ENSAYO DEL LIBRO NO NACIMOS PA SEMILLA
ALUMNA: Laura Laura Yulieth Yulieth Moná Quintero
GRADO : 10-3
MATERIA: Sociales
NO NACIMOS PA SEMILLA Ensayo: El libro que se titula “No nacimos pa semilla” del autor antioqueño Alonso Salazar nos
describe y narra sucesos de la violencia en la ciudad de Medellín, la cual se ha venido viviendo desde hace tiempo, especialmente por los jóvenes quienes van experimentando ser delincuentes hasta convertirse en los mejores y llegar a ser jefes de pandillas. El nombre del libro puede no ser claro antes de leerlo, pero después se entiende perfectamente y lo que quiere expresar es que estas personas lo tomaban como un lema o mas importante como una realidad, no nacimos pa semilla en otras palabras quiere decir que estas personas no consideraban que su vida iba a ser larga y que iban a tener tiempo para crecer y vivir diferentes experiencias, ya que la muerte estaba cerca y no debían temerle porque era una realidad. Jóvenes desde los 15 años empiezan a integrarse por simplemente querer tener mucho dinero o ser temidos y respetados; aceptan trabajos riesgosos para así mostrar su valentía, otros hacen sus propias bandas para defender a su barrio de los rateros o delincuentes, esto es bueno y malo a la vez, de alguna manera protegen pero al mismo tiempo matan. Es aterrador que las familias no puedan salir de sus casas por miedo a estas bandas, más que todo en la noche cuando hay enfrentamientos. En esos barrios de Medellín han existido bandas que han causado mucho terror y también otras reconocidas por limpiar la delincuencia que además son apoyadas por la gente de sus barrios. El libro narra que “la violencia es un círculo vicioso”, esto es cierto ya que nunca ha parado la
guerra ,por el contrario la paz nunca se logra ya que día a día aunque se acaben con unos delincuentes poco a poco surgen más, y esto no termina, una de las causas es que el gobierno no hace nada al respecto, pues se debería dar un apoyo a la juventud de estas comunas y con programas especiales concientizar a estos jóvenes a no seguir con la guerra, destruyendo así su vida y la de tantas personas que han sido víctimas como se puede observar en los relatos contados; se debería asegurar a estos jóvenes una buena educación y empleo. La lucha contra el narcotráfico era una batalla constante y es por esto que el libro de Salazar se habla de una ausencia de estado ya que hasta en miembros de la policía y del gobierno se veía la corrupción y es por esto que en vez de controlar, vigilar el orden, se estaba generando todo lo contrario. En este libro nos muestra sencillamente el discurso del sicariato en las comunas de Medellín y como es la situación de las familias que residen allí, por ende nos muestra el índice en el incremento de la violencia. En ese contexto de Alonso Salazar, el autor del libro, deja que los protagonistas de estas situaciones narren sus experiencias ,se escribe e interpreta a manera de relatos y como ente ficticio; otra características es que las historias tienen una introducción del autor, luego da lugar a un protagonista que cuenta en primera persona una parte de su historia y de un tema determinado y posteriormente se apoya el testimonio con la perspectiva de un familiar, amigo o persona muy allegada, quienes presentan el personaje y explican las circunstancias en que se desarrollan los hechos.
En la décadas de los 80 y 90, muchas jóvenes vieron como salida a sus problemas económicos, el inconformismo de las condiciones de vida que padecían en estos lugares invadidos por desplazados y sin opción de progreso, vincularse a bandas de sicarios y conformar grupos insurgentes. De pronto, el nombrar a un libro No nacimos pa semilla es una frase que no nos lleva concretamente al sentido de sus líneas pero sin lugar a dudas, es muy llamativo y su intensión de refrán popular se conecta con los lugares y las historias allí escritas. Antonio, es el tercero de cuatro hijos, creció en el barrio Popular 1 y se acogió a la única política, opción y proyecto de vida que tienen los jóvenes de aquel lugar. El en su testimonio cuenta que llega a las bandas o “parches” en el barrio, metido en negocios de droga y
asesinatos, llega a ganarse 4 millones o mínimamente medio millón matando a personajes que a veces no conocía y como fácilmente mueren o quedan heridos. De igual manera, comenta como aprenden a manejar motos, las armas que por lo general son compradas a los policías. Las historias, son repetitivas pero muy reales, tal es el caso de don Rafa, Ángel y Jairo, quienes cansados de los abusos de las bandas del barrio, las muertes y robos sin razones a las personas de popular 1, deciden formar un grupo de autodefensa ante la indiferencia de las autoridades, así como, muchos barrios como castilla, Zamora, popular 2, villatina entre otros apoyados por el EPL y el M-19. No nacimos pa’ semilla, es un relato investigativo de jóvenes que no conocen otro lenguaje,
otro mundo sino el de las armar y el de la muerte. Mario, es uno de esos personajes que dejan al descubierto cual es el precio que muchos pagan por sus d elitos aunque sea por “limpiar” a la sociedad de viciosos y de personas que pasan la vida matando , este personaje cuenta y describe muy bien la cárcel bellavista, las políticas y condiciones de vida, si es que se puede llamar vida. Finalmente, el autor no logra resolver ni cerrar la situación, ya que el sicariato, el orden público y la pobreza en estos barrios populares son temas complicados, una problemática social que por medio de un libro no pretende arreglarse, sin embargo, contar historias y dar a conocer a los lectores las verdades de personajes que solo se conocen cuando los pasan esposados por la televisión es un objetivo valido y enriquecedor. Salazar da la voz a los marginados para tratar de penetrar lo más objetivamente posible en la problemática violenta de las bandas juveniles. En este libro, que es una conmovedora mezcla de literatura de testimonio y reflexión sociológica, hablan los sicarios, las madres de los sicarios, los sacerdotes de los barrios donde viven los sicarios y los enemigos de los sicarios. Son crónicas que retratan una mentalidad juvenil a la que el Estado colombiano se ha negado a mirar y a considerar. Mostrándonos las periferias de Medellín, esas laderas montañosas donde la muerte se trivializa a diario. Salazar termina trazando un tenebroso pero real croquis de la nueva ciudad latinoamericana. Un croquis que es como una enorme llaga, entre desconcertados y maravillados ante la irrupción de una generación de adolescentes que trastoca radicalmente los viejos valores morales de una cierta mentalidad pueblerina, basados éstos en la enseñanza y conservación de los tradicionales principios católicos y en la defensa de un progreso que había sido el baluarte de aquellos arrieros heroicos que habían hecho de Medellín una “Tacita de Plata” a punta de trabajo y honradez.
Lo interesante del libro es como nos muestran lo ocurrido por medio de las personas involucradas en el conflicto, su manera de pensar, los hechos ocurridos y las consecuencias de todo esto. La manera de mostrar las cosas hace que este escrito de Alonso Salazar llame la atención de las personas para que todos nos demos cuenta de una realidad que hay en el país. La verdad es un libro muy fuerte en el que uno se da cuenta de muchos problemas que a uno lo rodean y no se da por enterado. Las comunas de Medellín nacen hace mucho y se ve reflejado en una dura realidad donde el gobierno es el dueño de todo y la misma guardia humilla y rechaza a la gente por su condición social, lo peor de todo es que es nuestra realidad que nace frente a un rechazo social y es criado con rencor ante una sociedad.
