Cuerdas de tripa Manufactura actual de la cuerda de tripa Cómo elegirla y reconocer su calidad Por Daniela Gaidano Mucho se ha estudiado y escrito sobre los procedimientos de manufactura históricos de las cuerdas de tripa, pero en realidad poco se ha dicho sobre las tecnologías que en ellas hoy se emplean. Con demasiada frecuencia, cuando nos acercamos al historicismo lo hacemos como hombres del siglo XXI, condicionados por nuestras costumbres y en la necesidad de certezas y precisiones. Pero utilizar nuestro parmetro nos lle!a a errores importantes en la e!aluación y en la elección de las cuerdas, buscando, en buena fe, características irrele!antes desde el punto de !ista de su calidad y ol!idando otras mucho ms importantes. "a tecnología de las cuerdas se ha mo!ido a tra!#s de los siglos hacia la modernidad, hacia nue!os cnones est#ticos y comerciales. Cuando los m$sicos, hace unos cincuenta a%os, empezaron a buscar sus orígenes, a$n no se habían arrinconado del todo las estrategias modernas, sino que, de hecho, se ha buscado un compromiso con el sentido prctico, tanto por parte de de los int#rpretes como por parte de los constructores de cuerdas. &oy la tripa ya no se sumerge en el aceite de trtaro ni se !ende en fa'os de treinta cuerdas de dos metros de largo, en el interior de una !e'iga de cerdo llena de aceite de oli!a. ()sto influye en el sonido* +uizs. &oy disponemos de materiales superlisos y calibrados hasta el mil#simo de milímetro, y así estamos inducidos a buscar la misma calidad tanto en la tripa desnuda como en las cuerdas recubiertas de metal. ()sto influye en el sonido* -eguramente. )ntonces es necesario saber distinguir entre comodidad y eceso tecnológico/ si a nadie le ocurriría querer imponer a una orquesta barroca de hoy una gira en carroza en nombre del historicismo, historicismo, (por qu# querer eliminar eliminar los procedimientos químicos químicos
o las mquinas que solo influyen en reducir los tiempos de elaboración de las cuerdas* 0e la misma manera, (tiene sentido frotar con un arco histórico una cuerda in!entada en 1234* Puede ser una consciente elección de compromiso, pero tambi#n una inconsciente demostración de poca profundización. 0e todas formas, lo que cuenta sobre todo es la b$squeda apasionada y constante de un resultado, ideal est#tico 5el sonido6 o mecnico 5la cuerda6 de los que solo tenemos descripciones escritas o iconogrficas.
"a primera diferencia entre el constructor de cuerdas moderno y el antiguo se encuentra ya en el inicio del proceso/ antes, su taller se encontraba ale'ado del pueblo, a menudo cerca de un matadero y de un canal o riachuelo, ya que el cordelero comenzaba a traba'ar sobre los intestinos desde el momento de la matanza. -e ocupaba de !aciarlos, la!arlos en el río y de separar la parte $til de las otras membranas y de las partes grasas, en primer lugar ablandndolos por medio de ba%os alcalinos en los que se aumentaba progresi!amente la concentración, y ms tarde a tra!#s de un frotamiento mecnico con ca%a palustre. "os ba%os alcalinos estaban constituidos por potasa !egetal 5tambi#n llamada aceite de trtaro, es decir, cenizas de restos del prensado de u!a diluidos en agua6, actualmente sustituida por sales alcalinas puras, como el carbonato de sodio. -u función es facilitar la separación de las otras membranas y de las impurezas, pero la potasa !egetal tenía tambi#n otro efecto secundario, un efecto sua!izante/ de hecho estaba tambi#n aconse'ada para sua!izar la piel 57.0o8land la aconse'a para las yemas de los laudistas6. 9o se ha in!estigado suficientemente si el hecho de que hoy sea tan problemtico conseguir de la tripa las torsiones que en el pasado eran usuales, se deba a la sustitución de la potasa por el carbonato de sodio/ por otro lado, esta fase de la elaboración no incumbe casi al cordelero, sino a una específica figura profesional. )n el $ltimo ba%o se podía a%adir un poco de alumbre de roca, que con su propiedad astringente, endurecía ligeramente la tripa para aumentar su resistencia a la tensión .:na !ez la!ada y desengrasada, la tripa se cortaba en dos tiras o bien se de'aba entero pre!io corte $nico lateral. 0espu#s de haber seleccionado, unido y retorcido los intestinos, y de haber tendido en el telar las futuras cuerdas obtenidas, el telar
completo se sometía, en un lugar apropiado, a una acción de blanqueado a tra!#s de una eposición a !apores de anhídrido sulfuroso durante un período que podía llegar a ocho días, durante el cual las cuerdas eran sulfuradas, despu#s !entiladas, nue!amente retorcidas, de nue!o sulfuradas y así sucesi!amente. )l cordelero seguía, por tanto, la elaboración hasta la confección de la cuerda en tripa desnuda, mientras su e!entual re!estimiento de hilo metlico correspondía al luthier o al propio m$sico, así como la elección de las tensiones y calibres ms apropiados.