Las cruces sobre el agua argumento - resumen - comentario LAS CRUCES SOBRE EL AGUA (JOAQUIN GALLEGOS LARA) - 1946 Datos Biográficos de la Obra "LAS CRUCES SOBRE EL AGUA" es una novela que forma parte de la literatura revoluci ón aria de nuestro pa í s. s. Por su contenido ía histórico y sociológico es una obra clásica de la bibliograf í contemporánea. Gallegos Lara ten í a 13 años de edad en los d í as as en que se produce la matanza del proletariado guayaquileño. El 15 DE NOVIEMBRE DE 1922 es uno de los acontecimientos sociales m ás trascendentales trascendental es de la vida pol í tica tica del Ecuador del presente siglo. El desarrollo de la clase obrera en nuestro pa í s se inicia poco despu és del triunfo del Liberalismo Revolucionario de 1895. Entonces los trabajadores se organizan en Gremios y Sociedades, limitándose su acción al mutualismo y la beneficencia. S ólo después del Segundo Congreso Obrero, realizado el 9 de Octubre de 1920, se fortalece la concepción de "clase obrera" y se inicia la lucha contra el mutualismo, formándose sindicatos en sustitución de gremios y sociedades. Es éste el proletariado guayaquileño que aparece en la escena pol í tica tica de la historia social del Ecuador; son ellos los proletarios del 15 DE NOVIEMBRE DE 1922. ¿Porque se dio el tí tulo tulo de "LAS CRUCES SOBRE EL AGUA"? La matanza, el primer ba ño de sangre del proletariado ecuatoriano, fue durante el GOBIERNO LIBERAL DE JOS É LUISTAMAYO. Y fue el Ejército Nacional, con sus batallones Constituci ón, Zapadores del Chimborazo, Montufar, Marañón, Artillerí a Sucre No. 2 y Cazadores de los Rí os, os, el que dispararí a sus fusiles brutales el 15 de Noviembre de 1922. Y que después de este acontecimiento se traslada a las p áginas de la novela a personajes hist óricos, es decir, a figuras de carne y hueso que se han destacado en la vida pol í tica tica del paí s. s. Por ello la pluma roja de Joaquí n Gallegos Lara escribi ó un documento testimonial. testimonial. LAS CRUCES SOBRE EL AGUA, dedicada "A LA SOCIEDAD DE PANADEROS DE GUAYAQUIL, CUYOS HOMBRES
VERTIERON SU SANGRE POR UN NUEVO ECUADOR, EL 15 DE NOVIEMBRE DE 1922", trae fechas, acontecimientos, personajes, organizaciones populares, moviéndose en el escenario de las calles del Guayaquil de las primeras d écadas de nuestro siglo. Es una novela de contenido democrático, patriótico. Se refleja en sus personajes el contenido heroico del proletariado del 15 de Noviembre de 1922. De sus protagonistas y m ártires. En sus páginas se cita a personalidades históricas como MIGUEL ALBURQUERQUE, figura centroamericana que organizó a los trabajadores de Guayaquil para luchar por la revolución liberal que triunfara en 1895 con el general Eloy Alfaro a la cabeza. Aparece también la SOCIEDAD DE CACAOEROS "TOMAS BRIONES", legendaria organización de obreros de nuestro puerto, EL CENTRO FEMINISTA "ROSA LUXEMBURGO" y MAMA -JI-JI, viejita azotada por la fiebre amarilla que viv í a en los barrios pobres de Guayaquil de entonces. En la novela sobresalen también hechos históricos como las luchas del proletariado en Chicago y breves notas sobre el 1o. de Mayo, fecha en que se celebra el D í a Internacional del Trabajo. Adem ás de las luchas de los Comités Populares, las luchas de los obreros del ferrocarril, aparecen en el escenario de la obra lugares legendarios de nuestra ciudad como Puerto Duarte y el Barrio del Astillero. Entre los rebeldes sacrificados el 15 de Noviembre de 1922 sobresalen los obreros del pan, los panaderos, a quienes dedicara Gallegos Lara su novela. El personaje principal de las CRUCES SOBRE EL AGUA es ALFREDO BALDEON. Es importante destacar que en la novela es una FIGURA LITERARIA. Gallegos Lara presenta a Alfredo Baldeon hasta en las guerrillas de Concha, luchando en Esmeraldas, empuñando el fusil junto a los revolucionarios que se lanzan a la batalla por reivindicar la muerte del general Eloy Alfaro. ALFREDO BALDEON en la novela es un personaje de ficci ón. Pero como todos sabemos, Baldeón es una figura histórica, existió realmente en las luchas obreras del 15 de Noviembre. Y Joaqu í n Gallegos Lara le rindi ó homenaje en su obra. ALFREDO BALDEON SILVA, obrero panadero, revolucionario, de 22 años de edad, fue uno de los primeros que cayó asesinado. Baldeon fue Presidente de su gremio, afiliado a la FEDERACIÓN REGIONAL
ECUATORIANO. Argumento de la Obra La novela describe el recorrido vital de dos guayaquile ños: Alfredo Baldeón y Alonso Cortés. El primero es hijo de Juan y de Victoria. Vive en una casa paup érrima del barrio del astillero de Guayaquil. A corta edad se enrola en el ej ército para luchar en Esmeraldas. All í , además de aventuras militares, tiene sus primeras aventuras amorosas. Después de un a ño decide regresar a Guayaquil. En esa ciudad trabajará duramente tanto en un taller como en una panaderí a. Se enamora de Leonor, una chica que vende cigarrillos en la calle. Tras un corto viaje al Per ú en compañí a de su tí o, decide regresar a Guayaquil, donde se casa con Leonor. Los malos tratos que sufre en su trabajo y las continuas rebajas de las pagas, hacen que renuncie a la panaderí a y decida instalarse por su cuenta. Se dedica a fabricar pan con un compañero que tiene un horno, y a venderlo en el centro de la ciudad. Alfredo, Leonor y su madre viven en una casucha junto al basurero municipal. Otro personaje principal es Alonso Cort és que pertenece a la clase media baja y es desde peque ño í ntimo amigo de Alfredo Baldeón. Intelectual por inclinaci ón, intenta continuar sus estudios en la escuela Vicenteocafuerte, pero la dif í cil situación económica por la que atraviesa su familia se lo impide, y comienza a trabajar como tinterillo. Posee habilidades musicales. Se enamora de varias chicas, pero el amor de su vida es Violeta, la vecina de arriba de su casa. Resumen de la Obra En 1922 la situación social en Ecuador est á a punto de estallar. Los sindicatos de obreros de Guayaquil deciden ir, uno tras otro, a la huelga. Alfredo encabeza la lucha de los panaderos. El 15 de noviembre salen a la calle a manifestar su protesta contra la carest í a de alimentos, la subida del d ólar y los sueldos de hambre. El gobierno decide reprimir las manifestaciones, y el ej ército comienza a disparar sobre la multitud de obreros, mujeres y ni ños. En la refriega, tras combatir heroicamente, muere Alfredo Balde ón. Ese mismo d í a, su mujer, Leonor, muere al dar a luz a un ni ño muerto. Por otro lado, Alonso Cortés, que simpatizaba con las reivindicaciones de los obreros, no se lanza a la calle por los ruegos que le hace su familia, aunque al enterarse de la desaparición de Alfredo va inmediatamente a buscarlo. Una vez que se calma la situaci ón, Alonso decide romper su
noviazgo con Violeta, pues considera que esa joven carece de sensibilidad social. Tras un largo viaje en compa ñí a de su madre, regresa a Guayaquil, ciudad que ve transformada por la riqueza que manifiestan losedificios del centro de la ciudad, y por el continuo agrandarse de los suburbios de obreros. Al ver unas cruces sobre el agua del rí o Guayas, pregunta qué significado tienen; un negro estibador le explica que se colocan all í todos los 15 de noviembre, en recuerdo de los muertos que los militares echaron al r í o después de la cruenta represión anti-obrera. Esta novela se ambienta en la ciudad de Guayaquil a principios del siglo **. El protagonista es Alfredo Baldeón, el hijo de un humilde panadero, quien desde joven muestra un carácter rebelde. Seguimos su trayectoria desde que, con quince años, participó en la revolución conchista en Esmeraldas del lado de los sublevados, hasta que, en el a ño 1922, fue uno de los cabecillas de las huelgas de su ciudad natal. A trav és de él vamos conociendo a una serie de personajes que forman parte del crisol en el que sobreviví a la sociedad guayaquileña y ecuatoriana de su tiempo. Comentarios sobre la Obra Sé perfectamente que con el resumen que acabo de presentar no es sencillo hacerse una idea acerca de la trama del libro, pero es que la misma narración se presta a enga ños. Los primeros capí tulos parecen los propios de una cl ásica novela de aprendizaje. Tenemos a un personaje al que conoceremos desde su infancia y al que veremos madurar paso a paso. Pero luego, inesperadamente, se nos presenta otro personaje, Alfonso, un amigo de Alfredo, quien, durante un buen puñado de escenas, asume el protagonismo de la obra. Vemos la dif í cil situación de su familia, la rama pobre de una rica familia costera. Vemos su lucha por progresar y tambi én somos testigos de sus amores. Y, de repente, se esconde en el segundo plano. El protagonismo lo retoma Baldeón pero ya no únicamente. La novela se transforma en una obra coral de la que salen personajes hasta de debajo de las piedras. Muchos de ellos tiene una aparici ón esporádica, apenas muestran rasgos de personalidad con los que podamos identificarlos e, incluso, en ocasiones hasta comparten nombres. Finalmente este batiburrillo se va ordenando y enfocando un poco en los últimos capí tulos, con la trama revolucionaria. Ignoro si se trata de una apreciación personal o bien Nelson Estupi ñán Bass lo hizo premeditadamente, pero me doy cuenta de que la
estructura de “Cuando los guayacanes florec í an” es justo la opuesta de “Las cruces sobre el agua”. Si en aquella comenz ábamos en medio de una revolución, luego se convertí a en una obra coral y finalmente se centraba en las vicisitudes de un protagonista, en la novela de Joaqu í n Gallegos Lara en orden de estas partes es el inverso. Seguramente la idea que parece que intento transmitir es que “Las cruces sobre el agua” me resulta una novela fallida, y esto es cierto relativamente. En efecto el ritmo y el desarrollo de la trama me parecen torpes, innecesariamente frustrante. Considero que la pretensión de Gallegos Lara era pintar un fresco de las gentes de Guayaquil y de cómo se vieron empujadas a pararse y gritar hasta aqu í hemos llegado. Pero la multitud de nombres sin rostro no ayuda a que el lector comprenda la magnitud del suceso. Es contraproducente. La tragedia se vuelve farsa porque no llegamos a sentir cari ño por ninguno de los personajes. Por otro lado “Las cruces sobre el agua” me parece una obra digna de figurar entre los clásicos de la literatura ecuatoriana por una raz ón que ya mencioné al hablar de “Los guandos”. Joaquí n Gallegos Lara maneja una prosa brillante. Las descripciones son m ás sensoriales que gráficas y la reproducción de las maneras de hablar de cada uno de los personajes, muy acertada. Con todo ello lo que quiero decir es que si la desgracia no se hubiera abatido sobre él demasiado pronto nos podrí amos encontrar ante uno de los mejores autores latinoamericanos del siglo **. Al igual que pasa con Gabriel Garcí a Márquez me da la impresión de que la literatura corrí a por las venas de Gallegos Lara, que no le suponí a ningún esfuerzo escribir. Y si esta es su novela m ás conocida (también porque fue la única que pudo concluir) es porque, lamentablemente, nunca llegaremos a conocer sus obras de madurez.