La cuenca hidrográfica del canal de panamá
La cuenca hidrográfica del Canal de Panamá tiene una superficie de 552,761 hectáreas, que es aproximadamente aproximadamente el tamaño de la provincia de Herrera. En ella se concentran los recursos hídricos necesarios, tanto potencialmente como en uso, para garantizar el abastecimiento de agua a la mayor parte de nuestra población y para el funcionamiento y operación del Canal.
Mediante la Ley 44, de agosto de 1999, se delimitó legalmente la cuenca del Canal. Esta delimitación incluyó la cuenca tradicional del río Chagres y un sector en las provincias de Coclé y Colón, que ha sido identificado por su potencial hídrico. La responsabilidad por la administración, mantenimiento, uso y conservación de los recursos hídricos de la cuenca del Canal ha sido concedida a la Autoridad del Canal de Panamá por la Constitución Política de Panamá y la ley Orgánica de la Autoridad del Canal de Panamá. Esto se deriva de la importancia que tiene el agua para funcionamiento de la vía acuática. La ley también exige que la Autoridad del Canal administre el recurso hídrico para garantizar el suministro de agua a la población de Panamá y Arraiján. Para coordinar los esfuerzos de entidades gubernamentales y la ACP para la conservación de los recursos naturales de la región, la Ley Orgánica del Canal establece la creación de la Comisión Interinstitucional Interinstitucional de la Cuenca Hidrográfica del Canal (CICH). Su objetivo principal es la integración de los esfuerzos, iniciativas y recursos para la conservación y manejo de la cuenca y promover su desarrollo sostenible. Esta comisión está integrada por la ACP, quien la preside, el Ministerio de Gobierno y Justicia, el Ministerio de Desarrollo Agropecuario, el Ministerio de Vivienda, la Autoridad Nacional del Ambiente, la Autoridad de la Región Interoceánica, la Fundación NATURA y Cáritas Arquidiocesana. Arquidiocesana. En la actualidad se realizan estudios para determinar el valor hídrico de la cuenca, de manera que se pueda evaluar este potencial en virtud de las demandas futuras de agua potable para la
población y para el funcionamiento de la vía acuática. Estos estudios también ayudarán a definir la mejor manera de aprovecharlo. También se realizan estudios sociales y culturales en la región para determinar la manera de lograr un desarrollo que redunde en beneficios reales y palpables para todos los que residen en la cuenca. Ninguna decisión se tomará sin antes considerar el impacto que las diferentes alternativas puedan tener para los residentes de la cuenca. La riqueza ecológica de la cuenca hidrográfica del Canal constituye parte importante de su conservación. En ella habitan unas 70 especies de anfibios, unas 112 especies de reptiles y alrededor de 546 especies de aves, entre las que se destacan el tucán y el águila arpía. También posee más de mil cien especies de árboles.
Corte Gaillard O Culebra Por su significado histórico, quizás ninguna parte del viaje por el Canal sea más interesante que le Corte Culebra. Durante la construcción del Canal se llamaba Corte Culebra, pero en 1915 fue bautizado con el nombre del Coronel David Dubose Gaillard, ingeniero que estuvo a cargo de esa sección durante la construcción del Canal. En la actualidad se le conoce por ambos nombres.
El Corte tiene 13.7 kilómetros de largo y fue excavado en su mayor parte en roca sólida y material volcánico. Fue aquí donde se hizo la excavación principal y donde ocurrieron devastadores derrumbes durante la construcción y poco después de la apertura del Canal. En una travesía desde el Atlántico, un buque entra al Corte en la desembocadura del Río Chagres en el Cauce del Canal, en Gamboa. Poco antes de llegar a las Esclusas de Pedro Miguel, pasa el
Cerro de Oro a la izquierda, el promontorio más alto del Canal, cuya elevación es de 179.5 metros sobre el nivel del mar. El Cerro del Contratista, en la ribera opuesta, originalmente tenía una elevación de 125 metros, pero en 1954 fue reducido a 115 metros para estabilizarlo. En la actualidad tiene una elevación de 100 metros sobre el nivel del mar. Originalmente el cauce fue excavado a una anchura de 92 metros. Durante los años 30 y 40 la recta inmediatamente al norte del Cerro Oro fue ampliada a 152.4 metros para que los grandes buques tuvieran un lugar por donde pasarse. Durante el período comprendido entre 1957 y 1971, el resto del corte fue ampliado a esa anchura. En la actualidad, el Corte Gaillard se está ensanchando de 152 a 192 metros en las rectas y hasta 222.5 metros en las curvas, lo que permitirá el tránsito casi irrestricto en dos vías de buques Panamax, aumentará la capacidad y seguridad del Canal y reducirá el tiempo de tránsito. Aporte y beneficios económicos del canal a la República de
Panamá
Siempre se habla del Canal como una ruta de tránsito al servicio mundial, pero, ¿cómo se benefician la República de Panamá y sus habitantes? Con el traspaso de la vía acuática a manos panameñas, el 31 de diciembre de 1999, la Autoridad del Canal de Panamá se incorporó por completo a la economía nacional. Su productividad se mide por la venta de los servicios de tránsitos de naves y se registra según el volumen total de toneladas netas del Canal de Panamá que se transportan a través de la Vía. Los beneficios corresponden a los aportes directos e indirectos al Tesoro Nacional y a otros aportes indirectos al país. El título XIV de la Constitución Política de la República de Panamá establece que la Autoridad del Canal tiene que ser una entidad rentable y estipula el pago de obligaciones al Tesoro Nacional. Los aportes directos al Tesoro comprenden: derecho por tonelada neta, dividendos o utilidad neta y servicios públicos. Los aportes indirectos al Tesoro abarcan los pagos por Impuesto sobre la renta, Seguro Social y Seguro Educativo. Cabe destacar que la anualidad que la administración estadounidense pagó hasta el primer trimestre del año fiscal 2000, de octubre a diciembre de 1999, fue incluida en los pagos por servicios públicos. Las operaciones del Canal generan, además, un influjo económico indirecto al país mediante la generación de empleos, el pago de salarios y la compra de bienes y servicios a proveedores locales. El Canal suministra agua potable a las ciudades de Panamá y Colón, promueve la actividad turística y contribuye al desarrollo del sector marítimo nacional. Otros aportes indirectos incluyen la capacitación de profesionales, la protección y educación ambiental y la promoción de sistemas de comunicación. Los beneficios que tenían los ciudadanos estadounidenses que trabajan en el Canal de Panamá antes del 31 de diciembre de 1999, fueron reconvertidos e incluidos en el pago por tonelada neta al Tesoro Nacional. Este aporte ascendió de $0.39 por tonelada neta, cobrada a las naves que pagaban peaje durante la vigencia estadounidense, a $0.65 por tonelada neta, en la administración panameña. Ello significó un aumento en las recaudaciones, de $88.9 millones en el año fiscal 1999, a $134.6 millones, en el año fiscal 2000, es decir un influjo adicional de $45.7
millones al Tesoro Nacional. Para el año fiscal 2001, se estima un incremento en el pago por tonelada neta a $151.8 millones y se prevé que para el año fiscal 2002, alcance la cifra de $154.1 millones.