FAUAEM Curso Propedéutico 2010
Con los ojos de Luis Barragán
Esparza Rico Ricardo Axel
Grupo “L” Prof. Arq. Luz Adriana Muñoz
El arquitecto mexicano Luis Barragán nació en Guadalajara, Jalisco. Perteneció a una familia de buena posición económica por lo cual la educación siempre fue partea guas de su preparación académica. Estudió en la Escuela Libre de Ingenieros de Guadalajara donde de forma optativa curso algunas materias para poder conseguir al mismo tiempo la carrera de arquitectura de la cual no pudo obtener el título por haber salido del país un largo tiempo de viaje.
El video menciona que mientras viajaba obtuvo sus principales influencias y nos dice
“La función de la arquitectura debe resolver el problema material sin olvidarse de las necesidades espirituales del hombre”
que conoció el Museo de Artes Decorativas en París, en el cual algo lo dejo sumamente impresionado,
un
jardín
diseñado
por
Ferdinand Bac, a quien conoció más tarde y relaciono, así como el encuentro con el famoso arquitecto Le Corbusier, de quien logro conocer parte de su obra.
Un encuentro con culturas mediterráneas, europeas y con el mundo clásico influyeron de manera sorprendente la forma de su arquitectura, fue entonces cuando comienza a trazar su propia línea, combinando todo lo que ya conocía, aquella arquitectura popular de las haciendas y pueblos donde mucho tiempo permaneció desde su infancia y esa impresión del viejo continente.
Con una idea cultural de la arquitectura comenzó a trabajar en Guadalajara contra muchas dificultades que se devinieron tras su regreso a México. Guardando siempre su línea funcionalista logro darle un toque cultural a ese estilo que caracterizaba a Le Corbusier, pero más que funcional pretendía incorporar una palabra diferente a su obra, confortable, una característica que se ha ido perdiendo en México y que quería recuperar construyendo departamentos que invitaran a la gente a estar en ellos no a hacerlos huir.
Tal fue su éxito con esa perspectiva de trabajo que gano un lugar en la revista de de arquitectura de mayor renombre en esa época de Nueva York, comenzó a ganar fama internacional y mucho más renombre en nuestro país.
Ese estilo regional de la arquitectura vernácula en conjunto con las nuevas técnicas
y
conocimiento
de
Barragán
logran darle un giro importante a la construcción en México, sin embargo el siempre creía firmemente en el funcionamiento de la obra arquitectónica y que lo que realmente lo influenciaba era solo lo que deseaba que lo hiciera, se acercaba a ese conocimiento.
La definió la arquitectura como especulativa, comenzó a construir casas para venta esperando darle a México ese impulso que hacía falta para crecer, para modernizarse
Me he dedicado a la
y
cansado
de
ejercer
la
arquitectura manda a decir a sus clientes que
arquitectura “como un acto
deja de trabajar ese ramo, ya que considero un
sublime de la imaginación
perdida cultural muy importante cuando se
poética”… En mi se premia…
comienza a hablar de una ruptura en cuanto al
A todo aquel que persigue la
trabajo realizado, ya que el consideraba los
poesía y la belleza.
aspectos
culturales
importantes.
La
y
espirituales
arquitectura
popular,
más lo
tradicional se peleaban el progreso contra la modernidad, lo cuadrado eso lo lleva a tomar decisiones radicales.
Pensaba en la arquitectura como algo emocional, algo que surgía desde el interior y proyectaba los deseos de uno mismo, así como los gustos y las necesidades.
Desde sus proyectos iniciales, la arquitectura de Barragán se caracteriza por el empleo de algunos elementos como las fuentes, vidrios y superficies de colores, con azulejos y enrejados de madera establece
de una
colores precisa
brillantes,
y
organización
espacial mediante el emplazamiento de patios, terrazas y galerías.
A Barragán le emocionaban los espacios abiertos, los jardines, siempre preocupado por la belleza, la poesía, el atractivo de sus soluciones una vez alcanzado el nivel de funcionalidad que tanto tenía arraigado. Propone un urbanismo basado en la vegetación, el agua y la luz que juegan un papel fundamental en sus proyectos casi siempre enriquecidos con jardines, siempre fuera del ruido de la ciudad guardando ese misterio de tranquilidad en ellos.
Sus edificios y proyectos de paisaje, aunque no muy numerosos y concentrados en México, dan muestra de su enorme talento que supo conjugar el método de construcción tradicional de su país con el lenguaje de la modernidad, obteniendo resultados al mismo tiempo mexicanos e intrínsecamente universales.
Entre
sus
construcciones
más
significativas destacan la Casa Barragán en Chapala, Jalisco (1931), edificios de
apartamentos
en
el
Parque
Melchor Ocampo en colaboración con Max Cetto (1940); la Capilla de Tlalpan (1953); el Parque Azteca (1954); los Jardines del Hotel
Pierre
Márquez,
La
Urbanización Costa del Pacífico, la
Urbanización
Jardines
del
Bosque e Iglesia del Calvario (1955); las Torres Satélite en colaboración con Mathias Goeritz (1957); Arboledas
la
Urbanización (1958);
la
Las Casa
Meyer/Garate, el diseño de la Torre de Fuego en Monterrey, realizada
más
tarde
con
el
nombre Faro del Comercio (1978).
A lo largo de su carrera Luis Barragán recibió importantes galardones y homenajes, entre los que destacan su nombramiento como miembro del American Institute of Architects, en Washington en 1974, la exposición de fotografías de sus trabajos que organizó el Museum of Modern Art de Nueva York en 1976. Ese mismo año recibió el Premio Nacional de las Artes en la ciudad de México y en 1980 se le otorgó el prestigioso Premio Pritzker de Arquitectura. En 1985 el Museo Rufino Tamayo de la ciudad de México organizó una exposición retrospectiva de su obra y se le concedió el premio de arquitectura del estado de Jalisco. En 1987 se le otorgó el American Prize for Architecture y fue nombrado miembro honorario de la American Academy and Institute of Arts and Letters.
Es preciso Barragán al mostrar en su obra e interpretación de la arquitectura el encanto y la magia de que ésta debe disponer eternamente, todo ello siempre
por encima de una monotonía que impera en la actualidad y su tecnología ( y que decir de “su” globalización). Entorna a la naturaleza que le envuelve, y la belleza
de su arquitectura como tal. Su concepción de lo que es esta última, así como su noción arquitectónica me parecen una imprescindible guía ejemplar a tomar muy en cuenta. Fue un artista moderno en el sentido amplio de la palabra, a través de su propia interpretación de su tradición creó una arquitectura totalmente nueva una síntesis de todo lo adquirido, regalándonos una influencia benéfica, espiritual, emocional. Hace reconsiderar lo tradicional, lo vernáculo, le da un toque especial a ese material para convertirlo en una verdadera obra de arte.
¿La arquitectura es arte? es obvio que él, además de verla como arte, la percibía como un espacio diseñado para ejecutar las actividades que realiza un hombre, sin embargo, trataba de darle vida a ese espacio, con los colores y la naturaleza. Yo pienso que la arquitectura sí es arte, pero no con el sentido de un artista, que solo satisface su ego emocional plasmando su sentir, la arquitectura necesita del arte para transformar áreas existentes, en espacios agradables que inviten a permanecer en ese lugar.
Hasta
la
fecha,
no
tengo una idea clara de qué es la arquitectura, pero sé, que ésta, es la que da la identidad a un pueblo y se manifiesta de acuerdo a las ideas de ese tiempo, la arquitectura nos habla sobre la
historia
y
como
se
comportaba una sociedad en
ese
momento;
pero
también marca las diferentes ideas de belleza
“De la mayoría de las publicaciones de
que se reflejan en los edificios. La arquitectura además
de
crear
espacios
para
realizar
arquitectura y de la prensa
actividades,
diaria, han desaparecido la
confortables y llenos de vida, que transmitan
palabra belleza, poesía,
pretende
producir
espacios
sentimientos como la tranquilidad y la alegría.
embrujo, magia, sortilegio, encantamiento, las palabras serenidad, silencio misterio asombro, hechizo. Todas ellas muy queridas para mi” Citas de Luis Barragán Morfín
Algunas ideas difieren de las mías; sin embargo es por este tipo de personajes que la arquitectura se enorgullece de ser tal y por tanto también es suceptible de ser mejorada, lo que considero
una
parte
fundamental
de
esta
disciplina. Aunado a ello el entorno, más que social
(aunque
obligado),
el
natural.
Esta
concepción propia evoca también, como lo define así mismo Barragán, una amplia vinculación a la naturaleza, su respeto y por supuesto la disposición a las necesidades del hombre, sin que estas lleguen a atrofiar ese entorno al que todos pertenecemos.
Barragán acierta con razón en los conceptos de su arquitectura. Aprende del pasado y lo vierte en el presente. Aprende del presente y lo aplica al pasado. Es uno de los arquitectos más influyentes de la modernidad mexicana su obra es notoria en arquitectos actuales, y aún así, ha desaparecido gran parte de su obra, se ha ido perdiendo, se ha olvidando, pero el conocimiento y la herencia siguen presentes.