Tema 2: El hombre bienaventurado Introducción o El deseo de Dios es para nuestro bien. Cuando Dios creó al hombre, lo primero que hizo fue bendecirlo. (Gen 1:27-28) A. La Bendición del Temor de Dios 1. Bienaventurados los de limpio corazón Los que temen al Señor, con una profunda reverencia y se conforman constantemente a su voluntad son bienaventurados. bienaventurados. “Those who are truly holy are truly happy” (Matthew Henry) Rom 12:2 No os conforméis conforméis a este siglo, sino sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta. o Conformarse (suschematizo) = conformar la mente y el carácter al patrón de otro. otro. Modelarse de acuerdo a otra imagen. imagen. •
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2. Para la Gloria de Dios y para nuestro bien. Deut 10:12-13 10:12-13 Ahora, pues, Israel, ¿qué pide pide Jehová tu Dios de ti, sino que temas a Jehová tu Dios, que andes en todos sus caminos, y que lo ames, y sirvas a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma; que guardes los mandamientos de Jehová y sus estatutos, que yo te prescribo hoy, para que tengas prosperidad? o Prosperidad (towb) = bueno, agradable, placentero, excelente, rico, valioso, apropiado, alegre, feliz, prospero, entendido, benigno, amable. •
3. La bendición de la ocupación Tener algo que hacer y tener la fuerza, salud y capacidad mental para hacerlo, de modo que no somos forzados a depender del trabajo de otros. 2 Tes 3:11-12 Porque oímos que algunos de entre vosotros andan desordenadamente, no trabajando en nada, sino entremetiéndose en lo ajeno. A los tales mandamos y exhortamos por nuestro Señor Jesucristo, que trabajando sosegadamente, coman su propio pan. Las bendiciones de Dios son agradables, pero mayor es el disfrute de las recompensas de Dios. •
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B. Las recompensas de Dios 1. La mujer como vid y los hijos como plantas de olivo Sal 128:3-4 Tu mujer será como vid que lleva fruto a los lados de tu casa; tus hijos como plantas de olivo alrededor de tu mesa. He aquí que así será bendecido el hombre que teme al Señor. La vid es una planta frágil que necesita ser cuidada y apoyada, pero es muy valiosa por su fruto. Jue 9:13 Y la vid les respondió: ¿He de dejar mi mosto, que alegra a Dios y a los hombres, para ir a ser grande sobre los árboles? La bendición del hombre esta alrededor de su mesa. Bendito el que come con sus hijos, que no es forzado a estar lejos de ellos por el mucho trabajo. Job 29.5 Cuando aún estaba conmigo el Omnipotente, y mis hijos alrededor de mí. •
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2. El favor de Dios y larga vida Sal 128:5-6 Bendígate el Señor desde Sion, y veas el bien de Jerusalén todos los días de tu vida, y veas a los hijos de tus hijos. Paz sea sobre Israel. Dios responderá a tus oraciones y te dará favor. Heb 11:20 Por la fe bendijo Isaac a Jacob y a Esaú respecto a cosas venideras. (Gen 27:27-29) No solo para ver a los hijos de nuestros hijos, sino para disfrutar del fruto de las generaciones venideras. Pr 17:6 Corona de los viejos son los nietos, y la honra de los hijos, sus padres. •
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4. Ver el bien de la Casa de Dios y de nuestra nación El gozo de ver a nuestros nietos será completo cuando les veamos poseer la tierra y disfrutar de la paz que la justicia produce. Is 32:17 Y el efecto de la justicia será paz; y la labor de la justicia, reposo y seguridad para siempre. •
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