PROCESO DE HOMINIZACIÓN Y HUMANIZACIÓN INTRODUCCIÓN Dentro de los tratados filosóficos existe unos muy importante que es la antropología filosófica, que se centra en el estudio del hombre. Poder analizar en sí lo que es el hombre es de ver infinidades de aspectos, es un ser inacabado que se puede estudiar desde diferentes campos científicos, pero en este caso nos vamos a centrar en ver cómo ha sido el proceso de hominización y humanización. Es preciso tratar de ver como referencia los antecedentes físicos, cósmicos y biológicos; son procesos a tener una idea de cómo fue posible la creación del mismo cósmos, planeta y la vida en las especies concluyendo en el mismo hombre. Para continuar la explicación de lo que fue la solemne aparición del hombre como hominización, esa distinción notable que tiene con la especie animal, que se distingue por el salto cualitativo “noosfera” que terminará con una breve explicación de lo que es el nacimiento procesual del hombre. Esta visión en general nos ayudará a entender el tercer capítulo, la evolución del hombre por humanización, hecho fundamental donde se pondrán sobre la mesa algunas características importantes que nos ayudan a comprender este acontecimiento y algunas fases que las constituyen. Es de esta forma cómo hemos hecho este procedimiento, que en lo personal es muy sintético en la información, ya que se requiere un tiempo y dedicación a cada aspecto que presenta la ciencia, la filosofía y la teología, para dar aspectos y hacer algunas relaciones que tenga una mayor coherencia para el mismo hombre, como fue el esfuerzo de Pierre Teilhard de Chardin, que aquí mismo lo referimos con sus aportaciones científicas, filosóficas y teológicas, que nos han ayudado a tener un criterio vas de visión en cuanto al tema.
I. ANTECEDENTES FÍSICOS, CÓSMICOS Y BIOLÓGICOS, QUE PRENUNCIAN EL PROCESO EVOLUTIVO. 1.1. Concepciones de la génesis del mundo. El hombre como ser-histórico, ha manifestado su inquietud natural por querer descubrir algo más, conocer la realidad, el fenómeno que se le impone, como ese “ser-en-el-mundo”1 que alude Martín Heidegger, ese ser-allí que esta abierto a las diversas posibilidades que se le presentan en “relación-con” todos los entes “presentes-en”. “...como el término heideggeriano [Da-Sein:
ser-allí ]no califica la existencia humana como ser allá o allí [espacio], sino como
apertura a los entes y, en ellos, al ser”. 2
Consientes de esta naturalidad antropológica, nace esa inquietud de buscar la verdad, ese deseo de conocer, como el Estagirita lo refiere al iniciar su libro de metafísica, “todos los hombres desean por naturaleza saber”.3
Por tanto, nace en el hombre la “preocupación” y la cuestión que surge en poder saber qué es lo que constituye el mundo (luego vendrá la cuestión en-sí del hombre), aparecerá entonces esa inquietud por saber la causa prima del mundo; y por referir esto nos remonta a otro término heideggeriano: “...la experiencia más inmediata que afecta al hombre en su relación al mundo: la [preocupación] (Besorge) como disposición afectiva (Befindlichkeit: estado de ánimo) que surge en el hombre al tener que existir en contacto con los entes concretos del mundo sirviéndose de ellos. 4
Entonces, esta preocupación del hombre por saber la causa prima del mundo nace desde la antigüedad, que consideraban a un “Ser superior” como la causa, y lo expresaban culturalmente con mitos para transmitir un mensaje religioso-moral, tocando la poesía para explicar cómo apareció el mundo; las primitivas culturas fueron “China, Japón, India, Babilonia, Egipto, Fenicia, entre otros. Luego vendría con una influencia más “intelectual-científica” los antiguos jónicos, los griegos, que buscaban el primer principio con diversas teorías, desde algunos elementos como 1 HEIDEGGER Martín, “Ser y tiempo”, FCE (Fondo de Cultura Económica), México, 2007, p. 65 2 ALFARO Juan, “De la cuestión del hombre a la cuestión de Dios”, Sígueme , Salamanca, 2002, p.49 3 ARISTÓTELES, “Metafísica”, Porrúa, México, 1981, p. 5 4 ALFARO Juan, “De la cuestión del hombre a la cuestión de Dios”, Op. Cit. p. 50
el aire, el agua, el fuego; después los jónicos más actuales proponían nuevas teorías como el átomo, el espíritu, concluyendo con un sistema más lógico el cual refiere que en la eternidad de la materia y de movimiento se producía por un Motor inmóvil o Dios. Es aquí donde el Medievo se va a sostener fuertemente, ya que no se preocupó por el problema del cómo surgió el cosmos, sino que siguió con esta idea del Motor inmóvil. Hasta que la modernidad comenzó a inquietarse por el modo de cómo surgió el mundo, cosa que actualmente se sigue investigando. Después de a ver tenido un breve recorrido histórico, señalando el ser inquieto del hombre, viene entonces la parte que le compete prácticamente hacer, dar una explicación con avances científicos.
1.1.1. Ciencia evolutiva. Este proceso lo iniciaremos aquí, viendo sencillamente algunos rasgos que nos vayan ayudando, ha tener una visión en general de cómo se ha ido logrando la hominización y humanización. Hoy la ciencia nos propone la teoría de la expansión del universo, que se ha elaborado por algunos científicos haces aproximadamente 50 años, donde comprueban las distancias de las galaxias por medio del “efecto depple”. Luego de todo este proceso científico, se formula una hipótesis, la cual muestra que se llega al momentos máximo de la condensación de la materia cósmica, es decir, esto va coincidir con el total de la masa comprimida de la materia y ya que una vez se forma la materia, coincidirá el momento de su creación (materia). Entonces, aparecerá la famosa teoría del “Big, Bang” según Hubble, hace aproximadamente 15,000 millones de años. Por tanto, al explotar todo este conjunto de materia, el espacio se llena de fluidos, se empieza a expandir en todo el espacio la materia, luego, por la unidad máxima de energía radiante se empiezan formar las primeras partículas, es decir, los primero átomos que fueron de hidrógeno, conformados por protones (núcleo de carga positiva) y un electrón (de carga negativa). Luego vendrán dos generaciones (miles de millones de años después). La primera: se refiere a las estrellas formadas de aquellos elementos, mediante la fusión de núcleos de hidrógenos, por tanto, al formarse y al explotar inicia la segunda generación: que consiste en la aglutinación de las estrellas en las galaxias.
Dentro de millones de galaxias (vía láctea) se formó, hace aproximadamente 5. 000 millones de años (el sistema solar), por atracción del polvo cósmico y debido a la gravedad y el disco que gira alrededor del sol que formaban gases, polvo, cascotes, se fueron condensando y así se fueron formando los planetas; es de esta forma como aparece la tierra.
1.1.2 Visión filosófica-teológica en: Pierre Teilhard de Chardin. Dentro del campo filosófico varias son las teorías evolucionistas que buscan interpretar los hechos comprobados por la ciencia. También en el materialismo de Marx que reduce su concepción en mera mecánica, siguiendo el ejemplo de Spencer, que reduce todo, aun la vida humana intelectual, moral y religiosa a mero proceso mecánico material. Pero del otro lado Bergson refuta esto, basando la su propuesta en que ellos falsean la realidad, reduciéndola a espacio material, cuando hay además otra dimensión no espacial. Nos referimos a la dimensión espiritualista, la cual tendrá implicaciones tanto filosóficas y teológicas. Pierre Teilhard de Chardin (1881-1955), buscó la coherencia de la ciencia, filosofía y teología; lo cual lo hace un pensador reconocido a nivel mundial dentro de las ramas ya mencionadas. En resumidas cuentas, éste pensador (sacerdote) propone un método eficaz para tener una mayor visión desde el punto científico: “El método de Teilhard no es sólo experimental ni sólo filosófico ni sólo teológico, sino de índole “hiperfísica”, el cual, del conjunto de los fenómenos aducidos por la ciencia, muestra una visión filosófico-teológica del Universo. Consiste, no mirar físicamente datos aislados sino en “ver”, lo que equivale a interpretar globalmente los datos científicos. Se nos invita, pues, a “ver” la materia del universo como una “complejidad creciente”, es decir, tanto en número de elementos debidos a la “energía tangencial” (fuera de la materia), con la cual se expande y multiplica, como a su organización debida a la “energía radial” (dentro de la materia), que lleva a centrarse o unirse interiormente.5
Esto que dice Teilhard, tiene una gran importancia y mi parecer una mayor lógica y coherencia, al mostrar esta “dialéctica evolutiva” de fuerzas contrarias (tangencial y radial), 5 VÉLEZ CORREA Jaime, S.J., “El hombre un enigma”, CELAM (Consejo Episcopal Latinoamericano), México, 1995, p. 340
que tiene una gran aplicación antropológica; ya que estas energías tanto pueden tener de alguna manera relación con el mismo ser del hombre, ya que “tangencialmente” el hombre esta llamado a salir de sí y actuar en el mundo; y al igual “radialmente” esta invitado para volverse a sí mismo, a una autoperfección, por tanto, gracias a estas fuerzas evolutivas “tangencial y radial”, agregando tanto la “cosmogénesis: litosfera” y la “biogénesis: biosfera” (las cuales explicaremos en los siguientes puntos más adelante) son procesos materiales pero que tendrán gran relación con lo que es la “noosfera” o “antropogénesis”, que tiene como significado como la capa del “espíritu” o la misma actuación del mismo Dios en el hombre (más adelante los veremos).
1.2 EXPLICACIÓN CIENTÍFICA DEL CÓSMOS Y LA VIDA. 1.2.1 Cosmogénesis. Como ya se mencionaba la cosmogénesis = litosfera, que comprende todo el “universo material” estudiado por diversas ciencias como la “astronomía, química, física, astrofísica, hasta la misma cuántica y la infraatómica. La unión de las partículas cósmicas con los átomos se han convertido en moléculas, que con el tiempo se fue agrandando en “megamoléculas” luego en pilares de células (las cuales se consideran como primer elemento de vida y se le denominan “pre-vida”). Es de esta forma que tenemos al primer “ser vivo”, es de esta manera como comienza a generarse la vitalización o preparación para la vida (pre-vida). Es así como lo refiere este pensador francés Teilhard de Chardin: “...ha afirmado que solamente existe un modelo estructural de vida., el modelo a nivel físico es la célula. (teoría
celular propuesta en 1839 por Schwann, en su tratado “las investigaciones microscópicas sobre la coincidencia en la estructura de los animales y plantas”). La vida propiamente dicha comenzó cuando empezó a existir la primer célula.6
Es así como se anuncia la cosmogénesis y la influencia que tiene, la cual prepara a la biogénesis.
6 NUÑEZ DE CASTRO Ignacio S.J., “Teilhard de Chardin: el hombre de ciencia y el hombre de fe”, CFC (Cuadernos de Fe y Cultura), Puebla, 2006, p. 19
1.2.2 Biogénesis Lo que constituye a la biogénesis es la vida misma que se va generando, nace y se desarrolla. La ciencia enseña que la vida comenzó hace 4.000 millones de años, al nivel de células; todo este proceso de evolución en síntesis fueron los ramos “fylum” de los que brotaron los vivientes que duro 600 millones de años, después la tierra se enfrió. Empiezan luego aparecer los organismos fósiles que tienen unos 3.800 millones de años, luego vinieron bacterias, algas azules; las algas verdes hace unos 1.500 millones de años. Más adelante empezó a crecer el árbol de la vida con muchas diferencias de seres (cabe decir que esto se fue dando tras centenares de millones de años), hasta llegar a los antropoides (forma humana). Por tanto, la biosfera de divide en dos: vegetal y animal. Para la especie animal todo este proceso de “ramificación”7 que presenta Bergson, influye en el sistema nervioso, todo este en cuanto a las energías ya vistas la tangencial y radial, que se van concentrando en el cerebro y se centra en la conciencia por la energía radial (para esto, ya han pasado largos años). Con el tiempo aparece la “pre-humanidad” en los animales, llamados “primates” o “antropomorfos (antropoides), que son los “pógidos, gibones, chimpancés, gorilas. En rasgos generales es así como podemos presentar la biogénesis, pero, hay otro dato sumamente importante, el cual se va estar haciendo referencia siempre; y es que la ciencia no puede puntualizar la linea divisoria entre el hombre y el animal, se requiere una explicación filosófica, el cual explique que no pudo darse este “salto” por mero aumento cualitativo de la materia (como sostenía el marxismo), sino que se requiere un verdadero “salto cualitativo”, es decir, un paso a otro ser esencialmente superior a todo. Ahora para ser más específico vamos a ver de manera general algunas concepciones científicas que se han tenido sobre la evolución y la multiplicación de las especies.
1.2.3 Consideraciones sobre la concepción científica de la evolución y multiplicación de las especies. Sencillamente vemos que la ciencia ha adoptado la “evolución biológica y cosmológica”, pero hay un aspecto importante donde abre a campo a la filosofía y teología, para poder meter las manos, esto es, la perfección que hay en la naturaleza, el proceso que sean ido gestando, es decir, las distintas duraciones de los periodos, para concluir en un aspecto 7 VÉLEZ CORREA Jaime S.J., “El hombre un enigma”, Op. Cit., p. 344
“teleológico”, con fines coordinados y progresivos, siempre hacia una unidad perfecta. Dentro de los aspectos teológicos, la teoría “fixista” sostenía que todas las especies fueron creadas por Dios, Él es el que crea, es la omnipotencia de la Causa Primera. Por tanto, esta visión nos hace ver que la ciencia sostiene que los seres vivos evolucionaron en seres cada vez más perfectos, desde su simple anatomía, la embriología (que tiene relación con la ontogénesis: desarrollo de cada individuo desde su embrión y la filogénesis: proceso evolutivo) y la genética que observa los cambios que hay tanto de raza y especies. Ahora, la multiplicación de las especies ha dado mucho de que hablar y se han desarrollado diversas hipótesis. J.B. Lamarck:
propuso dos leyes para explicar la diversidad de las especies. La primera:
la necesidad es la que crea el órgano y la segunda: el carácter adquirido se transmite por generación; pero esta hipótesis no fue buena, hubo muchas contradicciones. Charles Darwin:
propone los cambios en las condiciones ambientales (clima, alimento)
provocan la variación de los seres, obrando sobre sus cuerpos o modificando sus células reproductoras, en grandes rasgos recibe todo este el nombre de “ley de la selección natural”, la cual esta tesis sí se a admitido, más en el neodarwinismo. Hugo de Vries: propone el mutacionismo en los genes, producidos espontáneamente. La
cual fue aceptada. Guénot: propuso la teoría de
la “adaptación”, los cuales la especie se adapta al cualquier
ambiente, el cual es un elemento fundamental para subsistencia de la especie. En groso modo se ha intentado dar a conocer algunas referencias sobre las concepciones evolucionista y multiplicación de las especies, el cual, no se trata de dar explicaciones sumamente científicas, sino apoyarnos en algunos datos en cómo se va dando este proceso.
1.2.4 Visión filosófica-teológica. Ahora desde otras visiones podemos decir que la ciencia irá siempre al fenómeno y dará datos empíricos perfectamente en cómo aparecen, pero, no cómo son en sí; por tanto, es necesario tomar algunos puntos para concluir con todos estos antecedentes que se han mencionado, iniciando con lo qué es la vida (no se trata de dar una amplia explicación, sino un breve comentario en general).
Por qué hablar de la vida misma, el punto es poder introducir al acontecimiento antropológico. “La vida aparece experimentalmente como capacidad de movimiento espontáneo, es decir, producido por el mismo que se mueve y no por otro. Así, el ser cambia por sí mismo o se mueve espontáneamente, decimos que lo hace mediante una acción llamada “inmanente”. Y precisamente, eso es lo que encontramos en los vivos: crecen, se nutren, se reproduce y se trasladan, no por la fuerza exterior a ellos, sino por sí mismos. 8
Es así como podemos concebir el concepto de vida, como eso que hace que un ser natural tenga la capacidad de realizar alguna actividad inmanente que lo vaya llevando a una autoperfección. Ahora es preciso ver la naturalidad del ser vivo, para tener una comprensión más general de ello, y para esto es necesario dividirlo en tres punto: El vitalismo de la escuela de Montpellier:
la idea es resaltar que el ser vivo está
constituido por un principio vital, que ejerce fuerzas vitales, de naturaleza inmaterial. No esta sometida a las leyes comunes de la física y de la química., sino que es una substancia distinta del cuerpo. La materia y la vida están yuxtapuestas. El mecanicismo:
intenta aplicar a los vivos los métodos que han tenido éxito en el
campo de la materia, por tanto, su idea principal es que todo, en un ser vivo, es reductible a las leyes fisicoquímicas. Todo se explica “mecánicamente”, es decir, por movimientos. El vitalismo aristotélico (hilemorfísmo):
la idea es, la existencia como finalidad en el ser
vivo. Se le llama alma al principio vital del ser vivo dotada de actividad, por tanto, es el alma la que hace que el ser vivo sea vivo y capaz de moverse. 9 De esta forma damos esa visión general de lo que se concibe sobre la misma vida, pero, todo tiene su origen, y la génesis o causa de la vida requiere que sea una causalidad superior a la materia y que no pudo ser sino la del Ser Supremo. Ahora desde una postura teológica referimos a Karl Rahner, teólogo alemán (19751984): “la causa Infinita que, como Acto Puro, precontiene toda realidad, es un elemento constitutivo de la causa finita como tal (en acto), sin convertirse en una instancia interior de la causa finita como ser. Ello significa que la causa finita se puede trascender a sí misma, 8 Ibid. p. 352 9 VERNEAUX Roger, “Filosofía del hombre”, Herder, Barcelona, 1971, pp. 20-24
mediante su actividad propia, solamente porque la Causa Infinita es elemento constitutivo de esa casualidad, ya que las causas segundas o creaturas y sus acciones, no pueden darse, si Dios no actúa en y por ellas. 10
De esta forma concluimos estos antecedentes físicos, cósmicos y biológicos, no tomando una postura en contra de la evolución, sino buscando explicaciones, formando criterios más amplio de diálogo y conocimiento; además, tratando de mostrar un proceso antropológico.
II. APARICIÓN DEL HOMBRE POR “HOMINIZACIÓN”. El proceso que se ha recorrido hasta ahora es “cosmogénico” y “biogénico”, claras y fundamentales bases para la preparación del mismo hombre. Llega la hora de dar a conocer este periodo evolutivo que le compete al hombre protagonizar. “El momento de la aparición del hombre es el más solemne, porque toda la evolución apunta hacia él y con él la suerte de la evolución pasa a sus manos”. 11
2.2. Semejanza y distinción en el hombre y el animal. La ciencia nos dice que el mismo hombre viene del mismo animal, sí, hay muchas semejanzas las cuales pudieran parecer que se procede de allí (que no se esta afirmando nada de su procedencia), es necesario dar algunas referencias para hacer notar las distinciones que hay entre el hombre y el animal. Ambos tenemos la capacidad sensitiva, somos afectados por los objetos sensibles, al igual, si son placenteros nos inclinamos a ellos y si son desagradables nos retiramos. Por tanto, aquí existe este dato sensitivo, el cual nos hace semejantes, pero distintos a la veces, porque, el animal tiene conciencia sensitiva como el hombre, pero no la entiende, hace las acciones pero sin conocerlas, es un instinto, un reflejo mecánico; en cambio, el hombre, sabe lo que es un objeto, dirige sus acciones intencionalmente. Por lo tanto, el animal no reflexiona como el hombre, aunque tengan conciencia los animales no pueden volver sobre sí y reconocerlas, sin embargo, se les considera a los animales que poseen cierta inteligencia, pero con el echo de no poder tener esa autoconciencia eso lo hace menos. En definitiva, el animal aprende instintivamente, se comunica entre sí, en cambio el hombre, 10 VÉLEZ CORREA Jaime S.J., “El hombre un enigma”, Op. Cit. p. 356 11 Ibid. p. 358
aprende intelectualmente, se comunica, pero he aquí la gran diferencia, en la comunicación el lenguaje que aplica es simbólico, con signos, palabras que son entendidas y que llevan en sí ideas que transmiten algo más profundo y que son, por el echo que son trasmitidas por una persona, ella esta consciente que al que se las trasmite, podrá recibirlas, entenderlas y responderlas a la vez. Es así como se puede hacer unas sencillas comparaciones o semejanzas, pero la diferencia esta (a pesar de la evolución de la materia corpórea) que el animal no posee racionalidad, la cual, hace una total y gran diferencia con el mismo humano, el cual no se puede comparar con el animal (aunque muchos lo han echo análogamente) porque el mismo hombre es por mucho, superior al animal, simplemente por la razón.
2.2.2 El salto cualitativo de la vida: noosfera. Desde una definición podemos decir qué se entiende por “noosfera”, significa la capa del “espíritu”. Es decir, aquí es el momento preciso donde gestan dos etapas importantes: “noosfera y antropogénesis”, como también se entiende como la “hominización y humanización”. Partimos desde la naturalidad de la noosfera, que se distingue por esa “reflexión” o capacidad del hombre de volverse sobre sí mismo, el cual, lo propio de la noosfera será evolucionar, no únicamente en el sentido de interiorizarse, profundizar y desarrollar el pensamiento y la autoconciencia, sino el sentido de salir de sí y actuar en el mundo externo a él (como ya se mencionaba en las páginas anteriores en el punto 1.1.2). Ahora podemos hacer algunas conexiones (aunque ya se hayan referido entre la ciencia, filosofía y teología sobre esta cuestión)para poder cerrar de modo más completo este breve punto. Retomando este aspecto científico, es preciso ver en la materia del universo como va en un proceso de crecimiento y es aquí donde ubicamos lo que es la “energía tangencial” (fuera de la materia), lo que se va expandiendo y multiplicando, pero también hay una organización “en” debido a la “energía radial” (dentro de la materia) que la lleva a centrarse o unirse interiormente. Ahora, desde un punto filosófico-antropológico podemos referir la analogía que expresa este autor: “...el eje de la noosfera será un plegarse más y más hacia el interior o “dentro”, es decir, autoperfecciónarse la persona e intercomunicarse la humanidad por “conspiración
reflexiva” o comunicación de conciencias”. 12
Entonces, todo este proceso de hominización y humanización lo conjugará la teología, llamando proceso de espiritualización, que sólo se llevará acabo mediante la libertad y amor (temas que son bastantes amplios por definir en este momento). En conclusión: si el proceso evolutivo comenzó en la “litosfera” con la vitalización, es decir, con el prenuncio de la vida misma, y le continuó la “biosfera” con la hominización o también llamada antropogénesis (la cual se explicará más adelante), por tanto, seguirá la humanización hasta culminar en la Cristogénesis (ya en campos de teologías, los cuales no abundaremos). Es evidente ver en la misma ciencia como el mismo hecho evolutivo se interpreta desde la mera materia, pero desde otra visión o postura podemos ver que hay un “por qué” y un “para qué”, es decir, que tuviera sentido. Las pocas referencias que hemos dado en este trabajo sobre la “litosfera y biosfera”, de forma general han mostrado que desde lo inorgánico va evolucionando hacía lo orgánico o vida; de tal manera podemos mencionar que de alguna manera esto va en dirección hacía el desarrollo del espíritu, hacía un ser más consciente, que sea capaz de poderlo analizar y comprender de alguna forma, por tanto, toda la evolución apunta hacía el mismo ser antropológico, es decir, el mismo hombre.
2.2.3 Antropogénesis: como nacimiento del hombre. Un punto importante y baste amplío en desarrollar es la antropogénesis, ya que comprende toda las gestación de mismo hombre, pero, para no extendernos tanto y centrarnos sólo en el proceso, vamos a ver algunos puntos brevemente. El salto cualitativo que se mencionaba anteriormente se distingue por la misma “cualidad”, ya que el mismo animal no puede derivar cualidades que ahora el hombre posee. Por el poder del raciocino del hombre que lo hace más fuerte, capaz e inteligente ante otros seres, lo cual ha desarrollado grandes inventos, la capacidad que tiene para socializar humanamente lo cual forma un espacio cultural, esa capacidad reflexiva como ya decíamos, es consciente que sabe y comunica ese saber, es decir, es consciente de su yo, por tanto, todo esto tiene un termino, que es un proceso de “humanización”, que cada vez se va haciendo más perfecto, se va “personificando”, madurando es todos sus aspectos. 12 Ibid. p. 366
Es así como se puede distinguir este proceso, que de las diferencias cualitativas que no se derivan del animal. Podemos concluir así, pero es difícil ya que no se ha llegado a un determinado hecho preciso, que indique que así fue: “Si se admite la evolución de los seres vivos inferiores al hombre, es natural pensar que también para el hombre haya habido una evolución. Es verdad que el hombre, especialmente por sus manifestaciones psíquico-intelectuales, se diferencia netamente de cualquier animal, y esto requerirá ulteriores aclaraciones, pero también es verdad que el organismo humano tiene muchas propiedades
en común con el mundo vivo inferior. Las
afinidades más estrechas son respecto al grupo de los primates (antropoides).”13
Por tanto, todo este proceso el cual se presentará es demasiado largo, es por eso que se ha decidido mostrar las formas principales de la evolución humana: El Parapithecus: hace 40,000,000 de años, con 500 cm3 de volumen craneal. El Ramapithecus: hace 15,000,00 de años, con 500 cm3 de volumen craneal. El Australopithecus: hace 3,000,000 de años, con 600 cm3 de volumen craneal. El homo habilis: hace 1,500,000 de años, con 700 cm3 de volumen craneal. El homo erectus: hace 1,000,000 de años, con 800 cm3 de volumen craneal. El homo sapiens neanderthalensis: hace 200,000 años, con 1.500 cm3 de volumen craneal. El homo sapiens sapiens (Cro-magnon): hace 20,000 años, con 1,300 cm3 de volumen craneal (actual).14
Entendemos que todas estas especies no son sino intentos para dar una explicación de cómo se va llegando a la conciencia superior en que nos encontramos, y a partir de la cual seguimos evolucionando hacia la “súper-consciencia”, es decir, todo lo que le compete a la humanización. Se menciona por tanto, que los predecesores del mismo hombre debían de tener ciertos caracteres al mismo hombre, para que pudiera darse todo esa coherencia; ya que todo esto tiene que llevar ese proceso generativo, un mismo fin, acciones concatenadas que lleven de-algunamanera la mismo fin creacional del mismo hombre: “...lo cual se verifica solamente en el proceso de filiación por el que un hombre es generado por otro hombre; en el caso del hombre, 13 LUCAS LUCAS Ramón, “El hombre, espíritu encarnado: compendio de filosofía del hombre”, Sígueme, Salamanca, 2005, p. 66 14 Ibid. p. 67
la naturaleza es superior respecto a la del animal y, para más perfección, es de orden espiritual; por lo tanto necesita de la intervención directa de Dios”. 15
Aquí se entra en otro tema amplio para abordar, del cual sí es de interés propio pero no en cuanto al esquema en presentar, el tema es “la creación del alma espiritual”. De esta manera concluimos toda esta aparición del hombre que sin duda alguna, es muy difícil agotar y sobre todo dar una específica explicación, sólo hemos puesto algunos datos que más sobre salen y que se necesitan con lentes científicos, filosóficos y teológicos abordar, para dar una respuesta equilibrada y coherente.
III. EVOLUCIÓN DEL HOMBRE POR “HUMANIZACIÓN”. Como capítulo concluyente es la “humanización”, donde aparece este fenómeno de la humanidad. Todo tiene su origen en la misma noosfera, esa capa espiritual ya mencionada que se expande y se desarrolla mediante el mismo ser del hombre.
3.3.3 Características. Hay algunas características que nos interesan compartir y resaltar. Como ya hemos mencionado y creo que siempre será necesario recordarlo es, la espiritualización del hombre, es decir, la noosfera, que es como la propiedad primordial,ya que esto en conjunto refiere a esa misma consciencia individual del hombre, no en cuanto al hecho de reflexionar, sino que es consciente y capaz de trasmitir eso que piensa. Gracias a su capacidad de comunicación es consciente de que la relación que interactúa con el otro, lo hace ser relacional, por el cual forma vínculo de vida o cultura social; en compartir pensamientos, organizarse, entre otras cosas; todo este conjunto es por la misma noosfera, esa energía espiritual que ha evolucionado y que lo va llevando hacia una humanización. Por último, que es algo sorprendente de la materia es la adaptación que tiene el hombre en la naturaleza, usar de ellas para fin propio y común. Estas son algunas nociones características de esta humanización, ahora veas algunas fases que constituyen este proceso.
15 Ibid. p. 69
3.3.1 Fases de la humanización. La primer fase tiene mucha relación con la relación que tiene el hombre con lo natural, el cual la llamamos “fase de planetización”, la cual lleva al hombre al trabajo, a la economía, agricultura, ganadería, a las mismas razas, a una organización de comunidades, socialización, es decir, a una identidad, a tener cultura. La segunda fase consiste en la “globalización”, que se desarrolla en la modernidad con las ciencias naturales, la tecnología, la industria, el cual se permite al hombre sustituir el trabajo corporal por el mecánico; aunque se cae en un extremo, la misma tecnología se vuelve “tecnocracia” y esclaviza al mismo hombre, cayendo en un engañoso desarrollo (engañoso en el sentido de su bienestar), la misma economía, la producción, plantación y distribución de los bienes pasan en manos de la política que “equilibra y rige el poder buscando bienestar”. Y como tercera base es la “involución”, que consiste en la misma individualidad del hombre y su socialización, luego la misma situación psíquica del hombre al elegir en cuanto a los diversos grupos religiosos, sociales que se organizan en la sociedad, pero sobretodo, la solidaridad, en la cual “debe” culminar las distintas fases mencionadas, donde la misma humanidad del hombre debe organizar la sociedad para un mayor beneficio común y propio. De forma general las fases nos han indicado de alguna manera la evolución social que ha vivido el mismo hombre en la historia, conviertiendolo como ese ser-histórico que ha forjado la misma sociedad humana.
CONCLUSIÓN Este enigma del hombre ha sido de gran importancia, gracias a que su propio ser inquieto que buscar conocerse (que hoy en nuestra actualidad carece de esto) ha sido capaz de dar algunas nociones de lo que nos constituye dentro de aspectos que quizá estén fuera de nosotros, nos parezcan cosas abstractas, nos referimos a la misma física, al cósmos; pero que el mismo hombre se ha encargado de mostrarnos que tienen una gran relación con nuestra misma evolución y ese lo hace ser objetivo. Insisto, este proceso es lento y largo como la misma evolución, pero es importantes en saber algunas nociones para tener criterios generales de lo que nos constituye, al menos como sujetos en-el-mundo. Pero aquí radica todo, que sí nos podemos ver como simples entes en el mundo, pero, nos hemos dado cuenta que en este proceso evolutivo ha habido algo importante, que es el hecho de la “noosfera”, que nos ha hecho capaces de sabernos hombres, de poder “inventar” si así decirlo, la misma evolución, y no tanto inventar como si fuera mentira, sino, en mostrar tal hecho que nos permita sabernos de dónde venimos (aunque no este todo claro) pero ese mismo proceso de hominización y humanización nos hace seres en el mundo, que tiene relación con sus semejantes. Al igual, nos hemos convertido en seres con consciencia moral, la cual sabe distinguir diversas acciones en el mismo hombre en cuanto a bondadoso y malicioso que sea; al igual nos hemos regidos como hombres éticos, sociales, cultures; los cuales llevamos normas establecidas por el mismo hombre que es capaz de superarlas y manipularlas, pero, todo cae bajo los pies del mismo hombre quien lleva el control de sí mismo. Cuánto juega la conciencia en el hombre, que es capaz de determinar la misma conducta ética y moral, buscando beneficios no egocéntricos, sino comunes, que le permitan estar en la verdad del conocimiento, tal consciencia que se traduce ella misma como esa recta razón, razón por la cual nos da una visión amplia de ver más allá y trascender, adoptando y comprendiendo todo lo que respecta al mismo hombre, observar desde su misma naturalidad su ser corpóreo y espiritual. Por tanto, todo este proceso ha pasado a las manos del hombre, el peligro es no saber llevar a cabo estas cuestiones y cuando se lleva de la mejor manera, es la misma verdad las que nos llevará hacia el conocimiento propio de sí.
BIBLIOGRAFÍA