REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA UNIVERSIDAD “YACAMBÚ” FACULTAD DE HUMANIDADES CABUDARE – EDO. LARA
DEONTOLOGÍA, LA MORAL, LA ÉTICA, PRINCIPIOS FILOSÓFICOS DE LA ÉTICA Y FUNDAMENTOS DEONTOLÓGICOS
AUTORA: Ledezma Luisailis C.I.: V-21.144.750 Exp.: HPS-102-00184
Cabudare, Junio de 2016
La deontología, o teoría deontológica se puede considerar como una teoría ética que se ocupa de regular los deberes, traduciéndolos en preceptos, normas morales y reglas de conducta, dejando fuera de su ámbito específico de interés otros aspectos de la moral. Al respecto, Bentham (2008), la define como la rama del arte y de la ciencia cuyo objeto consiste en hacer en cada ocasión lo que es recto y apropiado. Es decir, hace referencia a la rama de la ética cuyo objeto de estudio son los fundamentos del deber y las normas morales. En cuanto a la deontología profesional, se puede decir que se refiere a un conjunto ordenado de deberes y obligaciones morales que tienen los profesionales de una determinada materia. Esta es conocida también bajo el nombre de "teoría del deber" y, al lado de la axiología, es una de las dos ramas principales de la ética normativa. De lo anterior, surge la necesidad de definir y entender la concepción de la ética y de la moral, encontrándose que ambos términos proceden del griego: êthos que significa carácter, y otro del latín mos−moris que significa costumbre. Ambos tienen la misma raíz semántica y por tanto la misma significación original. Por ello Ética y Moral, se identifican y se definen como la "ciencia de las costumbres". Sin embargo, con el tiempo ambos vocablos han evolucionado hacia significaciones distintas. Por una parte, la moral hace referencia a todas aquellas normas de conducta que son impuestas por la sociedad, son propias y se transmiten de generación en generación, evolucionan a lo largo del tiempo y poseen fuertes diferencias con respecto a las normas de otra sociedad y de otra época histórica. El fin último que persiguen estas reglas morales es orientar la conducta de los integrantes de esa sociedad, es decir, nace en el seno de una sociedad y por tanto, ejerce una influencia muy poderosa en la conducta de cada uno de sus integrantes. Por otro lado, la ética como hecho real que se da en la mentalidad de algunas personas, constituyen un conjunto de normas, principios y razones que uno o varios sujetos han realizado y establecido como una línea, directriz o dirección de su propia conducta. Es decir, surge en la interioridad de una persona, como
resultado de su propia reflexión y su propia elección, y puede coincidir o no con la moral recibida. Asimismo, al estudiar los fundamentos filosóficos de la ética como disciplina filosófica que estudia el comportamiento moral del hombre en sociedad, se desprende que está como ciencia filosófica, encuentra apoyo en otras ciencias auxiliares, especialmente en las ciencias humanas, ciencias sociales o de la cultura. Considerando que la ética es el estudio de la moral, los principios éticos y fundamentos del razonamiento moral, sus principios se desglosan de la siguiente manera: La inmoralidad: No podría existir el bien, la moral y la ética si no existe lo malo. La cultura: el fin de la moral es la educación del hombre. La necesidad de Moralización: Sucede cuando una o varias personas, entran en conocimiento o necesidad de que lo malo sea evitado y superado. El principio de solidaridad, libertad y justicia: Define el derecho de toda persona a no ser discriminada por consideraciones biológicas, tales como raza, sexo, edad, situación de salud, etc. El principio de dignidad, autonomía e integridad: Todo ello en conjunto, define el derecho de toda persona a no ser discriminada y poder elegir sus consideraciones culturales, ideológicas, políticas, sociales o económicas. Por último, se estudia el fundamento deontológico de la ética, como la fundamentación de la acción moral en el deber, es decir, es moralmente buena una acción efectuada como forma de cumplir el deber ser. Pueden fundamentarse para ello normas y códigos exigibles a los miembros de una comunidad o gremio, y exige actuaciones o participaciones entre la moral y el ejercicio de sus conocimientos, generando esto, como toda actividad humana, la posibilidad de acarrear gratificaciones o responsabilidades, bien sean materiales o inmateriales.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Bentham, J. “Los principios de la moral y la legislación”. Buenos Aires: Claridad. (2008) Lagasca, C. “Deontología Profesional: Los Códigos Deontológicos”. [En línea]. Madrid. (2009). [Fecha de Consulta: 02 Junio 2016]. Disponible en: