Título: Título: Al otro lado de la pantalla. Autor: Autor: Alba Quintas Garciandia. Garciandia. Editorial: Editorial: Ediciones SM. 1º Edición: Edición: 2012. ISBN: ISBN: 978-84-7!-!""-9. Páginas: Páginas: 127. Formato: #$stica. Precio: Precio: 7%!. Premio Jordi Serra i Fara
Volver la vista atrás revela lo bueno y lo malo del pasado. Recordamos con cariño y nostalgia una época que nos maltrató con saña hasta convertirnos en lo que somos hoy. Somos el fruto de nuestros actos, como bien revela lba !uintas "arciandia en Al en Al otro lado lado de la pantalla pantalla..
Acabábamos Acabábamos de cumplir diecisiete años, íbamos a segundo de Bachillerato y, y, como tantos de nuestra misma edad, teníamos ganas de comernos el mundo. mundo. #icen que la adolescencia es ese momento en la vida en el que vivimos de nuestros sueños$ un momento en el que nos creemos inmortales, poder poderos osos os,, pero pero en el cual cual somo somos, s, al mismo mismo tiempo tiempo,, las criat criatura uras s más más vulnerables. %ncomprendidos, vagamos en una nebulosa de incertidumbre e indecisión de la que &nalmente salimos convertidos convertidos en el proyecto proyecto de adulto que desarrollaremos en años venideros. 's una tare tarea a dif(ci dif(cill retr retrata atarr con con veros verosimi imilit litud ud una etapa etapa como como esta, esta, un mundo dividido y enfrentado donde solo e)isten blancos y negros, y no es hasta madurar cuando llegamos a apreciar la verdadera paleta de grises. *n mundo, además, al que nos enfrentamos en cada paso. Recha+ados, solos, apartados de todo cuanto una ve+ cre(mos comprender, debemos aprender a sobrevivir en un ambiente hostil en el que los amigos, mucho más que la familia, serán el pilar básico en el que apoyarnos para lograr salir adelante. ero -qué sucede cuando esos amigos se alean de ti, cuando los apoyos se dispersan en el aire como la arena en la playa cuando sopla un viento demasiado fuerte/ 0omo un edi&cio con cimientos inestables, cada palabra se presenta como un violento temblor que amena+a con destruirnos, con hace hacern rnos os caer caer.. 1 las las cons consec ecue uenc ncia ias s del del más más m(nim m(nimo o acto acto pued pueden en ser ser imprevisibles.
“-«Jamás había visto un día tan hermoso y cruel» -cité, y respiré hondo. A mi espalda oí un último susurro - Mac… beth.”.
Al otro lado de la pantalla cuenta la historia de cómo un inofensivo temblor se convirtió en un terrible se(smo que lo arrasó todo y a todos a su paso. 'sta novela coral a2na el testimonio de siete personaes, protagonistas de una trágica historia que marcó las vidas de todos ellos desde aquel botellón de un &n de semana de noviembre de segundo de 3achillerato. 0asi a modo de interrogatorio policial, la trama se va revelando a través de los diferentes testimonios. 'l detonante, un testigo, la mirada aena, el apoyo, la usti&cación, el culpable y la v(ctima. Solo al &nal tenemos ante nuestros oos los datos necesarios para reconstruir lo sucedido, lo esencial de la historia, y este es uno de los puntos más positivos que adudico a la novela. 4a autora no se ha entretenido en descripciones super5uas ni en frivolidades cuya &nalidad fuese la acumulación de detalles para la meor comprensión del te)to. Su narración se limita a lo m(nimo indispensable, a aquello que necesitamos saber, deando en el aire muchas cosas que, por cercan(a o por e)periencia, podemos permitirnos presuponer. 'sto convierte la obra en una intensa sucesión de relatos que nos muestran 2nicamente lo que vio y sintió cada personae y nada más. s( evita el tedio que, de seguro, habr(a provocado un e)ceso de datos y de usti&caciones que el lector no necesita para formarse una opinión de este relato. Su escritura presenta un grado de madure+ sorprendente, dada la edad de la autora. 's una lectura sencilla y 5uida, con un vocabulario apropiado y adecuado a la temática. Se agradece la pátina de educación y buenas formas que recubre toda la obra, que no se rebaa a la chabacaner(a y al insulto fácil para mostrar el comportamiento propio de los adolescentes. 'n ning2n momento se mani&esta insulto alguno de los que 4uis va recibiendo a lo largo del curso, lo cual no impide que ese horror que sufre el oven se vaya transmitiendo, precisamente, a través de su ocultación. Sin embargo, y qui+ás por la uventud de lba !uintas, hay ciertos elementos que se van repitiendo a lo largo de sus casi ciento treinta páginas que, por tópicos y manidos, rechinan en el avance de la lectura. 0omo la novela en general, se trata de una cuestión de contrastes. 6rente al impactante comien+o de cada cap(tulo, que aumenta su fuer+a verbal a través de la repetición de estructuras 789i nombre es :uan 0arlos. 1o soy
el que empe+ó todo;<$ 89i nombre es 'strella. 1o soy la que siempre supo;<$ 89e llamo 9anuel. 1o soy el irresponsable;<, etc.=, la transición entre escenas, re5e)iones y acción de distinto tipo se reali+a de una forma menos hábil, con el t(pico y tópico 8empecemos por el principio< 78ero será meor que empecemos por el primero de los episodios de esta historia fat(dica;<, p. >=. 0uando la re5e)ión de los personaes se aparta de la l(nea de acción que dicta la historia, la vuelta al camino tra+ado es algo for+ada, y eso es algo que hay que cuidar. Sin embargo, es una cuestión que, sin duda, meorará con la práctica. *na cuestión que me escama un poco y que, como lo demás, oscila entre un e)tremo y otro de la balan+a, es la creación de los personaes. Siendo la mayor(a adolescentes, inclusive la autora, algunos elementos de su personalidad, de sus palabras y sus actos se re5ean con una crude+a más propia de la realidad que de la &cción$ en cambio, algunas otras partes, en mi opinión, pecan de ingenuidad y de un candor que apunta a una versión dulci&cada de ese espinoso lugar que es el instituto. 'ntiendo que se trata de una cuestión meramente pragmática$ al &n y al cabo, la &cción busca embellecer las cosas y presentarlas de modo atractivo. Son e)igencias del guión. ero quien ha vivido e)periencias similares de las cuales no dista demasiado en el tiempo necesariamente reconocerá que la realidad supera con creces a la &cción y considerará algunas partes de la novela como algo demasiado difuso, modi&cado bao la óptica del Señor #isney. 'n general es una novela de fácil lectura, atractiva y, hasta cierto punto, muy realista 7veros(mil, que dir(a ristóteles=. 'l hecho de presentarnos solamente esas visiones sesgadas la convierte en una apro)imación original y muy atractiva a los hechos que narra y, aunque u+guemos bao nuestro punto de vista de adultos los actos de estos óvenes, lba consigue que se sienta empat(a por todos y cada uno de ellos. !ui+ás quien más me patine sea el profesor, Roberto, uno de los dos 2nicos adultos que aparecen en la novela. Siendo yo también docente, se me hace necesario distinguir los uicios personales sobre un individuo y los uicios morales sobre el comportamiento de un alumno$ la inteligencia amás usti&cará la crueldad. ero esto ya es una mera cuestión personal y, como bien es sabido por todos, hay tantas opiniones como individuos habitan la ?ierra 7e incluso alguna más, eso seguro=. Si bien el ep(logo es algo que yo eliminar(a, el verdadero &nal de la novela, el 2ltimo cap(tulo, es magn(&co. 'n ning2n momento a lo largo de los diferentes testimonios uno se hace a la idea de que todo cuanto ocurre provocará ese desenlace. 9i más sincera enhorabuena en esto, oven literata, es dif(cil causar tal sorpresa en nuestros d(as cuando todo parece que ya ha sido escrito. Al otro lado de la pantalla es una ventana a un mundo que en ocasiones nos es demasiado aeno. 'l ciberespacio, la adolescencia, el instituto, lugares todos donde impera la ley de la ungla y donde solo el más fuerte sobrevive. ero también es el recordatorio de que la amistad y el amor son un apoyo
más fuerte que la peor de las tormentas. 'ntretenida, recomendable, os hará pensar.