El uso de nuevas tecnologias militares en la guerra de vietnam? Fundamentalmente Fundamentalmente fue el uso del napal a gran escala y los virus para infectar a los ejércitos vietnamitas y evidentemente otros que aún están en el cajón, escondidos y que aún tardarán décadas en salir. Lo curioso de esta guerra era que para paliar los horribles dolores de los soldados americanos cuando se producían desagarros en sus cuerpos por acción de las explosiones les inyectaban Morfina al cortar sus partes gangrenadas etc. Cuando terminó la guerra unos científicos contratados por el gobierno de turno se pusieron a investigar sobre como quitar la dependencia de los soldados a la morfina e inventaron algo maravilloso, un polvo blanco al que llamaron heroína, así el nombre por los héroes guerreros mutilados y drogadictos. Al utilizar esta sustancia el éxito se creyó infalible , todos los que habían sido inyectados con la heroína no necesitaban tomar morfina, claro que después descubrieron que la heroína supuesta salvadora de los héroes era aún una sustancia que generaba mayor grado de dependencia y con un terrible síndrome de abstinencia, mucho más agresivo que el de la morfina extractada del opio. Consecuencias de la guerra en la mentalidad de los estadounidenses
Las consecuencias en la mentalidad de EEUU La oposición a la guerra se extendió dentro y fuera de los EEUU entre la juventud siendo una de las causas del movimiento contra el sistema, creando el movimiento hippie. La guerra dejo a centenares de soldados con adicción a las drogas y afectados por el agente naranja usado durante la guerra. Las universidades estadounidenses estadounidenses fueron escenarios de manifestaciones de protesta en contra de la implicación de EEUU en esta guerra. Se dio el síndrome de Vietnam en el cual EEUU perdió su espíritu de nación libertadora y vencedora. Hubo miles de minusvalidos, amputados, paralíticos y trastornados mentales. 3 de Noviembre: Día de la Independencia de Cuenca
Los patriotas cuencanos estimulados por el triunfo de los guayaquileños del 9 de octubre de 1820 tomaron las armas un día como hoy de ese mismo año y bajo el mando de Tomás Ordóñez, quien fuera segundo alcalde de la ciudad, se atrincheraron en la Plaza de San Sebastián. La acción fue respaldada por una gran parte del pueblo y se proclamó la libertad e independencia de la provincia de Cuenca. La historia recoge los nombres de d e algunos de aquellos aquell os heroicos conspiradores que se encontraban al lado de Ordóñez, entre los que figuraron: José María Vázquez de Noboa, Joaquín Salazar y Lozano, León de la Piedra, José Cisneros, Pedro y Felipe Serrano, Vicente Toledo, Joaquín Astudillo, Zenón de San Martín, Gerónimo Illescas, Fernando Coronel, José Moscoso, Ambrosio Prieto, entre otros.