Manifiesto Filosófico del Luciferismo Teísta.pdf

Manifiesto Filosófico Luciferista Ildefonso Álvarez de Iturbide


Contenido

Prólogo................................................................................................................................ 2 Parte I: Filosofía ................................................................................................................. 3 Introducción .................................................................................................................... 3 Capítulo I: Que trata sobre la identidad y vida cotidiana del Luciferista ....................... 4 Capítulo II: Que trata sobre la filosofía Luciferista................................................. ....... 6 Capítulo III: Que trata sobre la lucha por los ideales .............................................. ....... 8

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Manifiesto Filosófico Luciferista Ildefonso Álvarez de Iturbide Prólogo

Hablar del Luciferismo, es hablar sobre algo de lo que se ha escrito centenares de líneas. Miles y miles de palabras se encuentran suspendidas en la nube de internet aguardando para que alguien se tope con ellas y descubra una puerta más al “camino de la mano izquierda”. En este ensayo o como le quieran llamar, no voy a decir algo que no haya sido escrito o especulado por otro medio escrito ya sea en los últimos años o en la edad media. Aquí voy a juntar todas las ideas que en conjunto forman la doctrina del Luciferista. Desde hace años, he buscado dentro de diversas órdenes, iglesias y sectas satánicas, satanistas, luciferianas y luciferinas, pero nunca pude quedar complacido con alguna de ellas. Unas fueron fundadas como un movimiento anti-cristiano, como una respuesta a los valores sociales de la época o simplemente para ganar dinero. Como los lectores de mi blog notaran, algunos de los capítulos tomaron parte de su estructura de las entradas sobre el luciferismo teísta. El contenido del blog era relativamente primitivo comparado con lo que el lector encontrará en estas páginas, pues las entradas en el blog carecían de información y hechos imprescindibles en un ensayo sobre el luciferismo teísta. Después de estudiarlas, y leer sobre sus doctrinas, he decidido crear la orden del Astro Negro para poder enseñar a aquellos interesados en el luciferismo lo que es la verdad. Con esto mis intenciones no son obtener ganancia alguna más que espiritual. Al enseñar, he tenido la grata oportunidad de aprender también. La orden no es una congregación en la que se paga membresía ni en la que tú nombre figura en una lista. Todo lo que cuenta para ser hijo de lucifer es amarlo como a tu padre, como a tu maestro y someterte a su iniciación. Quiero que el lector note que el ritual de la iniciación no va a ser descrito en ninguno de los siguientes capítulos pues es un ritual que es secreto y solo conocido por aquellos quienes ya lo han presenciado. Esto se debe a que los Cuatro Grandes de la orden deben conceder permiso a quien vaya a ser iniciado para que forme en la orden. Este consejo de los Cuatro Grandes está formado para que aquellos profanos no se acerquen a la sabiduría. Solo los puros abrirán la puerta que los profanos han conseguido avistar.

Magister de la O:A:N

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Manifiesto Filosófico Luciferista Ildefonso Álvarez de Iturbide Parte I : F ilosofía Introducción

Muchas veces, he escuchado que a la doctrina luciferista le llaman inmoral o poco ética por la posición egocéntrica que toma. La verdad es que la doctrina luciferista excluye los sentimientos ajenos a los propios para que el individuo logre romper las cadenas impuestas por la sociedad y ya liberado, pueda aprender a vivir una vida alegre. Hablando con algunas personas, he llegado a la conclusión de que la gente cree que el luciferismo, al igual que el satanismo, es una religión de gente quien vive con un tremendo rencor a Yahvé. Quiero aclarar que esto no es cierto, los luciferistas, que muchos son antiguos cristianos, buscan una religión sin hipocresía en la que no se sientan bajo el yugo de un tirano. También existe la creencia de que el luciferismo es una filosofía puramente atea en la cual lucifer toma una forma más simbólica que espiritual. En esta primera parte del tomo, expondré la parte filosófica del luciferismo, pero no quiero que se crea que el luciferismo es una doctrina puramente filosófica. Por eso, he decidido llamar a la doctrina expuesta aquí como luciferismo teísta, pues se debe tomar en cuenta la existencia de lucifer.

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Manifiesto Filosófico Luciferista Ildefonso Álvarez de Iturbide Capítulo I: Que trata sobre la identidad y vida cotidiana del Luciferista

El luciferista es normalmente una persona que encuentra la sabiduría en el camino de Lucifer, comúnmente llamado el camino de la mano izquierda aunque este término se ha contaminado de poco a poco y es demasiado general. Cualquier individuo que desee ser luciferista, es un individuo que desea aprender con ansia los secretos que se ocultan detrás del ocultismo, la magia ritual y detrás de las leyendas sobre Lucifer. Este tipo de individuo muchas veces ha sido definido como un ser inteligente por su sed de saber, políticamente incorrecto, por su elitismo de extrema derecha e irracional por su elección de caminos. Pues aquellos que no consiguen ver la luz dentro de la obscuridad no alcanzan a ver que solo aquel que percibe la luz del astro negro, puede entender la filosofía oculta del Emperador del Infierno. La misantropía forma parte de la vida del autodenominado luciferista pues sabe que desde su realidad, él es el centro de su mundo. Las acciones de otros se desenvuelven directa o indirectamente para llevar fortuna o infortunios a la persona. La manera misántropa de ver la vida es la manera más sana en que un individuo puede verla pues se siente siempre en confianza con quienes le rodean ya que él es siempre el mejor, sabe defenderse en cualquier situación y es infalible. La misantropía representa seguridad en uno mismo, tan fuerte que lo impulsan a avanzar con el pecho en alto a su meta. No deja que los demás se interpongan obstaculizando el camino que debe seguir hacia el triunfo. La misantropía es un rasgo que es elemental en la personalidad y filosofía del luciferista. La misantropía, en su sentido más puro, significa odio al humano. A pesar de que los luciferistas no “odian” con el sentido mar radical de la palabra a sus significantes, abren los

ojos a los problemas que sus semejantes traen a sus vidas y al mundo. Normalmente, cuando alguien observa los errores cometidos por su prójimo, se da cuenta de que también los está cometiendo y se impone la meta de dejar de corregirlos. De esto se trata el aprender a juzgar a quienes nos rodean, pues los psicólogos acuerdan en que cuando los humanos consideramos molestos los hábitos en los demás, es porque esos mismos hábitos los tenemos nosotros y nos molestan de nosotros mismos. No existe placer más grande que el orgullo, sin él todos tendríamos mirada huidiza y obedeceríamos ciegamente a cualquier imbécil. La misantropía no es más que aceptar que vales más que todos aquellos quienes te rodean. Es saber que nadie es más que tú sin importar su condición social. No existe nada más inteligente que tener la cabeza en alto frente a los demás, pues esta es la manera en que se debe actuar para llegar al fin del buen camino.

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Como tal vez ya sepas lector, el pecado de lucifer, su boleto de salida del cielo, fue la soberbia. Tal pecado no es más que la altivez y que el egocentrismo de alguien al saber que goza de mayor potencial que todos aquellos quienes le rodean, pues el secreto para llegar alto es saber que nosotros podemos conseguir lo que queramos con solo tener intención de obtenerlo. Aquel que no logra su meta, no es que no pueda, es que realmente nunca quiso hacer el intento y prosperar en ello. El luciferista se rodea comúnmente de gente a quien a lo largo de su vida ha escogido pues sabe que ellos pueden serle útil cuando tenga un tropiezo o pueden ayudarle a levantarse sobre sí mismo cuando haya la oportunidad. Los amigos siempre son la mano derecha del que camina hacia la luz obscura. Tener amigos es tan esencial como la soledad para todo ser humano. Un poco de ambas crea el equilibrio entre la grandeza material y la grandeza espiritual que cualquier mortal necesita para triunfar. Si no tuviese amigos, se volvería agrio y altamente sabio, pero carecería de cualquier oportunidad para levantarse sobre su posición actual y crecer sobre los demás. Si el humano fuese un ser enteramente social, acabaría sumido en la indiferencia total consigo mismo. Terminaría por desconocerse a sí mismo. La vida del luciferista es una vida tan pacífica y estresante como la vida de cualquier persona en nuestro alrededor. Cualquiera cree que los luciferistas están sacrificando gente el día entero o que reciben toneladas de bienes ya sean materiales o espirituales cada que conjuran a los demonios. Estas ideas están equivocadas. Los luciferistas no sacrifican gente así nada más, tampoco creas lector, que nos volvemos ricos al invocar a algún demonio en algún ritual ni que tu vida se rodeara de placeres ya sean sexuales o de cualquier otro tipo. El luciferismo te enseña la manera en que puedes conseguir tus objetivos, los cuales pueden ser tan racionales o irracionales como quieras. Pero no te acorta el camino a tus metas, solo te da el mapa y te señala el camino a seguir. El luciferismo teísta es también un refugio para aquellos quienes confiaban en las oraciones dirigidas a Yahvé, es para los cristianos afligidos que no encuentran respuestas en la palabra de su dios. Es para quienes buscan en vez del castigo el perdón y en vez de una vida inocente y piadosa en la ignorancia, una vida de sabiduría.

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Manifiesto Filosófico Luciferista Ildefonso Álvarez de Iturbide Capítulo II: Que trata sobre la filosofía Luciferista

“ Haz lo que tú quieras será el todo de la Ley.” (Liber Al Vel Legis, Capítulo I, 40)

Todo impulso que lleva a los humanos a vivir es consecuencia de un final seguro en brazos de la muerte. Si los mortales no viviésemos pensando en que esta vida es única y que cada segundo que pasa no lo podemos recuperar, no haríamos nada de nuestras vidas. Viviríamos en un estado de pereza o de inactividad que sería incierto el futuro de la raza humana. Ahora, la vida, como todos habréis notado, contiene momentos felices, pero también está inundada de momentos ásperamente tristes, secos de toda felicidad, estériles de cualquier intento de gozo. Muchas veces, nos gustaría hacer cosas para alegrarnos el día en vez de hacer lo que debemos, y responsablemente aceptamos nuestras obligaciones sacrificando la posibilidad de haber ido con los amigos a comer o de fiesta por el trabajo o las tareas. Según las esperanzas cristianas, la recompensa a todos esos momentos de goce sacrificados vendrá en la vida después de la muerte. Creen que siendo suficientemente generosos, honrados, humildes, responsables… van a llegar al cielo donde hallarán todos los placeres que negaron. Esta es una idea bastante irrealista, utópica. Ojalá fuera tan sencillo. Realmente, no existe nadie que haya regresado de la muerte para contar lo que encontró, si fue al cielo y lo recibió un coro de ángeles, o si al contrario, se encontró ante una nada, si dejó de existir simplemente. Existen teorías físicas, de la mecánica cuántica q ue se refieren a algo llamado “universos 1 paralelos” . Estos universos paralelos, se basan en que nuestra realidad va creando atreves

de varias ramas de la posibilidad otra dimensión paralela. Unas de ellas difieren a la nuestra por acciones ajenas, por la posición de un átomo o decisiones nuestras. De esta manera, todas las variantes divergen del ahora creando una gama de universos paralelos que, como ya dije, se diferencian del nuestro por las probabilidades y decisiones de los otros humanos y de nosotros. Es tal esta gama, que posiblemente en otra dimensión paralela ya hayamos muerto más de alguna vez. Lo que sucede es que cuando estabas a punto de ser atropellado, en esta dimensión, el coche logró frenar antes gracias a la probabilidad. Nuestra alma, va siguiendo la variante en la que nosotros no hemos muerto aún y por lo tanto, a pesar de que vemos como mueren nuestros familiares y amigos, nosotros posiblemente sigamos una línea hasta que las posibilidades de muerte sean de cien por ciento, lo cual es imposible. Algo que no quiero que el lector piense es que no va a morir. Claro que va a morir algún día, pero el camino que seguirá a su muerte, será guiado por su observación. La mecánica cuántica ha demostrado que es a través de lo que observamos, que la realidad de nuestro universo paralelo se va formando. Podemos concluir que al final, probablemente moriremos como siempre tuvimos en la mente que moriríamos en el tiempo que creímos que así sería. 1

Esta teoría es expuesta por en libro Interpretación de los Universos Múltiples de Hugh Everett.

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En conclusión, la muerte nos lleva a un final que es incierto, pero a la vez puede ser manipulado por el observador cuántico. Saliendo de la teoría sobre lo que es la muerte, enfoquémonos ahora a lo que es la vida, lo que realmente cuenta en este momento. Un filósofo griego, llamado Epicuro de Samos, de quien no queda ya mucho más que su carta a Meneseo y lo que fue escrito en el libro De Reum Natura escrito por Lucrecio, un poeta latino. Epicuro definió en su época lo que sería la doctrina hedonista. La doctrina hedonista se basa en la búsqueda del placer y en evitar el sufrimiento al mayor grado posible al intentar suprimir cualquier intento de sacrificio que haga el humano. Esta doctrina, fue pensada para que el que la practique viva su vida como si no hubiese nada más allá de la muerte, como si su vida fuese todo lo que tiene. En el luciferismo, la búsqueda de la ataraxia o el equilibrio emocional es la finalidad principal de los luciferistas. A través de este equilibrio es la única manera en que puede llegar a vivirse una vida en completa armonía contigo mismo y lo que te rodea. Los esfuerzos del humano deben guiarse al placer de la persona y no al bienestar común. Para que alguien pueda lograr adentrarse en esta doctrina, debe pensar en que el único dolor que existe es el suyo y el de los demás es ajeno. Ahora, quiero definir que es a lo que me refiero con el placer que los luciferistas buscan como finalidad de sus vidas. El placer, comúnmente es entendido como la excitación de los sentidos, normalmente es sexual. También existen otros placeres tan importantes como el anteriormente descrito, los cuales toman una gran parte de la vida humana. Estos placeres son alimenticios, intelectuales, o de entretenimiento. Para conseguir ser felices y estar satisfechos con nuestra vida, es de gran importancia saber controlar nuestros deseos y saber dirigirlos hacia nuestras metas. Los deseos que son satisfechos por puro capricho, muchas veces puede separarnos del camino que queremos seguir a nuestras metas. A pesar de que se debe controlarlos, no quiero que se abstengan de hacerlo, pues la abstinencia no es natural en los seres humanos. La complacencia siempre debe formar parte en la vida diaria. Debe tomarse en cuenta, que para llevar a la ataraxia, deben mantenerse los placeres fuera de ser vicios. El vicio es el placer utilizado con frecuencia excesiva y que empieza a destruir a quien lo utiliza constantemente.

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Manifiesto Filosófico Luciferista Ildefonso Álvarez de Iturbide Capítulo III: Que trata sobre la lucha por los ideales I. La libertad y los Ideales

Desde tiempos inimaginablemente antiguos, el ser humano ha luchado por la libertad, quizás sea esta lucha la lucha más perpetua y nunca haya de cesar. En la sociedad, el más fuerte siempre ha utilizado al más débil para sus propósitos. Si un dictador llega al gobierno de un país, empieza a quitar libertades que podrían terminar quitándole el poder, por ejemplo la libertad de expresión. Esta libertad, siempre ha ocasionado controversial en las altas esferas políticas pues la prensa utiliza sus derechos para criticar a quienes tienen el poder. Lo peligroso no son las críticas, ni que los políticos se fueran a sentar a llorar al ver como son mostrados por las caricaturas en los periódicos o como se burlan de sus tropiezos con la boca. El peligro de esta libertad es que alentar a la gente a unirse en contra del poderoso, y si la gente se une, hasta el más fuerte puede caer. La libertad de expresión siempre ha sido fundamental para el humano pues de esta manera puede liberar todas sus ideas ya sea de manera artística o al hablar con sus colegas. Otra libertad por la cual se han vertido ríos de sangre es por la libertad de credo. Siempre existe quien llega al poder y aniquila o al menos, segrega a la población que tiene una religión o credo diferente. Muchas veces es por rencor, otras es por ignorancia o simplemente porque el humano por naturaleza siempre muestra rivalidad a quienes no muestran simpatía por lo mismo. Existen otras libertades, las cuales son tantas, que no tienen tanta importancia como para ser nombradas de una en una. El luciferista, sigue el ejemplo de lucifer, lucha siempre por defender sus ideales pues toma el ejemplo de lucifer quien se levantó en contra de Yahvé al sentir que este era un tirano y que negaba libertad a sus subordinados. La lucha, muchas veces puede tratarse por cosas materiales tales como el dinero. Esto es lo que causa muchas de las guerras actuales, pero estas luchas no son peleadas con honor. Enlistarte como soldado en las filas de países poderosos, es como ser contratado por una empresa. No es diferente pues las metas son lo mismo. Siempre, después de una guerra peleada por una potencia mundial, se esconden las ganancias económicas. A diferencia de este tipo de lucha, existe la lucha que llevan a cabo líderes sin más intenciones que no solo el bienestar común, pero por sus creencias ideológicas. Un claro ejemplo fue William Wallace, quien unió a varios clanes escoceses para luchar en contra de los ingleses quienes invadían sus tierras e imponían una monarquía tiránica. Existen varios hombres que han luchado de esta manera y han muerto por la espada. Esta muerte, es la muerte que todo aquel hombre idealista debería aspirar, es una muerte honorable.

Muchos consideran que la libertad es un sinónimo a anarquía, lo cual es totalmente erróneo, pues con el menor intento de mantener una anarquía pura, se terminaría imponiendo el más 8


fuerte en el poder. Esta idea a pesar de ser en teoría bastante atrayente, en práctica no funcionaría. Pensar en una libertad total, a tal grado en que no existiesen más restricciones que la moral de una persona, es plenamente utópica pues la moral es plenamente relativa.

II. La Justicia

La justicia no existe. La idea de la justicia es sumamente inconsistente y relativa a quien es el jurado y quien es el que fue acusado. Muchas veces, la línea entre lo que está bien y está mal, es borrosa o percibida de manera diferente dependiendo en quien es el que la está viendo. Un ejemplo es el de Herbert Mullin, quizás no sea el mejor, debido a la relatividad de la justicia aplicada al juzgar este caso, pero es suficientemente clara como para ser entendida. Herbert Mullin era un esquizofrénico paranoide, por lo tanto, su problema era una gran distorsión de lo que era la realidad. Fue un asesino en serie pues por su enfermedad mental, escuchaba voces que le sugerían que matando a gente evitaría que hubiese terremotos y creía que así salvaría a más gente. Fue aprisionado. En este caso, gente cuerda, pensaría que matar es algo terrible, un crimen imperdonable y existen quienes argumentan que Mullin debió haber sido castigado con la pena de muerte. Pero viéndolo desde el punto de vista del asesino, todo lo había hecho por su sentido distorsionado del bien común. La justicia, es una idea utópica por la cual él se humano siempre ha luchado. Ya sea en guerras o en la corte, pero algo que hay que tener en cuenta, es que el que cuenta los sucesos es aquel quien salió triunfador y que de su lado se encuentra la justicia.

Esta obra ha sido publicada para beneficio de la humanidad. Distribúyela, no la alteres. Visita nuestro blog: OrdenDelAstronegro.blogspot.com

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