LA INTERVENCIÓN ESCRITURAL EN TRABAJO SOCIAL
Exposición del : Lic. OSVALDO AGUSTÍN MARCÓN En el panel i!lado : "EL INFORME COMO PRODUCCIÓN ESCRITA" O"#ani$ado po" la : DELEGAC%ÓN RECON&U%STA DEL COLEG%O 'RO(ES%ONAL DE TRA)A*ADORES SOC%ALES DE LA 'ROV%NC%A DE SANTA (E +,- Ci"c./ RE'0)L%CA ARGENT%NA. Recon1!isa +A"#enina/ ,2 de *!lio del 3443.5 344 3.5
2
MEMORIAL
♦
LO ESCRITURAL COMO PODER .................................................. ..................................................
Conside"aciones p"e6ias...................................................................................... La necesa"ia inconsciencia indi6id!al ............................................................... Los 7o7enos de consciencia ........................................................................... %nconsciencia coleci6a ....................................................................................... %nconsciencia del pode" ...................................................................................... Condiciona7ieno 8isó"ico ................................................................................ C!"iosidades ........................................................................................................ . Exp"esión conc"ea .............................................................................................. La i7p"ena lo exp"esa ........................................................................................ (o"7ado"es de opinión ....................................................................................... La e9icacia si7ólica del 9eic8e ......................................................................... El 9eic8e en las p"o9esiones ............................................................................... El 9eic8e en las p";cicas ...................................................................................
# , ? @ @ B B B ,4
## ♦
EL INFORME COMO EJERCICIO DE PODER: Ampliar el campo de la conciencia ........................................... ...........................................
♦
%n9o"7e < '"od!cción .......................................................................................... %n9o"7e < Rep"od!cción ...................................................................................... %n9o"7e = %n6ena"io < %n9o"7e = %nsi!ido .........................................................
INFORME Y OJETO DE INTER!ENCI"N INTER!ENCI"N ................................... ...................................
La especi9icidad ................................................................................................... Dos e>e7plos ....................................................................................................... El os;c!lo p"a#7;ico ..................................................................................... Las "ec8as pa"a ope"ai6i$a" los o>ei6os de la p"o9esión ........................... La especi9icidad co7o disponiilidad de conoci7ienos ...............................
,, ,3 ,2
#$ , ,B , , 34
%#
3
♦
♦
INFORMAR ES INTER!ENIR ....................................................... POSIILIDADES Y L&MITES DE LA INTERDISCIPLINA ...............
El o>eo p!ede se" ine"disciplina"io ................................................................ Con9l!encia de 7i"adas ...................................................................................... La ine"disciplina : !na 'pose para la foto' F .................................................... Lo 1!e "asciende ................................................................................................
%' 32 32 3? 3@
LO ESCRITURAL COMO PODER
CONSIDERACIONES PRE!IAS
En primer lugar convendría señalar que la preparación de informes ocupa uno de los lugares privilegiados en la tarea profesional cotidiana, especialmente en el ámbito institucional público. Su estructura es fuente de incertidumbres que explican cúmulos de ansiedades. El ¿cómo se hace? llega a angustiar luego de suponer que existe una
respuesta absoluta. No sólo porque personalmente me resisto tanto a dar como a buscar recetas, sino porque en este tema ella no existe, es que no la van a encontrar en mi exposición. !a"emos entonces el nivel de expectativas # dispongámonos a pensar el asunto desde un lugar constructivo al que todos de bemos aportar.
El motivo de esta conversación es el informe, pero no desde cualquier enfoque sino en cuanto producción. $ero tampoco en cuanto cualquier forma de producción sino en tanto ella es escrita. %e parece interesante 'leer' la sucesión de conceptos que propone el título del
4
panel pero al rev&s. $or ello comen'aríamos por el concepto al que se alude con la última palabra( lo escrito # su expresión concreta( la escritura. %ás adelante nos referiríamos al concepto 'producción' #, por
último, al 'informe'. No aludimos a la escritura desde perspectivas tradicionales )p.e". la literaria* sino según la mirada que ubica a la escritura en cuanto intervención profesional. $ero si captamos la
dimensión de lo escrito en general creo que estaremos en condiciones de captar la dimensión de lo escrito en cuanto intervención escritural profesional # del informe escrito como el instrumento operativo por
excelencia.
LA NECESARIA INCONCIENCIA INDI!IDUAL
+a ma#or parte de la realidad no integra nuestra conciencia # no es raro que cuando aflora la cataloguemos de obvia pues es obvia. Estaba allí, pero sin que formara parte de nuestras ideas conscientes. $or e"emplo, podríamos en este momento inventariar cuántas partes del cuerpo permanecen sin que sean sentidas asta que pensamos en ellas( permanecen intelectualmente inconscientes. -n dedo puede no estar cómodo adentro del cal'ado pero es posible que tal incomodidad no se sienta asta que me centro en &l. El dedo forma parte de un sistema # entonces funciona automáticamente, asta que falla. Es ante la falla cuando se amplía el campo de la conciencia. Es cuando el dedo enferma # due le
que tiende
a permane cer
a ni vel de conciencia. al
inconsciencia es condición para su buen funcionamiento. an amplio es el campo de la inconsciencia que conceptualmente se an desarrollado teorías, además de la específicamente psicoanalítica, que intentan delimitar ob"etos específicos( inconsciencia intelectual, inconsciencia espiritual, inconsciencia colectiva, etc. El concepto de concientización tan caro al raba"o Social se vincula con este orden de ideas.
/nálogo comentario valdría para la escritura. 0omo se sabe para que ella cumpla su función no exclu#ente de transmitir conceptos debe, previamente, amalgamarse con el modo de operar del intelecto. 1ebe
5
integrarse al sistema de modo que pueda funcionar instrumentalmente. Es decir que el Su"eto debe aprender a escribir )# leer* pero no basta con ello sino que debe mecani'ar tales destre'as de modo tal que al funcionar no requieran atención consciente. /l no requerir atención el instrumento podrá atenderse lo substancial( los conceptos que se pretende transmitir vali&ndose de la escritura. +a escritura , entonces, debe acerse inconsciente. +a enseñan'a misma de la escritura impacta sub"etivamente de un modo o de otro según el planteo pedagógico, # ello importa bases diferentes para la futura construcción de ciudadanos. E"emplifiquemos( allí donde predomina el castigo se formarán personalidades distintas a aquellas que surgen de pedagogías que partan de las motivaciones conscientes o inconscientes. $ero esto se ace luego inconsciente.
LOS MOMENTOS DE CONCIENCIA
+o fascinante de un proceso tan comple"o puede aparecer en el campo de la conciencia adulta en ocasiones especiales. 0omo el #a dado e"emplo del 'dedo que duele' lo escritural inconsciente irrumpe 2por e"emplo2 cuando aparece la falla, sea como defecto o como proceso natural. /llí donde se observan los ensa#os de un niño en primer año de la Educación 3eneral !ásica por acceder a la lectoescritura, o donde se observan los efectos de las patologías del aprendi'a"e )dislexia, disgrafia, etc.*, o en otras situaciones especiales. 4asta estos momentos es común que a nivel individual, personal, se naturalice algo totalmente artificial. Es decir( se de como natural algo totalmente construido por la umanidad en su evolución.
INCONCIENCIA COLECTI!A
/ora bien ( del mismo modo en que a nivel de conductas individuales el valor de la escritura permanece levemente oculto a la conciencia, operando sin que se advierta su presencia como parte de un sistema,
6
tambi&n sucede lo mismo a nivel colectivo. Si la escritura es naturali'ada a nivel
individual,
tambi&n lo es como fenómeno
colectivamente construido. 5 al permanecer
inconsciente a nivel
colectivo el fenómeno de la escritura tambi&n permanece inconsciente en
cuanto
fenóme no
plename nte
inte grado
#
operante
en
la
construcción de relaciones de fuer'a. Es decir como fenómeno político. /sí como a nivel individual la posibilidad de tomar conciencia aparece ante cuadros especiales, pareciera que tambi&n aquí tal posibilidad aparece al anali'ar fenómenos tambi&n especiales pero que tienden a naturali'arse. Notemos por e"emplo con cuanta naturalidad, en las generaciones más "óvenes, se va incorporando el idioma ingl&s, que conlleva la escritura del inglés. 5 aunque es un fenómeno semiológico muco más comple"o al menos mencion&moslo( conlleva tambi&n el pensar en inglés. 6ecordemos el papel que tuvo la enseñan'a del latín
ace años, su progresiva decadencia # su relación con la realidad social.
INCONCIENCIA DEL PODER
+a escritura, entonces, aparece como fenómeno instrumental. 7 como substancial en 8por e"emplo2 el mundo de la literatura. $ero sus operaciones más profundas, que son las que condicionan los modos fundantes, permanecen fuera de la mirada permanente. La escritura estructura gran parte del mundo pero aparece mimeti'ada ba"o formas as&pticas. Ella no se revela asiduamente como factor de poder en sí misma. Es mecanismo de penetración ideológica # por ello mismo tal condición no aparece a la vista. Si se visibili'ara tal capacidad de penetración tendería a debilitarse.
CONDICIONANTE (IST"RICO
0reo que no exageraríamos si afirmamos que mucos procesos istóricos fueron, aunque no exclu#entemente, vertebrados por lo escrito. $ensemos en el rol de las Sagradas Escrituras en la 9glesia
7
0atólica # en el :udaísmo. Si recorremos la istoria de otras religiones, e inclusive de mucas de los credos religiosos más difundidos, descubriremos que gran parte de su entidad dependió # depende de lo escrito. En la istoria del marxismo no puede ignorarse el rol de una
obra
escrita
como
El
apital.
+a
onstitución
!acional
es
un
instrumento que opera en cuanto producción escrita. $ara 0ódigos, las le#es,
etc.,
vale
análogo
comentario.
%ucísimos
programas
periodísticos de la mañana se acen sobre la base de las tapas de diarios.
CURIOSIDADES
+a istoria universal exibe algunas curiosidades. Según los expertos l a literatura escrita aparece reci&n en el año ;<== a.c. # son los sumerios # acadios quienes la desarrollan, asentados en la %esopotamia. / pesar de que la ma#oría de los escribas mesopotámicos fueron ombres, existió una excepción de notabilísima importancia en el mundo de las letras de los orígenes de la civili'ación. Se trata de En>eduanna, i"a del re# Sargón de /cad, que además de cumplir funciones de gran sacerdotisa fue una excelente escritora. Su figura se erige como la del primer escritor de nombre conocido en la istoria de la umanidad. ambi&n se destacó !eltiremenni quien fue especialista en textos escolares # vocabularios.
)? *
E)PRESI"N CONCRETA
@ue el mane"o de la escritura constitu#e un factor determinante de poder se ve con claridad si pensamos, a nivel individual, qu& posibilidades de articulación laboral tiene o# un analfabeto. 5 a nivel colectivo,
los
niveles
de
mane"o
de
escritura
en
pueblos
8
económicamente desarrollados, claramente por encima de pueblos subdesarrollados.
LA IMPRENTA LO E)PRESA
anto incide la escritura en las relaciones de poder que algunos istoriadores ubican la invención o perfeccionamiento de la imprenta )3utenberg, ?AB=* como una de las bisagras de la istoria universal, en cuanto idea que permitió la difusión a gran escala de los textos escritos.
FORMADORES DE OPINI"N
Es una cuestión de poder. 0olumnistas nacionales como 3rondona, Can 1er Doo# o Cerbits># son ombres con poder. Sus columnas en los diarios +a Nación, 0larín # $ágina ?; refle"an expresiones de poder # orientan la formación de opinión. /demás, quienes escri"en los distintos títulos # artículos de esos diarios trascienden a sus lectores pues mucos medios de comunicación de todo el país basan su traba"o en dicas producciones.
LA EFICACIA SIM"LICA DEL FETIC(E
Lo escrito porta algo parecido al concepto que en antropología suele
denominarse eficacia sim"ólica. Se un fenómeno análogo a, por e"emplo, el televisivo( #lo que no est$ en televisión no e%iste&. 7 el radial, expresado en la frase popular #lo escuché en la radio&. +o escrito es rodeado por un alo mágico. $or sí mismo supone una cuota de poder, aunque las ecuaciones a construir son infinitas según contenidos, contextos, etc. 9maginemos qu& pasa cuando un ciudadano o grupo de ciudadanos reclama ante un organismo verbalmente, en una reunión. 5 las diferencias que surgen cuando estos ciudadanos reclaman por nota. +a nota , más aún si lleva varias firmas, preocupa a
9
los operadores del poder. +os compromete. 5 plantea una relación más adversarial. En el libro 'El valor de escri"ir' %arcos /guinis afirma que ( La escritura, aunque tiene los caracteres de una materia
concreta,
es
sólo
la
imagen
de
algo
inaprehensi"le que e%cede a esa materia. Es como el mismo ser humano que tiene un cuerpo como materia concreta, palpa"le, sensi"le ( tam"ién destrui"le, pero que
sólo
refle)a
un
ser
casi
ilimitado,
con
sus
*+
emociones, deseos ( posi"ilidades.
EL FETIC(E EN LAS PROFESIONES
/ora bien( 4a# profesiones que se valen # expresan en la escritura su actitud frente al poder, lo que tambi&n es decir su actitud frente a la participación en la distribución de las rique'as. Ceamos si no a# en lo que sigue otra curiosidad, en cuanto expresión del poder en el ámbito de
lo
escrito2divulgado,
si
es
que
uno
se
anima
a
reali'ar
comparaciones, sólo a fin de generar preguntas # no con la pretensión de ofrecer respuestas. $or e"emplo si comparamos los catálogos de novedades de una editorial de raba"o Social # una editorial "urídica, disponibles a :unio de este año, podemos observar los siguientes datos (
NO!EDADES ESPACIO EDITORIAL *+ra,a-o ocial/
Promedio
186
NO!EDADES EDITORIAL LIRARIUS *-0r1dica/
422
10
p23ina por li,ro
Una re4erencia ar,i+raria: la %$5 p23ina
Promedio precio por li,ro
O+ra re4erencia ar,i+raria : el precio 6 %5
Promedio precio por p23ina
9 % : las supera
73 % : las supera
91 % : no las
27 % : no las
alcanza
alcanza
$ 14,80
$ 45,29
82 % :
12 % :
está por debajo
está por debajo
$ 0,079
$ 0,110
Esta curiosidad puede promover distintas respuestas. -nas pueden tener que ver con la estructura epistemológica de cada disciplina, con el modo de producción de conocimiento. /quella que opera sobre la base de la acumulación )el dereco* tenderá naturalmente a aumentar los contenidos descriptivos. /quella que tiene como referencia el descubrimiento # aplicación de regularidades tendrá tendencia a los contenidos breves pero más explicativos.
11
$ero tambi&n abrá una posible, # que es la que más interesa aquí, que relacione tal curiosidad con el poder económico de cada profesión. +a consecuencia más directa es que escribir en el ámbito "urídico suele generar algunas ganancias # escribir en raba"o Social generalmente sólo genera una mu# pequeña retribución en libros. Esto cierra un círculo que retroalimenta, con debilidad o fortale'a según el caso, lo escrito como factor de poder. Esto no de"a de expresarse en cada informe social en cuanto subfenómeno escritural.
EL FETIC(E EN LAS PR7CTICAS
Estas relaciones de poder que podríamos diferenciar como de nivel macro se reproducen a nivel micro. -ds. $ueden opinar si coinciden con lo siguiente. En el ámbito de las tramitaciones oficiales )p.e". las "udiciales* # parte de las privadas un escrito médico go'a de un plus simbólico del que no go'a un escrito social . 3ran parte de l os profesionales se sienten animados a opinar sobre los contenidos de este último aunque consideran "lindado el escrito m&dico. 4abría tambi&n una fuerte tendencia a reconocer tal carácter "lindado al escrito "urídico a la par de imponerle una alta penetra"ilidad al escrito social. +a respuesta a una cuestión semiótica tan comple"a no podrá darse aquí pues inciden aspectos estructurales, tradiciones, mitos, fantasías, lengua"e t&cnico ... racionalidades e irracionalidades. Sobre al gunas de las causas que ici eron del escrito social algo tan penetrable opinaremos más adelante.
12
EL INFORME COMO EJERCICIO DE PODER : Ampliar el campo de la cociecia
-n -nforme ocial e s u n escrito. En cuanto tal participa entonces del inter"uego de poder cu#as dimensiones se trataron de transmitir asta aquí. /lberga entonces una dimensión consciente # otra dimensión inconsciente. +a tarea debería tender entonces a ampliar esta última. El -nforme ocial está entonces destinado a ser poder. Equivale al arma
del soldado en la guerra clásica, no la única pero sí clave. Existe porque es requerido #, entonces, es necesario. Su contenido depende del profesional
quien,
aunque
mucísimas
veces
puede
estar
condicionadodeterminado, dispone de potencial independencia t&cnica. $recisamente el eco de que en ocasiones sea condicionado por el poder para que opere sin independencia t&cnica revela el informe como un instrumento de poder. Si así no fuera el poder optaría lisa # llanamente por no incluir el informe.
INFORME 8 PRODUCCI"N
&cnicamente el -nforme ofrece una opinión especiali'ada sobre una situación dada a la autoridad que debe resolver el asunto. -n profesional se forma en investigación no exclusivamente previendo la posibilidad de que se desempeñe en el campo de la investigación propiamente dica sino que, por el contrario, tal formación es necesaria para el conocimiento de la realidad. Sirve para moldear modos de
13
acercamiento a la realidad que ale"en riesgos tales como los excesos de sub"etividad, aplicación de lecturas mecanicistas, etc. /nte el caso el profesional aplica la lógica de investigación produciendo las síntesis metodológicas # t&cnicas posibles. $rofundi'a asta allí donde debe o puede, según cada caso. +ogra un acercamiento diagnóstico # lo sinteti'a en un escrito que, como se di"o, es el informe.
4asta aquí podríamos decir que el informe forma parte de las relaciones de producción en un sentido lineal. 5 está destinado a desarrollar un papel sociológicamente funcionalista. El profesional au%ilia a l as autoridades de las que depende ofreciendo elementos específicos que tal autoridad no podría conseguirlos por sí misma aunque sí se considera en condiciones de entenderlos, comprenderlos # valorarlos "ustamente. 1ico de otro modo, existe una institución con ob"etivos dados por el sistema que la originó, destinada a formar parte de una constelación
de
dispositivos
equilibradores.
-nos
aportan
a
la
producción en sentido lato )industria, comercio, etc.* # otros a la producción en sentido indirecto )sistema estatal de control formal*. El informe se articula a dico funcionamiento. 0ada institución tiene sus
ob"etivos # el informe aporta para alcan'arlos.
INFORME 8 REPRODUCCI"N
/ora bien. /pelemos a la exageración e imagin&monos produciendo un informe para un :u'gado FxF. erminada la investigación me decido a
escribirlo. /rranco una o"a de mi cuaderno espiralado # con el primer bolígrafo que encuentro comien'o a redactarlo. %e equivoco, taco una frase # sigo. 1escuido la ortografía # el lengua"e t&cnico. No falta la manca producida por el mate derramado o la grasa de los bi'cocitos. Girmo, no aclaro la firma, no sello. 5 lo entrego. @ui'ás el contenido sea pertinente, preciso, útil al proceso que se lleva adelante en t&rminos de funcionamiento productivo. $ero quien lee el informe seguramente
14
tendrá una impresión desagradable, inclinada a dudar sobre mi profesionalidad. @ui'ás al producir el informe de un modo adecuado a las convenciones ubiese generado una impresión contraria # otra disposición sub"etiva por parte del lector. /unque pare'ca insignificante esto demuestra que todo escrito tambi&n opera más allá de los contenidos formales )los conceptos que se transmiten racionalmente*. $odemos ver que todo escrito tambi&n opera a nivel de reproducción social muco más allá de lo escrito en sentido lato.
INFORME9IN!ENTARIO 8 INFORME9INSTITU&DO
Si a lo largo de d&cadas quienes nos decimos especialistas en intervención
sobre
problemáticas
sociales
reducimos
nuestra
concepción de lo social a la mera categori'ación de las expresiones materiales que se observan en un ogar no solo raquiti'amos las posibilidades de intervención en el caso sino que HmacacamosI sobre las representaciones sociales que mane"a el funcionariado. 7bviamente terminarán cre#endo que lo social es eso de lo que el inventario de aspectos materiales pretende dar cuenta # que, por otra parte, cualquiera
puede
necesariamente
a
reali'ar. la
al
mecánica
concepción que
del
informe
posiblemente
significación que al t&rmino otorga %icel Goucault
)J *
lleva
tomando
la
, :acques 1on'elot
denomina inquisitorial al describir la realidad del raba"o Social franc&s en el ámbito minoril (
El informe social se parece m$s a un proceso/ ver"al de investigación de gendarmería que a esa sutil puesta en escena de la historia ( de l os
p ro"l emas
de
u na
fami li a qu e p ued e
ela"orar una asistente social moderna.
)J *
15
6eiteremos que 1on'elot describe la realidad francesa, así que no debe sentirse como un cuestionamiento personal, a menos que allemos algunas coincidencias con nuestra cotidianeidad.
/unque no lo busquemos # con independencia de nuestra voluntad el informe
constru#e
realidades profesionales. 7pera a
nivel
de
reproducción. @ui'ás a los raba"adores Sociales más se los cono'ca a trav&s de sus informes que a trav&s de ellos mismos, aunque a# situaciones de excepción. Si bien toda profesión adquiere status legal a trav&s de una serie de regulaciones # con ello se empla'a formalmente, no podemos olvidar que ello resulta a una institución de otro orden( es el orden del anidamiento en el ámbito de lo que 0ornelius 0astoriadis )A*
llama el imaginario social que opera como sociedad institu(ente.
1ico mu# esquemáticamente, es el ámbito de ideas que regulan la construcción de aspectos de la realidad. $.e".( ho( pensamos que el electrodoméstico '%' (a es indispensa"le en cualquier hogar medio por ende consideramos necesario un sueldo que permita adquirirlo pero a0os atr$s esto pudo no ser así .
%ucos años de reducir el informe al mero inventario hogare0o an contribuido a la construcción de un mu# modesto lugar en el espectro de profesiones modernas. Esto significa el mane"o de escaso poder, # reproducción de la idea según la cual 1a este informe social lo hace cualquiera2. Entendido el escrito como inventario #, en el me"or de los
casos, con una opinión que no muestra relación con el inventario, si no a# profesional al alcance, lo puede acer la policía, un "ue' comunal, un oficial de "usticia, etc. Esto explica en parte el #a mencionado carácter altamente penetra"le del 9nforme Social.
5 si el informe es un mero inventario. $uede aparecer legítima la pregunta Kpara esto estudian cuatro o cinco años traba"o social, psicología, dereco, investigación, antropología, etc.L Kpara ingresar a una vivienda # verificar qu& comodidades tieneL 5 la otra Keso es Hlo socialIL
16
INFORME ! OBJETO DE INTERVENCIÓN
@ui'ás debi&ramos pensar que esto se relaciona estrecamente con el problema de la construcción de la trama conceptual que es el Hob"eto de intervenciónI. $or e"emplo, en el 1ereco de %enores el niño es considerado un HSu"eto de 1erecosI # &ste es el ob"eto. oda ve' que se presume vulnerado uno de esos derecos, aparece la intervención "udicial. El m&dico intervendrá si en ese niño aparece vulnerada alguna de sus dimensiones somáticas. K5 cuánto interviene el /sistente o raba"ador SocialL 0uando el problema radica o inclu#e la dimensión social, el hecho social . K$ero qu& es tal hecho social IL @ui'ás allí est& parte
del
núcleo
del
problema. /ún
cuando
existen
múltiples
definiciones debe recordarse una fundante ofrecida por 1ur>eim(
Llamamos hecho social a todo modo de hacer *sic, fi)o o no, que puede e)ercer so"re el individuo una imposición e%terior3 o tam"ién, que
es
general
en
la
e%tensión
de
una
sociedad dada, al mismo tiempo que posee e%istencia
propia,
independiente
manifestaciones individuales.
)B *
de
sus
17
Cemos con cierta claridad que la definición alude a algo que tiende a aparecer mu# poco en los informes sociales signados en mucos casos por aspectos( por e"emplo el educativo, el laboral, etc., rubros en cu#o
interior
aparecen
descripciones
estáticas.
/nalicemos
la
definición de 1ur>eim que no por casualidad fue elegida aquí( es una de las más antiguas # -ds. podrán allar otras más actuali'adas pero que profundi'an la noción de lo social como conducta, como expresión exterior de la persona pero anclada en el #a mencionado imaginario social. 1ico por 1ur>eim es un 1modo de hacer2, es decir una e%presión comportamental. K$uede sostenerse como pertinente un
inventario ogareño como expresión de lo social L
-no de los ra'onables límites que el raba"ador Social suele ponerse al plantear la conducta como ob"eto de intervención expresa en parte una actitud &tica( no invadir otros campos profesionales. $or e"emplo, es mu# común que ante todo aquello que est& vinculado a la conducta umana el profesional trate de no avan'ar sobre terrenos psicológicos o psicopedagógicos. $ero tambi&n expresa un cercenamiento de sus incumbencias.
LA ESPECIFICIDAD
0itemos situaciones bastante concretas, fáciles de encontrar en la experiencia profesional. Si me encomiendan opinar sobre la pertinencia de entregar una vivienda a un grupo familiar mi problema es uno. /llí sí qui'ás
sea
necesario
un
inventario
que
refle"e
la
realidad
socioeconómica, con más otros elementos. $ero dico inventario debe tener sentido en un contexto de articulación en torno a lo social en el sentido #a comentado. Si, en cambio, me encomiendan opinar sobre la factibilidad de entregar o no un niño en adopción a un matrimonio el
18
mismo acercamiento diagnóstico puede resultar irrelevante, salvo elementos parciales. En este último caso será necesario investigar, por e"emplo, qu& representación social sostiene su decisión de adoptar. 5 esto forma parte de Hlo socialI.
DOS EJEMPLOS
/unque toda esquemati'ación expone al riesgo de la simplificación de lo comple"o, utilicemos los siguientes e"emplos para tratar de observar cómo el foco de atención cambia según el ob"eto de intervención sin que esto implique total acuerdo con los aspectos que las autoras toman (
♦
3raciela onon
)< *
propone para los casos de maltrato infantil
investigar mínimamente los siguientes aspectos (
Nombre, edad, domicilio # tel&fono del niñoa víctima.
9ndicadores físicos, emocionales # comportamentales que puedan señalar la existencia del maltrato.
9dentificación del lugar donde se encuentra.
Nombre # edad del agresora.
Cínculo con la víctima.
0onvivencia actual con la víctima.
1escripción de la situación en medio de la cual ocurrió el eco.
0aracterísticas # magnitud del daño.
0ronicidad de la situación.
Nombre # domicilio de quien informa de la situación.
Cínculo con la víctima # con el agresor.
1e qu& manera a conocido la situación que informa.
19
1isponibilidad a colaborar en la resolución de la situación.
/ccionar de instituciones relacionadas con el caso.
Estructura # composición de la familia.
Etapa del ciclo vital que atraviesa.
0aracterísticas # comportamientos del padre # de la madre.
0aracterísticas # comportamientos de losas i"osas.
6elaciones de los miembros de la familia entre sí.
6elaciones sociales de la familia( con otras familias, con vecinos, etc.
♦
+a vivienda # el barrio.
+a situación económica familiar.
+a situación laboral de los padres.
3eorgelina !arba
)M *
propone para los casos delincuencia investigar
mínimamente los siguientes aspectos (
Nombre # apellido, domicilio, datos de la causa, "ue', etc.
/ntecedentes personales( lengua"e, descripción física, lugar de residencia, etc.
/ntecedentes familiares( datos de filiación, domicilio, instrucción, si ubo abandono de ogar, conflictos familiares, etc.
Civienda( caracteri'ación de la unidad abitacional # el barrio.
Escolaridad( nivel alcan'ado # desempeño general )disciplina, etc.*
/dolescencia # aprendi'a"e( a qu& edad comen'ó a traba"ar, dónde, cuánto ganaba, si a# aprendi'a"e de conflictos con la le#, etc.
7ficio o profesión # traba"o actual.
Cida familiar # social( conflictos, causas, ábitos, etc.
1elito actual( si es posible ablar del mismo, actitud frente al eco.
20
+o que surge con claridad es el centramiento en aspectos distintos según lo exi"a el ob"eto conceptual en construcción.
EL OST7CULO PRAM7TICO
4agamos un par&ntesis para señalar una ra'onable ob"eción( %ucos organismos piden, # asta adelantan formularios, de informes que denominan como am"ientales, socioeconómicos, etc. Es que allí #a está instalada una idea, una representación social de lo que un raba"ador Social debe acer. $ara comen'ar a revertir esto es necesario actuar sobre lo que a sido instituido, en los t&rminos de 0astoriadis, para instituir otra concepción. El cambio de normativas vendría como
consecuencia. Es posible tambi&n que de un día al otro un profesional acceda a lugares de decisión # pueda cambiarlo por una resolución específica, pero tambi&n aquí posiblemente deba llevar adelante un proceso para cambiar el modo en que la intervención está instituída en las representaciones de los profesionales. No sería extraño que aún los propios /.S. resistan el cambio. 6ecordemos los dicos de %icel Goucault en el año ?MJ ( ... las pr$cticas sociales pueden llegar a engendrar dominios de sa"er que no sólo hacen
que
aparezcan
nuevos
o")etos,
conceptos ( técnicas, sino que hacen nacer adem$s
formas
totalmente
nuevas
su)etos ( su)etos de conocimiento.
*4
de
21
LAS REC(AS PARA OPERATI!I;AR OJETI!OS DE LA PROFESI"N
0omentamos #a que el informe puede articularse 8# suele así funcionar2 con facilidad a la dinámica institucional # al esfuer'o por alcan'ar sus ob"etivos. Sin discutir el estado actual de &stos )siguiendo a Galeiros pareciera que ellos an sido fagocitados por las propias instituciones* se ñale mos
que
la
profesión
tiene
ob"e tivos
propios
que
no
necesariamente deben ser desecados al ingresar a una institución. $or el contrario, el status legal profesional obliga a desplegar una actitud profesionalmente HmilitanteI 8si se acepta el t&rmino2. Esto implica advertir que nada está dado de una ve' # para siempre sino que, por el contrario, todo lo que integra la realidad social es pura construcción istórica. 5 que entonces no debe delegarse en nada ni en nadie la tarea de toda re2construcción según cambie la realidad social. $uede que tal reconstrucción afecte tanto a ob"etivos de la institución como a ob"etivos
de
la
profe sión,
puede
que
ambos
se
enrique'can
mutuamente, o que ambos se repelan. +o que no es posible es alienarse profesionalmente frente a mucos requerimientos institucionales del tipo Hobediencia debidaI, menos aún cuando #a nadie puede discutir la profunda crisis institucional por la que atravesamos # que ace discutible la legitimidad de mucas prácticas.
LA ESPECIFICIDAD COMO DISPONIILIDAD DE CONOCIMIENTOS
Colvamos entonces al tema de la especificidad del informe social según el ob"eto de intervención, pues de esto último se trata. /unque no siempre estamos dispuestos a admitirlo, aparece con bastante claridad
22
que no todo profesional dispone de formación específica previa como para investigar según el problema que tiene frente a sí. En ocasiones porque el ob"eto conceptual no a sido suficientemente desarrollado en la profesión, en otras porque no fue estudiado personalmente. Si un m&dico presume la existencia de una gripe en un paciente, dispondrá de una serie de ipótesis provistas por la teoría a corroborar o corregir que guiarán su investigación. Si un .S. presume la existencia de un caso de maltrato infantil, debe disponer de una serie de ipótesis provistas por la teoría a corroborar o corregir que guiarán su investigación.
El
informe
social,
entonces,
deberá
refle"ar
tal
especificidad. 0omo vemos escaso valor tendrá el mero inventario de disponibilidades materiales. Se requiere la investigación de mucas otras dimensiones como así tambi&n su integración para superar la limitación señalada por 1on'elot, acia la puesta en escena de la istoria, actualidad # perspectivas de los su"etos de la intervención.
INFORMAR ES INTERVENIR
El informe es una fase substancial de la intervención. $roducirlo no es cumplir con una parte burocrática o accesoria de la tarea profesional. Es parte substancial de la intervención en su subdimensión, que aquí denominamos escritural. +a eficacia con que se comunica la opinión profesional es decisiva sobre la realidad. El efecto reproductivo que señaláramos aparece nuevamente. Sabemos que en todo proceso de armado de lega"os, expedientes, etc., flota siempre la tendencia a substanciali'ar tales instrumentos burocráticos por encima de la realidad concreta a la que ellos refieren. /sí es que del mismo modo en
23
que el informe formalmente adecuado tiene efectos reproductivos positivos, tambi&n puede integrarse al ra'onamiento administrativista en el que el funcionario 1%2 tra"a)a "ien pero no porque opere con eficacia concretas situaciones umanas sino porque 1no se le pasa un e%pediente sin foliar o sellar2.
El profesional puede tener la me"or
opinión posible pero una
inadecuada administración del poder que significa lo escrito puede acerlo fracasar en su intervención. 5 la sumatoria istórica de fracasos individuales puede aportar al fracaso de colectivos profesionales. El modo de producirlo incide claramente. No existe un esquema previo por lo dico( cada informe depende del o")eto de intervención . 5 aunque no se explicite en el informe tal ob"eto está constituido por aspectos que no acen a los su"etos de la intervención directamente sino a la institución en cu#a trama an aparecido atrapados. $or e"emplo( demos como problema el d&ficit abitacional de un grupo familiar. $areciera un ob"eto de intervención inequívoco. Sin embargo, en cuanto ob"eto conceptual, se configura de un modo si la institución que se ocupa es la 1irección $rovincial de Civiendas, pero otro si quien interviene es una organi'ación popular de las del tipo aquí mu# conocidas. %ientras en la primera el Estado ofrece lo que tiene #a configurado, en la otra pueden surgir posibilidades de construir colectivamente una solución.
enemos entonces que el perfil del escrito depende de la institución, del caso, del momento procesal o administrativo, e incluso del perfil personal de la autoridad que lo valorará. No existe un acuerdo unánime sobre la forma del informe social. El debate va desde posiciones extremas consistentes en, por un lado, afirmar que toda la información recogida debe volcarse asta, por otro lado, afirmar que sólo la conclusión debe ser ofrecida # el resto debe ser reservado. El Servicio o raba"o Social a construido una imagen d&bil con sus intervenciones escritas )informes ma#oritariamente del tipo inventario* # aora debe revertirla. Sin llegar al extremo de revelar intimidades )lo que #a
24
plantearía cuestiones &ticas* ambas posiciones exiben argumentos que acen discutible el tema.
enemos entonces que los elementos que concurren para la elaboración del informe dependen del o")eto de intervención.
+a institución
tambi&n configura el ob"eto. / criterio personal # dado el contexto de la profesión es necesario, como se di"o, adecuar el escrito a las exigencias institucionales. En la medida de lo posible sería necesario identificar la metodología # t&cnicas utili'adas. 6esulta conveniente diferenciar lo que es mera descripción de información de lo que es análisis de la misma # de las que son las conclusiones. 5 siempre que sea posible sería altamente reproductiva la cita de los autores que constitu#en el marco teórico para la intervención profesional.
POSIBILIDADES ! L"MITES DE LO INTERDISCIPLINARIO
EL OJETO PUEDE SER INTERDISCIPLINARIO
+a
cuestión
del
o")eto
de
intervención
suele
requerir
auxilios
disciplinarios que minimicen lo naturalmente incompleto de todo
25
conocimiento umano. /quí aparece la noción de HinterdisciplinaI. 6ecordemos que se trata de momento en los esfuer'os por abandonar los excesos de especiali'ación. Se aspira a la reconstrucción de un ob"eto integrado, como se da originariamente en la realidad. al sucesión de momentos reconoce la aparición de la unidisciplina, luego la
multidiscipli na,
transdisciplina.
luego
la
/lgunos
interdisci plina
autores
#,
comien'an
por a
último, ablar
la de
multireferencialidad teórica. Este proceso epistemológico ni es lineal, ni
necesariamente puede afirmarse que avan'a como lo desearíamos. Ni siquiera es tan fácil demostrar su factibilidad. 1e todos modos continúa la
búsque da
de
cami nos
que
pe rmi tan
re solve r
el
proble ma
identificado( la iperespeciali'ación # la atomi'ación de los ob"etos de estudio.
CONFLUENCIA DE MIRADAS
$odríamos reconocer que la interdisciplina admite diversas facetas constitutivas del ob"eto. Entonces las distinta miradas que se centran en dicas facetas pueden aportar conceptos que sirvan al ob"eto total. Estas
miradas
suelen entenderse como miradas
disciplinares
o
profesionales, pues esa es la concepción original. /sí podemos encontrarnos
e ntonce s
que
en
un
equipo
un
psicólogo
#
un
psicopedagogo )títulos legalmente admitidos* son psicoanalistas. El lugar teórico desde el cual HmiranI es, entonces, el mismo. 7 bien un raba"ador Social # un $sicólogo pueden abrevar en las fuentes de la teoría sist&mica # aportar desde un lugar teórico similar. +o que sucede es que en realidad se trata de la concurrencia de miradas personales distintas, de opiniones que aspiran a concurrir en una superadora. $odría
decirse
que
allí
está
el
sentido
de
la
intervención
interdisciplinaria aún cuando podría discutirse la precisión del t&rmino.
26
LA INTERDISCIPLINA : < UNA =POSE PARA LA FOTO= >
Si el procedimiento tuvo momentos o se dio íntegramente de un modo interdisciplinario es conveniente que tal perspectiva apare'ca en el escrito. $ero es conveniente percibir que en los referenciados t&rminos de poder tambi&n la interdisciplina puede ser anali'ada. Se trata de algo que sin necesariamente ser entendido ni comprendido suele ser dotado de una irresistible aureola de cientificidad. %ucos funcionarios intentan legitimar procedimientos, creaciones, etc., afirmando que intervienen equipos interdisciplinarios. En el me"or de los casos suelen disponer de los profesionales pero lo corriente es que no existan las condiciones mínimas como para lograr un proceso de fecundación mutua de las miradas concurrentes. $ensemos que se requieren oras de
traba"o
en
gabinete ,
de
discusión,
para
ll egar
a
sí ntesis
efectivamente superadoras de las miradas unidisciplinares. Es mu# común que
ni
siquiera est&n
dadas las condiciones para una
intervención unidisciplinar idónea )p.e".( ni se entiende su esencia ni se brindan condiciones para aplicar una t&cnica como la entrevista *. En mucas
ocasiones,
especialmente
en
instituciones
oficiales,
los
informes suelen llevar la firma de varios profesionales pero en su texto se detecta con facilidad la persistencia de la mirada unidisciplinar. Se requiere entonces una actitud crítica frente a esta cuestión a fin de que no se naturalicen creencias erróneas.
$ero vale insistir( la intervención escrita es parte substancial de la intervención profesional. No es una tarea administrativa o de mera
redacción que se pueda delegar. No se trata de un aditivo del que se pueda prescindir.
INFORMAR
REQUIERE PERICIA PROFESIONAL
27
LO ?UE TRASCIENDE
/l sentarnos frente a la máquina de escribir o la computadora valdría tener presente en toda su magnitud la frase del #a citado escritor %arcos /guinis (
La
diferencia
e scri tu ra
entre
resid e en
un q ue,
hom"re si
"i en
(
una
e ll a e s
producto del hom"re permanece m$s tiempo que él.
*5
CITAS )?* 49S769/ 1E +/S /N93-/S 09C9+9O/097NES. !arcelona, Editorial 7c&ano, ;==?. omo 9, $ág. ;=. );* /3-9N9S, %arcos. E+ C/+76 1E ES069!96. !uenos /ires, Sudamericana, ?PB. $ág. ?A )J* 17NOE+7, :cques. +/ $7+90Q/ 1E +/S G/%9+9/S. ;R ed., rad. :os& Cá'que' $&re' # -mbelina +arreceleta. España, $retextos, ?P. $ág. ?? )A* 0/S769/19S, 0ornelius. +/ 9NS9-09N 9%/39N/69/ 1E +/ S709E1/1 rad. /ntoni Cicens. . 9 # 99. /vellaneda )!/*, usquets Editores, ?PJ.
28
)B* 1-6D4E9%, Emile. +/S 6E3+/S 1E+ %T717 S7097+3907. ;R ed. rad. /níbal +eal. !uenos /ires, Gausto, ?<. $ág. J )<* 7N7N, 3raciela. %/+6/7 9NG/N9+ 9N6/G/%9+9/6. !uenos /ires, Espacio Editorial, ;==?. $ág. ; )M* !/6!/, 3eorgelina. 1E+9N0-EN09/ 5 SE6C9097 S709/+. JR ed. !uenos /ires, 4vmanitas, ?P?. $ág. A )P* G7-0/-+, %icel. +/ CE61/1 5 +/S G76%/S :-6Q190/S. rad. Enrique +#nc. España, 3edisa, ?P=. )* /3-9N9S, %arcos. E+ C/+76 1E ES069!96. !uenos /ires, Sudamericana, ?PB. $ág. ?B