Prescripción dietética medica El término dieta viene del griego díaita que significa “forma de vida”, la dieta es el conjunto de platos y alimentos aislados que cada persona consume en un día. En ocasiones se confunde dieta con régimen, especial para bajar de peso o para tratar ciertas enfermedades. La dieta es un método, un régimen o modelo, una forma de alimentarse (es un conjunto de alimentos que deben satisfacer las necesidades nutricionales y las preferencias de los individuos). Constituye la combinación de alimentos que se consume a diario. Una Una diet dieta a reco recome mend ndab able le es aque aquella lla que que habit habitua ualm lmen ente te cump cumple le con con las las siguie siguiente ntes s caract caracterí erísti sticas cas:: comple completa ta (que (que contie contiene ne todos todos los nutrim nutriment entos os incl incluy uyen endo do en cada cada comi comida da alim alimen ento tos s de todo todos s los los grup grupos os), ), equi equili libr brad ada a (proporciones adecuadas entre los nutrimentos para una nutrición adecuada), inocua (no implica riesgos para la salud, porque está básicamente exenta de microorganismos patógenos, toxinas y contaminantes), suficiente (la cantidad de alimentos que un individuo debe consumir para cubrir sus necesidades de nutrimentos, de tal manera que el sujeto adulto sea capaz de mantener su peso y de crecer y desarrollarse con la velocidad adecuada, en el caso de los niños), variada. Concepto de prescripción: es la indicación de dieta o régimen dietética que indica las características cuanti y cualitativas que debe tener la alimentación. Esta debe ser individual para cada caso particular y dinámica, tal que pueda tener la posibilidad de variar de acuerdo a la evolución del estado del paciente y el tratamiento a realizar.
El objetivo principal de la prescripción dietética no es solamente restablecer el estado patológico del enfermo sino también prevenir posibles complicaciones. complicaciones. El profesional en Nutrición es el responsable y encargado de interpretar y adaptar la indicación realizada por el médico, favoreciendo así la adecuada recuperación del paciente. La prescripción debe ser elaborada por el personal de salud debidamente autorizado, con letra clara, legible y concisa y con las indicaciones necesarias para su administración. Los principios básicos de la prescripción entonces deber ser: Fecha de la prescripción. Nombre del paciente y documento de identificación. Vía de administración, cantidad, calidad y frecuencia de la alimentación Consistencia de los alimentos que se quieren administrar Período de duración del tratamiento Observaciones que a su juicio considere el prescriptor. Vigencia de la prescripción. Nombre y firma del prescriptor con su respectivo número de registro profesional.
Una correcta prescripción se formula con el conocimiento del diagnóstico de la patología del paciente, el momento evolutivo de su enfermedad, el estado de su aparato digestivo (vía de administración: vía oral, por sonda o nutrición parenteral; textura y concentración y fraccionamiento en caso que sean preparados enterales) y su estado nutricional (considerando necesidades energéticas y proteicas) así como la presencia de algún síndrome fisiopatológico predominante concomitante. Deben indicarse específicamente restricciones especiales tal como: Na, K, líquidos, fibra, lípidos o grasas, carbohidratos, proteínas, purinas, lactosa, TACC, irritantes gástricos y/o intestinales. Deben en el caso correspondiente indicarse suplementos especiales a la alimentación, tal como fibra o residuos, triglicéridos de cadena media, vitaminas, preparados especiales para aumentar las calorías de la dieta suministrada. La prescripción no debe contener enmendaduras, tachaduras, siglas, claves, signos secretos, abreviaturas o símbolos químicos, con la excepción de las abreviaturas aprobadas por el Comité de Farmacia y Terapéutica de la Institución. En la institución contamos con diferentes menús con un código determinado que se adapta según las diferentes patologías: salud, diabético, renal, colon con residuos, colon sin residuos, gástrico-hepático, grado uno o blando, grado dos, líquidos y cuando un paciente tiene nada vía oral lo calificamos de absoluto. En nuestro servicio los menús comparten ciertas características y no siempre la prescripción realizada por el médico puede aplicarse a nuestros menús. El menú salud por ejemplo que lo aplicamos a los regimenes libres, hiposódicos, que en general tiende a ser moderado en calorías y grasas a veces abarca preparaciones con mayor contenido de grasas, salsas o estímulos gástricos o intestinales (tucos, cazuelas, carne roja como lengua, matambre) que no podrían aplicarse a todos los pacientes mas allá de que la prescripción realizada hay sido un régimen de salud. Este tipo de dieta la aplicamos para todos los casos que no posean antecedentes personales clínicamente a destacar, desde el punto de vista orgánico o funcional. Contamos con menús ricos en fibra (colon con residuos) que lo aplicamos a los casos de estreñimiento o patologías que ameriten aporte extra de este nutriente. Para los casos de dietas astringentes o pobres en fibra o residuos contamos con un régimen de colon sin residuos, que abarca preparaciones como arroz, harina de maíz, pasta de arroz, carne roja magra, jamón, pollo, pescado al horno, y verduras y frutas cocidas con efecto astringente como zanahoria y compota de manzana, así como gelatina de tapioca. Este régimen lo aplicamos para los pacientes que padecen diarreas o están en preparación para estudios del intestino (FCC, CXE). La dieta gástrica hepática se aplica para los casos de patologías relacionadas con el aparato digestivo en que debemos cuidar la mucosa gástrica y el estimulo hepático (gastritis, úlcera, postoperatorio de colecistectomia, hepatopatias, neoplasmas gástricos y hepáticos, etc).
El régimen blando o grado uno lo consideramos para los casos de postoperatorios digestivos inmediatos o para aquellos casos en que estemos probando tolerancia luego de eventos cardiovasculares o sintomatología hepática o gástrica. Para uniformizar un criterio utilizamos sólo el zapallo como unos de los alimentos más inocuos y que pueda aplicarse a la mayoría de los pacientes. Cuando queremos evolucionar un postoperatorio digestivo o no digestivo pero con ciertas restricciones en cuanto a consistencia aplicamos un régimen grado 2 que implica un avance del régimen grado uno, con el agregado de carnes blancas y rojas magras, verduras cocidas y cereales pero con mínimo estimulo gastrointestinal. Finalmente para los pacientes que sólo pueden recibir l íquidos vía oral utilizamos lo que llamamos dieta líquida que abarca sólo líquidos claros como el té, caldo, jugo de compota y gelatina. Para algunos casos en que se quiera empezar a probar tolerancia a la vía oral luego de varios días sin nada vía oral o post retiro de SNG o en postoperatorios, contamos con postres como gelatinas, flanes, compotas, pero esto no lo incluimos en lo que seria una dieta blanda que incluye zapallo y compota.