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AMAZONAS
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LA TRAVESÍA DEL INFIERNO VERDE
GUARDIANES DE LA SELVA
LA ÚLTIMA FRONTERA
J. M. González Ochoa
Emanuele Amodio
Manuel Lucena Giraldo
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EL PULMÓN DEL PLANETA, AMENAZADO
L uis Pancorbo
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En 1542, Francisco de Orellana, nacido en Trujillo hace quinientos años, alcanzaba el Atlántico tras seguir el curso del Amazonas desde su origen en los Andes. La inmensa cuenca fluvial, poblada como mínimo doce milenios antes, quedaba abierta así a la curiosidad y a la codicia de los europeos. Se iniciaba un proceso de colonización cuyos traumáticos efectos todavía continúan
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EL DESAFÍO DE ORELLANA EL EXPLORADOR EXTREMEÑO perdió
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un ojo durante un combate en Perú con los indios manabíes, en 1535.
LA TR AVES ÍA DEL INFIERNO VERDE HACE QUINIENTOS AÑOS NACIÓ EN TRUJILLO FRANCISCO DE ORELLANA, EL PRIMER HOMBRE QUE DESCENDIÓ POR EL AMAZONAS DESDE LOS ANDES HASTA SU DESEMBOCADURA EN EL ATLÁNTICO Y REGRESÓ A CASTILLA PARA CONTARLO. JOSÉ Mª GONZÁLEZ OCHOA RECREA LA EXPEDICIÓN QUE SOBREVIVIÓ A LA INTERMINABLE PESADILLA LÍQUIDA JOSÉ Mª GONZÁLEZ OCHOA. HISTORIADOR.
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uito, primeros días de marzo de 1541. Por la pequeña villa de San Francisco de Quito desfila una extraña y ruidosa procesión, en la que sobresalen los aullidos continuos de una extensa jauría de perros que tiene atemorizados por igual a la piara de dos mil cerdos y a los cinco mil indios costeños, que portean víveres e impedimentas de doscientos veinte españoles, al mando de Gonzalo de Pizarro, el
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hermano del marqués gobernador del Perú. También avanzan con ellos regatas de llamas y dos centenares de caballos. Los perros vigilan que los cerdos y los indios sigan a los españoles y ladran sin descanso por las calles del hasta entonces tranquilo villorrio. Las mujeres y los hombres que salen a observarlos de las humildes casas de adobe los miran con una mezcla de extraña curiosidad e indiferencia, deseando que pasen rápido y acabe aquel escándalo de ladridos, relinchos y chirriar de metales. Saben que son los expedicionarios que van a buscar el
LABERÍNTICOS, el y los bosques infinitos del País de la Canela, las aromáAmazonas y sus árbol de la canela. ticas flores de ishpingo con tributarios se Unas semanas después, las que los nativos sazonan convirtieron en una trampa palúdica, otro grupo mucho más mosus comidas y que, dicen, se que acabó con la desto y silencioso –veintiencuentran por millones en vida de Orellana en trés hombres con sus caballas regiones del Oriente. su segunda En las mismas tierras don- expedición, en 1546. gaduras y una escasa impedimenta– descansa unas hode, se insiste, habita un cacique que se baña todos los días en un ras en el mismo pueblecillo de San estanque dorado. Ambas historias tie- Francisco de Quito. Son los rezaganen afiebrados a los españoles, y aque- dos al mando de Francisco de Orellalla estrepitosa expedición, que ahora na. En las casas de barro, en las caya se aleja escondida en una nube lles, en toda la tierra de los alrededomurmullante de polvo, pretende en- res se ven las cicatrices abiertas por un contrar a la vez el mítico El Dorado reciente temblor. Enterado de ➳
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➳ que el joven Pizarro ha partido sin ellos, tras un breve reposo, Orellana da la orden de ensillar las bestias y partir rumbo norte. Comenzaba así una de las más fascinantes aventuras del descubrimiento de América, un recorrido de resonancias homéricas que todavía hoy resulta casi imposible de repetir. Seguramente, Francisco de Orellana fue el primer hombre en recorrer el Amazonas en su totalidad. DE EXTREMADURA A PERÚ. Pero ¿cómo había llegado el segundo hijo más ilustre de Trujillo hasta las puertas mismas de la selva amazónica? El encuentro de su biografía con la historia debió comenzar hacia 1527, cuando el adolescente, con poco más de 16 años, estaba ya en Nicaragua. Al año siguiente forma parte de la hueste de Pedro Alvarado y está documentada su participación en algún viaje por mar, entre la costa panameña y México, para buscar un paso entre los dos océanos. Al tener noticias de la caída del Imperio inca, se trasladó a Perú para reforzar la hueste de sus parientes y convecinos, pues era primo de los hermanos Pizarro. Estuvo en la conquista y fundación de Puente Viejo, en marzo de 1535, mas en la batalla con los indios manabíes una flecha le atravesó el rostro y le dejó tuerto de por vida. Durante la sublevación de Manco Inca Yupanqui, abandonó su retiro de colono en Puente Viejo y organi-
CASA DE ORELLANA en Trujillo. El explorador del Amazonas abandonó pronto su
ciudad natal, pues a los 16 años ya se encontraba en Nicaragua.
zó una pequeña mesnada para socorrer a sus compañeros. Posteriormente, se vio envuelto en las guerras entre pizarristas y almagristas, tomando parte por el bando de sus familiares. Tras la muerte de Diego de
Almagro y el posterior reparto de tierras entre los capitanes fieles, Francisco Pizarro otorgó a Orellana un rico repartimiento en la región de Culata (actual Ecuador), con el encargo de fundar una villa estable junto a la de-
TRUJILLO 2011 a Asociación Cultural Trujillo 2011 ha decidido aprovechar el V centenario del nacimiento de Orellana en la ciudad extremeña para impulsar una ruta histórica en su ciudad natal que tenga su paralelo en otra de carácter turístico en la Dehesa Extremeña y el Parque de Monfragüe, a tan sólo media hora de esa ciudad. Simultáneamente, la asociación se plantea llevar el Amazonas a Trujillo, convirtiendo a la ciu-
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gran río sudamericano, fue precisamente Orellana quien acuñó el término de Amazonas y Amazonia, una cuenca fluvial que contiene el 20 por ciento del agua dulce de todo el planeta y más del 25 por ciento de las especies animales y vegetales. De esta forma, Trujillo aspira a convertirse en la embajada cultural del Amazo-
dad extremeña en el punto de encuentro entre las culturas amazónica y española, con la meta de impulsar la defensa de la cuenca amazónica, pues éste es un reto fundamental en la lucha contra el cambio climático. Como explorardor del BUSTO DEL CONQUISTADOR
(Trujillo). Foto: Jero Morales.
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nas en Europa y sede de centros de estudios sobre las relaciones históricas entre España y América, así como impulsora de exposiciones y publicaciones como Viajealtraspasado corazón de elmundo de Francisco y Juan C. de la Cal (Manuscritos, 2009). Como parte de las celebraciones anunciadas para este centenario, la Ruta Quetzal tiene previsto concluir este año su recorrido en la casa natal de Orellana en Trujillo. www.trujillo2011.es
L A C O N Q U I S TA D E L A M A Z O N A S El ENFRENTAMIENTO imaginado por el grabador Teodoro de Bry entre indios y españoles es ilustrativo de la hostilidad con que se topó la partida de Orellana.
un escaso botín de flores de canela. La idea del inmenso bosque especiado se desvanece. Con ingenio –unas hachas y unas lancetas para abatir y desbastar los árboles, unos clavos obtenidos tras fundir los herrajes y el calafateado de las cuadernas con telas impregnadas en sustancias resinosas de la selva– construyeron un rudimentario bergantín, bautizado como San Pedro, que les
mando de cincuenta y siete hombres, con el encargo de encontrar víveres y regresar. El navío desciende las aguas del río Napo sin encontrar poblado alguno ni manera de aprovisionarse. Nueve días después, recorridas unas doscientas leguas fluviales, alcanzan un pueblo indígena tributario del gran señor de Aparia. Allí sacian su hambre y Orellana, tras una larga meditación, decide regresar al campamento de Pizarro. Sus hombres se oponen; hay un amago TRAS SIETE MESES DE TRAVESÍA, LOS DOS BERGANTINES de motín; son demasiaESPAÑOLES, EL SAN PEDRO Y EL VICTORIA, ALCANZARON das las penalidades suEL OCÉANO ATLÁNTICO POR LA ISLA GRANDE DE MARAJÓ fridas para regresar sin nada y la fuerza de las bir a los porteadores nativos y a los permitiría navegar aguas abajo por el aguas hará imposible remontar el río. río Coca. Dos canoas con media do- Orellana se ve envuelto en una feroz caballos. El encuentro con el grueso expe- cena de hombres anteceden al navío. disyuntiva: tiene órdenes de su goberdicionario de Pizarro debió producir- Todo se vuelve lento y costoso. La nador de retornar con víveres, no puese a finales de marzo de 1541, en al- naturaleza más exuberante jamás vis- de abandonar a tantos hombres, y al gún punto del valle de Zumaco, a unas ta los envuelve y aprisiona, la hume- mismo tiempo, comprende que el retreinta o treinta y cinco leguas de Qui- dad y el hambre los aletargan. greso es imposible, que sus compañeto. Los hombres de Orellana llegaros tienen razón; volver es la muerron con tan solo sus espadas y rodelas. LA TRAICIÓN INEXISTENTE. Cerca de te. Este hecho siempre ha proyecEn Zumaco, toman aliento, mien- la confluencia del río Napo con el tado la sombra de la traición sobre tras Pizarro con ochenta expediciona- Aguarico, Pizarro decide dividir el gru- Orellana. Tiempo después, fue derios avanza hacia oriente. Setenta días po, y ordena a Orellana que continúe nunciado por Gonzalo Pizarro, mas después regresa al campamento con bajando el río Napo en el bergantín, al ni el Consejo de Indias ni el pro- ➳
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sembocadura del río Guayas. En 1538, levantó de las ruinas la ciudad de Santiago de Guayaquil, dos veces destruida por los indios. Dos años después, harto de los calores húmedos y de los aguaceros torrenciales, aburrido de la vida inactiva y laxa, vio en la expedición en busca del País de la Canela la oportunidad de su vida para descubrir y obtener mayor gloria que la otorgada hasta entonces por un enorme fundo y el gobierno de una ciudad. Pasados los últimos bohíos de San Francisco, comenzaron a cernirse sobre el grupo de Orellana todas las siniestras advertencias que le habían dado desde que decidiera informarse sobre lo que había más allá de la cordillera andina: la tierra sigue temblado, los indios se muestran hostiles, y los fríos andinos hacen sucum-
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Junto a Orellana viaja un ➳ pio monarca Carlos fraile dominico, fray I interpretaron estos Gaspar de Carvajal, sucesos como traitambién de Trujillo, ción. Su única alterque dejó un apasionativa era seguir el nante y detallado curso del río. El 2 relato, una de las de febrero de 1542 mejores crónicas abandona la aldea de viaje de este pecargado de proviríodo histórico y resiones. Pasa la deferencia obligada para sembocadura del río el estudio de la odisea Curaray, y el domingo amazónica. 11 de febrero la nave hispaEl 24 de abril parte de los na surca ya aguas del Marañón. Una semana des- ADORNO DE PLUMAS. territorios del cacique ApaAmazonia peruana, pués encuentra poblados siglo XVII, Collezioni ria la flotilla española; está Universitarie, compuesta por el San Pedro, indios que se muestran di Scienze, el Victoria y dos canoas adeamistosos. Es el momento Istituto Universidad de lantadas con media docena de construir otro bergantín, Bolonia. de hombres. La navegación bautizado Victoria, reparar las tablazones podridas del que traían fue un continuo acoso por parte de y aprovisionarse. Ytambién de renun- los indios que desde las orillas o en peciar a la autoridad de Pizarro y, en queñas canoas no dejaban de lanzarnombre del Rey, asumir la responsa- les flechas y lanzas. El 12 de mayo las bilidad de descubrir nuevas tierras, poblaciones del cacique Machapara someter a sus pobladores y salvar a sus les salieron de guerra dejando dieciocho españoles heridos, uno de los hombres.
cuales murió una semana después. Al atravesar el territorio de los Omagua y de los Paguana, en ningún lugar fueron recibidos amistosamente y tuvieron que combatir para conseguir comida o simplemente para poder continuar navegando. El 3 junio de 1542 alcanzaron la desembocadura del río Negro, no muy lejos de donde hoy se levanta la ciudad de Manaos, ycinco días después pasaron el Río Grande, conocido actualmente como Madeira. MUJERES ARMADAS. A partir de este punto, entraron en el territorio tributario de las legendarias amazonas. Fuertes corrientes les arrastraron río abajo sin control, al tiempo que eran hostigados por los pueblos nativos que atravesaban. Fray Gaspar relata con esmero en sus crónicas quiénes eran y cómo mantenían su poder estas extraordinarias mujeres, que no dejaron nunca de lanzar sus envenenadas flechas contra la flotilla intrusa. El descanso llegó en una despoblada isla situada en el encuentro de las
LA LOCURA DE LA CIVILIZACIÓN dentrarse en la inmensidad del río Amazonas y de su jungla ha sugerido a los cineastas un reflejo de los pecados de la civilización frente a la naturaleza. El ansia del oro a cualquier precio en el caso de los conquistadores españoles del siglo XVI, como ocurre en Aguirre, la cólera de Dios (1972), de Werner Herzog, y en ElDorado (1988), de Car-
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los Saura, brindaron una suerte de analogía del emergente ecologismo: si los exploradores pervertían el espíritu de la vida primitiva y la pureza de la jungla en pos de sueños de grandeza, que acababan por hacerles perder la razón, no menos lo estaría haciendo la deforestación de los bosques por parte de empresarios y gobiernos del momento. Con menos tapujos se presentaba la
En FITZCARRALDO, el director alemán Herzog especula con la desmesura que provoca la selva en el ser humano.
misma confrontación de naturaleza y progreso en La selva esmeralda (1985), de John Boorman, con mayor presencia de las tribus autóctonas, verdaderas víctimas de los excesos de la civilización. Aún lastrada por la glorificación de la vida primitiva y con ecos de Centauros deldesierto (1956) de John Ford, Boorman dejaba que su personaje –y el espectador– quedara seducido y atrapado finalmente en la grandiosidad de la naturaleza, como también le ocurriría a Werner Herzog en Fitzcarraldo (1982), en su segunda y mítica incursión en la jungla al lado de su enemigo y actor fetiche Klaus Kinski. El documental sobre la relación de ambos, Mi enemigo íntimo (1999), daba buena cuenta de la propia aventura de rodar en la selva –adentrándose en la propia ficción–,
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Fotograma de AGUIRRE, LA CÓLERA DE DIOS, de Werner Herzog, que se inspira en la aventura del renegado vasco.
una experiencia, sin duda, catártica, como también lo fue para Francis Ford Coppola, en forma de pesadilla, con Apocalypse New (1979), otro descenso a la locura, río abajo, deudora en cierta medida de Aguirre, la cólera de Dios. ■ JULIO MARTÍN ALARCÓN
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EN 1558, el Amazonas se presentaba como el gran protagonista de América del Sur
en este mapa portulano que muestra también Europa y África.
brazos engañosos sin encontrar el cauce principal. La jungla palúdica es un pudridero de pantanales, un mundo caliginoso, fantasmal, como de pegajosa y densa pesadilla que jamás lo abandona. Regresa donde ha dejado al grupo principal, junto a los restos del bergantín embarrancado. Siente ya la mortal quemazón de las fiebres palúdicas y la congoja irremediable de la derrota. Persiste en seguir adelante. Vagan ORELLANA FUE ENTERRADO ENTRE LAS RAÍCES DE UN como fantasmas por los ÁRBOL JUNTO A LA ACTUAL CIUDAD DE SANTAREM. DE SU laberintos amazónicos. SEGUNDO VIAJE SOBREVIVIERON 45 DE SUS 400 MIEMBROS En el mes de noviembre de 1546 Oreque le concedieron la gobernación de Atlántico, ciento cuarenta hombres llana murió aferrando la mano de su aquellos territorios, nombrados como han muerto de peste o han deserta- mujer. Fue enterrado entre las raíces Nueva Andalucía, y le otorgaron li- do. Poco antes de la Navidad, alcanzan de un árbol, en cuya corteza se marlas primeras islas de las bocas del Ama- có una cruz, en algún lugar cerca de la cencia para una nueva expedición. No sin grandes problemas, en mayo zonas, pero han perdido otro bergan- actual ciudad de Santarem. De aquede 1545 Orellana parte de Sanlúcar tín. Penetran en el río, un dédalo in- lla pesadilla fluvial solo sobreviviecomo un fugitivo, llevando consigo fernal de islas, manglares y esteros. De ron 45 españoles. Orellana realizó una proeza colosal, cerca de cuatrocientos hombres en los dos barcos que se mantienen a flocuatro navíos mal pertrechados e ina- te, uno es sacrificado y el postrero aca- de dimensiones míticas, muy poco decuados para remontar un río salva- ba encallado en una isla. Orellana sien- valorada. Todavía hoy, cinco siglos je e infinito. Su intención es hacer el te ya la certeza de su fracaso. Empe- después de su nacimiento, la historia camino inverso, penetrar por la de- cinado, construye otro pequeño bajel tiene una deuda con el tuerto del sembocadura del Amazonas y alcanzar con el que vaga veintisiete días entre Amazonas. ■ la costa pacífica. En su loca resolución arrastra a su núbil y bella esposa sevillana, Ana de Ayala. La empresa va acompañada desde el principio por los negros augurios del fracaso. En el Atlántico, las naves sufren serios desperfectos. Se refugian en Cabo Verde para desguazar un navío que permita reparar los otros. Cuando Orellana enfrenta de nuevo el
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aguas del Amazonas con su tributario Tapajós. Río abajo, tribus caníbales castigaron día y noche a los nautas hispanos, pero la esperanza había renacido al notar fuertes mareas, presencia inminente del océano. Entre ataque y ataque, pasaron más de un mes reparando los bergantines. Finalmente, el 8 de agosto pudieron largar velas. Navegando por la orilla izquierda, probablemente por la boca del Pacaxaré y el Canal Pringoso, el 24 de agosto, tras siete interminables meses, llegaron al Atlántico. Dos días después salían a mar abierto por la isla grande de Marajó, entre las islas Caviana y Mexiana. En el océano, una tormenta retrasó al bergantín Victoria, nave capitana. El San Pedro arribó al puerto de Nueva Cádiz, en la isla de Cubagua, el 9 de septiembre; tres días después atracaba Orellana con el resto de expedicionarios. Concluida su gran odisea –el primero en atravesar el continente navegando por el Amazonas–, marchó a España para explicarse ante el Consejo de Indias y disipar el baldón de la traición. Ni el Consejo, ni el Emperador dieron mucho crédito a las acusaciones; más bien al contrario: quedaron tan impresionados por la hazaña,
PENETRACIÓN A SANGRE Y FUEGO
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CRONOLOGÍA 1. El Imperio inca no logró extenderse por
la cuenca amazónica. 2. 1499 Américo Vespucio navega por las
cercanías del estuario del Amazonas. 3. 1541 Francisco de Orellana comienza el pri-
mer descenso del Amazonas desde los Andes. 4. 1542 Después de un combate con unas mujeres intrépidas y guerreras, el 24 de junio, Orellana bautiza al río como Amazonas. 5. 1542 El 26 de agosto alcanza el Atlántico. 6. 1560 La expedición de los Marañones, con Lope de Aguirre a bordo, desciende por el Amazonas en busca de El Dorado. 1561 Aguirre llega al Atlántico probablemente por el Orinoco. 7. 1616 Los portugueses fundan Belem, para controlar la navegación en el estuario del Amazonas. 8. 1638 El portugués Pedro Teixeira comienza el primer ascenso por el río. 9. 1669 Los portugueses fundan Manaos. 10. 1757 Probable fundación de Iquitos, una reducción de los jesuitas españoles. 1867 Fundación de Leticia como puerto fluvial en el Amazonas. 11. 1907 Julio César Arana funda la Peruvian Amazon Rubber Company para la extracción de caucho en el Putumayo. 12. 1912 El cónsul británico Roger Casement visita el Putumayo y denuncia la esclavización de los indios. 13. 1928 Ford funda Fordlandia, cerca de Santarem, para proveerse de caucho para neumáticos.
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DATOS LONGITUD: 6.800 km, aproximadamente. EXTENSIÓN: 7 millones de Km2. POBLACIÓN: 22 millones (17 en Brasil). TEMPERATURA MEDIA: 23º a 28º.
Su cuenca se extiende por Brasil, Ecuador, Bolivia, Perú, Colombia, Venezuela, Guyana, Surinam y Guayana francesa. Ilustración de Joaquín Muñoz-Baroja
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LOS PUEBLOS PREHISPÁNICOS
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CERÁMICA MARAJOARA , de Brasil (Barcelona, Museu Barbier-Mueller de Arte Precolombino).
HACE COMO MÍNIMO DOCE MIL AÑOS COMENZÓ EL POBLAMIENTO DEL AMAZONAS.
EMANUELE AMODIO INDAGA CÓMO VIERON LOS
CONQUISTADORES A AQUELLOS GRUPOS HUMANOS PEQUEÑOS Y HUIDIZOS Y LAS ESTRATEGIAS DE LOS INDIOS PARA SOBREVIVIR A UN CONTACTO QUE AÚN HOY AMENAZA CON EXTINGUIR SUS CULTURAS a selva amazónica se muestra ante los viajeros del Antiguo Régimen como una barrera vegetal infranqueable, difícil de entender y penetrar. Un mar verde inmenso para el que los primeros conquistadores europeos no tenían referentes con que construir una imagen manejable, es decir, útil para su conquista. La floresta pluvial oponía resistencia a la penetración, así como sus habitantes: pequeños grupos, individuos semidesnudos, huidizos y peligrosos. Sin embargo, a los diferentes intereses y percepciones correspondían
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imágenes diferentes: allí donde los conquistadores veían salvajes desnudos, los misioneros vieron poblaciones prístinas, edénicas; una humanidad que no había caído bajo las constricciones del pecado. Estas dos imágenes, la del indio feroz y salvaje y la del indio edénico, acompañan toda la historia del contacto entre las poblaciones indígenas amazónicas y los europeos y sus descendientes criollos. Todavía hoy, desarrollistas e indigenistas pelean por la hegemonía de sus visiones particulares, frente a las cuales los mismos indígenas intentan proponer la propia que, a menudo, no tiene mucho que ver ni con la primera ni con la segunda. Un lema brasileño de los años ochenta justificaba así la
ocupación criolla: “Una tierra sin hombre para hombre sin tierra”. Con todo, mas allá de la percepción europeizante del territorio amazónico como vacío, resultado de la vivencia urbana de hombres hacinados en espacios restringidos, esas tierras han tenido ocupación humana desde milenios y, lo que es más importante, esas poblaciones se han adaptado al medio ambiente sin destruirlo, constituyéndose en verdaderos “guardianes de la selva”. LA TRIBU PERDIDA DE ISRAEL. El ori-
gen de los indígenas americanos despertó la curiosidad temprana de los cronistas de América. Más allá de las teorías de los primeros si- ➳
EMANUELE AMODIO. ESCUELA DE ANTROPOLOGÍA, UNIVERSIDAD CENTRAL DE VENEZUELA, CARACAS.
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IDÍLICA VISIÓN de los
indios de la Amazonia peruana en el siglo XVIII, en una ilustración de la enciclopédica obra Trujillo del Perú, mandada compilar por el obispo Martínez Compañón.
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➳ glos de la época colonial, que in-
cluían tanto la creación de otra humanidad por el Dios cristiano como la migración de la séptima tribu perdida de Israel, ya el padre Acosta había avanzado la hipótesis de que se trataba de poblaciones de origen asiático. De esta apreciación temprana desciende la teoría dominante durante el siglo XX, precisando con datos arqueológicos la entrada de grupos de cazadores recolectores por el estrecho de Bering procedentes de Asia a final del Pleistoceno, hace unos veinte mil años; a la cual se añade otra que sugiere una entrada posterior por el océano Pacífico en las costas de Sudamérica. Los veinte milenios de la presencia del ser humano en América han sido recientemente confirmados por la investigación genética del ADN mitocondrial de indígenas de los dos subcontinentes americanos. Por otro lado, la utilización reciente de modelos estadísticos aplicados a la dispersión poblacional permite calcular la duración del desplazamiento de los grupos entrados por Bering hacia Sudaméri-
INDIA CAMACAN ca en dos mil MONGOYO, del Viaje años, indicando pintoresco a Brasil, que las áreas de de Debret (1834mayor densidad 39), obra que fijó el imaginario p o b l a c i o n a l brasileño en el XIX. temprana no fueron las del norte del continente, sino las regiones de América central (sur de México, Yucatán y Guatemala) y la región amazónica. Aunque no siempre los datos arqueológicos confirman esta hipótesis, que implicaría la presencia del hombre en la región amazónica desde por lo menos dieciocho mil años, sí hay datos para fechar su presencia en al menos doce mil, lo que pone definitivamente en duda la difusa teoría que los primeros americanos fueron los Clovis del actual Nuevo México (10000 a.C.). Los grupos que se establecieron en la Amazonia eran cazadores-recolectores y desarrollaron complejos sistemas de explotación del medio ambiente, combinando la caza y la recolección con formas de agricultura fija e itinerante. Esto permitió un de-
LA BÚSQUEDA DE EL DORADO as expediciones en busca de El Dorado salieron a lo largo del siglo XVI de múltiples emplazamientos: Quito, la Isla Margarita y Coro, en la actual Venezuela y Perú, sin mucho éxito, ya que la localización del ritual en la laguna de Guatavida, en la actual Colombia, no dio resultado. Esto implicó
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COLGANTE QUIMBAYA DE ORO.
Piezas como ésta hacían creer a los conquistadores en la existencia de la mítica ciudad de El Dorado.
un desplazamiento del sitio mítico hacia el centro de la selva amazónica: la laguna Parime, ésta también imaginaria. Aquí, según el plano del inglés Raleigh y las descripciones del conquistador español Berrío, se encontraría una ciudad de oro, con sus habitantes nativos y, según la “explicación” del inglés, con los incas escapados de la toma del Cuzco, quienes se habrían desplazado desde Perú a lo largo de la selva amazónica con sus riquezas, hasta asentarse en las riberas del lago Parime y del río Uraricoera, en el ac-
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sarrollo importante de la agricultura, que comprendía la yuca o mandioca (Manihotesculenta), la batata (Ipomea batatas) y el maní (Arachis hipogea), entre otros; más la semicultura de plantas, frutales y cereales. El caso de la domesticación de la yuca, un tubérculo de fácil cultivo y rápida cosecha, continúa despertando la admiración de los científicos, ya que la variedad más utilizada y útil es la que contiene alto contenido de ácido cianhídrico (Manihot utilissima), lo que implicó la invención de un sofisticado sistema de transformación para volverla consumible. La agricultura indígena, tanto prehispánica como de la época colonial, incluía variantes muy importantes: cultivo de conucos –pequeñas porciones de tierra en la selva obtenidas por desbosque, quema y roza–, cultivo en terraplenes para evitar las inundaciones, cultivos estacionales en várzea y hasta cultivos en islas flotantes. La producción de alimentos a través de la agricultura, aunque asociada siempre a formas de caza y recolección de frutos silvestres, implicó la progresiva sedentarización de la mayoría de estas poblaciones, aunque a menudo de manera estacional, lo que produjo formas diferentes de organización social. En general, se trataba de pequeñas sociedades igualitarias, a menudo compuestas por fa-
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JEFE camacan mongoyo, pareja de la imagen de la página opuesta, en el Viaje pintoresco de Debret.
de organización social con DANZA DE INDIOS DE Europa medieval. No obsLA MISIÓN DE SAN tante, cuanto más avanzacaciques y diferenciaciones JOSÉ, en una acuarela que el ba la colonización, con su entre grupos tendencialartista francés secuela de muertes y desmente dominantes y gruJean-Baptiste trucción de sociedades enpos locales subalternos. Debret situó erróneamente en teras, más quedaba claro Entre estas últimas socieBrasil. que esa humanidad amedades se da un mayor desarrollo de la cerámica, tanto uti- ricana no era tan diferente de la europea, aunque su cultura se percibiera litaria como artística. como primitiva. Si Américo Vespucio, Vicente Yáñez LA ÉPOCA COLONIAL. La conquista europea supuso un Pinzón, Diego de Lepe y Francisco cambio radical de todas las Vélez de Moguer fueron los primesociedades indígenas in- ros en explorar las costas y los deltas volucradas, sobre todo las de los ríos amazónicos a comienzos del isleñas, costeras y en te- siglo XVI, es a Francisco de Orellarritorio de fácil penetración. na, acompañado por Gaspar de CarvaDe hecho, tanto la resistencia in- jal, a quien se debe la travesía del lardígena como las dificultades para go y caudaloso río. Del lado portugués, penetrar en la región amazónica la primera expedición fue realizada en impidieron en gran parte su con- 1638 por Pedro Teixera, quien volvió a recorrer a la inversa los territorios quista hasta el siglo XVIII. Durante el primer siglo de la co- atravesados por Orellana, subiendo lonización, los indígenas fueron más por el delta y alcanzando Quito a traimaginados que conoci- vés del río Napo. De nuevo, los mitos de la primera dos: hombres sin cabeza o con una cola, hora de la conquista, que se habían ido sirenas y amazo- desvaneciendo con los años, cobraban nas poblaron el nueva fuerza frente al inmenso contimundo america- nente verde, peligroso y desconocido. no, reproduciendo Tanto que a finales del siglo XVI, el inlos mitos griegos y de la glés Walter Raleigh, en el inten- ¸
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milias extensas o clanes, según sus características culturales y lingüísticas. Sin embargo, en algunas regiones fluviales y de mesetas, algunas sociedades de agricultura sedentaria desarrollaron formas estratificadas, aunque incipientes,
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CINCO GRUPOS LINGÜÍSTICOS i asumimos la variabilidad lingüística como un buen indicador de variabilidad cultural, podemos identificar cinco grandes áreas principales, en cuyo interior hay sin embargo importantes variaciones culturales y étnicas. Las dos familias lingüísticas más extendidas en la Amazonia son la tupí y la gê, en el centro y sur de la selva; siguen la familia caribe, en la región septentrional; la arawak, en el área norteña circunamazónica, y la panotacana, en la región suroccidental. A estas familias lingüísticas y macro áreas culturales hay que añadir también otras familias menores no relacionadas lingüísticamente con las anteriores, cuyas lenguas son consideradas independientes. E. A.
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ALDEA WAPISHANA, en la interpretación de Robert Schomburgk, aparecida en Twelve
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Views in the Interior of Guiana , publicado en Londres en 1841.
➳ to de conquistar la Guayana a agustinos, franciscanos y capuchinos. llas y pueblos a todo lo largo de él, sutravés del otro inmenso río, el Ori- Los indígenas reducidos en Pueblos biendo por el río Negro y el río Blanco, noco, todavía anotaba en sus diarios de Misión tuvieron que adaptarse al hasta las regiones del mítico Parime. que más allá de las montañas del Pari- estilo de vida misional y, en definiti- Estas avanzadas terminaron por crear me había amazonas y los ya famosos va, a occidentalizarse, aunque la resis- conflictos territoriales, lo que imputencia fue mucha y esas aldeas tu- so un tratado en 1750, del cual dehombres acéfalos. rivaron dos expediciones de límites: El impulso a la exploración de la sel- vieron a menudo vida efímera. El avance europeo durante el siglo una para demarcar la región media enva derivaba de la búsqueda de especias, como la canela, y sobre todo del XVIII supuso la anexión de nuevos te- tre el Amazonas y el Orinoco y otra oro. Un mito sobresale entre otros, rritorios y el intento de integración de para el sur, hacia el río Paraná. Los indígenas, por su parte, ajenos el de El Dorado, un rey que ritual- las poblaciones indígenas al sistema mente recubierto de polvo de oro se social, religioso y económico de las na- a estas contiendas europeas, cuando ciones colonizadoras: España, desde no aceptaban la reducción en pueblos, sumergía en una laguna sagrada. Aunque había oro y hasta pueblos Tierra Firme, las actuales Venezuela y oponían resistencia o se internaban en que lo trabajaban, no existía tal ciu- Colombia, la Provincia de Quito, Perú áreas de refugio, es decir, en lo profundad ni los míticos incas y tampoco las y el Río de la Plata; Portugal, desde do de la selva. Esta situación no camamazonas, sino poblaciones indíge- Brasil hacia su norte; y holandeses y bió mucho con las guerras de indepennas que desde milenios poblaban franceses desde las costas atlánticas y dencia y la creación de los Estados republicanos, que continuaron en gran esas regiones. Sin embargo, el impul- caribeñas. En verdad, la selva se resistía, como parte la política integracionista de sus so de la búsqueda de El Dorado trajo consigo la progresiva avanzada del sus habitantes, así que solamente Es- antepasados. frente colonizador, por lo menos a paña y Portugal consiguieron avanzar lo largo de los grandes ríos que sur- más allá del borde de la floresta utili- UNA ENORME VARIEDAD. La selva can la Amazonia: los portugueses por zando los dos grandes ríos: los españo- amazónica constituye una de las el río Amazonas y los españoles por el les penetraron la selva hasta el alto áreas de mayor variabilidad vegetal y Orinoco, en búsqueda del caño que animal del planeta. Se trata de cerOrinoco. Ycomo era ya estrategia experimen- lo unía al Amazonas; y los portugueses ca de 7.000.000 de Km2 que contietada, los primeros en contactar de for- por el Amazonas, llegando a fundar vi- nen la mitad de los bosques tropima permanente con los indígenas y reducirlos en EN EL SIGLO XVIII LOS INDIOS SE ENFRENTABAN A LOS pueblos al estilo europeo fueron los misione- ESPAÑOLES Y LOS PORTUGUESES O SE INTERNABAN EN LA ros: dominicos, jesuitas, SELVA, LO QUE NO CAMBIÓ TRAS LAS INDEPENDENCIAS LA AVENTURA DE LA
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COMPLEJOS INTERCAMBIOS. Todos es-
tos pueblos, según las características culturales propias, interactúan regionalmente entre ellos, conformando amplios sistemas de intercambios culturales y económicos –los que incluyen actualmente también las poblaciones criollas con las cuales están en contacto. Mientras algunos pueblos tienen poco contacto con el mundo occidental, la mayor parte de los indígenas amazónicos tiene un contacto permanente con las sociedades nacionales
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cales del mundo. A pesar de ello, pocos consideran que, como en un espejo del mundo natural, hay otro factor presente en ella, el de los grupos humanos: una enorme variedad de formas sociales, culturales y lingüísticas que se ha ido conformando a los largo de los milenios y que subsistió, sobre todo, por el hecho de que en esas regiones no hubo estructuras políticas estatales, como en los casos de Perú y México, con su nivelación cultural y lingüística. En este sentido, la variabilidad cultural entró en crisis precisamente con la llegada de los europeos y la progresiva avanzada de su sociedad y culturas desde los bordes y ríos de la selva, aunque fue la constitución de los Estados nacionales la que aceleró el etnocidio. Este inmenso universo multicultural, multiétnico y plurilingüe, con diferente grado de contacto con el mundo occidental local, se agrupa social y culturalmente en cerca de 400 pueblos indígenas, cada uno con una cultura y una lengua diferentes, aunque en algunos casos el impacto con el mundo global ha reducido su capacidad de reproducción cultural, sobre todo por la reducción progresiva de sus miembros. De esos 400 pueblos, unos 230 viven en la Amazonia brasileña, con una alta concentración en los Estados brasileños de Amazonas y Pará y una población censada de 700.000 individuos. UNA MADRE en cuarentena por hepatitis en el HOSPITAL CASA DEL INDIO DEL YAVARÍ,
en Atalaya, Brasil, en una fotografía de José F. Ferrer tomada en 2007.
rra, pero en general indiferentes al irrespeto hacia los derechos humanos fundamentales de esos pueblos. Frente a estos problemas, los pueblos indígenas se han ido uniendo y organizando en formas nuevas, siempre sobre una base étnica, para tratar de sobrevivir cultural y lingüísticamente, sin por ello negarse a tener relaciones con el mundo occidental. La apuesta, dentro de un mundo cada vez más globalizado, es la de mantener la propia identidad, aunque necesariamente articulada con HOY, LOS PUEBLOS INDÍGENAS SE VAN ORGANIZANDO EN la de los otros, pero en el FORMAS NUEVAS SOBRE UNA BASE ÉTNICA, PARA TRATAR respeto de la diversidad DE SOBREVIVIR SIN CORTAR CON EL MUNDO OCCIDENTAL cultural de cada uno. ■ locales, lo que implica una presión constante hacia la transculturación, impulsada por intereses económicos foráneos, desde los terratenientes ganaderos que ocupan o aspiran a ocupar las tierras indígenas, hasta los mineros legales e ilegales, que buscan oro en sus ríos. Frente a estos invasores, los Estados nacionales tienen políticas diferenciadas, llegando en algunos casos a reconocer el derecho indígena a la tie-
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JOSÉ SOLANO Y BOTE.
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La leyenda que acompaña al retrato menciona su expedición al Orinoco y su participación en el Tratado de Límites, Madrid, Museo Naval.
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DESEMBOCADURA
del Orinoco, en un mapa holandés de 1625 de la costa de Guayana, que sitúa El Dorado junto a la inexistente laguna de Parime.
LA EXPEDICIÓN DE LÍMITES AL ORINOCO
EN EL SIGLO XVIII, MADRID Y LISBOA ACORDARON DELIMITAR CON PRECISIÓN SUS TERRITORIOS EN AMÉRICA. MANUEL LUCENA GIRALDO ESTUDIA LAS DOS EXPEDICIONES ESPAÑOLAS QUE SE ADENTRARON EN LA SELVA TRAS LA QUIMÉRICA META Y NARRA LOS PADECIMIENTOS QUE EMPUJARON A SUS PROTAGONISTAS HASTA EL BORDE MISMO DE LA LOCURA l 20 de abril de 1758, el capitán de fragata José Solano y Bote dirigió una carta al ministro de Estado español Ricardo Wall desde la remota aldea de Raudales, situada junto al río Orinoco. Confiado en la relevancia del papel que le había tocado desempeñar en la apertura de la frontera selvática venezolana, ya que la mención a sentimientos persona-
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les estaba fuera de lugar, se atrevió a transmitirle sus padecimientos con sinceridad. Tras participar en acciones bélicas en el Mediterráneo y en misiones de espionaje en Gran Bretaña junto al célebre Jorge Juan, aquella era una mala jugada del destino. Según indicaba en la misiva, “las indispensables incomodidades de estos desiertos necesitan de una robustez grande, acompañada de un máximo deseo de merecer para superarlas y no sentirlas, a fin de que la flaqueza no tuerza el juicio. Conviene un de-
seo grande de gloria, porque no hay esperanza de hallarse El Dorado, y sí muchas de sufrir intemperies. Conviene, en fin, estar todo fuera de sí, para estar en todo lo que se tiene entre manos y hacer algo”. Solano sabía lo que decía, pues personificaba como pocos la figura del expedicionario científico que debía servir a la monarquía española en un medio hostil, en este caso las remotas selvas americanas. Junto a sus compañeros, representaba en plena Amazonia la ansiedad expan- ➳
MANUEL LUCENA GIRALDO. INVESTIGADOR DEL CSIC, EDITOR CIENTÍFICO DEL ATLAS DE LOS EXPLORADORES ESPAÑOLES.
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LA ÚLTIMA F RO N TE RA
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➳ sionista de una EuLOS COMISIONADOS ESPAÑOLES Y PORTUGUESES ropa imperial triunfante. DEBÍAN DIVIDIR LA SELVA ENTRE SURINAM Y URUGUAY Y A la vez, los valores del PONER SEÑALES EN LUGARES “DE ETERNA RECORDACIÓN” tiempo de las luces: cosmopolitismo, compasión, deseo de colaboración con otras gadas de trazar la línea divisoria en un militar Eugenio de Alvarado y los masector acordado de antemano. rinos Antonio de Urrutia y el menculturas y humanidades. cionado José Solano. También fueEs posible que en esta ambivalencia resida buena parte del interés y LA EXPEDICIÓN AL ORINOCO, 1754- ron contratados cosmógrafos, médifascinación que despiertan unas em- 1761. Según indicaban las instruc- cos, cirujanos, dibujantes, un instrupresas como las expediciones de lími- ciones, además de trazar el límite mentario y el botánico sueco Pedro tes, muestra de un ejercicio de po- en el Amazonas, los expedicionarios Loefling, discípulo de Linneo. Tras der entre despótico e irreal. españoles debían atender cometidos cuatro años de preparativos, la expesecretos, expulsar a holandeses y dición partió de Cádiz el 15 de fefranceses de Guayana, y estudiar la brero de 1754. El 9 de abril llegaron LÍMITES Y FRONTERAS SELVÁTICAS. Hubo dos grandes ciclos de delimi- canela, el cacao y la quina, para poner a Cumaná, en el oriente venezolano, que era el punto de partida tación que afectaron a la para dirigirse al Amazonas, Amazonia, relacionados con donde esperaban su llegada, la ejecución del Tratado de en la remota aldea de Mariuá, Madrid (1750) y el prelimilos comisarios portugueses. nar de San Ildefonso (1777). La muerte del ministro de En el primer caso, los pleniEstado José de Carvajal y las potenciarios señalados por rivalidades internas supusielos reyes de España y Porturon graves inconvenientes, gal, José de Carvajal y Alejanpero el comisario Alvarado dro de Gusmao, llegaron a un efectuó investigaciones sobre acuerdo sobre los límites de ocupaciones de los holandelas posesiones respectivas en ses, misiones capuchinas y diAmérica y Asia, a partir de un versas especies de quina. reparto de áreas de influenEn 1755 los expedicionacia, el Amazonas para Porturios lograron llegar a Guayana, gal y El Plata para España. pero hasta febrero del año siLa controvertida línea diguiente no atravesaron los pevisoria debía ser llevada a la ligrosos raudales de Atures y práctica por “comisarios inMaipures. La muerte de Loeteligentes”, que visitarían fling en las misiones de Carola “raya” selvática para poner ní, seguida por la deserción de señales en lugares “de etersus discípulos, implicó que las na recordación”. La inmentareas naturalistas quedaran sa extensión del espacio a reinterrumpidas, aunque hacorrer, desde Surinam al bía logrado describir la primeUruguay por el interior del ra flora linneana del Nuevo continente, no pareció un Mundo. obstáculo a unos ministros La situación era tan preoque tuvieron como modelo la cupante que en febrero de Paz de los Pirineos, firmada UNA LIANA se enrosca en un tronco, en una acuarela de 1757 Solano viajó por el río entre España y Francia en Debret. La expedición española al Orinoco logró describir Meta hacia la capital del vi1659. la primera flora linneana del Nuevo Mundo. rreinato de Nueva Granada, Pero el Bidasoa obviamente no era el Amazonas y se impuso en marcha su producción comercial Santafé de Bogotá, donde logró aula división en dos grandes expedicio- en el menor tiempo posible. La di- xilio del virrey José Solís. Cuando nes, al norte y al sur del continen- rección de la expedición fue enco- retornó la situación no podía ser peor, te, a Venezuela y Paraguay. Cada una mendada al capitán de navío José de pero la llegada de dinero, víveres y rese dividió en partidas, formadas en Iturriaga. Éste poseía una amplia ex- fuerzos permitió el relanzamiento de número similar por españoles y por- periencia en Venezuela, ya que había la empresa. Hasta su retirada defitugueses. Constituidas por comisa- sido director de la Real Compañía nitiva en 1761, la actividad fue desbordante. Destacaron las exploraciorios, astrónomos, geógrafos, dibujan- Guipuzcoana. tes y personal de tropa, fueron encarLos otros tres comisarios fueron el nes del Alto Orinoco y río Negro y
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PEDRO LOEFLING. El
botánico sueco, discípulo de Linneo, que acompañó a la expedición española, murió en las misiones de Coroní. LA ESMERALDA, EN EL ALTO ORINOCO, VENEZUELA, por
pó en el reconocimiento de la boca del Apaporis y el río de los Engaños. Mientras su esposa –obligada como única blanca a bailar con su marido y con los comisarios portugueses en los natalicios reales– además de sus hijos, que le acompañaban, eran presa del abatimiento y la locura, tuvo tiempo y coraje para levantar mapas, enfrentarse a los portugueses, efectuar observaciones astronómicas y llevar al límite la capacidad de racionalización occidental, hasta sepultar el último tabú, el canibalismo. En su diario de viaje, Requena anotó: “La mala costumbre que tienen los infieles de estos ríos en alimentarse de sus prisioneros (es) vicio que deben frecuentarlo más por necesidad que por gula, vista la falta de carne que tienen en estos ríos”. El reflejo político de estos planteamientos de explorador transformado (y trastornado) por LA COMISIÓN DEL MARAÑÓN, 1781la Amazonia fue su propuesta de que 1804. Según indicaba el tratado en la Corona española considerara una su artículo XXII, la línea divisoria sealianza con los indígenas para lograr ría fijada en América por comisarios la consolidación de esta última fronteprácticos nombrados al efecto, que ra imperial. Pronto el embuste de la decimonóni“LA MALA COSTUMBRE DE LOS INFIELES DE ESTOS RÍOS ca “selva virgen” acabaría DE ALIMENTARSE DE SUS PRISIONEROS ES VICIO QUE con aquel sueño de enDEBEN FRECUENTAR MÁS POR NECESIDAD QUE POR GULA” tendimiento. ■ la consolidación de nuevas fundaciones en el Orinoco y el Amazonas, como Ciudad Real, Real Corona, San Fernando de Atabapo y San Carlos de Río Negro, muchas de ellas aún existentes. Aquel mismo año, la firma del tratado anulatorio de El Pardo canceló el arreglo de 1750 e impuso la vuelta al antiguo estado de cosas. Las disputas fronterizas degeneraron en una guerra no declarada. Esta se hizo oficial en 1776, pero al año siguiente los ministros de Estado de España y Portugal, el conde de Floridablanca y Francisco de Sousa Coutinho, concluyeron el tratado preliminar de San Ildefonso. A pesar de su carácter temporal, constituyó el último acuerdo hispano-portugués que reguló los límites de las posesiones respectivas en la Amazonia.
debían ser gobernadores de las fronteras o personas designadas por ellos “de conocida probidad, inteligencia y conocimiento del país”. En el sector que iba desde Guayana a la actual Bolivia, correspondió al gobernador de Mainas e ingeniero militar Francisco de Requena dirigir la llamada “comisión del Marañón”, compuesta además por el capitán criollo Felipe de Arechua, capellán, cirujano, secretario y tropas e indígenas de escolta. La partida de Quito tuvo lugar en enero de 1780 y la llegada a Tabatinga, en pleno Amazonas, se efectuó dos meses después. En aquella localidad, Requena y sus compañeros empezaron a sufrir una interminable serie de desventuras. Los portugueses pidieron la entrega de los fuertes españoles de San Carlos, San Felipe y San Agustín, en río Negro. En todo caso, se instalaron en Tefé, y en febrero de 1782 procedieron a explorar el río Japurá. Requena estaba enfermo, no tenía astrónomo y carecía de víveres y embarcaciones, pero partici-
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Schomburgk, en Twelve Views in the Interior of Guiana .
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LOS RIESGOS A CORTO PLAZO
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EL PULMÓN DEL PLANETA, AMENAZADO EN LA INMENSA RIQUEZA ATESORADA POR LA CUENCA AMAZÓNICA RESIDE EL PELIGRO DE SU RÁPIDA DESAPARICIÓN.
LUIS PANCORBO ALERTA DE LA VORACIDAD CON QUE LAS MADERERAS, LAS PETROLERAS Y LA AGRICULTURA INTENSIVA ESTÁN VOLATILIZANDO LA MAYOR RESERVA NATURAL DE LA TIERRA Y EXPULSANDO A SUS HABITANTES ORIGINARIOS
AS
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CARRETERAS
abren cada vez más venas marrones en la Amazonia. Seguidamente, las motosierras abaten árboles fantásticos y las petroleras hacen sus agujeros, queman gas y sus penachos son como el anuncio de otros incendios. Más pastos y cultivos salvajes, carne para hoy y hambre de ecología para mañana. Por eso hay quien pretende, sobre todo en Estados Unidos, internacionalizar la Amazonia, es decir, arrebatársela a los países amazónicos en bien de la Humanidad. Pero como ya decía en el año 2000 Cristovam Buarque, ministro
brasileño de Educación: “Internacionalicemos también las reservas de petróleo del mundo entero”. Ylas finanzas, y los museos... Ysi la solución consiste en internacionalizar las reservas forestales a cambio de deuda, ya lo decía Buarque: “... internacionalicemos a los niños, sin importar el país donde nacieron...”. Y es que en el tema amazónico se impone la lógica del matapalo, un árbol que estrangula a otro en el que se apoya, consiguiendo llegar a la luz, o a la vida. Hace un par de décadas, algunos pudimos conocer fragmentos no desboscados de la Amazonia, surcando ríos de color cacao para llegar a poblados remotos. Cierto que no puedes ver gran cosa en una canoa, atrapado entre los corLUIS PANCORBO. PERIODISTA Y ESCRITOR.
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tinajes de la selva, pero oyes su clamor y entiendes su magnitud valorando la sabiduría del indio, el habitante ancestral del Amazonas, el que usa pero no abusa de su entorno. LA TRETA DEL GRILLO. Al final se ha impuesto la explotación salvaje de la Amazonia entre una guerra de cifras y de maquillajes, según sean los intereses económicos, políticos, nacionalistas, internacionalistas. Si hay que falsificar los títulos de propiedad de la tierra, se meten en una caja de cartón donde se llenan de excrementos de grillos para que parezcan antiguos: de ahí vienen los grileiros, famosos por su explotación legal de la Amazonia brasileña.
JAMES CAMERON,
el director de la ecológica Avatar , abraza a un indio del río Xingú, en una gira por Brasil en marzo de 2010, a favor de preservar la Amazonia.
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No hay sombra de concordia en este asunto. Unos sostienen que se exagera la destrucción amazónica y otros creen que no se denuncia lo suficiente. Unos ponen por delante el beneficio de las compañías explotadoras, y los propios gobiernos amazónicos defienden que hay que repartir la tarta amazónica entre una población marcada por la pobreza, desde Brasil a las Guayanas, y desde Colombia a Bolivia. No faltan quienes postulan que la Amazonia es de todos y ahí se inserta la célebre imagen del pulmón del mundo: nadie tiene derecho a herir ese órgano vital, pues hacerlo lleva a la pérdida de especies de animales y plantas, y contribuye al calentamiento global. Ymás miserias siguiendo la lógica del matapalo: que sobreviva el más depredador. Lástima que en la Amazonia
no se den los ents, los árboles parlantes que describe Tolkien (En los bosques de Fangorn), para dar su punto de vista. Los árboles de la Amazonia mueren en silencio; otra cosa es el tumbo que producen al caer. Entre julio de 2008 y agosto de 2009 han desaparecido 7.464 kilómetros cuadrados de selva amazónica entre la tala y los incendios, según el diario Le Monde. Brasil ocupa el 72,6 por ciento de la cuenca amazónica y el 60 por ciento de la pura selva –a mucha distancia del siguiente país amazónico, Perú, con un 11,1 y un 12,9 por ciento, respectivamente. Cuando en 2010 Lula da Silva se despidió de la presidencia de Brasil, dejó a su país en crecimiento, pero con muchas sombras sobre su política amazónica. Se va a construir la presa hi-
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droeléctrica de Belo Monte, la tercera más grande del mundo, en Pará. Brasil necesita energía para seguir creciendo, pero la selva necesita respirar, y los indios que no les muevan de sitio, y menos por las malas. Ambos parámetros son difícilmente conciliables: Belo Monte inundará 500 kilómetros cuadrados de tierras y desplazará a 50.000 indios. Adiós, también, a raras especies de peces del Xingú como el zebra pleco o la rara piraña comedora de plantas (Ossubtus xinguense). TODO POR EL ALUMINIO. Todo es por el aluminio que se fabricará allí pese a la protesta de Erwin Kräutler, obispo del Xingú, y ganador del Right LivelihoodAward, Premio Nobel alternativo, en diciembre de 2010. Tampoco James Cameron, director de Ava- ¸
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ENEMIGOS DE LA SELVA 1. TALA. Un leñador brasileño marca troncos para hacer un inventario en Itacoatiara. 2. EXPULSIONES. La presa hidroeléctrica de Belo Monte expulsará de sus tierras a más de 50.000 indios. En la imagen, indios Cinta Larga, en Rondonia. 3. HIDROELÉCTRICAS. La misma presa inundará 500 km cuadrados de tierra. En la imagen, Lula firma el contrato de construcción, en agosto de 2010. 4. QUEMA. Entre julio de 2008
y agosto de 2009 han desaparecido 7.464 kilómetros cuadrados de selva amazónica, entre la tala y los incendios. 5. PETRÓLEO. El petróleo derramado por la compañía Texaco en Ecuador forma un lago negro. 6. SOJA. Desde 1990, su cultivo ha crecido hasta ocupar ocho millones de hectáreas. 7. AGRICULTURA EXTENSIVA.
El aceite de palma también invade la selva. En la foto, muelle de embarque en Santarem.
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➳ tar, ha logrado en sus mítines por la zona imponer el mensaje de sus idílicos hombres del planeta Pandora, azules y con cola, que tanta subida de autoestima han dado a muchos indígenas del planeta. El Brasil oficial lo ignoró. Lula da Silva, antiguo líder del Partido de los Trabajadores, terminó recubierto de conchas de realpolitik amazónica, la que sostiene que la selva es demasiado grande para dejarla sola. Una medida protectora, como la demarcación de once millones de hectáreas en Raposa Serra do Sol, se enfrentó a grandes dificultades. Los arroceros se tenían por dueños del lugar y hasta 2009 el Tribunal Supremo Fe-
las compañías, facilitado por seis leyes de 2007-2008 sobre explotación minera, hídrica y forestal. Pasado el impacto de la matanza, se volvió a la lógica del matapalo y a la voracidad de la piraña, si se prefiere una imagen del mundo animal. Organizaciones en defensa de los indígenas, como Survival International, denuncian el peligro de aniquilamiento que se cierne sobre los indios aislados de los lotes 39 y 67 de la Amazonia peruana. No por eso las petroleras dan carpetazo a sus pozos, oleoductos y residuos. Una música de destrucción que, con apenas distinta letra, se escucha en Colombia y Ecuador. Las explotaciones petroleras en la zona
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cuyo consumo en 2008 superó al de la gasolina. No importa si hay que mezclar etanol con gasolina (gasohol). Ni que muchos coches de etanol necesiten gasolina para el arranque en frío. Además, toda selva parece poca para plantar palmeras. El aceite de palma sirve para cocinar, lubricar vehículos y en cosmética. Uno de los proyectos que Lula impulsó hasta el final de su mandato, con 60 millones de dólares, fue el Programa para la Producción Sostenible de Aceite de Palma. No siempre se plantan palmeras de aceite en tierras deforestadas, sino en tierras degradadas, o incluso en las que anteriormente estuvieron dedicadas a caña de azúcar y pastos para el LAS PETROLERAS AVANZAN EN PERÚ, COLOMBIA, ECUADOR. ganado. Pero en todo el mundo grandes tajadas de EL RÍO ES VÍCTIMA DE QUIENES DESEAN PALIAR LA FALTA bosque húmedo tropical se convierten en bosques DE COMBUSTIBLES FÓSILES CON CULTIVOS MASIVOS de palmeras de aceite. La deral de Brasil no admitió el derecho del Yasuní ecuatoriano son otro ejem- Amazonia no es la excepción. Sin olvidar la soja. Desde 1990, este prioritario de los 19.000 indígenas a vi- plo de cómo ignorar la preservación cultivo ha crecido hasta ocupar más de vir allí. Finalmente, una gota de jus- de la selva y sus moradores. ocho millones de hectáreas amazóniticia en un mar verde que peligra. Ahí está, afilando sus cuchillas, el Plan de ZWEIG SUEÑA CON ORELLANA. Cuando cas. Primero se abren carreteras, se abaAceleración del Crecimiento (PASC)) era niño en Austria, el escritor Stefan te cuanto verde haya por delante y endel gobierno brasileño que, con su Zweig soñaba al oír el nombre de Ore- tran los agricultores a gran o pequeña despliegue de hidroeléctricas, carre- llana, el héroe que descendió el Ama- escala. Se termina poniendo soja y deteras y demás, amenaza al 30 por cien- zonas, “la aventura más memorable”. saparecen las bromelias del dosel, exto de las tierras de los indígenas. Zweig, que acabó refugiándose en Bra- presión de todo un sistema bello, frágil Sin embargo, es Ecuador quien tie- sil para escapar de la barbarie nazi, acu- y sofisticado. En las bromelias anidan ne el récord de la deforestación amazó- ñó una frase demoledora: “La mayor las ranas arborícolas que parecen penica, con un 1,7 por ciento de tala fren- parte del Brasil pertenece a una ge- queños jaguares con su piel moteada. te al 0,6 de Brasil. Aese ritmo, en 2070 neración futura”. Siendo ese concep- A este paso ni siquiera podrán reivinno quedará selva en Ecuador. Ni en to tan nocivo contra los indios y la eco- dicar en silencio el derecho a vivir su 2150 habrá Amazonia con tal frenesí logía, viene a ser como el abc de lo que fantástica cuota de biodiversidad. ■ destructor. Según la FAO (Organiza- ocurre en la Amazonia. Hay prisa por ción de las Naciones Unidas para la tumbar árboles, otra cosa son los tópiGONZÁLEZ OCHOA, J. M., Quién es Agricultura y la Alimentación), cada cos al respecto. La deforestación no quién en la América del año desaparecen 80.000 kilómetros es el principal motivo por el que en cinDescubrimiento, Madrid, Acento, 2003. cuadrados de selva en el mundo, algo cuenta años se haya perdido el 17 por LATHRAP, D., El alto Amazonas, Lima, como toda Austria. Pues bien, el 53 por ciento de la selva. Entre el 65 y el 70 Instituto Cultural Runa, 2010. ciento de esa pérdida se produce en por ciento de esa pérdida se debe a la LUCENA GIRALDO, M., Laboratorio tropical. la Amazonia, a razón de 1.350 metros ganadería. Luego viene la agricultura La expedición de límites al Orinoco, 17541761, Madrid, CSIC, 1993. cuadrados deforestados por segundo, lo de subsistencia, o de tala y quema, que MORCOTE RÍOS, M. G.; MORA CAMARGO, S., que corresponde a la superficie de un supone el 20-25 por ciento. La agriculY CALVO, F. C. (eds.), Pueblos y paisajes campo de fútbol cada siete segundos. tura a gran escala, el 5-10 por ciento. La antiguos de la selva amazónica, Bogotá, Es la clásica imagen que suele golpear tala, legal e ilegal, el 2-3 por ciento. Y Universidad Nacional de Colombia, 2006. MUÑIZ, M., Orellana, el tuerto del Amazonas, las conciencias, aunque eso se acalla en- fuegos, minería, construcción de carreMadrid, Aldebarán, 1998. seguida si hay un partido de fútbol. teras y presas..., el 1-2 por ciento. VACHERÓN, F., Y BETANCOURT, G., Lenguas En mayo de 2009 las revueltas inPero la Amazonia es víctima hasta de y tradiciones orales de la Amazonia. ¿Diversidad en peligro?, La Habana, UNESCO dígenas contra la explotación salvaje de quienes quieren remediar la escasez de y Casa de las Américas, 2006. la Amazonia peruana arrojaron un sal- combustibles fósiles con cultivos maVV AA, Atlas de los Exploradores españoles, do de 34 muertos. En un primer mo- sivos. En Brasil es una prioridad semBarcelona, Planeta-Sociedad Geográfica mento pareció paralizarse el avance de brar caña de azúcar para hacer etanol, Española, 2009.
