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“Los invasores” Aplicación de de los 4 niveles niveles interpretativos a la obra.
Aplicando un nivel literal de interpretación a la obra teatral “Los invasores” a modo de introduc introducción ción,, podemos podemos decir que en ella existe una familia familia adinerada, adinerada, que feliz vive en su burbuja de comodidad, limitándose a ver la vida desde el horizonte en que se encuentran. Más al momento de entrar China a su casa, todo cambia. Eso que se creía parte del equilibrio social, se quiebra. Los miserables entran en su mundo, y con ellos, su miseria. Esta se esparce cómo un cáncer que comienza a contagiar lenta y dolorosamente a toda la familia de Lucas Meyer, siendo el primero su hijo Bobby, quien pareciera tener la enfermedad recesiva en su interior, y al mostrarse la oportunidad oportunidad para manifestarse en plenitud, no duda en tomarla. Luego vendrán el resto de los familiares (específicamente Pietá y Marcela), que serán despojadas de todo aquello que para ellas era inherente a si mismas, sus lujos, su poder, su espacio. Lucas Lucas Meyer Meyer lucha lucha contra contra la convers conversión, ión, esgrimien esgrimiendo do razones razones preconce preconcebida bidas s y de relación relación directa al hombre “exitoso”, cómo queriendo confirmarse confirmarse a si mismo de que lo es, de forma que no haya en él duda que le haga flaquear ante China. Al acercarse acercarse el final de la obra, obra, el conflicto interno interno para mantener mantener esta visión de de si mismo es tan tan grande, grande, que el mundo realistamente narrado, pasa a ser muy onírico y cargado cargado de simbolismo, simbolismo, cómo mostrando mostrando que la confusión interna de Lucas Meyer superaría al conflicto conflicto externo con los del otro lado del río. La obra cierra revelando que todo era un sueño, más al repetirse luego de esto los hechos que iniciaron el conflicto, da cuenta (y aquí quizá sea mas explicita que literal el nivel interpretativo usado) que ese conflicto (la persecución entre vengativa y justiciera (según el horizonte de dónde se mire), de los pobres a los ricos) es ineludible, que es adyacente a la condición socioeconómica socioeconómica de Meyer, y que será trascendente en el tiempo. Podemos profundizar en los mensajes del autor al espectador analizando en un nivel más explícito. Lo directamente visible, es el anuncio de un conflicto entre clases sociales que amenaza con estallar en el momento menos esperado, mientras dormimos... dormimos... Y que si bien comenzarán a visualizarse pequeñas manifestaciones que sirvan de preludio al gran conflicto (cómo la pira que hace Gran Jefe Blanco con las chaquetas de los estudiantes de la universidad, y el que nadie haga nada, cómo diciendo que hay cierta validación o miedo por otras partes de la sociedad hacia la revolución), serán estas sólo una especie de abofetada futura que se darán los más afectados cuando ya este la revolución en su apogeo, por no haberle dado la correcta importancia, y no haberse preparado para lo que venía por sentirse seguros con lo que los protege en el mundo “ordenado” ¿Especie de advertencia a estar atentos a las, aunque pequeñas, controversiales controversiales manifestaciones? manifestaciones? Definitivamente. Junto a esto, está el anuncio de que este estallido de venganza de los pobres hacia los ricos por lo que les han hecho, o sólo una búsqueda de igualdad, involucrará a todos, hayan sido lo que hayan sido en el “viejo mundo”, y que los transformará tarde o temprano. Analizando Analizando a los personajes personajes en un nivel más simbólico, implícito, podemos referirnos a Lucas Meyer cómo el representante de la imagen de hombre exitoso según nuestra sociedad actual. Aunque claro, claro, el autor deja por el suelo a esta esta visión. Es curi curios oso, o, si se busc busca a “éxi “éxito to”” en goog google le imag images es,, se llen llenar ará á la pant pantal alla la con con foto fotos s de empresarios y gente de traje y maletín.
Si bien es cierto que en la actualidad el mundo gira en función del dinero, y que por ende el hombre con dinero tiene grandes opciones de cómo vivir, esto no necesariamente debe influir en lo que entendemos por éxito. Si en la antigüedad lo era el ser, primariamente, el bruto más fuerte, luego el guerrero más victorioso en las batallas, luego la mas útil y ferviente herramienta de Dios, después, el más sabio de todos los hombres, ahora, con el existencialismo arraigado a todas las artes (hasta en las caricaturas infantiles), pareciera que la brújula filosófica de la época no apunta al norte, ni a ningún punto cardinal. De alguna manera se dobla sobre si misma y se pierde en su interior. Cabe mencionar que es factor común en todas las épocas, que el tener muchos bienes y dinero ha sido visto cómo algo positivo. Por lo que podríamos afirmar que lo único que nos va quedando es hacerle caso a Meyer y creer que “la codicia es el motor que mueve el mundo”, o sino terminar “filosofando ante una lata vacía de sardinas” cómo decía China. O matarnos... aunque no veo eso solucione algo. Pero cruelmente para quienes decidieron hacerle caso a Meyer, Egon Wolff nos muestra con su personaje, que el optar por ese camino es estar lejos de superar al resto, de hecho todo lo contrario. Lucas teme a los harapientos del otro lado del río, por su cantidad, por no ser sobornables para que se vayan y lo dejen en paz, por considerarlos bárbaros, barbarie que él no es capaz de superar, por lo que se refugiaba en su dinero y su trabajo para evitarlos, y para eludir la culpa de que su ascenso es inversamente proporcional al de ellos, se auto convencía que ellos decidieron estar en ese lugar, por vagancia. Arrojarles una moneda de vez en cuando, limpia cualquier tipo de desequilibrio del que se es parte al estar dentro de esa sociedad que acumula gran parte de la ganancia. Wolff nos revela usando cómo símbolo a su personaje Lucas Meyer, algo que los “exitosos” actuales piensan a diario, pero que ocultan con las convenciones sociales que se tienen de ellos mismos. En realidad son débiles, temerosos he inseguros, llenos de culpa que por orgullo no aceptan. Pero así cómo la percepción de la realidad es subjetiva y propia de cada individuo, si se controla adecuadamente en la mayoría, se puede llegar a crear una mentira que sea tan real cómo una verdad. Siguiendo la misma linea, por referirnos a un nivel oculto de interpretación, podemos decir que la visión de este empresario, es creíble y es más, es información de primera fuente. Se desprende de la condición social de Egon Wolff. Por lo que podemos estar seguros de, cómo mínimo, que el autor conoció empresarios cómo Lucas Meyer en su vida, y que de seguro él quiso ver enfrentados a ese mal que tanto temían. De ahí puede haya nacido en parte el deseo de escribir la obra. Podremos concluir entonces que la profundidad de Lucas Meyer, es basta y extensa. Que es la semilla del conflicto que se menciona en la “interpretación explícita”, y que de mantenerse la visión mencionada anteriormente, de que el poseer dinero en abundancia es algo positivo, este será un conflicto, que cómo se explícita en el final de la novela, es y será de continua regresión.
Yerko Ayala Matías Castillo 4ºE
