Las 7 caídas del justo, parte III Cuarto servicio Apóstol Sergio Enríquez Enríquez O. México, 15 de enero del Año de la Misericordia
En la Biblia vemos que hubo varias personas a las cuales el Señor les llamó justos y que son nombradas por sus respectivos nombres, por ejemplo, Abraham, Job, Lot, Noé, David, etc. Sin embargo, cuando analizamos la vida de estos personajes y sus hazañas, vemos que ellos cometieron faltas delante del Señor y luego fueron levantados por Dios, pero a pesar de sus caídas el Señor jamás dejó de llamarles justos. La Biblia dice que siete veces cae el justo y vuelve a levantarse (Proverbios 24:16), esto nos habla de la misericordia de Dios para con nosotros. Para que una persona que ha caído pueda volver a levantarse, primeramente debe reconocer que esta caída y por qué ha caído. En las Escrituras vemos que los gálatas habían caído de la gracia gracia y no lo sabían, por esta razón el Apóstol Pablo les abre sus ojos y el entendimiento para que puedan reconocer su condición y volver a levantarse. En este año de la misericordia mucho pueblo de Dios que se encuentra caído será envuelto por la bondad del Señor y restaurados. En los estudios anteriores explicamos cuales fueron las siete caídas de David y como él pasaba a ser el prototipo de un ministro del Señor que a pesar de amar a Dios y anhelar hacer Su voluntad, en ocasiones sucumbe ante la debilidad de la carne y le falla al Señor, pero Él en Su misericordia le vuelve a levantar y restaurar. Ahora bien, en esta ocasión estaremos analizando la vida de Noé y cuáles fueron las siete caídas de este hombre a quien Dios certifica como un hombre justo. Es importante que conozcamos que fue lo que pasó en la vida de este hombre ya que la Biblia revela que en el final del último tiempo será como en los tiempos de Noé y Lot. Conocer cuáles fallas fueron las que cometió Noé nos servirá de ejemplo para que podamos identificar si estamos cometiendo los mismos errores que él cometió y, de ser así, los rectifiquemos para que seamos levantados por Dios. Génesis 6:9 LBLA Estas son las generaciones de Noé. Noé era un hombre justo, perfecto entre sus contemporáneos; Noé andaba con Dios .
Como vemos en este pasaje de la Escritura, Noé era un hombre a quien Dios consideraba justo. Proverbios 24:16 LBLA porque el justo cae siete veces; y vuelve a levantarse, pero los impíos caerán en la desgracia .
Este versículo se contextualiza con el versículo de Job, cuando dice que en la séptima caída lo levantará el Señor. El hecho de que diga que Dios lo va va a ayudar quiere quiere decir q el séptimo levantamiento será para siempre. Muchos de nosotros hemos fallado al Señor, sin embargo, Dios nos ha levantado y aun continuamos el camino rumbo al arrebatamiento. La Biblia dice que muchos caerán para para ser purificados y limpiados pero luego serán levantados. A pesar de caer, Dios aun nos sigue llamando justos. Él no nos trata como producto desechable, sino que nos restaura y nos da oportunidades pues sobre todo juicio triunfa la misericordia del Señor.
Este estudio puede imprimirse y reproducirse por cualquier medio siempre y cuando se cite l a fuente de donde se obtuvo. www.ebenezer.org.gt
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Las 7 caídas del justo, parte III Cuarto servicio Apóstol Sergio Enríquez O. México, 15 de enero del Año de la Misericordia
LAS SIETE CAIDAS DEL JUSTO NOE -No obedece la instrucción de Dios:
Génesis 8:16 LBLA Sal del arca tú, y contigo tu mujer, tus hijos y las mujeres de tus hijos.
La instrucción que Dios le dio a Noé, antes de salir del arca fue, que primero saliera él, su mujer, sus hijos y las nueras de Noé. Génesis 8:18 LBLA Salió, pues, Noé, y con él sus hijos y su mujer y las mujeres de sus hijos.
Este pasaje nos muestra que Noé no obedeció al Señor y cambio el orden de Dios, pues al salir del arca, el orden fue el siguiente: Noé, los hijos, su mujer y las mujeres de sus hijos. Uno de los problemas de hoy en día dentro del pueblo de Dios, es que a la mujer no se le da el lugar que le corresponde tener dentro del matrimonio. Es necesario mantener el equilibrio entre nuestra vida ministerial y nuestra vida familiar. No es correcto que el ministro ponga más interés en darles atenciones a las ovejas y apoyarlos en todo tiempo, mientras que al cónyuge lo coloca en último lugar y no le da el tiempo y las atenciones que se merece. Hacer esto no solo es contrario a lo que la palabra de Dios nos dice que hagamos, sino que también contribuye a que se abran puertas conducentes a la infidelidad y adulterio. Analicemos si hemos estado cayendo en este error y pongámosle un alto, pues aunque lo que hagamos este bien y estemos atendiendo al rebaño con amor y dedicación, si el orden que Dios estableció para este respecto se encuentra alterado por nosotros, igualmente nos encontramos en desobediencia al Señor. Rescatemos nuestro matrimonio y familia dándoles las atenciones y todo el amor que ellos merecen; solo así estaremos en el orden de Dios, nuestro hogar restaurado y nuestra esposa ocupando el lugar que le corresponde tener. -Dedicarse a labrar la tierra y plantar una viña :
Génesis 9:20 LBLA Entonces Noé comenzó a labrar la tierra, y plantó una viña .
Convertirse en labrador de la tierra implica el que la mirada se encuentra depositada en las cosas terrenales y en ir tras lo perecedero. Esta es la razón por la cual Noé había caído, su mirada había sido desviada de lo eterno hacia las cosas vanas y efímeras que el mundo ofrece. Nosotros somos peregrinos en esta Tierra, nuestra casa está en los cielos y debemos permanecer con nuestros ojos alzados al cielo. Como ministros primarios del Señor, tenemos la responsabilidad de predicar la sana doctrina que nos ha sido enseña y dirigir al rebaño hacia el encuentro con el Señor Jesús. Si cambiamos nuestro mensaje y nos desviamos de la sana doctrina, sustituyéndola por mensajes Este estudio puede imprimirse y reproducirse por cualquier medio siempre y cuando se cite l a fuente de donde se obtuvo. www.ebenezer.org.gt
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humanistas que esclavizan la mente del pueblo a lo terrenal y material, estaremos pecando contra Dios y siendo infieles a nuestro llamado. Debemos rogarle a Dios para ser hallados dignos de escapar de los juicios que han de venir sobre los moradores de la Tierra y velar en todo tiempo que nuestras vestiduras sean blancas delante de Su presencia. Necesitamos hablarle a la gente en todo tiempo acerca de la verdad de Dios y no acerca de nuestra verdad; o sea, hablarle a la gente solo y únicamente de la sana doctrina y decirles que Cristo viene pronto. -Beber, embriagarse y desnudarse :
Génesis 9:21 LBLA Y bebió el vino y se embriagó, y se desnudó en medio de su tienda. Beber : Cuando hablamos de la copa y el vino, vemos que la Biblia menciona la copa de bendición
(sangre de Cristo), la cual tomamos en la mesa del Señor y nos hace participar de un pacto nuevo; pero también se nos habla de la copa de los demonios en donde se nos ofrece el vino de la fornicación de Babilonia. Todo aquel que beba de este vino y participe de la mesa de los demonios se contamina con la inmoralidad de la ramera (Babilonia). No debemos hacer mezclas ni alianzas con los impíos o personas que no temen al Señor, ni mucho menos participar de las celebraciones paganas que ellos practican. La Palabra de Dios nos exhorta a que no participemos en las obras estériles de las tinieblas, sino más bien, desenmascaradlas (Efesios 5:11). Embriagarse: En la Biblia vemos que una de las formas en las que una persona puede
embriagarse es con ajenjo (amargura), y si permitimos que la raíz de la amargura brote en nuestro corazón, corremos el peligro de no ser alcanzados por la gracia del Señor y no ser arrebatados. En nuestra vida como creyentes y ministros del Señor, enfrentaremos situaciones en las que seremos lastimados por las personas que amamos o aun por las ovejas que pastoreamos, seremos menospreciados, vituperados e incluso sufriremos la traición; todo esto puede afectar nuestro corazón y llenarnos de amargura si no corremos a refugiarnos en los brazos de Dios, dejamos pasar la ofensa, perdonamos a nuestro agresor y bendecimos la vida de todos aquellos que nos han pagado un bien con mal. Correr a los brazos de nuestro Señor y poner nuestras cargas en Él, hará posible que nuestro corazón reciba el bálsamo de Dios, el cual será escudo contra toda amargura. Desnudarse: Esto nos habla acerca de la cobertura. No reconocer la autoridad de los cinco
ministerios y no refugiarse bajo la cobertura nos pone en una posición vulnerable a los ataques del enemigo; de la misma manera sucede si luego de estar bajo una cobertura ministerial, nos rebelamos a ella y la abandonamos, esto último ya sería desnudarse. En Isaías 4:1, la Biblia nos habla de siete mujeres (tipifican la Iglesia) que echaron mano de un hombre (figura de Cristo) en Este estudio puede imprimirse y reproducirse por cualquier medio siempre y cuando se cite l a fuente de donde se obtuvo. www.ebenezer.org.gt
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aquel día, diciendo: Nuestro pan comeremos y con nuestra ropa nos vestiremos; tan sólo déjanos llevar tu nombre; quita nuestro oprobio. Debemos permanecer bajo la cobertura que Dios nos ha dado y ser sujetos a ella para que seamos bendecidos y podamos evolucionar. -Se durmió:
Génesis 9:24 LBLA Cuando Noé despertó de su embriaguez, y supo lo que su hijo menor le había hecho ,
Noé se durmió y no se dio cuenta de lo que su hijo le había hecho sino hasta que despertó. Mucho pueblo de Dios se encuentra dormido o se han acomodado al estilo de vida de este mundo y no se dan cuenta que han comenzado a involucionar y a apartarse de las promesas de Dios. Es nuestro deber permanecer como centinelas pues el Señor ya pronto viene; pero también debemos advertirle al pueblo de los peligros de la noche para que en todo tiempo permanezcan velando. -Maldijo a su hijo y nietos:
Génesis 9:25 LBLA hermanos .
dijo: Maldito sea Canaán; siervo de siervos será para sus
Otra caída de Noé, es que maldijo a su hijo Cam y a su nieto Canaán, una vez descubrió lo que su propio hijo le había hecho. La instrucción que Dios nos ha dado es que bendigamos a nuestra familia, hermanos en la fe y aun a nuestros enemigos. Que declaremos palabras de bendición pues bendiciendo a otros seremos bendecidos nosotros mismos. De una misma boca no deben salir palabras de bendición y palabras de maldición, nosotros debemos aprender a proferir palabras de bienestar sobre la vida de las personas aun cuando éstas nos hayan hecho algún mal. Maldecir es hablar mal de una persona, por lo que si en algún momento dado murmuramos contra alguien o decimos una palabra mal intencionada para dañar su testimonio, nos es contado como una maldición dicha sobre esa vida. Debemos ser muy cuidadosos con esto y muy en especial con lo que hablamos cuando pensamos que nadie nos oye, pues Dios está atento a todo lo que hacemos y conoce aun nuestros más íntimos y profundos pensamientos. Examinemos nuestro interior y si detectamos alguna de estas siete cosas en nuestro comportamiento, renunciemos a ellas y pidamos perdón al Señor, quien en Su inmensa misericordia y bondad nos perdonará y nos levantará.
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