Coacción y coerción Cuando nos referimos a la coacción debemos verificar que la misma es directa y objetiva, ello porque constituye un mecanismo de presión sobre un determinado individuo, que puede ser en nuestro caso el contribuyente. Es el Estado quien pone énfasis a su poder de Auto tutela para lograr poner orden. La coerción es en cambio indirecta y subjetiva, también constituye un mecanismo de presión pero específicamente va dirigido al resto de contribuyentes. A través de la coerción se procura generar una sensación de riesgo en el contribuyente, con la finalidad que realice el cumplimiento de sus obligaciones de naturaleza tributaria. Podemos citar como ejemplos de coerción el hecho que la Administración Tributaria realice acciones de cobranza coactiva con la media cautelar de extracción de bienes, sobre los contribuyentes que son deudores, utilizando para ello camiones con grandes banderolas
que
contienen
frases
como
“Aquí
se
transportan
bienes
embargados”. Coacción es el acto de obligarte a realizar algo que no quieres llevar a cabo. Coerción es la posiblidad de que se te obligue a cumplir algo que habías prometido. Esta es la definición de coacción: coacción: Fuerza o violencia que se hace a alguien para obligarlo a que diga o ejecute algo. Esta es la de coerción: coerción : Presión ejercida sobre alguien para forzar su voluntad o su conducta. Es decir que coacción es violencia directa mientras que coerción es presión. La coacción es un término empleado frecuentemente en Derecho y ciencia política que se refiere a la violencia o imposición de condiciones empleadas para obligar a un sujeto a realizar u omitir omi tir una determinada conducta. Coacción en la teoría del Poder La coacción es utilizada por el Estado como herramienta principal de cara a establecer su poder normativo. Así, el único capaz de utilizar la violencia legítima es el poder público, el cual hará uso de la coacción para imponer un
determinado cumplimiento legal, pero sobre todo, la utilizará para fundamentar la prevención general basada en la amenaza del uso de la fuerza, o coerción Coacción en el Derecho penal En el Derecho penal existe el delito de coacción, que supone utilizar la violencia para impedir a la persona realizar un acto que la ley no prohíbe. En el sentido contrario, también se produce coacción cuando se obliga a la persona mediante la violencia ilegítima a adoptar un determinado comportamiento en contra de su voluntad. Coacción en el Derecho civil En el Derecho civil la coacción supone un vicio del consentimiento. Por lo general se establece la nulidad de pleno derecho o la inexistencia de todos los actos realizados bajo coacción. La coerción es la amenaza de utilizar la violencia (no solo física sino de cualquier otro tipo) con el objetivo de condicionar el comportamiento de los individuos. El Derecho y los sistemas legales, en general, se sustentan en la amenaza de la sanción más que en la utilización de la propia violencia. Así, la persona no actúa de la manera prohibida por conocer las consecuencias negativas que le impondría el ordenamiento jurídico. Tipos de coerción La coerción legal El Estado es el único titular de la violencia legítima, y en un Estado de Derecho, tal violencia está completamente regulada mediante normas que contienen prohibiciones, con sanciones en el supuesto de que sean incumplidas. Así, para que una norma sea considerada legal, ha de ir acompañada de un poder coercitivo, y en caso de incumplimiento, éste tendrá que suponer una medida coactiva.
La forma por excelencia de coacción legal es el código penal, que establece una serie de comportamientos que traerán como consecuencia la imposición de una pena. La coerción internacional A nivel internacional son frecuentes las coerciones pacíficas, como son las amenazas de sanción económica o diplomática. Por otro lado, el Derecho Internacional contemporáneo prohíbe tajantemente la utilización de la amenaza al recurso de la fuerza, es decir, la amenaza de intervención bélica. La coerción cibernética Se caracteriza por sus implicancias mediante al uso de "ciertos mecanismos de acoso tecnológico gracias al manejo inadecuado de herramientas informáticas y de comunicación, como correos electrónicos, mensajes de texto desde celulares, chat, blogs, fotologs o paginas donde se hacen públicos ciertos videos, los cuales pueden ser expuestos con la intención de ridiculizar al otro sin medir las consecuencias. Este “juego de poder” o dominación... en base al fastidio de uno para la gratificación del otro..."(Gamero, 2007:3) Otras coerciones Algunos consideran que las corporaciones capitalistas pueden ejercer fuerzas coercitivas a través del control de recursos escasos, como la comida, el agua, la vivienda y otros que los individuos pueden considerar vitales, como en el concepto de la economía hidráulica. Los escépticos a su vez argumentan que en un mercado abierto, sin regulaciones, no es posible la coerción debido a que el libre ingreso de competidores impide de hecho una actividad monopólica y coercitiva. Los monopolios de facto usualmente desaparecen en poco tiempo y son más bien los monopolios de jure los que se sostienen debido a la coerción legal que utiliza el Estado para regular sectores económico en beneficio propio o de terceros