Estefanía 80 ideas para besarte el cuello
Estefanía 80 ideas para besarte el cuello
J. Porcupine http://autosuficiente.tumblr.com
http://twitter.com/J_Porcupine http://facebook.com/Jersel http://facebook.com/estefania.lopez.35
2
J. Porcupine
Dedicación
Estefanía, tiene nueve letras. El 9 significa dejar lo seguro por lo incierto, sembrar silencio, encender una luz, irse y también quedarse.
Estefanía, es esa persona por la que haces eso, la persona en la que dejas huella, de la que aprendes y a la que enseñas, esa persona que aunque se vaya, o éste lejos de ti, se queda ahí contigo, la sientes ahí contigo y viceversa.
Todas estas ideas no sólo van dedicadas a Estefanía, sino también a todas aquellas personas que simbolizan todo eso.
3
Introducción
En el camino que tomo para darle la vuelta al mundo para abrazarte por la espalda, mi cabeza da vueltas y mi corazón se va afinando, se van preparando para verte. La vida se va volviendo otra cosa y los sueños se acercan cada vez más a éste mundo de ojos abiertos en el que quiero besarte como si no viviera para nada más. Luego de darle la vuelta al mundo para abrazarte por la espalda, me encantaría besarte el cuello y que lo demás se dé solo. Que sólo sea amor lo nuestro y que lo nuestro se deje llevar sólo por el amor. Porque voy a hacerte mía sin que dejes de ser tuya. Voy a darte el amor que mi corazón te pide, porque amarte es amarme y abrazarte es que me abraces. La vida es otra cosa porque te vi, y se mantiene así porque me ves también. Quererte por siempre es la idea más grande que he tenido en la vida.
4
J. Porcupine
I
Espero que te quedes conmigo. Eso es lo que más espero de ti, pues, lo que más espero del mundo es que me deje llegar a ti. De todas las distancias que podrían crearme separación de un sinfín de cosas, la más molesta e irritante es ésta que me separa de ti. Porque todo lejos de ti es extraño y horripilante. No sé por qué, pero eres tan bonita que me haces sentir que a tu lado no podrían pasarme cosas feas. Quiero anclarme a ti con un beso en el cuello, con un abrazo que te llegue por la espalda, con un baile infinito con mis manos en tus caderas y mis ojos en tus ojos.
5
II
Tengo gusto de ti. Pero no de apoderarme de ti. Eres tan bella que no puedes ser de nadie sino de ti. Por eso quiero hacerte mía sin que dejes de ser tuya. Voy amarte tanto hasta que te confundas. Hasta que seas tú la que me ames y yo el amado, y luego viceversa, y de regreso otra vez, y así. Unirnos por la lucha y el querer de unirnos, besarnos como si existiéramos para besarnos, ¿y por qué no? Conservar los privilegios de que el destino nos unió.
6
J. Porcupine
III
Te quiero tanto que te veo en otros lados. Te llevo tan dentro que cerrar los ojos es mirarte. Tanta belleza condiciona omnipresencia, supongo. Te considero inmensa, por hacerme sentir lo que una vez pensé no volver a sentir, porque me sorprendes y me haces creer en todo aquello que pensé que no. Quiero hacerte de todo sin importar que no gane nada, sin que haga falta que me vuelva tu todo, y si sí, pues genial. Adoro tu sonrisa que autoriza felicidad. Yo soy servidor de imaginación y cumplidor de promesas que desembocan en tu piel. Sentarme a tu lado me hace sentir en un trono, besarte y estar en ti es un sacramento de revolución.
7
IV
El suspiro es un preludio, un abreboca, una anticipación de invocación al deseo… Yo lo que quiero es gritar tu nombre.
8
J. Porcupine
V
En un beso te quito la pena, y en una caricia te quito el frío aunque también te quite la ropa.
9
VI
Ese brillo de tus ojos asimila a los astros. Yo quiero ser astrónomo de tu mirada, un astronauta en tu espalda y el planeta que recorras. Vamos a perder el miedo de tocarnos al tocarnos. Vamos a perder el control al besarnos sin perder el beso que nos une. Seamos la intención, el beso y el acto. Seamos el amor que nos hacemos y nos damos.
10
J. Porcupine
VII
Cuando me acuesto, todos mis pensamientos tienen la valentía de desearte aquí, de decir: ¡Nada es imposible! La mitad de los pensamientos constatan la idea de lo frágil que es una situación de querer y no poder, y la otra mitad con la esperanza casi agónica de tenerte aquí, de estudiarte, de conocerte y saberte.
11
VIII
Verte me remueve el corazón y me incentiva el gusto a quererte besar, a probarte y luego decirte que eres lo más dulce del mundo. Tocarte es lo más ideal de todas las distancias.
12
J. Porcupine
IX
El aire de la noche es nuestro. Yo suspiro y tú te sonrojas. Saber que soy capaz de sacarte una sonrisa me hace el más talentoso del mundo. ¿Pero sabes lo que es realmente un talento? Conseguir que te quedes conmigo.
13
X
Me atrae ver el origen de tus días. Dormiré contigo sólo para despertar contigo. Para conocer la manera en que abres los ojos, la manera en que te estiras, ese bostezo que quizá me saque una sonrisa por lo tierna que te debes ver… Dormiré contigo sólo para despertar contigo. Siempre.
14
J. Porcupine
XI
Quiero conocer el goce de una vida a tu lado. Besarte, besarte sin cesar. Tomarte de la mano y sentirme fuerte.
15
XII
El encanto de la vida se me confunde con el encanto de tus fotos, de tus ojos, de tu sonrisa y de tu existencia toda.
16
J. Porcupine
XIII
El sueño es una aventura. Quererte y llegar a ti es una aventura, pero no te considero una aventura.
17
XIV
Muchos caminos, muchas personas y muchas maneras. He querido a mucha gente, incluso a la que no me ha querido, y a pesar de mis rencores les mantengo cariño… Aunque prefiera saludar de lejos. A ti, no te quisiera de lejos, pues representas todo lo diferente a la desgracia, a la traición. Te soy fiel porque me nace serlo, porque siento que no hace falta más. Cuando digo que me gustas soy el más honesto del mundo.
18
J. Porcupine
XV
¿Cuándo estarás aquí? Me siento como un navío, balanceándome sobre aguas tranquilas, convirtiéndome en objeto de nostalgia, rodeado de silencio y de un paisaje que miro y miro pero no alcanzo. ¿Cuándo empezaré a sentir que te acercas? ¿Cuándo empezaré a sentir que me acerco? Paciencia. Para llegar al amor hay que tener paciencia.
19
XVI
Lo nuestro es muy novelesco, y eso me parece maravilloso.
20
J. Porcupine
XVII
¡Que no se me acerque nadie que no crea en un ‘sí’! ¡Adiós al pesimismo dije ya! ¿Locura? Sí, llámalo como quieras. Pero para nosotros uno más uno no será igual a tres. ¡Nunca!
21
XVIII
A veces es molesto estar disponible para ti y que te encuentres ocupada. Pero me tranquilizo, porque por ti la paciencia es amor. Y el amor es sensible a la rutina. Lo inesperado y la sorpresa son una parte esencial de la belleza, del amor, de todo eso bonito que tiene tu manera de ser. Esperarte es un ejemplo sólido de que me gustas.
22
J. Porcupine
XIX
La manera que tienes de sonreír representa la felicidad. Si me preguntan cuál es el camino a la felicidad daré la dirección de tu casa.
23
XX
Es algo ardiente, es una llama que baila rodeada de frágiles brisas de tristeza y alegría. Es una llama que sobrevive a muchas cosas, y con la que bailaría las vidas que Dios me dé. Es lo más interesante que me ha presentado el mundo. Es tu belleza.
24
J. Porcupine
XXI
Tu rostro me hace soñar. Me hace arder, hace que desee vivir mucho y que todo ese mucho sea contigo.
25
XXII
Mi sacrificio es símbolo del intercambio a quererte feliz. Yo sé que quererte es quererme, porque al quererte de verdad tú lo sentirás… Tu alma lo sentirá. Y me vas a querer.
26
J. Porcupine
XXIII
Cuando me comparto contigo, el tiempo y el espacio son más profundos, mi sentir de existencia se hace incluso inmensamente grande. ¡Porque besarnos es un acto de magia! ¿Sino cómo entonces se puede hacer sentir mariposas en la panza? ¿Sino entonces cómo siento que vuelo si mis pies no dejan de tocar el suelo? Quizás porque el cielo eres tú y abrazarte es como abrazar a las nubes.
27
XXIV
Se me perfecciona la salud cuando estás ahí conmigo. Y siempre que estás conmigo es un momento oportuno: eres condición de oportunidad.
28
J. Porcupine
XXV
Lo precioso y profundo de la vida se me reveló en el momento que sentí sorpresa al saber que alguien como tú existía. Te convertiste en mi símbolo de vida, en mi razón de muchas cosas.
29
XXVI
Pienso mucho todo lo que pasaba antes de saber de ti, y pienso que aunque hubieran pasado unos cuantos malos momentos, resultaron ser la tormenta que anticipa a la calma de aceptar la pérdida. Y así fue, acepté la pérdida, recogí lo poco que me quedaba y te vi, y de repente sentí que el sol me abrazaba y que lo que los pájaros cantaban era para mí y para ti. Quererte amar me llevo a amarme, de quererme a quererte.
30
J. Porcupine
XXVII
El deseo es una fuerza, y te deseo con todas mis fuerzas. En mis manos existe una recurrencia eléctrica de recorrerte. La distancia está ahí, no es gran cosa… ¡El que se queja de la distancia es porque no quiere recorrerla! Me encantaría llegar y abrazarte por la espalda, besarte el cuello y ver como te pones… Ver como te pones como si fueses sol.
31
XXVIII
Las otras pieles no me causan placer. Yo no me siento cazador pero me sentiré vencedor si me besas y luego no te quieres ir.
32
J. Porcupine
XXIX
Mi verdadero talento es la sensibilidad. Sólo hay un lugar en el que querría demostrar toda mi sensibilidad, y es en ti. Y en todo lo que tenga que ver contigo.
33
XXX
Yo no imagino a más nadie a mi lado que no seas tú. No me imagino otra madre de mis hijas. No me imagino otra familia aparte de la mía que no sea la tuya y la que formemos nosotros. Mi estilo de vida es la belleza de admirarte, de llenarte de caricias y poesía.
34
J. Porcupine
XXXI
Quiero construir la gloria de tomarte de la mano y que nos declaren juntos por siempre. Por eso te quiero y no me da pena. Por eso te digo que te quiero besar y no me da pena. Porque no me da pena ni me da miedo lo que pueda pasar en el momento ni lo que pueda pasar después. El mañana no me interesa siempre y cuando ya sepa que vas a estar ahí conmigo.
35
XXXII
Una gran cantidad de pequeños goces constituyen y conforman la felicidad. Yo gozo en cada beso que me das así que no me dejes de besar. En tus labios hay algo que me sabe a eternidad, a dulce de oportunidad. Mi felicidad es conformada por tu presencia.
36
J. Porcupine
XXXIII
El brillo de tus ojos tiene un tono eterno, esa manera en que miras a la cámara antes de tomarte una foto me hace pensar que las flechas de cupido son en realidad tu mirada. Y que existes para hacerme sentir así, y que yo existo para no dejarte ir, para estar contigo.
37
XXXIV
Me excitas la curiosidad, no hay nada más tonto que no elegirte para bailar. Eres el origen de mis inspiraciones, de mis suspiros, y fuente de esperanza de mis superaciones a los contratiempos. Por ti creo en el progreso. De tu mano no me suelto, a menos que vaya a caer, pues no querré que caigas tú.
38
J. Porcupine
XXXV
Caridad, libertad y poesía. Humanidad y belleza. Tiempo, alegría y sinceridad. Me enamora todo eso. Y tú eres todo eso.
39
XXXVI
Mi entrega hacia ti tiene su origen en el centro del corazón, esa parte de la que surge el latido, la vida, mi sentir. Eres mi cómplice. Porque en el fondo la musa es el poeta, tú eres la causa y también eres el fin que justifica la causa. Eres tan bonita que no voy a dejar de decírtelo. Simplemente, lo eres todo.
40
J. Porcupine
XXXVII
Todo lo que no seas tú y que no tenga que ver contigo, para mí, es nacido para establos. Me encantaría que mis caballos y los tuyos se juntaran, que nuestras riendas sean las mismas. Me encantaría que nos besáramos y nos siguieran y no nos alcanzaran. Estar contigo me hace sentir invencible.
41
XXXVIII
Lo que más me interesa del mundo eres tú. Es tan fascinante pensar que de tantas personas que existen me fije en ti. Es tan increíble pensar que de tantas máscaras que existen, tu rostro se mantiene ahí listo para ser visto siempre. Es un compendio divino ésta adoración, supongo. No eres parte de mí pero te siento parte de mí. Y me fascina, me emociona y por eso me gustas.
42
J. Porcupine
XXXIX
El tiempo sin ti está lleno de razones para estar contigo. El tiempo contigo está lleno de razones para continuar.
43
XL
Me siento atraído por tu sonrisa. Quiero amanecer contigo. Ver amaneceres contigo, todos los que faltan de mi vida. A tu lado soy más amor y alegría que persona, así que déjame quedarme.
44
J. Porcupine
XLI
Nada hay malo que me provoques, porque me haces sentir amor. El amor que siento es el amor que me eres. Y el amor que te quiero hacer es para retribuirte, para llenarte de lo que siento. Porque el amor es eso que se siente cuando te tomo de la mano y el corazón late suavemente afinado y feliz.
45
XLII
No sé cuántas caricias caben en tu cuerpo. Ni cuántos besos mide tu cuello ni cuantas vidas se pueden usar para decirte que me encantas. Y por eso quiero saberlo, quiero entender la complejidad de tu existencia, esa poesía universal que tiene tu lengua. Quiero poner mi cabeza en tu pecho, mis manos en tus caderas y sentirme astronauta.
46
J. Porcupine
XLIII
Mi corazón funciona para ti. Después de ser engañado. Después de estar roto. Funciona… Para ti.
47
XLIV
Quiero pasar de ver la vida pasar contigo a pasar la vida contigo. Porque un día en la vida es un día contigo. Y contigo quiero días que sean todos los días.
48
J. Porcupine
XLV
Tenerte en mente me mantiene despierto, vivo, a pesar de cualquier cosa que intente desanimarme. No necesito milagros estando contigo: Tú eres el milagro. Eres (mi) solución a todo problema. (Y lo increíble de todo esto es que no dependo de ti, aunque parece que sí.)
49
XLVI
Yo no sé que es olvidarte ni me lo planteo. Sería lo más absurdo del mundo. Pues contigo aprendí nuevas formas de suspirar. Aprendí a perder la edad. Quiero encontrarte y aunque sea peligroso, unirme a ti. Y nunca perder la adherencia.
50
J. Porcupine
XLVII
No sé a donde mirar que no sea a tus ojos. Me fastidia éste mundo lejos de ti. La soledad no tiene sentido si te pienso. Quiero dedicarme a hacerte el amor, convertirlo en mi profesión. Quiero que hacerte sonreír sea la única rutina de mi vida.
51
XLVIII
Lo nuestro es eterno hasta que se demuestre lo contrario. Cuando te sientas mal voy a estar a tu lado. Eres tan bonita que no puedes darte por vencida. Pues todo lo bonito es invencible e inevitable.
52
J. Porcupine
XLXIX
Estoy lejos, sí, pero eso no implica que pueda dedicarte mi tiempo en decirte unas cuantas verdades. Mira que decirte que eres bonita es inevitable, al igual que es inevitable querer compartirte cosas. Eres tan bonita que decirte cosas bonitas es completamente merecido.
53
L
Eres tan bonita que mereces que me arriesgue. Porque eres tan bonita que vale la pena cruzar fronteras para acercarse, atravesar mares para tomarte de la mano y darle la vuelta al mundo para abrazarte por la espalda. Y hacerte saber todas mis ideas besándote el cuello.
54
J. Porcupine
LI
Eres tan bonita que hay que quererte. ¡Me interesa por completo hacerte feliz! Así que sonríe, sonríe que esa es la mejor manera de que seas bonita. ¡El amor desinteresado existe!
55
LII
Te mereces que todos los días de tu vida sean bonitos. Yo voy a darlo todo porque sea así. Te voy a dar el abrazo más cerca que hayas tenido en tu vida. Y te haré sentir amada porque te lo mereces. Voy a darte los días más bonitos de tu vida.
56
J. Porcupine
LIII
No estés mal, que me preocupa. Porque eres importante. Y no puedo quedarme como si nada si sé que estás mal. Tengo que hacer algo para animarte, aunque la distancia me juegue la contra, siempre. Pronto vendrá algo mejor, y mientras, sé que es duro. Pero créeme, parece que no, pero al final siempre llega algo mejor. Aquí estoy yo para ti. Yo desde aquí, siendo lo que soy, sé que eres capaz, de eso y mucho, de seguir, de continuar. Eres tan bonita que no te pueden vencer. Sólo tienes que reconocerlo. Eres tan bonita que te quiero y quiero que seas mejor. Que te vaya mejor. Que sonrías siempre. Que la vida es ahora, y aunque yo ahora no esté a tu lado quiero que sepas lo que siento, lo que pienso. Y que si pudiera te abrazaría y te diría lo importante que eres. Tal cual lo hago ahora. ¡Eres poesía!
57
LIV
Quédate, me harás feliz si lo haces. Y yo te haré feliz si me dejas. Porque me gustas, y lo daré todo porque así sea. Me haría sentir talentoso poder conseguir sacarte una sonrisa siempre. Quiero darte un feliz resto de tu vida.
58
J. Porcupine
LV
Me gustas. Y voy a demostrártelo a pesar de cualquier cosa. Eres poesía, ¡eres mi amor! Te declaro el amor de mi vida y lucharé por ti: Eres mi sueño a cumplir. Mi poema a recitar. La vida que quiero tener. La mujer que siempre voy a amar.
59
LVI
Voy en serio, ¡mi corazón por ti late en serio! Por eso quiero tenerte, decírtelo todo, que no sea sólo letras que leas. Sino una voz que te lo diga y un cuerpo que te lo haga sentir real. Voy a amarte tanto hasta que nuestro amor se haga leyenda.
60
J. Porcupine
LVII
¡Que el mundo se entere de que todo es posible! ¡Que lo que siento es la verdad más bonita que conozco! Y la verdad es que te amo.
61
LVIII
Eres poesía, toda tú eres poesía. La poesía que tengo, la tengo porque he sabido limar su mirada. De allí es que viene todo. Y es que el poeta no se preocupa por ser musa, aunque la musa termine siendo el poeta. Mi poesía es la poesía de ti.
62
J. Porcupine
LIX
Acariciarte y que se me pierdan las manos en tu piel. Que me pierda yo también, entero o a pedazos. Y luego reencontrarme en ti: Bendecido y consagrado por conocerte.
63
LX
Te amo, y aunque a veces no te entiendo, me entrego. Porque lo que me haces sentir es sublime. Me haces sentir sublime, invencible, en el cielo. La vida contigo es la vida de un Dios.
64
J. Porcupine
LXI
Eres memorable, y no me explico… Como alguien no quisiera estar contigo. Tengo que decírtelo, eres tan bonita que hay que decírtelo. Agradezco mucho encontrarte, no sabes cuántas cosas quiero compartirte. Todo se ve bonito estando de tu lado: es un placer conocerte.
65
LXII
Te pienso, trato de entenderlo. Te pienso, y vuelvo a tratar. Me sonrojo: Entiendo.
66
J. Porcupine
LXIII
¡El amor no existe si no existes! ¡Héroe es quien logra tenerte a su lado! ¡La lluvia sólo existe para besarnos debajo de ella!
67
LXIV
Amo tu existencia porque hace que exista el amor hacia ti. Es la paradoja más bonita.
68
J. Porcupine
LXV
Sólo yo puedo vivir mi vida. Sólo tú puedes vivir tu vida. Vamos a crear vida. Y vivirla juntos. Que sea nuestra vida.
69
LXVI
Tus besos me ofrecen calma absoluta. Tu mirada me engancha. La vida es eso que se siente cuando me miras y siento que levito. El tiempo es eso que se detiene cuando me tomas de la mano y dices: quédate.
70
J. Porcupine
LXVII
Eres tan bonita que no puedo engañarte.
71
LXVIII
Nada como tu cabello liso para sentir que tengo manos. Nada como tu sonrisa para agradecerle a Dios mi visión. Nada como tu existencia para agradecer la mía. Eres el mundo diciéndome que la belleza es perfectamente representable en un cuerpo… En tu cuerpo.
72
J. Porcupine
LXIX
Yo he estado en otros cuerpos, y he deseado muchos. Pero nunca me había sentido tan pequeño ante tan bonitos ojos, y nunca había querido hacer tanto el amor a una piel como la tuya. Contigo he redescubierto el deseo.
73
LXX
El mundo conspira a favor de quererte. ¡Tengo un corazón y puedo usarlo cuando quiera! Y porque quiero… Te tengo ahí.
74
J. Porcupine
LXXI
Al sacarte una sonrisa me siento digno de existir. Yo para lo único que quiero crecer es para alcanzarte. Yo para lo único que quiero llegar lejos es para tenerte cerca.
75
LXXII
No quiero deberte nada y quiero dártelo todo. Tu manera de ser, esa alegría, esa sonrisa y esos grandes ojos, han hecho que reconsidere vivir. No hay nuevas maneras de respirar sin que pases por mi mente.
76
J. Porcupine
LXXIII
Cada vez que sueño contigo busco con cuidado la mejor manera de no despertar. Y no pretendo ser convincente, sino ser útil. Si digo lo que siento es porque vale. Si despierto quiero volverte un sueño cumplido.
77
LXXIV
Cualquier lugar que no sea el de tu al lado... me provoca vértigo. Los momentos contigo me hacen querer otros iguales o mejores. Por eso te entrego pedazos de vida en los besos. Porque me encantan los pedazos de estrellas que tienes en los ojos. Y te quiero entera en mi cama.
78
J. Porcupine
LXXV
Estas manos desesperadas si no te acarician no se calman. Te quiero conmigo. Para llenarme de vida y verter mi vida sobre ti. Y crear vida, crear amor. Hacernos y deshacernos en el amor que nos hagamos. Crearnos nuevamente para tenernos siempre.
79
LXXVI
No hace falta que seas perfecta, querida, yo tampoco lo soy. No tengo nada que agregarte ni nada que quitarte. Eres tan bella que no hay necesidad de que cambies. Yo te voy a amar como seas.
80
J. Porcupine
LXXVII
Sé todo esto no con la cabeza, sino con el corazón. Con el mismo corazón en donde te tengo y con el mismo corazón que está contigo. No me importa darlo todo y quedarme sin nada, si es por ti. Pues no quiero nada para mí que no sea para ti.
81
LXXVIII
Sería perfecto juntarnos como se juntan dos cuerpos para crear poesía y vida. Me encantaría excitarte la vida. Emocionarte las manos. Besarte la boca. Infinitamente.
82
J. Porcupine
LXXIX
Eres tan bonita que confundo la vida y la poesía con tu existencia. A lo mejor eres ambas cosas. A lo mejor eres todo y más.
83
LXXX
Todo es posible contigo, aunque suene peligroso afirmarlo porque suena desmedido. Pero, de eso se trata enamorarse, ¿digo, no? Entregarse, aunque sea posible que fracase… Veo pasar su idea de amor a novios, y pienso, que podríamos tener algo mejor que eso. Hacerles ver a otros como creemos en nosotros. Y que podemos ser duraderos y verdaderos… (Al mismo tiempo). Y puede que sea difícil, yo no me rindo tan fácil. Aunque es normal que a veces me sienta frágil. En serio, y creo que soy un caballero… Cuando digo que te quiero con un hecho bien demostrado. ¿A cuántos latidos se dejan de sentir los ‘peros’? Ojalá mis hijas hereden tu sonrisa, y espero: Que lo nuestro sea eterno mientras estemos dispuestos… ¿Qué tal si empezamos con un beso?
84
J. Porcupine
J. Porcupine
Luego de más de 10.000 lecturas, sale a la luz algo nuevo del autor de “La vuelta al mundo para abrazarte por la espalda”, presenta de antemano a la secuela de dicho libro “Te seguiré abrazando”, una colección de 80 ideas dedicadas a una persona especial que también puede ser la persona especial de cualquier otro. “Quizás no te conozca, ni me conozcas, pero podemos conocernos o desconocernos más si quieres. Eso sí, yo no te mentiría si no te conociera, porque contigo puedo ser yo mismo y tú ni siquiera lo sabrías.”
85
