepten respeten sus códigos los acompae un mediador con la frente despe'ada! sin preconceptos! dispuesto a comprender el universo de las partes! sin imponer el propio# Se facilitará as& el acceso a la 'usticia a quienes no siempre los visuali"an como disponible# En desaf&o social insoslaable#
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&a obra -Exclusión/ de "ablo 'uáre0, que puede verse en el Malba, dice con una ima!en mucho más de lo que mis palabras intentan explicar. 7n individuo, son el torso desnudo, con jeans 0apatillas viaja afuera de un va!ón de tren, aferrado con desesperación a los extremos de la puerta cerrada. El cabello al viento su!iere la verti!inosa velocidad la mirada desesperada, la sensación de terror de quien quedó afuera no pudo entrar. ;@
Dlvidar$ muchos, sin duda, pero viene a mi memoria la labor del Centro de Mediación del Ministerio de Husticia, el Centro Comunitario de Morón, los Centros de
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