Hechizo de Amor
Capítulo 8
Narra Samira.
Ion Skarcega
Hechizo de Amor
Había dejado que mi imaginación me llevara a donde ella quería y casi siempre me encontraba en los lugares donde las personas que conozco frecuentaban, lo que me ha llevado a pensar que todos estamos conectados de una manera u otra, lo que es fascinante ya que jamás creí que tantas personas tuvieran una visión en común durante sus sueños y del punto de vista científico este un gran descubrimiento que quizás el mundo jamás conozca ya que los que estamos conscientes de este mundo no podemos recordar nada en la realidad y aquellas personas ajenas ajenas a esta verdad verdad solo ignoran sus sueños como si se tratase de de un recuerdo innecesario… Me distancie un poco de los lugares bellos y hermosos para viajar a la ciudad donde residía, tenía la esperanza de ver todo lo que sucedía durante las noches que viajaba al mundo de los l os sueños, y me sorprendió saber que aquella fuente que me permitía ir de un lugar a otro ahora era aquella que se encontraba en un parque cerca de mi casa. Como yo, había más personas que estaban ahí, pero no creo que fueran consientes de este mundo, a mi más bien me parecían como si solo estuvieran soñando de manera normal, ya que ninguno de ellos se percató de mi presencia, también también observe que había personas que no estaban soñando y que se encontraban despiertas en aquel lugar quizás con insomnio, o solo se encontraban de paso, me sentía como un fantasma en la ciudad, podía ir a donde quisiera, moverme libremente por donde deseara y nadie lo notaria. Así, que avance hacia la casa de una de mis amigas, al llegar observe que estaba estacionado un vehículo que reconocía fácilmente, entré solo para asegurar mis sospechas y no me sorprendió ver que ella se encontraba durmiendo con aquel que algún día ocupo un lugar muy importante en mi corazón. Me sentí tentada a entrar en su mente y conducirla hacia una pesadilla que solo podía podía describir describir como como la muerte en vida, pero eso no no me me haría ningún bien a mí, y después de todo a la mañana siguiente yo no lo recordaría y ella seguiría siendo mi amiga como si nada de lo que vi hubiera pasado, de este modo comprendí porque es tan importante que aquellos que estamos conscientes de este mundo no debamos recordar nada cuando despertemos, aunque para cualquier otra persona esto solo sería un mal sueño.
Ion Skarcega
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Abandone ese lugar sin ningún tipo de resentimiento, a pesar de que las emociones y sentimientos en este mundo se podrían describir como más intensas, en mi corazón no se albergó ningún tipo de rencor, al contrario me sentía más libre que nunca, como si un velo de mis ojos hubiese sido descubierto. Avance entre las calles y avenidas, me moví por varios lugares dentro de ciudad, algunas personas dormían plácidamente, otras con insomnio, y había algunas que soñaban con miles de cosas sin concentrarse en una sola, así que entre en varios sueños, pero ninguno de ellos llamo demasiado mi atención, y al final termine sola recorriendo la ciudad caminando sin dirección, pensando en nada y sintiéndome cómoda con esta nueva vida que estaba viviendo. Poco antes del amanecer me dirigí hacia mi casa, en la afueras de la ciudad y mientras caminaba un delicado llanto me interrumpió el pensamiento, era el sollozo de un pequeño niño niño que dormía solo en una casa vacía, pregunte porque estaría solo, sin embargo el lloraba de tal manera que un sentimiento muy triste me encogió el corazón, él estaba dormido y pensé que quizás solo tenía un mal sueño pero cuando estire mi mano para tocar sus pensamientos sentí el calor de su cuerpo encendido, y me di cuenta que ese niño no estaba teniendo un mal sueño, estaba ardiendo en fiebre, sin embargo seguía dormido y solo en casa, sin nadie que lo auxiliara, en ese momento sentí una rabia que no podía controlar, quise salir corriendo hacia mi casa para despertar y venir a auxiliarlo ya que mi hogar no se encontraba demasiado lejos pero cuando estuve a punto de irme de su habitación recordé que si despertaba no iba a poder recordar nada de este pequeño, no obstante tenía que hacer algo para ayudarlo pero como iba a controlar la fiebre en mi condición actual, él ni siquiera estaba soñando, solo estaba agonizando su cuerpecito, entonces recordé una regla clave de este mundo, yo no podía recordar nada cuando despertara, pero las demás personas sí. Rápidamente busque en la casa más cercana, a la primer persona que estuviese soñando, pero al estar tan cerca de amanecer muchos adulto ya habían despertado, y solo los niños se encontraban soñando así que no tuve elección, y de inmediato entre en el sueño de una pequeña niña.
Ion Skarcega
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Los colores eran demasiado intensos dentro de su mente, su visión del mundo era muy distinta a la que tienen los adultos, para ella solo existían sus padres viviendo en una casa cerca de un lago a las orillas de una montaña, era un sueño realmente hermoso y estaba a punto de destruirlo, así que mire donde encontraba y me acerque a ella, muy rápidamente se dio cuenta de mi presencia y me saludo con ternura. — Hola cómo te llamas… — me pregunto. — Mi nombre es Samira, ¿y tú pequeña? — Yo me llamo Karen, y mi muñeca se llama Ceci. — Karen no tengo mucho tiempo pero quiero pedirte un favor, ¿crees que puedas ayudarme? — Sí, pero antes juega conmigo por favor. Hace mucho que mi mami ya no juega conmigo y la verdad me siento muy sola. — Ahora no puedo Karen, pero conozco a alguien que quizás si pueda jugar contigo. — ¿Quien? ¿dime ándale, no seas malita? — Conoces a tu vecino de enfrente un niño muy m uy pequeño. — ¡Haaa!, te refieres a Lalito —exclamo sorprendida. sorprendida. — Si. — Pero él es muy pequeño y su mama no lo deja jugar conmigo. — Karen entonces te prometo que jugare contigo mañana, pero necesito que me hagas un favor. — Está bien. — Quiero que cuando te despiertes vayas con tu mami y le digas que Lalito estaba llorando con mucha fiebre y que su mama no estaba. — Pero mi mama no me va a creer. — Karen ¿te gustan las muñecas verdad? — Si — Si tú haces esto por mi te prometo que le comprare una hermanita a Ceci, ¿no te gustaría eso? — Sí, pero prométemelo. prométemelo. — Te lo prometo Karen, pero ahora te despertare, está bien. Solo movió la cabeza de arriba abajo y Sali de su sueño para despertarla molestando sus ojos con la esencia de mi cuerpo, y al abrir los ojos ella rápidamente salió corriendo hacia la cocina donde se encontraba su mama. Ion Skarcega
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— Mama, mama, — Que pasa hija que haces despierta tan temprano. — Lalito, está llorando mama, tiene temperatura. — ¿Porque dices eso hija? solo estabas soñando. — No mama es verdad. Lalito está muy enfermito. — Como lo sabes hija. — Yo lo escuche mama por favor ve a verlo ándale — Hija es solo un sueño. — No mama, es verdad por favor vamos a verlo. — Hay Karen está bien iré a verlo, pero tu vuelve a la cama. — Volveré mama pero solo déjame ir contigo para verlo. — Está bien acompáñame. La madre de Karen avanzaba lentamente hacia Lalito y yo solo observaba esperando que aquel niño no empezara a convulsionarse, mientras sentí como mi cuerpo comenzaba a despertarse y una presión en el pecho me decía que era hora de volver, pero me rehusaba a regresar soportando ese dolor ya que no podía irme sin saber que aquel pequeño iba a ser llevado a un centro médico. El tiempo que transcurrió se me hizo eterno, la madre de Karen no encontraba la manera de ver a Lalito ya que estaba todo cerrado y desde afuera no se podía ver mucho, de pronto le dijo a su hija que volviera a la casa que solo había sido un sueño, pero la voluntad de esa pequeña era muy grande y le respondió rotundamente “ no” no” , como si tratara de una persona mayor. En ese instante ambas se percataron del llanto estremecedor de Lalito que continuaba quejándose, la madre de Karen sin pensarlo forzó la entrada principal y se dirigió hacia donde estaba el pequeño hasta que por fin pudo tenerlo entre sus brazos.
— Dios mío este niño está ardiendo en fiebre… Se dijo la madre de Karen. — Ves mama te dije que Lalito estaba malito, — Debemos llevarlo hacia un doctor, ve rápido sube al auto. — Si mama. Esa mujer salió de la casa y rápidamente corrió hacia el vehículo mientras el niño temblada de su cuerpo a causa de la alta temperatura, de mis ojos Ion Skarcega
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brotaron varias lágrimas ya que si algo le llegara a suceder a ese pequeño de algún modo jamás me lo perdonaría. Pero ya no podía resistirme más, la presión dentro de mi pecho era insoportable y lo último que observe observe al seguir el vehículo fue ver a la madre de Karen entrar a un centro médico urgentemente, y pensé debe ponerse bien. Luego solo fui absorbida porque mi cuerpo y volví a la realidad sin saber todo lo que había vivido…. Al despertar…. ¿Qué es esto? ¿Por qué tengo lágrimas en los ojos? ¿Acaso abre soñado algo? Tengo un extraño sentimiento que no sentía desde niña, ¿qué me abra sucedido mientras dormía?, lo último que recuerdo es que estaba bebiendo una copa de vino sola frente al televisor, ¿quizás estuve llorando por el de nuevo? Y no me di cuenta. Se me ha hecho tarde de nuevo, ¿no he escuchado el despertador? Quizás ya no debe funcionar correctamente, tendré que comprar uno nuevo saliendo del trabajo. Camino hacia el trabajo mi mirada va fija en el pavimento, siento mi alma vacía como si algo me hiciera falta, no puedo dejar de pensar en él, ya han pasado varias semanas desde que lo corrí de la casa y aún sigue doliéndome el corazón que es lo que me pasa, mis amigas dicen que no lo llame, que no lo busque, y yo solo pienso en lo cruel que soy …
Ion Skarcega
