Villancicos Arequipeños de Navidad

Villancicos arequipeños de Navidad

Entre la Nochebuena y el 6 de enero se debe adorar al niño todas las noches, y para hacerlo, se forman varias pandillas de adoradores niños con chinchines o pajarillas. Forma de Adorar

Las pandillas van de casa en casa ofreciendo adorar al niño, la interpretación al adorar es al unísono generalmente el jefe de la pandilla es el que lleva la voz principal y los demás solo siguen. Villancicos

Por su forma literaria y musical, podemos identificar 7 villancicos, pero ya que son cantados de forma seguida pareciera ser uno solo. Los villancicos son los siguientes: ♪1.- Salutación ♪2.- a) Presentación de los pastores.

b) Ofrecimiento que se le hace al Niño. c) La picardía infantil. d) La Exigencia y convocatoria a los santos. e) La dignificación que hacen del trabajo cuando este sirve a lo divino. ♪ 3.3.- Huachi huachi torito. ♪ 4.4.- Tribulación. ♪ 5.5.- Poemas. ♪ 6.6.- Despedida. ♪7.♪7.- Exclamación final.

La tradición religiosa del pueblo de Arequipa es muy grande y antigua, hecho por lo cual es conocida nuestra ciudad como “La Roma del Perú”. En las manifestaciones públicas multitudinarias de la fe f e popular: las procesiones se suele cantar temas de creación anónima, que si bien no podemos precisar su origen por sus formas podemos deducir que son expresiones de nuestra musicalidad popular. Similitud Es necesario señalar la similitud que existe exi ste entre los canticos religiosos populares y nuestros yaravíes. De hecho musicalmente hablando, varios de estos canticos son yaravíes. Entre todos estos canticos, destacan tres por su belleza y similitud con los yaravíes: “¿Hasta cuándo, hijo perdido?” “Te aclamamos: Abogada” “Perdona, Dios mío”

Miserere Arequipeño En viernes santo se interpreta el miserere Arequipeño, obra anónima, bellísima y tradicional, interpretada por una orquesta integrada por violines, saxofón, trompetas, tuba, y unos cuantos niños varones que con sus voces blancas llevan la “primera voz” y unos hombres maduros de voces quebradas pero tremolantes. Que cantan “la segunda”. Para terminar la brevísima descripción de la procesión del santo sepulcro en Arequipa, cierra esta manifestación la imagen de la virgen dolorosa. Acompañada de un gentío enorme y lo sones de una marcha.