RESUMEN LA BUENA FORMA DE LA CIUDAD-KEVIN LYNCH CAPITULO 4- TRES TEORIAS NORMATIVAS Si por una teoría normativa nos referimos a un conjunto de ideas coherentes sobre la forma propia de la ciudad y sus razones, entonces existen varias de estas teorías. Al pareces las primeras ciudades se erigieron como templos ceremoniales. Una redistribución de poder y recursos materiales a una clase gobernante fue de mano en mano con el crecimiento de las ciudades de estos inicios religiosos. En el proceso de construir una estructura de poder humano, mientras estabilizaba el orden del universo, el ritual religioso y la forma física de la ciudad fueron los principales instrumentos más que físicos, psicológicos. Esta teoría afirma que la forma de cualquier asentamiento permanente debía ser un modelo mágico del universo y de los dioses.las dos más desarrolladas ramas de la teoría cósmica fueron china e india. La tierra es sagrada y fácil de habitar, uno de estos ritos y divisiones espaciales son logrados. Las procesiones religiosas tempranas siguen las mismas rutas cíclicas en los cuales los residentes organizan la ciudad en sus mentes de la misma manera. Mientras que en china e india nos muestran los ejemplos más desarrollado del modelo cósmico, esta idea básica es ampliamente utilizada. Elaborados centros ceremoniales en sur y norte América, en Asia y África, son testimonios de esto. Teorías articuladas son grabadas en Egipto, en el este medio, en la roma etrusca y en muchas otras localidades. El uso del sitio y la forma de simbolizar y reforzar el poder ha sido transmitida atreves de la civilización del oeste y sobrevive aun hoy en día. Cada una de estas teorías cósmicas tomo una vista comprensiva. El dispositivo de organización por jerarquía; simetría bilateral como una expresión de polaridad y dualismo; marcas en puntos estratégicos como una manera de controlar visiblemente largos territorios; la naturaleza sagrada de las montañas, cuevas y agua. El espacio y los ritos son estabilizadores de comportamiento y sirven para atar a los seres humanos juntos. Instituciones y formas, actuando en soporte de ambos, tienen un poderoso poder psicológico y fueron pensados ser invisibles.
Detrás de estos conceptos se encuentran ciertos valores primarios: orden, estabilidad, dominancia, un cercano y duradero equilibrio entre acción y forma, sobre todo, la negación del tiempo, decaer, muerte, el caos. Claro esto ya quedo en el pasado. Las ciudades capitales son diseñadas con hachas monumentales. Los jueces ven menos a los prisioneros, los oficiales se hacen ver impresionantes, corporaciones buscan los edificios más altos, lo cual muestra que algunos principios jerárquicos permanecen aun en nuestros días. Estos son los fríos dispositivos de poder, usados para hacer que unas personas se sometan a otras. Estos también pueden ser usados para expresar orgullo y afección por una comunidad, para que la gente se identifique con ellos, para reforzar el sentido de comunidad o revelar la majestuosidad del universo. El poder psicológico de estos dispositivos no puede ser tomado a la ligera. Entonces estas influencias son impactos realistas a la forma de las ciudades, para bien o para mal y deben ser tomadas en consideración en cualquier teoría normativa. Pensando en la ciudad como una maquina practica, es por otro lado una concepción muy diferente. Una maquina también posee partes permanentes, pero esas partes se mueven constantemente. La maquina completa puede cambiar, aunque lo hace en un modo predecible moviéndose por un camino trazado. Los pueblos de los estados unidos, motivados por la especulación y ubicación de tierras, son claros ejemplos del género. El modelo de la maquina no es simplemente la aplicación de una distribución reticular, pero es más una vista característica sobre partes y enteros así como su función. En una forma más humana y liberal, este modelo de la maquina también aparece en el trabajo de Arturo Soria y mata, quien se preocupaba por la salud, espacios abiertos, casas económicas, fácil acceso para la gente de ingresos moderados. La idea de la maquina aun esta viva en las ideas de Archigram y Soleri así como Friedman, aunque usan distintas y particulares formas, pero también conceptos poderosos para el análisis.
La fuerza de ésta corriente persiste, como esta evidenciado en la difusión de la influencia política para la ecología o en los debates académicos sobre la cultura humana en el nuevo campo del socio biología. Si una ciudad es un organismo, entonces tiene algunas características que la distinguen de las maquinas. Un organismo es un individuo autónomo con un límite determinada y de un tamaño establecido. No cambia de tamaño por extensión o reducción o se le añaden partes ilimitadamente, pero reorganiza su forma mediante cambia de tamaño, llega a sus límites, donde cambia de forma radical. Mas sin embargo las ciudades no son organismos, más de lo que son maquinas. Ellas no cresen o se cambian solas, o se reproducen y reparan solas. Ellas no son entidades autónomas, ni atraviesan ciclos de vida o son infectadas. Si tocamos la metáfora central, muchas ideas se quedan, aun si ya no son parte de una estructura coherente. Algunas como el conservativismo, la nostalgia de un pasado irreal, puede ser arrebatada fácilmente. Así como la preferencia automática a formas orgánicas. Ciudades estables, aun si nos referimos a una estabilidad homeostática, parecen ser inalcanzables. Las ciudades cambian continuamente, y ese cambio no solo es justo e inevitable para una maduración progresiva. El clímax ecológico no parece ser una analogía apropiada. En vez de ser comunidades de organismos carentes de pensamiento que siguen una evitable sucesión hasta que ellos se topan con un límite, las ciudades son el producto de seres que pueden aprender. La cultura estabiliza tanto como desestabiliza el sistema, y no es evidente que lo queramos de otra manera.