harpias: n la mitología griega, la harpía simbolizaba los aspectos más destructivos y negativos de la femineidad. Poseía cabeza y torax de mujer, pero alas y patas de buitre. Podía controlar los vientos así como causar tormentas y remolinos. Se la consideraba también la causante de la muerte súbita. Literalmente el nombre Harpía puede traducirse como “las que arrebatan”. De naturaleza maléfica personificaban la fuerza de los elementos devorando ferozmente cuanto encontraban a su paso. Chillaban espantosamente transformándolo todo en excrementos. Algunos autores las consideraban demonios. Eran representadas de manera diversa pero respondiendo a un patrón similar: una combinación de mujer y ave. En su Teogonía, Hesíodo las retrata como deidades aladas de larga y suelta caballera, más veloces que el viento y los pájaros. Para Virgilio, eran aves de rostro femenino, garras encorvadas y un inmundo vientre.
gorgona Las gorgonas son monstruos femeninos de la mitología griega cuyas características difieren de acuerdo a las diferentes versiones. A menudo las representaban como figuras de mujeres con alas de oro, manos y uñas de bronce, largos colmillos y cabeza cubierta de escamas como las de las serpientes, al tiempo que sus vestidos también se hallaban ceñidos por un cinturón de sierpes. Según Homero, hay una sola Gorgona y es un espectro del reino del Hades. Perro de acuerdo a la descripción de Hesíodo, las Gorgonas son tres: La Medusa, Esteno y Euríale. En este caso, se las describe como deidades marinas aladas y ceñidas por serpientes.
grayas:
Personifican la vejez. Hijas de Forcis y Ceto. Por ser hijas de Forcis también son llamadas Fórcides. Forman parte de las divinidades preolímpicas junto sus hermanas las Gorgonas. Son tres hermanas que nacieron con el pelo gris, un solo ojo y un solo diente para las tres, que utilizaban por turnos. Se llaman Enio, Pefredo y Dino. Vivían en el occidente extremo y su misión era vigilar el camino que conducía a la morada de la Gorgonas.
La esfinge es un híbrido de la mitología griega cuyos antecedentes se remontan a la religión egipcia y a ciertas representaciones de Medio Oriente, especialmente de Asiria y Babilonia. En la versión griega, la esfinge tiene cabeza y pechos de mujer, cuerpo y pies de león y alas de pájaro. Los egipcios la representaron con un león echado sobre su vientre con las patas delanteras extendidas y cabeza de hombre. Entre los asirios y los babilonios podía adoptar indistintamente forma de un león con busto y cabeza de nombre como la de una leona con cabeza y busto de mujer
equidna:
Era una monstruosa ninfa, considerada descendiente de Forcis y Ceto o de Tártaro y Gea según la fuente. Era una dragona a veces llamada Drakaina Delphyne, descrita por Hesíodo en su Teogonía como un monstruo femenino, madre con Tifón de todos los monstruos importantes de los mitos griegos. Tenía el rostro de una bella mujer de temibles ojos oscuros pero cuerpo de serpiente. Cuando ella y su compañero Tifón atacaron el monte Olimpo, Zeus los derrotó, pero les permitió seguir viviendo, así como a sus hijos, como desafío para los héroes futuros. Moró desde entonces en una cueva del país de los Arimoi, un remoto lugar desértico situado en Asia Central, probablemente Siria
Escila es descrita como un monstruo con torso de mujer y cola de pez, así como con seis perros partiendo de su cintura con dos patas cada uno, haciendo un total de doce; según otras versiones, sería un ser con seis largos y serpentinos cuellos con cabezas grotescas, mientras que sus doce patas serían de otra naturaleza; finalmente, según otras fuentes, compartiría algo de ambas descripciones. Sin embargo, se dice siempre que poseía en cada cabeza tres apretadas hileras de afilados dientes, así como que emitía un aullido similar al de un perro. Este ser habitaba en un estrecho paso marítimo, en el lado opuesto a su contraparte Caribdis. Los lados del canal estaban dentro del alcance de una flecha, de modo que los barcos que intentasen evitar a Caribdis deberían acercarse a Escila, y viceversa. Con el tiempo fue transformada por los dioses en una roca, aún existente, que suponía graves peligros para los navegantes.
Banshee: La Banshee es un espíritu femenino de la mitología irlandesa, por lo general visto como un presagio de la muerte y un mensajero del Otro Mundo. La historia del frijol-sidhe comenzó como un hada lamentándose por la muerte de sus personajes queridas. En las historias más tarde, la aparición del alma en pena podía predecir la muerte. Según la leyenda, el banshee puede aparecer en una variedad de formas. Muy a menudo aparece como una bruja fea, aterrador, pero también puede aparecer como una mujer increíblemente hermosa de cualquier edad que se adapte a ella y se ve lavar la ropa manchada de la sangre o la armadura de los que están a punto de morir. Aunque no siempre se ve, su llamada se escucha a lo lejos, por lo general de noche, cuando alguien está a punto de morir y por lo general alrededor de los bosques.
(cuando estabamos en el cementerio aparece y nos guia- me guia a mi porque desconfia de los hombres e ignoraba al chico que me acompañaba. el me tenia que decir a mi y yo repetirlo)
furias: Son la personificación de la venganza y del antiguo concepto del castigo. Su misión era castigar los crímenes humanos. Nacieron del esperma y la sangre que cayeron sobre Gea cuando Crono castró a Urano. Son deidades primitivas que no reconocen, en analogía con las Moiras, la autoridad de los dioses Olímpicos. Eran tres: Alecto, Tisífone y Megara. Moraban en el Érebo (las tinieblas infernales) y se las representaba como demonios femeninos alados, el pelo lleno de serpientes y con un puñal en una mano y una antorcha o un látigo en la otra. Comparadas a menudo con perras, perseguían sin descanso a sus víctimas hasta volverlas locas. Cuidan de que se prolongue el orden religioso y cívico, castigando con especial atención el asesinato y los crímenes contra la familia. La Futa-kuchi-onna es una criatura de la mitología japonesa. Es una mujer que está afectada por una maldición convertida así, en Yōkai (aparición, espíritu o demonio). Futakuchi-onna significa “mujer de dos bocas” y de esta manera es representada, con una boca regular y otra extra en la nuca, incrustada en el cráneo, debajo del cabello. La boca en la parte posterior de la cabeza pronuncia insultos y demanda alimentos a la mujer, si ésta no es alimentada, la boca puede dar alaridos que causan un tremendo dolor en la mujer que padece la maldición. La Futa-kuchi-onna tiene la habilidad de mover sus cabellos como si fueran tentáculos, lo cual le sirve para alimentar a su segunda boca. Usualmente esta maldición se atribuye a mujeres que no alimentan a sus hijastros dejándolos morir, mientras sí proporcionaban un buen cuidado a sus hijos naturales. El espíritu del niño abandonado, se instala en el cuerpo de la madrastra para tomar venganza y así la mujer es transformada en el yōkai Futa-kuchi-onna. Otras veces se atribuye la maldición a mujeres que no comen, entonces la boca en la parte posterior de su cabeza se alimenta por ambas bocas comiendo el doble.
Las amazonas son en las mitologías clásica y griega una antigua nación formada por mujeres guerreras, posiblemente con base histórica. Fueron reinas amazonas notables Pentesilea, que participó en la Guerra de Troya, y su hermana Hipólita, cuyo cinturón mágico fue objeto de uno de los doce trabajos de
Hércules. Las amazonas solían representarse en el arte clásico batallando con guerreros griegos en amazonomaquias. En la historiografía griega y romana hay diversos relatos de asaltos de amazonas en Asia Menor. Las amazonas fueron asociadas con varios pueblos históricos durante la antigüedad tardía. A principios de la Edad Moderna el término pasó a aludir a las mujeres guerreras en general. Las amazonas copulan únicamente con extranjeros a quienes matan luego de ser fecundadas y sólo crían a las hijas, mutilando y matando a los hijos varones.
ondina: En la mitología germánico-escandinava, se llamaban ondinas a las ninfas acuáticas de espectacular belleza que habitaban en los lagos, ríos, estanques o fuentes. Su formación transcurre en las mismas condiciones que las de cualquier ninfa, pero normalmente son fuerzas elementales del agua las que dan vida al cuerpo femenino. Tienen su correspondencia en las Náyades de la mitología griega. Las ondinas son criaturas muy alegres y traviesas, y se dice de su risa que es capaz de hechizar a los viajeros que se encuentran con una ondina, hasta el punto de perder la voluntad. Se divierten jugando con los humanos que andan cerca, y muchas veces mueven las aguas provocando unas enormes corrientes, y así continúan hasta que ahogan al pescador o viajero, acontecimiento que les resulta muy divertido. Una antigua leyenda cuenta que las ondinas no tienen alma, y que si encuentran una pareja humana con la que tener un niño encuentran también un alma, aunque a partir de ese momento el dolor y el sufrimiento son más intensos.
Selkie es un vocablo de tradición celta que significa 'foca', por lo tanto, las sealkies también son conocidas como 'hadas focas'. Según las leyendas, las sealkies habitan las costas de Escocia y pueden deshacerse de su piel de foca para transformarse en bellas mujeres: Si un
humano encontrase la piel abandonada, podría esconderla y obligar al selkie a casarse con él. Sin embargo, si el selkie encontraba su piel, inmediatamente volvería a tomar forma humana y regresaría al mar de donde vino, dejando a su cónyuge e hijos en tierra llorando por siempre su pérdida.
Yama-uba es una criatura maliciosa que parece una vieja mujer, generalmente horrible. Su pelo es blanco largo y de oro, y su kimono (generalmente rojo) es asqueroso y hecho andrajos. Se dice que a veces, su boca, cubre la anchura entera de su caray algunas pinturas le dan una segunda boca en la tapa de su cabeza. Ella puede cambiar su aspecto, y utiliza esta táctica para el éxito de capturar a sus víctimas.
(en japon)
ojancana En la mitología cántabra. La ojáncana también llamada "la novia del ojáncano" por las pérfidas maldades que tiene con él en común, es una gran criatura humanoide y de terribles rasgos físicos: carichata y macrocéfala, adornada con greñas de cabello oscuro, sucio y alborotado. Con enormes y retorcidos dientes que surgen de su sobresaliente labio inferior imitando a los de un jabalí y con una piel escamosa y agrietada. Pero la más característica deformidad es el gran tamaño de sus pechos que caen alargados como bolsas y que puede cargarlos a la espalda, acto que suele realizar cuando caza, está enfadada o huye. Le gusta cazar los niños que se pierden por el bosque, con los que se alimenta. Primero les roba toda la sangre, para ella el más exquisito licor, y más tarde los devora a grandes dentalladas. Cuando no dispone de sus infantiles víctimas, se tiene que conformar con comer animales, que acumula en sus antros lobregos y profundos, generalmente cuevas oscuras. En los umbrales de estos lugares es donde algunos lugareños dejan carne o pan de mijo junto a cuencos de leche o sangre de animales confiando evitar sus continuas salidas de caza de hombres, niños y rebaños. Se rumorea que existen ojáncanas en numerosas cuevas de Cantabria: en la
Penilla de Cayón, Santurce de Toranzo y Cieza en Torrelavega.
La Muladona o Donamula es un ser de la Mitología catalana. Se cuenta que era una doncella que por ser irreverente y no religiosa fue maldecida por la gente de su pueblo, siendo convertida en una mula. Desde ese día sobre todo de noche, se dice que vagaría por las montañas y se uniría a grupos de arrieros que van con sus mulas. Se cree que es a causa de su presencia, las mulas se espantaban y alborotaban hasta el punto de que podían morir al precipitarse por los barrancos. Su aspecto sería semejante al de las demás mulas, pero era más chapucera; sus crines eran como cabellera de mujer y su cara, sin dejar de ser de animal, tenía un aire humano. Siempre se la representaba con las cuatro patas de mula, pero a veces, las dos delanteras nacían de un tórax situado donde una mula habría de tener el cuello. Además siempre se la representa con pechos, para dejar más clara su condición de mujer. Los arrieros daban de comer a las mulas unos panecillos con la forma de la muladona, con la creencia de que así las bestias no se espantarían cuando ella apareciera y de que harían como si no estuviera. Así y todo, durante la marcha contaban las cabezas de ganado que llevaban para evitar que la muladona se hubiese mezclado con sus animales sin que ellos se diesen cuenta y acabasen pagándolo caro.
Caribdis es un horrible monstruo marino, hija de Poseidón y Gea, que tragaba enormes cantidades de agua tres veces al día y las devolvía otras tantas veces, adoptando así la forma de un remolino que devoraba todo lo que se ponía a su alcance. Habitaba junto a Escila, otro monstruo marino, en un estrecho paso marítimo. Los dos lados del estrecho estaban al alcance de una flecha, tan cercanos que los marineros que intentaban evitar a Caribdis pasaban demasiado cerca de Escila y viceversa. La expresión «entre Escila y Caribdis» ha llegado a significar estar entre dos peligros de forma que alejarse de uno hace que se caiga en el otro. Caribdis fue originalmente una ninfa marina que inundó la tierra para ampliar
el reino submarino de su padre, hasta que Zeus la transformó en un monstruo. En cuanto remolino es uno de los más famosos en la literatura junto al Maelstrom.
Baba Yaga Personaje recurrente en la mitología rusa. Se trata de una vieja huesuda y arrugada, de nariz azul, y dientes y pechos de piedra. Come personas, generalmente niños, a los que desgarra con los dientes y destroza a golpes contra sus pechos. Adorna la valla de su casa con los cráneos de sus víctimas, en cuyo interior coloca velas. Sin embargo, a pesar de estos rasgos crueles, ayuda a la gente que la sirve.
lamia Las lamias son seres fantásticos de género femenino que pertenecen al cuerpo de los mitos grecolatinos. En la mitología griega, Lamia era una reina de gran belleza que habiendo causado los celos de Hera (esposa de Zeus) fue transformada en un ser monstruoso que, cuando estaba despierto tomaba forma de dragón o un gran reptil con rostro humano. En este estado, se dedicaba a la caza de niños y jóvenes En la versión latina, las lamias eran criaturas provenientes de África. De la cintura para arriba eran mujeres hermosas, pero a su bajo, eran serpientes. Las lamias no podían hablar y se expresan mediante silbidos melodiosos. Solían atraer a los viajeros para devorarlos. Las lamias son el símbolo de los celos de la mujer sin hijos driades En la mitología griega, las Dríades son las ninfas de los robles en particular y de los árboles en general. Surgieron de un árbol llamado «Árbol de las Hespérides». Algunas de ellas iban al Jardín de las Hespérides para proteger las manzanas de oro que en él había. Las dríades no son inmortales, pero pueden vivir mucho tiempo. Entre las más conocidas se encuentra notablemente Eurídice, la mujer de Orfeo y Dafne que fue persiguida por Apolo y los dioses la convirtierón en árbol de laurel.
La tradición tardía distingue entre Dríades y Hamadríades, considerándose las segundas asociadas específicamente a un árbol, mientras las primeras erraban libremente por los bosques. cecaelia: Es un ser mitológico que aparece, que combina la cabeza, los brazos y el torso de una mujer y, desde la parte inferior del torso hacia abajo, los tentáculos de un pulpo o calamar, al estilo de una sirena o demonio del mar. Otros términos comunes utilizados son "pulpo-sirena", "octo-sirena", "octohumano", y variantes del mismo. Si bien el término más amplio de sirena (Latín "doncella del mar"), puede aplicarse también, cecaelia son generalmente considerados una especie no relacionada a las sirenas. Además, frecuentemente cecaelia se conocen como "brujas del mar".
Leannan-sidhe o “hermosa hada” tiene algunos puntos de contacto con el mito del vampiro. Se trata, como su nombre lo indica, de una bella hada que toma un amante de entre los vivos, se casa con él y lo atrae al mundo de los muertos para que viva allí con ella. A veces, puede cambiar de forma y presentarse como una cierva blanca.
El Rokurokubi es un yōkai (aparición, espíritu o demonio) que se encuentra en el folclore japonés. Durante el día parecen seres humanos normales, pero por la noche que adquieren la habilidad de estirar su cuello para grandes longitudes como una serpiente. También puede cambiar su rostro al de un espantoso oni (ogro japonés), para asustar mas a los mortales. En su forma humana durante el día, los rokurokubi suelen vivir desapercibidos y pueden tener incluso cónyuges mortales. Muchos rokurokubi están tan acostumbrados a llevar una vida normal que hacen lo imposible para guardar su condición sobrenatural en secreto. Pero son embaucadores por naturaleza, y tienen la necesidad de asustar y espiar a los seres humanos que les es difícil de resistir. Algunos rokurokubi solo se muestran a los humanos cuando están borrachos, drogados o ciegos para poder satisfacer esta tentación sin que sepan quienes son. Otros no se preocupan de guardar el secreto y asustan a cualquiera sin que les importe que los reconozcan. Se dice que uno puede ser un rokurokubi sin conocer su propia naturaleza,
creyendo ser seres humanos realmente, y solo se transforman en las noches mientras duermen de manera inconsciente, recordando que en sus sueños veían la habitación o de otros lugares en un ángulo extraño. Alguna vez los rokurokubi fueron seres humanos normales, generalmente mujeres, pero fueron transformados por el karma para romper diversos preceptos del budismo. A menudo, estos rokurokubi son verdaderamente siniestros, ya que se comen a la gente o beben su sangre en lugar de limitarse a asustarlas. Guaxa Personaje del folclore asturiano, se trata de una mujer vieja, arrugada por demás, con un único diente en su boca y, como consecuencia de todo ello, de aspecto comprensiblemente repulsivo. Se encuentra emparentada con los vampiros, ya que se dice que se las arregla para penetrar en las casas, aun a través de la más mínima hendija, para chupar la sangre de sus habitantes (especialmente de los niños), repitiendo sus visitas hasta que la víctima muere.
Dziwozoana o Mamuna pantano son demonios femeninos de la mitología eslava conocida por ser dañino y peligroso. La mayoría de las mujeres en riesgo de convertirse en uno de estos demonios después de la muerte fueron parteras, solteronas, las madres solteras, las mujeres embarazadas que mueren antes del parto, así como los niños abandonados. A veces llevan a hombres jóvenes a ser sus maridos. El Dziwozona tenía pechos enormes que usaban para atacar y asesinar. Las Empusas porvienen de la antigua Grecia. Se suponen hijas de Hécate, y formaban su comitiva. Estas mujeres, de cabellera en llamas, tenían una sola pierna cuyo aspecto era la de un burro, mientras que la otra era al parecer de bronce. Tenían el don de la transformación, que empleaba por lo general, para transformarse en bellas mujeres, que seducían a hombres que andaban solitarios por los caminos, para poder atacarles y chuparles la sangre y comerse también algunas partes tiernas. Se la considera protectora de caminos y paraje solitarios, atacando a los que pasaban por ellos sino le habían dado antes un tributo. Se la relaciona con las lamias y la mormolícea. La forma de evitar su ataque, parece ser que es
insultándola. En un sentido más amplio, se las consideran vampiros. En la zona de próximo Oriente, se las toma como hijas de Lilith, la primera mujer de Adan y esposa de Satanás.
La doxy es a menudo confundida con una hada, pese a que se trata de dos especies bien distintas. Como el hada, posee una diminuta figura humana, si bien la de la doxy está cubierta por un tupido pelaje negro, y tiene otro par más de piernas y brazos. Sus alas son gruesas, convexas y brillantes, muy parecidas a las de una escarabajo. Las doxis se encuentran por todo el norte de Europa y de América, pues muestran predilección por los climas fríos. Cuando llega la época de la puesta, cavan un hoyo y depositan hasta quinientos huevos; luego, los entierran. Los huevos eclosionan a las dos o tres semanas. Las dosis tiene cuatro filas de dientes afilados y venenosos. En caso de mordedura es necesario tomar un antídoto.