FOUCAULT- Hermenéutica del sujeto- clase del 6 de enero 1982 (1ra hora)
Tema del curso: determinar en qué forma de historia se entablaron en occidente las relaciones entre verdad y subjetividad. -Esto en relación a la noción de epimeleia heautou (preocúpate por ti mismo) en oposición a la de gnothi seautón (conócete a ti mismo)-. En la antigüedad, el gnothi seatón no era autoconocimiento como fundamento de la moral, no el autoconocimiento como principio de una relación con los dioses. El tema del gnothi seatón aparece en la filosofía de la mano de Sócrates, pero no aisladamente, sino de la mano de la epimeleia heautou. Sócrates es quien incita a los griegos a pensar sobre sí mismos y no ignorarse. (tesis de Foucault: desvincular a Sócrates del conócete a ti mismo, y vincularlo al de inquietud de sí) ¬¬ tres cosas importantes de la relación Sócrates- epimeleia heautou: 1. Sócrates, al incitar a los otros a ocuparse de sí, cumple con una orden divina 2. Sócrates se ocupa de los otros al descuidarse por toda esa actividad.- Relación ‘ocuparse de sí’ con el sacrificioa. Sócrates, el maestro, es quien despierta. b. Def: de inquietud de sí : “es una especie de aguijón que debe clavarse en la carne de los hombres, que debe hincarse en sus existencia y en un principio de agitación, un principio de movimiento, un principio de desasosiego permanente a lo largo de la vida 3. Importancia de la inquietud de sí para Platón, Epicúreos y Estoicos y además para toda conducta racional, cualquier forma de vida activa y moral Ahora bien, en la historia, las significaciones de la inquietud de sí se modificaron y multiplicaron. ¿Qué aparece en esta noción de epimeleia heatou? - que es una actitud con respecto a sí, a otros y al mundo - es una manera determinada de acción, de mirada- implica prestar atención a lo que se piensa y lo que sucede en el pensamiento. - no designa simplemente una actitud volcada hacia uno mismo. También designa una serie de acciones que uno ejerce sobre sí, acciones donde uno se hace cargo de sí, se modifica, se purifica, se transforma y transfigura
Con esta noción de inquietud de sí tenemos todo un corpus que define una manera de ser, una actitud, formas de reflexión, prácticas que hacen de ella una especie de fenómeno extremadamente importante, no sólo en la historia de las representaciones, de de las ideas o teorías, sino en en la historia misma de la subjetividad. ¿Cómo pudo ser que se privilegiara tanto al conócete a ti mismo y se dejara de lado la inquietud de sí -siendo que en un primero momento el segundo enmarcaba al primero-? 1. Hay cierta tradición que nos hace desistir (hoy en día) de dar a todos estos preceptos un valor valor positivo a todos esos preceptos y reglas (morales). En todo el pensamiento antiguo, el ocuparse de sí tiene siempre un sentido positivo, nunca negativo. Más aun, paradojalmente, a partir del ocuparse de sí, aparecieron las morales más austeras de Occidente. 2. Por el denominado ‘momento cartesiano’ que actúa de dos maneras: a. Recalificando el gnothi seautón: sitúa en el origen la evidencia tal como se da efectivamente a la conciencia, sin ninguna duda posible. El rumbo cartesiano se refiere al autoconocimiento (como forma de conciencia). Además, al situar la evidencia de la existencia propia del sujeto en el principio mismo del acceso al ser, era efectivamente este autoconocimiento el que hacía del conócete a ´ti mismo, un acceso fundamental a la verdad. b. Descalificando y excluyendo la epimeleia heautou del pensamiento filosófico moderno ¬ Def. Filosofía: forma de pensamiento que se interroga sobre lo que hay o puede haber de verdad y f alsedad y se puede o no distinguir una de otra. Forma de pensamiento que se interroga acerca de lo que permite al sujeto tener acceso a la verdad, forma del pensamiento que intenta determinar las condiciones y límites del acceso del sujeto a la verdad. ¬ Def. Espiritualidad: es el conjunto de esas búsquedas, prácticas, experiencias que pueden ser las purificaciones, las ascesis, las renuncias, las conversiones de las miradas, las modificaciones de la existencia, etc.; que constituyen, no para el conocimiento sino para parara el sujeto, el precio a pagar por tener acceso a la verdad. Esta espiritualidad tiene tres características en occi dente:
--Espiritualidad postula la que la verdad nunca se da al sujeto con pleno derecho. Ella postula que, en tanto tal, el sujeto no tiene derecho, no goza de la capacidad de tener accesos a la verdad. La verdad no se da al sujeto por un mero acto de conocimiento: es preciso que el sujeto se modifique/ transforme/ desplace/ convierta p en cierta medida y hasta cierto punto, en diferente de sí mismo para tener derecho al acceso a la verdad. – es decir, sujeto como tal no es capaz de verdad-- No puede haber verdad sin una conversión o transformación del sujeto. Esta conversión puede hacerse de diferentes formas: + movimiento de eros: con la forma de un movimiento que arranca del sujeto de sus estatus y condición actual + ascesis/ askesis: trabajo sobre sí mismo, elaboración de sí sobre sí mismo, una transformación progresiva de sí mismo de la que uno es responsable, en una prolongada labor. --Contragolpe de la verdad sobre el sujeto: pata la espiritualidad, la verdad no es simplemente lo que se da al sujeto para recompensarlo en cierto modo por el acto de conocimiento, y llegas a colmar este acto. La verdad es lo que ilumina al sujeto, le da bienaventuranza y tranquilidad al alma. En la verdad y en el ascenso a ella hay algo que realiza el sujeto mismo, el ser mismo del sujeto, o que lo transfigura para la espiritualidad, un acto de conocimiento jamás podría en sí mismo y por sí mismo, lograr el acceso a la verdad si no fuera preparado, acompañado, duplicado, consumado, por cierta transformación del sujeto
Ahora bien, y esto es lo importante: Durante todo el período antiguo y en modalidades diferentes, la cuestión filosófica del ‘¿cómo tener accesos a la verdad? Y la práctica de espiritualidad nunca se separaron epimeleia heatou designa precisamente el conjunto de las condiciones necesarias para que se pueda tener acceso a la verdad. Durante toda la antigüedad, el tema de la filosofía 8como tener acceso a la verdad) y la cuestión de la espiritualidad (cuáles son las transformaciones necesarias en el ser mismo del sujeto para tener acceso a la verdad) nunca- a excepción de Aristóteles- se separaron. En la historia de la verdad en su período moderno se admite que lo que da acceso a la verdad- las condiciones según las cuales el sujeto puede tener acceso a ella, es el conocimiento y sólo el conocimiento. Esta edad comienza a partir del momento en el que lo que permite tener accesos a lao verdadero es el conocimiento mismo y sólo el conocimiento mismo . Hay dos condiciones para obtener la verdad: condiciones internas al conocimiento (condiciones formales, objetivas, reglas formales del método, estructura del objeto a conocer), y condiciones externas (condiciones culturales, morales, condiciones extrínsecas al conocimiento) A partir del momento en el que el ser del sujeto no es puesto en cuestión por la necesidad de tener acceso a la verdad (que depende de estas condiciones), Foucault ve otra era de la historia de las relaciones entre la subjetividad y la verdad. Y la consecuencia de ello es que el acceso a la verdad, que en lo sucesivo tiene como única condición el conocimiento, no encontrará en éste, como recompensa y como cumplimiento, otra cosa que el camino indefinido del conocimiento. Iluminación: momento de transfiguración del sujeto por el ‘efecto de contragolpe’ de la verdad que él conoce sobre sí mismo, ya no puede existir, ya no puede pensar pose que el acceso a la verdad a consumar en el sujeto, como un coronamiento o una recompensa, el trabajo o el sacrificio, el precio pactado para llegar a ella. El conocimiento se abrirá simplemente a ala dimisión indefinida de una progreso, cuyo final no se conoce y cuyo beneficio nunca se acuñará en el curso de la historia, como no sea por el cúmulo instituido de los conocimientos o los beneficios psicológicos o sociales que, se deducen de haber encontrado la verdad cuando uno se tomó mucho trabajo para hallarla. Tal como es en lo sucedido, las verdad no es capaz de transfigurarlo y salvarlo, diremos que la edad moderna de las relaciones entre sujeto y verdad comienza el día en que postulamos que, tal como es, el sujeto es capaz de verdad, pero que ésta, tal como es, no es capaz de salvarlo.