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Aquí es donde Weber diferencia los conceptos de «poder» y «dominación», antes de poder continuar con la más importante de sus catego rizacione s para la descripc ión de la acción política y de sus forma s manifiestas en en el el mun do m oderno. Mientras que la «dominación» contempla la aceptación de una determinada orden orden por parte de una a utoridad establecida establecida y reconocida como máxima de la acción de aquellos que le obedecen, el «poder» hace referencia referenc ia a la la posibilidad d e hac er valer en la relación social la voluntad de un o incluso co ntra la voluntad de los los demás y a pesar de las formas de resistenc ia y oposició oposición. n. El «poder» se distribuye dentro de una comunidad en determinados grupos que W eber eber distingue en clases clases,, estratos y pa rtidos. Las claclases tienen que ver con la la esfera económ ica, y la la distribuc ión del pode r se asienta sobre la base de los bienes de los que disponen sus miem bros br os en el mer m erca cado do,, es decir, de cir, en u n prin pr inci cip p io de pos p oses esió ión: n: m ás o m en o s pose po sesi sión ón equiv eq uivale ale a m ás o me m e no s c a p a c ida id a d en e n el m e rcad rc ad o econ ec onóm óm ico ic o po p o r p a r te de los m iem ie m bros br os de la cla c lase se y de las clase cla sess e n tre tr e sí. Los Los estratos , por p or el con trario, se form an en la esfera esfera cultura l y social cial de la com unida d y capta n su capa cidad de uno o más co m pon entes típicos del grupo, de una d eterm inad a c ond ucta de vi vida, de la valoració loración n social social del del honor debido a una deter m inad a cualidad com ún. Los partidos se encuentran, en cambio, en la esfera pública y del po p o d e r en e n ten te n d id o de sde sd e el pu p u n to de vist v istaa políti po lítico co:: su s u acc a cció ión n e s tá dirig di rigiida a influir influir y ord ena r la acción social social de la com unidad un idad bajo cualquier pu p u n to de vista. vis ta. Por ta n to , m ien ie n tra tr a s el p o d e r se b asa as a en u n a form fo rm a de coerción, de disciplina o de hecho compartido por la comunidad de donde deriva la obligación de la obediencia y el respecto a ella, la dominación deriva de la aportación de la «legitimidad» a una determinada orden. orden.
filia 'fil iall y pulftia pulf tiai: i: el trabajo intele in telectu ctual al y ¡m form fo rm an d ep o rta rt a
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Weber no descarta, es más, demuestra, a través de una serie de ejemplos ejemplos tom ado s de la la investigación investigación histórica que se extienden de s de la la Roma imperial al al actual sistema de control adu anero de Nuev Nuevaa York, lo lo predecible qu e es un u n «cambio» d e las form as de p ode r a las de dom inación, es deci decir, r, de relaciones relaciones creadas a p ar tir de u n principio o sistema despótico a relaciones de autoridad formalmente reguladas. Eso se aplica tanto en la esfera de la acción racional orientada econó micam ente -el mercado, mercado, por ejemplo- como, como, especialmente, especialmente, en la es fera de los factores estrictamente sociológicos, como las estructuras estatales. O bviamente, esta s do s esferas esferas,, ideal-típicam ente diferentes, diferentes, se man ifiestan ifiestan de m ane ra afín afín y mixta en la praxis, praxis, ta n to que si se qui siese siese disting uir la acción p olítica «pura» «pura» en la realidad, se se la debería ente nde r exclusivamente exclusivamente como uso de la fuerza. fuerza. En cambio, basándose en las diferencias entre los fundamentos de la legitimidad, legitimidad, Weber construye con struye la debatida, a m enu do reformulada p or las posteriores escuelas sociológic sociológicas, as, y fam osa trip artició n ideal-típi ideal-típica ca de las las formas del dominación en su funcionam iento como instituciones reales reales de gobierno de la sociedad. Tal Tal y como com o figura a continu ación. ació n.
Los tres tipos de dominación legítima y las formas estructurales de funcionamiento En el tercer capítulo de la primera parte de su obra postuma, pues, Weber se ocupa de las «relaciones «relaciones de poder», que influy influyen en de m anera significativa en las relaciones sociales destinadas a la afirmación de un grupo sobre sobre otro me diante un a base de legitimiz legitimizaci ación. ón. El El campo de las relaciones relaciones social sociales es en las que se producen estos fenó me nos de la acción para o bten er el poder legítimo legítimo es el que W eber considera y define como el ámbito propio de la Política. Asimismo, las observa ciones que, en esta pa rte de su sistematizació n, lleva lleva a cabo sobre las las
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diferentes formas formas de ejerc ejercici icio o del del poder -p o r ta nto, diferentes estruc turas políticas- van dirigidas a captar el significado de los fenómenos de su tiem po a través de los los ejemplos ejemplos y las las dinám icas registrad as en la historia universal, con las que comparar la situación de la Alemania y la Europa Europa occidentales co ntem porá nea s desde el pu nto de vista vista de las las instituc ione s formales form ales del del poder. poder. We Webe ber, r, de de hecho, de la la mism a m ane ra que inte nta a firmar con la investigación investigación realizada sobre la tem átic a económica que él favorece, considera Occidente un lugar originario de las dos mayores experiencias experiencias de formación y gestión gestión del poder p o lítico: la ciudad en la época clásica y medieval y el Estado moderno. Caracterizada principalmente por ser una acción social recíproca entre «detentadores del poder» y «dominados» para el mantenimiento de su posición dentro de un determinado territorio en base a la pose sión del monopolio de la violencia, la estructura del poder infiere su carácter sociológico precisamente de la relación entre detentadores y dominados, y de la relación relación entre estos y un «aparato» de gobier gobierno. no. Con esta expresión expresión,, Weber se refier refieree al grupo de perso nas que se pone a disposición disposición del func ionam iento recíproco de las relaciones relaciones dentro del grupo y que perm ite la articulació articulación n resultante de dinámicas y princi pios pi os espec es pecífic íficos os de «org «o rgan aniza izació ción» n» y repa re part rtic ició ión n de la orde or den. n. Esta Es ta es la columna vertebral de los tres tipos diferentes de dominación legítima que se aplican: aplican: la la dom inación «tradicional «tradicional», », la dom inación «carismática» y la dom inación inac ión «racional «racional-lega -legal». l».
1. La dom inac ión trad icional icion al es aquella cuya legitimida d se basa en reglas reglas antiguas, en fu nda m entos definidos definidos po r la la autoridad de un a sola pers ona o por la sacralidad sacralidad de la tradición a la la que se ha aco stum brad o y que exige exige obediencia obediencia:: el de ten tad or del poder po der,, p o r ta n to , es e stab st ab leci le cid d o e n v irtu ir tu d d e su d ign ig n ida id a d p e r sonal.
'(.uva '(.uva y política: política: el trabajo trabajo intelectual y tan tan form for m as de poder
2.
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La dom inación carism ática se fund am enta en la legitimidad legitimidad pe p e rso rs o n al de u n solo sol o d e te n t a d o r del poder, pod er, p ero er o e sta st a d eriv er ivaa d e la atribución de habilidades extraordinarias, excepcionales y no accesibles a otros; esta legitimización es, por po r tan to, una u na for ma de revelación contingente de cualidades sobrenaturales y sobrehumanas -como las relativas a los «redentores», los pro fetas o los héroes-, o una forma extraordinaria de la gracia de Dios, Dios, en cu alquier caso car acteriz ada po r la la ejemplaridad. ejemplaridad.
3.
La dom inación racional es el pod er establecido sobre la base de regl reglas as racional racionales es acordad as o im pue stas (estatu to) que. pu esto que, por lo general, son vinculantes, encuentran en los domi nado s u na disposición vo luntaria a la obediencia; son las mis mas normas que establecen la legitimidad de la acción social y la del detentador del poder. La obediencia, en este caso, se pr p r e s ta a las la s reg r egla lass y no n o a u n a p e r s o n a sola, so la, p o r eso, eso , a dife di fere ren n cia ci a de la dominación tradicional y, menos aún, de la carismática. los los m ismos de tentad ores están obligados obligados a observarl observarlas. as.
«A ello corresponden -escribe Weber- los tipos fundamentales “puros” de la estructura de dominación. Mediante su combinación, mezcla, asimilación y transformación tienen lugar las formas que se en cu en tra n en la realidad histórica»:59 histórica»:59
1.
Para Para la dom inación inac ión tradicional, Weber identifica la repetició n de tres principales principales estructu ras formales formales distintas históricam en te de la afirmación afirmación de u na tradición sobre otras: otras: la «gerontocracia», por la que el poder es ejercido por un grupo de ancianos
59 Max Max Weber, Weber, Economía Economía y sociedad, sociedad, op. c lt
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como los mejores mejores conocedo res de las norma s más m ás antigua s de la tradición sagrada; sagrada; el el «patriarcado», que es un poder pod er ejercido ejercido por los los patriarcas y que tam bién se basa ún icam ente en el recono cimien to de su sabiduría a ntigua y en la volun tad de obedecerla po p o r p a r te de los m iem ie m bro br o s del de l grup gr upo. o. En ú ltim lt im o lugar, c u an d o las las norm as antiguas em piezan histórica y/o culturalm ente a ser sustituidas por un aparato administrativo meramente perso nal del detentador del poder; estas formas son sustituidas por el «patrimonialismo», mediante el cual, el derecho del grupo, que en los primeros casos coincide con el de la autoridad, se transform trans form a en el el derecho personal de la auto ridad po r sí misma. misma. A estas formas de dominación tradicional pertenece, declara Webe We ber, r, una d eterm inada inad a ética econó mica c apaz de influir en la acción del grupo e n e ste sentido. W eber mencio na la tradición y, y, po r con c onsig sigui uien ente te,, el tra t radi dici cion onal alis ism m o g e ront ro ntoc ocrá ráti tico co y patr pa tria iarc rcal al como cód códig igo o de comportamiento en los los fragmentos fragmentos de l a ética pro p ro testa te sta n te , donde los localiza históricamente en el comporta
mien to económico de las sociedades sociedades católicas prerreformadas. prerreformadas. 2.
Con la dominac ión carism ática pued en asociarse asociarse tod as aquellas aquellas estr uctu ras sociales sociales establecidas a pa rtir de la fe fe en la revela revelació ción, n, de la veneración del héro e y en la confianza conf ianza ciega en el líder Es Es tas, m ás que las demás, se basa n en motivaciones de obediencia esencialmente psicológicas de los dominados, quienes, mien tras dure la «prueba» del carisma del que está imbuido el in dividu dividuo, o, le le obedecerán, es tand o disp uestos a realizar cualquier acción con tal de corresp onder onde r a la la dominación. A pa rtir de esta considerac consideración, ión, Weber Weber señala señala - y en cierto modo de nuncia, por que lo presupone «típico» de la teoría marxista y de la praxis socia lista- la dominación carismática como antieconómica: no se tra ta de ren unciar a la posesión posesión de bienes o a la ganancia, sino sino
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más bien qu e no a cep ta ni la acción económ ica tradicional ni la la racional perm anen te, sistem ática y orientad a al objet objetivo ivo.. Weber relaciona relaciona con la estruc estr uc tur a desp ótica e irraci irracional onal de este tipo de dom inación la acumulación acumulación impulsiva impulsiva y /o hedon ista de dinero dinero incluso por medio de actos de fuerza y de violencia ilegítima. Basándose en este principio totalmente irracional de legitimi dad, Weber considera qu e el régimen carism ático es revoluci revolucio o nario, mutable y ecléctico, capaz potencialmente de modificar de inm ediato - c o n la caída o la la ascesis ascesis del líde líderr carism ático- los prin pr inci cip p ios io s p rop ro p ios io s de la acci ac ción ón social, socia l, las cree cr eenc ncia iass sobr so bree las qu e se ba sa y la Weltanschauung relativa del grupo. g rupo. 3. Por último. W eber asocia con con la dom inación racional la la es tructura de una administración ordenada, la «burocracia», que en las circunstancias históricas del mundo moderno se man ifiesta ifiesta bajo la la forma particu lar y condicionada de la or ganización estatal. Como modo formalmente más racional de ejerci ejercicio cio del del poder, poder, el el bu rocrá tico es u n p rod uc to exclusi vo de la modernidad que, en el transcurso de las luchas por la afirmación de un modo de actuar sobre otro en la historia universal universal -d e acuerd o con el análisis análisis de Weber y la la literatura literatura contemporánea que estudió al respecto-, neutralizó las for mas menos racionales, haciéndose en este sentido hegemónica en el sistema occidental.
Como ya se ha adelantado, a estas estructuras de dominación recurren también tipos diferentes de «aparato» administrativo. Allí donde la dominación tradicional de los señores está relacionada con víncul vínculos os de depen dencia y reveren reverenci ciaa por p arte de u n grup o de term i nado de «esclavos», «colonos» u «hombres de fe», a la dominación carism ática del líder líder -pro feta, caudillo, caudillo, héroe, héroe, etc .-, p or el contrario,
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están ligados los llamados discípulos, los compañeros de armas o las altas jerarquías del régimen. En el caso de la dominación racional, com o h emos visto visto,, el el aparato está represe ntado por los funcionarios, funcionarios, es decir, por aquellos individuos especializados en diferente grado en las norm as de adm inistra ción de la sociedad. A cada uno de ellos ellos se le le asigna asigna una función función co ncreta y una com petencia adm inistrati inistrativa va espe cífi cífica ca siguiendo un a organ ización cada cad a vez m ás racional de la gestión del pod poder er.. Trasladando estas formas estruc turale s del pod er a las ca tegorías fundamentales de la acción social, se observa que la domi nación tradicional es la relacionada con la acción social «afectiva», que la dominación carism ática es la relacionada con la acción social social racional «respe cto al valor» valor» y que la racional-l racional-legal egal es aq uella relacio nada na da con la acción racional «resp ecto al objet objetivo ivo». ». Sobre Sobre este últim o tipo idea ideal, l, el «encarnado» p or el Estado buro crá tico capitalista moderno, Weber construye el esquema de considera ciones técnico-formales que le son indispensables para el posicionamiento políti político co frente a la lucha abierta en el terreno co nting en te de la modernidad p or el el fenómeno cada vez vez más extendido de d esencan tamiento del mundo.
De la institución del Estado al conflicto de valores: rápido excurso en la modernidad Desde el particular punto de vista de Weber, el valor representa uno de los los conce ptos clave clave que aglutina los los diferentes aspectos del trabajo inte lectual: el de científico histórico-social, histórico-so cial, el de filósofo filósofo de la política y el de aspiran te a hombre homb re político político de su tiempo. La «cuestión de los los valor valores es» » es un tema que está siempre presente en su obra, tanto en los ensayos metodológicos como en los más estrechamente relacionados con las
'fltica fltica y política; política; el trabajo intelectual y las fi las fia a m a s do potloi
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consideraciones sobre la actualid ad porque, en ambos am bos casos, casos, el el cien tili co está im plicado de forma directa: por un lado lado,, como estud ioso de las dinám icas de afirmación histórica de deter m inado s sistema s de valo valore res, s, y por otro, como observador del del com portam iento socioló sociológi gico co que de es tos se deriva en las formas prácticas y c ontem poráne as de la exis existenc tencia. ia. De hecho, Weber no considera los valores valores com o con cepto s da dos y fijado fijadoss a nivel nivel trasce nde ntal, en tidad es metafísicas autoevidentes. ni tampoco como leyes subsistentes en el mundo sensible y, por tanto, fuera de cuestionamiento. Como hemos dicho aquí, los valores son «ideales» que existen «en relación» al hombre y son creados, esta blec bl ecid idos os y eleg el egid idos os p o r e s te b a sá n d o s e e n la p o sibi si bili lida dad d q u e ofre of rece cen n de dirigir las decisiones, es decir, no por «necesidad» sino por nivel de «complejidad». La afirmación de algunos valores sobre otros es el resultado de un proceso de conflictos individuales y colectivos que nacen y se manifiestan «en la» historia, razón por la que los valores no son son inm utables e intemporales intemporales sino sino que están c on stan tem en te su jeto je toss a tra tr a n sfo sf o rm ac ion io n es, es , s u s titu ti tu c io n e s y zozo zo zobr braa j u n to c on las la s p e rs pe p e ctiv ct ivas as y los in tere te re ses se s q u e se c o n tra tr a p o n e n en el á m b ito it o d e la elec el ec ción. ción. Sol Solo o en función de e stas diná m icas y «en relaci relación» ón» al hom bre y a sus elecciones elecciones contingen tes, todo s esto s mú ltiples sistem as de valor valores es pu p u e d en a su m ir u n pape pa pell tr a s c e n d e n te n o rm a tiv ti v o - e s decir, decir , c onv on v er er tirse en ideales ideales regu lado res- ya que p ued en definir las elecciones elecciones del del homb re en ese ese conte xto de acción concreto. Así sucedió históricamente con la afirmación del Estado moderno prim pr im ero er o en e n O ccid cc iden ente te y luego lueg o com co m o in i n stit st itu u ció ci ó n polít po lític icaa exte ex ten n d ida id a en e n el "Econo nomía mía y socie resto del mundo. A la hora de abo rdar el el Estado en "Eco dad, Weber define define sus c aracterísticas especiales especiales y dete rm ina nte s a niv nivel
univers universal, al, incluyéndo incluyéndolo lo com o un o m ás entre los los otros otro s tipos de entid ad polít po lític icaa ex e x iste is ten n tes te s o posible pos ibles. s. Al ser se r la co c o m u n ida id a d po p o líti lí tica ca u n a en e n tid ti d a d que no siempre ha existi existido, do, sino sino que fue creada en un m om ento dad o
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de la distinción en un determinado territorio de la acción social res pe p e c to a la acci ac ción ón econ ec onó ó m ica ic a a trav tr avés és de la org o rgan aniz izac ació ión n de la violencia violen cia,, dur ante la prim era mod ernidad en Europa occident occidental al algunos algunos núcleos núcleos de poder pod er político sencillam ente am a m pliaron el monopolio de la violen violenci ciaa legítima legítima a un territorio más vasto, en «com petencia» y con tra la resis resis tencia de otros centros y estructuras de poder -en particular, en lo que respecta a la la estructu ra del Estado moderno, esto se se dio dio en detrim ento de las estru est ructu ctu ras ra s rivales de la Iglesia Iglesia y del Impe Im perio rio-. -. A lo lo largo del tiem po, tod to d o Esta Es tado do que qu e se cons co nsol olid idó ó de esta es ta m an era er a a u m e n tó su dom do m inio ini o en su territorio por medio de una racionalización cada vez más acu sada de los «aparatos» y sistemas de control, desde el administrativo y burocrático al jurídico y militar. Esto provoca en los Estados moder nos la característica legión de funcionarios especializados en organizar y gestionar las relaciones entre dominados y detentadores del poder, miembros de un aparato -e l de la buroc racia- ordenados en una jerar quía piramidal construida según grados diferentes de especialización de ntro del sistem a buro crático genera general. l. Este sistema llev llevaa poco a poco a que las actividades del Estado sean más continuadas, sistemáticas y eficientes, es decir, más racionales, hecho que establece la orientación expresam exp resam ente política política d e la entida d estatal. Esto signif signific ica, a, en defini definiti tiva, va, sistematizar las relaciones estatales en los dos campos de control: el interno, el orde n público y las relaciones relaciones en tre los miembros d en tro del del grupo socia social, l, y el externo, la la segur idad y la la capacidad de cada c ada Estado frente a los dem ás Estados E stados y, y, asimismo, frente a entidad es polít po líticas icas de distinta tipol tipologí ogíaa que inten tan afirmarse afirmarse con tra la existente existente.. La «racionali «racionalización» zación» cada vez mayor y más ex tendida en los distin tos aspectos de gobierno gobierno y ordenam iento del territorio territorio - a pa rtir de las mejores interconexiones e ntre los aspectos jurídicos, jurídicos, administrativos y culturales de la socie da d- provoca en la historia de Europa occidental, occidental, desde la primera fase fase de la modernidad hasta la primera primera década del del si si
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glo glo xx, xx, un a configuración configura ción aú n más peculiar del Estado. De acuerdo acuer do con el análisis de Webe Weber, r, hay dos do s aspect asp ectos os en partic pa rticula ularr que juegan un papel fundam ental: la la definición definición de un código código de norm as como la «co nstitunstitu ción» y el reco nocim noc imiento iento cu ltural, jurídico juríd ico y social social de la «nación» co mo detentara sobredeterminada de la soberanía. Estos elementos se encue ntran en estrecha relaci relación ón con la sistematización de la participac participación ión en el servicio servicio m ilitar de los miemb m iembros ros del Estad o y con la formación de un a esfera esfera pública en la que los domin ados ado s pu edan ed an ser represen tados y, y, por po r ta n to , op o p e rar ra r fo f o rm alm al m en te en e n la ges g estió tión n co m p arti ar tid d a del poder. po der. Esto ocurre ocu rre po r lo general general m edian te las las formaciones políticas políticas de los «partidos», los cuales cuales com piten por la gestión gestión de d e la administració n pública pú blica sesegún el sistem a de distribu ción de la po tencia tenc ia legitimado por el sufrag sufragio. io. En último luga lugar, r, otra característica determ inan te del Estado modern o « evolucionado evolucionado» » de Eu ropa occiden tal es la interconex ión cada vez más in tensa en tre los aparatos, las las no rm as y las diferentes esferas esferas de racion alidad de la acción: acción: política, social social y econó mica. Según el sistem a de valor valores es conc urr ente q ue se imp one sobre los los demás, el Estado pu p u e d e s a ca r m ás o m e n o s bene be nefi fici cios os p a ra su p ro p io fu n c io n a m ie n to general. En efecto, no quiere decir que una mayor especialización de los aparatos administrativos y una mayor racionalización científica supo ngan nece sariam ente un mayor benefic beneficio io para el el Estad o y para el grup o social social que lo lo habita. Weber apoya esta p os tura p ensan do, pr incipalmente, en las extremas consecuencias de la competición, en la realidad de su época, entre la radicalización de las formas del capitalismo lismo por u n lado, lado, como com o tipo tip o de acción acción económ e conóm ica racionalizada en su m áxim o nivel nivel en relación con el objetivo objetivo de la ganan ga nancia cia y despojado desp ojado d e los valores éticos del protestantismo de sus orígenes, y la radicalización de la burocratización integral propia del socialismo real, la cual aliena al individuo en su autonomía de elección y en el libre albedrío de su vo lun tad solitaria y de la la iniciativa individual. individual. El contro l siem pre
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mayor y profundo por parte de los aparatos burocráticos de la Ale man ia posguillermina a la que m ira Weber abarca precisam ente ta m bién bi én aque aq uell llas as in s titu ti tu c io n e s p a ra la acc a cció ión n social soc ial,, po p o líti lí tica ca y eco e conó nó m ica, ic a, como los los partid os y las empresas. empresas. Este fenómeno, más que favorecer los derechos de los miembros del Estado y la la grandeza de la nación, nación, ta n to en las formas militares y po p o líti lí ticc as del c reci re cim m ien ie n to d e su s u p o d e r en e n el m u n d o co m o en e n el refu ref u erzo er zo de las las institu cion es de la representación parlam entaria, agrava, agrava, po r el el contrario, el el conflicto conflicto entre las posiciones inte rnas, sobre tod o aq ue llas marginadas por la hegemonía adquirida históricamente por las estructuras formales del Estado. Se reabren así frentes de acción de los tipos «superados» de dom inación política, política, y especialm ente la cacarismática, ya que -c om o se ha podido v er - la racionaliza racionalización ción y la la buburocratización ex trem as de Occidente, dirigidas al al control de los hom bres br es sobr so bree la real re alid idad ad n a tu ral ra l y social soc ial,, no n o pu p u e d e n res re s p o n d e r de m an era er a global las preg un tas ex istenciales del individuo so bre su felicidad y las las expresiones de su volu ntad indivi individual dual.. Es al final de esta consideración general donde la mirada de We be b e r al p re s e n te y al fu tu r o d e la A lem le m ania an ia y la l a E uro ur o pa o c cid ci d e n tale ta less se vuelve vuelve pesimista , aun qu e no del tod o deses perada . Si Si bien rec onoce ono ce el el prog pr ogres resiv ivo o refu re fuer erzo zo q u e los fen fe n ó m en o s d e raci ra cion on aliz al izac ació ión, n, b u rocr ro crat atiización e intelectualiza ción de la realidad realidad le están aplicando a los los ba rrotes de con tenció n de la «jaula «jaula de hierro» hierro» qu e paraliza al individuo individuo y su acción libr libre, e, Weber no rechaza, es más, cree convenien tes m uchas de las conquistas debidas a la «selección» de la Weltanschauung del mo derno Estado capitalista occidental sobre otros com petidores. petidores. En prim er luga lugar, r, considera los progresos del siste m a jurídico-ecojurídico-económico del liberalismo liberalismo individualista. individualista. Luego, Luego, la sistema tización de las las est ru ctu ras de organización social y, y, po r último, el el estímulo d e la in vestigación vestigación y de la la cienci ciencia, a, fenómen os estos d e orde nam iento legítimo
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del caos asocia do a la naturale za h um ana an a y propio de la realidad realidad por sí misma. Sin Sin embargo, tras tra s esta es ta serie de co nqu istas, se revelan revelan al mismo mism o tiemp o las antino m ias de la m odernidad, es deci decir, r, la naturaleza efec tiva tiva y material de la la lucha con tinua p or la afirmación afirmación de un principio sobre otros, los cuales no son eliminados por la victoria ajena, sino que permanecen dormidos o fuera de escena, listos para reaparecer en el terreno de juego. En resumidas cuentas, para Weber la realidad es el campo de batalla de una «lucha mortal» e irreconciliable entre los dioses rivales rivales de lo que, retom ando an do un a observació obse rvación n de Stu art ar t Mili Mili,, considera un «politeísmo absoluto» de valores en conflicto estructu ral, ral, pu esto que qu e a ce pta r «servi «servir» r» a Dios excluye excluye la posibilidad de servir tam bié n al dem onio.60 onio.60 De aquí derivan t an to el ca rácte rá cte r conflictivo conflictivo de la condición hu m ana en el mundo como el carácter dramá tico del del destino de la libertad de elección y de afirmación del hombre en la historia, historia, el «sino «sino de u na época c ultural qu e se ha n utrid o del árbol árbol de la ciencia»61. Solo que:
el fruto del árbol de la ciencia, fruto inevitable aunque molesto para la comodidad humana, no consiste en otra cosa que en te ner que co nocer esa antítesis y por tanto ta nto tener tene r que considerar que cada acción acción importante, e incluso la vida como un todo -si esta no debe ocurrir por po r sí m ism a com co m o un acon ac onte teci cim m ient ie nto o natu na tura ral, l, sino sin o llevarse lleva rse a cabo cab o deliberadam delibe radam ente- representa representa una concatenación de decision decisiones es fina fina les, mediante las cuales el alma (al igual que para Platón) escoge su propio pro pio dest de stin ino o - e s decir, el el sent se ntid ido o de d e su s u acci a cción ón y de su s u ser.6 ser.62
60 Max Ma x Wfeber, E l sentido de la •neutralidad •neu tralidad valora valorati tiva» va»,, op. c it 61 Max Max Weber, eber, La •objetividad• •objetividad• del d el conocimient conocimiento, o, op. c it 85 Max Max Weber, We ber, op. op. cit c it
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De lo que se deduce la famosa pregunta que el escritor ruso Lev Tolstói le plantea a la ciencia empírica que domina el mundo moder no pero que se revel revelaa incapaz de respon der a pregu ntas ético-existenciales fundamentales del individuo, a saber: «¿Qué debemos hacer? ¿Cómo d ebem eb em os vivir vivir?» ?».6 .63 Volviendo Volviendo a reflexion refle xionar ar sobre so bre el s en tid o de de la ciencia ante el destino antitético del hombre y de sus elecciones, Weber intenta diseñar el perfil de la persona que, comprendiendo su tiempo, puede aspirar a la «vocación» de actuar conscientemente y hace ha cerr lo lo mejor: el científico (y el) el) político.
El significado de la vocación científica y las condi ciones con temp or áneas áneas de la acción social social Dos son las vocaciones a las que puede aspirar la ciencia y por tanto el científico. En primer lugar, la labor de evaluar de manera prácticoempírica la relación relación en tre los valor valores es asumid os p or la acción acción c on vistas vistas al objetivo objetivo y los los m edios escogidos con scien tem ente (incluso (incluso subjetiva mente) b asándose en el cálc cálculo ulo de las las consecuencias que pu eden deri var de la elección d e esos valores para alcanza alca nzarr el objetivo objetivo mismo. Solo Solo así el el científic científico o social social - y el filós filósof ofo o «frustrad o p or la polí tica»tica »- pued e generar a partir de las posibles valoraciones prácticas directrices para una acción política racional. Aquí vuelve a ser útil la distinción entre «relación de valores» valores» y «juicio «juicio de valor» valor» que W eber ya abo rdó m etodo eto do lógicamente con respecto al estudio de los temas específicos de toda investigación histórico-social, principalmente cuando estos se presen tan como acontecim ientos dirimentes para la contención o resoluci resolución ón
trabajo intelectual, op. op. c it Resulta 83 M ax W eber, La ciencia como profesión, en Id, E l trabajo interesante recordar la cita completa también en función de la comprensión del tono del deba te académico. académico.
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de los problemas en la realidad. En esta forma de ayuda técnico-crítica consiste, pues, el otro significado de la ciencia en la praxis cotidiana que, imprevisible y múltiple, no puede considerarse entendida una vez y para siempre. La distinción neta y más veces subrayada por Weber entre «juicio de valor» e investigación objetiva de las ciencias sociales es, en efecto, un aspecto de ese frente aún abierto entre él y las demás escuelas teóricas en to rno a la radicalizaci radicalización ón del pensam iento científ científico ico en la experiencia experiencia general de desenca dese nca ntam iento del del mundo. Como se ha dicho, Weber define este fenómeno como la «intelectualización» de la ciencia, es decir, el saber deviene ideológico y se da com o verdad absoluta. Weber identifi identifica, ca, en tre otr as cosas, en en esta expansión de ideales ideales éticos y científicos científicos absoluto s un a de las causas de la degeneración política y cultura l de A lemania, lemania, que se manifiesta en la influencia influencia directa de las pre sun tas valoraciones valoraciones emp íricas de la ciencia ciencia social social - e n especial, especial, la del del «socialismo «socialismo de cátedra » d e Schmo11er- sobre sobre la orien tació n eco nóm ica de la adm inistración del Estado alemán y de la ten de nc ia ideológica ideológica de las m asas sociale sociales. s. Junto Junt o a este e ste desvío desvío interesado del ordenam orden amiento iento libe liberal ral nacional por par p arte te de algu al guno noss colegas cole gas repr re pres esen enta tant ntes es d e la racion rac ionali alizac zación ión intel in telec ectua tuall de la experien experiencia, cia, Weber tem e tam bién otra s «degeneraciones «degeneraciones» » de signo político polí tico to talm ta lm en te opue op uesto sto q u e llegan d e las l as corr co rrie ient ntes es pang pa nger erm m anis an isla lass y conservadoras más extremas de una determinada «inteligencia» mili taris ta rista ta y nacionalista nacion alista del período m ás crítico con c on el fina finall de la guerra gue rra y la salida política de Alemania del primer conflicto mundial. Ante la grave dad de las contingencias, una pregunta preg unta filo filosó sófi fica ca y personal -q u e le hace Tolstói en persona- lo encierra en la trama de la neutralidad valorativa de su doctrina como un animal impedido en la expresión de su instinto primario prim ario:: la vocaci voc ación ón por po r la ciencia cien cia en la praxis política. polític a. Si Si las ciencia cien ciass histórico-sociales tórico-sociales no p ueden uede n expresar un juicio de valo valor, r, construyen do sobre sobre este una forma de código nomológico general, ello no excluye, como ya
'Weber
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hemos dicho dicho,, que aquellas aquellas pue dan propo ner u na «crít «crítica ica técnica de los los valo valore res» s».. Por consiguiente, si es posible un juicio juicio de d e valor po r pa rte del cientí científic fico, o, este no irá dirigido dirigido a la n aturaleza de los medios y de los fines fines en sí mismos sino a la idoneidad o no de estos respecto a las las premisas ra cionalm ente considerad c onsideradas as p or el sujeto en relación relación a su objetivo objetivo,, es deci decir; r; basá ba sánd ndos osee en u n a valora v aloración ción polític pol ítica, a, en ta t a n t o que qu e va de stin st inad adaa a det d etec ec tar ta r la coherencia de esa esa acción racional orien tada a la sociedad entend ida como campo de relaciones interindividuales.
Podemos Podemos por tanto, tan to, si hemos entendi en tendido do bien nue stra misión [...] ...] obli obli gar al al individuo individuo -o al menos ay udarleud arle- a darse cuen ta del sentido sentid o de su propia acción. No creo que sea demasiado poco, incluso para la vida puram pu ram ente en te personal.6 perso nal.64
Esta recup eración del m aestro Heinrich Heinrich Rickert Rickert despoja despoja definitiva definitiva me nte el esquema de valore valoress de su m anto an to trascend ental, es deci decir, r, de esa aura norm ativa teorizada como absoluta y diferente diferente de la decisión decisión arbi traria tra ria del individuo. Para Rickert, de hecho, el juicio de valor es posible gracias gracias al carác ter absoluto, indiscutible, ontológico y dado da do a priori de d e un orden ord en codificado co dificado y nomológico d e valores valores válidos válidos y activos en la reali reali dad con ind epend encia del esfuerzo o de la elección elección inman ente, m un da na, arbitraria del hom bre que e stá so metido a ellos ellos a pesar de sí mismo. El «relativismo» de los valores de Weber, Weber, es decir, decir, el el ser ad ecu ados ad os y escogidos o inadaptados y denegados por el individuo basándose en su conformidad con los fines de la acción, no solo no anula la cre dibilidad de la acción social así establecida -y por tanto, del estudio sociológico sociológico aplicable aplicable a ell a- sino que, adem ás, le perm ite al cientí científico, fico,
intelectua l, op. op. c it 64 Max Ma x W eber, La ciencia como profesión, en Id, E l trabajo intelectua
'f.tic 'f.tica a y politiza politiza:: el trabaj trabajo o intelectual y las form as de fxuler
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así com o al sujeto qu e los eli elige, ge, com prob ar y juzga r la valide validezz a p artir de los da tos em píricos relativos relativos a la realizaci realización ón - o al fraca so- de la acción hum an a dirigida dirigida subjetivamen subjetivamen te en este sentido. sentido. D esco nec tada m etodo lógicam ente el «jui «juicio cio de valor valor» » de la la «rela «rela ción de valores» valores»,, la acción social -inteligib le en su resu ltado em pírico gracias a la investigación investigación sociológica - pue de llegar llegar a ser prá ctica m en te m ás válida válida y com ún porque e stá ba sada en la relación relación medios-f medios-fines ines en términos de realización. Al hacerlo, Weber, refiriéndose en todo m om ento a las condiciones de posible posible conexión en tre ciencia ciencia y políti políti ca, ca, int en ta h ace r de la la socio sociologí logíaa no u na ciencia del juicio ni tam poc o una disciplina ideológica del Estado, o la «verdad» revelada por un pro p ro f eta et a o p o r u n rede re dent nto o r, sin si n o m á s b ie n u n m é to d o p a r a la auto au tov v alo al o ración empírica del individuo sobre los los «costes» «costes» m ateriales que co m po p o rt a esa es a elec el ecci ción ón r e s p e c to a los lo s val v alor ores es y a los lo s m ed ios io s im plic pl icad ados os:: la ciencia se convierte en «instrumento» político de toma de posesión del hom bre en la realidad. realidad. Así, Así, la jaula de la trasce nde ncia norm ativa pu p u e d e a b rirs ri rsee p a ra d e jar ja r sali sa lirr al h o m b re a la luz lu z y dej d ejar arle le a c tu a r real re al mente con libertad de elección según el «conocimiento del significa do de lo que es deseado» ofrecido por los resultados empíricos de la sociología. De hecho:
La ciencia puede procurarle la «convicción» de que todo «obrar» y, naturalmente, según las circunstancias, el «no obrar», significa para sus consecuencias consec uencias «ponerse de parte» de determ inados inado s valores valores y, por consiguiente -cosa que hoy se reconoce con singular agrado- por lo regular «contra otros». La elección que haya de hacerse es de su incum inc umben bencia cia.6 .65
86 Max Ma x W eber, ebe r, La «objetividad» de l conocimiento, op. c it
12 6
'Wnfittr
En este um bral de elección elección y de «libera «liberación» ción» de la acción es don de se abre abre la la puerta de la antinom ia fun dam ental sobre la la que se sus ten ta la acción voluntaria del hombre en la creación y en la afirmación de algunos valores sobre otros, es decir, la política, ese ámbito de las relaciones relaciones sociale socialess en que los individuos individuos en tran en co m petición para consegu ir el el po der legítimo. legítimo. En un a ép oca sin Dios y sin profetas, los los hom bres deben escoger po r sí solos solos lo lo que es correcto hace r y lo que no y, principalmente, deben darle sentido por sí solos al mundo y a la existenci existencia, a, dedicán dose con «pasión», «pasión», «responsabilidad» «responsabilidad» y « ampli tu d de miras» a las acciones, a las las elecciones y a las decisiones q ue la vida les les impo ne a diario. Sobre estas est as últim as expresiones, la precisión empírica d e la acción com o objetivo objetivo de la existencia política del in política como profe profesi sión. ón. dividuo, dividuo, se constru yen las bases éticas de l a política
En la conferencia del mismo nombre de 1919, Weber reitera junto a las categorías y a las formas fundamentales del poder, el tema de la políti política ca como «vocaci «vocación», ón», precisa me nte b asánd ose en la uniformi dad que el modelo de la «ciencia como profesión» y el modelo éticot ienen con respecto al espacio de acción social social económ ico del 'Beruf tienen po p o líti lí ticc a m e n te o rie ri e n tad ta d o . R ec o n s tru tr u ido id o a to d a p risa ri sa el reco re co rrid rr ido o q ue llev llevó ó formalm ente de los señoríos señoríos m edievale edievaless a la con tem poran eidad del Estado mod erno, Weber subraya el el papel q ue este marco p eculiar de la acción política dese mp eña en la definición definición cada vez más clara y evidente de las relaciones relaciones de p oder e ntre los los hombres, y en tre estos y los aparatos de con trol del pode r establecido. establecido. Así Así pues, la la atenció n de Webe We berr, ta nt o en la conferencia conferencia primero com o en el pos terior ensay ensayo, o, se conc entra en la posición de los deten tado res del poder, poder, o sea, sea, aque llos llos para los que la política política es un a profesión profesión y no u na «oportunidad ». El individuo político «ocasional» es en realidad aquel que expresa su acción estrictamente política en la práctica del voto, en la afirma ción de un principio contra otros en momentos circunstanciales o en
'('. '('.ti tica ca y política: el trabajo intelectua inte lectuall y las lam la m ias tic poder
127 12 7
situaciones particulares, casuales, con frecuencia no continuadas. Id polít po lític ico o «de prof p rofesió esión», n», p o r el c on trar tr ario io,, es aque a quell que qu e vive «para» y «de» la política. Al igual que para todas las construcciones de tipos ideales, también en este caso Weber señala la posibilidad de que los criterios de com portam po rtam iento ien to del político político de profesión profesión se encu entre n con los los del del polít po lític ico o ocasi oc asion onal al,, y viceversa. vicevers a. Pasa Pa sand ndo o inclu in cluso so p o r alto al to d ire ir e ctam ct am en te las cuestiones relativas a la Alemania de la posguerra y a las condi ciones de reconstrucción política interna -estamos en los años de la constitución de la Repúb Repúbli lica ca de W eim ar- y exterior exterior - la conferenci conferenciaa de Vers Versal alle less es el el principal aco ntecim ntec imiento iento público inte rna cio nal-, na l-, Weber term ina conc entran do su refle reflexi xión ón teórica en las las principales principales caracterís ticas de la situació n política vigente vigente.. De hecho, un a vez distingu ido el bur b uró ó crat cr ata, a, q u e ad m in istr is traa a p a rti rt i r de d e reglas reg las y d e m a n era er a c ad a vez m ás racional la la cosa pública en el Estado m oderno ode rno presen te, del del político político de prof pr ofesi esión ón,, qu e es aque aq uell «llam «l lamad ado» o» a to m a r p osic os ició ión n é tic ti c a o rie ri e n tad ta d a al objeti objetivo vo -po siblem ente al bien colectivo-, se desprende que el el funda m ento de esta distinción distinción se encue ntra e n las tres cualidades es espec pecíf ífica icass de la profesión política: la «pasión», la «responsabilidad» y la «ampli tud tu d de d e miras». Si se las observa observa con a tención , estas tres cualidad es son ade m ás las que en el modelo ideal básico de la acción social social weberiana establecen el cará cter cte r de racionalidad orientad orie ntad o al objet objetivo: ivo: la «pasión» «pasión» respecto respec to al interé s que qu e dirige el individuo individuo hacia un fin fin; la la «responsab i lidad» como criterio para el estudio de las condiciones de viabilidad de la acción e n función d e ese objetivo objetivo espe especí cífic fico; o; la «amplitud de mi ras» ras» necesaria ne cesaria pa ra calcular los costes coste s y las consec uencias uenc ias de la acción m ás allá del fin fin predefinido y respecto a la reacción posible de los otros. Para el político político de profesi profesión, ón, no o bstante, cad a una de estas cualidades queda invalidada si no está basada en el desapego. Al contrario de lo que qu e ocurre co n un individuo, individuo, para el político es preferibl preferiblee que n o exista ningun a forma de afecto p or el objet objetiv ivo, o, de preocupación ética p or los medios, sino solo po r los fine fines, s, los los cuales, cuales, en el «mejor de los m un do s
128
Weber
posibl pos ibles» es»,, deb d eber ería ían n reflejar refle jar el bien bi en com co m ún, ún , o al m enos en os el d e la mayo ma yoría ría de los miembros miem bros del grupo social social.. Uno de los obstáculos para la materialización del tipo ideal del po p o líti lí ticc o de pro pr o fesi fe sión ón d e s c rito ri to p o r W eber eb er es la v a n idad id ad p erso er son n al. al . E sta st a crítica va dirigi dirigida, da, en el pensa m iento subliminal de la conferencia del sociólogo, a la gran mayoría de políticos de profesión que habitan los cen tros de m and o a nive nivell nacion al e internacional. En particular, particular, We We be b e r revela rev ela alg al g u n as c o n sid si d era er a cio ci o n es sobr so bree el m a rco rc o p o líti lí tico co alem al em án y sobre la preocupación que, incluso en su papel de consejero para la constitución de la nueva República, además de para la negociación diplomática de París, lo compromete ante el futuro que se espera que sea no el el «florecimiento «florecimiento del verano -d es pu és del invierno invierno de gu erra -, sino una noche polar de gélida oscuridad y sombras, sea cual sea el grupo que ahora resulte ex teriorm ente victorio victorioso».6 so».66 De esta transición en adelante, lo que nació como una intervención teórica sobre la profesión política -una crítica «técnica de los valores» de la vocación política- se convierte en una breve disertación sobre la relaci relación ón mism a entre en tre ética y política, política, o mejor dicho, sobre la posibilidad posibilidad -y la conveniencia- de que esta profesión se base en un
ethos de
com
port po rtam am ient ie nto. o. Una Un a vez más, má s, We Weber ber se posi po sicio ciona na a medi me dio o cam ca m ino in o entr en tree dos escuelas esenciales de pensamiento incompatibles: el cinismo puro de la acción política, que desde desd e Maquiavelo en adel a delan ante te recorre la vía del «fin justifica los medios», y el idealismo kantiano de la persecución de un o rden ético trascendental, de una un a «convi «convicc cció ión» n» o de u na «intenci «intención» ón» que qu e se sitú a en el origen origen de la elecció elección, n, pero que qu e hace ha ce referencia referencia al al sujeto agente age nte com o un da to «interior «interior». ». La La primera la define define Weber como com o «ética de la responsabil responsabilidad»: idad»: el el hombre ho mbre político po lítico valora valora la acción a pa rtir d e las consecuencias reale reales, s, exter exterior iores, es, que e sta produce, y a p artir ta mb ién de
66 M ax Weber, We ber, La p olítica olítica como profesión, profesión, en Id, E l traba traba jo intelectua l op. c it
'fltica 'fltica y política política:: vi trabaj trabajo o mtvlvrtu mtv lvrtual al y las formas ilv /toilv /toilvr r
Ética de la responsabilidad: un arma política sobr so bre e la l a mesa m esa de Versa Versa lie li es Entre Entre 19 14 y 191 9, el mundo es un com plejo plejo sistem sistem a de ali alianzas polí polí tica tica s y acuerdos económ icos de un extrem extrem o a otro del contine contine nte e uro peo y del «resto del mundo». Un sistema dirigido aún por el modelo de los acuerdos posnapoleónicos de 1815 y creado mediante la práctica diplomática de los equilibrios cruzados. En esta incongruencia entre la reali realidad ge op olíti olítica ca y el d ictado diplom diplom ático ático es donde se encuen tran tran las razones de lo que se d efinió efinió como la «respon «respon sabili sabilidad/culpa» alemana de la la guerra. El proceso de retroceso retroceso de los impe rios rios cen trales trales -A lem a nia y Austria-Hungría- frente a la afirmación de las nuevas «potencias modernas modernas» » -Es tado s Unidos en p rim rim er lu lu g a r- está, está, de hecho, hecho, en el o ri gen d el regenerado m ilitari itarism sm o alemán, man ifestado festado en la agresión a la Bélgica neutral contra cualquier principio refrendado por el dictado di plomá tico. La ca tástrofe a la que Alem ania y Au stria stria arrastr arrastran an a Europa Europa es, por tanto, suficiente para construir las dos caras jurídicas del nuevo principio de ética política nacional e internacional de la «responsabili dad de guerra». Por una parte, está la culpa de Alemania por haberla desencaden ado y hab erla erla abordado desde la pe rspectiva rspectiva de agresiones agresiones ilegíti ilegítim m as, y p or otra, otra, la respo nsa bilidad bilidad m oral de los aliados, aliados, que luchan «para defenderse a sí mismos [sic] contra la agresión y la dominación m ilitar litar prusiana prusiana [...], garantía garantía más com pleta pleta y m ás eficaz eficaz c on tra tra la po sibilidad de que esta casta no vuelva a perturbar la paz de Europa» (D. Lloyd Lloyd George en la Cám ara de los Comunes, diciem diciem bre de 191 6). Por Por primera vez, y auspiciada por la Sociedad de Naciones, la resolución del co n flicto flicto tien tien e lugar por vía vía jurídica y no en e l campo de b ata lla lla En Versalles Versalles se firm firm a el juic io inapelable de cu lpabilida lpabilida d d e Aleman ia, de sus aliados y de sus gobernantes, y se define el implacable sistema sancionador (Art. 231. Los gobiernos aliados y asociados declaran, y Ale A lem m a n ia reco re co no ce , qu e A lem le m a n ia y su s a liad o s son so n res p on sa b les , po r haberlos causado, de todos los daños y pérdidas infligidos a los gobier-
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nos aliados y asociados y a sus súb ditos a cons ecue ncia de la la guerra
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(que les fue impues ta por la agresión de Alem ania y sus aliados) aliados)..
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Se ha debatido durante mucho tiempo si el peso de las las sanciones
!
y de la deuda impuestas impuestas a Alemania (que no fue saldada hasta 2 01 0)
¡
influyó influy ó (y (y,, si lo hizo, hizo, has ta qué pun to) en en las las diná micas mic as sucesivas: en la
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afirmac ión del nacionalsoc ialismo y, por tanto, en el estallido del segund o
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co nflicto mundial. mundial. Parece ten er lugar una vez más en la la mod erna Europa
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desfigurada por la contiend a lo lo que el historiador francés François François Gui-
¡
zot declaró en la fra ctu ra cultural entre los siglos xvm y xix, xix, esto es, que
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en la la política ex terio r es donde se man ifiestan «la «las s pasiones vulgares e
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ignoran tes de los príncipes y de los pueblos pueblos». ». Es «el teat ro favo rito de la
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violencia bruta» bruta» y «del «del egoísmo negligente» de los los gobiernos, «tan «tan indife-
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rentes ren tes al bien y al mal, mal, tan ligeros, tan perversos, tan quiméricos». Y en
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ningún otro ámb ito son los pueblos «tan «tan ignoran tes de sus verdaderos
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intereses, están tan preparados para no ser más que instrum entos y
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engañad enga ñados». os». Fatal Fa tales es y to ta lm en te cieg ci eg os fre fr e n te a los e scen sc en ario ar ios s fu f u tu ro s
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ya evidentes, y sordos a los los llamam ientos de intelec tuales y diplomáticos,
!
los «político «políticos s de profesi profesión», ón», repres entan tes de las las potenc ias asociadas, asociadas,
!
se man tienen en la con tinge ncia de los núm eros lucrativos de las seve-
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ras sanciones. Mientras, en la la Alem ania de posguerra, los sentim ientos
¡
más con flictivos y profun dos de venganza y las estra tegias más abyec tas
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de reafirmación nacional empiezan a nutrirse de la depres ión econ ómica
!
y social.
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As í pues, las normas de la «ética de la responsabilidad» responsabilidad» empleadas
¡
com o arma política política de doble filo -y tan obstaculizadas obstaculizadas por Weber du-
•
rante la negociación inter na cion al- son las que articulan articulan la transición transición
!
del prolonga do siglo xix de las las guerras napoleónicas unificadoras, de
¡
las reivindicaciones territoriales más tarde traducidas en la «guerra sin
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sangre» sangre» de los merca dos y de los capitales al breve siglo xx de la «guerra
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civil europea» europea».. De nuevo, nuevo, el Web er cien tífico (y) político de la mod erni-
j
dad da d teor te oriza iza y reco re co no ce en su ép oc a los ac tore to res s de la «lucha «luc ha mortal»
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jamá s adorm ecida del espíritu de con quista territorial en la base del EsEs-
'Atica 'Atica y palitina palitina:: til til trabajo trabajo iiitolrrluul iiitolrrl uul y lax for m as da podrí po drí
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I »1
\\ tado moderno como institución legítima del uso de la fuerza Solo que antes, esa fuerza, encarnada por el carisma de un caudillo «romano» y un Führer pan ge rma nista buscará su legitimación en un «sistema «sistema de va lores» asimismo construido pseudocientíficamente sobre la aniquilación física y burocratizada de cualquier competidor que se halle en el campo de la política, de la existencia y del mundo.
los medios efectivos adecuad adecu ados os para p ara la consecu cons ecución ción del objetivo. objetivo. La La de la «convic «convicción ción» » es, es, por el contrario, una ética de las creencias y de los los con vencimientos interiores del sujeto agente, que sobredetermina la acción sin ninguna ningu na preocupación ni por la naturaleza d e sus m edios y de sus íines ni por la idoneidad y la efica eficacia cia de la relación relación m isma e ntre nt re medios y fines fines.. Estas dos tipologías tipologías éticas de la acción política son, com o ya sabe mos, completamente ideales y. para Weber, también impensables en una acción práctica en la realidad que quiera ser eficaz en la resolu ción de los los problemas y en la dirección pragm ática de la cosa públi pública. ca. Escribe Weber sin ambages:
No es e s que qu e la étic ét icaa de la convic co nvicció ción n coinc co incid idaa con co n la falta fal ta de resp re spon on sabilidad y la ética de la responsabilidad con la falta de convicción. En absoluto absolu to nos referimos a esto. Existe Existe una un a diferencia abismal abismal entre en tre obrar según la máxima de la ética de la convicción convicción,, la la cual -e n térm i nos religiososreligioso s- ordena: «El «El cristiano cristian o obra bien y pone el resultado en manos man os de Di Dios os» », y la acción según la máxima máxim a de la ética de la respon respo n sabilidad, según la cual hay que tener en cuenta las consecuencias (previsibles) de las prop p ropias ias accione ac ciones.6 s.67
67 Max Ma x W eber, La política política como profesión, profesión, o p c it
132 132
Weber
Efectivamente, Efectivamente, si si bien parece n an tinóm tinó m icas en la teoría socioló sociológic gicaa y en la orientación orientación ideoló ideológic gicaa de los propios propios actores políticos políticos -p en se mos en el ejemplo ejemplo weberiano más p ráctico y actual que enfren ta ideo lógicamente la acción p or convicción del del sindicalista (antieconó mico) y la acción por responsabilidad del empresario (capitalista monopo lista )-, en la realidad realidad es conveniente, para We Webe ber, r, que se integren y se completen, comp leten, porque p or sí sola solas, s, tan to la ética de lo ideal ideal com o la de la la praxis pra xis,, no p u ed en resp re sp o n d er a las p re g u n tas ta s y a los l os pro pr o blem bl em as prop pr opio ioss de la la compleji complejidad dad del desorden de sencan tado del mun do moderno. En el panorama tan preocupante y desilusionado trazado en al gunos bocetos de su tiempo, Weber deja entrever el pesimismo que alim enta la actualida d po sguillermina alem ana y las previsiones sobre el éxito del exp erim ento ent o forzad o de la República de Weimar Weimar.. Acaba así po p o r d e se a r ta t a m b ié n el su rgir rg ir e n e s ta e x tre tr e m a b u ro c ra tiz ti z a c ió n d e to d a esfera esfera de la la existencia de una figur figuraa carism ática q ue se exprese con tra la racionalización y el desencantamiento en nombre de una vocación po p o líti lí ticc a q ue sea, en cie ci e rto rt o s en tid ti d o , revo re vo luci lu cion on aria ar ia,, y h aga ag a s a lt a r los ba b a rro rr o te s de la «jau «j aula la de hier hi erro ro». ». Solo u n a p e rso rs o n alid al id a d c a p a c ita it a d a y que inspire confianza y dedicación a las masas públicas lograría lograría des mantelar la rígida organización, el control y la inmovilidad sociopolítica que Weber Weber ve ve ya tan difusos difusos y tan profu ndam ente radicados en el el pre p re s e n te co m o p ara ar a solo so lo p o d e r ser se r s u p erad er ad o s p o r u n a c o n te c im ie n to o un personaje extraordinario. Con demasiada frecuencia, las conclusiones del discurso político de Weber han sido asociadas p or la la crítica crítica -in clu so las posteriores a la la m uerte del au to r- con los los acontecim ientos de la la Alemania Alemania hitleriana hitleriana y la la historia europea e ntre los los años veinte veinte y la segunda guerra m un dial dial.. La política dom inad a po r regímenes regímenes de cará cter carism ático, res po p o n s ab les le s d e los lo s p e o res re s h o rro rr o res re s q u e ja j a m á s haya ha ya vivido viv ido O cc ide id e n te en nomb re de un a com binación peculiar de una ética de la convicci convicción ón y
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un orden burocrático del Estado -en especial en el monopolio legíti mo y en el uso uso despiad ado d e la violenci violenciaa tota l de stinad a al exterm i n io - pareció en realida d el espacio de la realización realización de las previsiones previsiones pe p e sim si m ista is ta s d e Weber, Web er, al igua ig uall qu q u e en o tro tr o s caso ca sos, s, el de la co c o n tin ti n u a c ió n de sus teorías políticas en la realidad. O sea, por un lado, se ha dicho que Weber era un pesimista irrevocable, para quien las degeneracio nes de la m ode rnidad p ued en resolvers resolversee solo solo en la utóp ica «remit «remitifi ifi-cación» del mundo desencantado o en la recuperación de una ética religiosa de la historia pasada universal, capaz de volver a gobernar la acción de la desorientada humanidad. Por otro, se le ha acusado po p o c o m e n o s d e ser se r u n o d e los lo s in te le c tua tu a les le s del de l n acio ac ion n also al soci cial alis ism mo y del fascismo y prec ursor «científic «científico» o» de Hitler y otro s dic tado res del del siglo siglo pasad o. Estas dos consideraciones consideraciones -so bre todo c uand o las reali realizan zan repre repre sentantes de las ciencias histórico-sociales- son contrarias tanto a la diferenciación weberiana entre constatación empírica y juicio de valo valorr, como al principio fund am ental de la neu tralidad de valorac valoración ión de la ciencia sociológica que Weber teorizó y llevó a la práctica con su labor y vocación de científ científico, ico, para no escabullirse escabullirse en ningún mo mento del examen de la realidad, incluso cuando esta se le presenta ba c om o e x tre tr e m a d a m e n te desa de sagr grad adab able le.. En e ste st e caso ca so,, ta m b ién ié n en la man ifestación ifestación de la antinom ia personal científica científica del del cono cimiento histórico-so cial y filosó filosófic fico o del siglo siglo xix xix, Weber se rea firma com o pe n sador «típico» «típico» de una idea de mod ernidad.
APÉNDICES
OBRAS PRINCIPALES
La vasta e incompleta obra de Max Weber cubre, en las cinco fases clásicas de periodización, toda la carrera académica del autor desde sus primeros p asos en el estudio y en el interés por los los asun tos socia les, culturales y económicos de la historia universal y occidental, es decir, decir, desde de sde la dé cada ca da de 1880 880 a 1919 1919-1 -192 920, 0, añ o de su m uerte. ue rte. Sus Sus estudios p ropiam ente históricos son: son: Sobre Sobre las sociedades co merciales merciale s en la "Eda "Edad d M edia ed ia (1889); l a hist histor oria ia agr agrar aria ia romana y su signi signifi ficado cado para el derecho derecho público y privado (1891); l a sit situaci uación ón de fos traba tra bajad jadore oress agríco agr ícolas las en la Al e m a n ia d e l Es E s te del d el Elb E lba a (1892); l a s
(1909). relac relacione ioness agrarias agrarias en la An tigü tig ü ed a d (1909). Los estudios de metodología de las ciencias histórico-sociales que atañe ata ñen n a las las condiciones cond iciones de elección elección y las caracte car acterísticas rísticas de e studio del objeto analizado: 7loscher loscher y %nie %niess y los los problem as lógi lógico coss de d e la escue escuela la histórica histórica de economía política pol ítica (1903); l a «objetividad» objetividad» del conocimiento conocimiento en la ciencia social y en la política social (1904); Est E stud udio ioss crítico c ríticoss sobre la lógica lógica de las ciencias de d e la cultura (1906); Sobre alguna alg unass categorías categorías de la sociología comprensiva (1913); El E l sentid sent ido o de d e la «neu «n eutra tralid lidad ad valoradvalorad va» va» de las ciencias sociol sociológic ógicas as y económic econ ómicas as (1917).
Los estudios de sociología de las religiones, en los que desarro lla el análisis comparado de las religiones, basándolo, por un lado, en la reciprocidad de las condiciones económicas y sociales, y por otro, en la reciprocidad de las creencias religiosas: l a étic ética a protest protestante ante y el espírit espíritu u del capitalismo cap italismo (1906); Sociología de la religión (postumo,
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Wvhvr
Los estudios de sociología general están recopilados en la obra 'Economí omía a y sociedad (1922). po p o s tu m a 'Econ (1922). Los estudio estu dioss sobre la función de la ciencia y de la política en la rea rea lidad contingente, de donde surgen con mayor claridad las tensiones entre en tre la experiencia experien cia persona pers onall y la la «vocación» «vocación» profesional del científico Weber frente a los desafíos de la modernidad, son: La L a cien ci enci cia a como co mo prof pr ofes esió ión n (1919); La L a p o líti lí ticc a com co m o prof pr ofes esió ión n (1919). Publicadas en la mayoría de casos por Weber en forma de ensayos y artículos, artículos, también tam bién po porr entregas, entregas, o como reflexi reflexiones ones en curso en las prin cipales revistas de sociología y ciencias sociales de su época, cuando no en las que él él mismo mism o fundó o dirigió dirigió -com -c om o el Archi Ar chivo vo p ara ar a ciencias cien cias socia sufren tras su muerte m uerte un proceso constan con stante te de reor reor les les y política social-, sufren denación y reedici reedición ón por p or parte pa rte de un grupo de colaboradores colaboradores y alumnos cercanos, en el el que tambié tam biénn hay que considerar consid erar la intervención intervenc ión crucial de su mujer. mujer. Marianne Ma rianne Weber W eber A ell ella, a, com o se ha dicho en e n repetidas rep etidas ocasio nes, se le debe la primera prime ra e imprescindible tutela tute la de d e la obra compilatoria, publicación ón póstum pó stum a de la sistematización de toda Econ Ec onom omía ía y sociedad, socied ad, publicaci la producción produ cción científica científica del autor, autor, comenza come nzada da por p or él mismo mism o en 1909, pero pero que quedó inconclusa inconclusa en el mom ento de su muerte. muerte. Dentro del extenso c onjunto onjun to de las obras de Webe Weberr, gran gran pa parte rte de los los estudiosos estudiosos -e n partic ular de la recepci recepción ón italiana italiana y euro pea - co rrobora la imp ortanc ia de al m enos cinco obras-recopilaciones obras-recopilaciones útiles útiles y esenciales para la com prensión, prensión , incluso en curso, cu rso, del del trabajo y de las las consideraciones conside raciones del sociólogo sociólogo de Érfurt. publicad licados os ent e ntre re E l méto mé todo do de d e las cien c iencia ciass históricohistó rico-socia sociales les: pub
1904 y 1904 1917, los cu cuatro atro ensayos en sayos metodológicos metodo lógicos de Max Weber reunidos reun idos en esta recopilación recopilación represen rep resentan tan la síntesis y el punto pun to de referencia referencia del debate quee en aquellos años atraviesa el qu el mund mu ndoo cultural cultura l alemán sobre la defi defi nición de d e las misiones de las ciencias cienc ias históricas his tóricas y social sociales. es. Según Webe Weber, r,
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la objetividad de las ciencias sociales está garantizada por el método. Gracias a la determin dete rminación ación que qu e cada fenóm eno histórico-social histórico-social recibe de una un a serie serie de causas simultáneas, y acentua ace ntua ndo nd o una u na de estas, estas, se se puede lle lle gar a co nstru ir un modelo que sirva sirva como com o interpretac ión de la real realida idad, d, que una vez aceptado conduce a determinadas conclusiones y garan tiza la objetividad de la investigación científica. Pero no existe ningún análisis científico pu ram en te objetivo objetivo.. Ello Ello implica implica que q ue la ciencia social social no puede pue de dar d ar ning una indicación prá ctica sobre las las eleccione eleccioness que hay que e fectuar en el m arco político. político. Sin Sin embargo, puede darle a quien ac túa la conciencia conciencia de que toda acción acción tiene consecuencias, consecuencias, y permitir le evaluar la eficiencia de las elecciones respecto a las metas deseadas l a ética protesta nte y el espíritu espíritu del capitali capitalismo: smo: criticado en miles miles de ocasiones, este libro cambió el curso de las ciencias humanas del siglo pasado. El lugar central de la obra lo ocupa la pregunta básica que se hacen todos los hombres de su época: ¿cuáles fueron las cir cun stancias que dieron vida vida en Occidente y sol solo o aquí a fenóme nos de civilización convertidos en vigencia universal? La gran intuición de Weber Web er con siste en localiz localizar, ar, en tre las m otivaciones, no solo los incen inc en tivos económicos, sino sobre todo la Reforma protestante y la ética económica que deriva de esta como educación para la acumulación de la riqueza, no co mo p uro beneficio, sino com o deber deb er del individuo. individuo. Precisamente por esta intuición, el texto del ensayo abre la recopi lación dedicada más ampliamente a los estudios de Sociología de la (cfr.) .),, los cuales inte in tenta nta n, a la vez, vez, definir las diferen tes éticas é ticas religión (cfr relig religios iosas as que han determ inado -y có m o- las formaciones formaciones soci sociopol opolííticas mundiales, e introducir la la particular historia del Occidente m o der no en el transc urs o de la historia historia universa universal. l. Sociología de la religión religión: esta es ta colección de en sayos-investiga ciones
constituye la construcción y exposición más articulada de la teoría weberiana sobre las interconexiones causales entre determinados
sistemas de creencias y/o religiones y el comportamiento ético que, influenciado así, produce sistemas económicos específicos y formas de gestión y orden am iento de la la acción social social.. La obra se com pon e de cuatro cu atro volúmenes: el prim ero recoge los los ensayos e nt re 1904 1904 y 1906, 06, Xa ética protes pr otes tante tan te y el espíritu espíritu d el capi capita tali lismo smo-, -, Xas sectas protesta ntes y el espíritu del de l capitalism o, así como p arte de los los artículos de réplica a
las críticas public adas ada s en las revistas de la época. Del Del segun do al cu ar X a étic ét ica a ec econ onóm óm ica ic a de las la s religiones relig iones to volumen, Weber se ocupa de Xa universales-, en el segundo se encuentran: Introducción-, Introdu cción-, 1. Confucion is m o y Tao Taoísm ísmo-, en el tercero: 2. Hin H ind d u ism is m o y Budismo-, y en el cu ar J u d a ism is m o antig an tiguo uo.. En el cuerpo monumental de esta obra, Weber to Ju
analiza fuentes de literatura secundaria que compara con los resultados de sus propias investigaciones investigaciones para r eco nstru ir las las peculiaridades de cada ética económica surgida del sistema de creencias religiosas. Además de diferenciar las religi religiones ones po r su carácter; carácter; en esto s e studio s Weber identifica la teoría sociológica según la cual los movimientos y las corrie ntes religiosa religiosass son u na cau sa y un factor económico en tre los demás, aunque, en su origen y su funcionamiento inicial, no se identifican por objetivos meramente económicos u orientados económ icam ente. Más bien, es el el progresi progresivo vo fenóm eno d e secularización de la ética religiosa el que transforma las antiguas lógicas religiosas en com partim entos económicos y en actividades actividades «intramun danas». B l traba tra bajo jo in i n tele te lect ctu u a l como com o profesió pro fesión: n: este volum en recoge, en rea -
lidad, los textos de dos conferencias que Max Weber dio en 1917 y ci enci cia a com co m o profes pro fesió ión n y Xa po p o líti lí ticc a com co m o p rofe ro fe 1919 en Munich: Xa cien sión. Estas dos charlas se publicaron juntas más tarde porque, en la
vida del autor, el concepto de «profesión como vocación» ( ais Beruf) es una fuente perm anen te de discusión de su obra científ científica ica y de su X a cie c ienc ncia ia com co m o prof pr ofesi esión ón,, Weber inspiración insp iración en la acción política. En Xa
aborda en síntesis el problema del «significado de la ciencia social»
como una entre las formas de «intelectualización» de la experiencia. Esta no prete nd e da r un «juicio «juicio de valor valor» » de la la acción acción hum ana ni res pu p u e s t a s defi de fini niti tiva vass a la ex iste is ten n cia. ci a. El obj o bjet etiv ivo o d e la c ienc ie ncia ia es a y ud ar al individuo individuo a «c om prend er el el signifi significado cado de sus acciones» acciones» ba sánd o se en la valoración técnico-empírica de la adecuación de los medios pa p a ra a lc a n z a r los obje ob jeti tivo voss a p a r t i r del de l cálc cá lcul ulo o d e las la s co n sec se c u en c ias. ia s. En 1.a polític po lítica a como com o profesión, en cambio, Weber se concentra espe cialmente en la acción social del hombre y en la relación entre ética de la acción acción y praxis de la política. política. El El núcleo de su razo nam iento siendo la política el campo de aplicación de la fuerza de uno o más sujetos sobre o tr o s- con siste en la descripción del perfi perfill del «político «político de profesión», profesión», aquel que, guiado po r la «pasión», po r la «responsabi lidad» y por la «amplitud de miras», logra llevar a cabo en la praxis dos modelos de comportamiento ideales antinómicos. Por un lado, debería debería co m portarse de acuerdo a una «ética de la la responsabil responsabilidad idad», », o de acuerdo a un a acción orie nta da racio nalm ente hacia el el cálculo cálculo de los los medios más a propiados para alca nzar el objetivo objetivo en base a la previ previ sión sión de todo s los costes derivados de la la acción para la com unida d. Por el otro, debería saber in tegrar teg rar una un a «ética de la convicción», es deci decir, r, un sistema de valo valores res,, de convencim ientos y de precep tos qu e no tienen ningún fund am ento empírico pero que, si son positivos, positivos, gara ntizan la bo b o n d a d de las la s inte in ten n c io n es q u e m uev ue v en la a cc ión ió n p o líti lí ticc a apriori. 'Economía y sociedad: sociedad: considerada la summa weberiana, esta d es
comunal recopilación de ensayos representa el intento, inacabado, del au tor de siste m atiza r toda la investigaci investigación ón científi científica. ca. Publicada en 1922, primero con la tutela tut ela de su m ujer M arian ne y luego en sucesivas ediciones con la intervención de su alumno Johannes Winckelmann, la obra influyó en la evolución sociológica del siglo siglo,, en pa p a rtic rti c ula ul a r en lo que respecta a los estudios sobre el nacimiento del Estado moderno y a las peculiaridades occidentales y europeas de su estructura bu
MO
Weber
rocrática. La obra se divide en dos partes (variables según las edicio nes) nes):: una primera dedicada a la Teoría de las categorías sociológicas, pr p r e d o m in a n te m e n te m etod et odol ológ ógic ica, a, que qu e to m a los co n c e p to s d e «tip «t ipo o ideal» y «acción social» más tarde aplicados al resto de la tesis. Una segunda parte, bastante más extensa y dividida en secciones, hace referencia a l a economía en relaci relación ón con las ordenacio ordenaciones nes y a las fu f u e r za z a s sociales, socia les, es decir, analiza las relaciones de los factores sociales,
religiosos, jurídicos y políticos con los económicos. Retomando sus amplios conocimientos en el ámbito de la historia europea y univer sal, sal, de la sociolo sociología gía y de las do ctrina ctr ina s religi religiosas osas,, W eber recon struye en su totalidad las interconexiones que establecieron históricamente -y determinaron en paralelo a su producción- la formación del Estado occidental m oderno capitalista. capitalista.
Obras biográficas sobre Weber Inm edia tam ente d espués de su m uerte, la vida vida de Weber se se convirtió convirtió en objeto de una inmensa producción literaria que destacó en todo m om ento el solapam iento biográf biográfico ico y epistemológico epistemológico entre las con diciones de su existencia y las de su investigación. El arco de pro ducción biográf biográfica ica tiene inic inicio io,, jus to después de su desaparición, por pa p a r t e de su m ujer uj er y co c o o rdin rd inaa d o ra d e las l as e d icio ic ione ness p o s tu m a s de obra ob rass y ensayos, Marianne Schnitger Weber, lin a biog biogra raffía de M ax Weber (trad. María Antonia Neira de la Bigorra), Fondo de Cultura Econó mica, México, México, 199 1995; y de sus m ás cer cano s alum nos y con tinuad ores, entre los que figuran Karl Jaspers ( op. cit.), Ernst Troeltsch y Heinrich Rickert. También Tam bién e stá la obra de Reinhard Bendix, Bendix, M a x Weber, an an intellectual portrait (Nueva York: Doubleday Anchor Books, 1962); y
la de Wilhelm Hennis, 11problem a M ax We ber (trad. (trad. italiana; RomaBari, Laterza, 1991).
CRONOLOGÍA
V id id a d e W e b e r
C o n t e x t o h i s t ó r i c o y c u lt u r a l
1864 Nace en Érfurt, Turingia, Turingi a, el 21 de abril. 1867 Marx empieza a publicar T i Capita Capital. l.
1870 18 70 Guerra franco-prusiana. franco-prusiana . 1880 Dostoievski publica Los L os he rm a n o s Kara Ka ram m azov az ov..
1882 Se matricula en la facultad de d e Jurispruden Jurisp rudencia cia de la Universidad de Heidelb Heidelberg. erg.
1883 Hace el servicio milita mi litarr en Estrasburgo. 1889 Obtiene el doctorado.
1891 18 91 Enseñ Enseñaa de derec recho ho en Berlín Berlín.. 1893 Se 1893 Se casa con Marianne M arianne Schnitger.
1883 Nietzsche Nietzs che empieza emp ieza a ha bló ó Zara Za ratu tustr stra. a. publicar A s í habl
142
‘Wtíber
V id id a d e W e b e r
C o n t e x t o h i s t ó r ic i c o y c u l tu tu r a l
1893-1895 Enseña economía política en Friburgo Friburgo.. 1897-1902 Por problemas de salud se ve obligado a abandonar los estudios. Viaja por Europa.
1904 1904 Participa, en Estados Unidos, en el Congreso de las Artes y las Ciencias de Saint Louis.
1903 Fundación del Archivo para ciencias sociales sociales y política social. social.
1914-1918 Primera guerra mundial.
1915 Es llamado a filas. 1916-1917 Trabaja en funciones diplomáticas en Europa. 1918 1918 Da un curso de economía econ omía política en la Universidad de Viena. 1918-1919 Es delegado de Alemania en la Conferencia de Versalles. Participa en la fundación del Partido Democrático Democrát ico Alemán. Alemán. 1920 1920 Afectado Afect ado por po r la fiebre fiebre española, española , muere mu ere el 14 de junio.
1917 Revolución rusa. 1918 Nace la República de Weimar.
ÍNDICE DE NOMBRES Y CONCEPTOS A
acción política 16, 18, 28-29, 106. 110, 119, 122-132 acción social 16, 28, 61- 66. 106-116, 118, 119.120.122,126.127 antisemitismo 28 Arch Ar chiv ivo o para pa ra cien ci enci cias as sociale soc ialess y polí p olític tica a so cial 23.35.67,69
Aron. Raymond 105 Asociación de Política Social 13.15 B
batalla bata lla de Marató Mar atón n 52,57 Baxter, Richard 91 Bekker. Immanuel 12 Bloch, Bloch, Em st 26 Brentano. Franz 72 Brunner, Otto 12
E l trabajo traba jo inte in tele lect ctua uall como co mo profes pro fesión ión 106,
122,124,127,128 E l sen s entid tido o d e la "neutra "ne utralida lidad d valorativa" valorati va" de las ciencias sociol sociológi ógicas cas y económicas
8,49.121 espíritu 39.43,71.73.75-82,95.99 Estado 15.29.78.98.109.112,116-121.125127,131,133 Est E stud ud ios io s crít c rítico icoss sobre la lógica d e las l as cien ci en cias de la cultura 8.26.51.52 F
Fischer, Kuno 12 Foucault, Michel 19 Franklin, Benjamín 75.76.77,92 Freud, Sigmund 19 G
Goldschmidt, Levin 12 C
calvinismo calvinismo 83.86.87.90-92.99 capitalismo 25. 38-40, 66, 67-70. 71-82. 8387,92-93,95-97,99,100.104.119 Comte. Auguste 21,33 Conferencia de Versalles 127-129 Consideraciones sobre el carácter, el desa rroll rrollo o y la historia de los pueblos pueblo s indo germánicos 12
H
Hildebrandt, Bruno 32 J
Jaffé, Jaffé, Edgar 23.68 23.6 8 Jaspers. Karl 8, 30, 38 K
Knies, Karl 12,32 D
Dilthey. Wilhelm 12,43,44.46.56 doctrina de la ciencia ( Wissenschaftslehre ) 43 E 9,30,41,42,64,94 ,95, 'Economí 'Economía a y sociedad 9,30,41,42,64,94 96.102,104,107,113,117 economía industrial 25 El E l Estado Es tado nacional naci onal y la polític a económica 16 E l Capital Ca pital 35 El E l mani m anifie fiesto sto com co m unis un ista ta 35
L
1 a ciencia como profesión 10,16.29.97,106,
122,124 'La 'La ética económ ica de las religion religiones es univ er sales 28 l a ética ética protestante y el espírit espíritu u del capita lismo 9. 23, 25, 66, 67, 71, 72, 75, 79, 80.
81, 81, 86.91.9 86. 91.92, 2, 94, 94, 95-99,100 l a historia historia agraria agraria romana y su significad significado o par p ar a el e l derecho derec ho públi pú blico co y priv pr ivad ado o 8.13 l a nueva nueva Alemania 29
144
“Weber
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
f. f.
l a «objeti objetivid vidad ad » de/ conocimiento en la ciencia social y en la política social 8.
Rickert, Heinrich 44,46.47. 56.124 Roscher, Wilhelm G.F. 32
20. 23.42.4 23 .42.44.45. 4.45.47,57 47,57 . 58. 60.121,125 l a política política como profes profesión ión 10. 16. 29, 106, 122,126.128.131 l a s relacion relaciones es agrari agrarias as en la antigüedad 8
Rosch Ro scher er y TCnies ies y los prob pr oble lem m as lógicos de la escuela histórica de economía políti ca 8.134
l a situación de la la democracia burguesa burguesa en en ‘Rusi Ru sia a 26 l a situación situació n de los los trabajadore trabajadoress agrícolas agrícolas en la Al em ania an ia del d el "E "Este ste del Elba E lba 8.13 l a transición de “Rusia a un constituc iona 26 lismo aparente 26 l a s sectas protestantes y el eespír spírit itu u del ca 25 pit p ital alis ism m o 25
Lukács, Georg 26 Lutero, Martín 77,84,85. 89,97
M Marx. Karl 22,25.35.36.37.38-40.68,105 marxism marx ismo o 35-4 35-41 1 materia ma terialism lismo o 25, 25, 29, 29, 36.48. 69 Meyer, Eduard 52-55 modernidad 10, 14-22, 27. 38-40. 72. 76-78. 82. 83. 99. 108. 115. 116, 118. 121, 130. 133 Mommsen. Theodor 12.14 Montesquieu 21 Münstenberger Münsten berger Hugo Hugo 24 24 P
panger pan germa manism nism o 28 “ Parla Pa rlame mento nto y gobierno gobie rno 29
poder pod er político po lítico 112112-11 116 6 posibilida d objetiva objetiv a 54 positivismo positiv ismo 15-21.33.35, 98.108 Problemas agrario agrarioss alema nes en el pasado y el pres pr esen ente te 25
prote pro testa stant ntism ism o 71 .75. .7 5.81 81 ,83. ,8 3.84 84 ,86, ,8 6,99 99,1 ,119 19 purit pu ritan anism ism o 92 R
Ranke. Leopold von 14 Reforma protestante 85 religión 67-71
Rossi. Pietro 33.104 S
Schmoller. Gustav von 15,32,123 Schnitger, Maianne 22 Sebald, Winfried G. 74 Simmel, George 26.61 Sobre algunas categorías de la sociología comprensiva 8, 27,63
socialismo de cátedra 15,101,123 Sobre Sobre el período del Imperio romano desde Constantino a la migración de las na ciones 12 Sobre Sobre las sociedades comerciales en la E da d Med M edia ia 8,12 Sobre el curso de la historia alemana, con referencias especiales a la posición del emperador emperador y del pap a 12 Sociología de la religión 9.68,95.105
Sombart, Wernet 23.68.72 Spencer, Herbert 33 T
tipo ideal 55-61 trabajo intelectual 106-133 Traverso, Enzo 52 Treitschke, Heirich von 12 Troeltsch. Emst 24 U
“ Una Una crítica cr ítica posit po sitiva iva a la concepc ión m ate at e rialista de la historia 29 W
Warburg, Aby 18-20 Weber, Alfred 30 “Weltge We ltgesch schich ichte te 14 Windelband. Wilhelm 44 Winckelmann,Johannes41,104
La primera aproximación a la figura y la obra de Max Wcbcr (1864-1920) no puede realizarse sin antes atender al debate que siempre ha rodeado la biografía de este autor: ¿Quién es Max Weber? Se le considera un ju ris ta , un teór te ór ico, ic o, un hi sto st o riad ri ad o r, un ec on om ista is ta,, un filósofo filós ofo,, un p nl itó logo lo go y un sociólogo, asi como un estudioso de la racionalización capitalista de la sociedad industrial alemana de principios del siglo xx. Tanto la extensión temática como la profun didad analítica analítica de su obra lo aval avalan an com o una de las las persona lidades más influyentes influyentes del pensam iento co ntem porán eo. Este Este libro sigue sigue las investiga investigaciones ciones y reflexiones a través de las cuales Weber fue capaz de captar los rasgos y las com plejidades del m undo m ode rno con la ayuda de las ciencias ciencias sociales sociales.. Manuel Cruz (Director de la colección)