INTRODUCCIÓN
Las primeras civilizaciones tenían un interés en el sistema solar, desde los mesoamericanos hasta los griegos. Los autores nos dan resultados de varios científicos que han contribuido con el aprendizaje acerca del sistema solar como Nicolás Copérnico, Galileo, Kepler, Newton, Huygens, William Herschel, Johann Galle. También nos muestra el material y los métodos que realizaron para hacer investigaciones acerca de la astronomía. “En el siglo XIX y la primera mitad del
siglo XX se utilizaron telescopios para observar el cielo, ahora en los últimos años, el hombre por medio se sondas espaciales ha aprendido más de lo que se había aprendido en la antigüedad, y se han descubierto el Cinturón de Kuiper y la lejana Nube de Oort”.
Este libro trata del sistema solar, en la que describe con artículos breves las características más relevantes del Sol, los planetas, lunas, asteroides, meteoritos, cometas, algunos conceptos de astronomía, el Cinturón de Kuiper, Sedna y la Nube de Oort.
“Bien sé que soy mortal, una criatura de un día. Pero mi mente sigue los serpenteantes
caminos de las estrellas. Entonces mis pies ya no pisan la tierra, sino que al lado de Zeus mismo me lleno con ambrosía, el divino manjar”.
-Ptolomeo
Del Sol a los confines del sistema solar. Los hallazgos y observaciones sobre el origen y la evolución del Sistema Solar han llevado a los científicos a realizar análisis detallados que permitan encontrar las innumerables posibilidades que tiene la vida en la Vía Láctea y en todo el Universo. El enigma que encierra el Sol, los orígenes de la Luna, las similitudes y diferencias entre los planetas y la Tierra; satélites, asteroides y cometas, así como el descubrimiento de poblaciones de objetos menores como Varuna y Quaonar, que en los albores del siglo XXI aún no han sido reconocidos como planetas; su evolución, comportamiento y destino, nos van revelando la estructura de un Sistema Solar que hasta hoy en día parece resultado de la casualidad y que se ha extendido a partir del descubrimiento del Cinturón de Kuiper. El Sol que domina a todos los planetas ha consumido ya la mitad del hidrógeno que le será útil y brillará todavía unos 5 mil millones de años para que el resto de los planetas sigan reflejando su luz y puedan seguir siendo observados. Así, tenemos la posibilidad de admirar a Saturno, el más hermoso de los planetas, con su espectacular sistema de anillos; a Júpiter, el más grande de todos, 10 veces mayor que la Tierra; el misterioso movimiento de Urano que gira alrededor del Sol en forma perpendicular; a Mercurio, el planeta de los pies alados que se mueve más rápidamente alrededor del Sol y se encuentra más cercano a él; a Neptuno que fue descubierto mediante matemáticas y con el simple empleo de lápiz y papel, antes de la existencia de los telescopios; o al más pequeño, Plutón, que en la actualidad puede ser no considerado un plantea, sino uno de los más importantes objetos del Cinturón de Kuiper, aunque cuente con un satélite: Caronte.
Sin perder el sentido de un texto científico, Esperanza Carrasco y Alberto Carramiñana hacen uso de su experiencia didáctica y, mediante elementos claros y concisos, hacen una descripción exhaustiva del espectacular Sistema Solar. Algunos de los artículos que conforman este libro —y que nos van llevando al conocimiento de nuestro sistema planetario y los misterios que encierra, los descubrimientos más recientes y lo que se espera de las exploraciones próximas, que probablemente serán efectuadas por robots — fueron publicados con anterioridad en el diario Síntesis. Las características de cada uno de los planetas nos permite identificarlos con claridad. El planeta agua, como se ha dado en llamar la Tierra, es el único lugar del Universo donde sabemos que existe vida, debido, en gran medida, a las grandes cantidades de agua que se hallan en sus tres estados y a la actividad volcánica que regenera constantemente su superficie. Desde George Tucker, Edgar Allan Poe y Julio Verne hasta las misiones para explorar su superficie y las actuales exploraciones sin el protagonismo del hombre, la Luna, nuestro satélite natural, es el más grande laboratorio para estudiar la geología planetaria. Sigue habiendo rocas de 4 mil millones de años que dan información sobre la historia del Sistema Solar. Venus, el gemelo de la Tierra por su semejanza y cercanía, marcó el inicio de la ciencia contemporánea en México, debido a la expedición científica organizada por nuestro país con motivo de su tránsito por el Sol. El dióxido de carbono del que está compuesto causa un efecto invernadero como el que produce la actividad humana en nuestro planeta, aunque no en la misma magnitud. Montañas, desiertos, casquetes polares, cañones y las cuatro estaciones hacen de Marte el planeta más similar a la Tierra, motivo por el cual a principios del siglo
XX se consideraba que también podría albergar vida inteligente, aunque la falta de agua parece evitar que así sea. La complejidad del Sistema Solar visto a través de los ojos de los autores nos permite una mirada más clara de su magnitud en el inmenso Universo en el que la gran variedad de objetos se dividen de manera jerárquica, y en el que el Sol ocupa el primer lugar, ya que contiene 99.99% de la masa de todo el sistema; después vienen los planetas, siendo la Luna una de las más grandes, luego los cometas y los asteroides que son de menor tamaño, y por último los meteoritos que conforman lo que a simple vista y bajo ciertas condiciones podemos apreciar como estrellas fugaces y la luz zodiacal. Además de sus labores de investigación y docencia en el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INOAE), los autores contribuyen activamente en la divulgación de la ciencia. Son egresados de la Facultad de Ciencias de la UNAM y realizaron estudios de doctorado en astronomía en la Universidad de Durham, Inglaterra.
CONCLUSIÓN Este libro “Del sol a los confines del sistema solar”, es un libro de divulgación
científica en la que se describen características de cada uno de los componentes de nuestro sistema solar, así como los últimos descubrimientos que se han hecho en el campo de la astronomía. El tema es importante pues nos hace ver que no estamos solos en el planeta Tierra, más allá de Plutón se ha llenado del cinturón de Kuiper y la Nube de Oort. Esto nos hace ver que tenemos que cuidar nuestro planeta, ya que es el único en nuestro sistema solar en la que hay condiciones favorables para la vida. El lenguaje que emplean los autores es adecuado, pues hablan de modo que los temas sean entendibles por estudiantes y demás lectores sin formación científica. Para dejar en claro las explicaciones utilizan ejemplos, y comparan astros con objetos de uso cotidiano. Además hay imágenes de color en la que se puede apreciar características físicas de estos astros. Este libro no cuenta con bibliografía, pero los autores recomiendan portales de internet para complementar información, que desde mi punto de vista son muy interesantes. Les recomiendo que lean este libro porque es entretenido, usa un muy buen lenguaje para que se comprendido por sus lectores, y hay unas imágenes a color muy acordes al tema. Nos da una visión panorámica de nuestro sistema solar y todo lo que le rodea, nos enseña que no estamos solos en esta Vía Láctea. El solo hecho de ver el cielo por las noches y ver las estrellas y una Luna es un gran misterio, pero sin dudar, es algo increíble.