"Naná"
Síntesis
Ambientación
"Naná" cobra vida en la desordenada y ruidosa París de fines del Segundo Imperio, y aunque se desarrolla principalmente en la ciudad, durante algunos capítulos del inicio muestra escenas del interior de Francia. A las fiestas de Versalles del antiguo régimen, arrollado por la Revolución, y a los desfiles militares del Primer Imperio suceden las fiestas del derroche burgués. El oropel de los patios de butacas y los palcos de los teatros de vodevil, el mundo frívolo de las fiestas, la ópera y el teatro, las excursiones campestres y las carreras de caballos. Ese es el reino que Naná domina.
Zola describe con detalle la vida aristócrata francesa y la atmósfera política que vivía el segundo régimen, mientras que Europa entraba a un nuevo siglo. Hace especial hincapié en la vida de excesos y vicios de la alta sociedad, sus conductas inmorales, promiscuas, pecaminosas y negligentes. Así como Tolstoi con "Anna Karennina" nos introduce a la escandalosa vida burgués de la Rusia en los años de la decayente monarquía, Zola nos inunda con imágenes realistas del decayente Segundo Imperio y la vida revoltosa de la aristocracia parisina.
Personajes Principales:
Naná. Anna Coupeau (Protagonista)
D. Física: alta, esbelta, rubia, de buen cuerpo, joven, de piel blanca
D. psicológica: altanera, orgullosa, manipuladora
Rol: Actriz, prostituta, y caza fortunas irresistible por quien todo el mundo siente deseo o envidia
Clase social: baja, y va poco a poco escalando la pirámide social.
Edad: 22 años
Conde Muffat de Beuville
D. física: canoso, alto, delgado, de grande frente
D. Psicológica: calculador, obsesivo, depresivo
Rol: protector de una mujer que lo maltrata y no lo puede entender
Clase social: alta, pertenece a la corte real, sin embargo es hundido en las deudas por culpa de Naná.
Edad: 45 años
Jorge Hugon. (Personaje secundario)
D. física: delgado, rubio, de ojos inocentes, de cabello rizado, joven
D. psicológica: inocente, amable, enamoradizo, y romántico
Rol: Se enamora de Naná durante la estancia de esta en el campo, y comparten una confusa relación entre amantes y madre e hijo
Clase social: alta, hijo de la viuda Sra. Hugón
Edad: 18 años
Secundarios:
Condesa Sabine de Beuville Esposa del conde Muffat, personalidad respetada hasta que el conde se lía con Naná, en su abandono y desconsuelo, le es infiel con Daguenet.
Monsieur Steiner Banquero alemán-judío que se dedica a derrochar su fortuna en las actrices de las cuales se infatúa, siendo Naná una de ellas.
Monsieur Léon Fauchery Periodista reconocido que escribe reseñas sobre las participaciones teatrales de Naná.
Hector de la Faloise Primo iluso de Faucherie que ve como glamoroso y en boga ser arruinado por Naná.
Madame Hugon Amiga de la Condesa Sabine, y madre de Jorge y Philippe Hugón, ambos amantes de Naná, y que sufre las penas que sus hijos pasan a costa de sus infatuaciones ciegas con Naná.
Jorge Hugon (Zizi) Hijo menor de la sra. Hugón, y amante de Naná por una temporada, llega a proponerle matrimonio pero al ser rechazado se apuñala con un par de tijeras.
Philippe Hugon Hijo mayor de la sra. Hugón que pasa a ser otro de los amantes de Naná, y en su amor obsesivo roba a su destacamento militar para poder pagar las frivolidades de Naná. Su propuesta de matrimonio también es rechazada, y va a para a la cárcel luego de robar.
Conde Xavier de Vandeuvres Caballero de alta sociedad que queda igualmente arruinado por Naná, y que la induce a las carreras de caballos. Termina suicidándose junto con sus caballos en un incendio.
Marqués de Chouard Suegro de Muffat, conocido entre las actrices de Variedades.
Fontan Actor recurrente del Variedades, y de quien Naná se enamora incluso a pesar de ser abusada físicamente por este. Además, es eel único a quien Naná no logra dominar.
Zoé Fiel criada de Naná, que evita que los amantes de Naná tenga encuentros dramáticos dentro de la casa de esta, termina por robarle a Naná.
Paul Daguenet Uno de los primeros amantes de Naná. Termina casándose con una de las hijas del conde Muffat.
Estelle Hija del conde Muffat, y luego esposa de Daguenet.
Rose Mignon Actriz del Variedades, suele liarse con los mismo hombres que Naná, pero sin éxito.
Monsieur Auguste Mignon Esposo de Rose Mignon, y que controla el dinero que hace con los hombres.
Satin Prostituta, amiga de Naná, y luego su amante.
Luisito Hijo enfermizo de Naná, de padre desconocido.
Bordenave Productor del Variedades.
Labordette Personaje hábil de la discreción y la diplomacia, suele arreglar asuntos entre los otros personajes.
Madame Maloir Amiga de Naná que la Consuela en sus infortunios
Madame Lerat Tía de Naná que cuida de su hijo
El Prícipe Un príncipe escoses, ingles atraído por Naná y que pasa a ser otro de sus amantes.
De Foucarmont Oficial de la marina, arruinado igualmente por Naná, que termina partiendo de tierra firme sin un solo franco.
La Belleza Corrupta de Naná
"La veía en el espejo, con sus hombros redondos y sus senos ahogados en una sombra rosa. Y no podía, a pesar de sus esfuerzos, apartar la vista de aquel rostro, cuyo ojo cerrado hacía tan provocador, lleno de hoyuelos, como rebosante de deseos. Cuando Naná cerró el ojo derecho y se pasó el pincel, él comprendió que era su esclavo"- Capitulo V
Naná recuerda mucho al prototipo de las modelos de los cuadros impresionistas, voluminosas, de largos cabellos, grandes muslos, y níveas pieles. Precisamente así es como Zola describe a Naná. La belleza de Naná es tal que provoca los actos más atroces entre los hombres, desde la lujuria, el adulterio, el hurto, la traición, hasta el suicidio. Pero, no sólo eso, su propia belleza la convierte en una ególatra narcisista, obsesionada con su reflejo. Sin embargo, es algo comprensible, al ser huérfana y pobre, sin ninguna inteligencia considerable ni talento fuera de la cama y el derroche excesivo, a Anna Coupeau, como realmente se llama, no le queda más que ensalzar y explotar su físico; centrando así todas sus energías en resaltar su belleza física, rodeándose de los objetos más estrambóticos y siendo consumidora de todos los excesos. Y es así como la estrafalaria y frívola Naná, sumergida en su obsesión por ser apreciada y adorada va cayendo en todos los vicios y pecados imaginables al mismo tiempo que los va provocando en los que la rodean, arruinándolos a su paso. Esta es la naturaleza corrupta de la belleza de Naná.
El Palacio de Naná
La mansión que el conde Muffat le compra a Naná es la personificación de todas sus victorias, su narcisismo empedernido, y sus vicios. Es el gran trofeo de todas su conquistas, finalmente está rodeada con todo lo que alguna vez deseo tener, lo que a su vez la hace el foco de atención de todo su círculo social, todas las mujeres desean tener lo que lleva y la envidian, y todos los hombres, desde el más paupérrimo hasta los burgueses más ricos la desean. Aun así, esta cumbre de la frivolidad excesiva hace que Naná se da cuenta de su estado de vacío interior, ejemplo de esto es síndrome de destrucción masiva de cuanto objeto llega a sus manos, y ya sin ninguna excusa para nuevas aventuras recoge a cualquiera alma perdida de la calle y se los lleva a su cama. Así, pronto la casa de Naná se convierte en un sucio prostíbulo con fachada de palacio. Finalmente, toda esta putrefacción la termina por hastiar y termina escapando de esta casa del vicio que ella misma creo.
"La nueva alcoba resplandecía con su lujo regio. Los cadarzos de plata sembraban de estrellas vivas el terciopelo rosa de té de las colgaduras, ese rosa de carne que el cielo toma en los hermosos anocheceres, cuando Venus se enciende en el horizonte, sobre el fondo claro del día que muere, y los cordones de oro que caían de los ángulos y los encajes de oro que enmarcaban los paños, eran como llamas tenues, cabelleras rojizas destrenzadas, cubriendo a medias la gran desnudez de la estancia, cuya voluptuosa solidez resaltaba. Luego, en frente, estaba la cama de oro y de plata, que resplandecía con el brillo nuevo de sus cincelados; un amplio trono para que Naná pudiese extender la realeza de sus miembros desnudos, un ara de una riqueza bizantina, digna de la omnipotencia de su sexo, y donde ella, en aquel momento, se exhibía descubierta en un religioso pudor de ídolo temido…Para el marqués de Chouard florecían las rosas de oro del barco, los montones de rosas de oro abiertas en los follajes de oro; para él se inclinaban los amorcillos, el grupo echado sobre el enrejado de plata, con risas de picardía amorosa, y a sus pies, el Fauno descubría para él el sueño de la ninfa ahíta de voluptuosidad, aquella figura de la Noche copiada sobre el célebre desnudo de Naná, hasta con los recios muslos que la hacían reconocible por todos."
El Dramático Final de Naná
Después de la tormentosa y trágica proposición de matrimonio de Jorge Hugón, y los sucesos posteriores, Naná decide dejarlo todo e irse de viaje, por distintas y debatibles razones, quizá en un intento de escapar de sus innumerables deudas, o de la culpa luego de lo ocurrido a ambos hijos de la sra Hugón, o fastidiada ya de tantos hombres. Cual sea la razón, el punto es que termina abandonándolo todo y vendiendo todas sus posesiones (muebles –hasta la extravagante cama-, vestidos, vajilla, manteles, cortinas, joyas…), y se decide por viajar por el mundo. Entonces, toda París rumora sobre el paradero de Naná, que está en El Cairo, que un príncipe oriental se enamoró de ella y le regaló un collar de lo más extravagante y costoso, que está en un Rusia haciendo estragos entre la burguesía, y cuantas otras historias cada una más fantasiosa que la anterior. Finalmente, Naná retorna a París, y cuando se enteran está en un hotel en su lecho de muerte, había ido a ver a su hijo, Luisito, y este tenía viruela y ella termina contrayéndola igualmente, muriendo completamente desfigurada, al mejor estilo de Dorian Gray.
"Un ojo, el izquierdo, estaba completamente sombrío en el hervor de la
purulencia; el otro medio abierto, se hundía como un agujero negro y corrompido.
La nariz supuraba todavía. Una costra rojiza partía la mejilla e invadía la
boca, arrancándole una risa abominable. Y sobre aquella máscara grotesca y
horrible de la nada, los cabellos, aquellos hermosos cabellos, conservaban sus
reflejos de sol, cayendo como un chorro de oro.
Venus se descomponía. Parecía que el virus cogido por ella en los arroyos, sobre
las carroñas toleradas, aquel germen con el cual había envenado a un pueblo,
acababa de subírsele al rostro y lo había podrido." –Capítulo XIV
Bibliografía
Roberts, James L. CliffsNotes on Nana. 11 May 2014
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Zola, Émile. Naná. España:Sarpe, 1984. PDF
