El lector y el texto literario. La teoría fenomenológica del arte hace hincapié en decir que la obra literaria tiene dos polos, el artístico y estético: el primero hace referencia al texto creado por el autor y el segundo a la lectura realizada por el lector y se debe tener en cuenta tanto al texto como a las reacciones del lector ante dicha obra. En este informe de lectura solicitada por la materia teoría literaria II, se analizará, la postura de Wolfgang Iser con respecto a la relación que se establece entre texto y lector. El propósito que se persigue es llegar a comprender como a través dicha interacción (lector y texto) en el proceso de lectura surge la concepción del texto literario. Para ello se tomarán en cuenta los siguientes ejes: a) el rol activo del lector b) la lectura como una especie de caleidoscopio (proceso de anticipación y retrospección.)
El rol activo del lector El proceso de lectura se va dando en el individuo a medida que este va leyendo y va creando el significado o sentido de aquello que lee; por lo cual este lector cumple un rol permanente. Para poder comprender este rol el autor marca la distinción entre los objetos ideales y reales con los objetos intencionales, a través del concepto de “indeterminación” Iser señala: “La indeterminación del texto moviliza movi liza al lector a la búsqueda de sentido. Para 1
encontrarlo tiene que activar su imagen del mundo”. Este concepto lo toma de Román Ingarden, que se basó en el pensamiento del filósofo Edmund Husserl. Según Ingarden el texto es un correlato de oraciones intencionales y lineales. Ese conjunto de oraciones están relacionadas y evocan un mundo, un espacio, personajes, etc. de esa manera va construyendo ese mundo a través de los objetos intencionales que se diferencia de los objetos ideales, es decir, de aquellos que no son contingentes (no están en
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Iser, Wolfang: “La estructura apelativa de los textos”. En: Rainer Warning (ed.), Estética de la recepción. Madrid:
Visor, 1989, pp. 146.
el mundo real, éstos no nacen, ni mueren son eternos) como también de los objetos reales los cuales son contingentes y están sujetos al tiempo. Los objetos intencionales son aquellos que ocupan un lugar intermedio entre los objetos ideales y los reales, esta intencionalidad apunta a la construcción de ese mundo en el texto y es precisamente el lector el que se ocupa de construirlo. Otros de los factores importantes que participa en el rol activo del lector es el lugar que ocupa la imaginación .Iser revela la importancia de llenar los vacíos ,esto es aquello que se omite y es el lector quien debe reponerlo a través de la imaginación, pero para poder reponer aquello que está secreto debe recurrir a la interacción entre lo que está expresado y lo que está sobreentendido, es decir, lo que está encubierto de alguna forma está controlado por lo que está descubierto.De otra manera el lector no tendría recursos para reponer aquellos vacíos, como dice Iser,” Lo que está oculto estimula al lector a la acción , pero esta acción está también controlada por lo que está revelado; lo explícito, a su vez , se transforma cuando lo implícito se ha hecho visible.”
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La imaginación del lector y el texto en conjunto conforman la dimensión virtual del texto, esta dimensión virtual es la realidad que crea el texto, es por esta razón que el lector a medida que va leyendo se siente envuelto en situaciones que le parecen reales. Según Iser esta dimensión virtual varía a medida que uno lee, por eso muchas veces cuando leemos por segunda vez un libro notamos cosas que antes no las percibíamos, lo mismo sucede entre varios lectores, cada cual construirá una realidad diferente; por ejemplo si dos personas al mismo tiempo contemplan una constelación en el cielo y se les pregunta qué representación les viene a la mente, una dirá un cucharon mientras la otra dirá un arado, lo mismo sucede con el texto.
La lectura como una suerte de caleidoscopio. 2
Iser, Wolfang: “El proceso de la lectura: Un enfoque fenomenológico”. En: Jofre, M. A; Blanco, M. (comps.): Para leer
al lector. Una antología de teoría literaria post-estructuralista. Santiago de Chile: Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación, 1987. También en: José A. Mayoral (comp.): Estética de la recepción. Madrid: Arco/libros, 1987, pp.136.
Se puede decir que la lectura es como una especie de caleidoscopio de perspectivas, recuerdos, preintenciones, etc; que se van modificando continuamente. En el proceso de lectura, el lector , se encuentra constantemente modificando las interpretaciones que va estableciendo debido a que el texto las va frustrando a medida que va avanzando la lectura ,esto se produce a través de los vacíos que el lector va llenando como se explicó anteriormente. A estas actividades constantes y reiteradas que realiza el lector Iser las denomina formulación y modificación, pero no solo estas actividades se realizan, también el proceso de anticipación y retrospección, para Iser , “Cada oración contiene un avance de la siguiente y configura una especie de visor para lo que viene más adelante ;y éste ( lo que viene después) a su vez modifica el “avance,” convirtiéndose en “visor”para lo ya leído.”
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El lector realiza o hace anticipaciones a través de los correlatos de oraciones intencionales ,es decir ,que va anticipando lo que puede pasar a medida que va leyendo, a esto se lo denomina proceso de anticipación mientras que el efecto retroactivo o de retrospección es cuando en algún punto del correlato se desencadena y resuelve todo lo anterior que el lector había anticipado haciendo que asuma un significación distinta ,de esta forma el lector vuelve a formular y modificar los vacíos. El lector debe ordenar los elementos que se presentan en el texto similar a como lo realizó el autor de la obra, a través del acto de la recreación ,de lo contrario no podría percibir el objeto como una obra de arte. Wolfang Iser se ocupa de esta cuestión: Imaginamos anticipaciones, volvemos sobre lo ya leído , tomamos decisiones, reconsideramos esas decisiones, formamos expectativas, nos frustramos cuando no se cumplen, objetamos, meditamos ,aceptamos, rechazamos: éste es el proceso dinámico de recreación .Dos componentes estructurales principales dentro del texto conducen este proceso : primero un repertorio de patrones literarios familiares y de temas literarios
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Iser, Wolfang: “El proceso de la lectura: Un enfoque fenomenológico” . En: Jofre, M. A; Blanco, M. (comps.): Para leer
al lector. Una antología de teoría literaria post-estructuralista. Santiago de Chile: Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación, 1987. También en: José A. Mayoral (comp.): Estética de la recepción. Madrid: Arco/libros, 1987,pp.142.
recurrentes, junto con alusiones a contextos históricos y sociales familiares; segundo las técnicas o estrategias utilizadas para contrastar lo familiar con lo no familiar .
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Se puede decir que el texto logra eficacia cuando el lector logra despojarse de sus preconcepciones, logrando alejarse de lo familiar para poder así acceder a nuevas experiencias que le brinda el texto. En consecuencia podríamos concluir el informe sosteniendo que para Iser la existencia del texto literario surge de la interacción entre texto y lector y esta se desarrolla a través de distintos procesos como anticipación, retrospección, formulación y modificación de expectativas detalladas anteriormente, estas actividades se producen en el proceso de lectura que debe realizar el lector.
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Iser, Wolfang.idem.pp 151.
Bibliografía:
Iser, Wolfang: “El proceso de la lectura: Un enfoque fenomenológico”. En: Jofre, M. A; Blanco, M. (comps.): Para leer al lector. Una antología de teoría literaria post-estructuralista. Santiago de Chile: Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación, 1987. También en: José A. Mayoral (comp.): Estética de la recepción. Madrid: Arco/libros, 1987.
-------: “La estructura apelativa de los textos”. En: Rainer Warning (ed.), Estética de la recepción. Madrid: Visor, 1989, pp. 133-148.
