Cosme Iván Carreto Vázquez – S17000216 S17000216 Especialización en Administración del Comercio Exterior 6/Sep/2017 El tipo de cambio y su efecto en el comercio exterior en México. Se debe entender al tipo de cambio como el precio más importante para una economía abierta al exterior. Para definirlo decimos que el tipo de cambio es el valor o precio que tiene la moneda de un país en términos de otra. Esta variable económica tiene un gran impacto en las operaciones de comercio exterior, entendiendo éstas como la exportación y la importación de bienes y servicios, de cada uno de los países que cuentan con algún tipo de apertura comercial. Dependiendo de si un país está orientado más a la importación (compra más de lo que vende) o está orientado más hacia su sector exportador (vende más de lo que compra) su balanza comercial estará determinada por el tipo de cambio de su moneda frente a otras y arrojará como resultado que ésta sea deficitaria o superavitaria. La estabilidad financiera y económica de cada país también se ve influenciada por el tipo de cambio, es decir, por la fortaleza o debilidad que tenga su moneda respecto a otras y esto a su vez determinará qué sector será el que más se desarrolle para cumplir con sus objetivos de su política económica.
Conceptos básicos El comercio exterior es el intercambio comercial de bienes y servicios entre los residentes que habitan en diferentes países. Este intercambio es posible porque ningún país es totalmente autosuficiente y por lo tanto requiere de los bienes y/o servicios que otros países producen de forma excedente para así poder satisfacer su demanda interna mediante el consumo, o bien para utilizarlo en su propia producción. Las dos actividades clave del comercio exterior son la importación y la exportación. Entendiendo la primera como el conjunto de mercancías y servicios que un país compra a otros. La exportación es el conjunto de mercancías y servicios que un país vende a otros. Para llevarla a cabo estos actos existe todo un procedimiento que se establece y regula en las leyes de cada país. La balanza comercial es el registro del total de compras y ventas de mercancías que un país tiene con el exterior en un período determinado. Esta a su vez forma parte de la balanza de pagos. Será superavitaria cuando lo que se vende es mayor a lo que se compra y por el contario, será deficitaria cuando se compra más de lo que se vende. Las reservas internacionales son los recursos financieros en divisas con los cuales cuenta un país para garantizar los pagos de los bienes que importa y el servicio de la deuda, así como para estabilizar la moneda. Están en propiedad del banco central y deben ser fácilmente convertidos en medios de pago. Otra forma de definirlas es como las divisas y el oro que son propiedad del Banco Central.
El régimen cambiario se pude entender como el modo en que país fija o determina el valor del tipo de cambio de su moneda respecto a otras. México ha tenido varios de estos regímenes a lo largo de su historia, comenzando por el régimen de paridad fijaen el que el banco Central fijó el valor que tendría el tipo de cambio. El sistema de flotación controlada el papel del Banco Central sólo era el de evitar fluctuaciones bruscas, sin intervenir directamente en el tipo de cambio. El sistema cambiario múltiple consistía en un tipo de cambio dual: general y preferencial y el Banco Central determinaba a qué actividades se aplicaría cada uno. El control generalizado de cambios se instauran dos tipos de cambio: preferencial y ordinario y también serían fijados por el Banco de México. Durante el control de cambios estaban funcionando en México dos mercados de divisas: controlado y libre. El tipo de cambio para estos mercados era fijado por el Banco de México y además existía un tipo de cambio especial para el pago de obligaciones en moneda extranjera contraídas con anterioridad a este régimen. La flotación regulada introdujo el tipo de cambio de equilibro que sustituyó al tipo de cambio controlado y tenía como objetivo adecuar de manera flexible y gradual el tipo de cambio a las situaciones actuales. El régimen de bandas cambiarias con desliz controlado unificó a los dos mercados anteriores con el objetivo de impulsar el sector exportador y maquilador. Este esquema consistía en dejar flotar libremente el tipo de cambio dentro de una banda que se ensanchaba diariamente, teniendo un piso fijo y un techo con ajustes diariamente a la alza de manera uniforme. El régimen que actualmente tiene nuestro país es el de libre flotación en el cual el tipo de cambio se fija en el mercado a través de las fuerzas de la oferta y la demanda, sin intervención alguna de autoridades. También opera en gran parte de los mercados de divisas internacionales. Haciendo referencia al aumento o disminución del valor de una moneda con respecto a otra surgen otros términos. Depreciación (disminución del valor) y apreciación (aumento del valor) se utilizan en regímenes de flotación libre y son fijados por oferta y demanda. Devaluación (disminución) y revalorización (aumento) se utilizan en regímenes de tipo de cambio fijo, establecido por las autoridades.
Mecanismos de flujo de divisas Es de vital importancia conocer y tomar en cuenta a los diferentes mecanismos por los cuales fluyen las divisas entre los países y que tienen consecuencia directa en el establecimiento del tipo de cambio.
El comercio internacional permite la compra/venta de divisas a través de los procesos de exportación e importación. Cuando haya más importaciones, se generará una mayor demanda divisa extranjera con lo que el tipo de cambio aumentará. Por el contrario, si existen más exportaciones, la demanda de divisa extranjera bajará y habrá una disminución en el tipo de cambio. En los mercados financieros también existe un flujo de divisas mediante la compra/venta de activos financieros. Y el procedimiento de apreciación/depreciación de la moneda nacional es ligeramente parecido al del comercio internacional.
La inversión extranjera directa permite la entrada de capitales extranjeros, generando una mayor demanda de pesos, con lo cual el peso se aprecia. La desinversión causará salida de capitales vía dólares ocasionando la depreciación del peso Las remesas representan una de las fuentes principales de ingresos de divisas y de la misma forma que los anteriores mecanismos, a mayor entrada de remesas, se genera una apreciación del tipo de cambio y una disminución de los flujos generará una depreciación. Apreciación del peso frente al dólar (peso fuerte) Cuando el peso está fuerte respecto al dólar (se necesitan menos pesos para adquirir dólares) es beneficioso para el sector importador, ya que los insumos para la producción salen más baratos, consiguiendo a su vez que la inflación sea menor y bajen las tasas de interés, incentivando el consumo y la inversión en la economía nacional. La balanza comercial sería deficitaria, representando que se compra más al exterior de lo que se vende. También existe un efecto positivo en las finanzas corporativas, bursátiles y personales. Sin duda, el sector perdedor de mantener un peso fuerte es el exportador, ya que los precios de los bienes o servicios que se producen en México en términos de dólares no son competitivos.
Depreciación del peso frente al dólar (peso débil) Al sector exportador le conviene que haya un peso débil, ya que esto aumentará sus ventas y permitirá el desarrollo y crecimiento del país, teniendo efectos en las finanzas públicas, generación de empleos y en los mercados financieros accionarios. La balanza comercial sería superavitaria. El sector de la importación resultaría dañado al encarecerse el precio de los insumos que requiere, haciendo que se incrementen los costos y gastos de las empresas que importen. Las empresas trasladarían dichos costos al precio final de su producto y el consumidor se vería afectado por esta subida. Como hemos visto, ambos escenarios presentan pros y contras y cada país determina en última instancia a qué sector le dará mayor importancia de acuerdo a sus necesidades. La controversia entre mantener un peso débil o fuerte ha constituido un reto para el manejo de la economía en cada una de las naciones, sobre todo aquellas que manejan un tipo de cambio de flotación libre.