Thierry Kuntzel Kuntzel
El trabajo del flm
Delimitada por una apertura y un cierre a negro (**), la primera secuencia de M 1 constituye un relato completo cuyo resumen podría ser parodiado por el siguiente cuento: "a!ía una ez una ni#a, $ue en su camino encontr% al hom!re de negro& 'a madre espera!a en la casa pero todo ue en ano: la ni#a sigui% al hom!re y ste la mat%+& ste micro relato cumple una unci%n desenca-ada en relaci%n al .lm $ue inicia, ya $ue centra el inters so!re lsie y la se#ora /ec0mann y hace interenir marginalmente al asesino y, de modo an m2s distanciado, al policía y al ciego, pues de allí en adelante, la estructura actancial reposar2 so!re ellos tres& 3e puede o!serar un desenca-e similar entre el plano 1 y el resto de la secuencia: la mu-er y los ni#os presentados son "indierentes+ a la historia, pero la sitan en orma e-emplar dando a la ez sus presupuestos y sus desarrollos uturos& 'a presente lectura de un comienzo de .lm es el ".lm+ de un comienzo de lectura, pues se inscri!e en un proyecto m2s asto: el de analizar la producci%n del sentido en la totalidad del corpus de M& 'a dilataci%n (analítica) $ue se ha realizado del primer plano es coneniente para4 la dilataci%n necesaria de la primera secuencia en relaci%n a la sucesi%n del sintagma ílmico en la compresi%n de los otros eintisis planos se enta!la un acercamiento a la pr2ctica semi%tica propia del .lm, a su tra!a-o de representaci%n representaci%n e5clusiamente desde el punto de ista de la secuencia considerada como un te5to cerrado& cerrado& ste segundo modo, regresio regresio en relaci%n relaci%n a la uerte e5pansi%n inicial de los c%digos, marca el car2cter 6moderadamente plural+ del te5to ílmico cl2sico7 rente a una imagen sin leyenda se pueden plantear las interpretaciones m2s contradictorias, pero si dos im2genes est2n en sucesi%n, o si una imagen est2 asociada a una !anda de sonido, el lí!re -uego de de los signi.cantes se limita& I. Descr escrib ibir ir
18& Despus de la presentaci%n general, $ue transcurre so!re un di!u-o de la letra M, la pantal pantalla la $ueda $ueda osc oscura ura,, mient mientra rass se esc escucha ucha en o una oz inantil& 9pertura desde negro: picado so!re un patio donde hay unos ni#os agrupados en círculo en medio de ellos, una ni#a canta: canta: 2°. 6spera, espera an un poco m2s pronto el hom!re de negro endr2 y con su pe$ue#a hacha te descuartizar2+& 'a muchachita se#ala a uno de sus compa#eros de -uego 8 dicin dicindol dole: e: 6T, 6T, uera uera" " ste ste se retir retira a y la canci% canci%n n recom recomien ienza za 7 & ;na panor2 panor2mic mica, a, tras tras mostrarnos mostrarnos un grupo de !otes de !asura en una es$uina del patio, asciende so!re la achada de un inmue!le misera!le y se detiene .nalmente en un !alc%n donde hay ropa sec2ndose& ;na mu-er em!arazada, con una cesta llena de ropa, entra en campo por la iz$uierda y se asoma (contra
=u2ntas eces tengo $ue deciros $ue no cantis esa maldita canci%n? @=u2ndo me haris caso8 (para sí misma): >3iempre esa maldita canci%n?& 'a mu-er sale de campo por la derecha la c2mara muestra el !alc%n unos instantes m2s& sta descripci%n del plano inicial de M, legi!le como restituci%n del .lm, $ue se limita a transcodi.car lo m2s 6.elmente+ (con precisi%n, e5haustiamente) posi!le, pretende se#alar, A por su recorte en astas le5ías (anotadas 1 8, 2°, 7 ), lo ar!itrario de su trazado (6descri!ir un círculo+): pareciendo 6amoldarse+ a lo continuo B, lo troza, lo (des)
@=%mo ha!lar al mismo tiempo del -uego de la luz, de la estructuraci%n de la imagen, de la e5presi%n gestual y mímica de la 6mu-er del cesto+, del tono de su oz8 De la prousi%n de las materias de la e5presi%n $ue el .lm organiza, la descripci%n s%lo toma algunos elementos: 3e puede descomponer un plano, no se le puede reducir6. este lado, lado, la descripci%n se sita tam!in más allá de su o!-eto, cuya comple-idad de De este lengua-e es ignorada en las condiciones normales de recepci%n el .lm es consumido como una historia con eectos m2s o menos compensadores o, con una modalidad m2s aparentemente ela!orada (crítica periodística, cine clu!s), como una colecci%n de 6temas+ (la ida, el amor, la muer muerte te), ), o como como sign signi. i.ca cado do&& Ee<e e<err el .lm, .lm, es prop propon oner erse se toma tomarr en cuen cuenta ta el proces proceso o
signi.cante, rechazar la manipulaci%n impuesta por el espect2culo para preguntarse c%mo unciona esa manipulaci%n& Fero, por m2s $ue se ea el .lm, su orden no cam!ia en a!soluto& Mientras $ue en un li!ro yo puedo circular con li!ertad (detenerme, oler atr2s, comparar los enunciados, enumerar las unciones inculadas a los dierentes actantes), en el cine estoy ineita!lemente sometido al encadenamiento de las im2genes y al Gu-o sonoro, estoy regulado a su ritmo& l .lm y el relato se deanan uera de mí, sin interrupci%n posi!le de mi parte& "Mirar+, es interenir: ralentar o detener elH moimiento (la continuidad) para o!serar la inmoilidad (la discontinuidad) $ue lo sostiene , aislar motios isuales o sonoros, conrontarlos mediante una uelta atr2s& "Mirar+ es escuchar<er el .lm como ningn usuario del cine puede hacerlo, reescri!ir el espect2culo en orma de te5to, decapar los planos de opacidad reerencial $ue ocul tan el tra!a-o de signi.caci%n& III. Engranar / Desgranar
'a elecci%n del primer plano de un .lm 6cl2sico" Idonde no se plantean pro!lemas de "suspensi%n del sentido" AI para resoler el pro!lema de sa!er por dónde comenar, no de-a de plantear un pro!lema te%rico, de!ido a una especie de "e5ceso" de signos: @el an2lisis de!e realizarse selectiamente so!re algunos c%digos de los cuales se intentar2, desde el primer momento, esta!lecer su im!ricaci%n, o tal ez de!er2 darse por satisecho con su 6le< antamiento" (enumeraci%n) sin preocuparse por su lugar (importancia, rol) en el conte5to glo!al8& "n una poca en $ue se desarrolla un anatismo de lo isual $ue con.na con el disparate+J, ale la pena correr el riesgo de proponerse cali.car a la apertura de este .lm como "dispersi%n"& l primer plano de ! ser2 pues recorrido no para engranar los c%digos (en ista de la reconstrucci%n de un sistema $ue li!eraría el uncionamiento ílmico glo!al), sino para desgranar solamente algunos, en su reluciente pluralidad& L& "Des#inauguración del relato, lex$a % Tradicionalmente, s%lo es tomada en cuenta la primera imagen diegtica, lo $ue implicaría a$uí comenzar el comentario del .lm con la aparici%n de los ni#os pero un priilegio tal acordado a lo isual, al 6pleno" ic%nico, ocultaría la ret%rica de este comienzo de .lm& acer escuchar la oz de la ni#a antes de su aparici%n en la imagen es se#alar $ue el .lm ha comenzado o, m2s an, $ue el .lm a a mostrar ragmentos (signi.catios) de una historia (de una ralidad) $ue e5istiría uera, antes o despus de l& sta "desinauguraci%n" o!sera!le en la presentaci%n, orma parte de un código de la narración $ue no tiene nada de especí.camente cinematogr2.co: e5iste igualmente en las noelas por cartas, 6manuscritos pretendidamente encontrados" y otras ormas de 6escamoteo del signo", de las cuales ha!la Eoland /arthes"& Fero esta desinauguraci%n tiene en el .lm un eecto retroactio $ue no se produciría en un te5to literario& 3i el .lm ha comenzado antes de la primera imagen diegtica, @por $u no remontarse hasta su comienzo eectio (la aparici%n so!re la pantalla del primer otograma) e incluir la presentaci%n, el título, en el an2lisis8 &. !
l !lanco de "M+, contrastado so!re el ondo negro de una sí lueta, a!re una pregunta $ue lamenta!lemente la traducci%n a algunos otros idiomas desía, de!ido al agregado de la e5presi%n 6el maldito" so!re el título original alem2n& 3er2 necesario esperar hasta la mitad del .lm para $ue esta letra encuentre su lugar en el relato, para $ue el acío $ue ella ha!ía inicialmente creado sea en parte llenado: cuando interiene como marca IM(ar0ie< rung)I $ue uno de los miem!ros de la !anda de malhechores traza con tiza en su mano para imprimirla so!re la espalda del asesino& Fero el c%digo 'ermen(utico no se encuentra sin em!argo desactiado& ;na pregunta su!siste: @por $u 6M+8& 'a letra pertenece, como inicial,%)a una do!le red te5tual constituida en dia< cronía, en la o!ra de 'ang, por los M "abuse# y en sincronía, en el .lm, por el título original y los dos su!stituios de.nitios, todos con la pala!ra M%* 7 (%rder)J , asesino& n su materialidad gr2.ca, 6M+ remite, a tras de %El 'ombre de los lobos y la interpretaci%n $ue da 3erge 'eclaire en +orps de la lettre , a una sim!%lica de las piernas1N Idesignaci%n literal de los antasmas del asesinoI& 9sí, en el plano $ue precede al descu!rimiento de la 6M" marcada en su espalda, el asesino contempla, en compa#ía de una ni#a (posi!le utura íctima) un escaparate con -uguetes& l encuadre, $ue se eecta desde el interior del negocio, es tal, $ue la cara de Feter 'orre se inscri!e entre las piernas de un mu#eco articulado su disposici%n, cuando los hilos se tensan, recuerda sin e$uíocos la dcima tercera letra del ala!eto, eecto acentuado por la presencia, entre los muslos del mu#eco, de una pe$ue#a "M+ !lanca so!re ondo o!scuro I@reGe-o8, @ragmento de insignia8I, de todos modos, puesto all$ para remarcar& 'a enigm2tica 6M+ del título, por lo tanto, no encuentra -am2s una 6clae+ plantea inicialmente Iem!lem2ticamenteI la cuesti%n del sentido signi< .cante, nexus de numerosas cadenas signi.cantes, es el lugar donde se articulan diersas lecturas, $ue lo e5panden sin agotamiento&
&I.De algunos códigos de lo -isual Ferteneciendo a un código cinematográfco en sentido estricto 1, la apertura desde negro
ale en relaci%n a su pare-a, el cierre (plano 4, er inra) los dos procedimientos %pticos $ue
enmarcan la secuencia permiten considerar esta 1Hserie de planos como un sistema te5tual relatiamente cerrado del sintagma ílmico glo!al & 9l picado de los ni#os se opondr2 un contrapicado de la 6mu-er del cesto+ (le5ía 7): estas dos desiaciones en relaci%n a la 6norma" del encuadre horizontal han dado !astante $ue ha!lar a los gram2ticos del cine, $ue les han adosado signi.cados del tipo: pe$ue#ogrande, aplastado aplastante, dominado dominante& sta simplista grilla interpretatia (@los signi.cados de connotaci%n mencionados cali.can la imagen o su denominaci%n metalingOística8) no pertinente incluso en el .lm cl2sico, puede a$uí ser retomada como indicaci%n con-encional de una relaci%n de uerzas con la cual 'ang -ugar2 con humor un poco m2s adelante, en el di2logo del e-ete de anteo-os y del "gigante+ $ue lo acusa de ha!er a!ordado a un ni#o en la calle& Lndicaci%n conencional por$ue es cuestionada, minada por el ha!la en la continuidad del plano& 9dem2s de estos c%digos 6tcnicos", la imagen ehicula un código de composición $ue se mantiene como una constante ormal en todo el .lm y un código de las acciones so!re el cual la secuencia a a uncionar en parte& l primero corresponde a una organizaci%n del espacio pict%rico delimitado por el cuadro en ese momento preciso: ta ronda de los ni#os remite al motio de la circularidad, motio $ue el .lm repite con similar constancia a lo $ue ser2 denominado cruado en la le5ía 7& n cuanto al c%digo de las acciones, ste plantea el primer trmino de una oposici%n $ue desarrollan los planos siguientes, la del jugador y la del trabajador, de.niendo, por un lado, a los ni#os (y al ni#o hroe de la secuencia lsie) y por el otro, a las madres y a la madre em!lema, la se#ora /ec0mann& &II.
De algunos códigos de lo sonoro, lex$a )
n la segunda le5ía interienen la materia sonora y musical $ue el cine "ha!lado+ toma a cargo& 'a canci%n inantil orma parte de la esera de lo ldico inantil (c%digo reerencial): autenti.ca al mismo tiempo a los persona-es de la pantalla y les atri!uye un "iido+ $ue el espectador no pone en duda& l mensa-e lingOístico a!re el código narrati-o so!re el cual la secuencia secentra: la espera. speraangustiante, situada de entrada en una cadena repetitia (6espera, espera&&&+) se da como de corta duraci%n ("un poco m2s+) y como espera del ni#o, mientras $ue de hecho est2 desplazada so!re la madre en el resto de la secuenciaespera satis0ec'a(esta espera es tam!in deseo1 'os ni#os ser2n los nicos ayudantes del asesino) por la llegada del "hom!re de negro+ 4, imagen tomada al pie de la letra en la primera aparici%n del asesino& n cuanto al "pe$ue#a hacha+ su interenci%n no es inocente: su .lo e$uiale al de los cuchillos, alrededor de los cuales se constituye el antasma del asesino, como lo muestra la secuencia de la cuchillería& ntrelazada con el c%digo "narratio+ Ila canci%n constituye una especie de matriz en la cual los elementos uturos del gui%n est2n en germenI el código de la narración se encuentra moilizado: la canci%n dirigida, en ia digesis, por la ni#a a los otros ni#os, es emitida s%lo para un receptor, el espectador, $ue de esa manera es puesto a la e5pectatia& 'a eliminaci%n de un ni#o en el -uego da, en sí, la primera impresi%n de la eliminaci%n esperada: el crimen& 'a canci%n recomienza y con ello redo!la los c%digos ya desplegados, e5acer!a la tensi%n de manera indirecta, inorma so!í
El discurso 2naturaliado3, lex$a 4
3o!re la repetici%n de la canci%n, se inicia una panor2mica $ue llea la mirada de una escena a otra& 'a conmutaci%n 4J demuestra $ue una tal "conducta" no es inocente& l moimiento podría ser reemplazado por un plano del patio, seguido por un plano del !alc%n pero altarían entonces dos $ndices)), los !otes de !asura y la achada del inmue!le, cuyo signi.cado de connotaci%n hay $ue !uscarlo por el lado de 6miseria+ y "tristeza+ Idonde se marca la acci%n en el .lm de un código del decorado. Ptra posi!ilidad sería: un plano del patio, un plano de los !otes de !asura, un plano de la achada, un plano del !alc%n& 9$uí se reela toda la signi.cancia del código cinematográfco1 si !ien en esta segunda conmutaci%n la suma de inormaciones es aparentemente la misma, se pierden dos rasgos: la pseudo5naturalea del moimiento (la cura del recorrido descu!re los o!-etos "como por casualidad+) y el ínculo de los ni#os y la mu-er, tomados en un mismo espacio, m2s all2 de la oposici%n de los encuadres& Discurso parado-al ste, planteado por este te5to ílmico (pero tal ez esta parado-a es comn a toda una zona del cine cl2sico), donde los signos unas eces se ocultan, y otras se dan como tales, donde el tra!a-o !orra sus trazos al mismo tiempo $ue se muestra& For otra parte, despus de este discurso "ergonzoso" se instaura un discurso altio: la c2mara, al encuadrar el !alc%n antes de la entrada de la 6mu-er del cesto" no tiene la coartada de la motiaci%n (por e-emplo, pala!ras o cuyo lugar de emisi%n la c2mara !uscaría), sino $ue se#ala al espectador $ue "algo a a pasar"), es decir, suscita la acci%n& M2s an, el tiempo muerto permite la o!seraci%n de la composición de la imagen Icruzada en toda su longitud por una !alaustradaI y de un motio isual del cual har2 uso toda la secuencia: la ropa sec2ndose&
'a mu-er em!arazada, en la $ue se unen dos semas $ue atraiesan la secuencia Ila rmiQemidad y la esperaI llea un cesto, índice Rdel trabajar (ersus jugar, código de las acciones# y releo47 "natural+ para el plano siguiente: de!iendo ser lleado a la se#ora /ec0mann, implica "con l" a la c2mara& l "acento !erlins+, indicaci%n autenti.cante, connota lo "popular", lo $ue es redundado por la estatura de la mu-er, su orma de caminar, su ropa, e incluso el tim!re de su oz& 9dem2s del signi.cado glo!al del mensa-e lingOístico, lo pro'ibido, son transmitidas signi.caciones ane5as: lo "ya comenzado", o!serado desde el comienzo del .lm (6ya+ y 6siempre+), el miedo, marcado por la repetici%n (6maldita+, 6maldita+), y la impotencia de la pala!ra ("@cu2ndo me haris caso8+)& Eadical alteridad: los ni#os no responden& 'a mu-er se retira& 'a c2mara se mantiene so!re el !alc%n acío y silncioso, acío y silencio $ue, le-os de la pesadez de una metaísica a lo /ergman, son el apoyo de un suspenso narratio: la espera y la ausencia son inscritas en el te5to, y no en una interpretaci%n del mundo&
L& El 'ilo de la secuencia l 6hilo" de la secuencia, $ue hemos ralentado al e5tremo en el comentario del primer plano, puede seguirse m2s r2pidamente sin $ue, sin em!argo, esto impli$ue 6imitar+ el moimiento real del .lm: la descripci%n, como mirada $ue lo a!arca en su totalidad, no restituye el tiempo del relato sino $ue lo congela 4B, transorma el desarrollo sintagm2tico del espect2culo en un 6cuadro" sincr%nico del te5to Ilo $ue no e5cluye la o!seraci%n ulterior del moimiento $ue lo caracteriza& 'os elementos elegidos para la (representaci%n de M, lo han sido en unci%n de criterios de inormaci%nI se4Ctrata de dar un digest legi!le, de donde ser2n eliminados al m25i< mum los trminos tcnicos Iy en unci%n de ciertos recortes pertinentes: los lugares, las acciones, los o!-etos& 4& Falier& 'a mu-er llea el cesto a la se#ora /ec0mann y se seca la rente suspirando: IMu-er: 69un$ue prohí!as cien eces a los muchachos cantar esa horri!le canci%n del asesino, todo el día la repiten&&& como si ya no tuiramos !astante con ese asesino+: I3ra /ec0mann: 6>D-alos, mientras los escuchamos tenemos la seguridad $ue est2n ahí?+& 7& =ocina: 'a se#ora /ec0mann llea el cesto hasta el ondo de la pieza y se pone a laar ropa en una tina& B& =ocina& Flano m2s cercano so!re la se#ora laando& 3onido o de un relo- cuc: la se#ora /ec0mann leanta los o-os& C& =ocina& Flano del relo- $ue marca las 14 horas& 9l cuc se mezcla el sonido en o de una campana& N& =ocina& 'a se#ora /ec0mann se endereza y se seca las manos sonriendo& & =alle& 'a campana termina de sonar so!re un plano de 6salida de escuela+& ;na ni#a (lsie), $ue llea una pelota en una red, se despide de sus compa#eros& H& =alle& lsie intenta atraesar, un autom%il se lo impide& ;n policía se acerca en ese momento para detener la circulaci%n& A& =ocina& 'a 3ra& /ec0mann dispone la mesa para la comida& 1&=alle& lsie corre haciendo re!otar la pelota so!re la acera& 11&=alle& lsie hace re!otar la pelota contra un anuncio& 'a c2 mara sigue la trayectoria de la pelota para enmarcar un cartel de la policía donde se lee: 61& marcos de recompensa& @Suin es el asesino8& Desde el pasado lunes 11 de -unio han desaparecido el escolar Klaus Klaitz0y y su hermana Klara+, etc& mientras la pelota re!ota a la iz$uierda, la som!ra de un hom!re se proyecta a la derecha& Il hom!re, en o1 6>Tienes una hermosa pelota?& @=%mo te llamas8& I lsie, en o1 6lsie /ec0mann+& 14&=ocina& 'a 3ra& /ec0mann corta legum!res y las a echando en una sopera humeante, luego leanta los o-os& 17&=ocina& l relo- (encuadre idntico al del plano C) marca las 14 horas 4 minutos& 1B&=ocina& 'a 3ra& /ec0mann tapa la sopera& Euido de pasos en o. 'a 3ra& /ec0mann se apresura a a!rir la puerta& 1C&scalera& Dos ni#as su!en (contrapicado): I3ra& /ec0mann, en o1 6@lsie no ha uelto con ;ds&8+& I'as ni#as: 6Uo, no ha uelto con nosotras+& 1N&Falier& 'a 3ra& /ec0mann mira algunos instantes hacia lo alto de la escalera "o1 ruido de pasos de las ni#as), despus se inclina so!re la !arandilla y entra en la casa& 1&=alle& l hom!re compra a un endedor ciego un glo!o en orma de mu#eca lo da a lsie mientras sil!a& 1H&=ocina& 'a 3ra& /ec0mann pone la sopera en !a#o de ma< ría& Euido de llamador en o1 ella se precipita hacia la puerta sonriendo& 9parece un hom!re $ue le orece 6un nueo episodio+ de un olletín por entregas del cual garantiza el 6suspenso+, la 6emoci%nQJ y la JVsensaci%nQ 1& I3ra& /ec0mann: "Dígame, 3r& Wehr0e, @no ha isto ;d& a mi hi-ita lsie8+& Il endedor: 6Uo, @no era ella $uien su!i% en este momento8& I3ra& /ec0mann: 6Uo, ella no ha uelto an a casa+& Il endedor: 63eguramente no tardar2+& Despus de la partida del 3r& Wehr0e, la se#ora /ec0mann duda unos instantes, y se inclina por la !arandilla& 1A&scalera& Ficado ertical so!re la escalera acía& n o, la 3ra& /ec0mann grita: 6>lsie?+& 4&=ocina& 'a 3ra& /ec0mann entra, leanta los o-os& 41&=ocina& l relo- (er planos C y 17) marca las 17 horas 1C minutos& l cuc suena nueamente& 44&=ocina& 'a 3ra& /ec0mann a!re la entana y se inclina llamando: 6>lsie?+&
47&scalera& 'lamado en o de la 3ra& /ec0mann, so!re un plano de >a escalera acía (er plano 1A)& 4B&/uhardilla& 'lamado en o de la 3ra& /ec0mann so!re un plano de la !uhardilla acía donde se seca la ropa& 4C&=ocina& 'lamado en o de la 3ra& /ec0mann so!re un plano de la mesa $ue ella ha preparado para la comida de lsie& 4N&=ampo& 'a pelota de lsie entra en campo por la derecha rueda entre hier!as y ho-as para inmoilizarse en medio del cuadro& n o se escucha la oz atenuada de la 3ra& /ec0mann& 4&=ampo& l glo!olsie?+ Xundido a negro& LL& iguración @=%mo apresar un 6!loc+ te5tual donde se articulan motios sonoros y motios isuales sin recurrir a un modelo $ue rinda cuentas de 6pr2cticas semi%ticas distintas a los de los lengua-es er!ales+84N& Xreud ha ela!orado un modelo este tipo en 7a Interpretación de los 8ue9os): con la noci%n de 6tra!a-o del4Hsue#o+, traducci%n de un te5to latente en un te5to mani.esto& sta operaci%n Iesta producci%n I est2 sometida a una e5igencia, la toma en consideración de la representabilidad (6atenci%n a los medios de la puesta en escena+ en la reormulaci%n lacaniana4í Q: 6ntre todos los ínculos posi!les a los en%menos esenciales del sue#o, son siempre preeridos a$uellos $ue permiten una representaci%n isual+ 7& l te5to mani.esto no de!e ser leído como di!u-o Io el .lm como un espect2culoI sino como una red de signi.cantes, de trminos $ue representan un trmino ausente, una cadena de signi.cantes, un signi.cado en uga& sta representación no de!e entenderse solamente en trminos de 6e$uialenciasJJ sim!%licas de o!-etos (som!rero Y %rganos genitales masculinos), de cali.catios (el "pe$ue#oQJ Y el se5o), o de escenarios m2s comple-os (decapitaci%n Y castraci%n)& 'a repre< sentaci%n modela igualmente la estructura glo!al del te5to: traduce en la materia especí.ca del sue#o las relaciones l%gicas, los 6cuando", "por$ue", 6igual $ue+, 6si !ien+, 6esto o a$uello+, y todas las otras con-unciones sin las cuales no podríamos comprender ni una rase ni un discurso+71& s la !s$ueda de los principios de una representaci%n de este tipo "ampliada", lo $ue su!yace a la 6gran sintagm2tica de la !anda de im2genes" esta!lecida por =hristian Metz 74& 9sí, la secuencia se inscri!e en cuanto a su representaci%n glo!al en la categoría de los sintagmas alternados1 6l monta-e presenta por alternancia dos o arias series de acontecimientos, de modo tal $ue en el interior de cada serie las relaciones temporales son de consecusi%n,77 pero entre las series tomadas en !lo$ue la relaci%n temporal es de si< multaneidad & 3e alternan lugares (el interior y el e5terior) y per sona-es alrededor de los cuales las relaciones se anudan (3ra& /ec0mann y lsie) y, m2s sutilmente, acciones (tra!a-ar y -ugar), de las cuales la (de) gradaci%n paralela constituye un elemento dram2tico no desprecia!le& Fero al mismo tiempo $ue representa una alternancia, la secuencia representa una disimetría, ya $ue solamente siete planos de e5terior 6responden+ a einte planos de interior& 'a orma indica su desplazamiento: el drama no est2 del lado del eecto, la escena de la muerte, sino del lado del aecto, la escena de la espera& LLL& El Interior 'a espera est2 mani.estamente puesta en escena, en la cadena de los planos de interior, por el o!-eto, o me-or an, por la pri-ación del sujeto en la imagen& 9 la a!undancia (para un cine narratio centrado so!re el persona-e) de planos de o!-etos (siete so!re eintiuno) se agrega un segundo hecho a la atenci%n del espectador: la recepci%n insistente del relo- (planos C, 17 y 41) y de la escalera (planos 1A y 47), encuadrados de modo idntico en cada una de sus apariciones& s 6eidente+ (se da a er) lo $ue dicen en orma Znstente: el tiempo $ue pasa (14 hs, 14h4, 17h 1C), el no retorno de lsie, el -ac$o. stos dos signi.cados ($ue podrían englo!ar con precisi%n el trmino espera# se encuentran desdo!lados, uno en la cadena de las acciones, el otro en la de las pala!ras& Flanos 7 y B: la 3ra, /ec0mann laa ropa& Flano N: ha!iendo sonado el medio día, ella a!andona la 6secuencia+ laado para comenzar la "secuencia+ preparaci%n de la comida& Tiende la mesa[(plano A), prepara la sopa (planos 14 y 1B), pone la sopera al !a#omientras cantan tenemos la seguridad $ue est2n ahí?+& sta relaci%n sonido
so!re el pa< lier (plano 1B) o el llamador de la puerta (plano 1H) en negatio (silencio
Mientras $ue los tres primeros planos de e5terior (, H, 1), s%lo !rindan poca inormaci%n Ila pelota de lsie como atri!uto no< marcado y el policía 6protector" 7NI el plano 11, uerte nudo te5tual, es el nico en toda la secuencia $ue puede ser comparado con el plano 1& 'a representaci%n $ue se mani.esta introduce, por su comple-idad, la pro!lem2tica del desplaamiento y la condensación, m2s precisamente, del desplazamiento siriendo a la condensaci%n& De.nido por Xreud como dierencia de centrado (un detalle en apariencia dierente del contenido mani.esto puede aler como un signi.cante uerte del contenido latente), el desplazamiento se eecta a$uí literalmente, en el moimiento de la c2mara so!re la trayectoria de la pelota: la panor2mica ascendente es la representaci%n, da a -er, la ligaz%n metonímica $ue une por contigOidad espacial la pelota a lsie& 6'os desplazamientos $ue hemos destacado parecían ser sustituciones de una cierta representaci%n a otra $ue le esta!a estrechamente asociada ellos serían a la condensaci%n del sue#o pues, de cierta manera, en lugar de dos elementos, entra!a en el sue#o uno solo, $ue tenía rasgos comunes a am!os", escri!e Xreud en la Interpretación de los 8ue9os4:. @Fara $u sire el desplazamiento del plano 11, si no para descentrar la mirada del espectador, para hacerla deslizar de una escena (JVteatral+: donde se mueen persona-es) a otra escena, donde los o!-etos han usurpado el lugar de los actores para ha!lar de otra manera Ide modo condensadoI de sus relaciones8& l cartel de la policía autenti.ca lo 6ya comenzado+ del relato dando a la amenaza, percepti!le en los dos primeros planos, los apoyos de una 6realidad+: nom!re y direcci%n de ni#os asesina< dos, echas de sus desapariciones& Mensa-e lingOístico, es tam!in un espacio pict%rico $ue ocupa casi la totalidad de la pantalla: 'os caracteres (negro so!re !lanco) siren de ondo al moimiento de la pelota !lanca y a la som!ra negra& sta som!ra se encuentra, como la pelota, en posici%n desplazadaRen relaci%n al persona-e al $ue pertenece, mientras $ue el espectador no conoce al persona-e del cual la som!ra es la proyecci%n: 9l no radicar el enigma en el aspecto de M Ipues el plano 1 deela los rasgos del asesinoI la som!ra s%lo participa moderadamente de un c%digo hermenutico& ale m2s !ien como condensaci%n en un solo motio isual de una serie de signos de amenaa, por remitir al c%digo reerencial del cine 6e5presionista+ alem2n7H y ana%ricamente en el relato, al 6hom!re de negro+ de la canci%n, do!le reenío so!re el cual pesa la inscripci%n redundante de la pala!ra 6Morder" en la som!ra misma& ;n c%digo sim!%lico se es!oza igualmente, pues la som!ra inaugura, a tras de la cadena de reGe-os repartidos a todo lo largo del .lm (espe-os, idrios de los escaparates) la 6tem2tica" del doble so!re la cual se !asar2 la auto
7a contaminación
=on los planos 1 y 1H, la cadena de los planos de interior y la de los planos de e5terior, representados hasta este momento por el paradigma trabajar/jugar, entran en comunicaci%n por una acci%n idntica: comprar (en el caso de lsie 6hacerse comprar", re< Ge5iidad am!igua)& 9sí, las pala!ras del endedor de li!ros, en cuanto al o!-eto de la enta (el olletín),
aldr2n, por retroacci%n, para la compra $ue precede, de la cual est2 garantizada el car2cter de "suspenso", de 6emoci%n+ y de 6sensaci%n"& ste primer paso, poco marcado, anuncia la contaminaci%n .nal de las cadenas, el $uie!re y la conusi%n de las representaciones colocadas por la secuencia& 'os planos de o!-etos solos, $ue esta!an diseminados en el con-unto del sintagma, se encuentran alternados con planos 6ordinarios+ a partir del plano 1A, para imponerse totalmente desde el plano 47 hasta el .nal& 9 niel de su representaci%nlsie?+ gritado por la madre toma el lugar del "lsie /ec0mann+ pronunciado por la ni#a en el plano 11&&& toma el lugar, es decir, e5cluye por su misma presencia la presencia de lsie: priada de 6su+ oz, priada enseguida de moimiento, el o!-eto pierde los atri!utos del 6iiente+ $ue representa!a& Faralelamente a la de
7a repetición
n los dos ltimos planos se da a leer y a releer la muerte de lsie: la ruptura $ue am!os instauran en la representaci%n del e5terior (el campo ha reemplazado a la ciudad) no es m2s $ue una prue!a suplementaria& Fero al considerar la repetici%n $ue se mani.esta I]a peiota, el glo!oI la desaparici%n de lsie no es el nico elemento signi.cado elípticamente& 'a pelota no designa solamente a la ni#a, sino (er plano 11) tam!in el deseo del asesino& l glo!o comprado por el asesino es una repetición no redundante& Ficado ersus contrapicado, moimiento horizontal ersus moimiento ascendente: la pelota y el glo!o representan meta%ricamente el descuartizamiento, producto de un goce s2dico, $ue encuentra en la destrucci%n del o!-eto su apogeo y, al mismo tiempo, su .n& 6oy, mircoles A de -ulio de 1CB, a las siete horas mi padre ha muerto, a las siete horas+& ste lapsus de 'eonardo Da inci, ha sido comentado por Xreud B7 en los siguientes trminos: 63in la inhi!ici%n aectia de 'eonardo, la nota del diario podría ha!er sido: Vhoy a las siete horas, muri% mi padre, mi po!re padreQ& l desplazamiento de la perseeraci%n so!re el detalle m2s indierente, la hora de la muerte, despo-a a la rase de 'eonardo de tono pattico pero nos permite reconocer $ue tenía algo BB$ue ocultar, y reprimir"& l se5o, la iolencia (la iolencia se5ual) rechazados por la censura encuentran pues en esta repetici%n $ue los oculta y los deela Ide modo desplaadoI su uerza dram2tica& 'a reduplicaci%n BC $ue atraiesa los di2logos y se diracta en los llamados de la madre, inscri!e !a-o orma de 6eco+ su pat'os en la misma imagen& 6/ilderschrit: no imagen inscrita, sino escritura representada, imagen dada no a una percepci%n simple, consciente y presente, de la cosa misma Isuponiendo $ue sta e5isteI sino BN a una lectura+ & Flanteada entre el pro!lema de sa!er c%mo el signi.cante puede des
$ue todo o!-eto tiene un sentido o!literado: el proceso de tra!a-o in.nito $ue nace en l+ B, y la estructuraci%n del eno< te5to mismo, la din2mica de los motios en el plano y de los planos en el sintagma, el -uego contrapuntístico de lo sonoro y lo isual& 3i el primer sentido asignado a$uí al trmino trabajo constituye el o!-etio de la lectura Ila lectura por enirI el pasa-e por un estadio 6estructgralista+ parece todaía imponerse, en la medida en $ue el cine es an prisionero de la acilidad anal%gica: una deslum!rante 6imagen de las cosas+ BH impide distinguir a$uello en lo cual ella se inscri!e a título de signi.cante Iuna trama te5tual, una pr2ctica semi%tica especí.ca, una representación. TLEE^ K;UT_' Faris, `cole Frati$ue des autes `tudes&