LA LEGITIMA DEFENSA DEL ESTADO COLOMBIANO Por: YASMI JANIT BRITO BELEÑO “Con toda “Con toda finura y profundidad le respondió al célebre Alejandro Magno un pirata caído prisionero. El rey en persona le preguntó: “¿Qué te “¿Qué te parece tener el mar sometido a pillaje?”. a pillaje?”. “Lo mismo “Lo mismo que a ti – ti – respondió respondió- el tener el mundo entero. Sólo que a mí, como trabajo en una ruin galera, me llaman bandido, y a ti, por hacerlo con toda una flota, te llaman emperador”. Agustín de Hipona; La Ciudad de Di os; Tecnos 2007; trad. de Santos Sa ntaMarta y Miguel Fuentes; p.181. (La anécdota también se encuentra en la obra de Cicerón De republica, 3, 14)
El articulo Sociedad y Estado: La configuración del monopolio de la violencia de Ingrid Bolívar es un texto difícil del de l cual es necesario la realización de varias lecturas lect uras para extraer la esencia del mismo, es una interpretación de la configuración del monopolio de la violencia desde la perspectiva de la construcción de Estado. Nos muestra que algunas de las dinámicas de violencia política regional no son prueba del fracaso del Estado colombiano, sino la expresión de las luchas territoriales y sociales propias de su proceso de formación o reconfiguración. Según Ingrid Bolívar “Las relaciones entre el conflicto armado interno y la construcción d e un orden
político en Colombia obligan a repensar algunas de las características de la formación del Estado nacional y de las categorías con que es aprendido”. De la
característica que conlleva la construcción del artículo es al llamado Monopolio de la Violencia para la construcción del Estado, pues según muchos historia dores nace como resultado de la paulatina aparición de una organización política, la constitución de un monopolio de las armas y de la violencia física como estrategia de institucionalización del poder político 1 (Trujillo, Alejandra. Pág. 9).
Entre los
historiadores y politól politólogos ogos se encuentra Tilly, para quien el monopolio de la coerc ión determino la aparición y desarrollo de los modernos Estados europeos, donde la lógica de la guerra explica la construcción y configuración del Estado moderno, pero también la especialización e institucionalización de las organizaciones estatales encargadas del monopolio de la violencia definiría los modos y las formas de hacer la guerra (Tilly, 1992. Pág. 109-148). Otra de las teorías que sustenta la teoría del 1
El abandono de un sistema de dominación fundado en el carisma y la tradición, por uno sustentado en una organización de distribución de funciones donde el poder no dependía de las personas sino del lugar que ocuparan en la sociedad.
monopolio de la violencia es la dada por Max Weber que dice que el “Estado es aquella comunidad humana que, dentro de un determinado territorio (el “territorio” es elemento distintivo), reclama (con éxito) para sí el monopolio de la violencia física legítima. Lo específico de nuestro tiempo es que a todas las demás asociaciones e individuos sólo se les concede el derecho a la violencia física en la medida en que el Estado lo permite. El Estado es la única fuente del “derecho” a la violencia.” (Weber, Max; 2009.Pág. 83-84). No obstante, añade este autor, el Estado es también un conjunto de instituciones conformado por personas que se dedican exclusivamente a la actividad estatal en todos sus niveles. Este cuerpo profesional es denominado por el La Burocracia.
Se evidencia así el Estado como una
construcción humana en la que, sin duda, entran en juego diversos intereses, preferencias y expectativas. Así, el Estado tiene un componente objetivo que son sus elementos materiales y un componente subjetivo que son los funcionarios públicos (incluyendo a los gobernantes) (Trujillo, Alejandra. 2016. Pág. 39).
Retomando la tesis de que el Estado colombiano es un Estado por construir, pues este no surgió como producto de la interacción social y la dinámica política natural del pueblo, sino como muchos Estados latinoamericanos, como una imposición colonizadora en medio del proceso civilizador adelantado por los países europeos en los siglos XV al XVIII, adicionalmente se constituyó como una respuesta apresurada y urgente ante la necesidad de tomar control sobre el territorio y la población, para evitar la recolonización. Según estudios de Paul Oquist y Fernán González, quienes respectivamente han hablado de “Quiebre parcial del Estado” y “Presencia Diferenciada de Estado”. Estos dos conceptos aluden a la manera como
el Estado colombiano, a lo largo de la historia, ha intentado hacerse al monopolio de la coerción sin lograrlo plenamente. Para estos dos autores, la violencia no ha sido plenamente controlada por el Estado, debido a que existen relaciones de poder ente el Centro y la Periferia, donde las estructuras políticas tradicionales esencialmente bipartidistas han prevalecido sobre la institucionalidad del orden nacional, obligando al Estado a negociar con las elites locales, como lo indica Oquist, así como tampoco lo ha sido por la difícil configuración geográfica del país y los procesos de colonización territorial en donde existen lugares en que la
presencia del Estado es precaria.
Ello ha dado paso a la configuración de
organización paralelas y criminales conflictivas con el ordenamiento legal, en ocasiones no reconocido ni aceptado por la población, según González 2. Así pues, parte de las razones como indica Ingrid Bolívar en su escrito por las cuales no se configura y se impone un centro de poder en el país y porque se mantiene la resistencia exitosa de la sociedad frente al control estatal, son las condiciones de reproducción de la vida social, la existencia de espacios vacíos, y de lugares en los cuales no hay presencia del Estado; por lo tanto la posibilidad de consolidar el monopolio de la violencia se desperdiga, se desparrama en grupos sociales particulares. En Colombia, el Estado, regido por la ley positiva, domina ciertos espacios de la vida social, al tiempo que coexiste con otros tipos de ordenamiento social y político. Pero explica también que esa simultaneidad del Estado con otros poderes, no es una relación entre unidades cerradas, acabadas e impermeables, (Pág. 30-32). Y aunque hoy en día desde la teoría de construcción de los Estados Modernos europeos, Colombia sería un estado fallido, pues dada la afirmación de que la violencia legítima es el medio específico del Estado para ejercer soberanía, no es posible, más bien afirmar, que somos una democracia joven y como todo joven construye su carácter, y comete errores durante este proceso. Pero esta afirmación nos plantea nuevas preguntas ¿Cómo llegará a legitimar el Estado colombiano su violencia? ¿Es posible un orden social sin un grupo o grupos que ejerzan la “violencia física
legítima”? ¿Es posible pese a nuestras diferencias, la
transformación social que se necesita para legitimar el Estado colombiano? ¿Es posible llegar a ser un Estado soberano sin ejercer el monopolio de la violencia en todo el territorio?
2
Esta tesis también la comparten y desarrollan más ampliamente Bejarano, A.M & Pizarro, E. (2010). Colombia: el colapso parcial del Estado y la emergencia de los ProtoEstados. En L.J. Orjuela (comp.). El Estado en Colombia. Bogotá: CESO – FCS - Uniandes.
BIBLIOGRAFIA
BOLIVAR, Ingrid. (1999). Sociedad y Estado: la configuración del monopolio de la violencia. Bogotá D.C. Centro de Investigación y Educación Popular (CINEP). (Articulo).
BOLIVAR, Ingrid. Formación del Estado y biografía de las categorías Nómadas (Col), núm. 33, octubre, 2010, pp. 93-107 Universidad Central Bogotá, Colombia. (Articulo).
DE LA CUEVA, Mario. (1996). La Idea del Estado. México: Fondo de Cultura Económica - Universidad Nacional Autónoma de México.
TRUJILLO, Alejandra. (2016). El Estado. Colombia: ESAP.
(2012) http://www.lasangredelleonverde.com/el-estado-como-monopolio-dela-violencia-segun-max-weber/
