La bruja de la montaña Gloria Cecilia Díaz (Adaptación a teatro) Escenografía:
Personajes: 1. Alina: 2. Bruja ojos verdes. 3. Bruja de pelo blanco: 4. La bruja gorda de Malia: 5. Elia: 6. Árbol 1: 7. Árbol 2: 8. Árbol 3: 9. Árbol 4: 10. Montaña: 11. Viento: 12. Lechuza: 13. Ardilla Mamá: 14. Ardilla: 15. Cuervo: 16. Sol: 17. Pájaro 1: 18. Pájaro 2: 19. Grillo 1: 20. Grillo 2: 21. Relator 1: 22. Relator 2: Música: Alina sale y da vueltas hasta estrellarse contra los árboles que rodeaban su choza y la escoba de hace pedazos. Alina: ¡es la quinta escoba que rompo! montaña más pequeña recogió recogió su sombrero sombrero y miró Relator: la bruja de la montaña con tristeza la escoba voladora. Alina : ¡Ay! ¡Ay! Mi cara, siento que me arde. (Furiosa) Furiosa) ¡Voy a tumbar todos estos árboles! ¡Todos! Música: de árboles tristes
Relator: Los árboles se estremecieron, sus ramas se agitaron con desesperación. Árbol 1: nos va a hacer daño!!! Árbol 2: quiere acabar con nosotros Viento: (entra volando) laaa brujaaa destruiráaaa laa montañaaa… Alina: ¡los voy a tumbar! No puedo estrellarme de nuevo. Las escobas voladoras cuestan mucho dinero. ¡No dejaré ni un solo árbol en esta montaña! (La bruja se entra su choza y se oscurece el escenario) Relator: en la oscuridad de la noche, los árboles susurran, lloran y discuten la manera de salir de semejante apuro. Árbol 1: amamos a esta montaña!! Árbol 2: nacimos aquí y somos parte de ella. Relator: los animales, también sentían la tristeza de los árboles y la montaña. La lechuza del viejo roble, las ardillas, los grillos, todos están muy asustados.mos Lechuza: van a tumbar mi casa, qué horror!! Y me separaré de mi amigo! este viejo roble. Relator: Las ardillas no habían podido dormir toda esa noche, estaban reunidas alrededor de un cuervo que estaba de paso. Cuervo: les aconsejo irse a otra montaña… Mamá ardilla: nosotros pertenecemos a esta montaña, estamos aquí desde que nacimos y no pensamos abandonarla. Ardilla: podríamos hablar con las otras brujas. (La lechuza hace como si casi se cae del árbol) Lechuza: ¿llamar a otras brujas? ¡Qué ardilla más loca! Grillo 1: vamos a morir…y no tendremos más que comer Grillo 2: y mudarnos a esta altura, no está nada bien, yo no quiero abandonar a mis amigos. Cuervo: no es mala idea. Relator: así discutieron toda la noche, hasta… (Se aclara el escenario y aparece el sol que se pasea entre los árboles) Sol: iluminaré toda la montaña y atravesaré el techo de la casa de la bruja y la despertaré. Relator: Alina se despertó… de pronto recordó que había algo importante que debía hacer ese día. Alina: ja, ja, ja…hoy haré una preciosa pista de aterrizaje. Limpiaré de árboles mi montaña y así no volveré a estrellarme. Relator: la montaña se quedó sin aliento cuando vio salir a la bruja con su hacha al hombro. Montaña: ojala no corte todos los arboles, no quiero quedarme sola… (Entra volando el viento)
Viento: soplaré y soplaré por todos Relator: Los animales abandonaron sus cuevas, sus huecos en los árboles, sus nidos, para formar una barrera entre la bruja y los árboles, pero la bruja pronunció unas palabras mágicas. Alina .apartichín, apartalón en este momento los aparto yo. No Pájaro 1: picotearemos su sombrero y así se molestará y no lo hará. Pájaro 2: y yo le picotearé la mano para que no tome el hacha. Relator: la bruja no sintió nada, y tampoco oyó un gemido sordo que alía del corazón profundo de la montaña más pequeña. Relator: siguió su camino rumbo a los árboles. Iba silvando, imaginando que la montaña ya estaba pelada, libre de troncos y ramas, libre de todo lo que le impidiera un perfecto aterrizaje. Relator: de pronto algo la obligó a detenerse… (Sonido de aterrizajes de brujas) Relator: ese sonido lo conocía muy bien, el sonido de las escobas en vuelo. Mamá ardilla y ardillas: ¡¡¡¡las brujas!!!! Relator: todos miraron al cielo y vieron aparecer en esa mañana una fila de bujas sobre sus escobas voladoras. Las brujas sobrevolaron la choza y aterrizaron sin tocar la rama de un árbol. Bruja ojos verdes: ¿Qué vas a hacer Alina? ¿A dónde vas con esa hacha? Alina: yo…pues…bueno. Bruja ojos verdes: vas a cortar los árboles, ¿no es verdad? Anoche oímos el murmullo desesperado de la montaña más hermosa y más pequeña. ¡No!, Alina, tú no cortarás los árboles. Ardilla: (mira a los animales) ven…yo tenía razón, no era mala idea llamar a las brujas. Bruja de pelo blanco: si acabas con los árboles no tendrás más sombra, Alina. Malia: si cortas los árboles, los riachuelos se secarán, los pájaros se irán a otro lado. Las ardillas partirán en busca de otro abrigo. Elia: las flores morirán, como no habrá árboles no tendrás frutos. Con las flores, las mariposas y los pájaros, se irán los colores de la montaña. Bruja ojos verdes: ningún trino alegrará la mañana, el canto de los grillos no te adormecerá en la noche. Bruja de pelo blanco: probablemente ni siquiera el arcoíris volverá el arcoíris en una montaña tan triste. Alina: ¿cómo haré para aterrizar? Cada vez me estrello contra los árboles. Bruja de pelo blanco: aprenderás a aterrizar sin tocar la rama de un árbol. Nosotras te enseñaremos. Como no hay tiempo que perder las clases empezarán ahora mismo. ¡Malia! Tú le enseñaras, y tú también Elia.
Relator: el viento sopló con alegría, a su compás, los árboles y los animales bailaron gozosos y la montaña entera respiró aliviada. Cuervo: adiós y que todo salga bien, nos volveremos a ver. Relator: los pájaros revoloteaban alrededor de las ramas. Malia, Elia y Alina sonrieron ante el bullicio de la montaña Alina contempló su escoba, sin dudarlo se subió a ella de un salto… Malia: ¡ah no! Esa no es manera de subirse a una escoba voladora. ( Alina se bajó precipitadamente tropezó y cayó, Elia se ríe ) Malia: con razón te estrellas tanto. (Tomó con delicadeza la escoba y le mostró la forma de subirse y bajarse sin prisas) Malia: no hay que poner la escoba en el aire, Alina. Simplemente apoyas el ramaje en el suelo y ya está. Luego la tomas como si fuese un caballito, inclinas la parte de adelante y así ella comienza a despegar lentamente. Elia muéstrale… (Elia tomó la escoba con suavidad, la despegó y efectuó un pequeño vuelo alrededor de Alina, mientras dice) Malia: a una escoba voladora hay que tratarla con suavidad y cariño. Es más ligera que el viento. Es como una ramita que puede quebrarse al menor movimiento brusco. Relator: Alina miró la escoba como si la viera por primera vez. Se dio cuenta que no se barría con una escoba voladora. Alina: yo sé volar, pero no sé aterrizar con tanto árbol. Malia: ¡no! Alina, los árboles no son el verdadero problema. Ya verás ( Malia toma sus dos escobas y voló suavemente, hasta que aterrizó entre Elia y Alina) Alina: (con cara de asombro)…nunca podré hacer algo semejante. Elia: sí que podrás, vamos toma tu escoba ¡¡ no!! Así no… con calma vuelve a comenzar (mientras se rascaba la cabeza con impaciencia) ( Alina sube a su escoba con delicadeza y despega con Elia). Relator: Alina despegó seguida de Elia, se sintió liviana, contenta…todo iba bien hasta que le dio por rodear un pino como había hecho Malia, … perdió el control y se puso a dar vueltas como loca. Alina: ¡¡¡¡¡¡aaaa!!!!!!!!!!!! (los animales y arboles se esconden) Malia: sapos y centellas!!!!! Alina frena!!!!!! Habla a tu escoba, pídele que vaya más despacio!!! Alina: escobita…., no tan rápido, por favor… Relator: Alina logró dominar a la escoba pero mientras iba aterrizando, se enredó en la rama más baja y se estrelló de narices contra el tronco. Elia: ¡ranas y centellas!!!
Alina: ya he roto otra escoba….. Elia: no, no se ha roto…. Relator: con el paso de los días, Alina fue descubriendo las maravillas del vuelo y los secretos del aprendizaje. Los animales dejaron de esconderse y las ramas dejaron de temblar. El viento le acarició el rostro con dulzura cuando ella, allá en lo alto, rodeo al hermoso pino y aterrizó luego sin tocar la rama de un solo árbol. Todas las brujas estaban contentas, vinieron para contemplar el aterrizaje más perfecto que Alina había hecho jamás.